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UNIVERSIDAD PERUANA DE CIENCIAS E INFORMÁTICA

TEMA: Delitos Ambientales

CURSO: Derecho Procesal Penal

DOCENTE: DR. Jubenal Fernández Medina

ESCUELA: Derecho Y Ciencias Políticas

ESTUDIANTE: Milla Patricio Ángel Joseph

CICLO:VI

HUARAZ – ANCASH-DEL NOVIEMBRE

2019
MARCO TEÓRICO
Concepto de delito ambiental
El Código Penal en su artículo 11º, califica al delito como las acciones y
omisiones dolosas o culposas penadas por la ley “Son aquellas conductas o
comportamientos intencionales o culposos que contravienen a las normas o
leyes”38 Es decir, es toda conducta que afecta el ordenamiento jurídico, la cual
es sancionada por la ley. Para el caso de los delitos ambientales requerimos
del auxilio de la autoridad administrativa o EFA a través, por ejemplo, de un
informe fundamentado.
Un delito ambiental, en sentido dogmático, es definido como una conducta
(acción u omisión) descrita en la ley penal, que ha sido considerada contraria al
ordenamiento que pretende proteger el bien jurídico Ambiente39, a través de
una amenaza punitiva (pena).
Son delitos ambientales, todas aquellas conductas que causan o pueden
causar perjuicio, alteración o daño grave al ambiente, a sus procesos
ecológicos o a sus componentes tales como el agua, el suelo, el aire, la flora y
la fauna silvestre. Estas conductas, se encuentran sancionadas con una pena
expresamente determinada.
En el caso del Perú, los delitos ambientales se encuentran tipificados en el
Título Décimo Tercero (XIII) del Libro Segundo del Código Penal aprobado
mediante Decreto Legislativo N° 635, y modificados el 02 de octubre de 2008,
mediante Ley N° 29263, dividiéndola en cuatro capítulos, algunos subdivididos
en numerales, esta modificación incluye nuevos tipos penales y posteriormente
decretos legislativos como el 1102 que incluye delitos como los de minería
ilegal.
Además debemos señalar que el delito ambiental, es un delito que afecta al
Estado, por ello muchas veces, no resulta aplicable algunos principios de
materia penal general como es el caso del principio de oportunidad que no
constituye sino la facultad del operador de justicia, en especial del fiscal de
iniciar o no una causa penal; de desistir una causa ya iniciada bajo algunos
parámetros que en lo referente a la materia podría considerarse entre ellos la
reparación integral del daño, dado que no es de su interés de la actividad la
privación de la libertad de una persona natural, la suspensión de actividad
temporal o definitiva de una persona jurídica o la indemnización por el daño
causado, sino más bien el respeto, el mantenimiento y el desarrollo de los
ciclos evolutivos naturales.
Cronología del proceso de inclusión de delitos ambientales
Si analizamos la evolución de los delitos ambientales y de la materia ambiental
podemos ver que desde la inclusión del derecho a gozar de un ambiente sano
y equilibrado en nuestras Constituciones -de 1979 y posteriormente 1993-
existen algunos hitos importantes.
Uno de esos primeros pasos para sancionar desde la vía penal podemos decir
que fue el Código del Ambiente y Recursos Naturales, que sin embargo no
tenían penas efectivas de privación de libertad, posteriormente los cambios
institucionales desde la promulgación de la Ley General del Ambiente, el
Acuerdo de Promoción Comercial entre Perú-EEUU hace que se modifique la
institucionalidad ambiental y la aparición de las Fiscalías Especializadas en
Materia Ambiental y empiecen a darse los primeros casos de sanción penal
efectiva, y a la par de la aparición y tipificación de nuevos delitos ambientales
como los de minería ilegal que hoy en día resulta uno de los delitos
ambientales más comunes del país.
A continuación, mostramos un cuadro resumen del tránsito a lo que hoy en día
constituyen los delitos ambientales en el Estado peruano.
1979 1990 1991 1993 2005 2006 2008 2012 2016 2018 Constitución de 1979
Ar. 123 Decreto Legislativo613, Código del Medio Ambiente y Recursos
Naturales Capítulo XXI Delitos Ecológicos Decreto Legislativo 757 Ley Marco
de promoción de la Inversión Privada (deroga parcialmente el Código del Medio
Ambiente) Constitución de 1993 artículo 2 inciso 22 Ley 26811, Ley General del
Ambiente Resolución legislativa 28766, Aprueba el acuerdo de Promoción
Comercial Perú - EE. UU. Capítulo XIII Protección Ambiental Ley 29263
modifica Código Penal y la ley General del Ambiente Decreto Legislativo 1102
incluye Delito de Minería Ilegal Modificatoria de los Delitos de minería ilegal
mediante Decreto Legislativo 1351 Modificación de los Delitos vinculados a
Pesca Ilegal, mediante Decreto Legislativo 1392
Debemos señalar que autores como Alonso Peña Cabrera41 indican que los
delitos ambientales son un tipo penal mixto, porque se configuran dos
posibilidades:
Puede causar un daño o alteración al ambiente o algunos de sus componentes,
estamos hablando que la conducta del agente puede causar un riego potencial,
daño o alteración al ambiente o sus componentes;
Se verifique un daño efectivo, es decir, que se ha acreditado que la conducta
del agente ha ocasionado un riesgo al ambiente o uno de sus componentes.
Para ello deberá comprobarse el daño, cuestión en la que la labor de los
técnicos en general juega un rol trascendental.
Tipos de delitos ambientales
Nuestro Código Penal establece la existencia de 3 tipos de delitos ambientales,
dependiendo de la afectación al ambiente y del agente que facilita, y medidas
para evitar la consumación de hechos, entre otros sobre lo cual tenemos:
a) Delitos de Contaminación El primer capítulo tipifica el delito de
contaminación y sus formas agravadas y se contemplan los artículos 304
(Contaminación del Ambiente), 305° (Formas Agravadas), 306º (Incumplimiento
de las normas relativas al manejo de residuos sólidos), 307º (Tráfico ilegal de
residuos peligrosos), 307º-A (Delito de Minería ilegal), 307º-B (Formas
Agravadas), 307º-C (Delito de Financiamiento de la minería ilegal), 307º-D
(Delito de Obstaculización de la Fiscalización Ambiental) y 307º-E (Tráfico
Ilegal de insumos químicos y maquinarias destinadas a la minería ilegal).
Finalmente, sobre la base de lo señalado, podríamos afirmar que un delito de
contaminación se configura cuando un agente infringe o vulnera leyes
ambientales, o sus reglamentos ambientales, los límites máximos permisibles
establecidos de acuerdo a ley, provoca o altera el ambiente en sus diversos
componentes (agua, aire, suelo) y que este hecho cause o pueda causar
perjuicio, alteración o grave daño al ambiente o dichos componentes antes
señalados, la calidad ambiental o salud ambiental.
b) Delitos contra los recursos naturales El segundo capítulo tipifica los delitos
contra los recursos naturales, sanciona el tráfico ilegal de especies de flora y
fauna silvestre protegida; el tráfico ilegal de especies acuáticas de flora y fauna
silvestre protegidas y su extracción ilegal, la depredación de flora y fauna
silvestre protegida, el tráfico ilegal de recursos genéticos, sus formas
agravadas, los delitos contra los bosques o formaciones boscosas, el tráfico
ilegal de productos forestales maderables, la obstrucción de procedimiento, sus
formas agravadas, aumenta la pena para los delitos por utilización indebida de
tierras agrícolas, autorización de actividad contraria a los planes o usos
previstos por la ley y la alteración del ambiente. Este capítulo incluye el tráfico
ilegal de la flora, fauna, recursos genéticos y forestales, así como el delito por
obstrucción del procedimiento referido al impedimento de una investigación,
auditoría o inspección con relación a la flora y fauna protegidas legalmente.
De acuerdo con el Código Penal comprende los artículos 308º (Tráfico ilegal de
especies de flora y fauna silvestre), 308º-A (Tráfico ilegal de especies acuáticas
de la flora y fauna silvestre), 308º-B (Extracción ilegal de especies acuáticas),
308º-C (Depredación de flora y fauna silvestre), 308º-D (Tráfico ilegal de
recursos genéticos), 309º (Formas Agravadas), 310º (Delitos contra los
bosques o formaciones boscosas), 310°-A (Tráfico ilegal de productos
forestales maderables), 310°-B (Obstrucción de procedimiento), 310°-C
(Formas agravada), 311° (Utilización indebida de tierras agrícolas), 312°
(Autorización de actividad contraria a los planes o usos previstos por la ley), y
313° (Alteración del ambiente o paisaje).
Este tipo de delitos se configura cuando el agente adquiere, vende, transporta,
almacena, importa, exporta o reexporta productos o especímenes de la
biodiversidad, sin un permiso o certificado válido, cuyo origen no autorizado
conoce o puede presumir.
c) Responsabilidad funcional e información falsa El tercer capítulo modifica la
tipificación de la responsabilidad del funcionario por otorgamiento ilegal de
derechos, e incluye un nuevo tipo penal respecto a la responsabilidad de los
representantes legales de las personas jurídicas y la responsabilidad por
información falsa contenida en informes.
Además de esto debemos señalar que existen condiciones de investigación en
el Derecho Penal premial, como reglas procesales que pueden servir a un
proceso penal ambiental a través de medidas cautelares y exclusión o
reducción de penas. En el caso de las medidas cautelares que son otorgadas
por el juez, se deja a su discrecionalidad el hecho de dictar algunas de las
medidas cautelares42 previstas en la legislación peruana; en este caso
también es pertinente considerar el principio de oportunidad dentro de la
reducción de penas o terminación anticipada que se le da a algunos delitos
ambientales como los de minería ilegal. En este caso particular se aplica el
artículo 168° del Código Procesal Penal sobre Proceso de terminación
Anticipada.
Asimismo, en este caso también es posible la aplicación de la confesión
sincera para los autores o partícipes, otorgándoles el beneficio de la reducción
de la pena.
CONTAMINACIÓN AMBIENTAL
Del siglo XX la contaminación ambiental es producida por el hombre a través
de múltiples factores aumento de densidad demográfica incremento de la
demanda de consumo por persona mayor cantidad de desechos por persona
que falta de tratamiento de residuos y efluentes industriales y domiciliarios, la
actividad minera principalmente por la etapa de purificación de los minerales
extraídos, las combustiones tanto domésticas como industriales que producen
hollín, humo gases tóxicos.

Con la primera conferencia Mundial de las Naciones Unidas sobre el Medio


Ambiente y desarrollo celebrado en 1972 en Estocolmo, con la participación de
113 Estados y más de 6,000 mil personas, donde se aprobó la Declaración de
la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente.

La cumbre de Río de Janeiro de 1992 en la que quedó patente el poder de


convocatoria de la cuestión ambiental, 170 países representado y más de 100
jefes de estado consolidó esta evolución al señalar este principio todos los
seres humanos tienen derecho a una vida saludable y productiva en armonía
con la naturaleza.

La crisis ecológica afecta en grados desiguales a todos los países del mundo y
por tanto es de naturaleza colectiva principalmente a estado determinada por
un modelo de crecimiento económico que se impuso a partir del siglo XIX y del
surgimiento de las preocupaciones ambientales en gran escala se remonta en
el siglo XX en la década del 60 en los países industriales conjuntamente con la
edición de una abundante literatura ecológica.
Es posible distinguir dos fuentes principales de degradación ambiental en el
mundo, aquellas asociadas a los patrones predominantes de crecimiento
económico en las sociedades afluentes y a los sectores afluentes dentro de los
países pobres y aquellas asociadas a la pobreza. Estos tipos de situaciones
desarrollo insostenible y empobrecimiento intolerable frecuentemente difieren
en los procesos prevalecientes que afecten la calidad de vida y la exósfera,
pero no están desconectados.

La contaminación ambiental se inicia con las actividades ilícitas y fomentadas


por nuestro ordenamiento jurídico la industria, el tránsito motorizado la excesiva
población, entonces el papel está en desentrañar hasta que niveles se está
permitido arrojar los relaves a los ríos, hasta qué nivel se podrá arrojar los
desechos a las ciudades.

En el territorio nacional se encuentran ecosistemas reconocidos a nivel mundial


por su altísima diversidad de especies como el mar frío de la Corriente
Peruana, los bosques secos en la costa norte la puna, la selva alta y los
bosques tropicales amazónicos, donde la diversidad de especies llega a su
máxima expresión.

El progreso tecnológico, por una parte y el acelerado crecimiento demográfico


por la otra producen la alteración del medio llegando en algunos casos atentar
contra el equilibrio biológico de la Tierra. El calentamiento global está asociado
a un cambio climático que puede tener causa antropogénica el principal
fenómeno que se refiere a la absorción por ciertos gases atmosféricos
principalmente CO2, de parte de la energía que el suelo emite como
consecuencia de haber sido calentado por la radiación solar.

El efecto invernadero natural que estabiliza el clima en la Tierra no es cuestión


que se incluya en el debate sobre el calentamiento global. Sin este efecto
invernadero natural las temperaturas caerían aproximadamente en unos 30 °C;
con tal cambio, los océanos podrían congelarse y la vida, tal como la
conocemos, sería imposible.
CLASES DE CONTAMINACIÓN AMBIENTAL
Contaminación Atmosférica
La contaminación puede realizarse mediante la emisión de gases vapores
humo que expulsan los tubos de automóviles particulares y de servicios de
transporte e incluso radiaciones aéreas de elevada densidad industrial se
concentran elementos tóxicos como el monóxido de carbono y las partículas de
plomo y azufre, zinc por las refinerías que desarrollan la actividad minera en el
Perú.
Los factores de la contaminación del aire que por cierto son complejos y se
clasifican en la siguiente modificación del clima daño a la salud humana
deterioro de la vegetación daño a los animales y deformación del paisaje. Por
ejemplo, a partir de la comprensión del fenómeno de la lluvia ácido se reconoce
la relación entre contaminación del aire y la calidad de los cuerpos de agua o
del suelo.
Contaminación de las Aguas.
La contaminación de las aguas se realiza a través de los residuos industriales
relaves de la refinería mineras, desagües de las ciudades que son arrojados a
los ríos lagos y mares también los detergentes empleados en las distintas
labores domésticas e industriales por contener sustancias químicas causan la
extinción de seres vivos de las aguas.

La principal fuente de contaminación de los mares es el petróleo la


contaminación del agua es la adición de materia extraña que deteriora la
calidad del agua. Es la presencia de elementos sustancias o energías en
concentración o niveles no deseados, la calidad es la propiedad del agua de
sus usos actuales potenciales que le permite seguir siendo útil al hombre y a
los animales sustenta toda la vida marina, sirve para irrigar la tierra y toda la
recreación.
Contaminación del Suelo
La contaminación del suelo es provocada principalmente por los residuos
minerales y por los relaves que son arrojados a los ríos, con las lluvias son
evacuados y son utilizados en la agricultura de esta forma contamina el suelo,
el crecimiento de la población en las ciudades se originan por desechos sólidos
plásticos papel residuos metálicos. La utilización irracional del bosque causa la
erosión y empobrecimiento de los suelos que lo hace inservibles para la
supervivencia de las especies animales y vegetales.
EL DERECHO AMBIENTAL Y LA CONTAMINACIÓN AMBIENTAL
El Derecho ambiental es de reciente iniciación con ocasión de la conferencia de
las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente Humano. En esta oportunidad
las Naciones Unidas aprobó la declaración de Estocolmo sobre el entorno
humano de 1972, cuyo principio el hombre tiene el derecho fundamental a la
libertad a la igualdad y al disfrute de condiciones de vida adecuadas en un
medio de calidad tal que le permita llevar a una vida digna y gozar de bienestar.

El Derecho ambiental puede ser definido como aquel derecho que regula un
conjunto de normas jurídicas que tiene como finalidad dar protección a las
relaciones o interacciones existentes entre el hombre con el medio físico, los
vegetales y animales en la medida que estos proyectan un equilibrio natural.
Al derecho no le importa sólo que se viva, marca un objetivo tradicional a raíz
de los comportamientos humanos vivos son el objetivo de regulación, sino
fundamentalmente cómo se vive que tiene que ver por otro lado con
determinadas formas donde el ser humano se desarrolla con la naturaleza, la
flora, fauna. Para que estos coadyuven a mantener inalterables los procesos
naturales o impacten lo menos posible en las manifestaciones sociales. 3

Los agentes económicos son los destinatarios principales de las medidas y


regulaciones dictadas por aquel. Por eso debe tenerse en consideración el
artículo 67 de la constitución política de 1993 que establece “El Estado
determina la política nacional del ambiente y promueve el uso sostenible de sus
recursos. Es decir, el Estado es el ente encargado de diseñar el conjunto de
medidas y de adoptar las decisiones políticas necesarias tendientes a
garantizar la existencia de un ambiente equilibrado e idóneo para el desarrollo
de la vida.
LA CONTAMINACIÓN AMBIENTAL COMO DELITO EN EL CODIGO PENAL
El delito de contaminación ambiental representa un problema jurídico penal,
sino que es algo más que una simple hipótesis típica perfilada por el legislador.
Es un problema multidisciplinario que exige soluciones de corte político y social
las actividades contaminantes son en principio actividades socialmente útiles y
apreciables caracterizadas por una constante y casi inevitable trampa de
resolver el conflicto.

La criminalización de los delitos ambientales despertó en la ciudadanía, la


conciencia y la valoración acerca de la importancia de proteger nuestro entorno
produciendo una suerte de asunción de los valores ambientales tal como
actualmente pregonan la teoría de la prevención general positiva.

Hoy en día comprobamos que existe un déficit de aplicación de las normas


ambientales conformándose la utilización meramente simbólica. Acompañado
esto de un dogmatismo puro expresado en la exegesis tecnócrata de la ley
penal muy imperante en nuestro medio, que hace que los objetivos políticos
criminales estén alejada del debate doctrinario de nuestro sistema penal.
LA CONTAMINACIÓN COMO CONDUCTA TÍPICA
La conducta típica en el sentido estricto de la contaminación ambiental artículo
304 del código penal. El que, infringiendo las normas sobre protección del
medio ambiente, lo contamina vertiendo residuos, sólidos líquidos, gaseosos o
de cualquier otra naturaleza.
En la primera está expresado en el mismo verbo rector del tipo contaminar,
pero ésta debe hacerse bajo una determinada modalidad vertidos
gramaticalmente significa derramar o vaciar líquidos o también cosas menudas,
como sal, harina. El tipo penal no indica a donde serán arrogados, pero se
entiende al aire, agua o suelo.

Como puede evidenciarse las voz verter no se corresponde con la realidad


social. Los vertidos pueden ser de forma inmediata o directa que se realiza
sobre un curso de agua, cauce público o canal de riego o de forma indirecto ya
que se puede realizarse a través de azarbes, canales de desagüe y pluviales.5
CONSECUENCIA JURÍDICA DEL ACTUAR EN LUGAR DE OTRO.
El artículo 27 del código penal es que el representante responderá como autor
del correspondiente delito especial. Sobre esta calificación hay que hacer
algunas precisiones es distinto considerarle autor que decir que se le castiga
con la pena del autor. Al establecerse que el representante responde como
autor, quiere decirse que el extraneus se convierte en intraneus con todas las
consecuencias derivadas de la autoría, es decir que puede ser coautor que
puede castigarse como partícipes a quienes le auxiliaron como instigadores a
quienes le indujeron a la comisión del hecho.

La solución legal a este problema pasa por la aplicación del art. 27 CP, donde
expresamente se considera autor de estos delitos a quienes actúan como
órgano de representación autorizado de una persona jurídica o como socio
representante de una sociedad, cuando la realización del tipo corresponda a la
persona jurídica.

La comisión de delitos solamente puede tener como protagonistas autores,


coautores, cómplices seres humanos. Las personas jurídicas no cometen
delitos, aunque muchas oportunidades en muchos casos se aprovechen de los
que, en su nombre, cometen sus representantes legales.

Quien comete un delito en el desempeño de sus funciones de la función como


representante de una persona jurídica tiene la condición de responsable a título
de autor. La representación de la persona jurídica es permanente o eventual.
Permanente cuando se trata de la persona designada por la ley o los estatutos
para actuar en nombre de aquella. Eventual, cuando se trata de un apoderado
para el desarrollo de una actividad o cargo específicos.

El representante legal de la persona jurídica responsable de un delito, lo será,


aunque en él no se den uno o más elementos constitutivos de la infracción,
pero que si den en la persona jurídica. Verbigracia, en la defraudación de
rentas de aduana se requiere ser importador.

En el código anterior no contenía una norma parecida y hasta donde sepamos,


en la legislación comparada no es por lo menos frecuente. Y nada impidió en el
país ni en el extranjero que se procese y se condene a los representantes
legales de las personas jurídicas por los delitos que comenten actuando,
precisamente en su condición de personas autorizadas de dichas personas
morales.

El delito es un comportamiento humano y el desempeño institucional de las


personas jurídicas es manejado por seres humanos. Producido un delito que en
apariencia tiene como autora a la persona jurídica lo cierto que los hechos en
que tal infracción ha consistido tienen uno o más autores. La justicia en cada
caso atribuirá las responsabilidades y efectuará las necesidades
discriminaciones. Todo ellos son personas naturales, articulo 27 del código
penal.

De igual forma, sería autor el socio representante de una sociedad titular de


una lavandería por el vertido de jabones y detergentes no biodegradables
directamente a un río. Sujeto pasivo de este delito es la sociedad en general,
dado que estamos ante un delito que protege un bien jurídico universal.6
DELITOS CONTRA EL AMBIENTE
Se considera que las normas penales que protegen el medio ambiente no son
más que disposiciones de orden con un carácter preventivo, una situación de
necesidad relevante podría aceptarse, las disposiciones de orden deben ceder
ante afectaciones concretas. Por nuestra parte somos del parecer que no debe
tomarse una decisión en uno u otro sentido, sino que para ello es necesario
centrarnos en la específica situación de conflicto.

Si se trata de delitos medioambientales que ponen en peligro la vida o salud de


las personas, o amenazan con producir daños catastróficos artículo 305 del
código penal, parece claro una de las preponderancias de los intereses
económicos de la empresa no resulta de recibo.

La situación se torna distinta cuando se lesionan normas administrativas de


prevención sin que se afecte con ello siquiera la estabilidad de los ecosistemas
igualmente si, por ejemplo. Se trata de una empresa ubicada en una zona un
poco desarrollada, de la cual vive prácticamente la población, la imputación de
una infracción de las normas de protección del medio ambiente podrá
descargarse en la medida que solamente se afecten condiciones óptimas del
entorno natural.

El Código penal peruano de 1991 expresamente acoge un Título dedicado al


medio ambiente, curiosamente denominado con la rúbrica de "Delitos contra la
ecología”, rompiendo con la terminología que se acoge en la Constitución y que
después retorna en el Capítulo único de este Título -"Delitos contra los
recursos naturales y el medio ambiente".
En base a este contenido es preciso destacar que el medio ambiente se
concibe como un bien jurídico de naturaleza universal dado que su titular viene
constituido por toda la sociedad y autónomo en la medida en que la importancia
del medio ambiente justifica por sí sola la necesidad de garantizar su integridad
de agresiones futuras, sin que para ello haya que vincularlo a la previa puesta
en peligro de otros bienes jurídicos, conectados directa o indirectamente con el
medio ambiente, tales como la salud o la vida de las personas.

El carácter esencial de estos elementos de la naturaleza justifica la necesidad


de una intervención estatal en orden a su protección, la cual se ha articulado
desde diversos frentes siendo el recurso al derecho penal el último peldaño en
la escala de medios garantizadores del medio ambiente tal y como impone el
principio del derecho penal como ultima ratio.

Es por ello que labor desarrollada por la administración en materia de medio


ambiente, en orden a la reglamentación del uso de los distintos recursos como
respecto a la conservación de especies, constituye el núcleo central a partir del
cual le corresponde su intervención al Derecho penal, este hecho se refleja a
través de la utilización de una peculiar técnica legislativa en la tipificación de los
diferentes tipos delictivos, que gira alrededor de las llamadas normas o tipos
penales en blanco.

La protección penal del medio ambiente sobre tipos de peligro abstracto, donde
basta constatar la realización de la conducta típica para admitir la puesta en
peligro del bien jurídico protegido. Esto supone un adelantamiento en las
barreras punitivas, dado que el legislador penal sólo se conforma con la puesta
en peligro del bien, sin necesidad de constatar una lesión, ni tan siquiera Una
inminente situación de riesgo -peligro concreto-, lo cual se ha considerado
correcto si se tiene en cuenta la importancia de todos los intereses que directa
e indirectamente pueden resultar afectados por estas conductas.
DELITOS CONTRA LOS RECURSOS NATURALES Y EL MEDIO AMBIENTE
Las normas de protección al medio ambiente y el equilibrio ecológico son en
primer término de carácter administrativo como podemos observar en el
artículo 304 del código penal todo ellos reposan en disposiciones de carácter
administrativo y reprimen precisamente su violación. Conforme a ello bien
podríamos afirmar que nos encontramos en los linderos de lo que
doctrinariamente se conoce como la ley penal en blanco.

El delito se comete arrojando residuos sólidos líquidos o gaseosos con


infracción de las normas administrativas pertinentes. Condición para la tipicidad
es que se cause o se pueda causar perjuicios o alteraciones en la flora, en la
fauna o en los recursos hidrobiológicos. Por tanto, arrojar desmonte, en lugares
prohibidos o en cantidades no autorizadas, no puede constituir delito,
precisamente porque no perturba el equilibrio ecológico.

Las actividades mineras y metalúrgicas, en primera línea y las industriales, a


continuación, son las más proclives a que, a través de ellas, se comete este
delito. La inobservancia de las disposiciones administrativas dará lugar a la
configuración de la infracción penal. Se trata de una figura dolosa, aunque la
ley, en la parte final del artículo admite la posibilidad de la figura culposa,
rebajando sustancialmente la represión. Las circunstancias agravantes,
acerca del artículo 305 del código penal no es más que una prolongación del
artículo 304 entendemos que funciona para este último lo dispuesto por el
artículo final del anterior. De todos modos, hubiera sido una disposición
expresa que señala, para los delitos culposos ubicables dentro del marco del
artículo 305 penas específicas que desde luego habría sido menores a las
fijadas para las infracciones dolosas, pero mayores a las contempladas en la
parte final del artículo 304 del código penal.

El delito se consuma cuando se causa o pueda causarse perjuicio o


alteraciones en la flora, fauna y recursos hidrobiológicos mediante la
contaminación del medio ambiente a través de vertidos sólidos, líquidos
gaseosos o de cualquier naturaleza siempre que se hayan superado los límites
legales y se hayan infringido las normas sobre protección del medio ambiente.

En cuanto a la posibilidad de admitir la tentativa en este delito, habrá que


rechazarla en la medida en que el vertido de residuos. Se habla de peligro
concreto el cual habrá que demostrar en un proceso penal si efectivamente se
quiere admitir la ejecución de este delito.

El agente actuó clandestinamente en el ejercicio de su actividad art.305.3°CP


la situación de clandestinidad en la que actúa el sujeto activo es la
determinante de esta agravación, en la medida en que ello puede representar
la existencia de una actividad totalmente al margen de la legalidad y por lo
tanto de los posibles controles administrativos en materia de medio ambiente.

Los actos contaminantes afectan gravemente los recursos naturales que


constituyen la base de la actividad económica art. 305 Código Penal aquí la
mayor pena se justifica en base a los bienes afectados en este caso, la acción
de contaminación afecta directamente a una clase particular de recursos
naturales.

Si como efecto de la actividad contaminante, se producen lesiones graves o


muerte artículo 305. 2° párrafo código penal la agravación está prevista dado el
resultado especialmente grave que provoca la acción típica, esto es, lesiones
graves o muerte. Técnicamente se contempla bajo este caso un supuesto de
cualificación de resultado, donde la producción de las lesiones graves o de la
muerte determina al legislador a elevar la pena prevista para el tipo delictivo
que el sujeto quiso cometer o cometió culposamente el resultado más grave
producido sea imputable a título de culpa.

El bien jurídico protegido en el artículo 286 Código Penal la salud pública, cabe
mantener la existencia de una relación de especialidad entre ambos tipos
penales, donde el art. 286 CP se presenta como ley especial frente al delito del
art. 304 código penal

Jurisprudencia al no estar la denuncia sustanciada en la opinión fundamentada


y por escrito de las entidades sectoriales competentes respecto a si la conducta
atribuida al imputado ha infringido la legislación ambiental, no pudiendo
equipararse a ello el inferior emitido por la Dirección General de la Salud, toda
vez que en ninguna de sus apreciaciones se precisa la legislación ambiental
infringida como secuela del evento que motiva la presente acción, se declara
fundada la cuestión previa. Exp. N° 2093-98 SP Lima Baca Cabrera, Denyse y
Otros; op-cit., T. II, Pág. 573.
OTORGAMIENTO INDEBIDO DE LICENCIA
A pesar de que aparentemente el presente precepto tipifica lo que podría
denominarse una simple infracción realizada por un funcionario público en el
ejercicio de sus funciones, no puede perderse de vista el hecho de que lo
importante aquí es la infracción de las normas sobre el medio ambiente, y la
consiguiente puesta en peligro que genera para éste. Sólo así puede
interpretarse esta clase de tipos penales para poder salvar una posible
vulneración del principio del Derecho penal como última ratio art. 306 Código
Penal.
Sujeto activo de este delito sólo puede serlo un funcionario público, pero no
cualquiera sino el encargado de otorgar licencias de funcionamiento para el
desempeño de actividades industriales y el encargado de informar para su
otorgamiento. Por lo tanto, se constituye en un tipo especial propio. Respecto al
concepto de funcionario público habrá que estar a lo que señala el art. 425 CP.
Sujeto pasivo es la colectividad en cuanto titular del bien jurídico protegido. El
comportamiento consiste en otorgar una licencia de funcionamiento para
cualquier actividad industrial o en informar favorablemente para su concesión,
todo ello sin observar las exigencias de las leyes y reglamentos sobre
protección del medio ambiente. Por lo tanto, el comportamiento típico presenta
una doble modalidad según el papel desempeñado por el funcionario en el
otorgamiento de la licencia.

Un dato importante es que tal concesión se lleve a cabo sin cumplir lo


establecido por las leyes y reglamentos sobre protección del medio ambiente.
Esta referencia a la normativa sobre protección del medio ambiente en general
determina que este tipo sea una norma penal en blanco cuya conducta típica
ha de completarse por remisión a otras normas del ordenamiento jurídico no
penales.

Sin embargo, respecto a la modalidad consistente en informar favorablemente


para el otorgamiento de la licencia es precisa además del dolo la concurrencia
de un elemento subjetivo del tipo consistente en el conocimiento de que con
ello se infringen las normas relativas a la protección del medio ambiente.

De ahí que el simple hecho de informar favorablemente para la concesión de


una licencia de funcionamiento de actividad industrial la cual objetivamente
pueda infringir la normativa sobre protección de medio ambiente, no será típico,
sino sólo aquél donde el sujeto es conocedor directo de tal circunstancia. La
primera modalidad típica se consuma con el otorgamiento de la licencia de
funcionamiento de actividades industriales sin observar las exigencias de las
leyes y reglamentos sobre protección del medio ambiente. Es un delito de mera
actividad que por lo tanto no admite la tentativa como forma imperfecta de
ejecución. La segunda modalidad exige sólo para su consumación la emisión
del informe favorable mientras que la concesión de la licencia constituiría un
acto de agotamiento del delito sin mayor relevancia a los efectos de esta
conducta típica pero que supondría a su vez la ejecución de la primera
modalidad típica para el funcionario público que actuara así dolosamente. No
se admite aquí tampoco la tentativa.

En realidad, con esta disposición se está dando un respaldo penal al


cumplimiento de una medida de la más pura naturaleza administrativa como
son la norma; relativas a la ubicación y depósito de desechos tanto industriales
como domésticos en la medida en que la realidad actual ha hecho del problema
de la basura uno de los más acuciantes y de más complicada solución.

Es por ello que no puede perderse de vista, a la hora de analizar este precepto,
lo dispuesto en los arts. 100 a 106 del Código del Medio Ambiente y los
Recursos Naturales D.L. N° 613, donde se acogen ciertas pautas a seguir a la
hora de elaborar una adecuada política medio-ambiental en materia de
desechos. La acción típica consistir en depositar comercializar o verter arrojar
lanzar o derramar.

Las circunstancias agravantes cuando el agente es funcionario o servidor


público artículo 307, párf. 2° Código Penal es una agravante establecida por
razón de la cualidad personal del sujeto activo, pero evidentemente no basta
con gozar de tal condición para su aplicación, es necesario que el sujeto realice
el comportamiento típico abusando de dicha condición. Para lo que se entiende
por Funcionario o servidor público, véase lo dispuesto en el artículo 425 Código
Procesal Penal.

Cuando el agente contraviene leyes, reglamentos o disposiciones establecidas


y utiliza los desechos sólidos para la alimentación de animales destinados al
consumo humano art. 307, párf 4° CP esta agravante se justifica por razón del
mayor riesgo que implica para la salud pública la existencia de animales.
Destinados al consumo humano, alimentados con productos procedentes de
desechos, con lo que ello supone en orden a la higiene y calidad de los
animales y a la posible transmisión de enfermedades al hombre.

El delito lo comete el funcionario que expide una autorización de


funcionamiento de una industria sin observar las normas vigentes sobre la
protección del medio ambiente. Es suficiente la omisión en que incurre el
funcionario para que haya delito, sin que sea necesario producir un daño o
peligro. Lo comete también la persona que debiendo actuar como informante o
asesora al funcionario emite una opinión favorable sin observar las normas
pertinentes. En este último caso el funcionario que otorga la licencia no sería
responsable al haber sido inducido a error por el técnico informante. La figura
es únicamente dolosa, pues la ley no admite la posibilidad de ser cometida por
la culpa, artículo 306 del código penal.
DESECHOS INDUSTRIALES
El delito se comete arrojando o comercializando desechos industriales o
domésticos, basura en lugares no autorizados para ellos y contraviniendo
disposiciones administrativas sobre la materia. Puede cometerse según el texto
del artículo por dolo o culpa y existe agravación, en uno y otro caso, si el autor
de la infracción es funcionario o servidor público.

Finalmente, el dispositivo se refiere a una práctica grandemente extendida, cual


es la alimentación de cerdos con basura. No conocemos en los ya varios años
de vigencia del nuevo código que se haya hecho una denuncia sobre ese tema
y tenemos la impresión de que el negocio continúa marchando en términos
masivos y altamente rentables artículo 307 del código penal.
INGRESO ILEGAL DE RESIDUOS PELIGROSOS
Así, en el primer párrafo se describe el delito de ingreso ilegal de residuos,
donde el comportamiento típico consiste en ingresar ilegalmente al territorio
nacional, ya sea temporal o definitivamente, residuos o desechos que no hayan
ingresado como insumos para procesos productivos calificados como
peligrosos o tóxicos por la legislación sobre la materia, siempre y cuando se
cree de esta manera un riesgo al equilibrio ambiental. Por lo tanto, el núcleo de
la conducta típica gira en torno al ingreso ilegal de ciertos productos peligrosos
o tóxicos que son residuos de distintos procesos de transformación.

Para que la conducta sea típica será preciso que se cumpla con dos requisitos
básicos en primer lugar que dicho ingreso sea ilegal es decir que carezca de la
autorización pertinente concedida por las autoridades competentes para ello,
en segundo lugar, que este ingreso ilegal cree una situación de riesgo para el
equilibrio ambiental. Respecto al primer requisito la ausencia hasta el momento
de las disposiciones administrativas correspondientes convierte este artículo en
una norma vacía carente de toda eficacia, por cuanto se desconoce cuándo es
legal el ingreso en territorio nacional de tales materias quién es la autoridad
competente para decidir al respecto, qué requisitos deben de cumplirse a la
hora de poder solicitar el permiso de ingreso. etc. Cuestiones que ya deberían
contar con una debida y adecuada reglamentación, antes de crear un tipo
delictivo absolutamente inútil y falto de sentido.

En cuanto a la exigencia de la creación de un riesgo, este elemento convierte a


este tipo en un delito de peligro concreto, en la medida en que será preciso
constatar fehacientemente la existencia de una situación de peligro que afecte
a la integridad del bien jurídico protegido en este caso el medio ambiente. A su
vez, dicho riesgo se convierte en el resultado típico de esta conducta la cual no
sólo exige el simple ingreso ilegal en el territorio nacional de los residuos sino
además la creación de dicha situación de peligro en cuanto elemento de la
estructura típica del delito.
El objeto material del delito está constituido por residuos o desechos
resultantes de procesos de producción, extracción transformación, utilización o
consumo que no hayan ingresado como insumos para procesos productivos
calificados como peligrosos o tóxicos por la legislación especial sobre la
materia.

Por otro lado, no queda muy clara la relación que puede existir entre residuos y
desechos peligrosos para el medio ambiente, que por definición no son materia
susceptible de reciclaje, y por lo tanto de utilización y los insumos para
procesos productivos los cuales bajo ninguna circunstancia pueden ser
considerados como materia de desecho o residuo en la medida en que son
empleados en otros procesos de transformación aunque éstos sean
catalogables legalmente como peligrosos o tóxicos como por ejemplo
sucedería con las industrias dedicadas al reciclaje de envases de plástico.

En el segundo párrafo de este precepto se sanciona al funcionario público que


autorice el ingreso al territorio nacional de desechos calificados como
peligrosos o tóxicos por los dispositivos legales. Aquí el legislador parece que
ha pretendido complementar el ámbito de incriminación previsto en el primer
párrafo del art. 307 código penal.

En segundo lugar, porque para que se configure el tipo es preciso que los
desechos, cuyo ingreso autorice el funcionario estén catalogados legalmente
como peligrosos o tóxicos circunstancia que no se exigía en el primer párrafo
donde bastaba con que el sujeto ingresara desechos o residuos no reciclables
y que objetivamente demuestren ser peligrosos precisamente por la misma
situación de riesgo que genera su ingreso en el país. Visto desde otro aspecto,
con el segundo párrafo del art. 337-A Código Penal se está prohibiendo el
ingreso de todo tipo de desecho considerado legalmente como peligroso o
tóxico, con independencia de que pueda ser reciclado a través de un proceso
de transformación.
MEDIDA CAUTELAR
Este artículo es aplicable a las infracciones previstas por los artículos 304, 305,
307, 308, 309 y 310, puesto que se refiere a la obligación de parte del juez
penal de dictar medidas cautelares destinadas a poner términos a la actividad
contaminante. Todo aquellos actos que de otra manera dañen los recursos
naturales y perturben el equilibrio ecológico bienes jurídicos especialmente
protegidos por el título deben ser refrendados de manera drástica e inmediata
por el juez, sin perjuicio de las acciones que corresponda tomar a las
autoridades administrativas sobre la materia, la ventaja en la que el juez se
refiere, es que sus disposiciones son de ejecución inmediata, en tanto que las
emitidas por organismos o autoridades administrativos no siempre pueden
hacerse efectivas con la misma velocidad.

El artículo 105 según vimos en su momento concede al juez penal una serie de
atribuciones para adoptar medidas con el carácter de urgentes, si las
situaciones generados por el delito se hacen necesarias. En pocos casos como
en los de infracciones contra la pureza del ambiente y el equilibrio ecológico
serán tan necesarias esas medidas.

Las disposiciones que emita el juez al respecto podrán producirse en cualquier


estado de la causa y pueden comprender no solamente la suspensión de la
actividad contaminante sino la clausura, temporal o definitiva, del
establecimiento que viene causándola. Ya deberían estar clausuradas, a
propósito, todas las “chancherías” que, alrededor de Lima, alimentan con
basura los futuros chicharrones y jamones.

Artículo 314. El Juez penal ordenará, como medida cautelar la suspensión


inmediata de la actividad contaminante, así como la clausura definitiva o
temporal del establecimiento de que se trate, de conformidad con el artículo
105 inciso 1 sin perjuicio de lo que pueda ordenar la autoridad en materia
ambiental.
LA NOCIÓN CONSTITUCIONAL DE LOS VALORES AMBIENTALES EN EL
PERÚ
En la actual constitución se encuentra como un derecho fundamental y
colectivo artículo 2 inciso 22 reconoce el derecho fundamental de toda persona
a gozar de un ambiente equilibrado y adecuado al desarrollo de su vida
complementado con los artículos 66,67,68 y 69. El carácter fundamental de la
Constitución Política dentro de un determinado sistema jurídico tiene como
consecuencia la supremacía de ésta sobre otra norma Principio de
constitucionalidad artículo 51 de la constitución.
Según la constitución Política en el artículo 2 inciso 22 deben darse dos
condiciones concurrentes para comprender mejor este derecho fundamental.
En primer lugar, los derechos ambientales son derechos de todos y de cada
uno a disfrutar de un ambiente adecuado al desarrollo de la persona, es decir
que ningún ser humano podría vivir en un ambiente alterado.

Estos derechos y deberes de los ciudadanos que giran en torno a un eje básico
del derecho a un ambiente sano y equilibrado están consagrados también en el
artículo 1 del Título Preliminar del CMARN que prescribe Toda persona tiene el
derecho irrenunciable a gozar de un ambiente saludable ecológicamente
equilibrado para el desarrollo de la vida y así mismo a la preservación del
paisaje y la naturaleza.

Todo esto se debe a los derechos humanos de tercera generación o Derechos


de solidaridad influenciado indirectamente por la Declaración de la Naciones
Unidas de Estocolmo realizado entre el 5 y el 16 de junio de 1972 desde el 5 de
junio quedó establecido como “Día Mundial del Medio Ambiente” y del Pacto
Internacional de Derechos Económicos, sociales y culturales articulo 11
ratificado por el Perú el 28 de marzo de 1978.
ACCESORIEDAD DEL DERECHO PENAL AMBIENTAL EN RELACIÓN CON
EL DERECHO ADMINISTRATIVO
La trascendencia de la infracción del precepto administrativo, la misma que
tiene implicancias importantes en el plano de la tipicidad como en la antijurídica
penal el juzgador puede optar según Caro Coria por dos alternativas. Puede
realizar un juicio puramente intrasistematico basado en la interpretación del tipo
penal aislado del resto del ordenamiento jurídico, de modo que no les otorgue
valor alguno a los preceptos administrativos.

La segunda opción se contrapone a la primera, pues aquí el juez no es


indiferente al principio de unidad del ordenamiento jurídico y opta por delimitar
la prohibición contemplada en el tipo penal teniendo en cuenta la regulación
administrativa.

En el delito de contaminación ambiental se ha seguido la segunda alternativa


en el contexto de la regulación administrativa en la delimitación del injusto
penal del artículo 304 del código penal, por ejemplo, cuándo prescribe que los
actos contaminantes infracciones las normas sobre protección del medio
ambiente. La protección penal del ambiente es un área primordialmente
ocupado por el derecho administrativo. Es lo que se llama en doctrina
normalmente la accesoriedad del derecho penal respecto al derecho
administrativo, que en materia ambiental es una técnica completamente
irrenunciable, aunque hay autores quienes se muestran críticos ante tal técnica
de la accesoriedad

Por otro lado, la accesoriedad se destaca como modelo técnico legislativo,


porque, aunque exista un verdadero peligro o lesión efectiva a los objetos
ambientales resultará irrelevante penalmente sino se infringe las normas
jurídicas de protección del ambiente. En otras palabras, el principio de
accesoriedad administrativa responde a una nueva tenencia en materia jurídica
penal que ha denominarse la administrativización del derecho penal.
En primer lugar, debe primar el principio de unidad del ordenamiento jurídico,
en el sentido que no puede haber contradicción entre la prohibición penal y la
permisión en sede administrativa. La accesoriedad debe producir una
valoración unitaria del derecho administrativo ambiental y del derecho penal
ambiental, así como en frases como contaminar mediante vertido residuales
tiene que constituir una seguridad jurídica mediante una interpretación unitaria.

Segundo lugar teniendo en consideración el principio de subsidiaridad, el


derecho penal no puede penalizar, aquellos comportamientos que las normas
del derecho administrativos autorizan. En otras palabras, en virtud del principio
de intervención mínima, el derecho penal reglamenta la actuación accesoria y
subsidiaria respecto del derecho administrativo más en una materia como ésta
la ambiental tan sujeto a una compleja protección de este ordenamiento, lo que
supone la previa infracción de norma administrativa antes de dar paso a la
sanción penal que por otra parte que supone atentados ambientales de cierta
gravedad.

En tercer lugar, resulta evidente que las normas penales como en el caso del
delito de contaminación ambiental no puede determinar cuándo comienza
exactamente el límite punible contaminante con lo cual sí, las normas
administrativas a través de los valores límite servirían de auxilio.
BIBLIOGRAFIA

césar a. ipenza peralta-una herramienta para operadores de justicia


ambiental
El Proceso Penal y la Responsabilidad Civil de los contaminadores del medio
ambiente peruano- Mg. Luis Pastor Salazar

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