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A partir de ahora, ya no era el hijo ni la generación más joven de nadie.
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Chang Geng todavía lo perseguía afuera: "¡Yifu, espera!"
Gu Yun había montado su caballo, mirándolo desde arriba. El caballo
estaba tan inquieto como su dueño. Incluso cuando las riendas ya estaban
tiradas, siguió caminando de un lado a otro en el mismo lugar.
La sangre en el rostro de Chang Geng parecía haberse pegado en su
palma y su manga, se parecía a un retrato de Bai Miao * de un humano
dibujado en papel.
* un estilo de obra de arte dibujada utilizando solo linearts sin
colorear.
Parecía casi indiferente, la expresión increíblemente dolorida parecía
haber estado escondida debajo de una capa de máscara: “En caso de que
el tío Huo no pueda reprimir al general Tan, yifu cargando en la capital en
este momento será igual a conducirse hacia la llama. "
Gu Yun enarcó sus largas cejas, estaba a punto de hablar cuando
Chang Geng lo interrumpió.
“Lo sé, incluso si estarás en el fuego, no puedes permitirte no ir a la
capital porque los guardias imperiales no podrían detener el Campamento
del Norte. Hasta el momento, a excepción de Yifu, nadie podía controlar al
General Tan. Una vez que la capital es sacudida por este cambio caótico,
las consecuencias son inimaginables ".
Chang Geng respiró hondo y luego le tendió una mano cubierta de
sangre. “En caso de que el Emperador te aprisione, los generales de todos
lados inevitablemente se verán sumidos en la confusión, estallará el
desastre. Necesito que yifu me deje algún tipo de prenda que pueda
calmar temporalmente los corazones de las personas ".
El asombro pasó por el rostro de Gu Yun. El niño que antes solo lo hacía
sentir increíblemente preocupado ahora se había vuelto completamente
diferente.
Todos tenían muchas caras. Al igual que algunas personas, mientras
estaban en el exterior, eran capaces de convocar al viento y a la tormenta
con reconocido prestigio. Pero una vez que regresaran con sus familiares,
se convertirían en un niño ignorante que no entendía qué era el hambre o
la frialdad.
Aunque Chang Geng se alejaba cada vez más del chico que no conocía
sus modales, siempre lo llamaba 'Shiliu', siempre confiaba en su pequeño
yifu, pero después de todo, todavía albergaba admiración por Gu Yun en el
fondo de su corazón. Incluso en medio de la noche, cuando surgía su amor
y su deseo, era por este afecto parecido al de un padre, al de un hermano,
lo que le traería una sensación indescriptible de tabú.
Hasta ese momento, cuando el viento del este le borró el último
sentimiento de su adolescencia.
En el menor tiempo posible, se dio cuenta Chang Geng, estará solo en
este camino sin nadie que lo entienda ni nadie que lo acompañe.
A partir de ahora, ya no era el hijo ni la generación más joven de nadie.
Gu Yun sacó su propio sello privado del interior de su ropa y se lo
arrojó a Chang Geng: “Esta cosa no se puede comparar con el Emblema del
Tigre, pero las personas mayores que solían seguirme todos lo
reconocen. Quizás podría ser útil, por si acaso ... podrías pensar en una
forma de invitar al general Zhong ".
Chang Geng no miró el sello privado en absoluto, colocándolo
directamente dentro de su manga, respondiendo con indiferencia: "Lo sé,
yifu puedes estar tranquilo".
Tan pronto como terminó, Gu Yun ya había conducido a su caballo,
cargando.
Chang Geng continuó mirándole la espalda hasta que su figura estuvo
fuera de su alcance. De repente, cerró los ojos y susurró en voz baja: "Zi
Xi ..."
El guardia de la mansión en el otro lado no pudo escuchar con claridad,
preguntó: "¿Qué dijo Su Alteza?"
Chang Geng se dio la vuelta: "Prepara el lápiz y el papel".
Los guardias rápidamente persiguieron: "Su Alteza Real, su mano ..."
Chang Geng detuvo sus pasos al escuchar esto, agarrando la botella
de vino que Gu Yun dejó atrás. Vertió inexpresivamente todo el licor
fuerte en su mano herida. La herida seca volvió a sangrar. Luego sacó un
pañuelo y lo envolvió.
En este momento en la capital, nadie esperaría que la muerte de un
viejo eunuco pudiera causar olas tan enormes.
Tan Hong Fei desató la injusticia que había sentido y reprimido durante
todos estos veinte años, tal vez ya había perdido la cabeza. Primero, envió
tropas para rodear la residencia del tío imperial. Cuando se enteró de que
el viejo bastardo había dejado a su esposa e hijos para esconderse en el
palacio, inmediatamente se dio la vuelta y se enfrentó audazmente al
ejército imperial que llegaba al lugar para el rescate.
Desde antes hasta ahora, la guardia imperial y el Campamento del Norte
fueron compañeros. Como última línea de defensa del territorio más
crucial, siempre se encontrarían entre sí.
Los guardias imperiales estaban compuestos principalmente por dos
partes: el tipo "joven maestro" que se unía por la puerta trasera y se
comía el salario imperial; y las élites seleccionadas del Campamento
Norte. Los primeros se habían mojado de miedo hacía mucho tiempo y no se
podía confiar en ellos en absoluto. Estos últimos, aunque capaces, pero
cuando de repente se enfrentaron a su "familia biológica", durante un
tiempo, también se encontraron en un dilema. Como había esperado Chang
Geng, el ejército pronto se dispersó.
El sonido de la actuación en la torre Qi Yuan todavía resuena, el cálido
vino de flores y la niebla blanca aún no han desaparecido, la ciudad de Sijiu
estaba hirviendo.
Tan Hong Fei llevó a sus hombres presionando fuera del palacio
prohibido y se quitó el casco como si se estuviera sosteniendo la cabeza.
Primero, se arrodilló y realizó la cortesía formal de tres profundas
reverencias en dirección al salón principal. Luego, le gritó a la fila de
guardias bloqueando frente a él, “Sinner Tan Hong Fei, saludos a Su
Majestad. ¡Le pido a Su Majestad que por favor entregue al traidor que
ahora se esconde dentro del palacio, haciendo justicia a mis millones de
hermanos y camaradas que habían protegido nuestro país, dando al mundo
una explicación! ¡Tu sujeto está dispuesto a pagar por el crimen de
faltarle el respeto al monarca con la muerte! "
Dentro del palacio, el emperador Li Feng pudo escuchar esto, pero
antes de que pudiera darse el lujo de reprender a Wang Guo, ya estaba
furioso. El coraje del Hijo del Cielo no era en absoluto comparable al del tío
imperial que huyó con la cola. Li Feng casi incluso rompió el sello de
jade. Sin tener en cuenta cómo la gente intentó detenerlo, se cambió de
ropa y llegó al frente del pasillo, enfrentándose a Tan Hong Fei cara a
cara.
Los soldados pesados y los guardias del palacio estaban separados
por unos centímetros de escalones de mármol blanco, incluso los pájaros
en la pared sudarían.
En este punto muerto sumamente peligroso, Gu Yun finalmente llegó a
tiempo.
Gu Yun se llevó con él solo a veinte personas, abriendo con fuerza un
camino a través del Campamento del Norte que actualmente rodea el
palacio y entró directamente.
Al presenciar esta situación, el Marqués del Orden casi pudo vomitar
sangre de ira. Caminó hacia adelante, sacó su látigo, luego cortó
directamente en la cara de Tan Hong Fei con suficiente fuerza para
romper la piel, gritó: "¿Deseas encontrar la muerte?"
Los ojos de Tan Hong Fei se pusieron rojos en el instante en que vio
a Gu Yun: "Mariscal ..."
"¡Cállate! ¿Que planeas hacer? ¿Obligar al Emperador a abdicar? Gu Yun
le dio una patada en el hombro, Tan Hong Fei casi se estrella contra el
suelo por el impacto. “¿Aún entiendes cuál es el orden correcto? ¿Aún
entiendes qué es la lealtad? El Campamento del Norte no puede ingresar a
la capital sin el comando de convocatoria, ¿a dónde habías arrojado esta
ley? ¡Quién te dio el coraje de faltarle el respeto al gobernante! "
Tan Hong Fei se sentó en el suelo, sus lágrimas parecían a punto de
caer: "Mariscal, habían pasado veinte años, los hermanos habían muerto en
vano, los hermanos no tenían a nadie para expresar la injusticia ..."
Gu Yun bajó la mirada hacia él, sus pupilas heladas, completamente
indiferentes: “En media hora, ordene a todo el Campamento del Norte que
se retire de las nueve puertas, si hay algún retraso, personalmente
tomaré su maldita vida, ¡vaya! "
Tan Hong Fei: "¡Mariscal!"
"¡Sal ahora!" La esquina de los ojos de Gu Yun latía intensamente y se
retorcía incesantemente. Pateó a Tan Hong Fei fuera del camino,
arrodillándose en los escalones de piedra frente al salón principal.
“Su Majestad, por favor cese su ira. El general Tan había sufrido una
herida en el pasado, pronto había mostrado signos de locura, combinado
con ser incitado por los malos, tal vez fue momentáneamente cegado por
los demonios, su vieja enfermedad volvía a repetirse. Le pido a Su
Majestad que por favor piense en sus muchos méritos y su diligencia a lo
largo de los años, que le permita volver a recuperarse, perdonándole la
vida a este loco ”.
Zhu Little Feet aprovechó esta oportunidad y le susurró al oído a Li
Feng: "Su Majestad, ya ve, el Mariscal también ha llegado, usted es el de
mayor importancia y no puede estar en riesgo, evitemos esto por un
momento dentro del palacio".
Li Feng se rió bajo de ira. Volvió la cabeza y miró a Zhu Little Feet,
hablando con frialdad: "¿Qué, incluso tú lo llamarías mariscal?"
La cara de Zhu Little Feet se puso pálida, arrodillándose
instantáneamente en el suelo.
Li Feng se cruzó de brazos, se paró en los escalones de mármol blanco
y miró al Marqués del Orden con Armadura Ligera desde lo alto. Por
primera vez, entendió una cosa que nunca había hecho antes. Antes de su
paso, el ex Emperador lo tomó de la mano y dijo una y otra vez que debía
tener cuidado con una persona. No era el increíblemente ambicioso Wei
wang, ni los extranjeros que se parecían a los tigres, sino su mano
derecha, Gu Yun.
Después de media hora, el Campamento Norte se retiró de las nueve
puertas. Junto con Tan Hong Fei, más de una docena de generales
involucrados fueron detenidos, el Marqués del Orden fue encarcelado.
Al mismo tiempo, innumerables pájaros de madera despegaron de las
aguas termales en los suburbios del norte, algunos otros Caballería Ligera
se separaron en dos direcciones, rápidos en su corcel, llevando las letras
marcadas con el sello privado de Gu Yun, vestidos con atuendos comunes,
corriendo hacia los territorios cruciales del Noroeste y el Mar del Este.
Si Chang Geng tuviera Black Eagles a su disposición en este momento,
incluso si solo hubiera uno o dos, tal vez podría haber tenido una
oportunidad.
Sin embargo, cuando el emperador Long An detuvo el sello de mariscal
de Gu Yun, ya había ordenado a todos los oficiales del Campamento Hierro
Negro a su alrededor que regresaran a la estación del Noroeste.
Una vez más ... era demasiado tarde.
Abril, a la entrada de la Ruta de la Seda.
El bullicioso y próspero escenario de hace unos meses dejó de existir
hace mucho tiempo, todas las estaciones de vigilancia se han cerrado, el
Campamento de Hierro Negro había preparado su formación.
Había 'cuervos negros' con aura asesina dondequiera que iban todos. A
He Rong Hui se le ordenó que sirviera temporalmente como comandante de
las tres facciones. La Orden de Tambores de la capital todavía estaba en
su escritorio, cubierta de polvo.
En este día, el cielo estaba desolado, nubes espesas y oscuras se
cernían sobre la ciudad, las guarniciones de varios países tenían sus
puertas cerradas herméticamente, un silencio de muerte flotaba en el
aire. Por todas partes, la arena dorada pasó volando. Parecía haber algo
esperando a explotar.
No se sabía si era sólo una ilusión, pero el general podía sentir que
algo iba a suceder.
En este momento, un Águila Negra cayó repentinamente del cielo.
El Águila Negra vaciló mientras aterrizaba, balanceándose y rodando
por el polvo y la arena de la Región Occidental. Casualmente, una patrulla
de armadura ligera se dio cuenta de esto e inmediatamente vino a
comprobarlo.
Solo para descubrir que el asesino del cielo parecía estar aplastado
por el peso de su armadura de Águila Negra. Incapaz de levantarse, se
arrodilló en el suelo, agarrando las manos de su camarada. El joven rostro
detrás de la máscara estaba terriblemente demacrado.
El comandante de la patrulla se acercó rápidamente y preguntó
continuamente: “¿No te envió el general He a la capital para ver cuándo
puede el mariscal recuperar su sello? ¿Como estuvo? ¿Que pasó?"
El Águila Negra apretó la mandíbula, el espacio entre los dientes estaba
lleno de sangre, su hermoso rostro estaba distorsionado. Se quitó la
armadura y dijo con voz ronca: "Quiero ver al general He ..."
El Campamento del Norte estaba en problemas. Tan Hong Fei fue
encarcelado. Los comandantes de las nueve puertas temían que la noticia
del encarcelamiento del marqués condujera a una agitación
mayor. Después de tomar el campamento, lo primero que se hizo fue enviar
gente para asegurar en gran medida las entradas y salidas en los
suburbios de la capital.
El Águila Negra aún no había aterrizado, pero ya se encontró con una
ola de flechas Baihong. Consiguió escapar y aterrizar con
dificultad. Luego se disfrazó y se mezcló. Había aprendido toda la historia
desde el principio hasta el final de las conversaciones hirvientes de la
gente en la capital.
El Águila Negra había viajado directamente de regreso al noroeste en
un ataque de rabia, simplemente pasó por la caballería enviada en la misma
dirección por Chang Geng. El Águila era incontables veces más rápida que
el caballo. Llegó a la guarnición del Campamento Hierro Negro unos días
antes que el otro.
He Rong Hui, el barril de pólvora, explotó en el acto, lo que llevó a la
gente a la carga contra la mansión del gobernador del noroeste. Pero fue
exactamente en este momento crucial cuando los Tigres de Arena
alineados en el Reino de Kucha abandonaron lentamente la estación y
levantaron sus oscuros hocicos, apuntando hacia el este.
Las diversas fuerzas involucradas han hecho todo lo que humanamente
pudieron, el resto solo podría estar en el destino decidido por el Cielo.
Pero esta vez, el Cielo parecía haber abandonado por completo la
dinastía de la familia Li cuyo destino estaba llegando a su fin.
En el desierto todavía frío de Saibei -
La cresta ondulada se dobló creando un arco suave, las flores
silvestres estaban ansiosas por mostrar sus capullos uno tras otro.
Los lobos grises estaban en alto, los halcones aullaban mientras
revoloteaban, las banderas se cubrían de aceite y polvo y las pieles de los
animales volaban junto con el viento. El cielo era verde, la tierra oscura y
dorada, y en lo profundo de la hierba, había miles de tropas y caballos.
En el rugido del frío hierro y la maquinaria, de repente llegó una canción
ronca.
“El espíritu más limpio, hasta el viento celestial quiso besar su falda,
todos los seres vivos cantarán e inclinarán la cabeza, se arrodillarán
donde ella cantará y bailará. El año que viene habrá rebaños de ganado
vacuno y ovino, exuberante vegetación, mantos de flores, que se
extenderán hasta el final de las montañas Tianshan. El año que viene habrá
hierba de hoja perenne, la liebre saldrá de su nido, el caballo salvaje
regresará lentamente ... "
Habían pasado cinco o seis años desde que Jia Lai Ying Huo, el príncipe
bárbaro que presionó directamente sobre la ciudad de Yanhui en un ataque
de rabia, ahora heredó las dieciocho tribus y se convirtió oficialmente en
el verdadero Rey Lobo. El viento del noroeste de la frontera había dejado
en sus rasgos marcas tan profundas como los cortes de un cuchillo,
talladas repetidamente en su rostro durante miles de días y noches, el
odio y el resentimiento empaparon sus huesos.
Hoy en día, su cabello ya estaba teñido con reflejos grises, la
ferocidad de su mirada se retiraba hacia adentro, completamente
indetectable. Su vasta y profunda voz para cantar ya estaba cubierta de
polvo. Solo podía tararear unas pocas líneas. La letra de los viejos tiempos
se mantuvo, pero su voz pronto se volvió increíblemente ronca.
Levantó la jarra de vino que colgaba de su cintura, tomando un sorbo
del licor mezclado con el sabor oxidado del hierro, su expresión tensa, los
ojos enfocados en una figura que volaba desde la distancia. La sombra al
lado del halcón se acercó. Era una armadura de Halcón, más grande que el
Águila Negra, el casco más feroz. Con un ruido agudo y penetrante,
aterrizó frente al Rey Lobo, levantando una flecha dorada hecha de
materiales desconocidos con ambas manos.
Jia Lai extendió la mano para recoger la pequeña flecha dorada y
vertió vino sobre ella. El suave asta de flecha reveló lentamente una línea
de palabras escritas en el idioma de los Dieciocho Tribales. La letra fina y
rizada se extendía bajo el licor caliente. Decía: Rey Lobo, da el primer
paso.
Jia Lai respiró hondo. Había pensado que una vez que llegara este
momento, estaría lleno de éxtasis.
Pero no, descubrió que después de tantos años, el odio pronto lo había
vaciado. Incluso si estaba a punto de cambiar el rumbo, había olvidado cómo
reír o sonreír. El actual Rey Lobo miró hacia el cielo sobre él. La luz del sol
lo hizo sentirse un poco extasiado, como si los ojos de innumerables
difuntos lo estuvieran vigilando.
"Es el momento". Susurró suavemente, levantando una mano en medio
de miles de tropas, envuelto en un silencio mortal.
Luego cortó.
Los lobos grises levantaron el cuello y aullaron, cargando hacia
adelante, en dirección al sur.
En las islas del Mar del Sur, donde los verdes exuberantes todo el año,
el viento cálido susurra.
En la noche, un gran barco negro entró lentamente en un muelle
ordinario y tranquilo, pero aún no se detuvo. Un grupo de personas
armadas con armaduras abrió la escotilla y salió corriendo. La isla
deshabitada de repente se iluminó intensamente.
Había filas de armaduras de batalla alineadas a lo largo de las grandes
rocas, reflejadas por la tenue luz del fuego, que se asemejaba a un
ejército de siniestros y siniestros soldados.
Entre las Armaduras Pesadas, había un mapa enorme para una ruta de
marcha que cubría todos los pasajes subterráneos en las profundidades
de la Frontera Sur. Lo que Gu Yun una vez envió a la gente a excavar fue
solo la punta del iceberg.
Finalmente, era el Mar Oriental originalmente pacífico y tranquilo -
Guerreros Dong Ying con espadas largas y ninjas con forma de
serpiente disfrazados de gente de la costa oriental remaban con cuidado
pequeños botes a través del mar y se deslizaban en secreto,
comunicándose entre sí con extraños gestos.
Se reunieron lentamente desde todos los lados como hormigas, los
cargueros generalmente bulliciosos retirados del Gran Puerto de Liang
uno tras otro, se volvieron silenciosamente en dirección a las Islas Dong
Ying.
Un largo silbido que podría atravesar el aire sonó en el océano sin
límites.
Los 'barcos mercantes' se reunieron gradualmente en una fila,
organizándose en formación, todo en orden. A medida que abandonaron
gradualmente el área de patrullaje de la Armada del Sur, la bandera original
de los barcos mercantes se bajó repentinamente, reemplazada por la
pesada bandera de batalla del Papa Occidental, ondeando sobre el mar azul,
proyectando una gran sombra debajo.
El cambio de bandera parecía ser una señal aterradora. Un enorme
'barco mercante' comenzó a desintegrarse, su disfraz de paz cayó al mar,
revelando los oscuros hocicos debajo.
Esta era una especie de 'dragón marino' que nunca antes se había
visto. Eran pequeños y extraños, podían estar escondidos dentro de los
barcos mercantes ordinarios, su velocidad se parecía a un rayo, y cuando
se deslizaban sobre el mar, no eran diferentes de un monstruo que
atravesaba el viento.
Los siete monstruos se dispersaron a la señal de la bandera, una
enorme sombra luego se elevó lentamente desde debajo del agua.
La superficie del mar originalmente en calma se elevó como una
colina. Era un monstruo enorme incomparable, rompiendo la superficie y
revelando su extraña 'cabeza'. Miles de dragones marinos y barcos de
guerra estaban pegados a sus numerosos 'ventosas' en lo alto, listos para
la acción.
Los pilares remontados hacia las nubes estaban llenos de Ziliujin. Bajo
el poder de trabajo de numerosos engranajes conectados, pesadas placas
de hierro y cascos se enrollaron y revelaron cañones grandes y pequeños
alineados, parecidos a innumerables ojos siniestros. No había rastro de
estancamiento al girar.
La baraja de este monstruo marino gigante podría contener al menos
diez de los dragones del Gran Liang.
A continuación, la puerta de la escotilla se abrió lentamente. Una
escalera oscura descendió como una lengua. Dos filas de Western Navy
con extraños sombreros salieron corriendo. Entonces, un paraguas negro
se abrió en la escotilla oscura, apuntalado, bloqueando el agua del mar que
caía desde arriba. El hombre occidental de cabello blanco que Gu Yun se
encontró una vez en el palacio inclinó la cabeza, caminando tranquilamente
bajo el paraguas.
El hombre que le sostenía el paraguas salió medio paso por detrás. Fue
el 'Maestro Ja' quien había jugado con los bandidos en la Frontera Sur ese
año.
El autor tiene algo que decir:
Este es el comienzo del Volumen 3, la historia tiene un total de cuatro
volúmenes = w = este volumen es un poco más largo.
Capítulo 57: Desastre Nacional
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Dos horas después, el ataque sorpresa al Campamento Hierro Negro
en las Regiones Occidentales conmocionó al gobierno y asustó a la gente.
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“Su Majestad, ahora puede estar seguro,” el Maestro Ja extendió la
mano y apoyó al hombre de cabello blanco. Resultó que el hombre que había
visitado el Gran Liang muchas veces antes, afirmando ser un mensajero,
era en realidad el propio Papa.
Maestro Ja: "Aunque hay innumerables desviaciones en el camino, al
final, el resultado final no había desperdiciado el tiempo y la energía que
pusiste aquí".
El Papa observó a los feroces monstruos marinos en la superficie azul
del océano. Su rostro estaba tranquilo, sin felicidad ni tristeza. Parecía
que no solo no estaba feliz, sino que incluso llevaba consigo una especie
de tristeza y melancolía indescriptibles.
"Todavía es demasiado pronto para hablar del resultado". El Papa dijo:
“El destino es algo muy misterioso. ¿El destino de una persona no es
predecible, y mucho menos de un país entero? Esto es algo que solo Dios
podría saber ".
Maestro Ja: "Por ejemplo, ¿cuando ese idiota de Jia Lai no pudo
contenerse y le reveló ese asunto a Gu Yun por adelantado?"
Jia Lai Ying Huo estaba muy resentido con el último miembro de la familia
Gu. Además de este odio, no quedó nada en toda su existencia. Hacía
mucho tiempo que había dejado atrás la dignidad de un Rey Lobo y se
convirtió en un perro rabioso. Ya no podía ver la imagen más grandiosa. En
su opinión, mientras pudiera derribar a Gu Yun, no le importaba si destruía
los planes de otra persona.
Sin embargo, deben cooperar con este perro rabioso. El odio que se
enredó durante generaciones entre las Dieciocho Tribus y las Llanuras
Centrales fue demasiado profundo, las fuerzas actualmente escondidas
dejadas en la capital por la Diosa fallecida también fueron increíblemente
importantes.
"Realmente admiro a ese Gu Yun", suspiró el Maestro Ja. “Si yo fuera
él, quién sabe lo que podría haber hecho ya, pero él manejó silenciosamente
todas estas cosas. De lo contrario, la verdad que entregamos hoy será
absolutamente más loca de lo que es ahora. Las guarniciones en
diferentes lugares pueden haber sido ya ... ¿cómo lo llaman? ¿'Qing jun bian'
*?
* eliminó a los traidores junto al gobernante
El Papa: “Este efecto no es ideal, pero no hay otra posibilidad. Una
oportunidad es tan fugaz como el tiempo, no tenemos otra opción ".
“Jacques, todos somos bestias atrapadas, todos buscamos una forma
de sobrevivir. Si no devoramos a los demás, seremos
devorados. Innumerables ojos están mirando a este gran y apetitoso
herbívoro, primero debemos dar un paso adelante, de lo contrario, no
necesariamente tendremos el poder de salir a la batalla dentro de tres o
cinco años en el futuro ".
El Maestro Ja miró al mar, en todas partes había agua, el mar y el cielo
compartían la misma sombra. Parcialmente no pudo comprender: "Su
Majestad, si esto es solo un herbívoro, ¿por qué deberíamos esforzarnos
tanto para quitarle los colmillos?"
“Carnívoro o herbívoro, las diferencias no están en sus colmillos ni en
su forma”, murmuró el Papa. "Debes evaluar si es codicioso, si tiene el
corazón que está ansioso por morder y tragar ... ¿pudiste detectar ese
olor?"
El Maestro Ja estaba estupefacto. Ziliujin con alta pureza cuando se
quemaba casi no creaba olor, probablemente solo Gu Yun y los perros
podrían detectarlo. Trató de preguntar: “Su Majestad se refiere a… ¿el
olor del agua de mar? "
“Es el hedor, hijo mío”, susurró el Papa. “Si el diablo realmente existiera
en este mundo, entonces definitivamente sería este pequeño mineral con
llama azul y violeta. Desde el día en que atravesó el suelo, había encendido
esta maldita era. Convirtió a los Hijos de Dios en corazones de monstruos
de hierro ".
¿No fue la máquina que quema Ziliujin hecha por el hombre?
El Maestro Ja se encogió de hombros, no refutó, pero también un poco
en desacuerdo.
El Papa ya no explicó, solo inclinó la cabeza y comenzó a besar el anillo
en su mano con el símbolo de un cetro y repitió una simple oración.
"Perdóname", susurró. "Por favor perdoname."
En este momento, un grupo de señales de incendios en color azul
profundo apareció repentinamente en los dos barcos principales,
elevándose hacia el cielo alto.
La sombra de los ojos del Maestro Ja parecía haberse mezclado con el
color de la llama. Trató de contenerse, pero por un tiempo, todavía fue
difícil reprimir su emoción: "¡Su Majestad, comienza!"
El séptimo año de Long An, el octavo día de abril.
Era el tercer día desde que el Marqués de la Orden Gu Yun se mudó de
las aguas termales a la celda de la prisión de la capital.
La mazmorra estaba muy fría y siniestra. Afortunadamente, cuando
la capital entró en primavera, el frío se había disipado gradualmente. Ya
hacía calor, el montón de hierba y paja en la celda era incluso más suave
que su lecho de marcha en el campamento militar. No fue incómodo vivir
unos días, Gu Yun pensó en ello como si se fuera de vacaciones.
Todo a su alrededor estaba en silencio. Ni siquiera había un preso con
quien charlar. El carcelero era un títere que no podía hablar. Esta era la
celda más interna de la prisión imperial, si uno no era de la línea de sangre
real, no se les permitía ingresar. Incluso Tan Hong Fei, el comandante del
Campamento del Norte no estaba calificado para quedarse.
La última persona que calificó para estar aquí fue Wei Wang, el
hermano biológico del Emperador. Gu Yun disfrutó del tratamiento de la
habitación individual, no había otra opción que quedarse solo.
Pero incluso si alguien charlaba con él, tampoco podría escucharlo. La
medicina que se apresuró a beber antes de irse ya se ha agotado. El color
de las dos marcas de belleza en el lóbulo de la oreja y la esquina de sus
ojos se había desvanecido hasta el punto de ser casi invisible. Tampoco
trajo el liuli gla.ss. Al abrir los ojos, apenas podía contar los dedos. Los
pasos del títere entrando y saliendo también eran confusos.
Para matar el tiempo, atrapó un ratón para criarlo, dejando algunos
bocados en cada comida para alimentarlo. Sin nada que hacer, jugaría con
eso.
Ese incidente fue desenterrado deliberadamente por alguien, Gu Yun
se dio cuenta. Cuando investigó en secreto hace cinco años, había borrado
algunas evidencias mortales, pero no tocó a Wu He. Primero, era solo un
perro viejo que se aferraba a la vida. En segundo lugar ... temía que, al
final, no estuviera exento de egoísmo. No estaba dispuesto a permitir que
esta verdad inolvidable desapareciera para siempre.
Gu Yun admitió que este fue su error. Si pudiera poseer la mitad de la
calma que tenía hoy, entendería si debería haber recogido estas cosas y
esperar el momento adecuado, empujándolas y rebelándose ya, o debería
haber destruido todo lo que había pasado, enterrado. en el pasado y no
dejar que vuelvan a ver la luz.
Miles de errores, no debería haber dudado dónde debería ser decisivo.
Al igual que el emperador Yuan He, si el anciano no dudó, nunca existiría
un Gu Yun, tal vez el mundo podría haber tenido otro tipo de paz.
Gu Yun no sabía lo que sucedería en el futuro, ni sabía si Chang Geng,
que acababa de entrar al mundo, realmente podría estabilizar los
corazones de las fuerzas militares en todos los lados. Sin embargo,
actualmente estaba en prisión, era inútil preocuparse, primero debía
relajarse y recuperar fuerzas.
Más tarde, el ratón descubrió que las manos que le picaban a este
hombre eran demasiado molestas. Era problemático, pero tampoco podía
escapar, por lo que directamente se hacía el muerto y ya no le prestaba
atención.
El pequeño marqués que era odiado por perros y gatos tuvo que
apoyarse ociosamente contra la pared. Sintió que la actitud de este ratón
era similar a la de Chang Geng cuando era joven.
Gu Yun comenzó a pensar en Chang Geng, luego no pudo evitar
suspirar, quejándose con el ratón: "Preferiría que no le agradara por
molestarlo todos los días como en su infancia".
El ratón le dio un trasero muy redondo en respuesta.
Gu Yun respiró hondo y pateó con fuerza este último pensamiento. Sin
recoger y elegir, tiró de la alfombra mohosa del pajar, la puso sobre su
cuerpo y cerró los ojos para descansar.
Sólo con buen ánimo se podría afrontar un futuro difícil.
Nadie podía molestar a este medio sordo en la prisión. Gu Yun pronto
se durmió, vio un sueño en el frío olor a humedad.
Gu Yun soñó que estaba acostado de espaldas bajo un cuchillo de
carnicero gigante, la pesada hoja presionada en su pecho, cortando poco
a poco la piel y la carne hasta sus huesos, partiéndole vivo en dos mitades,
desconectando su cuerpo con todas sus extremidades. . Solo la herida en
su pecho le dolía increíblemente. En sus oídos, persistían los ruidos de
llantos, disparos y aullidos, combinados con el sonido intermitente de Hu
Jia *, apagado y vago, como una telaraña ...
* un tipo de instrumento musical como una flauta
Lo partió el cuchillo, pero no había sangre en la herida. En cambio, una
flecha de señal cayó y se elevó hacia el cielo con un ruido penetrante,
explotando y sacudiendo a la nación.
Gu Yun se despertó con un gemido ahogado. La vieja herida en su pecho
le dolía inexplicablemente. El sonido penetrante de la flecha de señal en su
sueño continuó resonando en sus oídos, formándose en un extraño tipo
de tinnitus.
Parecía haber un vínculo extraño entre él y su Black Iron Camp. Esa
noche, la primera flecha de señal siniestra explotó en el cielo nocturno en
la guarnición en las regiones occidentales.
El Informe de batalla de emergencia llegó a la capital solo un día
después. Al soldado Black Eagle que vino a entregar el mensaje solo le
quedaba una pierna. Con un último suspiro, llegó al Campamento del Norte
en un estado de pánico y murió antes de que pudiera decir una palabra.
Dos horas después, el ataque sorpresa al Campamento Hierro Negro
en las Regiones Occidentales conmocionó al gobierno y asustó a la gente.
Cuando se difundió la noticia del incidente en la capital, He Rong Hui
llevó a la gente a sitiar la mansión del Gobernador del Noroeste. Tan
pronto como se fue, Ku Cha Kingdom envió 160 Tigres de Arena como líder,
perforando a la fuerza el campamento de la Patrulla de Caballería Negra
ubicado en la entrada de las Regiones Occidentales.
El carro Sand Tiger era el mayor enemigo de la Caballería Ligera. Por
un momento, el humo y el polvo cubrieron el aire, las llamas se elevaron
como una cortina, los caballos de batalla gritaron y murieron, la caballería
de hierro cayó uno tras otro.
Pero el Black Iron Camp seguía siendo al final el Black Iron
Camp. Después de un momento de confusión, reaccionaron de
inmediato. Black Armors no dudó en seguir adelante. He Rong Hui regresó
inmediatamente con Black Eagles después de recibir la noticia, cortando
decisivamente la línea de suministro de Sand Tigers desde el aire
directamente. Los vehículos de combate gigantes consumían combustible
en exceso. Una vez que se interrumpió su suministro, se convertirían
instantáneamente en una pila de cobre y hierro.
Pero los Tigres de Arena que llamaron a su puerta no fueron un
engaño. Detrás, como todos temían, había decenas de miles de soldados
con banderas.
Los extranjeros en las estaciones de innumerables países, incluso la
gente de Tianzhu que había aprovechado esta oportunidad para su ventaja
... el número superó lo que habían imaginado. A pesar de que eran solo una
multitud de pésimos grupo, seguían siendo una 'turba'. Con Sand Tigers al
lado, el Black Iron Camp solo podía usar Heavy Armors para resistir, y
pronto los dos bandos comenzaron a caer en una batalla de Ziliujin.
He Rong Hui abrió con urgencia el almacenamiento de Ziliujin del
Campamento de las Regiones Occidentales y se sorprendió al darse cuenta
de que no quedaba mucho. Cuando el emperador Long An investigó a fondo
el contrabando de Ziliujin, Gu Yun no tuvo más remedio que suspender la
línea de suministro oculta en sus manos. La cantidad que les dio la corte
solo fue suficiente para mantener la patrulla diaria, no podría sostenerse
en un repentino estallido de batallas a gran escala.
He Rong Hui envió gente a desplegarse, pero el camino para desplegar
a Ziliujin se bloqueó nuevamente. Se había difundido la noticia del
encarcelamiento del marqués del orden. Nadie pudo decir la situación
específica. En este momento, la gente entró en pánico, hubo todo tipo de
rumores. En esta situación de vida o muerte, ¿quién se atrevería a enviar
a Ziliujin al Campamento Hierro Negro sin la Orden de los Tambores?
¿Y si quisieran presionar en la capital por una rebelión?
He Rong Hui envió un Águila Negra a la capital por un lado, y por otro
lado, se acercó a las fuerzas de defensa de la ciudad de Frontera Norte
en busca de ayuda. Sin embargo, el mensajero aún no se había ido, pero el
Bárbaro del Norte se levantó de repente. Las noticias del Rey Lobo Jia
Lai Ying Huo que dirigía personalmente esta expedición los aplastaron.
Cinco años de estabilidad, el muro de hierro se había volcado.
Jia Lai Ying Huo con decenas de miles de soldados de élite y miles de
armaduras pesadas, incluso tenía un tipo de 'Halcón' invencible cuyos
tamaños eran más grandes e incluso más letales que el Águila del
Campamento de Hierro Negro, mordió la defensa de la Frontera Norte que
se extendía por miles de millas.
El noroeste sufrió una derrota que ya no pudo salvarse. Sin la orden
del mariscal, incluso si el último soldado moría, el Campamento Hierro Negro
no se atrevió a retroceder un paso. He Rong Hui luchó para mantenerlos a
raya durante tres días y dos noches, las tropas han sido derrotadas
hasta el fondo, el ejército parecido a un Dios creado por la acumulación
de tres generaciones estaba a punto de perder más de la mitad.
En ese momento, finalmente llegó el mensajero de Chang Geng.
Con el sello privado de Gu Yun, la Alteza Real, que nunca se había dado
a conocer ni había mostrado sus talentos desde lejos en la capital, había
imitado la escritura de Gu Yun a la perfección.
Le entregó dos cartas en total al mensajero: si la frontera aún
estaba estable, le daría la primera carta, diciéndole a He Rong Hui que no
se preocupara por la corte, ya fuera del mercado negro u otros medios,
inmediatamente. llena en secreto el almacenamiento de Ziliujin en las
regiones occidentales, mantén las armaduras y prepárate para una batalla
en cualquier momento.
En caso de que la situación de la frontera hubiera cambiado, se le
entregaría la segunda carta a He Rong Hui, diciéndole que no debe
sacrificarse para defenderse, que no debe estar ansioso por luchar y
reducir rápidamente sus fuerzas al este de la Puerta Jiayu y esperar
reforzamiento.
El enemigo que se escondía en la oscuridad ya había comenzado a
moverse, sin duda era demasiado tarde para que actuaran. No había Black
Eagle en manos de Chang Geng. Había muy pocas personas con las que
pudiera ponerse en contacto con los pájaros de madera en el pabellón Lin
Yuan. No importa si el cielo se cae o si la tierra se hace añicos, el
mensajero difícilmente podría llegar a tiempo. Por lo tanto, había imaginado
el peor de los casos e hizo todo lo posible para reparar la jaula después
de que los animales se perdieron.
Si las Regiones Occidentales hubieran cambiado, sería difícil para la
Frontera Norte cuidar de sí misma. Por lo tanto, el general Cai Feng,
comandante en jefe de la guarnición de las Llanuras Centrales, recibiría
otra carta de Chang Geng al mismo tiempo que el Campamento de Hierro
Negro se retiraba, pidiéndole que aumentara sus tropas hacia el norte y
enviara su parte de Ziliujin. y tropas pesadas a la Puerta Jiayu lo antes
posible para aliviar esta urgente urgencia.
Sin embargo, el corazón de Chang Geng estaba claro. Si algo sucedió
realmente, este despliegue no fue suficiente.
Los cientos y miles de montañas en el suroeste estaban
completamente fuera de su control. Aunque Shen Yi estaba de ese lado,
era un comandante solo de nombre y no tenía fundamento. Era imposible
enviar tropas arbitrariamente sin la Orden de Tambores.
La Armada del Mar del Este era aún más preocupante. El general Zhao
You Fang era el hombre de Li Feng, era imposible movilizar ese lado con
solo un sello privado de Gu Yun.
Casualmente, Chang Geng tuvo el presentimiento de que incluso si
lograba apagar el fuego en otros lugares, escondido en el vasto océano
del Mar del Este debía haber otro golpe fatal.
La noticia traída por el Águila Negra realmente confirmó el peor
escenario que había imaginado. Chang Geng respiró hondo y soltó el último
pájaro de madera. Se volvió y le habló a Huo Tong, cuya sangre ya
burbujeaba en su boca: "Prepara el caballo, quiero ir al palacio".
En la puerta del palacio, Chang Geng fue detenido por Liao Ran, el
monje estaba golpeado por el clima, pero su expresión permaneció tranquila
e inquebrantable, como si por más urgente que algo pudiera ser, todos
fueran dispersados por las marcas del incienso. sobre su cabeza,
convertido en cenizas por las palabras 'Amitabha'.
Liao Ran: "Amitabha, Su Alteza Real ..."
Chang Geng lo interrumpió con indiferencia: “El Maestro no necesita
decir más. Voy al palacio a esperar órdenes, no a obligar al Emperador a
abdicar ".
La expresión de Liao Ran cambió ligeramente, gesticulando: "El monje
cree que Su Alteza Real tiene la medida adecuada".
"No tengo ningún sentido del decoro", el Cuarto Príncipe, que estaba
bien versado en las conversaciones, se había apartado de su
comportamiento amable y dijo sin rodeos: "Usando las Montañas Qinling
para dividirse en norte y sur, el sureste y el suroeste están fuera de
control. Incluso si puedo matar a Li Feng en el acto, no podría limpiar el
desordenado estado de cosas actual, sin mencionar que nadie puede
suceder al trono en este momento. El hijo mayor del emperador tiene nueve
años, la emperatriz es simplemente una mujer inútil y enferma con solo su
apariencia, Zi Xi no está justificado para el puesto, y yo ... "
Se burló: "Soy el hijo de la mujer demoníaca de las tribus masculinas".
Liao Ran lo miró con preocupación.
“Maestro, tenga la seguridad de que yo mismo soy un veneno. Si hubiera
actuado a voluntad, ya habría comenzado a hacer daño al país y al
pueblo. Pero todavía no he hecho nada, ¿verdad? La expresión de Chang
Geng se desvaneció una vez más. “Ahora no es el momento de hablar de
este asunto, los enemigos extranjeros habían invadido. Quizás lo habían
planeado durante mucho tiempo. Este asunto aún no ha terminado, pero
reaccionaron demasiado rápido. Sospecho que dentro del palacio ... incluso
al lado de Li Feng, hay espías del enemigo. ¿Lin Yuan Pavilion tiene alguien
que pueda ser útil en el palacio? "
Liao Ran lo miró con toda seriedad, él señaló: "Su Alteza significa ..."
Chang Geng: “Este incidente involucró el viejo caso de hace veinte
años, el Bárbaro del Norte definitivamente estaría relacionado con este
asunto. Investiga a todas las personas con las que esas dos mujeres
bárbaras entraron en contacto en el palacio en ese momento, cualquiera. El
hechicero del norte se destacó en el uso de veneno, tenían muchos trucos
viles bajo la manga, no pasan por alto ninguna pista, ni siquiera las más
pequeñas ".
Cuando hablaba de 'las dos mujeres bárbaras', su voz era inmutable,
como si se estuviera refiriendo a alguien que no tenía relación con él.
“Debería haberme sentido extraño”, susurró Chang Geng. “Ese año, Li
Feng liberó fácilmente a Jia Lai Ying Huo como soltar al tigre de regreso
a sus montañas. Como era de esperar, lo que sucedió detrás de todo no
fue nada simple, pero desafortunadamente… ”
Era una lástima que fuera demasiado joven en ese momento, su
corazón era solo del tamaño de un puño, solo podía contener los pequeños
problemas de un joven que había dejado su ciudad natal.
"Si hubiera nacido diez años antes ...", dijo de repente Chang Geng.
Los párpados de Liao Ran saltaron.
Chang Geng forzó cada palabra: "El mundo no habría resultado de esta
manera".
Nunca dejaría ir a Gu Yun tampoco.
“Zi Xi había dicho antes, los dragones marinos de nuestra corte están
diez años atrás en comparación con otras facciones militares. Me
preocupa que el Mar Oriental no esté en paz. El general Zhao tenía el
talento para defender, pero no necesariamente sería capaz de manejar
una guerra ". Chang Geng dijo: "Le escribí una carta al Maestro, Lin Yuan
tenía una base sólida en Jiangnan, molestaré al Maestro para que les
brinde apoyo, mis disculpas porque no puedo acompañarlo".
Liao Ran rara vez fruncía el ceño, pero no se sabía por qué. El 'Zi Xi'
de Chang Geng le había asustado hasta el alma.
Sin embargo, en esta situación urgente, no era el momento de
reflexionar sobre un pronombre. El monje vestido con un atuendo hecho de
tela gruesa, su figura desapareció instantáneamente en la luz de la
mañana, partiendo de inmediato.
Chang Geng acaba de poner un pie en el palacio, las malas noticias ya
habían caído sobre sus cabezas. Las intensas noticias de la situación
militar de primera línea que llegaron una tras otra hicieron que el
emperador Long An y todo el magistrado de la corte no supieran cómo
reaccionar.
El campamento Hierro Negro se había retirado a la Puerta Jiayu.
Northern Frontier perdió siete ciudades en una sola noche ... ni
siquiera pudo esperar a que llegaran los refuerzos de Cai Feng.
Las turbas rebeldes de la Frontera Sur parecían haberlo discutido de
antemano, se aliaron con los bandidos del mar del Sur y explotaron
misteriosamente el almacenamiento de suministros del suroeste ...
"Reporte -"
Todos los presentes en el salón principal se pusieron pálidos, mirando
hacia la entrada. Li Feng ni siquiera tuvo tiempo de dejar que Chang Geng
lo saludara.
"Su Majestad, 800 millas informe expedito, hay 100.000 marines
occidentales que utilizan el camino de la isla Dong Ying para invadir ..."
Los ojos de Li Feng aparentemente querían romper: "¿Qué hay de Zhao
You Fang?"
El mensajero se inclinó hasta el suelo y se ahogó en lágrimas: "... el
general Zhao ya se ha sacrificado por el país".
Capítulo 58: Hoja de suspensión
____
"Presta atención a mi decreto ... Ve a invitar al tío aquí".
____
Todo el cuerpo de Li Feng tembló, Chang Geng lo vio caer en el trono
con una expresión en blanco. De repente, en el área fuera de su sentido
racional, surgió en él una especie de satisfacción cruel. Sin embargo,
Chang Geng era muy estricto consigo mismo, se pellizcó la palma de la
mano en silencio y reprimió el placer sediento de sangre: sabía que era el
Hueso de la Impureza lo que lo molestaba, no era su verdadero yo.
Chang Geng abrió la boca y habló sin mucha sinceridad: "Su Majestad,
por favor tenga cuidado".
Parecía como si la persona que dijo que quería matar a Li Feng no
fuera él.
Yan Bei Wang acaba de hablar, los otros magistrados estupefactos en
el salón principal reaccionaron de inmediato y siguieron su ejemplo: "Su
Majestad, por favor tenga cuidado".
Los ojos de Li Feng se posaron lentamente en Chang Geng. Este era
su único hermano de nombre, pero rara vez se fijaba en él. Dado que su
alteza real Li Min heredó su título y entró en la corte, casi nunca habló,
ni se familiarizó deliberadamente con otros magistrados. Ni siquiera usó
el nombre de Gu Yun para conversar con oficiales militares. Solo
ocasionalmente charlaba con algunos eruditos pobres sobre poesía y libros.
Chang Geng actuó como si no hubiera notado su mirada en absoluto, su
rostro permaneció sin cambios. “El general Zhao se había sacrificado, no
queda ninguna barrera en el Mar del Este. Los occidentales
inmediatamente podrían hacer un empujón directo al puerto de Da Gu tan
pronto como giraran hacia el norte. Ya era demasiado tarde para decir
algo, hermano real, por favor, deshazte de los pensamientos que te
distraigan y toma una decisión de inmediato ".
Por supuesto, Li Feng sabía esto, pero su corazón estaba hecho un
desastre, momentáneamente no supo qué decir.
En este momento, el tío imperial Wang, que se había vuelto ceniciento
por los rumores que giraban en torno a él en la gente común durante estos
días, observó el rostro del Emperador y se atrevió a decir: “Su Majestad,
solo hay una gran guarnición que es el norte Acampa en las afueras de la
capital, rodeado de nada más que llanuras. Si chocamos con ellos aquí,
nuestras tropas serán ciertamente insuficientes ".
“Además, el caso de la rebelión de Tan Hong Fei aún no es
concluyente. Casi no hay líder en el Campamento Norte en este momento. Si
todos los dragones marinos de Jiangnan fueran destruidos, ¿qué podría
hacer el Campamento del Norte? ¿Quién podría proteger la seguridad de la
capital? El mejor curso de acción en este momento es ... ¿qué tal nosotros
... ah ... "
Wang Guo no terminó su oración, porque los ojos del grupo de
generales en el salón estaban clavados en él como flechas Baihong.
Este viejo bastardo aún no se había limpiado el trasero. Acaba de
levantarse un leve viento y ya se atrevió a convencer a Su Majestad de
trasladar la capital a otra parte, si no fuera por esta situación de
enemigos que invaden desde fuera y caótica situación por dentro, tal vez
todos lo hubieran hecho pedazos. .
Wang Guo tragó saliva y exhaló, doblando la espalda, sin atreverse a
mirar hacia arriba.
La expresión de Li Feng era insondable. Se quedó callado por un
momento, luego ignoró por completo a Wang Guo y solo dijo: "Dejemos que
Tan Hong Fei regrese a su posición, déle la oportunidad de expiar sus
faltas con méritos ... Los llamé a todos aquí para discutirlos, cualquiera
que todavía hablara tonterías". .hit, ¡sal ahora mismo! "
En esta urgencia, incluso el lenguaje vulgar de la calle podría salir de
la boca del Emperador. El salón cayó instantáneamente en un silencio
sepulcral, rojo y blanco destellaron en el rostro de Wang Guo.
Li Feng se dirigió con impaciencia al Ministerio de Guerra: "Sujeto Hu,
usted está a cargo de los asuntos militares, tiene las Órdenes de Tambor,
¿qué dice?"
El Ministerio de Guerra nació naturalmente con una tez pálida y verde
combinada con una cara alargada. Su nombre era 'Hu Guang', que sonaba
similar a 'melón dulce', por lo que algunas personas lo llamarían
secretamente Ministro Melon en privado.
Cuando el ministro Melon escuchó las palabras de Li Feng, su rostro
se torció en un melón amargo. En nombre, la Orden de Tambores fue emitida
por el Ministerio de Guerra, pero ¿cómo podría el Ministerio de Guerra
atreverse a enviarlos? No era más que una pluma en manos del Emperador,
¿se atrevería una pluma a tener una opinión?
Hu Guang se secó un sudor frío y habló con falta de confianza: “Oh…
Su Majestad tiene razón, la capital es la base de nuestro Gran Liang. Es
el lugar al que se dirige el corazón de la gente. ¿Cómo pudimos dejar que
esos extranjeros irrumpieran aquí? ¡Qué orden correcto sería
ese! Incluso si solo nos queda un peón, tenemos que luchar hasta el final. Si
nos retiráramos ahora, solo desanimaría a las tropas ".
Li Feng realmente no tuvo paciencia para escuchar sus tonterías
repitiéndose como una rueca, inmediatamente lo interceptó: "¡Te pregunté
cómo luchar!"
Hu Guang: "..."
Todos miraban a Wang Guo, pero el hombre tenía razón. Si el
comandante de la Armada de Jiangnan ya hubiera muerto en la batalla,
¿quién podría estar a cargo del Mar del Este? ¿Cómo se suponía que iban
a movilizar tropas?
En el caso de que los extranjeros vayan al norte, ¿cuántas rondas de
cañones podrían bloquear el Campamento del Norte y los guardias
imperiales?
En cierto nivel, Wang Guo también podría considerarse valiente, al
menos se había atrevido a decir la verdad que todos los demás no podían.
Hu Guang de repente se convirtió en un melón amargo podrido, el sudor
frío goteaba similar al jugo que se derrama.
En ese momento, Chang Geng de repente habló.
El joven Yan Bei Wang dio un paso al frente: "¿Estaría el Hermano Real
dispuesto a escuchar algunas de mis palabras?"
Hu Guang le lanzó una mirada de agradecimiento, Chang Geng sonrió
gentilmente: “Hermano real, primero deja de enojarte, el agua que se había
derramado no se puede recuperar, los muertos no se pueden resucitar. El
predicamento de la frontera en cuatro lados se ha convertido en un hecho
establecido, es inútil discutir y estar enojado. En lugar de una conmoción,
es mejor para nosotros pensar en qué más podríamos hacer para salvar
esta situación ".
Tal vez porque había seguido a un monje durante mucho tiempo, su
cuerpo no permaneció en la llama y el humo del mundo común. De pie frente
al pasillo, su calma empapó el interior, incluso el fuego de la rabia se había
calmado inconscientemente con él.
Li Feng secretamente dejó escapar un suspiro y agitó la mano:
"Continúa".
Chang Geng dijo: “Por el momento, las Llanuras Centrales han quedado
atrapadas en el fuego, los soldados han sido trasladados, pero las
raciones no se han preparado. Es inevitable presenciar la escena del
suplemento insuficiente, por lo que le pido al Hermano Real que abra el
tesoro nacional y envíe a todo Ziliujin. Este es el primer asunto ".
"Sí, me lo has recordado", Li Feng se dirigió al Ministerio de Vivienda,
"Coordina inmediatamente con los demás ..."
"Hermano Real", lo interrumpió Chang Geng. “Su sujeto había dicho que
enviara todo; en este período extraordinario, la Orden de Tambores ya se
había convertido en una carga. Los generales todavía llevan grilletes como
tales, ¿el Hermano Real desea atarlos para ir al campo de batalla?
Si alguien más dijera estas palabras, habría sido extremadamente
ofensivo, pero no se sabía por qué, viniendo de la boca de Yan Bei wang,
nadie podría sentirse enojado.
Hu Guang, que acababa de ser dejado a un lado, rápidamente siguió su
ejemplo: "Su sujeto está de acuerdo".
Sin esperar a que Li Feng abriera la boca, el grupo de la facción de
Ingresos había burbujeado, el Ministro de Ingresos levantó la voz: “Su
Majestad, absolutamente no debemos hacerlo. En este momento, la
distribución de Ziliujin realmente podría resolver la necesidad urgente,
pero permita que su sujeto diga algunas palabras desagradables. En caso
de que esta situación se prolongue, después de solucionarla hoy, ¿qué
vendrá mañana? ¿Vamos a utilizar la parte del año que viene? "
El comandante del Ejército Imperial quizás realmente quería cortar la
cabeza del Ministro para arrancar el agua de su cerebro,
instantáneamente replicó: "Los enemigos ya han presionado en la puerta,
pero en todos ustedes, caballeros, las cabezas tienen cuidado. cálculos
para los escasos gastos diarios, este general realmente tenía los ojos
abiertos ".
“Su Majestad, si no apagamos este fuego, ¿cómo podría haber un
'mañana'? En caso de que los cuatro lados queden atrapados en un callejón
sin salida, simplemente confiando en las pocas minas pequeñas de Ziliujin
en el territorio de nuestro país, incluso si entregáramos un metro de
tierra, ¡no podremos durar mucho! "
Hu Guang parecía temer que no pudiera dar su opinión. Con la cara
roja, gritó a todo pulmón: "¡Tu sujeto está de acuerdo!"
Chang Geng solo había dicho una cosa, no había tenido la oportunidad
de hablar de cómo reprimir al enemigo, sin embargo, ya había estallado una
discusión caótica. No habló y se quedó quieto a un lado pacientemente,
esperando que terminaran su batalla de palabras.
Los cerebros de Li Feng aparentemente querían abrirse. De repente,
se dio cuenta. Estos 'pilares' de la corte solo podrían preocuparse por los
asuntos miserables que pertenecen a la única plaza de tierra en la que se
encontraban. Si todos fueran despedidos a la cocina, tal vez podrían
discutir una mesa llena de nuevos platos tan vasta como una nación.
"¡Suficiente!" Li Feng estalló.
El entorno fue silenciado, Chang Geng continuó sus palabras de manera
oportuna: "Su tema aún no había terminado, para el segundo asunto: Su
Majestad, por favor, esté listo para retirar nuestras fuerzas".
Tan pronto como salió esta declaración, los ministros una vez más se
enfurecieron. Incluso la ira del Hijo del Cielo no pudo contener la ruidosa
conmoción en el salón. Varios hombres mayores parecían dispuestos a
estrellarse la cabeza contra el pilar.
Los ojos de Li Feng se crisparon, la llama de la ira se precipitó a su
garganta. Apenas podía contenerse para no atacar a Chang Geng. Frunció
el ceño, tratando de reprimir su ira y susurró una advertencia: "Un Min,
hay ciertas cosas en las que debes pensar cuidadosamente antes de
hablar, los ancestros habían pasado esta nación a mis manos, no a mí.
cortar la tierra para criar tigres ".
Chang Geng se mantuvo sin cambios: “Su sujeto quisiera pedirle al
Hermano Real que por favor toque los bolsillos. Usando todos los recursos
de nuestra nación en este momento, ¿cuántos territorios podremos
salvar? No se trata de "cortar la tierra para criar tigres", sino de un
guerrero cortándose la mano. Sin cortar cuando debería cortarse,
esperando hasta que el veneno se haya empapado profundamente, hasta
que después de que los occidentales nos hayan derrotado por completo,
¿decidiremos cortarlo solo entonces?
Su tono de voz sencillo que se asemeja a la recitación de los analectos
de Confucio era como un balde de agua fría, vertiéndose sobre la cabeza
de Li Feng sin piedad.
Chang Geng no miró hacia arriba para ver la expresión del Emperador,
continuó: "En tercer lugar, el Maestro Wang lo ha dicho bien, en este
momento el noroeste todavía tiene el Campamento de Hierro Negro, incluso
si han sufrido una gran pérdida, aún podrían aguantar . El de mayor
importancia en este momento es el Mar del Este, una vez que los
extranjeros se dirigen al norte, el poder de combate del Campamento del
Norte es bastante preocupante. Todos los refuerzos cercanos y lejanos
han sido inmovilizados y es posible que no puedan llegar a tiempo, ¿qué
planea hacer Su Majestad?
En un abrir y cerrar de ojos, Li Feng se vio obligado a envejecer diez
años por sus palabras, después de un largo momento de sentirse abatido,
finalmente dijo: "Presta atención a mi decreto ... Ve a invitar al tío aquí".
Cuando Chang Geng escuchó esta orden, ni siquiera parpadeó. No hubo
alegría ni enojo, como si eso fuera lo que debiera hacerse, todo de
acuerdo con la razón y la lógica.
Zhu Little Feet ni siquiera se atrevió a exhalar, justo cuando estaba
a punto de despedirse, Chang Geng de repente recordó: "Su Majestad,
escoltar a alguien de la prisión imperial con solo el eunuco Zhu parecería
una broma".
Instintivamente había desconfiado de cualquiera de los sirvientes que
rodeaban a Li Feng, incluido este hombre que había estado ayudando en
secreto a Gu Yun.
Li Feng dijo impotente: “¿Qué hora es ya, todavía prestando atención
a detalles tan triviales? Sujeto Jiang, puede ir en mi lugar ".
Zhu Little Feet siguió a Jiang Chong con pequeños pasos, no pudo
evitar mirar a Chang Geng a lo lejos.
Era un anciano dentro de este palacio. En la corte de Great Liang,
cada miembro de alto rango de la nobleza y la realeza, no había una sola
persona con la que no estuviera familiarizado, siendo Yan Bei Wang la única
excepción.
Estuvo cuidadosamente protegido dentro de la mansión del Marqués
desde la infancia. Después de crecer, no "trabajó correctamente", sino
que en su mayoría viajaba a todas partes y rara vez se mostraba. Además
de mezclarse con la multitud para escuchar la política en la cancha, casi
nunca entraba solo al palacio y solo iba junto con Gu Yun en la ocasión de
Año Nuevo para prestar atención. Nadie conocía ninguna información
sobre él.
No saber nada significa que él mismo era una variable.
Jiang Chong y Zhu Little Feet fueron rápidos en su corcel,
dirigiéndose directamente a la prisión imperial. Al acercarse al destino,
Zhu Little Feet recordó de repente y dijo en voz baja: “No, maestro Jiang,
el marqués entrará en el palacio para encontrarse con el emperador, sería
inapropiado si aún usara ropa de prisión. ¿Qué tal si envío a alguien a que
compruebe el atuendo formal de primer grado hecho este año y busque
uno ahora mismo?
Jiang Chong estaba actualmente lleno de dolor e indignación por el
colapso de su país de origen, su alma fue retraída por la voz del viejo
eunuco, no supo si reír o llorar: “¿Cuándo es ya? Aún recuerdas los
pequeños detalles, yo ... "
Antes de que terminara de hablar, pudo ver a un hombre cargando hacia
ellos en un caballo, llegando en un abrir y cerrar de ojos. Desmontó y le
prestó atención: era Huo Dan, el comandante de los guardias de la casa
solariega del marqués.
Huo Dan juntó las manos: "Maestro Jiang, eunuco Zhu, soy un sirviente
de la mansión del marqués, fui enviado por orden de nuestra alteza real
para dárselo al marqués".
Con eso, subió un atuendo formal con una armadura con ambas manos.
Jiang Chong se sorprendió: se dio cuenta de que Yan Bei wang era una
persona meticulosa a primera vista, pero ¿tenía cuidado en este punto?
¿Contra quién estaba en guardia el Príncipe?
Gu Yun estaba muerto de aburrimiento en la mazmorra, balanceando al
ratón gordo con su cola. Al darse cuenta del inusual flujo de viento detrás
de él, miró hacia atrás con cierta sorpresa y pudo ver vagamente tres
figuras viniendo del exterior. La persona que lideraba caminaba tan rápido
como el viento y parecía todavía llevar un atuendo formal.
Luego, la puerta de la prisión se abrió de par en par y una fragancia
especial de palacio penetró en la nariz de Gu Yun, teñida con la fragancia
especial de sándalo en el cuerpo de Li Feng.
Gu Yun entrecerró los ojos y reconoció que el hombre alto era Zhu
Little Feet.
Si iba a ser interrogado, no había absolutamente ninguna razón para
enviar a Zhu Little Feet directamente. El tipo de personas como Li Feng
tampoco se abofetearía en absoluto como tal: arrestado y luego liberado,
liberado y luego arrestado, por lo que esto solo podría significar una cosa
...
La sonrisa en el rostro de Gu Yun desapareció, pensó para sí mismo:
"¿Qué ha pasado?"
Jiang Chong dijo algo rápidamente, Gu Yun no pudo escucharlo en
absoluto. Solo pudo captar unas pocas palabras; 'Ataque enemigo ... Zhao
...'. Al no comprender nada, no tuvo más remedio que fingir ciegamente
estar firme mientras una montaña colapsaba. Permaneciendo sin cambios,
asintió.
Jiang Chong se vio afectado por su calma inamovible, por un momento,
también pudo sentirse muy estable. Su ansiedad, que a veces era caliente,
a veces fría, cayó en su abdomen, sus lágrimas casi cayeron. "De hecho,
es una bendición para toda la gente que haya pilares como el Marqués en
Great Liang".
Gu Yun estaba desconcertado, pensando para sí mismo: "Mi madre, ¿qué
está diciendo de nuevo?"
En la superficie, solo le dio una palmada en el hombro al Maestro Jiang
y dijo: "Dirige el camino".
Afortunadamente, Huo Dan dio un paso adelante y le entregó el
atuendo formal, luego bajó la botella de vino de su cintura: “Su Alteza me
pidió que trajera esto para que el Marqués disipara el frío”.
Gu Yun abrió la tapa e instantáneamente pudo decir por el olor que era
medicina. Inmediatamente se sintió aliviado como si le hubieran dado una
amnistía y se lo bebió todo de una vez.
Huo Dan lo ayudó a cambiarse de ropa. Para bien o para mal, esto estaba
mucho más ordenado y ordenado. El marqués cegado no tuvo más remedio
que ir con el grupo al palacio. Por primera vez, esperaba con gran interés
el rápido efecto de la medicina.
No fue hasta que llegaron al fondo de la pared del palacio que los oídos
de Gu Yun se sintieron como si estuvieran siendo pinchados con agujas y
se recuperaron lentamente.
Hizo un gesto silencioso hacia Huo Dan. Huo Dan entendió al
instante. Se acercó a su oído y repitió las palabras exactas de Jiang
Chong desde la mazmorra.
Gu Yun no había escuchado todo, pero su cabeza, que le dolía lo
suficiente como para romperse, ya se había roto como la cuerda de un
arco apretada. Frente a sus ojos había miles de estrellas, sus pasos se
tambalearon en estado de pánico. Huo Dan rápidamente tomó su brazo:
"¡Mariscal!"
Jiang Chong estaba asustado. No sabía qué le sucedió al Marqués del
Orden, que en ese momento seguía tan tranquilo como siempre, al ver que
la tez de Gu Yun era tan desagradable como la de un hombre muerto,
preguntó con nerviosismo: "Marqués, señor, ¿qué pasa?"
"El Campamento Hierro Negro resultó dañado en más de la mitad.", "Las
principales puertas consecutivas de la Frontera Norte fueron
derrotadas.", "El general Zhao se había sacrificado por el país". y 'El
almacenamiento de suministros del suroeste fue bombardeado
fuertemente' ... estas pocas oraciones se convirtieron en un grupo de
cuchillas mortales y se extendieron en espiral hacia todas las
extremidades y el cuerpo de Gu Yun, su pecho palpitaba de dolor, una
bocanada de líquido agrio subió por su garganta.
Se veían venas azules en su sien, sudor frío goteaba, aunque Jiang
Chong sabía que incluso en prisión, nadie se atrevería a torturar al
Marqués, todavía estaba asustado: “¿Qué pasa? ¿Necesitas que te pida un
carruaje? ¿Dónde está el doctor?"
El cuerpo de Gu Yun se sacudió ligeramente.
Jiang Chong: "¡Ahora mismo la seguridad de todo el Gran Liang está
en el hombro del Marqués, debes ser fuerte!"
Esta frase golpeó el oído de Gu Yun como si fueran un trueno. Su alma
que estaba despedazada por todo el país se reunió nuevamente dentro de
su columna vertebral, cerró los ojos y se obligó a tragar un bocado de
sangre.
Después de una pausa, bajo la intensa mirada llena de miedo y
trepidación de Jiang Chong, se rió con voz ronca como si nada hubiera
pasado. “No he visto el sol en unos días, me duele un poco la cabeza, no es
nada, solo un viejo problema”.
Con eso, Gu Yun bajó la cabeza y ajustó ligeramente su armadura
ligera. Sacó su brazo de la mano de Huo Dan, arrojó el ratón de pelo gris
que había estado en su mano y le dijo: “Este es mi hermano ratón. Búscale
algo de comer. No dejes que se muera de hambre ".
Huo Dan: "..."
Cuando Gu Yun terminó, se dio la vuelta y entró al palacio.
En este momento, en el Salón Jin Luan, las pocas palabras de Chang
Geng habían llevado a una caótica batalla de palabras hasta que Zhu Little
Feet levantó la voz para anunciar: "El Marqués había entrado en el palacio
para saludar al Emperador" que todos se callaron instantáneamente. Por
un momento, el salón principal quedó sumido en un silencio sepulcral.
Gu Yun captó los ojos de Chang Geng tan pronto como levantó la
cabeza. En el instante en que sus miradas se encontraron, ya podía ver
en los ojos de Chang Geng la furiosa tormenta que mil palabras no podrían
describir ni siquiera una de ellas.
Como si no hubiera nadie más a su alrededor, Gu Yun dio un paso
adelante para prestar atención, pareciendo tan casual como si no llegara
de la prisión sino que acabara de tomar una siesta en su casa.
Li Feng anunció de inmediato que la corte destituiría y expulsó a los
ruidosos y al grupo que no sirve para nada, manteniendo solo a Gu Yun,
Chang Geng y un grupo de generales para discutir el ajuste para la
defensa de la capital durante toda la noche.
El maestro Feng Han, que estaba reflexionando sobre sus acciones a
puerta cerrada, no podía permitirse el lujo de no mostrarse. Ling Shu
Inst.i.tute estaba en llamas con luces, trabajando horas extras para
mantener el equipo de guerra que habían dejado en la capital.
Todo el día y toda la noche, hasta que pasó otro cuarto período de la
guardia nocturna *, el horizonte se tiñó de blanco, solo entonces Li Feng,
que tenía profundos círculos negros debajo de los ojos, los dejó
regresar.
* De 1:00 AM a 3:00 AM
Antes de irse, Li Feng llamó a Gu Yun solo.
En el pasillo, todos los sirvientes de la izquierda y la derecha fueron
despedidos. Solo un gobernante y un sujeto se enfrentaron. Li Feng
permaneció en silencio durante mucho tiempo, hasta que la lámpara del
palacio sintió la luz del sol y la distinguió automáticamente con un clic, Li
Feng volvió a sus sentidos, miró a Gu Yun con una expresión complicada,
dijo vagamente: "... el tío ha tenido soportar la injusticia ".
Gu Yun ya tenía la cabeza llena de palabras vacías y corteses, incluso
sin pensarlo, podían soltarlas con facilidad.
Mentiras como 'Tormenta o lluvia, son todas gracia del Gobernante' y
'Para poder sacrificarse por el país, no habría quejas' se han alineado en
una fila, estrechamente unidas bajo su boca flexible.
De repente, sin embargo, su lengua parecía haberse endurecido. No
importa cuánto lo intentó, no salieron palabras. Solo pudo levantar los
labios en una sonrisa hacia el emperador Long An.
Era indescriptiblemente rígido y algo antinatural.
Durante mucho tiempo, los dos realmente no tuvieron nada que decir. Li
Feng suspiró y agitó la mano.
Gu Yun bajó los ojos y se volvió para irse.
Capítulo 59: Batalla frontal
____
... morir por este país de origen.
____
Cuando Gu Yun salió del pasillo, sus ojos estaban ligeramente
aturdidos. Se quedó quieto y jadeó durante algunas respiraciones. Por
primera vez en su vida, sintió que la Armadura Ligera de diez kilogramos
era así de pesada para su cuerpo.
En situaciones críticas, la fuerza de una persona quizás podría
volverse infinita. Soportando el dolor de cabeza que era difícil de
soportar incluso con acupuntura y una cama adecuada, ocupado durante
todo un día y una noche, antes de que pudiera sentir algo, ya había pasado.
Justo ahora todavía había un rayo de sol en el cielo, pero ahora fueron
rápidamente cubiertos por nubes oscuras en un abrir y cerrar de ojos. La
luz de la mañana se había desvanecido.
Chang Geng lo esperaba en la puerta, de espaldas al salón dorado con
muchas capas que se asemejaban a un palacio de hadas, los abrigos del
atuendo formal de Yan Bei wang flotando en el viento. Estaba mirando la
dirección de la torre Qi Yuan desde lejos, no había forma de saber lo que
estaba pensando.
Al escuchar pasos, Chang Geng se dio la vuelta. Mientras miraba el
rostro de Gu Yun, frunció el ceño y dijo: “El carruaje está esperando
afuera. Deberías descansar un poco ".
Gu Yun ya estaba demasiado agotado, solo hizo un sonido en respuesta.
Chang Geng: "¿De qué te retuvo esa persona para hablar?"
Gu Yun respondió con indiferencia: "Tonterías ... palabras
innecesarias".
Temprano en la mañana, se enviaron innumerables pedidos y las seis
sucursales locales tuvieron que hacer lo mismo. Todos sabían que este
podría ser el único tiempo que quedaba para adaptarse y descansar.
Tan pronto como Gu Yun entró en la habitación, sus rodillas
instantáneamente se volvieron suaves, se tambaleó y cayó sobre la cama.
La armadura de su cuerpo aún no se había descargado, colapsando con
un fuerte golpe. La mitad de su cuerpo se sentía entumecido, el techo
daba vueltas frente a sus ojos. Gu Yun tenía la ilusión de que nunca podría
volver a levantarse.
Chang Geng se tomó el pulso con la mano, y las manos generalmente
frías de ambos lados estaban terriblemente calientes como si las acabara
de sacar de un brasero: "Yifu, ¿cuándo empezaste a tener fiebre, lo
sabías?"
Gu Yun gimió suavemente, el agotamiento se filtraba por las grietas
de sus huesos, sus párpados estaban demasiado pesados para permanecer
abiertos. Luchó para preguntar: "¿Mi hermanito ratón todavía está vivo?"
Chang Geng: "... ¿Quién?"
Huo Dan lo siguió apresuradamente, sacando el ratoncito gris del
interior de su pecho, la criatura se retorcía feliz: "Mariscal, está vivo y
bien".
"Entonces yo también estoy bien", murmuró Gu Yun, apoyándose en su
codo para trepar por su cuenta, dejando que algunas personas lo rodearan
para quitarle las armaduras. Sintiéndose un poco más cómodo, se apartó
descuidadamente el pelo empapado en sudor que se le pegaba a la cara: "Si
era un resfriado o tenía fiebre, pasará después de tomar el medicamento
y sudar".
Huo Dan no conocía toda la historia, de pie a un lado preguntándose
por qué su marqués había decidido vivir y morir junto con un ratón
canoso. Pero Chang Geng lo entendió, sus ojos brillaban. Presionó a Gu Yun
sobre la cama, sin dejar que se moviera: "Déjamelo todo a mí".
Para cualquiera que no entendiera, alimentó y guardó el ratón como
medida de precaución.
en caso de que alguien lo envenenara mientras estaba en prisión.
Hizo un gesto para que Huo Dan bajara primero y comenzó a quitarle
la ropa a Gu Yun que estaba lo suficientemente mojada como para escurrir
el agua. El cuerpo de Gu Yun era suave y se sentiría mareado tan pronto
como abriera los ojos. No tuvo más remedio que cerrar los ojos e inclinarse
a un lado, dejándolo hacer lo que sea. Su respiración era un poco errática,
haciéndolo parecer algo débil.
La mano de Chang Geng tembló tan pronto como le quitaron la ropa
exterior y del medio.
La delgada ropa interior de Gu Yun ya estaba empapada de sudor,
asemejándose a una capa de piel de ajo. Nada se puede ocultar. Su pecho
y cintura que deberían haber estado cubiertos se volvieron aún más
expuestos. De alguna manera, Chang Geng sintió que esto era incluso más
fatal que la última vez cuando Gu Yun saltó directamente a las aguas
termales frente a él.
El corazón de Chang Geng latió como un trueno por un momento. Ya no
se atrevió a quitarse nada. Tiró de una colcha y la envolvió alrededor de
Gu Yun, sacando un conjunto de ropa limpia y colocándola junto a
él. Susurró con un tono suplicante: "Yifu, ¿te importaría cambiar el resto
por ti mismo?"
Gu Yun no se enfermaba a menudo después de convertirse en adulto,
pero de vez en cuando, siempre parecía ser especialmente
grave. Emitiendo humo por sus siete orificios, sus oídos zumbaban. Hizo un
gesto impotente con la mano hacia Chang Geng, quejándose: “¿Cuándo es
ya? De verdad…"
Chang Geng se hizo a un lado, desviando la mirada. Su vergüenza hizo
que Gu Yun se sintiera incómodo. Se quedaron en silencio por un momento,
Chang Geng luego dijo con torpeza: "Iré a prepararte la medicina".
Se dio la vuelta y se fue, finalmente dando a ambos hombres un poco
de alivio.
Después de que Gu Yun se acostó por un tiempo, sus pensamientos se
agitaron rápidamente por la fiebre alta en una olla de gachas, todo se
vertió en la mezcla. Por un lado, pensó: "¿Qué diablos debo hacer con este
chico Chang Geng?"
Por otro lado, pensó, "El Campamento Hierro Negro se retiró a la
Puerta Jiayu, los hermanos que habían perdido la vida no tienen a nadie allí
para recoger sus cuerpos, incluso si solo estuvieran envueltos en una
pieza de cuero de caballo".
Después de un rato de pensar, su corazón parecía tener un
agujero. Cada viento miserable y lluvia amarga lo perforaba. El dolor que
fue reprimido por las palabras de Jiang Chong en su camino regresó y se
volvió mucho peor, haciéndolo doloroso hasta el punto de no querer vivir
más.
La mitad de las 50.000 armaduras de hierro se perdió de la noche a la
mañana.
Finalmente, la conciencia de Gu Yun se volvió borrosa gradualmente. En
lugar de quedarse dormido, de hecho, se podría decir que se había
desmayado, cayendo en la inconsciencia y luego recuperando el
conocimiento alternativamente. Muchas cosas del pasado y del presente
se convirtieron en un desastre, cayendo sobre él, viejos recuerdos que
parecían sombras flotantes pasando.
Recordó sus años de infancia, cuando no era ni sordo ni ciego, cuando
era como una pulga a la que nunca se podía acostar por mucho que fuera
disciplinado, y el Viejo Marqués siempre lo miraba con enojo cuando lo veía.
Sin embargo, en una rara ocasión, el Viejo Marqués lo había llevado
pacientemente a ver la puesta de sol fuera de la fortaleza.
El Viejo Marqués era alto y digno, incluso con un niño tan grande como
un moño, todavía lo trataba con igualdad. Se negó a cargarlo y solo lo
condujo tomándolo de la mano; viniendo del Viejo Marqués, esto ya podría
considerarse una rara muestra de afecto. De esta forma, el adulto tuvo
que inclinarse, el niño tuvo que estirar el brazo, nadie podía estar cómodo.
Sin embargo, Gu Yun no se quejó. Fue la primera vez que vio la puesta
de sol color sangre en el desierto de la ciudad fronteriza. La figura de
un Águila Negra pasaba volando de vez en cuando, como un cuervo dorado
arrastrando un arco iris blanco, por todas partes había la vasta arena
amarilla, el bosque plano y el desierto, el joven Gu Yun estaba casi
conmocionado.
Vieron cómo el inmenso sol rojo se hundía en el suelo. Gu Yun puede
escuchar al Viejo Marqués expresándose hacia el general adjunto a su
lado: "Para un general, poder morir por el país de origen, sería una gran
suerte".
No entendió en ese momento, pero ahora, han pasado veinte años.
"Mariscal", pensó Gu Yun: "Quizás yo ... realmente muera por este país
de origen".
… Como un potrillo en un hueco, fuego en una piedra, un cuerpo en un
sueño.
En este momento, alguien empujó la puerta, levantó a Gu Yun y le dio
de comer un cuenco de agua. La otra persona realmente era
increíblemente gentil, como si estuviera acostumbrado a cuidar a otras
personas, sin dejar que ni una sola gota se derramara.
Luego bajó la voz y persuadió al oído de Gu Yun: "Zi Xi, bebe la medicina
y luego vuelve a dormir".
Gu Yun no abrió los ojos, respondiendo vagamente: "Media hora ...
despiértame media hora después, si no puedo levantarme, échame un
cuenco de agua fría".
Chang Geng suspiró, lo alimentó en silencio con la medicina y luego lo
cuidó a su lado.
Gu Yun parecía estar incómodo, dando vueltas y girando, la colcha casi
fue pateada por él. Chang Geng trató de cubrirlo varias veces, luego, al
final, simplemente lo envolvió y lo sostuvo en sus brazos.
Fue extraño. Quizás debido a que Gu Yun nunca estuvo particularmente
cerca de nadie desde la infancia, ahora mismo, cuando podía sentirse
apoyado contra alguien detrás de él, instantáneamente se quedó
quieto. La persona que lo sostenía lo ajustó con cuidado a la postura más
cómoda. El tranquilizante de la señorita Chen llenó cada respiración, una
mano rozó su frente, los dedos presionando la parte posterior de su
cuello, su hombro y la frente repetidamente con suficiente fuerza, ni
demasiado fuerte ni demasiado ligera.
Gu Yun no había dormido en una 'cama' tan cómoda en su vida. En un
abrir y cerrar de ojos, ya no podía decir qué noche era.
El tiempo de paz fluyó tan rápido como el agua corriente. Rápidamente
pasó media hora.
Chang Geng miró el reloj junto a él y se mostró muy reacio. No tuvo el
corazón para dejarlo ir, ni para despertarlo.
Pero no quedaba otra opción. El desastre de la guerra era
inminente. Echando una mirada a este mundo entero, ¿dónde más podría
poder tener un sueño tranquilo?
Chang Geng hizo todo lo posible por esforzarse y tocar a Gu Yun en
su punto de acupuntura, despertándolo a tiempo y fue a la cocina solo.
El corazón de Gu Yun estaba continuamente tenso, con un tazón de
medicina y un cuerpo lleno de sudor, la enfermedad había sido
rechazada. Después de media hora de descanso, cuando volvió a
despertar, la fiebre casi había desaparecido. Se quedó en la cama un rato
y luego se vistió, sintiendo que había vuelto a la vida.
Su cuerpo se sentía mejor, su corazón también se había relajado mucho
más.
Gu Yun pensó: “¿No son solo un grupo de extranjeros? Si son tan
extraordinarios, ¿por qué deben hacer trucos tortuosos? "
Incluso si fuera peor, mientras él todavía estuviera vivo, mientras a
la familia Gu todavía le quedara alguien, el Campamento Hierro Negro aún
no podía contarse como destruido por completo.
Gu Yun dejó escapar una larga exhalación. Solo ahora se dio cuenta de
que se estaba muriendo de hambre. Se presionó el estómago y pensó
dolorosamente: "Quien me dé dos panqueques calientes en este momento,
me casaré * con esa persona de inmediato".
* El término usado aquí fue
"Llevar a alguien a casa como esposa",
ya que hay otro termino
para que una esposa esté "casada"
la casa de otra persona.
Justo mientras pensaba esto, Chang Geng entró con un plato de sopa
de fideos caliente. El vapor caliente y la deliciosa fragancia se
precipitaron sin dudarlo. Los órganos de Gu Yun habían muerto de hambre
hasta el punto de retorcerse.
Se tragó sus propias palabras: "A excepción de esta persona, esta no
cuenta ..."
Inesperadamente, tan pronto como comenzó este pensamiento, hubo
un repentino rugido de trueno afuera.
Gu Yun: "..."
Chang Geng se llevó la mano a la frente para comprobar su
temperatura y dijo: "Tu fiebre había bajado, yifu ven a comer algo primero".
Gu Yun tomó los palillos en silencio, cuando escuchó la palabra 'yifu',
pudo sentir vagamente que algo era extraño. Desafortunadamente, esta
idea pasó rápidamente, no fue capaz de captarla.
Gu Yun: "¿Cocinaste esto?"
"Si tienes prisa, solo hay tiempo para hacer un plato de fideos". Chang
Geng respondió con su expresión inmutable. "¿Esta bien?"
Gu Yun se sentía incómodo por todas partes, no entendía lo que
estaba haciendo Yan Bei wang, volviéndose tan virtuoso *.
* La palabra usada aquí fue un término
usado para describir mujeres o esposas
que son expertos en asuntos domésticos
como cocinar, coser, etc.
Chang Geng parecía saber lo que estaba pensando, dijo con calma: “Si
el país estaba perdido, empuja a Li Feng a un lado. Puedo abrir una tienda
de fideos en el noroeste, será suficiente para ganarme la vida ".
Gu Yun se ahogó con un bocado de caldo de fideos, tosiendo al infierno
y de regreso.
Chang Geng se rió y dijo: "Solo estaba bromeando".
Gu Yun tomó la taza de té de hierbas frío y se lo bebió: "Buen chico,
sabiendo cómo usarme para entretenerme, realmente está cada vez peor".
Chang Geng dijo con una expresión seria: "Cuando de repente quieres
traerme de regreso a la capital desde la ciudad de Yanhui ese año, había
querido correr, había pensado en ser un cazador en las montañas
profundas o en abrir una tienda insignificante. en una pequeña zona
fronteriza para ganarse la vida lo suficiente como para pasar el día. Pero
más tarde, cuando sentí que era poco probable que pudiera alejarme de
tus ojos, instantáneamente me volví obediente ".
Gu Yun apartó las verduras, eligió el cerdo ahumado debajo del tazón
y se los comió todos. Antes de que pudiera masticarlo completamente,
Chang Geng de repente se reclinó en la silla y habló con un largo suspiro
de alivio, "Yifu, no lo sabes, siempre y cuando no aparezcas frente a mí
sano y salvo por un rato. día, no me atreveré a cerrar los ojos para
descansar un día, y finalmente… ”
Gu Yun dijo a la ligera: "Todavía estoy a ciento ochenta mil millas de
salvo y sano, cuéntame todo".
Chang Geng entendió que se estaba refiriendo a cosas de las que no
había hablado frente a Li Feng.
Gu Yun: “El Campamento Hierro Negro debe haber sido retirado por
ti. De lo contrario, He Rong Hui habría luchado hasta el último hombre ".
"Imité tu letra". Chang Geng dijo: “Lleva el Campamento Hierro Negro
de regreso a la Puerta Jiayu y deja que el General Cai vaya al norte para
ayudar a la frontera. Calculando el tiempo, el general ya debe haber
recibido el suministro de emergencia de Ziliujin. Li Feng no necesita saber
esto, tenía la intención de abolir la Orden de Tambores de todos modos ".
Gu Yun parpadeó: "Tú imitaste ..."
"Son todos trucos solapados". Chang Geng negó con la cabeza. “Le
había enviado una carta a Shifu en el sur de Jiangnan, pero aún era
demasiado tarde. Además, sospechaba que había espías dejados por los
bárbaros hace veinte años en el palacio, ya le pedí a alguien que investigara
y todavía no había noticias del general Shen, me temo que no habría buenas
noticias.
"No tener noticias es la mejor noticia", dijo Gu Yun después de un
momento de silencio. "Esa solterona tiene una gran fortuna, no morirá".
Chang Geng: “Yifu, los enemigos del lado noroeste vienen ferozmente,
pero ahora parece que no habrá nada malo por un tiempo. Según usted,
después del desastre del Mar del Este, ¿podremos defender la capital?
Gu Yun lo miró. Sus ojos eran como un par de pedernales: eran fríos,
duros e indescriptibles, pareciendo como si pudieran encenderse en
innumerables chispas con solo un toque.
Solo estaban él y Chang Geng en la habitación, separados por un plato
de fideos. Gu Yun no dijo palabras vacías y dijo con franqueza: “Depende
de si podemos mantenernos hasta que lleguen los refuerzos. Viniendo
desde mil millas de distancia para lanzar un ataque sorpresa, los
extranjeros también deben querer una victoria rápida, de lo contrario, no
harán una gran apertura. Cuanto más se prolongue, más ventajoso sería
para nosotros, pero ... "
Pero los recursos del Gran Liang no pueden sostener una guerra
prolongada.
La razón por la que Li Feng se volvió loco y quería desesperadamente
poseer la mina Ziliujin en Lou Lan fue porque en este lugar con la mayor
abundancia de riqueza en el mundo, había muy pocas minas Ziliujin. El
suministro fue insuficiente para la necesidad. Casi el 40 por ciento de los
Ziliujin en Gran Liang provino del tributo de las Dieciocho Tribus, otra
gran parte se compró de diversas fuentes externas. El dinero que
entraba por el comercio marítimo volvió a salir de todos modos.
En la actualidad, las Dieciocho Tribus se habían rebelado, estaban
sitiadas desde todas las direcciones. La única fuente que quedaba por
movilizar era de su propia población. A la larga, inevitablemente no podrían
llegar a fin de mes.
Este era solo el asunto de Ziliujin, y mucho menos el tesoro que era
aún más frágil que una flor silvestre, ¿dónde podrían encontrar tanto
dinero?
Gu Yun: “Tal como dijiste, en caso de que al final no funcione,
reduciremos nuestras fuerzas y poco a poco elaboraremos un plan. Esa es
la solución más racional. Pero puede que no resulte como queremos ".
“Estuvo bien que el Campamento Hierro Negro se retirara a la puerta
Jiayu. Aunque suele haber mucho movimiento fuera de la puerta, la mayoría
de las personas son comerciantes que se establecen temporalmente. La
Ruta de la Seda acaba de abrirse hace varios años, no les bastaba con
quedarse de forma permanente, además, la situación allí se ha tensado
cerca de fin de año, una vez que se cierra el paso, no se puede hacer
ningún negocio. hecho. Se estima que ya se han ido todos ”.
“Pero no es posible dentro de la puerta. Hay miles de aldeas y cientos
de millones de civiles aún dentro. Incluso si He Rong Hui muriera, no puede
retirarse más ".
El Campamento de Hierro Negro era la creencia de la gente e incluso el
pilar del Gran Liang. Una vez que este pilar se derrumbó, ya no hubo
necesidad de luchar. Fue más rápido para la nación cambiar su nombre
directamente.
Chang Geng guardó silencio durante un largo momento. "Lo que dije
fue un último recurso".
"Sin último recurso". Gu Yun negó con la cabeza. “Tienes talentos. Sabe
cómo administrar el país, pero nunca ha luchado en una guerra. Aparte de
las condiciones climáticas y geográficas favorables, hay dos puntos más:
uno es el equipo de armaduras y máquinas de acero, el otro es el coraje
del corazón humano ”.
“En cuanto al equipamiento, ya ha llegado a esto, no hay otra opción…
pero yo creo que para los extranjeros, aunque sean fuertes, no son
mucho mejores que nosotros, y mucho menos esos bumkins bárbaros del
país. Incluso si alguien les entregara un explosivo, lo usarían como un palo
".
“Los subordinados no son piezas de ajedrez, todos son seres
humanos, pueden ser valientes, pero no hay nadie que no le tema a la
muerte. ¿Recuerdas lo que te dije la última vez que reprimimos a los
bandidos en el suroeste?
Chang Geng: “Lo hago. En el campo de batalla, quien no quiera morir,
morirá primero '”.
Gu Yun hizo un sonido de 'Mm'. Incluso cuando el país estaba en peligro,
todavía no podía retrasar su comida. En pocas palabras, un cuenco de
fideos se había comido hasta el fondo. Finalmente se pellizcó la nariz,
bebiendo el resto de los malditos vegetales verdes mezclados en el
caldo. Tampoco se molestó en masticar y puso el cuenco sobre la mesa:
"¿Hay más?"
“No, solo tengo suficiente para hacer un cuenco. Te acabas de
recuperar de una enfermedad. El bazo y el estómago aún están débiles. Es
mejor estar solo parcialmente lleno ". Dijo Chang Geng. “Cómo pelear, tú
tienes la última palabra. No hay necesidad de que te preocupes por el
futuro, no tienes que preocuparte por lo que los demás puedan pensar,
cómo ganar dinero, cómo encontrar a Ziliujin, cómo administrar el diseño,
puedes dejarme todos estos asuntos a mí ".
Gu Yun estaba un poco sorprendido. Él se rió y dijo: “¿Tengo la última
palabra en todo? ¿Y si no puedo ganar?
Chang Geng se rió pero no dijo más. Sus ojos estaban fijos en él,
asemejándose a un charco de agua tranquila que de repente comenzó a
ondular. Si sus ojos pudieran hablar, entonces las palabras: “Si pierdes, te
acompañaré a llevar la desgracia durante miles de años. Si mueres, te
seguiré hasta la tumba ". fueron expresados claramente.
En ese momento, Huo Dan de repente llamó a la puerta ligeramente:
"Mariscal, el Maestro Feng Han había venido con el General Tan, también
trajeron el informe de batalla del Mar del Este".
Gu Yun dijo rápidamente: "¡Por favor, entra!"
Chang Geng retractó su mirada y arregló sus palillos. Mientras
inclinaba la cabeza, de repente dijo: "Justo ahora, una de mis frases era
una mentira".
Gu Yun estaba atónito.
“Dije ese año, la razón por la que no me fui fue porque no pude escapar
de tus ojos”. Chang Geng se rió, sin levantar la cabeza, "Ese año, yo era
solo un niño de la frontera que creció en un lugar pequeño, generalmente
no podía pensar tanto ..."
Gu Yun estaba muy consciente de sus implicaciones, "Chang Geng, no
digas nada más".
Chang Geng cerró la boca obedientemente, tragando sus siguientes
palabras.
En ese momento, no podía pensar tanto. La razón por la que no escapó,
al final, fue porque no pudo soltar a una persona.
Tan Hong Fei y Zhang Feng Han entraron muy rápidamente. Cuando se
le presentó a Gu Yun el informe de batalla del Mar Oriental, la mano de Tan
Hong Fei todavía temblaba ligeramente. El corazón de Gu Yun se hundió.
“Mariscal, el lado de Jiangnan había venido a informar, nuestra armada
en mil millas se había derrumbado. Los occidentales se han ido al norte, no
se sabía qué tipo de dragones estaban usando, se mueven tan rápido como
un rayo, chocando con dos o tres de nuestros barcos de la armada, incluso
dando vueltas alrededor de un gran monstruo marino en el medio ". Tan
Hong Fei dijo: "Si esta es la verdad, entonces irán al norte hasta el puerto
de Da Gu, ¡solo tardarán unos dos o tres días más en llegar!"
Capítulo 60: Fuego de artillería
____
Sin la orden del comandante, el Campamento Hierro Negro no se atrevió
a retroceder ni un paso.
____
Chang Geng se hizo cargo del informe, Gu Yun preguntó: "¿Cuántas
tropas navales quedan en Jiangnan?"
"Es difícil de decir", Chang Geng barrió rápidamente. “Nuestros
Dragones nunca habían cruzado el mar, y mucho menos lucharon en el
mar. La muerte de Zhao You Fang los había sumido en el pánico, la gente
huía en todas direcciones. Yifu, ¿recuerdas cuando Wei wang se amotinó?
"
Gu Yun se pellizcó el puente de la nariz, entendiendo lo que quería
decir.
Ese año, Wei Wang compró al comandante de la Armada de Jiangnan y
la mitad de la fuerza naval. Inesperadamente, Gu Yun y Lin Yuan Pavilion
se habían unido para agitarlo antes de que estuviera listo.
'Esfuerzos conjuntos de Gu Yun y Lin Yuan Pavilion', de hecho, ese año
al lado de Gu Yun había algunas Águilas Negras y niños pequeños, Lin Yuan
Pavilion era solo una organización compuesta por treinta personas del
mundo pugilista, incluido el inútil Liao Ran que podía ponerse una armadura
pesada pero no podía quitársela.
Gu Yun tuvo una gran influencia en el ejército por su prestigio a lo
largo de los años. Su repentina aparición que había asustado a los rebeldes
culpables fue una de las razones, pero esto también demostró que la
Armada del Gran Liang era de hecho una pierna lisiada.
Incluso una rebelión no podría llevarse a cabo correctamente.
Si esto hubiera sucedido bajo el reinado del emperador Yuan He, Gu Yun
podría haber tenido la oportunidad de intervenir en la Armada tal como lo
hizo al rectificar las fuerzas de defensa de la ciudad en la Frontera
Norte. Desafortunadamente, Li Feng no era del tipo bondadoso similar al
emperador Yuan He y fue indeciso al matar a algunas personas. Ese tipo
de cosas nunca podría suceder en los años de Long An.
Gu Yun: “¿Qué pasa con Yao Chong Ze? ¿También estaba muerto?
Chang Geng: "No se mencionó, hay demasiadas víctimas".
Gu Yun suspiró, "¿Y qué es un 'monstruo marino'?"
Chang Geng: “Se dice que se parece a un pulpo grande y puede acechar
bajo el agua. Es como una montaña cuando sale de la superficie, cubriendo
el cielo. Comparado con él, el cometa gigante es similar a una paloma que
aterriza en el hombro de un guerrero. Tiene numerosas garras de hierro
en su cuerpo, conectadas a miles de pequeños dragones marinos, y cuando
la parte superior se abre, puede liberar grandes grupos de armaduras de
águila ... "
Cuando Chang Geng dijo esto, hizo una pequeña pausa, sus delgados
dedos frotaban ligeramente el informe: "Si tal cosa existe, se requieren
al menos cuatrocientos o quinientos kilogramos de Ziliujin diariamente".
Gu Yun lo miró, Chang Geng negó levemente con la cabeza, no dijo
más. La segunda mitad de la oración estaba oculta: los occidentales
pagaron un precio tan alto que me temo que no vinieron a pelear una guerra
prolongada con nosotros.
"Habiendo tratado con la armada en Jiangnan, no hay preocupaciones
en el mar, Da Gu Port Navy no es su oponente, el siguiente paso es
presionar directamente a la capital", Gu Yun bajó el mapa en la pared " Viejo
Tan, ¿cuántas tropas se pueden desplegar en la capital?
Tan Hong Fei se humedeció los labios secos y agrietados: “Hay dos mil
armaduras pesadas en el campamento del norte, 16.000 caballería ligera y
dos mil carros y caballos. Hay ochenta carros en total con tres pares de
baihong en cada uno de ellos, cada uno con una artillería corta y larga en
la cabeza y la cola ".
Estas escasas fuerzas solo fueron suficientes para obligar al
Emperador a abdicar, chocar con el occidental usando todo lo que han
acumulado y planeado durante muchos años fue como una pizca de sal en
un océano, Gu Yun frunció el ceño: " ¿Qué pasa con el Ejército Imperial?
“El Ejército Imperial no es bueno. Hay menos de 6.000 personas en
total. Más de la mitad de ellos son del tipo joven maestro con solo
apariencia, nunca han visto sangre ". Tan Hong Fei se detuvo por un
momento y de repente recordó algo. Sacó un objeto de su pecho, lo
sostuvo solemnemente con ambas manos y se lo dio a Gu Yun. "Así es, el
Emperador me había pedido que le trajera esto al Mariscal".
La cosa estaba envuelta en fina seda de palacio, uno originalmente
asumiría que era algún tipo de joyería preciosa, solo para encontrar un
emblema del Tigre de Hierro Negro de aspecto feroz en el interior.
Gu Yun lo miró y luego levantó los labios en una sonrisa sin gracia. “¿De
qué me serviría devolverme esto ahora? La flor ya se había marchitado ".
Tan Hong Fei no supo qué decir.
Gu Yun le arrojó casualmente el Emblema del Tigre Negro a Tan Hong
Fei: “Muy bien, ya que el Emperador ha tomado una decisión, puedes ir a
escribir las órdenes de acuerdo con sus deseos. Convocar a las
guarniciones locales en Zhili, provincia de Shandong para que regresen en
defensa, ayudar a las dificultades en la capital, dejar que Cai Fen divida
su fuerza para liderar el refuerzo ... Bueno, solo convocalos por ahora, si
no vienen, entonces pensaremos en algo más tarde ".
Tan Hong Fei: "..."
Por otro lado, Zhang Feng Han a su lado ya era anciano y frágil, no
podía ser tan insensible como estos animales en la misma mesa. Había
estado asustado desde el principio hasta ahora, cuando de repente
escuchó la implicación de Gu Yun, el Viejo Ling Shu se puso pálido de
inmediato, no pudo evitar preguntar: "¿Quiere decir Mariscal ... Es posible
que el ejército de Qin wang no esté capaz de llegar? "
Chang Geng respondió: “Si la información en el informe de batalla es
correcta, los occidentales no pueden llevar demasiados suministros con
ellos, tampoco pueden permitirse el lujo de luchar. Si quieren dar un golpe
fatal, proveniente de Jiangnan, deben dividir sus fuerzas en dos
formas. Avanzarán hacia la capital desde la ruta marítima, cortarán el
paso de la capital a los cuatro lados y nos asediarán ... Me temo que la
orden de convocatoria ya no podrá pasar al exterior. . "
El maestro Feng Han casi se desmaya en el acto, se cayó en la silla y
respiraba con dificultad.
Chang Geng no esperaba una reacción tan fuerte de
él. Inmediatamente sirvió una taza de agua y la llevó frente al Maestro
Feng Han. Hábilmente se palmeó varios puntos de acupuntura en la espalda
y dijo: “Por favor, mantén la calma. Las personas mayores deben tratar
de no estar demasiado alegres o demasiado tristes, de lo contrario,
fácilmente les conducirá a un derrame cerebral ... "
Zhang Feng Han tomó su mano y casi se echó a llorar: "Mi Alteza Real,
¿no sabe qué es la ansiedad?"
"Maestro Feng Han, tenga la seguridad de que aún no he terminado",
dijo rápidamente Chang Geng: "Cuando yifu fue encarcelado, temiendo que
pudiera haber cambios en la frontera, ya me había puesto en contacto con
algunos amigos".
Mientras decía esto, sacó un pájaro de madera de su manga.
“Este tipo de pájaro de madera necesita un tipo especial de imán para
marcar el camino, que se puede usar para comunicarse con otras personas
que sostienen imanes. Habían recibido mis cartas y ya deberían haber
partido hacia las guarniciones principales por separado, espero que lleguen
a tiempo ".
“Si la ciudad capital realmente cae bajo asedio, puedo usar pájaros de
madera para comunicarles esta información y dejar que difundan la noticia
en nuestro nombre. Con el Black Tiger Emblem y el sello privado de mi yifu,
debería ser suficiente para ganarme la confianza ".
Cuando Chang Geng se dio cuenta de que la larga comunicación entre
diferentes lugares retrasaría las noticias de la guerra, comenzó a hacer
uso del Pabellón Lin Yuan para establecer una red de comunicación masiva
lista para el futuro cercano.
Tan Hong Fei y Zhang Feng Han miraron a Chang Geng con la boca
abierta.
“Es solo un pequeño truco. Bajo tal urgencia, no puedo pensar en otra
manera ”, dijo Chang Geng,“ Se puede usar para emergencias en el
presente cuando aún es desconocido para el enemigo, pero no puede
continuar a largo plazo. Una vez que el enemigo se dé cuenta, ya no estará
seguro. Cualquier piedra pequeña puede derribarla fácilmente ".
Gu Yun no pudo describir cómo se sentía por un momento. Cuando
estaba en prisión, no era como si no estuviera preocupado por Chang
Geng. Pero en el presente, parecía que incluso si fue él mismo quien lo
logró en ese momento, no se podía decir con certeza que podría hacer un
mejor trabajo que Chang Geng.
No solo conservamos la mitad del Campamento Hierro Negro, sino que
también mantuvimos ese movimiento.
Si bien estaba agradecido y conmovido, también sintió que el
adolescente que solo cerraría los ojos y se retiraría frente al títere de
entrenamiento con espada ese año no debería haber crecido tan rápido,
todo esto se debió a que no lo cuidó bien. .
Pero frente a los forasteros, Gu Yun no pudo expresar ninguna
emoción, solo dijo a la ligera: "Su Alteza arregló todo muy bien".
"Vámonos, Viejo Tan, sígueme hasta el campamento del norte". Gu Yun
se quitó la botella de vino que colgaba detrás de la puerta y miró al cielo. Ni
siquiera llevaba su armadura. Cogió un abrigo y se alejó.
Chang Geng también se puso de pie: "Yifu, adelante primero, volveré a
Ling Shu Inst.i.tute con el Maestro Feng Han para calcular y escoltar el
suministro hasta ti".
La calidez temporal y el cuidado ambiguo habían desaparecido. Los dos
siguieron caminos separados, saliendo a toda prisa.
Gu Yun tenía razón al tomar solo un abrigo. A mitad de camino, el
trueno continuo en el horizonte de repente se transformó en un
relámpago tan brillante como la nieve, destellando en el aire, dividiéndose
en el cielo sombrío, una rara lluvia fuerte cayendo.
El agua caía con fuerza, el viento y la lluvia cubrían el camino.
Gu Yun y Tan Hong Fei se llevaron con ellos a un grupo de guardias y
se apresuraron a salir de la ciudad hacia el campamento del norte. Tan
Hong Fei estaba jadeando debido a la lluvia. Se limpió con fuerza las gotas
de su rostro, recordó que en la mansión cuando estaba solicitando una
audiencia, Huo Dan le había dicho que el Marqués estaba enfermo. No pudo
evitar llevar su caballo hacia Gu Yun y gritó: “La lluvia es demasiado
fuerte, Mariscal, todavía tiene un resfriado. Será mejor que busquemos
un lugar para escondernos y esperemos a que deje de llover ... "
Gu Yun gritó: "Mira la nube, quién sabe qué día o año se detendrá, ¡no
digas tonterías!"
Quizás esta fuerte lluvia llegó demasiado de repente y de la nada. Gu
Yun tenía un sentimiento ominoso en su corazón.
El Campamento de Hierro Negro fue llamado el "cuervo negro" por los
extranjeros. Como cabeza del cuervo negro, Gu Yun tiene una boca de
cuervo sin precedentes. Casi todos sus presentimientos se harían
realidad sin falta.
Gu Yun rápidamente se hizo cargo del caótico campamento del norte,
al mismo tiempo, Chang Geng había escoltado las armaduras y máquinas
que Ling Shu Inst.i.tute había acumulado mediante la protección de todo
lo que les quedaba. Entre ellos, había una serie de trajes Black Eagle y
Heavy Armors.
Tan Hong Fei estimó que los occidentales irían al norte en dos o tres
días; en realidad, había sido demasiado optimista.
Esa noche, en una torre de vigilancia en el puerto de Da Gu.
Frente al Qian Li Yan había dos cepillos a prueba de polvo del tamaño
de una palma, luchando por moverse hacia arriba y hacia abajo en vano. No
mucho después, el viento y la lluvia los derribaron.
El viejo soldado de la torre de guardia tuvo que sacar la mano por la
ventana y agarrar una manija oxidada cerca donde el camión de bomberos
había estado roto durante mucho tiempo, pero nadie lo había reparado, por
lo que tuvo que tirarlo manualmente.
Sacudió las gotas de lluvia en sus manos y giró fuertemente la manija,
los engranajes medio muertos que se habían agrietado y astillado hicieron
un sonido chirriante. Un paraguas de metal se levantó lentamente y se
desplegó, cubriendo el espejo frontal del Qian Li Yan en el viento miserable
y la lluvia amarga.
El viejo soldado limpió el vapor de agua en los vidrios del Qian Li Yan y
se quejó a sus compañeros: “Todos estamos sirviendo como soldados,
pero las otras personas pueden volar alto en el cielo, conquistando el
viento y las nubes, poderosas Como el infierno somos todo lo contrario,
todos los días en la torre, si no estaba barriendo el piso entonces estaba
jugando a las cartas. Es incluso más pacífico en comparación con los
monjes ".
“Ni siquiera podemos tener en nuestras manos algunos beneficios,
durante todo el día no hay nada que hacer, pero también tuvimos que pasar
tiempo aquí todo el año. Incluso las esposas ya se habrían olvidado de
nuestras caras… oye, qué extraño, ¿por qué está lloviendo tan
fuerte? ¿De dónde vino este enorme agravio?
Su compañero que estaba barriendo el piso ni siquiera levantó la
cabeza: “Será mejor que reces para que no pase nada, ¿no oíste? El
capitán dijo que los occidentales ya están a punto de llegar aquí, entonces
tendrás algo que hacer ".
“No escuches el galimatías del Capitán. ¿No siempre habla de cómo
llegarían los occidentales en unos días? El guardia dijo: "¿No está el
Marqués del Orden todavía haciendo guardia junto a la capital?"
“El marqués ha sido encarcelado”.
“Vaya, ¿no lo soltaron ya?…” Mientras el viejo soldado decía esto,
como si hubiera recordado algo, volvió a decir: “Sí, es muy extraño. ¿No
hay rumores sobre cómo el marqués llevó fuerzas a la capital para obligar
al emperador a abdicar? ¿Cómo pudo ser liberado tan rápido, quizás ... "
"Shh", su compañero de repente levantó la cabeza abruptamente. "¡Deja
de decir tonterías, escucha!"
Un "estruendo" parecido a un trueno vino débilmente del viento, la torre
de vigilancia pareció sentir algo y comenzó a temblar.
¿Trueno?
No, los truenos sonaron uno tras otro, ¿cómo podría continuar así
continuamente?
El viejo soldado corrió hacia el Qian Li Yan y rápidamente empujó la
lente hacia arriba. En el momento en que su mirada atravesó la oscura
cortina de lluvia, de repente vio una enorme sombra en el mar.
Un monstruo como éste no existe ni siquiera en las pesadillas, con sus
garras volando hacia el cielo, gruñendo fuerte y enojado y en voz baja.
El soldado pensó que había un problema con sus ojos, se los frotó con
fuerza y luego miró de nuevo, solo para descubrir que el "monstruo marino"
se movía como una sombra voladora. En un abrir y cerrar de ojos, no pudo
decir cuánto había avanzado, pero ya estaba lo suficientemente cerca
como para ver claramente desde Qian Li Yan.
Los Dragones del Mar Negro se abalanzaron ferozmente en la noche
oscura. Las banderas de batalla ondeaban al viento y la lluvia se asemejaba
a un faro ominoso, sus sombras cubrían el vasto océano.
"Ataque enemigo ..." El viejo soldado luchó por abrir la boca.
"¿Qué?"
El viejo soldado de repente se volvió y rugió: “¡Ataque
enemigo! ¡Vienen los occidentales, toca las campanas y toca el
tambor! ¿Para qué estás parado allí? Ve rápido ... "
El sonido de los tambores penetró a través de la tormenta, la luz de
la torre de vigilancia que originalmente giraba lentamente se aceleró
repentinamente y comenzó a girar salvajemente, uno alertando a diez,
diez alertando a cien. En unos pocos intervalos de respiración, todas las
torres de vigilancia del puerto de Da Gu habían hecho sonar sus tambores.
Lian Wei, el comandante de la Armada del Mar del Norte, nunca se había
atrevido a cerrar los ojos para descansar desde el día en que recibió la
noticia de la derrota en el Mar del Sur. En este momento su corazón latía
como loco dentro de su pecho. Agarró al Qian Li Yan en manos de su
guardia.
Después de una sola mirada, se vio obligado a gritar, "Dios mío", desde
el pecho hasta la espalda, todo se había vuelto frío.
"General, ¿qué debemos hacer?"
"Todos ..." La garganta de Lian Wei se movió. “Grandes Dragones
adelante, no hay necesidad de saludar, dispara la Artillería Pesada al
instante… Espera, pon la cadena de metal, así es, ¡todos los Dragones van
uno al lado del otro! ¡Forma una valla de cadena de metal fuera del puerto!
"
"Prepara el baihong—"
"¡Notifique a los barcos pesqueros y mercantes en el puerto para que
evacuen inmediatamente!"
Lian Wei miró la 'Orden Feng Huo *' en su mesa que aún no se había
guardado; era el nivel más alto de advertencia de guerra en Gran
Liang. Una vez que se recibió la 'Orden Feng Huo', indicó que todo el
territorio entrará en un estado listo para la guerra en cualquier momento.
* 烽火, encendido. fuego de baliza
En la Orden Feng Huo había una carta 'Gu', firmada por el propio
Marqués de la Orden.
Ese año, cuando el Campamento Hierro Negro fue atacado en la
Frontera Norte, más de diez generales grandes y pequeños tuvieron que
quitarse la Armadura Negra, dejar su Cortavientos, estaban esparcidos
por todo el país, algunos se retiraron, otros se escondieron.
Lian Wei había pensado que estaría atrapado aquí en un pequeño
puerto toda su vida, todos los días llevando a la gente a patrullar sin hacer
nada por el puerto. A veces, interfería con asuntos triviales como los
pescadores que se reunían para jugar y pelear.
Incluso cuando se sorprendió al escuchar sobre cómo el campamento
del norte se había levantado debido a lo que sucedió ese año, no tuvo el
coraje de ponerse de pie como Tan Hong Fei para exigir justicia.
“Notifique al campamento del norte,” Lian Wei se ajustó la armadura,
respiró hondo y echó hacia atrás su abultado estómago. "Notifique al
Marqués del Orden, el puerto de Da Gu fue atacado por la Armada
Occidental, ¡apúrate!"
Cuando Lian Wei salió, recordó algo. Se volvió para recoger el Wind
Slasher que había estado parado en la esquina cubierto de polvo durante
muchos años. Lo acarició ligeramente y luego lo cargó en su espalda.
El Wind Slasher que mataba a través de la arena dorada en el pasado
se había oxidado tanto que incluso el pequeño componente para almacenar
Ziliujin ya no podía abrirse. Se ha convertido en una pesada barra de hierro
negro, no tenía otro uso aparte de robar el camino en medio de la noche.
Sin embargo, cuando volvió a llevarlo a la espalda, de repente recuperó
la sensación de que la Armadura Negra estaba en su cuerpo y se miraba a
sí mismo como ningún otro.
Años de hundirse, sin embargo, la hoja de nieve y la armadura de acero
marcada en su hueso y la sangre nunca se desvaneció.
La valla de hierro de los dragones grandes y el monstruo marino se
enfrentan entre sí, chocando directamente cara a cara. Los buques de
guerra occidentales parecían demonios y fantasmas en medio del viento y
la lluvia. El feroz vendaval del mar no pudo detenerlos. El viento loco y las
olas desencadenaron una marea que parecía engullir el continente, llovían
continuamente fuego de artillería. Innumerables buques de guerra se
desintegraron en un abrir y cerrar de ojos, hundiéndose en el océano
ondulante.
"¡General, me temo que la verja de hierro no podrá detenerlos!"
"General, se habían hundido demasiados barcos en el lado izquierdo, la
cadena ..."
"Atalaya - ¡ten cuidado!"
Un cañón de artillería se elevó como un dragón en llamas, incluso la
cortina de lluvia no pudo sofocar su fuego ardiente, golpeando una torre
de vigilancia con un fuerte sonido explosivo. La torre se tambaleó y se
derrumbó lentamente desde el medio.
La luz que atravesaba el viento y la lluvia en lo alto de la torre se
apagó.
Lian Wei hizo a un lado a sus guardias y subió a la cubierta del barco de
guerra. Rugió: "¡No detengas los cañones pesados, carga el explosivo en
la proa del baihong!"
"General Lian, el puerto de Da Gu es imposible ..."
"¡Moverse!" Lian Wei empujó a los pequeños soldados cerca de la flecha
Baihong a un lado, gritó y levantó el cohete de más o menos cien libras, lo
rompió en el enorme arco Baihong. Se secó el agua de lluvia en la cara y
calibró el arco con las manos.
El primer cohete fue lanzado al cielo por la proa Baihong. En el aire, el
casco de hierro de la cola del cohete cayó. El destello de Ziliujin se
asemeja a una impenetrable antorcha en llamas, aumenta la velocidad del
cohete, pasa como un meteoro, roza la bandera del monstruo marino y cae
al agua cercana.
El estandarte volador de la Santa Sede se rompió en un trozo de tela
por el tremendo impacto, se dispersó en el viento, pero el impulso del
cohete no se detuvo, golpeando directamente a un monstruo marino
occidental que actualmente está causando estragos, explotando en
brillantes fuegos artificiales en el océano.
Sin la orden del comandante, el Campamento Hierro Negro no se atrevió
a retroceder ni un paso.
Cuando llegó la noticia del ataque al puerto de Da Gu esa noche, Gu
Yun estaba pasando por la defensa de la capital con Tan Hong Fei y Han
Qi, comandante del Ejército Imperial por última vez.
Al escuchar esta noticia, Han Qi casi saltó de su asiento, gritó. "¡Cómo
pudo ser tan rápido!"
La expresión de Gu Yun se oscureció: "¿Quién es el comandante de la
Armada del Mar del Norte?"
"Lian Wei", agregó Tan Hong Fei un momento después, el borde de sus
ojos enrojeció, "Él era un suplente mío ese año".
Los ojos de Gu Yun se movieron levemente: "Comandante Han".
Han Qi entendió su intención: “Sí, este general regresará a la capital
de inmediato. ¡Puede estar seguro, incluso si el Ejército Imperial solo
tuviera el tipo de soldado joven maestro, el único lugar de enterramiento
para nosotros es al pie de la capital imperial!
Gu Yun lo miró profundamente y de repente abrió la tienda: "¿Pueden
esos viejos en Ling Shu Inst.i.tute darse prisa?"
Antes de que sus palabras terminaran, llegó un mensajero y dijo:
"¡Gran Mariscal, Yan Bei wang había llegado!"
Gu Yun se dio la vuelta, el caballo de Chang Geng ya había llegado al
frente, tiró de las riendas: "El mariscal, Ling Shu Inst.i.tute ha reparado
las armaduras de hierro negro existentes, 1000 armaduras pesadas, 500
armaduras de águila, dividió los trajes de armadura ligera en pedazos, tres
mil pares de hebillas de muñeca, cuatro mil pares de protectores de piernas
de hierro. Más tarde se enviará otro lote de cuatro mil pares de hombreras
".
Capítulo 61: Noticias de Victoria
____
Gu Yun gritó enojado al frente: "¡Quién te permitió copiarme, ya estoy
a punto de orinar!"
____
Tan Hong Fei, que siguió a Gu Yun fuera de la tienda del mariscal,
quedó atónito. Nunca soñó que algún día podría volver a ponerse la
Armadura Negra. De repente, su corazón que estaba lleno de dolor casi
desapareció. Sintió que después de esta batalla, incluso si se derramaba
sangre y caían cabezas, todo valdría la pena.
Tan Hong Fei dio un paso adelante y dijo en voz alta: "¡Tu subordinado
está dispuesto a ser la vanguardia del mariscal!"
“Eres indispensable. El carro Baihong abre el camino, la Caballería
Ligera y el Águila Negra me siguen, la Armadura Pesada aplasta la batalla
”, ordenó Gu Yun,“ Dame un Cortavientos. Qué clase de diablo, solo lo
sabremos después de verlos ".
Chang Geng desató el largo arco detrás de él. Esto se lo dio Gu Yun
cuando estaban luchando contra bandidos en el suroeste. Parecía que era
el último trabajo decente que el Instituto Ling Shu podía realizar después
de que el emperador Long An comenzara a reducir el poder militar.
Desafortunadamente, el arco llamativo era tan pesado que no podría
controlarse en absoluto si no lo manejaba un verdadero experto. Por lo
tanto, solo uno de ellos fue juzgado en todo el ejército.
Y podría haberse popularizado en el ejército después de haber
mejorado ...
Chang Geng tocó el arco frío y preguntó: "Yifu, ¿puedo seguirte?"
Gu Yun se detuvo. En parte, no quería llevarlo con él, no por nada más,
pero a través de esta batalla, su corazón había tenido más expectativas
para este joven príncipe recién emergente. Podría sacrificarse para
defenderse hasta el último paso, pero ¿qué vendría después?
¿Quién limpiaría este país de origen destrozado y andrajoso? ¿Quién
rompería con una salida para las miles de familias y personas en este lío?
La forma de socializar de Chang Geng era mucho más reflexiva en
comparación con él cuando era joven, tal vez no terminaría como él,
discutiendo con el Emperador sobre esta situación irremediable ...
Chang Geng parecía saber lo que estaba pensando: “No hay huevos sin
romper debajo de un nido volcado. Ahora la capital ya es así. Esperar en el
palacio no es diferente de ir al frente. En caso de que la ciudad se
derrumbe, ¿no es la única diferencia morir tarde o temprano?
Antes de que Gu Yun pudiera hablar, Tan Hong Fei se rió en voz alta y
dijo: “¡Su Alteza habla bien! ¡Toda la corte no tenía más que eruditos, solo
Su Alteza es un hombre de verdad! "
Gu Yun no pudo hacer nada, agitó la mano y dijo: “Ya hablaste de
todo. Ven si quieres ".
Luego miró a Tan Hong Fei, mirando el latigazo sin curar del general
Tan en su rostro y queriendo azotar el otro lado y convertir al hombre
en una cabeza de cerdo simétrica.
Más allá de la capital, innumerables Águilas Negras formadas en filas,
cuando uno echaba un vistazo, podían sentir como si hubieran regresado a
Crescent Spring.
Mirando desde el caballo, la luz de la torre Qi Yuan permaneció
brillantemente iluminada incluso bajo la fuerte lluvia, como cubierta con un
velo fino y suave, frente a la majestuosa ciudad imperial desde
lejos. Veinte milanos rojos que se elevaban solo en la víspera de Año Nuevo
ahora colgaban en el cielo, pareciendo ojos afligidos y anhelantes que los
enviaban.
Gu Yun hizo un gesto con la mano. Las vanguardias del Campamento del
Norte se movieron en silencio, sin canciones trágicas ni grandes
discursos. Viajaban bajo la lluvia, sus máscaras y cascos sin un hueco los
hacían parecer como marionetas de hierro sin emociones.
Fuertes lluvias hicieron flotar la capital sobre el agua, la vieja piedra
azul podría servir como testigo.
Esa noche, la Armada Occidental asaltó el puerto de Da Gu en el
norte. Lian Wei, el comandante de la Armada del Mar del Norte, dirigió a
sus trescientos dragones grandes y mil barcos pequeños para que se
adhirieran a ella. En primer lugar, los grandes dragones estaban
conectados por cadenas de hierro, moviéndose uno al lado del otro y
formando una valla fuera del puerto. Se mantuvieron firmes hasta la hora
del Ratón * del día siguiente, todos los Dragones fueron enterrados bajo
los disparos del monstruo marino, ni uno solo tuvo la suerte de salir.
* 12: 00pm a 12:30 pm
La Armada del Mar del Norte contenía 36.000 cohetes, 100.000
flechas baihong de acero; no quedaba ninguna, todas se hundieron en las
furiosas olas en las profundidades del océano.
Después de que se agotaron los recursos, el comandante Lian Wei
ordenó que todas las naves pequeñas corrieran a toda velocidad. Con las
naves como ignición, se usaron a sí mismas como flechas Baihong,
cargando contra la línea enemiga.
El fuego flotaba en el mar, el alma de los soldados leales destrozada.
La Marina del Mar del Norte chocó, se hundió y bombardeó cerca de
3.000 buques de guerra del enemigo. Finalmente, obligó a los monstruos
marinos a abrir sus tentáculos de hierro en medio de la lluvia, liberando las
Armaduras de Águila ocultas en el interior y desembarcando a toda prisa
del aire. Más tarde descubrieron que no quedaba nadie en el puerto de Da
Gu.
Al comienzo de la hora del Tigre *, los occidentales que aterrizaron
en el suelo estaban increíblemente desanimados. Ansiosos por compensar
sus graves pérdidas en esta batalla, no se detuvieron sino que se
dirigieron directamente a la capital, encontrándose con el Campamento
Hierro Negro en el camino, el Campamento Hierro Negro que solo había sido
formado por Gu Yun durante la noche, chocando fuera de Dong ' una
ciudad.
* 3:00 am
La Armada Occidental, que aún no se había recuperado de su costoso
desembarco, fue tomada por sorpresa. Primero fueron atacados por 80
carros. Entonces apareció la Caballería Ligera de todas las direcciones,
rodeándolos. Las águilas volaban alto en el cielo, su chillido tan agudo como
espadas.
La guardia personal del Papa se encontró repentinamente con los
Cortavientos y la Caballería casi la dispersó en el lugar. Se retiraron
apresuradamente fuera del puerto de Da Gu para reservar sus tropas.
El gran Liang no había tenido una noche tan emocionante en tantos
años. Los informes de batalla y los mensajeros se apresuraron hacia y
desde el palacio como una reunión de mercado.
Nadie en la capital pudo dormir hasta la mañana siguiente, cuando la
noticia de la victoria llegó junto con la luz del amanecer.
De repente, al recibir la primera buena noticia después de tantos días,
Li Feng apenas podía ponerse de pie y se preguntaba si debería llorar o
reír.
La lluvia había cesado, el cielo estaba despejado. El río Haihe creció
durante la noche y el aire se llenó de un aroma indescriptible, mezclado con
el olor a humo y sangre. El suelo se había calentado y la humedad aún no se
había disipado. Gu Yun no tenía fuerza naval, después de una larga noche
de feroz batalla, los occidentales se vieron obligados a retirarse,
completamente derrotados.
Gu Yun se sentó junto al canon con su hocico que aún no se había
enfriado. El casco de hierro negro fue arrojado a un lado, su cabello
desordenado colgando en desorden. Recibió la medicina que le entregó
Chang Geng y se la bebió todo.
Chang Geng dijo: "No traje agujas, e incluso si las hiciera, no me
atrevería a realizarlas para yifu".
Tirando de la cuerda del arco de hierro toda la noche, sus manos
quedaron con una profunda impresión. Incluso ahora no se habían
recuperado y seguían temblando levemente.
Gu Yun agarró su muñeca y la acercó más a él. Al ver que solo había
ejercido sus fuerzas y no estaba herido, hizo un gesto de alivio con la
mano: “No te preocupes por mí, ve a calcular las bajas. Old Tan no podrá
contarlos a todos ".
Después de eso, simplemente se apoyó en el canon y cerró los ojos
para descansar un momento.
Un momento después, Gu Yun fue despertado por un mensajero de la
capital imperial.
La persona que venía era un joven soldado del ejército imperial. En su
rango, casi nunca pudo ver a Gu Yun. Por fin, pudo conocer al Marqués del
Orden en persona, realmente no pudo evitar la emoción, cargando sobre
su caballo. Al desmontar, no se sabía con qué se había tropezado, pero
rodó hasta el final bajo los pies de Gu Yun: "¡Marqués, señor!"
Gu Yun encogió los pies a toda prisa: "Vaya, ¿para qué es la gran
cortesía?"
El mensajero dijo con entusiasmo: "Marqués, señor, Su Majestad me
había ordenado que fuera a recompensar al Campamento del Norte, que
trajera conmigo ... trayendo ..."
Genial, emocionado hasta el punto de olvidar qué decir.
No es de extrañar que el Campamento del Norte derrotara por
completo al Ejército Imperial. Sin otra opción, tuvo que trepar y palmear
su cabeza. "No es necesario que me informe, deje que el general Tan se
encargue de ello".
“Regrese y dígale a Su Majestad que no se regocije tan pronto. El
Campamento del Norte solo tenía unos pocos soldados, después de que
todos se hayan ido, tampoco podría manifestar mágicamente a nuevas
personas, en ese momento si los refuerzos no llegan ... "
El mensajero lo miró desconcertado.
La estrategia militar enseña: en una batalla, usa métodos directos
para participar, usa métodos indirectos para ganar. Quizás muchas
personas solo recordaron 'usar métodos indirectos para ganar', siempre
pensando que un general talentoso podría encontrar un camino para
sobrevivir en un callejón sin salida, salvando un edificio asombroso por sus
propios esfuerzos, pero ¿cómo podría ser eso posible?
A menos que Gu Yun pudiera usar barro para crear un ejército divino
que no necesitara comer, beber o temer a las armas.
La noticia de la primera victoria había sido enviada a la capital, qué
alegres estarían los ministros en este momento, pero ¿cuál sería el
siguiente paso? Sin discutir las tareas a largo plazo de las batallas por la
fuerza nacional y la batalla por los recursos reservados, sino solo la tarea
que tiene entre manos en este momento, con solo un puñado de tropas,
¿qué podía hacer?
Gu Yun sabía que no importaba cuán prestigiosa pudiera haber parecido
esta batalla inicial, no podía cambiar el hecho de que solo estaba
aprovechando la ubicación para resistir.
Con una sonrisa de dolor, dejó atrás al mensajero del Emperador y se
mudó al lugar de Tan Hong Fei.
Tan Hong Fei sostenía un Wind Slasher con una cabeza que ya había
sido aplastada, la parte superior que se había quemado todavía tenía la
mitad del carácter 'Lian' inscrito en ella.
Muchos oficiales y soldados grabarían sus nombres en su Wind Slasher,
de modo que incluso si los llevaran a reparar, no tendrían que preocuparse
por encontrar a su viejo compañero que ha pasado por vidas y muertes
con ellos después. Si el propietario muriera en el campo de batalla y no se
pudiera encontrar el cuerpo, sus camaradas traerían su Wind Slasher y
servirían una olla de vino como ofrenda, entonces se podría considerar
que el alma puede descansar en la otra vida.
Tan Hong Fei levantó el filo con ambas manos y se lo entregó a Gu
Yun: "Mariscal".
Gu Yun lo recibió. De repente, tuvo la sensación de que el Campamento
de Hierro Negro, que había sufrido muchos desastres y dificultades,
muchas reuniones y separaciones, pero siempre colocado bajo este país
de origen, como una semilla, se esparció en todas direcciones y creció
hasta convertirse en grandes árboles que perforaban el cielo. sin que
nadie lo sepa.
Chang Geng se acercó detrás de él y dijo: “Anoche, trece carros
resultaron dañados, quinientos jinetes murieron en batalla, casi mil
resultaron gravemente heridos, sin contar las heridas leves. Cayeron
doce armaduras de águila, la mayoría de las cajas doradas habían explotado
en el aire. Me temo que sus cuerpos habían sido ... "
Gu Yun asintió con la cabeza, sintiendo que esta cantidad de bajas era
aceptable: "Todo esto fue gracias a la contribución del general Lian".
Chang Geng susurró: "Me temo que alguien vendrá para una discusión
de tregua en la reunión de la mañana".
"No lo harán", dijo Gu Yun. “Los occidentales sufrieron pérdidas tan
grandes anoche, no les quedaban caras para venir a una tregua. A menos
que asediaran la capital hasta el punto en que no tenemos forma de volar,
nunca nos hablarían ”.
… Y eso era solo cuestión de tiempo.
Chang Geng guardó silencio por un momento: “Escuché que un
Emperador de la antigua dinastía que fue subyugado por los bárbaros del
norte había escapado en secreto del pasaje secreto cuando la capital fue
sitiada, si realmente no podíamos defender ... "
"Debemos defender incluso si no podemos". Gu Yun dijo de repente:
"¿Conoces el jardín Jinghua en el oeste de la capital?"
Chang Geng estaba atónito.
Gu Yun se llevó el dedo índice a los labios e hizo un gesto de 'silencio',
para que no siguiera adelante. El jardín Jinghua en el oeste de la capital
fue un lugar de veraneo construido entre la dinastía Yuan He y la dinastía
del emperador Wu. En esos días, iban al jardín Jinghua todos los veranos
para refrescarse porque el ex emperador no podía tolerar el calor.
Pero después de que Li Feng ascendió al trono, el costo de comer y
vestirse se había vuelto más simple. Incluso el dinero para la reina y el
maquillaje de la concubina imperial se redujo a la mitad, ya no existen las
tradiciones llamativas como la caza o los viajes de primavera.
Sin embargo, un hombre tan ahorrativo que era muy diferente de su
padre, seguía manteniendo la costumbre de ir al palacio todos los veranos,
pero no para divertirse. Con los asuntos del gobierno del palacio
amontonándose, por lo general se levantaba temprano para correr al
palacio, luego regresaba rápidamente antes del anochecer, caminando por
la capital como un perro errante. Sin mencionar el enfriamiento, ya era un
milagro no contraer un golpe de calor.
Li Feng se sometió a tal sufrimiento, si no estaba loco, solo podría
significar ... había algo de gran importancia en el Jardín Jinghua que debía
verificar con frecuencia.
¿Qué tan entusiasta estaba Chang Geng? De inmediato se le ocurrió
una idea: todos los generales de los cuatro bandos están involucrados en
el contrabando de Ziliujin, entonces ¿qué pasa con el emperador mismo?
Con tanta prisa, no había tenido tiempo de revisar los libros de cuentas
del Ministerio de Vivienda y el Ministerio de Asuntos Militares ... pero con
el carácter de Li Feng de querer agarrar todo en su mano, no fue
sorprendente para él construir su propio almacenamiento privado de
Ziliujin.
Gu Yun: “Tu hermano mayor no confía en nadie. Esto es solo mi
suposición, no se lo digas a nadie más ".
Chang Geng frunció el ceño: "Esto es preocupante ... ¿Li Feng hará
las paces entonces?"
Gu Yun se rió y negó con la cabeza. "Es posible que alguien venga y
haga las paces con él, mm ... él tampoco correría".
Chang Geng puso ambas manos detrás de su espalda, la sangre y el
barro en su cuerpo se habían secado la noche anterior, haciéndolo parecer
bastante colorido. El joven Yan Bei Wang, con esta colorida apariencia,
caminó lentamente como si estuviera paseando por el jardín imperial una
tarde de primavera, luego, después de un momento de pensar, comentó a
la ligera: “Sí, Li Feng no le teme a la muerte, estaba miedo a otras cosas
".
Gu Yun no pudo evitar mirarlo. Descubrió que el Maestro Feng Han
tenía razón. Chang Geng realmente parecía tranquilo y relajado en todo
momento, de repente preguntó: "¿Cuándo diablos te convertiste en una
persona de mal genio?"
“¿Cuándo soy de mal genio? Estoy muy impaciente en este momento
". Chang Geng se rió: “Esto es en realidad lo que he aprendido de
yifu. Descubrí que cada vez que yifu se sentía incómodo, a menudo fingía
estar muy emocionado y, a medida que esta alegría se mostraba en su
rostro, a su vez, hacía que su corazón se sintiera mucho mejor. Por lo
tanto, cada vez que me sentía particularmente impetuoso,
deliberadamente me desaceleraba un poco y descubría que podía volverme
más tranquilo. Ah, demasiado fuego no es bueno para la salud. Fácilmente
podría ... "
"... hacer que no duermas bien". Gu Yun lo había escuchado decir esto
más de una vez, pudo continuar suavemente sus palabras: “¿Cuánto te
importa realmente dormir? Y además, ¿cuándo me obligué a reír cuando me
sentía infeliz?
Chang Geng enarcó las cejas, le dio una mirada relajada, su rostro
transmitía: "Lo que digas".
"Todo el ejército se prepara para retirarse". Gu Yun dijo con
cansancio: “Los heridos se mueven primero, en poco tiempo, los
occidentales reaccionarán. Saldremos para una emboscada ".
Después de dos pasos, Gu Yun sintió que su cuerpo estaba
completamente exhausto. No pudo evitar pensar en la herejía de Chang
Geng de que nadie sabía de qué médico lo había aprendido. Tomó un sorbo
de vino de la botella que tenía en la cintura, llevó el Cortavientos del
general Lian detrás de él y silbó.
El caballo trotó hacia él al oír el sonido. Gu Yun cambió el silbato a una
extraña melodía que él mismo inventó, recogiendo una pequeña flor
silvestre de color amarillo brillante del suelo y saltando sobre el
caballo. "¡Mis hermanos del calvario, síganme!"
Gu Yun sostuvo la flor silvestre en su mano, queriendo colocarla sobre
Chang Geng, la persona más cercana a él. Inesperadamente, sus ojos se
encontraron con los de Chang Geng en el momento en que levantó la
mano. La mirada de Chang Geng lo había estado siguiendo todo este
tiempo, sin separarse ni por un segundo, su expresión parecía decir:
“Estaría bien incluso si pusieras un velo rojo * en mi cabeza”.
* velo de novia para novias
El mariscal Gu se estremeció, sin atreverse a actuar, colocó la flor
en la gran cabeza con casco del general Tan, explicó profundamente el
dicho 'una flor insertada en un montón de algo'.
Un grupo de soldados veteranos en el Campamento Norte se echó a
reír. Las Caballerías Negras silbaron mientras seguían a Gu Yun. Una tras
otra, el silbido de varias melodías vino y se fue, Gu Yun gritó enojado al
frente: "¡Quién te permitió copiarme, ya estoy a punto de orinar!"
No hace falta decir que después de una escena así, todos se sintieron
mucho menos fatigados.
En este momento, en el monstruo marino de los occidentales ...
El Maestro Ja arrastró su cuerpo exhausto hacia la puerta de la cabina,
justo a tiempo para encontrarse con el jefe del regimiento de guardias
del Papa.
"¿Cómo es?" Preguntó el Maestro Ja.
Capitán del regimiento: "Ya se había despertado y está a punto de
llamarlo".
En la caótica batalla naval, el lugar donde se ubicaba el Papa fue rozado
por un cohete volado, pasando a detonar filas de explosivos, el tremendo
impacto lo dejó inconsciente. Su ausencia tuvo un efecto sustancial en la
Western Navy que fue completamente derrotada en el enfrentamiento con
Black Iron Camp después.
Con gran alivio, el Maestro Ja entró. La frente del Papa ya estaba
tratada con medicamentos. Su cabello blanco esparcido a un lado,
mostrando algunas marcas en las esquinas de sus ojos.
El Maestro Ja se arrodilló en el suelo y dijo con cansancio: "Su
Majestad, lo siento mucho ..."
El anciano en la cama no abrió los ojos, solo murmuró: "Gu Yun".
“Sí, fue Gu Yun. Habíamos planeado atraparlo aquí al principio. De
hecho, estábamos listos para enfrentarnos a él en el Mar del Norte, pero
ayer aparecieron repentinamente los cuervos negros ”. El Maestro Ja hizo
una pausa, su expresión parecía bastante angustiada. “El Campamento de
Hierro Negro había sido retenido por las fuerzas aliadas en las Regiones
Occidentales en la puerta Jiayu. Debería tener esta confianza, pero aún
así ... "
"Aún perdiste el equilibrio frente al enemigo".
El Maestro Ja no pudo encontrar una respuesta.
El Papa sonrió y dijo: “Todo el mundo siempre se encontrará con
enemigos aparentemente invencibles en su vida. Algunos son desastres,
otros son solo práctica. ¿Sabes cuál es la diferencia entre desastre y
práctica? "
El Maestro Ja estaba atónito.
“La diferencia es que el desastre no se puede vencer, pero la práctica
se puede superar; creo que es muy fácil de distinguir. Se ha cortado la
comunicación de las Llanuras Centrales. Una capital tan pequeña, si
realmente hay muchas tropas, ¿cómo podría volverse caótica tan
fácilmente cuando usamos trucos para provocar que el Campamento del
Norte se rebele?
Maestro Ja: "Quieres decir ..."
“Gu es joven en edad, pero más de la mitad de su vida la ha pasado en
el campo de batalla. No dejes que te lleve por la nariz. Incluso si fuera el
rey lobo más poderoso, en este momento, sus garras y dientes habían sido
arrancados y atrapados en una prisión. Ve, debes creer en ti mismo ".
El mismo día, la Armada Occidental se reorganizó y aterrizó
nuevamente en el puerto de Da Gu.
Después de aterrizar en el suelo, fueron atacados ferozmente una
vez más. Esta vez en el cielo azul claro y la luz del día, el Maestro Ja se
mantuvo firme mientras ordenaba con calma. Pronto se ganaría fácilmente
a todas las Armaduras Pesadas que habían estado usando la ubicación para
luchar obstinadamente.
Inesperadamente, antes de que pudiera sentirse orgulloso, mientras
abría la máscara de hierro de los 'cautivos', descubrió que esta ola de
emboscada no eran los soldados del Gran Liang, ¡sino un grupo de
marionetas de hierro!
Los títeres de hierro fueron reclutados temporalmente de las familias
de las familias de alto rango y nobles de la capital. Debajo de una serie de
máscaras protectoras había una máscara de un niño travieso, con su gran
rostro blanco, mostrando una gran sonrisa que se asemeja a un cuenco
de sangre, riéndose de la gente de enfrente, sus burlas estaban más allá
de las palabras.
Un soldado occidental estaba increíblemente enojado, mientras
intentaba quitarse la máscara, el Maestro Ja exclamó: "No toques ..."
Desafortunadamente, fue muy tarde. Se colocó una fina correa debajo
de la máscara. Con solo un toque suave, la marioneta de hierro explotó,
bombardeando directamente a varios soldados occidentales a su lado.
La máscara salió volando, aterrizó a los pies del Maestro Ja, y
continuó mostrando su sonrisa burlona.
El Campamento del Norte solo fingió un ataque. En este momento, todo
el ejército se había retirado, la Armada Occidental cargó furiosamente
dentro de la ciudad, lista para usar sangre para apaciguar su ira. No
esperaban encontrar una ciudad vacía.
Desde que llegó la noticia de la situación de Jiangnan a la capital, Yan
Bei wang se había unido al Ministerio de Vivienda y evacuó a los ciudadanos
en la línea del frente en lotes, algunos de los cuales no estaban dispuestos
a irse, pero después de presenciar la escena del fuego de artillería la
noche antes, ya se habían apresurado a huir.
Gu Yun le había dado al enemigo una ciudad completamente vacía.
Capítulo 62: Ciudad sitiada
____
Chang Geng miró a Gu Yun y dijo: "Quería ahorrar dote para casarme
con el gran general".
____
Hubo un horrible silencio en la ciudad vacía, hundiendo el corazón en
pánico. Tan pronto como el Maestro Ja hizo un gesto con la mano, sus
hombres se dispersaron inmediatamente para buscar dentro de las casas
circundantes.
Se construyeron patios residenciales a lo largo de la orilla del río,
serpenteantes y curvos, y era muy fácil para los forasteros perderse en
ellos mientras deambulaban. A veces, se encontraban con grandes piedras
que bloqueaban el camino, lo que hacía que el terreno ya difícil se volviera
aún más complicado y confuso.
El Maestro Ja tuvo un sentimiento ominoso en su corazón, de repente
comenzó a lamentar su audaz avance.
En ese momento, un soldado occidental gritó. Todas las personas a su
alrededor se convirtieron de inmediato en pájaros asustados, que
desenvainaron instantáneamente sus espadas. Muchas armaduras de
acero pronto formaron un círculo, un canon con hocicos negros apuntando
al inusual árbol de langosta.
Vieron a un soldado occidental colgando de un árbol, la mitad de su
cabeza había sido volada, no se sabía en qué batalla había muerto. Había
una máscara blanca atada a su cabeza ensangrentada, esta vez se había
convertido en una cara llorando!
Sonó un ruido explosivo. Resultó ser un soldado con armadura que había
disparado el cañón por nerviosismo. El cuerpo en el árbol fue
repentinamente volado en una pila de carne y se cayó. Entonces, sonó una
risa horrible, todos los soldados debajo se retiraron apresuradamente
como si estuvieran en presencia de un gran enemigo.
Un momento después, un búho de cara redonda emergió de la copa del
árbol, mirando a los animales de dos patas debajo de él. Entonces, el búho
agitó sus alas y voló directamente hacia el cielo, extendiendo su extraña
risa por todas partes.
Gente asustada en sudor frío a plena luz del día.
"Sir Jacobson, ¿continuaremos la búsqueda?"
El Maestro Ja tragó con dificultad: “No… ¡Retírate, sal de aquí,
rápido! "
Aún no había terminado de hablar, cuando de repente se oyó un fuerte
ruido de explosión en la distancia, seguido de varios gritos
espeluznantes. Grandes fuegos artificiales se elevaron hacia el cielo,
explotando brillantemente.
Alguien gritó asustado: "¡Nos tendieron una emboscada!"
"¡Retirar!"
"¡Salir ahora!"
El sonido de cañones y flechas resonó al unísono. Varias explosiones
provocadas por un desconocido derribaron las ya inestables casas de
piedra. El desorden de escombros combinado con las grandes piedras que
habían bloqueado el camino hizo que la ciudad vacía se convirtiera
rápidamente en un gran laberinto.
El mapa en manos de los occidentales se convirtió en un trozo de papel
desechable. Los inconvenientes de su desconocimiento del terreno se
hicieron evidentes al instante. Un grupo de armaduras pesadas y soldados
de infantería estaban profundamente atrapados en el interior, pareciendo
moscas sin cabeza. Por un momento, no pudieron encontrar una salida.
El Maestro Ja no tuvo más remedio que silbar a las Armaduras del
Águila, para que despeguen y comanden desde el cielo. Para bien o para
mal, habría alguien que los guiaría.
El ejército occidental presa del pánico se retiró a la puerta de la
ciudad. No se sabía quién tocó algún tipo de mecanismo. Un ruido doloroso
de engranajes sonó desde la puerta de la ciudad. Por un momento, todos
los soldados occidentales sacaron sus arcos, todas las flechas apuntaban
al edificio, listas para disparar, pero algo cayó lentamente de él.
El Maestro Ja hizo a un lado a los guardias asustados para echar un
vistazo y se enfureció al descubrir que era otra máscara facial
blanca. ¡Esta vez era el rostro de un demonio!
Maestro Ja: "..."
"Señor, nosotros ... ¿Nos desviamos?"
El Maestro Ja levantó la mano para interrumpirlo y se quedó quieto
por un momento, su expresión se oscureció: “Su Majestad tiene razón. Gu
Yun no tiene una carta de triunfo en su mano, solo puede confiar en estos
trucos solapados. ¿Ya están todos asustados por las
máscaras? Emboscada ... ¡Hmp! "
Dejó escapar una carcajada enojada y luego dijo con frialdad:
"¡Demuela esta ciudad por mí, déjame ver dónde pueden esconderse!"
Sin embargo, más de una hora después, el Maestro Ja, quien arrasó la
ciudad vacía hasta los cimientos, buscó en las ruinas tres veces,
finalmente tuvo que admitir que este lugar abandonado por Dios había
desperdiciado su incontable y valioso tiempo, dinero y Ziliujin. Realmente
era una ciudad vacía. La llamada 'emboscada' consistió en solo dos
máscaras y un búho que pronto se había ido volando.
El Maestro Ja apretó los dientes hasta casi sacar sangre: “¿Dónde
están las Águilas buscadores de caminos? ¡Ve a toda velocidad! "
En este momento, en el camino de Dong'an a la capital, Gu Yun, que
estaba escondido debajo del árbol, recibió el Qian Li Yan dado por Tan Hong
Fei y vio a varias Águilas que buscaban el camino silbando desde lo alto de
sus cabezas y acelerando hacia la capital.
Escupió la pajita que estaba masticando en su boca y dio unas
palmaditas al Wind Slasher detrás de él: "Viejo Lian, has hecho una gran
contribución".
Tan Hong Fei preguntó en voz baja: "¿Cómo estuvo?"
"¿Puedes ver eso?" Gu Yun dijo perezosamente: “El extranjero a cargo
ya debe estar muerto o herido a estas alturas. El líder actual, obviamente,
no está familiarizado con el área alrededor de la capital, de lo contrario,
no será tan impulsivo como para enviar a Eagles a volar ".
En la ciudad imperial, la capital siempre había sido estricta, a nadie se
le permite echar un vistazo a voluntad. Las Águilas Negras no se
atrevieron a volar, incluso en momentos excepcionales, y solo podían
aterrizar en la base del Campamento del Norte y luego cabalgar hacia la
capital después de quitarse la armadura del Águila.
Pero la mayoría de la gente no lo sabía, la razón por la que el Águila
Negra no se atrevía a volar no era porque el Campamento Hierro Negro
fuera particularmente estricto al cumplir con las regulaciones. Gu Yun
sabía que una vez que las Águilas cruzaban la frontera, era fácil hacer
contacto y chocar contra la 'red antiaérea'.
Fuera de las Nueve Puertas de la Capital, hay una 'red anti-aérea'
invisible, construida durante el reinado del Emperador Wu y que tardó
treinta años en completarse. Fue una obra maestra del Ling Shu
Inst.i.tute. Había numerosos muelles ocultos * debajo de la red, y el
comandante principal estaba en la cima de la torre Qi Yuan.
* estas son estructuras en forma de pilares
La razón por la que el edificio era tan alto era que, además de ofrecer
comida, bebida y entretenimiento a visitantes de todo el mundo, también
desempeñaba un papel muy importante: era el muelle principal de la red
antiaérea.
Había un 'Pabellón Tian Yuan Di Fang *' en la 'Torre Zhai Xing **', cerrado
herméticamente detrás de capas de puertas en tiempos de paz. Por el bien
de este Pabellón Tia Yuan Di Fang, había dejado calvos a muchos maestros
del Instituto Ling Shu. Crearía una red óptica especial fuera de las nueve
puertas y estaría muy unida. Incluso de noche, sería fácilmente cubierto
por la luz de las estrellas, la luna y las llamas. A menos que uno tenga
habilidades inusuales, difícilmente sería visible a simple vista.