TECNOLÓGICO NACIONAL DE MÉXICO

INSTITUTO TECNOLÓGICO DEL VALLE DE ETLA

INGENIERÍA EN ENERGÍAS RENOVABLES

NODO: UNIÓN HIDALGO

ENGLISH

NEVEL A2
Homework invented story
“The abandoned house”

Student name:

López Martínez Aurora

Control number

18770029

Teacher

M.C. Hiram Sánchez Martínez

6º st

Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, México June 12, 2021

 La casa abandonada

Había una vez, tres mejores amigos Edwin, Robert y Aldrid, solían pasarla genial en el
parque y haciendo carreras, pero la mejor parte era cuando se iban en bicicleta por su calle y
jugaban al fútbol. Ese día era como cualquier otro. Jugaron en el recreo hasta el cansancio y al
salir, acordaron cambiarse de ropa e ir a jugar al fútbol.
Al llegar con su bici al campo de fútbol, Robert organizó todo en la cancha para comenzar
a jugar, pero, sus amigos tardaban más de lo normal. Robert, se empezó a preocupar, en eso
los vio acercarse y murmuraban entre ellos.
- Robert dijo: - ¿Dónde estaban?, siempre llego tarde pero hoy tardaron más de la
cuenta.
- ¡No vas a creer lo que vimos! – dijo exaltado Edwin.
- O lo que creímos ver – se apresuró a decir Aldrid
- Tú sabes que era eso. ¡No lo niegues! Gritó Edwin.
- ¡A ver, a ver!, interrumpe Robert. Explíquenme qué está pasando, pero uno por uno,
porque no entiendo nada.
Es que veníamos en las bicicletas, y se me cayó el balón así que fui a buscarlo, terminé
frente a una casa abandonada al final de la calle. Al agacharme a recoger el balón, noté algo que
brillaba y….
- No se aguantó y se puso a husmear por la ventana. – reprochó Aldrid
- Quise investigar Aldrid; entonces, lo vimos.
- ¿Qué vieron? – preguntó Robert *impaciente*
- ¡Un fantasma!
- ¿Un fantasma?
- Sí, con el traje blanco. Estaba frente a nosotros y nos gritó que nos fuéramos con una
voz horrible.
- ¿y qué más?
- Salimos corriendo, montamos nuestras bicis y salimos a toda velocidad.
- Bueno. Dijo: - Robert. Entonces no estamos seguros de que fuera un fantasma. Yo
digo que mañana al salir de la escuela podríamos echar un vistazo.
- ¿Mañana? – preguntó Edwin.
- Ni se te ocurra que lo hagamos ahora. Ya es tarde y está oscureciendo. Dijo: - Aldrid.
- ¡Por eso! No esperen que vayamos a estas horas. Así contamos con el factor
sorpresa. Dijo: - Robert
 - No Edwin, creo que Aldrid tiene razón. Es tarde, nuestros padres nos esperan en
casa. Menor es que mañana salgamos de la escuela y directo a investigar. Dijo: -
Robert.
Entonces, ya de acuerdo, cada uno se fue a su casa, pero ninguno logró dormir. Al día
siguiente, según lo acordado, salieron de la escuela directo a buscar sus bicicletas y a investigar.
Ya frente a la casa abandonada, los tres amigos se armaron de valor, se bajaron de sus
bicicletas, se acercaron lentamente a la puerta de la vieja casa y a medida que se acercaban, el
ritmo de sus corazones y de su respiración aumentaba. Cada uno por su parte, quería salir
corriendo y retroceder, pero se miraban entre sí (para darse valor) y seguían avanzando. A
escondidas el tramo que los llevaba frente a la puerta y cuando iban a abrirla, se movió la manilla,
en eso se abrió la puerta. Los tres salieron corriendo y tras ellos iba la figura de aquel ser de
blanco que habían visto el día antes a través de la ventana:
- ¡Alto ahí! Esperen niños
Pero los chicos no querían detenerse hasta que Edwin se enredó y se cayó. Sus dos
amigos tuvieron que parar para ayudarlo a levantarse y entonces los alcanzó aquella figura (el
ser de color blanco). Ahora que lo tenían tan cerca podían ver que se trataba de un hombre alto
que tenía un traje blanco como de astronauta.
- ¿qué hacen aquí niños? – dijo el hombre a través de su traje. Puede ser peligroso.
Y los niños se quedaron como congelados del miedo.
- Por favor, niños. Llevo varios días tratando de fumigar este sitio para ver si hay algo
que se puede recuperar aquí o si debemos demoler para poder mudarnos.
- ¿Mudarnos? - dijo: - Aldrid
Sí, compré esta propiedad hace poco, pero ya vez que es un desastre, así que trato de
limpiar, pero ayer los vi husmeando y hoy están en mi patio. ¿Imaginas la cantidad de insectos
que hay aquí? No deberían acercarse. No hasta que haya terminado. Les dijo el hombre mientras
ellos se alejaban en sus bicicletas. Mientras se alejaban, un vecino les advirtió que jamás
volvieran a ese lugar, porque habían asesinado hace varios años un señor de traje blanco; y solo
los niños de corazón puro podían verlo.

EL FIN
 The abandoned house
Once upon a time, three best friends Edwin, Robert and Aldrid, used to have a great time

in the park and going for runs, but the best part was when they would ride their bikes down their

street and play soccer. That day was like any other. They played at recess until they got tired and

when they left, they agreed to change clothes and go play soccer.

Arriving with his bike at the soccer field, Robert organized everything on the field to start

playing, but his friends were taking longer than usual. Robert began to worry, when he saw them

approaching and whispering to each other.

- Robert said: - Where were you, I'm always late but today you took longer than usual.

- You won't believe what we saw! - said Edwin exalted.

- Or what we thought we saw," Aldrid hastened to say, "You know that's what it was.

- You know that's what it was. Don't deny it! Edwin shouted.

- Let's see, let's see," interrupted Robert. Explain to me what's going on, but one by one,

because I don't understand anything.

We were riding our bikes, and I dropped the ball so I went to pick it up, and ended up in

front of an abandoned house at the end of the street. As I bent down to pick up the ball, I noticed

something glowing and.....

- He couldn't stand it and started peeping through the window. - reproached Aldrid

- I wanted to investigate Aldrid; then, we saw it.

- What did you see? - asked Robert *impatiently*.

- A ghost!

- A ghost?

- Yes, in the white suit. He was in front of us and screamed at us to leave in a horrible

voice.

- And what else?

 - We ran out, mounted our bikes and sped off.

- Well. He said: - Robert. So we're not sure it was a ghost. I say tomorrow after school we

could take a look.

- Tomorrow? - Edwin asked.

- Don't even think about doing it now. It's already late and it's getting dark. He said: - Aldrid.

- That's why! Don't expect us to go at this hour. That way we have the element of surprise.

He said: - Robert

- No Edwin, I think Aldrid is right. It's late, our parents are waiting for us at home. We'd

better get out of school tomorrow and go straight to research. He said: - Robert.

Then, in agreement, they each went home, but none of them managed to sleep. The next

day, as agreed, they left the school to get their bicycles and investigate. Already in front of the

abandoned house, the three friends plucked up courage, got off their bicycles, slowly approached

the door of the old house and as they got closer, the rhythm of their hearts and breathing

increased. Each in turn, they wanted to run away and turn back, but they looked at each other

(for courage) and kept moving forward. Sneaking the stretch that led them in front of the door and

as they were about to open it, the handle moved, at that the door opened. The three of them ran

out and behind them was the figure of that being in white that they had seen the day before

through the window:

- Hold it right there! Wait children

But the boys didn't want to stop until Edwin got tangled up and fell. His two friends had to

stop to help him up and then that figure (the white being) caught up with them. Now that they were

so close they could see that it was a tall man in a white astronaut-like suit.

- What are you kids doing here? - said the man through his suit. It can be dangerous.

And the children stood as if frozen with fear.

- Please, children. I have been trying to fumigate this place for several days to see if there

is anything that can be salvaged here or if we should demolish it so we can move.

 - Move? - he said: - Aldrid

Yes, I bought this property recently, but you can see it's a mess, so I'm trying to clean up,

but yesterday I saw them sniffing around and today they're in my yard. Can you imagine the

amount of insects here? They shouldn't come near it. Not until I'm done. The man told them as

they rode away on their bikes. As they walked away, a neighbor warned them never to return to

that place, because a man in a white suit had been murdered several years ago; and only pure-

hearted children could see him.

THE END