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Fecha: 22 de Julio de 2018

Título del Sermón: La creación de los cielos y la tierra y la Palabra de Dios

Versículo Bíblico: Génesis 1:1~5

Ge 1:1~5 1En el principio creó Dios los cielos y la tierra. 2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las
tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas. 3 Y
dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. 4 Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas.
5
Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día.

Dios creó los cielos y la tierra con su Palabra. Cuando hizo su creación, su Palabra fue el material de
toda su creación. En Génesis 1:3~5, dice:

Ge 1:3~5 3 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. 4 Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz
de las tinieblas. 5 Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un
día.

1. Dios creó por su Palabra

El ser humano, al principio, fue creado a la imagen y semejanza de Dios, por lo que cada día podía
tener una conversación íntima con Dios. No obstante, un día el diablo, en forma de serpiente, tentó a
Eva diciéndole que no moriría al comer el fruto del bien y del mal. Eva cayó ante el diablo y comió del
fruto que Dios le dijo que no lo hiciera. En Génesis 2:17, dice:

Ge 2:17 17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres,
ciertamente morirás.

Cuando Adán y Eva cayeron en la tentación de Satanás al comer el fruto del bien y del mal, la
conversación entre Dios y el hombre fue cortada, y el lenguaje interpersonal fue cambiado. En el libro
de Génesis 3:12, dice:

Ge 3:12 12 Y el hombre respondió: La mujer que me diste por compañera me dio del árbol, y yo comí.

Tanto Adán como Eva empezaron a culparse entre sí para evitar dicha responsabilidad. El lenguaje
dado por Dios, en vez de ser un lenguaje de salvación, se había convertido en un lenguaje de condena,
culpa y muerte.

2. Jesú s nos salvó

Luego de la caída de Adán y Eva todos nosotros estábamos condenados a la muerte, pero Jesús, el
Hijo de Dios, vino a esta tierra por nuestros pecados, siendo el único camino de redención. Por lo cual,
a Jesús, quien vino a esta tierra, nosotros lo llamamos como el 2 do Adán. El 1er Adán nos llevó a la
muerte, pero el 2do Adán, nuestro Señor Jesucristo, tomó nuestros pecados e injusticia, vergüenza y
condenación, pobreza y maldición, y murió y resucitó por cada uno de nosotros. Debemos tener un
encuentro personal con Jesús, quien murió en la cruz y resucitó para salvar nuestras almas muertas.
En el libro de Efesios 2:1, dice:
Ef 2:1 1Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados.

Jesús vino para salvarnos de la muerte, a la que estábamos condenados por causa de nuestros
pecados y delitos. Al aceptarle a Jesucristo en nuestros corazones somos hechos nuevas criaturas,
tanto nuestro lenguaje y todo lo que nos rodea son hechos nuevos y restaurados. En 2Corintios 5:17,
dice:

2Co 5:17 17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí
todas son hechas nuevas.

El Señor ha abolido todos los pecados, vergüenza, pobreza y maldición del pasado. Cuando Jesús dijo
en la cruz: ‘Consumado es’, limpió todas las cosas viejas. Por medio de la resurrección de Jesús, tanto
nuestra alma como nuestro interior son renovamos en él.

3. Use un nuevo lenguaje

Al ser nuevas criaturas debemos cambiar nuestro lenguaje del mundo tridimensional al
cuadrimensional. En el evangelio de San Juan 3:4~6, dice:

Jn 3:4~6 4 Nicodemo le dijo: ¿ Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿ Puede acaso entrar por
segunda vez en el vientre de su madre, y nacer? 5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que
el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. 6 Lo que es nacido de la
carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.

Al aceptarle a Jesús como salvador de nuestras vidas podemos conocer el mundo de la cuarta
dimensión. La unidimensión es recta, la 2da dimensión es plana, la tridimensión se puede ver y tocar,
pero la cuarta dimensión es un mundo invisible. Nosotros podemos escuchar la voz, pero no la
podemos ver.

En San Juan 14:26, dice:

Jn 14:26 26 Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará
todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.

Esto quiere decir que Jesús nos muestra el mundo de la cuarta dimensión por medio del Espíritu Santo.
Para vivir desarrollándonos y mejorando, debemos seguir la Biblia, pues es la síntesis e integración de
la cuarta dimensión. Nuestras vidas crecerán y se desarrollarán si buscamos la Biblia y la gracia del
Espíritu Santo. En 2Timoteo 3:16, dice:

2Ti 3:16 16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir,
para instruir en justicia.

Por lo tanto, creer en Jesucristo es creer en la verdad de la cuarta dimensión de la Biblia, y la


enseñanza de la cuarta dimensión por el Espíritu Santo.

El gran evangelista estadounidense DL Moody dijo: “La Biblia no es un libro de información, sino es un
libro para el cambio”. La Biblia es la Palabra viva de Dios, por lo que hace poderosos cambios en
nuestras vidas. Cuando estamos con temor e inseguridad, si leemos la Palabra, podemos gozar de
fuerza, paz y seguridad. Asimismo, si estamos en medio de la desesperación, al leer la Palabra de
Dios, obtenemos sueños y esperanzas.

Al aplicar y poner en practica la Palabra de Dios en nuestras vidas, podremos marcar una gran
diferencia. Cuando se ordena por la Palabra de Dios de la cuarta dimensión, el cambio y la creación
se manifiestan en el mundo material tridimensional. En Proverbios 20:15, dice:

Pr 20:15 15 Hay oro y multitud de piedras preciosas; mas los labios prudentes son joya preciosa.

Es más importante hablar sabiamente que tener todos los tesoros y piedras preciosas, y eso es porque
las palabras, tarde o temprano, traen consigo resultados. Al sembrar una semilla obtenemos frutos, de
la misma manera, de acuerdo a nuestro lenguaje obtendremos resultados sean estos buenos o malos.

Las palabras determinan la dirección de la vida. En Proverbios 18:21, dice:

Pr 18:21 21 La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos.

Por lo tanto, las palabras negativas y destructivas producirán consecuencias y resultados negativos y
destructivos, mientras que si usamos palabras positivas y con fe, experimentaremos la maravillosa
obra de Dios.

Por medio de la muerte y resurrección de Jesucristo, nosotros somos salvados del pecado y la muerte.
Por lo tanto, ahora somos nuevas criaturas, por lo que también nuestras palabras deben renovarse.
Usemos lenguajes de fe conforme a la Biblia, que es la Palabra de Dios, y la guía y ayuda del Espíritu
Santo. Como hijos de Dios nuestra palabra tiene poder. Tengamos sueños, proclamémoslo con fe, y el
Espíritu Santo obrará de manera notable en nuestras vidas haciendo de su creación.

Oremos: Dios Padre todopoderoso y misericordioso. Gracias te damos por salvarnos y


limpiarnos de todo pecado con la preciosa sangre de Jesucristo. Ahora somos nuevas
criaturas en Cristo Jesú s. Ayú danos a vivir como tus hijos, siendo personas optimistas de
lenguajes positivos y creativos, para así experimentar tu gran poder y milagros. Todo esto
te lo pedimos en el nombre de Jesucristo. Amén.

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