Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
auditiva
PID_00199907
Ninguna parte de esta publicación, incluido el diseño general y la cubierta, puede ser copiada,
reproducida, almacenada o transmitida de ninguna forma, ni por ningún medio, sea éste eléctrico,
químico, mecánico, óptico, grabación, fotocopia, o cualquier otro, sin la previa autorización escrita
de los titulares del copyright.
© FUOC • PID_00199907 Percepción auditiva
Índice
Introducción............................................................................................... 5
Objetivos....................................................................................................... 6
1. Definición de audición..................................................................... 7
Ejercicios de autoevaluación.................................................................. 59
Solucionario................................................................................................ 61
Glosario........................................................................................................ 62
Bibliografía................................................................................................. 64
© FUOC • PID_00199907 5 Percepción auditiva
Introducción
Cada uno de los sentidos capta una cualidad del objeto o del fenómeno
percibido diferente y el conocimiento final se obtendrá uniendo las par-
tes de las informaciones que ofrecen los distintos sistemas sensoriales.
De hecho, gran parte de la información que recibimos por una determinada Nota
vía sensorial (la vía auditiva en el caso que nos ocupa) no resulta accesible de
Gran parte de la información
otra manera. que recibimos por la vía auditi-
va no resulta accesible de otra
manera.
En este primer apartado, nos detendremos en describir algunos conceptos bá-
sicos acerca de la percepción auditiva. En primer lugar, explicaremos en qué
consiste el proceso perceptivo y algunas de sus funciones. En los próximos
apartados trataremos de llevar a cabo una descripción de las estructuras anató-
mico-funcionales del sistema auditivo y nos centraremos en el modo como
percibimos los estímulos sonoros, incluyendo algunos de sus determinantes
y características fundamentales. También abordaremos algunas teorías funda-
mentales que nos ayuden a entender cómo se procesa el sonido. Finalmente,
dada la importancia que reviste en los seres humanos, analizaremos la manera
como percibimos el habla.
Objetivos
Al finalizar el estudio de esta unidad, debéis ser capaces de realizar las siguien-
tes tareas:
7. Entender cómo capta un sonido del lenguaje el oído humano y las especi-
ficidades de su procesamiento desde el punto de vista perceptivo, profun-
dizando en las principales teorías que explican la percepción del habla.
© FUOC • PID_00199907 7 Percepción auditiva
1. Definición de audición
Los sentidos, incluida la vía auditiva, son los medios de comunicación que
tiene nuestro organismo con el mundo exterior. Sin ellos viviríamos en un
estado de aislamiento, sin saber lo que sucede a nuestro alrededor, y también
estaríamos en constante situación de alarma, al no percibir los riesgos que nos
rodean, ya que los sentidos nos entregan información vital que nos permite
relacionarnos con el entorno de manera segura e independiente. Por lo tanto,
parece que la audición, junto con la vista, es uno de los sentidos más útiles
que poseemos porque conforman nuestro sistema de alerta primario frente a
situaciones del entorno potencialmente peligrosas. Además, ambos sentidos se
apoyan mutuamente, de modo que cuando uno de ellos baja su rendimiento,
el otro se agudiza como compensación.
1) Acción de oír;
Más allá del sonido entendido físicamente como una onda sonora, el proceso
de la audición humana se trata de una tarea tremendamente compleja que
implica un conjunto de procesos fisiológicos, derivados de la estimulación de
los órganos del sistema auditivo, y de varios procesos psicológicos o psíquicos,
derivados del acto consciente que supone escuchar, incluida la comprensión,
el análisis y el almacenamiento del sonido.
En resumen, parece que la audición nos sirve para actividades tan básicas co-
mo poder comunicarnos, escuchar música, disfrutar de los sonidos de la na-
turaleza, alertarnos sobre algún peligro, etc.
• Procesar las señales eléctricas para que indiquen las cualidades de la fuente
de sonido, tales como el tono, la sonoridad, el timbre y la localización.
Para que se puedan llevar a cabo dichas tareas, es necesario que en el proceso Consulta recomendada
de audición intervengan diferentes estructuras: el oído externo, el oído medio,
Para obtener información
el oído interno, el nervio auditivo y el sistema nervioso central. Si excluimos complementaria sobre el sis-
la parte neuronal del sistema auditivo, anatómicamente podemos distinguir tema auditivo podéis con-
sultar las siguientes páginas
tres partes diferenciadas: el oído externo (formado por el pabellón auditivo y webs:
el conducto auditivo externo), el oído medio (que incluye el tímpano y los http://www.physpharm.
fmd.uwo.ca/undergrad/sen-
huesecillos martillo, yunque y estribo) y el oído interno (en el que se encuentra sesweb/
la cóclea), que podéis observar en las figuras adjuntas de este apartado. http://
faculty.washington.edu/
chudler/bigear.html
http://www.medical-
bookmarks.org.uk/
wv201.htm
Estructura del sistema auditivo humano (I): oído externo, medio e interno
Estructura del sistema auditivo humano (II): oído externo, medio e interno
© FUOC • PID_00199907 12 Percepción auditiva
(1)
Asimismo, cabe destacar la capacidad del oído externo para mejorar las inten- Flujo medio de energía por uni-
1 dad de área, perpendicular a la di-
sidades de los sonidos, fenómeno conocido como resonancia. El proceso que rección de propagación, que se
se produce es el siguiente: las ondas sonoras recogidas se reflejan en el pabe- mide en decibelios (dB).
Cuando se produce la llegada de las ondas sonoras al final del canal auditivo,
se encuentran con la membrana timpánica o tímpano, ya en el oído medio. En
el tímpano, los cambios de presión provocados por las ondas sonoras se trans-
forman en una vibración mecánica, lo que hace que se transmitan a través de
las estructuras del oído medio. El oído medio es una pequeña cavidad de unos
2 cm2 formada por un conjunto o cadena de huesecillos (los más pequeños
que tenemos en el cuerpo humano), que se conocen como martillo, yunque
y estribo, donde se conducen y amplifican las vibraciones del tímpano, para
lo cual es importante que la presión del aire dentro del oído medio sea igual a
la presión atmosférica, lo que se consigue con la trompa de Eustaquio. Final-
mente, se transmiten las vibraciones mecánicas a la ventana oval y con ello
se adentran a la parte interior del oído.
¿Por qué es necesaria esta cadena de huesecillos situada entre la membrana timpánica
y la ventana oval?
(3)
En la figura podéis observar que el oído interno es una estructura tremenda- Células del sistema nervioso que
tienen la capacidad de generar y
mente compleja, ubicada en una cavidad del hueso temporal, en la que desta-
transmitir impulsos nerviosos.
ca el llamado laberinto óseo, que aloja las células�neuronales3 del oído y del
sistema vestibular, que incluye el caracol, el vestíbulo y los conductos semi-
circulares. En dicho laberinto se encuentra la cóclea. La cóclea se puede con-
siderarse el elemento más valioso del oído interno para la percepción auditi-
va. Estructuralmente, es un pequeño conducto, enroscado y que se encuentra
lleno de líquido viscoso y recubierto en la superficie de células con miles de
pelitos microscópicos, conocidos como cilios. El 80% de las células ciliadas,
aproximadamente unas 15.000, son cilios externos y participan de un sistema
motor de retroalimentación que modifica rápidamente los mecanismos de la
membrana basilar; el resto, en torno a 3.000 o 5.000, son cilios internos, que
son receptores sensoriales primarios y sinapsan con las fibras del nervio audi-
tivo o coclear.
(4)
La cóclea se divide en escala del vestíbulo, escala media y escala del tímpano, Principal estructura en la audi-
ción, situada en la partición co-
ambas separadas por la partición coclear. Es en dicha partición coclear don-
clear, que contiene la membrana
de podemos localizar el órgano�de�Corti4, que es un órgano espiral que está basilar, la membrana tectoria y los
receptores de la audición.
constituido por una hilera de células ciliadas, que tienen la capacidad de pro-
ducir pequeñas descargas eléctricas, lo que lo convierten en un potente trans-
ductor auditivo. Como podéis observar, el órgano de Corti se encuentra sobre
la membrana basilar y está recubierto por la membrana de Reissner, que actúa
a modo de cubierta. Asimismo, en el interior del laberinto óseo se halla el la-
berinto membranoso, que se encarga de organizar la circulación de los líqui-
dos laberínticos (perilinfa y endolinfa) y los orgánulos que alojan las células
sensoriales de la audición y el equilibrio.
más sensibles a determinadas frecuencias, a las mismas que las células ciliadas
correspondientes en la cóclea, es decir, la organización tonotópica de la cóclea
se mantiene en el nervio auditivo.
Tras pasar por los colículos inferiores, la ruta auditiva continúa hasta el núcleo
geniculado medial, en el tálamo, que se divide en tres zonas: ventral (también
con organización tonotópica, proyecta en la corteza auditiva primaria), dorsal
(dirige sus proyecciones a áreas auditivas no primarias) y medial (proyecta
difusamente a áreas corticales auditivas).
Respecto a las funciones más importantes del córtex auditivo, destacan (Pic-
kles, 1988): análisis de sonidos complejos, localización de sonidos, atención
selectiva, discriminación de patrones temporales y memoria a corto plazo
cuando el estímulo sonoro debe relacionarse con otro posterior. Lo que ocurre,
por lo tanto, es que se produce la integración de toda la información del resto
de las fases que se han llevado a cabo. Por consiguiente, parece que "cuanto
mayor sea la complejidad de la estimulación sonora y de la información con-
tenida en ella, mayor será el grado esperable de implicación del córtex en su
procesamiento" (Durrant y Lovrinic, 1977, p. 134).
Esquema de las vías auditivas desde la cóclea hasta el córtex auditivo primaria
© FUOC • PID_00199907 21 Percepción auditiva
Nota
Centrándonos en su condición física, el sonido como onda se define co-
mo una onda mecánica, que no puede desplazarse en el vacío, sino que La velocidad de propagación
del sonido en el aire es de
necesita hacerlo a través de un medio material (aire, agua, cuerpo sóli- aproximadamente 340 metros
por segundo a una temperatu-
do), longitudinal, ya que el movimiento de las partículas que transporta ra de 20 °C ó 68 °F (293 °K).
la onda se desplaza en la misma dirección de propagación de la onda
y de manera esférica, considerando que las ondas sonoras son ondas
tridimensionales, que se desplazan en tres direcciones y que sus frentes
de ondas son esferas radiales que salen de la fuente de perturbación en
todas las direcciones.
En primer lugar, podemos distinguir entre los sonidos denominados elemen- Diapasón
tales o tonos puros y los sonidos o tonos complejos. Los primeros se caracte-
El diapasón es una herramienta
rizan por tener una sola frecuencia y son, por ejemplo, los sonidos causados que tiene una forma de peque-
por un diapasón o instrumentos electrónicos. ña horqueta de dos puntas, en
forma de U. Cuando se golpea
el diapasón contra algún ob-
jeto, se produce el movimien-
Sin embargo, como veremos más adelante, en nuestra vida cotidiana solemos to de las puntas hacia un lado
y hacia el otro y se agitan las
estar rodeados de una gran cantidad de sonidos o estímulos mucho más com- moléculas de aire circundan-
plejos que los de la onda sinusoidal que hemos visto, como son los sonidos tes, lo que provoca una vibra-
ción que genera una onda si-
emitidos por instrumentos musicales, la voz humana, automóviles, etc. Estos nusoidal que se corresponde
con sonidos puros, casi sin ar-
sonidos complejos tienen patrones más complejos, fruto de la interacción de mónicos, que apenas son sus-
diferentes ondas de distintas frecuencias y fases; es decir, están compuestos ceptibles de sufrir variaciones
con los cambios de temperatu-
por la agrupación de diferentes frecuencias simples, que reciben el nombre de ra).
Generalmente, cuando el sonido se desplaza en sólidos alcanza mayor veloci- Velocidad del sonido
dad que cuando lo hace en líquidos, y en los líquidos es más veloz que en los
Velocidad del sonido conside-
gases. Esto se debe a que las partículas en los sólidos están más cercanas, son rando el medio a través del
pesadas y se mueven con más dificultad, y el sonido avanza más despacio por cual se propaga:
• En el aire, a una temperatu-
el medio. Por lo tanto, entre otros factores, la velocidad del sonido variará de ra de 20 °C es de 340 me-
tros por segundo (m/s) y a
manera inversamente proporcional a la raíz cuadrada de la densidad. una temperatura de 0 °C,
el sonido viaja a una veloci-
dad de 331 m/s.
• En el agua es de 1.600 m/s.
• En la madera es de 3.900
m/s.
• En el acero es de 5.100 m/
s.
© FUOC • PID_00199907 24 Percepción auditiva
4.2. Frecuencia
En general, se acepta que el oído humano es capaz de percibir aquellos soni- Ved también
dos cuyas frecuencias se encuentran entre 20 y 20.000 vibraciones por segun-
Podéis consultar el apartado
do (frecuencias audibles o autofrecuencias), lo que se conoce como intervalo sobre las alteraciones de la
de audición. No obstante, dentro de dicho intervalo, los seres humanos tene- percepción del módulo 1.
• Frecuencias bajas o tonos graves, que van desde los 16 Hz a los 256 Hz.
• Frecuencias altas o tonos agudos, desde 2 kHz hasta poco más 16 kHz.
© FUOC • PID_00199907 26 Percepción auditiva
4.3. Amplitud
Para analizar este aspecto, utilizaremos las curvas isofónicas, que fueron esta-
blecidas por Munson y Fletcher en los años treinta. Como podemos observar
en la figura, dichas curvas isofónicas son curvas de igual sonoridad, que calcu-
lan la relación existente entre la frecuencia y la intensidad de dos sonidos, para
que éstos sean percibidos como igual de fuertes, con lo que todos los puntos
sobre una misma curva isofónica presentarían idéntica sonoridad.
Correspondencia entre las dimensiones físicas de la onda sonora y las dimensiones perceptuales
4.5. Sonoridad
Por lo tanto, dado que constituye una sensación percibida por el oyente, no
se trata de una característica del sonido susceptible de ser evaluada por una
medida física directa, sino que operativizaremos la sonoridad a partir de en-
juiciamientos con respecto a sonidos de referencia conocidos. Así pues, no se
trata de una magnitud absoluta, sino que deberemos determinar cómo es de
fuerte un sonido en relación con otro.
Para hablar de distinguir sonidos debemos referirnos al umbral diferencial, que Ved también
es la menor diferencia que puede ser detectada entre dos estímulos, o lo que
Podéis repasar el módulo "In-
se conoce como diferencia mínima perceptible (DMP). troducción a la psicología de la
percepción".
Como hemos visto, todas estas características o parámetros del sonido se en-
cuentran estrechamente relacionados. Así, por ejemplo, dos sonidos con una
frecuencia diferente, pero con igual intensidad sonora, se presentan como cua-
litativamente diferentes, pero son de la misma sonoridad. Hablaremos enton-
ces de sonidos isófonos, con la misma sonoridad.
© FUOC • PID_00199907 34 Percepción auditiva
4.6. Tonalidad
Orquesta de música
¿Por qué en una orquesta de música clásica los músicos que tocan instrumentos con so-
nidos más agudos se ubican a la derecha de los que tocan instrumentos con sonidos más
graves? Desde el punto de vista de los mismos músicos, los instrumentos que tienen un
registro más agudo se sitúan a la derecha y los más graves a la izquierda. Por ejemplo, en
la sección de violines: los primeros violines están a la derecha de los segundos, que están
a la derecha de los terceros, que están a la derecha; y los violoncelos a la derecha de los
contrabajos. En los instrumentos de viento la trompeta está a la derecha del trombón,
que está a la derecha de la tuba, etc. Parece que esta colocación favorece una mejor in-
terpretación por parte de los músicos, pues, al fin y al cabo, los que tocan deben poder
oírse entre ellos lo mejor posible para poder interpretar de la mejor manera posible. Y
¿qué sucede con los espectadores, al oír a los músicos? Desde el punto de vista de los
espectadores, los instrumentos que tienen los registros más agudos están colocados a la
izquierda y los instrumentos que emiten tonos graves están a la derecha. De manera que
esta colocación es tal que, en realidad, es la peor disposición para la percepción de los
espectadores.
Si bien son muchos los autores que realizan una definición más operativa de
la tonalidad, recogeremos la de López-Bascuas (1999a, p. 490), que entiende
que "la tonalidad de una determinada señal periódica se corresponde con la
frecuencia del sinusoide que genera una sensación tonal idéntica a la de la
señal en cuestión".
En la segunda mitad del siglo XIX, Herman von Helmholtz (1863) publicó va-
rios trabajos que dieron lugar a su teoría sobre la resonancia. Este autor pro-
pone que determinados órganos del oído internos actúan como resonadores;
más concretamente, lo que sucede es que la membrana basilar está compuesta
por un conjunto de fibras transversales que se encuentran sintonizadas cada
una de ellas con el objetivo de resonar para una frecuencia concreta.
Resonador
Por ello, según esta teoría, la frecuencia del estímulo sería señalizada por la fre-
cuencia de las descargas eléctricas. Por ejemplo, al tiempo que la presentación
de un tono de 20.000 Hz haría vibrar a la membrana basilar 20.000 veces por
segundo, esta vibración sería la causante de que, a su vez, las fibras nerviosas
del nervio auditivo se descargan a 20.000 impulsos por segundo. Por lo tanto,
el nervio auditivo transmitía al cerebro un mensaje nervioso que reproduciría
exactamente la vibración sonora.
Georg von Békésy (1928) realizó una serie de estudios que culminaron en lo
que se denomina la teoría del lugar o de la onda viajera del la audición.
Finalmente, se acepta la explicación de Békésy, ya que han sido varios los he-
chos que han corroborado su teoría, tales como el hecho de que la información
de la cóclea es transmitida a los centros superiores del sistema auditivo, que
la vibración de la membrana basilar depende de la frecuencia y que existen
mapas tonotópicos en el sistema auditivo, lo que corrobora que las neuronas
que responden a las mismas frecuencias se aglomeran entre sí.
Georg�von�Békésy�(1899-1972),�biofísico
húngaro
En 1961, Georg von Békésy fue galardonado
con el Premio Nobel de Fisiología o Medicina
por su investigación de la función de la cóclea
de los mamíferos.
© FUOC • PID_00199907 39 Percepción auditiva
Por lo tanto, para llevar a cabo esta compleja tarea de representar el emplaza- Método MAA
miento de los sonidos del medio ambiente que nos rodean, resulta fundamen-
El método más usado en el es-
tal la utilización de ambos oídos, considerando además que la información tudio experimental de la lo-
que se recibe de cada uno de los oídos es diferente, salvo cuando están equi- calización auditiva es el míni-
mo ángulo audible (MAA), el
distantes de la fuente. Dada la complejidad de dicho proceso, parece funda- cual mide el cambio de posi-
ción más pequeño que pode-
mental la labor del córtex auditivo, ya que –como Jenkins y Merzenich (1984) mos detectar. La tarea supone
la discriminación espacial de
demostraron– la extirpación de una parte o de su totalidad disminuye nota- dos sonidos en un plano con-
blemente la eficacia de esta precisión. creto.
Por último, la clave más apropiada para obtener información acerca de la coor-
denada de la distancia de la fuente del sonido del oyente es, como es obvio,
la representación de la distancia a la que se encuentra la fuente sonora, y se
calcula con bastante precisión aquellos sonidos muy cercanos y menos eficaz-
mente aquellos cuya fuente de emisión es más lejana.
(6)
Además de estas principales claves que aprovechamos para ubicar los sonidos Efecto en el que un sonido en-
mascara u oculta la capacidad del
que acabamos de analizar, debemos considerar otros efectos que interactúan
oyente para percibir otro sonido.
en dicha localización, como son el retardo temporal, el efecto Haas, el efecto
de la longitud de onda y el enmascaramiento6.
(7)
Relacionado con este hecho debemos tener en cuenta el efecto Haas, también Efecto que se sucede cuando un
7 oyente oye dos sonidos muy simi-
conocido como efecto�de�precedencia o prioridad, que se produce cuando lares, distanciados por un breve in-
el sonido proviene de varias fuentes independientes, es decir, es la percepción tervalo de tiempo (50-100 ms), de
modo que se oye aquel sonido que
de un único sonido a partir de la presencia de los dos estímulos sonoros emi- llega primero.
tidos desde diferentes lugares en un corto espacio de tiempo. En caso de que el
(8)
retardo entre cada uno de los sonidos que llegan de cada fuente sea inferior a Estímulo sonoro que se caracte-
riza en cuanto a una serie de pa-
5 milisegundos, el cerebro localizaría el sonido considerando exclusivamente rámetros (frecuencia, intensidad,
la dirección de la fuente de emisión sonora más cercana. Por el contrario, si el tono, timbre, etc.).
© FUOC • PID_00199907 42 Percepción auditiva
En cuanto al efecto de la longitud de onda, ocurre que los sonidos por encima
de 1.000 Hz que tengan una longitud de onda pequeña (inferior a 30 cm) sólo
serán escuchados por uno de los dos oídos, ya que la cabeza funciona como
una pantalla, lo que evita que toda la intensidad del sonido alcance al oído
que se encuentra situado en el lado opuesto a la dirección de la que proviene
el sonido.
Como hemos visto, parece que nuestro sistema auditivo se apoya en diferentes
estrategias para realizar la compleja tarea de localización de la fuente sonora,
teniendo en cuenta desde dónde se produce el sonido en relación con la po-
sición del oyente. Si el sonido se ubica lateralmente, el cálculo de diferencias
de intensidad y de tiempo del sonido en alcanzar nuestros oídos es el método
más eficaz. Por otro lado, para la localización de sonidos horizontales, parece
más eficaz la utilización de claves espectrales basadas en las frecuencias que
alcanzan la cabeza y la oreja. Finalmente, para el cálculo de la distancia del
sonido, también nos basamos en la diferencia interaural de tiempos, si bien
debemos considerar algunos otros parámetros como la presión sonora, la fre-
cuencia, etc.
© FUOC • PID_00199907 44 Percepción auditiva
El sonido más grave de una guitarra corresponde a una frecuencia de 82,4 Hz y el más
agudo a 698,5 Hz.
Instrumentos musicales
"la razón por la que se añaden estos armónicos es que los tonos de la mayor parte de los
instrumentos musicales tienen muchos armónicos, y son las cantidades de los distintos
armónicos las que confieren a cada instrumento un sonido distinto".
Onda sinusoidal con la frecuencia fundamental (60 Hz) y su segundo (120 Hz), tercer (180 Hz), cuarto (240 Hz) y quinto
armónico (300 Hz)
El teorema de Fourier nos da una razón más del porqué de la importancia del
movimiento armónico simple, ya que afirma que cualquier forma de onda,
incluida una onda cuadrada, puede descomponerse en un cierto número de
componentes de onda sinusoidal. A partir de esta suposición, se deduce que
cualquier tipo de onda puede sintetizarse integrando entre sí sus componen-
tes de onda sinusoidal y, por lo tanto, puede considerarse como la superpo-
sición de movimientos armónicos simples. El teorema de Fourier explica la
cualidad diferente del sonido producido por distintos instrumentos musicales,
por ejemplo, la misma nota o el tono musical producido por una guitarra o
un ukelele suenan diferente a nuestros oídos a pesar de que los tonos tienen
la misma frecuencia fundamental. Esta diferencia se debe a la presencia de los
armónicos o sobretonos con diferentes amplitudes relativas. Así, por ejemplo,
cuando un violín y un piano emiten la nota La con una frecuencia de 435 Hz,
en realidad están emitiendo esa nota y toda una serie de notas con frecuencias
2x435 Hz, 3x435 Hz, etc.
© FUOC • PID_00199907 47 Percepción auditiva
Como sabéis, gran parte de la información que adquirimos por medio del sis-
tema auditivo proviene de las voces de otras personas de nuestro entorno y,
si bien percibimos el habla con relativa facilidad, en realidad se trata de un
proceso tremendamente complejo, tanto "desde el punto de vista fisiológico
(la onda sonora ha de pasar del aire a un medio líquido, para luego convertir-
se en estimulación eléctrica) como cognitivo (implica la toma de decisiones,
la comparación entre una señal acústica entrante y otras almacenadas en la
memoria)" (Marrero, 2001, p. 5). Pensad en cuando nos enfrentamos a la difí-
cil tarea de entender a alguien que trata de comunicarse con nosotros en una
lengua extranjera que desconocemos; las dudas que nos surgen son más de
las esperadas. ¿Dónde se establece la frontera entre las palabras y las pausas?,
¿qué características del lenguaje son propias del interlocutor? Por lo tanto, la
primera cuestión que parece asaltarnos con respecto a la percepción del habla
es que, a pesar de la complejidad de la estimulación de la que partimos, ¿có-
mo es posible que se dé un proceso de percepción tan fácil?, ¿cómo conoce el
oyente lo que dice el hablante?
© FUOC • PID_00199907 49 Percepción auditiva
Algo fundamental que debemos comprender es que los sonidos del len-
guaje son acústicamente muy complejos, ya que están constituidos por
una gran cantidad de ondas de frecuencias y amplitudes muy variadas y
se encuentran sujetos a cambios temporales con grandes consecuencias
para su funcionamiento.
(9)
• En primer lugar, la descodificación o la conversión de la onda sonora del Fenómeno sonoro complejo ca-
racterizado por una estructura de
habla en modelos de activación de las fibras del nervio auditivo, de manera
frecuencias no periódicas o notas
automática, lo que nos permite discriminar los sonidos: la audición. sin relación armónica, lo que nos
conduce a no oír una altura precisa
que podamos nombrar.
• En un segundo momento, esas representaciones neurológicas son conver-
tidas en unidades lingüísticas, son segmentadas, clasificadas y categoriza-
das por el sistema nervioso central del sujeto, que toma un papel activo:
se trata de la percepción.
Finalmente, debemos destacar algunas de las dificultades con las que nos en-
contramos durante el proceso de la percepción del habla. En ocasiones, existe
cierta discrepancia entre la codificaron en señal sonora de la información lin-
güística que el emisor desea transmitir y la onda sonora que alcanza al receptor
para descodificarla. Este proceso de descodificación incluiría dos problemas: la
segmentación/linealizacion y invarianza/variación. En primer lugar, el habla
es un continuum y la descodificación requiere segmentar dicho continuum en
unidades lingüísticas. En segundo lugar, podemos encontrar dificultades en
las diferencias fonéticas entre los sonidos del habla que se manifiestan en la
señal sonora según los diferentes hablantes que emitan la señal.
(10)
Existe cierta controversia acerca de cuál puede ser considerada la unidad bási- Células del sistema nervioso
que tienen la capacidad de gene-
ca de percepción acústica del habla. En su origen, en los años cincuenta (en
rar y transmitir impulsos nerviosos.
los laboratorios de Bell y en los laboratorios Haskins), las investigaciones en la
percepción del habla tomaron como punto de partida la hipótesis de la rela-
ción directa entre señal acústica y fonema10 y trataban de identificar los rasgos
invariables que caracterizaban a cada uno de los fonemas. Retomándolo en la
actualidad, algunos autores (Goldstein, 2006) consideran el fonema como el
estímulo acústico básico del habla y lo definen como una unidad fonológica
que transmite significado y que se caracteriza por ser diferenciadora (las carac-
terísticas de cada fonema son diferentes a las de los demás), indivisible lineal-
mente (no puede descomponerse en unidades menores) y abstracta (no son
sonidos, sino modelos de sonidos). Por el contrario, otros especialistas consi-
deran no está claro el papel del fonema, ya que existen algunos fonemas, como
por ejemplo el fonema /d/, que nunca son escuchados aisladamente, propo-
nen como alternativa la sílaba como la unidad perceptiva básica necesaria para
analizar el lenguaje, y consideran que operaría automáticamente algún tipo
© FUOC • PID_00199907 52 Percepción auditiva
de proceso que segmentaría la señal del habla en sílabas (Mehler y col., 1981;
Bradley, Sánchez-Casas y García-Albea, 1993). La viabilidad de la sílaba como
unidad de segmentación se apoya en diferentes evidencias acumuladas, que
consideran que la sílaba es el bloque que construye la percepción del lenguaje,
que tiene un papel fundamental en las primeras fases de la adquisición del
lenguaje y principalmente por los hallazgos en investigaciones que analizan
los efectos de complejidad (tarea de detección de fonemas situados al inicio de
un estímulo auditivo) y congruencia silábica (tarea de detección de si un estí-
mulo contiene determinada secuencia de fonemas) (Vigil-Colet, et al., 1998).
En tales estudios se confirma que los fonemas no son percibidos directamente,
sino que son reconocidos una vez que se ha producido la identificación de la
sílaba. Sin embargo, tampoco los resultados de dicha corriente muestran claras
evidencias de lo que proponen, ya que algunos de sus datos presentan claras
limitaciones y motivan que se cuestione la validez de la sílaba como unidad
básica para acceder al lenguaje.
Lugar de articulación
Medias e o
Bajas a
Al analizar las conexiones entre la señal y la percepción del habla, los inves- Consulta recomendada
tigadores han descubierto un fenómeno denominado percepción categorial,
En la dirección http://
que responde a la capacidad que tenemos para discriminar entre las diferentes www.haskins.yale.edu/
categorías fonológicas. Así, diferentes experimentos han puesto de manifies- featured/senten-
ces/ppsentences.html podéis
to que tanto los adultos como los niños somos capaces de percibir categórica- consultar la página oficial de
los Laboratorios Haskins.
mente los contrastes en el lugar de articulación, en el modo de articulación
y en la sonoridad. Este fenómeno se reproduce también con las vocales. Los
primeros estudios que mostraron la existencia de la percepción categórica en
el habla se llevaron a cabo en los Laboratorios Haskins de Nueva York.
cuya media es de 10-12 unidades por segundo). Sin embargo, otras caracterís-
ticas, como la redundancia, contribuyen a allanar las tareas que el oyente ha
de llevar a cabo para desentrañar el mensaje (Goldstein, 2006).
Por último, dentro de las teorías activas, debemos destacar las teorías�auditi-
vas, planteadas originalmente por Gunnar Fant (1960), que atribuyen al siste-
ma auditivo (concretamente al funcionamiento coclear) la capacidad para ob-
tener correlatos auditivos invariantes de los rasgos distintivos acústicos. Una
versión más reciente de esta teoría es la de Rosner y Pickering (1994), quienes
proponen que el análisis de la señal supone cinco fases:
• Análisis frecuencial.
Para terminar con este apartado veremos el modelo WRAPSA (word recognition
and phonetics structure acquisition) de Peter Jusczyk (1997), la más reciente de
todas la aproximaciones sobre la percepción del lenguaje. Este modelo se in-
teresa por la capacidad del ser humano de percibir el lenguaje desde el naci-
miento. Este autor propone un proceso perceptivo en cuatro fases:
© FUOC • PID_00199907 57 Percepción auditiva
• Calibrado: dirige la atención hacia los rasgos identificados por los anali-
zadores, necesarios para procesar los contrastes entre palabras, lo cual per-
mite comenzar a almacenar patrones de sonidos y también proporciona el
marco para percibir categorialmente el habla fluida.
Ejercicios de autoevaluación
Preguntes�de�alternativas�múltiples
a) fonotópica.
b) tonotópica.
c) sonotópica.
d) Ninguna de las respuestas anteriores es correcta.
a) Verdadero.
b) Falso.
a) modo de articulación.
b) modo de articulación y lugar de articulación.
c) sonoridad, modo de articulación y lugar de articulación.
d) Ninguna de las respuestas anteriores es correcta.
6. ¿Cuál de las siguientes afirmaciones corresponde a la teoría motora propuesta por Liber-
man y Mattingly?
a) Se interesa por la capacidad del ser humano de percibir el lenguaje desde el nacimiento.
b) El oyente no segmenta la señal auditiva, propone directamente una palabra candidata
c) Es una teoría pasiva
d) Ninguna de las respuestas anteriores es correcta.
a) Verdadero
b) Falso
© FUOC • PID_00199907 60 Percepción auditiva
9. La intensidad mínima de sonido que necesita una persona para empezar a oír se conoce
como...
a) umbral auditivo.
b) umbral de confort.
c) umbral doloroso.
d) umbral diferencial.
a) teoría de la intensidad.
b) teoría de la resonancia.
c) teoría de la frecuencia.
d) principio de Andada.
Preguntas�de�respuesta�abierta
11. Definid brevemente los siguientes parámetros del sonido y especificad la magnitud en
la que se miden:
• Longitud de onda.
• Frecuencia.
• Amplitud.
• Volumen.
• Timbre.
12. Especificad los nombres de la estructura del sistema auditivo que aparecen señalados con
líneas en la siguiente figura:
© FUOC • PID_00199907 61 Percepción auditiva
Solucionario
Ejercicios de autoevaluación
1.�c
2.�b
3.�d
4.�b
5.�c
6.�d
7.�c
8.�a
9.�a
10.�b
11.
12.
© FUOC • PID_00199907 62 Percepción auditiva
Glosario
armónico m Componentes de un tono complejo cuyas frecuencias son un múltiplo de la
frecuencia fundamental.
efecto de precedencia m Efecto que se sucede cuando un oyente oye dos sonidos muy
similares, distanciados por un breve intervalo de tiempo (50-100 ms), de modo que se oye
aquel sonido que llega primero.
fonema m Unidad fonológica más breve que compone el habla y que contiene significado.
frecuencia f Número de veces por segundo que la onda se repite a sí misma, que se mide
en herzios (Hz).
neurona f Célula del sistema nervioso que tiene la capacidad de generar y transmitir im-
pulsos nerviosos.
señal acústica f Estímulo sonoro que se caracteriza en cuanto a una serie de parámetros
(frecuencia, intensidad, tono, timbre, etc.).
© FUOC • PID_00199907 63 Percepción auditiva
Hemos analizado aquellas estructuras fisiológicas del sistema auditivo que po-
sibilitan dicha percepción y nos hemos detenido en la complejidad de los pro-
cesos que se suceden para que acontezca la audición en los seres humanos.
• Efectuar vuestro propio esquema sintético que analice el camino que lleva
el sonido desde que se produce hasta que alcanza el cerebro.
Bibliografía
Bibliografía recomendada
Bustos, I. (2001). La percepción auditiva: un enfoque transversal. Vol. 1. Madrid: ICCE CEPE.
Munar, E., Rosselló, J., y Sánchez-Cabaco, A. (1999). Atención y Percepción. Madrid: Alianza
Editorial.
Tirapu, J., Ríos, M., y Maestú, F. (2008). Manual de Neuropsicología. Barcelona: Viguera.
Referencias bibliográficas
Bradley, D. C., Sánchez-Casas, R. M., y García-Albea, J. E. (1993). The status of the syllable in
the perception of Spanish and English. Language and Cognitive Processes, 8, 197-233.
Brown, G. y Yule, G. (1983). Teaching the Spoken Language. Cambridge: Cambridge University
Press.
Durrand, J. D. y Lovrinic, J. H. (1977). Bases of Hearing Science. Baltimore: Williams and Wil-
kins.
Fant, C. G. (1960). Acoustic Theory of Speech Production. With Calculations based on X-Ray Stu-
dies of Russian Articulations. The Hague: Mouton (Description and Analysis of Contemporary
Standard Russian, 11).
Flowler, C. A. y Dekle, D. J. (1991). Listening with eye and hand: cross-modal contributions
to speech perception. Journal of Experimental psychology: Human Perception and Performance,
17, 816-828.
Galvin, K. (1988). Listening by Doing: Developing Effective Listening Skills. Lincolnwood, Ill.:
National Textbook Company.
Helmholtz, H. V. (1863). Die Lehre von den Tonempfindungen. Braunschweig, Germany: Viewig
und Sohn.
Katz, J., Stecker, N. A., y Henderson, D. (1992). Introduction to central auditory processing. In J.
Katz, N. A. Stecker y D. Henderson (Ed.), Central auditory processing: A Tran disciplinary view
(pp. 3-8). St. Louis: Mosby Year Book, Inc.
Klatt, D. H. (1980). Software for a Cascade/Parallel Formant Synthesizer. Journal of the Acous-
tical Society of America, 67, 3: 971-995; En R. D. Kent, B. S. Atal y J. L. Miller (Ed.) (1991),
Papers in Speech Communication: Speech Production (pp. 765-789). Nueva York: Acoustical So-
ciety of America.
Mehler, J., Dommergues, J. Y., Fraunenfelder, U., y Segui, J. (1981). The syllable´s role in
speech segmentation. Journal of Verbal Learning and Verbal Behaviour, 20, 298-305.
Jusczyk, P. W. (1997). The discovery of spoken language. Cambridge, Massachusets: The MIT
Press.
Omaggio, A. (2001). Teaching Language in Context (3.ª edición). Boston: Heinle & Heinle.
Rosner, B. S. y Pickering, J. B. (1994). Vowel Perception and production. Oxford: Oxford Uni-
versity Press.
Rutherford, W. (1886). A New Theory of Hearing. Journal Anat Physiol, 21(1), 166-8.
Tirapu, J., Ríos, M., y Maestú, F. (2008). Manual de Neuropsicología. Barcelona: Viguera.