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Tratamiento de los residuos hospitalarios comunes o Generales

Tratamiento de los materiales orgánicos.

Los materiales orgánicos se someten a dos clases de procesos:

o Proceso anaerobio. Biometanización.


o Proceso aerobio. Compostaje.

El primero, denominado también digestión anaerobia, es un proceso biológico acelerado artificialmente, que
tiene lugar en condiciones muy pobres de oxígeno o en su ausencia total, sobre substratos orgánicos. Como
resultado se obtiene una mezcla de gases formada por un 99% de metano y dióxido de carbono y un 1% de
amoníaco y ácido sulfídrico. El gas combustible, metano, permite obtener energía.

El compostaje es la transformación biológica de la materia orgánica en productos húmicos conocidos como


compost y que se emplean como fertilizante. Se realiza en presencia de oxígeno y en condiciones de humedad,
PH y temperatura controladas.

El compost se puede obtener a partir de dos tipos de materiales :

 Residuos domésticos.
 Residuos de jardín.

En el primer caso es preciso haber separado previamente la materia orgánica para que no presente ninguna
clase de impurezas ni lleve restos de medicinas, sustancias tóxicas, etc.

En primer lugar se procede a su molido y después se dispone en hileras de dos metros y medio a cielo abierto.
Los montones son volteados periódicamente con el fin de facilitar la oxigenación y evitar su fermentación
anaerobia. El volteo llega a hacerse hasta dos veces por semana mientras la temperatura se mantiene
alrededor de 55ºC y el grado de humedad de la hilera es de entre el 50% y el 60%.

A partir del tercer volteo la temperatura se mantiene en los 25ºC indicando que ya ha finalizado la
fermentación. Esto ocurre transcurridas tres o cuatro semanas.

Después se deja otro periodo equivalente para que se cure para luego proceder a su afino, para retirar
cualquier clase de resto (partículas metálicas, trozos de vidrio, etc) que pudiera haber quedado.

Existen otras variantes a cielo abierto como la pila estática aireada. Por último se han desarrollado sistemas a
cubierto con el fin de optimizar el proceso y sobre todo evitar malos olores.

Tratamiento de los plásticos.

Los envases de plástico pueden someterse a tres tipos de procesos.

1. Reciclado mecánico.
2. Reciclado químico.
3. Valorización energética.

El primero consiste en trocear el material para introducirlo posteriormente en una máquina extrusora-
granceadora para moldearse después por los métodos tradicionales. Solamente puede aplicarse a los
termoplásticos, que son aquellos que funden por la acción de la temperatura. Presenta dos problemas
fundamentalmente. El primero es que el plástico ya utilizado pierde parte de sus propiedades lo que obliga a
emplearlos en la fabricación de otro tipo de productos con menos exigencias. El segundo es la dificultad para
separar los distintos tipos de plásticos. Para ello se han desarrollado diversos sistemas.

El segundo, reciclado químico se utiliza cuando el plástico está muy degradado o es imposible aislarlo de la
mezcla en que se encuentra. Se define como la reacción reversible de la polimerización hacia la recuperación de
las materias primas. Según el tipo de polímeros se distinguen dos clases de procesos :

Por último la valorización energética es un tratamiento adecuado para plásticos muy degradados. Es una
variante de la incineración en la que la energía asociada con el proceso de combustión es recuperada para
generar energía. Las plantas en las que se realiza se asemejan a una central térmica pero difieren en el
combustible que en este caso son residuos plásticos.
Tratamiento del vidrio.

Los envases de vidrio se pueden reciclar sin que el material pierda ninguna de sus propiedades. Una vez
recogidos son triturados formando un polvo grueso denominado calcín, que sometido a altas temperaturas en
un horno, se funde para ser moldeado nuevamentee en forma de botellas, frascos, tarros, etc. que tienen
exactamente las mismas cualidades que los objetos de que proceden. El proceso supone un ahorro de materias
primas y de energía muy considerable.

 Tratamiento del papel y cartón.

Consiste en la recuperación de las fibras de celulosa mediante separación en soluciones acuosas a las que se
incorporan sustancias tensioactivas con el fin de eliminar la tinta. La tinta queda en la superficie del baño y se
puede separar con facilidad.

Una vez retirada la tinta, se somete la suspensión de las fibras a un secado sobre una superficie plana, para
recuperarlas. Después se las hace pasar por unos rodillos que las aplanan y compactan, saliendo finalmente la
lámina de papel reciclado.

Tratamiento de los metales.

Los envases de acero estañado, más conocidos como hojalata, son perfectamente reciclables, se emplean en la
fabricación de otros envases o como chatarra en las fundiciones siderúrgicas después de haber sido
desestañada la hojalata. Todo el acero recuperado se recicla por las necesidades de las acerías. El proceso de
reciclado de la hojalata reduce el consumo energético de forma muy notable.

Los envases de aluminio se consideran materia prima en los mercados internacionales. Su reciclado supone un
elevado ahorro energético y los materiales obtenidos mantienen sus propiedades al fundirse repetidas veces.
Para separarlos del resto se utiliza un mecanismo denominado de corrientes inducidas de Foucault que proyecta
hacia fuera de la cinta transportadora los envases de aluminio, pega a ésta los férricos y deja igual a los
demás. En combinación con sistemas de electroimanes sirve para completar la separación de los metales.

Otros residuos.

Los neumáticos pueden sufrir diferentes procesos:

 Recauchutado.Con lo que puede volver a utilizarse. Consiste en volver a realizar el dibujo


gastado.
 Corte. Para que mediante un fundido a presión se puedan fabricar felpudos, zapatillas,
etc.Trituración. Con dos variantes:
o Trituración a temperatura ambiente.
o Trituración criogénica.
Ésta última utiliza bajas temperaturas por debajo de su temperatura de transición
vítrea convirtiéndolo en un material frágil y quebradizo. Se obtiene así un grano
fino y homogéneo.
 Triturado se emplea en :
o Como caucho asfáltico. Mejora el drenaje de la capa asfáltica así como prolonga la
duración del pavimento y reduce su fragilidad.
o Como hormigón de asfalto modificado.
o Como combustible en grano. El caucho compuesto por un 83% de carbono en peso
tiene una capacidad calorífica de 35MJ/kg. La combustión debe estar muy
controlada porque los neumáticos contienen azufre.
o Pirólisis.
o Utilización en el compostaje de fangos. El neumático triturado se utiliza para
favorecer la oxigenación y el compostaje.

Las pilas presentan diversos grados de potencial contaminante. Según su composición y tipo tendrán como
destino el reciclado o el depósito controlado en un depósito de seguridad.

Son reciclables las pilas botón de óxido de mercurio, óxido de plata y las de níquel-cadmio. El mercurio se
recupera mediante un proceso de destilación.

Los aceites de automoción usados son residuos peligrosos. Contienen productos de la degradación de los
aditivos que se les añaden como fenoles, compuestos de cloro, hidrocarburos polinucleares aromáticos clorados
(PCB), compuestos de plomo, etc. Son procesados por destilación que permiten obtener nuevamente aceites de
una calidad comparable a los obtenidos del crudo petrolífero.
Por último los residuos voluminosos como muebles, electrodomésticos son recuperados por particulares y
asociaciones que los reparan y revenden o utilizan. Hay que hacer la salvedad de que ciertos electrodomésticos
de línea blanca como frigoríficos deben tratarse para su desguace por personal especializado por contener CFC,
PCB, etc. Igualmente el material electrónico debe ser tratado de forma especial para evitar que dañe el medio
ambiente.

La valorización energética.

La incineración de basuras está ampliamente extendida en algunos países como Dinamarca, que incinera hasta
un 56% de sus RSU. Los Países Bajos y Suecia incineran un 30% y los Estados Unidos sólo un 16%. En nuestro
país existen 22 plantas incineradoras que queman un 6% de los residuos.

La incineración consiste en la oxidación total de los residuos en exceso de aire y a temperaturas superiores a
850ºC según la normativa europea. Se realiza en hornos apropiados con aprovechamiento o no de la energía
producida en cuyo caso se habla de valorización energética.

Los elementos que componen una planta de incineración de residuos urbanos son :

1. Foso receptor.
2. Tolvas de carga.
3. Alimentadores del horno.
4. Horno u horno caldera si se produce energía.
5. Cámara de combustión.
6. Inyección de aire (comprimido).
7. Circuito de agua.
8. Turbo grupo si se produce energíaSistema de depuración de gases.
9. Sistema de evacuación de gases (chimenea).
10. Sistema de captación de partículas.
11. Sistema de enfriamiento de escorias y cenizasSistemas de estabilización de escorias y
cenizas.
12. Vertedero controlado para los residuos (escorias, cenizas, etc).

En la figura se esquematiza la instalación de una planta de valorización energética, en la que el combustible


habitual de la misma, usualmente carbón se ha sustituido por RSU El vapor de agua producido se emplea en la
producción de electricidad o para calefacción doméstica.

 Ventajas e inconvenientes de la valorización.

La valorización presenta una serie de ventajas :

1. Reducción del volumen de la basura hasta en un 90 %.


2. Recuperación de energía.
3. Las cenizas son más estables que los residuos de partida.

La valorización energética de los residuos consiste en la obtención de energía a partir de su combustión. El


poder calorífico de los residuos es variable, en el caso de los plásticos hidrocarbonados se estima que es
comparable a la de los derivados del petróleo con algunas ventajas medioambientales como la de no generar
óxidos de azufre, causantes de la lluvia ácida. Sin embargo la combustión de P.V.C genera un 50% de energía
que los anteriores.

Los inconvenientes que se presentan :

1. La combustión indiscriminada de la basura sin separación produce como efecto de la


combustión determinados productos muy tóxicos. La presencia de PVC en la mezcla, aporta
a los gases de combustión ácido clorhídrico que en presencia de materia orgánica puede
originar productos tóxicos derivados de las dioxinas y de los dibenzofuranos.
2. Las cenizas producto de la combustión contienen metales pesados, tales como el cadmio en
cantidades consideradas peligrosas y deben recibir un tratamiento especial como residuos
peligrosos.
3. Como consecuencia de los dos puntos anteriores es necesario hacer cuantiosas inversiones
tecnológicas.
4. Si se incineran materiales reciclables por otros procedimientos se produce un consumo de
recursos valiosos.

Como respuesta a estos problemas la tecnología de la incineración se ha desarrollado mucho los últimos años
con el fin de reducir las emisiones de gases y humos. Las incineradoras operan a temperaturas elevadas con el
fin de destruir dioxinas y furanos, normalmente lo hacen a 1000ºC. Por otro lado y para garantizar la
composición de los gases emitidos incorporan unidades de lavado y filtros adecuados. Todo ello regulado por
una estricta normativa tanto europea como nacional.

Existen varias tecnologías de proceso : parrilla, lecho fluidizado y plasma. El objetivo de todas ellas es el de
conseguir la combustión total y emitir a la atmósfera tan sólo dióxido de carbono y agua, después de haber
quedado retenidos los metales pesados, gases ácidos y partículas generadas durante el proceso de combustión.
De todas ellas la tecnología del lecho fluidizado permite emisiones por debajo de los límites establecidos. Se
emplea un buen contacto en una cámara de postcombustión del comburente con un lecho de arena calentado a
850ºC en presencia de un porcentaje superior al 6% de oxígeno en un periodo de al menos dos segundos.

Recientemente la compañía Solvay, fabricante de productos clorados, entre ellos el PVC, ha desarrollado una
tecnología de combustión (NEUTREC®) que garantiza el control de los gases emitidos a la atmósfera y la
recuperación de las cenizas generadas. El proceso se basa en la incorporación de bicarbonato sódico por vía
seca en la corriente gaseosa. Se logran así grandes mejoras con respecto a los procesos húmedos y semisecos
empleados anteriormente. La novedad radica en la posibilidad de separar los productos sólidos residuales de su
contenido en metales pesados y compuestos orgánicos y reciclarlos en la industria química.

Los gases han de estar en contacto con el bicarbonato sódico durante dos segundos a temperaturas mayores de
140ºC para conseguir la neutralización completa. A continuación los gases pasan por los filtros de mangas para
retener partículas de polvo y en uno de ellos existen partículas de carbón activo para retener los metales
pesados las dioxinas y los furanos.

Vertederos sanitariamente controlados.

Una vez realizados todos los tratamientos anteriores todavía persiste una fracción de los residuos denominada
rechazo, que no se ha podido reciclar o valorizar y cuyo destino final es el vertedero controlado.

Un vertedero se considera sanitariamente controlado cuando se toman las medidas necesarias para evitar que
resulte nocivo, molesto o cause deterioro al medio ambiente.

Consiste en una depresión del terreno natural o artificial en la que se vierten, compactan y recubren con tierra
diariamente los residuos acumulados. En el fondo se trata de un tratamiento biológico de los desechos. En
ausencia de oxígeno se produce una descomposición anaerobia de los mismos que degrada la materia orgánica
a formas más estables y da lugar a la formación de biogás, mezcla de gases entre los que destaca el metano.
En función de cómo se dispongan los residuos y la tierra de cubrición, de lo que resulta el grado de
compactación, se distinguen tres tipos de vertederos:

1. De baja densidad.
2. De media densidad.
3. De alta densidad.

En los primeros los residuos se extienden y compactan en capas de 1,5 a 2,5 m de espesor que se cubren con
una capa de tierra diaria de 20-30 cm. Es necesaria la cubrición diaria. La densidad que resulta es de unas 0,5
Tm/m2. En los de densidad media, con densidades de 0,8 Tm/m2, las capas de residuos tienen espesores
inferiores a los de baja densidad y no necesitan una cubrición tan frecuente. El espesor de las capas de residuos
en los de alta densidad es aún más pequeño que en los dos casos anteriores, lo que unido a la utilización de
compactadores potentes da como resultado densidades de aproximadamente 1 Tm/m?.

Ref:

https://www.cenaque.org.uy/archivos/gest_residuos.pdf

https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/health-care-waste

http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1561-30032000000200006

http://dspace.unach.edu.ec/bitstream/51000/2538/2/UNACH-IPG-ENF-CLI-QUI-2016-ANX-003.1.pdf

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