Espacio Curricular: Introducción a la teoría del estado.

Docente: Magali Haber.

Estudiante: Bufarrato Vilaseco Maura

Ciclo lectivo: 2021.

La ma/paternidad, la sociedad y la justicia.
Noticia:
http://revistaanfibia.com/ensayo/cuota-alimentaria-las-madres-salen-del-closet/

La nota periodística que elegí en este caso pone en evidencia, no solo la ausencia del hombre
como padre en la vida de sus hijxs en lo afectivo sino que sobre todo en lo económico,
teniendo en cuenta el gran porcentaje que existe de incumpliento de la cuota alimentaria por
parte de los padres hacia las madres que crían a sus hijxs.

En la modernidad se plantea a la familia como un ámbito privado bajo el orden de la

naturaleza en la que estaba constituida por tres partes partes, por un lado lxs niñxs,
comprendidxs como personas con falta de madurez, por otro lado la mujer, como responsable
de todo deber doméstico ya sea limpiar, cocinar, criar a los hijos y estar al servicio de las
necesidades que se le presenten a su esposo/padre de sus hijos y por último este, el hombre,
con la responsabilidad de mantener la economía de la casa.
Con el tiempo claramente las sociedades fueron avanzando y de la mano de esto se fueron
dando distintas discusiones que pusieron arriba de la mesa las desigualdades que sufren las
mujeres frente a los hombres, y si bien muchas de estas salen por fuera de lo que tiene que
ver con la organización o cómo se compone una familia, hay algo que se sostiene en el
tiempo, la figura paterna desvinculandose con toda responsabilidad que vaya más allá de las
que le da una sociedad, porque por más de que hoy sea una ley, generalmente al padre nada le
ocurre cuando no cumple con la cuota alimentaria que le corresponde a la madre por
mantener a su/s hijx/s. Tomando lo que se plantea en la teoria moral feminista creo que esto
ocurre por muchos motivos; en primer lugar me parece importante poder hacer referencia a la
responsabilidad que tienen los ámbitos públicos que dependen del estado. Es necesario poder
pensar a las distintas instituciones funcionando en conjunto, porque de nada sirve un poder
legislativo que impulse y promulgue leyes con perspectiva de género, sin una justicia que los
haga valer y una educación que fomente eso.
“Si los AIE “funcionan" masivamente con la ideología como forma predominante, lo que
unifica su diversidad es ese mismo funcionamiento, en la medida en que la ideología con la
que funcionan, en realidad está siempre unificada, a pesar de su diversidad y sus
contradicciones, bajo la ideología dominante, que es la de “la clase dominante".” Luis
Althusser. Ideología y Aparatos Ideológicos del Estado.

Por otro lado, también es fundamental poder tomar el ámbito privado como podría ser la
familia. Como mencionaba antes, en la modernidad había un forma de familia que hoy con el
tiempo y con el avance de la sociedad fue cambiando, y los padres que en su momento solo
se encargaban de lo económico -ya que el hombre tenía el deber de trabajar y poder sostener
económicamente a la familia- en la actualidad lo podemos trasladar como consecuencia a una
sociedad que no juzga sino que normaliza esto, ya que muchos padres no se hacen
responsables de la necesidades que tiene sus hijxs y con esto perpetúan el rol de la mujer que
cría a sus hijos sola y dedica su vida nada más que a eso.
Por un lado la teoria moral feminista plantea la necesidad de una justicia imparcial, para de
este modo dejar de lado las relaciones familiares, sociales y la vida personal con los roles
publicos e institucionales. Pero, por otro lado, Young , plantea la necesidad de una justicia
imparcial pero sin perder la ética del cuidado, entendiendo que para un buen funcionamiento
de la misma es necesario entender los contextos y las vivencias particulares de las personas.
Según ella la imparcialidad era insostenible debido a que salía de perspectivas particulares de
grupos dominantes que propagaban la universalidad y justificaban una estructura jerárquica
en la toma de decisiones. Por esto creo que hoy es necesario una justicia que funcione en base
a las necesidades que se les presentan a las mujeres que sufren esta violencia, entendiendo la
responsabilidad de comprender el contexto en el que viven, se relacionan y crían a sus hijos y
sobre todo acompañandolas desde el lado del cuidado y la ayuda. Acabando de una vez con
esta justicia juzgadora, que refuerza las desigualdades y no escucha a la víctima.

“La racionalidad moral que busca la imparcialidad intenta reducir la pluralidad de sujetos y
situaciones morales a una unidad, y requiere que los juicios morales sean independientes,
desapasionados y universales. Pero como ya he sugerido, este ansia de totalización fracasa
necesariamente. Reducir las diferencias a la unidad significa reunir dichas diferencias bajo
una categoría universal, lo cual requiere a su vez eliminar esos aspectos de las diferentes
cosas que no encajan en la categoría. Así, la diferencia se transforma en una oposición
jerárquica entre lo que está dentro y lo que está fuera de la categoría, valorando más lo que
está dentro que lo que está fuera.” Iris Marion Young. La justicia y la política de la
diferencia.