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Este día dedicado al enfermo saludo a cuantos sufrís por la enfermedad y a cuantos os
cuidan: capellanes, religiosos, religiosas, médicos, enfermeros, enfermeras,
farmacéuticos, personal técnico y administrativos, asistentes sociales y voluntarios.
El día 25 de mayo celebra la Iglesia el Día del enfermo. Este día va cobrando fuerza en
nuestra Iglesia diocesana de Cádiz y Ceuta, y también la preocupación de la comunidad
cristiana por los enfermos. Las parroquias organizan la visita a sus enfermos y
familiares. Pero, aún queda mucho camino por recorrer: El Día del enfermo este año
dirige nuestra atención hacia los enfermos en las Parroquias, que debe ser una prioridad
que hay que atender.
2. Atender al enfermo
Desde siempre la Iglesia ha tenido muy en el corazón a los enfermos. Nada tiene de
extraordinario. Jesús fue visto por sus contemporáneos no sólo como maestro sino
también como médico. La enfermedad humana conmueve a lo más íntimo de Jesús, y su
relación sanadora con el enfermo define una parte muy importante de su misión. Jesús,
al mandar a sus discípulos a anunciar el Reino de Dios, les ordena curar a los enfermos.
En la comunidad cristiana, que anuncia el Reino de Dios y lo anticipa, los enfermos han
estado muy en su corazón y lo siguen estando a pesar de las dificultades existentes.
Podemos asegurar que una comunidad parroquial que atiende a sus enfermos, anuncia
el Evangelio, como Dios quiere que se anuncie, a los enfermos, y a quienes le rodean, el
Evangelio resulta, entonces, noticia buena y alegre de salvación. Es una señal de
autenticidad de la predicación del Evangelio por parte de una comunidad parroquial.
Cada día se está viendo con mayor claridad que una sociedad en la que se busca ante
todo la eficacia, la utilidad, el rendimiento y la ganancia, produce necesariamente gentes
marginadas, en especial entre los enfermos y ancianos. Por eso, la Iglesia y el cristiano y
la comunidad parroquial han de hacerse presentes precisamente allí donde fracasa un
sistema que se sostiene en el mayor rendimiento posible.
5. Conmigo lo hicisteis
El Día del enfermo de este año busca no sólo acercar la comunidad parroquial a los
enfermos, sino que quiere también recordar a los cristianos lo mucho que pueden hacer
por tanto enfermo como producen las condiciones de vida en las que, por desgracia,
vivimos. Los cristianos cuando atendemos al enfermo estamos convencidos de que
estamos atendiendo al mismo Jesús que dijo: "Lo que hacéis con uno de estos
hermanos más pequeños y enfermos conmigo lo hicisteis" (cf. Mt 25). Los cristianos son
portadores de una "buena noticia" de salvación. No pueden callarla. Le aguardan un
sinnúmero de enfermos de alma y cuerpo.
Que Santa María, Señora de la Salud, nos acompañe ahora y siempre en la atención a
nuestros hermanos enfermos.