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FORMATO FICHA DE LECTURA

METODOLOGÍA Y ANÁLISIS DE COYUNTURA


2020 I

Este constituye el documento guía para profesores de primer semestre sobre las fichas de
lectura que serán solicitadas a los estudiantes

La ficha de lectura será la herramienta de calificación privilegiada para los estudiantes de


primer semestre de la facultad. Con ella se espera que los estudiantes, a través del
abordaje de todos los componentes enumerados en este documento, demuestren la
comprensión de un texto y su capacidad de abordarlo de manera crítica.

Estos son los componentes de una Ficha de Lectura junto con un paso a paso para guiar a
los estudiantes en el proceso:

1. Presentación del autor

Paso a paso:

Para realizar una presentación de autor, el estudiante deberá:

Preparación:

● Leer información general sobre la vida, la educación el trabajo y los reconocimientos


del autor del texto. Deberán tener en cuenta que puede ser una persona natural o un
autor institucional.
● Identificar la información relevante para dimensionar la autoridad que tiene el autor
para tratar el tema del documento y los intereses que lo pudieron llevar a escribirlo.

Redacción:

● Comenzar por el nombre del autor y resalte toda la información relevante pero solo
la información relevante.
● Redactar uno o dos párrafos comprensibles, evite las viñetas o la numeración.
● Incluir citas y fuentes de la información que utilice.

Ejemplo:

Rodrigo Uprimny Yepes es un reconocido constitucionalista de la


Universidad Externado de Colombia, Magíster en Sociología del
desarrollo de la Universidad Paris I (IEDES) y doctorado en
Economía de la Universidad Amiens. Además de profesor
universitario, el profesor ha sido magistrado auxiliar y encargado de
la Corte Constitucional y conjuez de esa Corte y del Consejo de
Estado (Dejusticia. s.f.).
Uprimny es columnista y analista frecuente de la realidad política y
jurídica colombiana, además de un referente de permanente consulta
nacional.

2. Presentación del documento

Paso a paso:

Para realizar una presentación de documento, el estudiante deberá:

Preparación:

● Identificar qué tipo de documento es (artículo, columna de opinión, texto científico,


cuento, teoría, etc.),
● Buscar información general sobre el documento: ¿a quién está dirigido? ¿cuándo y
dónde fue publicado?, ¿recibió algún premio o reconocimiento?, en caso de una
ponencia o conferencia ¿en qué evento fue presentado?

Redacción:

● Comenzar por el nombre del documento y resalte toda la información relevante para
que el lector de la ficha sepa qué esperar del texto.
● Redactar uno o dos párrafos comprensibles, evite las viñetas o la numeración.
● Incluir citas y fuentes de la información que utilice.

Ejemplo:

Migrantes, Refugiados y Fronteras es un artículo publicado en el


portal Dejusticia un centro de estudios jurídicos y políticos que
trabaja en defensa de los derechos humanos y del Estado de
Derecho, publicado en junio de 2019 en Bogotá. Fue escrito en el
marco de la celebración del día mundial del refugiado. Es un texto
periodístico pero con suficiente soporte académico, podría
considerarse de divulgación, es decir contiene información
especializada pero al alcance de todo tipo de lectores.
3. Síntesis:

Para realizar una síntesis, el estudiante deberá:

Preparación

● Lea el texto una primera vez de principio a fin para entender el contenido;
● subraye las palabras que le parecen claves en el texto;
● Resalte las diferentes partes constitutivas del documento (introducción; argumentos;
hipótesis, tesis; etc.);
● Identifique en sus apuntes la tesis del autor (postura defendida) y reúna los
argumentos, con los que la defiende, por grupos o ejes argumentativos (tipo o
temática).

Redacción

● Escriba el objetivo del texto, su problemática, su respuesta (tesis defendida) y los


argumentos que permitieron que el autor llegase a esta respuesta.
● Cuente el número de palabras y elimine las palabras innecesarias hasta llegar a
una extensión de 10% del texto original.

Ejemplos:

Opción 1:

Uprimny afirma que la actual migración de venezolanos a Colombia


es la oportunidad para que este último demuestre su compromiso
con los valores democráticos, en tanto el derecho internacional le da
la autonomía para priorizar la atención humanitaria y, con ella, la
garantía del cumplimiento de los derechos humanos (valor
democrático universal) o, mantener su política de inversión
favoreciendo a sus nacionales y políticas internas.

Opción 2:

Uprimny explica que la grave situación de los migrantes, se debe a la


contradicción jurídica entre el deber de ayudarlos y la autonomía de
los Estados para decidir quién puede entrar en su territorio. Así
demuestra que el compromiso de Colombia con los derechos
humanos se verá reflejado en el trato que les dé a los migrantes
venezolanos que se refugien en su territorio.
4. Discusión:

Para realizar una discusión, el estudiante deberá:

Preparación:
● Asegúrese de haber entendido muy bien la tesis central del texto y de conocer otras
aproximaciones a ese tema (si no lo hace, es necesario que investigue).
● Asuma una posición crítica frente al tema y la tesis del autor.
● Redacte una pregunta problema a partir de la tesis central que le propone el
documento, esta será el corazón de su discusión; es decir, todo deberá girar en
torno a ella.

Redacción:
● Comience por redactar su introducción: enganche a su lector, incluya el contexto en
el que se plantea la pregunta problema (que deberá incluir al final de la
introducción), de considerarlo pertinente puede utilizar información del autor o de la
presentación del documento para contextualizar su pregunta.
● Defina los términos claves para que el lector entienda su discusión.
● Recuerde, debe redactar un texto comprensible, evite el uso de viñetas o
numeración y articule sus ideas para que el resultado sea un texto fluido.
● Al final de la introducción incluya su pregunta problema y redacte una tesis plan de
dos premisas.
● Redacte su cuerpo argumentativo en dos partes divididas con subtítulos.
● Construya su conclusión, no olvide que esta no es un resumen, aunque si debe
retomar partes del desarrollo argumentativo para concretar la respuesta a su
pregunta. La conclusión es solo una, así que debe ser redactada como un único
texto comprensible. Evite las viñetas y la numeración y no incluya argumentos o
ideas nuevas.
● Termine con las referencias e incluya todos los textos utilizados en la ficha
(incluyendo en documento de análisis y las fuentes que utilizó para todas las partes:
presentaciones y discusión. No olvide usar las normas APA para citas y referencias.

Opción n°1:

En 2018, cerca de 1 millón de venezolanos ingresaron a Colombia en calidad de migrantes


(Migración Colombia, citado en FEDESARROLLO. 2018. P.4). El fenómeno supera con
creces la media histórica de refugiados y desplazados forzosos que recibe el país y,
adicionalmente, supone un reto particular en tanto la condición de vulnerabilidad que los
caracteriza.

La condición de refugio, así como la de desplazamiento forzado, suponen un estado de


violación de varios (acaso todos) los derechos humanos reconocidos por la normatividad
internacional y, en ese sentido, el Estado receptor está en la obligación de velar por el
restablecimiento de las condiciones de dignidad de los migrantes (ACNUR. 1984). En ese
sentido, Rodrigo Uprimny afirma, en su artículo Migrantes, Refugiados y Fronteras, que la
atención del gobierno colombiano a la crítica situación migratoria, evidenciará su
compromiso con los valores democráticos. En ese sentido vale la pena preguntarse ¿hasta
qué punto el carácter “democrático” del Estado colombiano está condicionado por la
atención que brinde a los migrantes?

Si bien la garantía a los derechos humanos hace parte fundamental de los valores que
sustentan la democracia, el compromiso colombiano con ella no puede estar condicionado
al desarrollo de una única política pública, en tanto el actual es un mundo de recursos
limitados que exige la priorización de acciones.

Derechos y democracia

La democracia es una forma de gobierno, es decir, una forma de controlar


comportamientos, orientada a la búsqueda del bien común y que parte del principio
fundamental de la igualdad de los individuos (Duverger. 1997), no solamente ante la ley,
sino en términos de dignidad. La definición resulta fundamental en tanto la democracia
incluye pero supera sistema electoral que le sirve como herramienta (aunque no es posible
encontrar democracias sin sistemas electorales y lo es encontrar países que, teniendo
sistemas electorales, están lejos de ser democracias).

La democracia, entonces, supera la forma de elección de gobernantes y se centra en el


ejercicio del poder político de forma legítima orientado a la garantía de las condiciones de
dignidad humana necesarias para el ejercicio de una ciudadanía consciente.

En tanto la democracia es una forma de gobierno, implica el control del comportamiento de


los habitantes de determinada sociedad (Duverger.1997), de todos ellos; no es democrático,
entonces, generar categorías de ciudadanos o diferenciarlos por grupos, al menos en lo que
corresponde a garantizar sus derechos humanos. Dicho principio democrático fue acogido
por la normatividad internacional y así, tal como lo expresa Uprimny, “las Naciones Unidas
proclamaron los derechos humanos como valores universales, que deben ser asegurados a
todas las personas, independientemente de su raza, sexo u otra condición social, pues
derivan de la dignidad igual e intrínseca de todos los seres humanos” (2019. Parr. 3).

En ese sentido, el fundamento primero de la democracia está sustentado en la garantía del


goce efectivo de los derechos y Colombia, en tanto Estado democrático, tiene la obligación
no solo moral sino legal e institucional de atender, con especial énfasis, a quienes que se
encuentran en condición de vulnerabilidad, en este caso los migrantes y refugiados.

De una población que goce de iguales condiciones de dignidad y derechos, depende la


posibilidad de un gobierno entre iguales y una sociedad ética y próspera; sin embargo, los
retos que propone la modernidad obligan a replantear los principios teóricos que, a la luz de
la realidad, resultan utópicos.

La democracia posible
Si bien la democracia ha sido entendida como la forma de gobierno de la modernidad y, en
ese sentido, el sistema internacional se ha organizado para profundizar su ejercicio en todo
el globo terráqueo, lo cierto es que esta encuentra límites que varían de un lugar a otro.

La estructura de valores, la cultura, los niveles de educación, la vocación de participación y


la disponibilidad de recursos, entre otros, condicionan el nivel de profundización de la
democracia, aunque no necesariamente significan que las sociedades tengan un mayor o
menor grado de compromiso con los valores que la sustentan.

Existen condicionamientos culturales y subjetivos, a grandes rasgos se podría afirmar que


para el caso latinoamericano las sociedades cuentan con estructuras de valores que les
permitirían la implementación de sistemas más o menos democráticos; sin embargo, el
ejercicio democrático implica, en términos pragmáticos y concretos, la destinación de una
importante cantidad de recursos humanos, técnicos y financieros que, para un país de renta
media como Colombia, exigen la priorización de los rubros de inversión.

Colombia, la democracia más antigua de América Latina, es el tercer país más desigual del
mundo (PNUD 2017) y ello ha implicado crecientes tasas de pobreza y pobreza extrema; la
cobertura de servicios públicos es deficiente; el sistema de salud ha sido objeto de
constantes críticas no solo por sus bajos niveles de cobertura sino también por sus
precarias condiciones de calidad, y, de hecho, según la Organización para la Cooperación y
el Desarrollo Económico –OCDE, en Colombia son necesarias 11 generaciones para
superar la condición de pobreza (2018).

Todo ello implica que buena parte de la población colombiana tiene dificultades para gozar
efectivamente de sus derechos, incluso de los fundamentales y, en ese sentido, el Estado
viene desarrollando planes y proyectos, y destinando todos sus recursos a superar dicha
situación que sigue siendo una meta por alcanzar.

Conclusión

Si bien la primera tarea de cualquier sociedad que se diga democrática es el trabajo por la
garantía de los derechos humanos y las condiciones de dignidad de su población, el
indicador del nivel de compromiso con la democracia de cualquier Estado (entre ellos
Colombiano) debe ser precisamente el accionar, no el impacto de dicha acción, en tanto ese
impacto está condicionado por factores exógenos y recursos limitados. En ese sentido, el
nivel de profundización de la democracia colombiana debe ser medido por la aceptación de
los migrantes y su inclusión en proyectos sociales, no puntualmente por el número de
migrantes atendidos o el número de atenciones brindadas, eso sería injusto, e incluso una
paradoja si, para atender más y mejor a los migrantes, deja de atender a su población,
igualmente pobre y vulnerable y, en 8 millones de casos, también víctima de
desplazamiento forzoso.
Referencias

ACNUR (1984). Declaración de Cartagena sobre Refugiados.

Duverger, M. (1997). En Introducción a la Política. Barcelona, España: Editorial Ariel, S.A.

Fedesarrollo (2078). Informe mensual del mercado laboral. Migración venezolana a


Colombia. Diciembre 2018. Bogotá, Colombia. ACRIP.

OCDE (2018), A Broken Social Elevator? How to promote Social Mobility, OECD Publishing,
París, Francia. Recuperado de: https://dx.doi.org/10.1787/9789264301085-en

PNUD (2017). Informe de Desarrollo Humano, PNUD, Nueva York, E.E.U.U. Recuperado
de: https://annualreport.undp.org/es/#

Uprimny. R (2019). Migrantes, Refugiados y Fronteras. Bogotá, Colombia. De Justicia.


Recuperado de: https://www.dejusticia.org/column/migrantes-refugiados-y-fronteras/

Opción n°2:

Los problemas relacionados con la crisis económica de Venezuela han traído un sinfín de
debates en la actualidad política colombiana. De convertirse en un problema social hasta
comprometer la seguridad nacional del país, pasando por palabras xenofóbicas incluidas en
las discusiones electorales, las reacciones han sido diversas y han puesto en tela de juicio
la capacidad, o la voluntad del pueblo colombiano de ayudar a sus vecinos. El presidente
Duque, como muchos, ha emitido su concepto según el cual esta migración era una
oportunidad para la nación tricolor y su economía (Gómez, 2019). Pero ha sido uno de los
pocos políticos que han ido en esta dirección, la mayoría han estigmatizado a los migrantes,
en sus discursos pero también en sus acciones, reclamando el cierre de la frontera o su
expulsión.

En su columna, Rodrigo Uprimny busca sensibilizar a sus lectores con esta problemática.
En este orden de ideas, explica que a pesar de que Colombia tenga, como todos los demás
Estados, el derecho de limitar la inmigración, tiene por otra parte el compromiso humanitario
de ayudar a los que lo soliciten. Ello, dice, la deja ante una encrucijada: priorizar la solución
de facilidad al trabar la entrada de esta población vulnerable, dejándola enfrentar sus
problemas por sí sola, o reafirmar su compromiso con la universalidad de los derechos
humanos recibiendo y atendiéndolos.

Pero, ¿es tan sencillo como lo plantea? ¿Hasta qué punto el compromiso de Colombia con
los derechos humanos se mide por su trato a los migrantes venezolanos?

Por un lado, no es cierto en la medida en que existe una serie de problemas inherentes la
recepción de tanto flujo migratorio que Colombia no estaría en capacidad de resolver, en
particular en términos de economía y de seguridad, que podrían vulnerar los derechos de su
propia población. Sin embargo, ninguno de estos puede ser una razón suficiente para
justificar que incumpliera con su propia carta política, pues ambos problemas se podrían
resolver en cuánto realmente se tuviera la voluntad de hacerlo, solucionando de paso
problemas estructurales que también dificultan la vida de sus propios nacionales.

Más allá de los derechos: Colombia no tiene la capacidad para atenderlos

La problemática de la migración no siempre es una problemática de derechos humanos. Así


Colombia quisiera ser un paraíso en el que encontrasen asilo todas las personas
perseguidas políticamente, en dificultad económica o vulnerables por conflictos, no podría
hacerlo por evidentes razones. Por el lado económico, para empezar, según economistas,
el país ya tiene graves dificultades para que su crecimiento sea suficiente para aguantar el
crecimiento de su propia población, lo que explica que su tasa de desempleo haya
aumentado entre el 2018 y el 2019 (Vega, 2019). Este año en todos los sectores de la
economía se han perdido puestos de trabajo y solo en julio entraron más de 60 000 nuevos
trabajadores a un mercado que perdió más de 300 000 trabajos (El Espectador, 2019). Ante
este problema estructural reflejado en un desempleo superior al 10% (DANE, 2019), es muy
difícil que el país pueda recibirlos como lo habría hecho si la situación económica lo
permitiera. Pues para qué recibir refugiados si no se les puede atender de manera
satisfactoria porque nuestros servicios sociales también andan colapsados por la falta de
recursos y los mismos colombianos no pueden ser atendidos correctamente (Semana,
2019). Se puede afirmar entonces que la cuestión no es meramente de querer o no querer
defender los derechos humanos de manera universal, se trata de capacidad de absorción.

Por otro lado, el hecho de recibir a una población en situación de vulnerabilidad supone
también asumir, aunque sea marginal, una dosis de problemas de seguridad. Primero
porque el gobierno de Nicolás Maduro no ha escondido su hostilidad hacia Colombia y que
ya se ha aprovechado del caos para mandar agentes infiltrados que ponen en peligro la
seguridad nacional (CNN Español, 2019). Por otro lado porque, como ocurre con cualquier
población vulnerable, algunos estarán tentados de emplear cualquier vía para sustentar a
sus familias. Sin estigmatizarlos, es obvio que las zonas de concentración de refugiados
traen consigo su pequeña parte de criminales, aunque la tasa sea en realidad muy baja
(Martinez,R. y Lee, M., 2004). Si además no se les atiende y no pueden encontrar trabajo o
acceder a condiciones de salud correctas, cada más estarán ad portas de caer en la
delincuencia. Más de 7000 venezolanos han sido capturados por las autoridades
colombianas en 2018, contra un poco más de 2000 en el 2017 (El Espectador, 2018), lo que
demuestra claramente la magnitud y el aumento del problema. Un país que ya vive
acechado por las bandas criminales y en el que la resolución de casos penales ni siquiera
supera el 10% en tiempos normales, no puede permitirse agravar su propia situación con la
justificación de defender a los derechos humanos. Pues los colombianos deben ser la
prioridad de su propio gobierno.

En realidad son puras excusas que muestran la debilidad del compromiso

Sin embargo, se puede también pensar que estos argumentos son apenas una excusa para
no atenderlos, en una débil justificación de la xenofobia y de la falta de solidaridad que
incluso parece caracterizar las relaciones políticas y sociales dentro del país. Desde esta
perspectiva, no solo Colombia mostraría la debilidad de su compromiso con los derechos
humanos a través del rechazo de la migración sino también por no aprovechar esta
oportunidad para resolver los problemas que sufre directamente su propia población. Pues
finalmente es una gran oportunidad de atacar el mal a la raíz para poder atender también a
los refugiados. El que quiere puede dice el adagio.

En cuanto a los problemas de seguridad, se sabe desde antaño que están directamente
relacionados con los problemas de oportunidades (El tiempo, 1996). La falta de una
verdadera política de empleo y de acceso a oportunidades empresariales y laborales en el
país no es nueva y acecha a los colombianos desde la apertura económica de los años
noventa. De resolverse este problema, no se podría hablar de lo problemas de integración o
de absorción económica de los migrantes provenientes del país vecino. La falta de
compromiso de los gobiernos colombianos frente a esta problemática se ve reflejada en la
situación actual y demuestra que si hubiera real voluntad política, se podría no solamente
recibir y garantizar los derechos de los migrantes sino también los de los colombianos.
Como lo dice un informe de la ONG Social Watch presentado en la sede de Naciones
Unidas en el 2004, “La pobreza se ha convertido en el principal obstáculo para la seguridad
humana en Latinoamérica” (Social Watch, 2004). A raíz de esto se puede afirmar que
efectivamente las excusas de seguridad y de falta de capacidad de recepción ilustra el
hecho de que el Estado colombiano se lave las manos con las causas endémicas de los
problemas que no son característicos de la migración sino de la lucha por los derechos de
las personas en general.

En cuanto al supuesto colapso del sistema de salud, si bien es real y dificulta la atención de
la población refugiada, no se debe necesariamente a una incapacidad del sistema sino a la
manera en que se organiza. Pues queda claro que los recursos sí están disponibles, solo se
necesita privilegiar la garantía de los derechos por encima del lucro y del enriquecimiento de
los prestadores de salud. En efecto, el sistema de salud generó un excedente de más de 2
billones de pesos en el 2018 (Montes, 2019).

Suficiente para atender a mucha gente, si el Estado tuviera la voluntad de hacerlo,


demostrando así su compromiso con los derechos humanos, tanto a través de la atención a
migrantes como la de sus propios ciudadanos, como lo plantea el autor.

Referencias bibliográficas:

CNN español. (2019, 1 de marzo). Colombia ordena la expulsión de venezolana que se


había infiltrado haciéndose pasar por desertora. CNN español.

EFE (2004, 2 de diciembre). La pobreza es la fuente de inseguridad ciudadana en


Latinoamérica. Social Watch.

El Espectador. (2019, 17 de septiembre). Desempleo de venezolanos en Colombia es de


19,2%. El Espectador.

El Espectador. (2019, 30 de diciembre). Más de 7000 venezolanos han sido capturados por
las autoridades este año. El Espectador.

El Tiempo (1996, 8 de junio). Desempleo e inseguridad y van de la mano. El Tiempo.


El Tiempo. (2019, 30 de agosto). Menos trabajo por cuenta propia presiona el desempleo en
el país. El Tiempo.

Gómez, I. (2019, 10 de junio). Migración de venezolanos genera impacto, pero es una


oportunidad de inversión: Duque. Blu Radio.

Mantilla, J. (2019, 15 de julio). ¿Se ha vuelto más insegura Colombia por la migración
venezolana? La República.

Martinez, R. y Lee, M. (2004). Inmigración y delincuencia. España: Revista española de


investigación criminológica. Vol nº2. Recuperado de:
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2083371

Montes, S. (2019, 29 de junio). Empresas del sector salud cerraron cerraron 2018 con
utilidades de 2,3 billones de pesos. La República.

Semana. (2019, 1 de marzo). Los espías de Maduro en Colombia. Semana.

Semana. (2019, 17 de agosto). La migración venezolana golpea la salud colombiana.


Semana.

Vega, C. (2019, 1 de octubre). ¿Por qué está subiendo el desempleo en Colombia? El


Espectador.

5. Referencias bibliográficas:

Dejusticia (S.F). Conozca Nuestro Equipo - Rodrigo Uprimny Yepes. Bogotá, Colombia.
Recuperado de: https://www.dejusticia.org/responsible/rodrigo-uprimny-yepes/

Uprimny. R (2019). Migrantes, Refugiados y Fronteras. Bogotá, Colombia. De Justicia.


Recuperado de: https://www.dejusticia.org/column/migrantes-refugiados-y-fronteras/

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