Andrea Reyes Leal Ciclo de negligencia a través de las generaciones.

En este trabajo realizaré un análisis sobre cómo la negligencia y la ausencia parental

causaron daños en la salud mental de mi familia materna a través de cuatro generaciones. A
través del estudio de relatos orales, demostraré que esto se debió a un ciclo de crianza
negligente emocionalmente que se repetía a través de las generaciones.

A pedido de los involucrados, no se utilizarán nombres verdaderos, sólo iniciales y

la relación sanguínea que tienen conmigo, la escritora. Las 4 generaciones mencionadas
incluyen: Bisabuelxs, Abuelxs, Madre, y yo/hermanxs. 

Al investigar la historia de mi familia materna, los únicos testimonios existentes

son, efectivamente, el propio, al ser parte y miembro de esta, y el de mi madre. Esto fue
vital para obtener contexto; gran parte de la historia familiar se me era desconocida al
nunca haber conocido a las personas involucradas, al separarnos más de 100 años. También
se debe reconocer que al ser el único testimonio cercano el de mi madre, no poseo contexto
extra u otros puntos de vista. Mi conocimiento sobre las circunstancias es indirecto y
extremadamente limitado (Bloch, 1952, 42).

Bisabuelo R era un hombre nativo de Valdivia, una ciudad puerto en el sur de Chile.
Bisabuelo R era un padre ausente, de valores tradicionales. Castigaba a sus 4 hijos
pegándoles con su cinturón, los crio para que sean caballeros, “hombres de verdad” 1, y crio
a sus hijas con ideales sexistas comunes de la época.2 Eran orgullosos de su ascendencia
europea, al ser descendientes de inmigrantes ingleses y españoles, y rechazaban su
ascendencia indígena mapuche y huilliche3(Ver fotografía).  La imagen, es decir lo que el
resto piensa sobre uno, ha sido muy enfatizado en la crianza de nuestra familia [GE3] desde
entonces. Apariencia física, lo que en   A pesar de que a veces faltaba dinero, Bisabuelo R
se negó a que sus hijos aprendieran una carrera, ya que, según él, él los iba a mantener, y no
la iban a necesitar 4Por la decisión de alimentar su propio orgullo en vida, sus hijos vivieron
en la pobreza una vez que el ya no estaba para mantenerlos. Al fallecer él y su esposa, los
hermanxs se separaron. No había lazos filiales.

La tesis principal de este texto, el ciclo de negligencia se nota a partir de este momento:
Como dice Koselleck, “«La revolución ha girado en círculos, pero se mueve en espiral y,
por tanto, sólo aparentemente regresa al mismo punto, mientras que en realidad su
transformación avanza y el espíritu humano con ella» (Koselleck, 2012, 168). Mi abuelo

1
Esto, asumo como escritora, se refiere a estoicos, orgullosos, y masculinos. Desconozco el
significado exacto que el daba al termino.
2
Estas ideas sexistas de la época son: la mujer no trabaja, es delicada, es débil física y mentalmente,
es menos inteligente que el hombre, debe casarse joven y ser ama de casa.

3
Cabe mencionar que el color de piel siempre ha sido un influyente en el estatus social en la sociedad
chilena. Es un tipo de racismo. Se prefiere la piel blanca, el cabello y los ojos claros, y se desprecian los
rasgos pertenecientes a los grupos indígenas nativos al territorio chileno, como piel oscura y cabello negro.
4
He de asumir que importaba más su propio orgullo como solo proveedor familiar que la educación de sus
hijos. Efectivamente, esto parece ser contradictorio con la valoración positiva de la educación en la sociedad.
Desconozco la lógica de Bisabuelo R.
repitió varios comportamientos negativos aprendidos de su padre, como una actitud
violenta contra su pareja, machista, agresiva y orgullosa, con las mismas visiones sobre su
ascendencia inglesa y española mencionadas previamente, pero busco ser mejor que él en
temas de crianza, al no usar castigos corporales. Es por eso que utilizo la cita previamente
mencionada. La crianza fue igualmente negligente, pero mejor que la que el mismo vivió.

Abuelo R y Abuela F eran padres ausentes, al trabajar largas jornadas. La fuente

principal de dinero era el trabajo de Abuela F, al ser profesora normalista 5, mientras Abuelo
R tenía una posición que desconozco en la actual Telefónica del Sur. Sus tres hijos (entre
ellos Madre), fueron criados por una empleada hasta los 10 años de Madre. Vivían
cómodamente, pero de sueldo a sueldo, una familia de clase media baja. Abuelo R perdió
su trabajo durante la dictadura militar chilena 6. La familia rápidamente cayó bajo la línea de
la pobreza7, al depender solo del sueldo de Abuela F, ya que, al no tener una educación
secundaria, Abuelo no logró conseguir otro trabajo por mucho tiempo, finalmente
trabajando de colectivero. Eventualmente, Madre G logro ser el primer miembro de su
familia en ir a la universidad, terminando por su parte con el ciclo de pobreza causada
específicamente por la falta de educación.

Madre G fue ausente, al igual que Abuelo R, al pasar gran parte de su tiempo
trabajando. Se me dio una marcada preferencia sobre mis hermanos, por ser aquella con los
rasgos físicos más europeos. Ambos, padre y madre, eran profesionales que trabajaban
largas jornadas, y, por lo tanto, fuimos criados por empleadas en vez de nuestros propios
padres, al igual que Madre G antes de nosotros. Esto se consideraba completamente normal.
Repetía lo que conocía a través de la relación con sus propios padres. Varias veces ha
intentado racionalizar esto, sacando las emociones y expresando esta historia vivida por
nosotros como mera lógica sin influencia de la crianza que ella misma vivió. Menciono las
ideas de Namier sobre la naturaleza humana, ya que las acciones que se creen lógicas
también pueden tener la influencia de las ideas preconcebidas por uno (Namier, 2000, 146).

A modo de cierre, es claro que la negligencia emocional sufrida a lo largo de nuestra

historia familiar se debe a el ciclo de ausencia parental vivida durante la infancia de las
previas generaciones, las cuales se adoptan como normalidad y forman las actitudes futuras.
Esto nos lleva al posible final del ciclo espiral en la generación actual.

5
Las escuelas normalistas eran instituciones en las que se enseñaba a profesores generales de
primaria, es decir, profesores que enseñaban todas las asignaturas, sin especializaciones. Este sistema fue
reemplazado por el sistema actual en la que los profesores deben poseer un título universitario para ejercer.
Abuela F fue, efectivamente, parte de la última generación de profesores normalistas del país.
6
Gobierno de los militares en Chile durante 1973-1990. Se caracterizó por varias violaciones a los
derechos humanos.
7
Término que se refiere a la cantidad de dinero que una persona y/o grupo familiar debe poseer antes
de ser considerado pobre. Suele fluctuar con el tiempo y el estado de la economía.
 Bibliografía.

Bloch, Marc, “La observación histórica”, en Introducción a la Historia, México,

Fondo de Cultura Económica, 1952, p. 42-64

Namier, Lewis, “La naturaleza humana en la política”, Prismas. Revista de Historia

intelectual, nº 4, 2000, p. 143-147

Koselleck, Reinhart, “Revolución como concepto y como metáfora”, en Historias de

conceptos. Estudios sobre semántica y pragmática del lenguaje político y social, Madrid,
Trotta, 2012, p. 161-170.

Fuentes.

Testimonio de Gisselle Leal, Coyhaique, 26 de abril de 2021.

Testimonio de Gisselle Leal, Valdivia, 29 de diciembre de 2019.

Fotografía Bisabuelxs, con hijx (nombre desconocido), ca. 1940.

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