En el panorama actual de los Estados europeos y las sociedades occidentales devastadas por las
ideologías marxistas de la corrección política que se imponen sobre la realidad y la razón, con temas
y consignas que le son propias, y dominadas por la consiguiente dictadura del pensamiento único,
Hungría y Polonia brillan como referentes de resistencia moral y de libertad, al construir su futuro
con los valores de la civilización occidental y de sus propias tradiciones culturales y religiosas.
El combate por el derecho a la vida en la etapa prenatal, que es jurídico, político y cultural, resulta
cada vez más arduo, tanto en España como en la mayoría de los países europeos, por la falta de
compromiso con este derecho de la mayoría de los partidos parlamentarios, por la consolidación social
de la idea del aborto como derecho de la mujer y por el avance legal de la ideología de género, que lo
promueve. La situación no es uniforme en Europa, pero Polonia y Hungría, son sin duda, el modelo
para superar el aborto, con sus medidas legislativas y sus políticas públicas de apoyo a la maternidad
e impulsando una cultura de vida en el conjunto de la sociedad.
El reto principal en las sociedades occidentales caídas en el error del “derecho a decidir” de la mujer
sobre la vida del ser concebido es hacer resurgir en la sociedad una conciencia de respeto al derecho
a la vida y establecer la debida protección del niño por nacer.
Desde mediados del siglo XX se extendieron los errores del marxismo por Occidente. El más
pernicioso fue el aborto libre como paradigma de la emancipación de la mujer, y basado en el
negacionismo de que el feto es un ser humano contra toda evidencia científica. La incorporación
del aborto libre en las legislaciones y su amplia aceptación social está en el origen de la
decadencia moral y cultural de Europa.
El Tribunal Constitucional dio la razón al grupo de parlamentarios del partido conservador Prawo i
Sprawiedliwość (PiS, Ley y Justicia), que encabeza una coalición en Polonia con mayoría absoluta,
que presentaron un recurso de inconstitucionalidad sobre el aborto por malformación del feto,
alegando que era una forma de eugenesia que no respeta la dignidad humana y, por lo tanto,
no podía tener cabida en la Constitución del país. Con la publicación de la sentencia el 27-01-2021,
entró en vigor la prohibición del aborto eugenésico en Polonia.
POLONIA
También Polonia lleva a cabo una política de apoyo a la familia considerándola la base absoluta
de la sociedad. Los subsidios a las familias son la medida estrella del partido en el Gobierno, Prawo i
Sprawiedliwość, (PiS, Ley y Justicia) presidido por Jarosław Kaczyńskiha, que realiza una firme política
de promoción de la natalidad.
La medida principal es un programa denominado 500+, en vigor desde el 1 de abril de 2016, y
contempla la entrega a las familias de 500 zlotys (117 euros) mensuales a partir del segundo hijo. La
medida cuesta unos 4.000 millones de euros al año.
Las ayudas a la natalidad puestas en marcha en 2016, se hicieron universales en 2019, las familias
polacas tienen ya la seguridad de contar con unos ingresos estables adicionales para poder tener
más hijos. Los pagos son universales y benefician a todas las familias, independientemente de sus
ingresos. Pasan de afectar a 3,6 millones de niños a 6,8 millones gracias a esta ampliación. Para
ver la importancia de la ayuda, hay que señalar que los 117 euros suponen casi el 40% del salario
mínimo polaco, y están siendo decisivos en la lucha contra la pobreza infantil, que se ha reducido
del 11,9% al 2,8%.
En el tiempo trascurrido ya se observan los resultados positivos en los nacimientos, el mismo año
2016 hubo un incremento importante, un total de 382.000, lo que significó un aumento de 13.000
respecto al año anterior. Y en 2017 se alcanzaron los 402.000 nacimientos, es decir, 20.000 más que en
el año precedente, según la Oficina Central de Estadísticas (GUS).
Su política económica también tiene resultados positivos, es el país con menor tasa de paro de
la Unión Europea, un 3,1%, (enero de 2021), frente al 7,3% de la media y el 16% de España.
24 de junio de 2021