ROQUE
Moisés fue inspirado por Dios para escribir este
libro durante los 40 años que pasó en Madián.
Es posible que una parte del material hubiera
podido estar ya en forma escrita, o transmitida
oralmente a través del propio Job.
Hay semejanzas notables de estilo entre el
Pentateuco y Job que testimonian de la
paternidad literaria de Moisés.
Por ejemplo, el título «El-Shaddai»,
traducido por «el Todopoderoso», se
usa 31 veces en el libro de Job y 6
veces en el libro del
Génesis, pero no aparece
en esta forma particular
en ningún otro lugar
de la Biblia.
Ya que el libro fue escrito durante la
permanencia de Moisés en Madián, Job
puede haber sido contemporáneo,
o haber sido anterior a él.
El escenario del libro de Job es propio del
desierto de Arabia. Por extraño que
parezca, no es un ambiente israelita.
Había adoradores de Dios fuera de los
confines habitados por los descendientes
de Abrahán. El ambiente no es político,
militar ni eclesiástico. Más bien, Job
surge en un marco doméstico propio
de su época.
Era un acaudalado terrateniente, honrado
y amado por sus compatriotas. No se lo
puede identificar con ninguna dinastía o
clan dominante. Se destaca como una
figura solitaria y majestuosa en la historia,
importante a causa de su experiencia
personal más bien que por su relación con
su época o sus contemporáneos.
Los elementos del marco histórico
que hacen dramática la situación son:
Es ésta la historia de un 1. El contraste entre la prosperidad y la ruina
hombre que retorna a la de Job.
vida normal después de
una serie de reveses 2. Lo repentino de su calamidad.
terribles e inexplicables. 3. El problema planteado por la filosofía del
sufrimiento, propia de su época.
4. La crueldad de sus amigos.
5. La profundidad de su desánimo.
8. El arrepentimiento de Job.