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Universidad de Lujan.
Y te esnifo la cabeza cada día más, cada día más y me esnifan la cabeza y nada ni nadie
nos puede… nos puede parar.
you should feel what I feel, you should take what I take
Dentro de este tipo de vínculos que un sujeto puede hacer con una sustancia
podemos discriminar: un uso, el consumo es aleatorio sin un encuadre especifico en
donde no se han dañado las capacidades de la persona; un abuso, el consumo tiene
una frecuencia sistemática y posee un encuadre especifico en donde las capacidades
de la persona se ven comprometidas y/o dañadas; una dependencia, el consumo es
irrefrenable donde las capacidades de la persona están seriamente dañada. A su vez
se puede interpretar el nivel de compromiso que posee con la sustancia donde las
variables son: el tipo de sustancia, la frecuencia de consumo, las características de la
persona que consume y el contexto del consumo.
Definiendo un problema
1
“El síndrome de la adolescencia normal. Un enfoque psicoanalítico.” (Editorial Paidós (1971)
organizaciones de la sociedad civil; con el fin de armar redes institucionales que actúen
de modo descentralizado.
Capriati y Cols. (2015) identifican seis dimensiones que sobre las estrategias de
abordaje que posee el método Sociocomunitario:
Plantear que las estrategias de abordaje deben tener en cuenta un doble movimiento,
hacia el interior atrayendo a todos los actores sociales, instituciones y redes que trabajen
en torno a la problemática; y hacia afuera haciendo presente la temática de los
consumos problemáticos de sustancias en el resto de las políticas y provocando
articulaciones mediante la participación.
Lapalma y de Lellis (2012) proponen que la psicología comunitaria posee cinco
elementos básicos: a) incluir la participación de las personas en las intervenciones
sociales que las involucran; b) tener como meta el cambio de la condiciones socio
ambientales que son un obstáculo; c) anticipar consecuencias o daños que surjan de
esas condiciones; d) lograr un desarrollo humano y bienestar de las personas y grupos;
e) reconocer las dimensiones de poder en la práctica social.
.Problema:
Objetivos Generales:
Objetivos específicos:
Estrategia Metodológica:
Se trabajara con un modo de intervención proversivas, donde según Ardoino2
son intervenciones que buscar criticar lo establecido buscando generar una dinámica
instituyente para la emergencia de nuevos sentidos tras el análisis de los componentes
ideológicos. Generando procesos intencionales de cambio mediante mecanismos
participativos tendientes al desarrollo de recursos de la población, al desarrollo de
organizaciones comunitarias autónomas, a la modificación de las representaciones de
su rol en la sociedad y sobre el valor de sus propias acciones para ser activo en la
modificación de las condiciones que las marginan y excluyen.
FODA
Población destinataria
2
Guattari, Félix et al (1981). La intervención institucional, Folios Ediciones, México, pág. 13-17.
La población destinataria directa, serán los adolescentes 14-18 años del barrio Padre
Varela de Lujan. La población destinataria indirecta es el grupo familiar conviviente y la
población general (familia, equipo de salud, instituciones barriales y municipales).
Situación habitacional
La mayoría de las viviendas del barrio Padre Varela, son viviendas pequeñas,
bajas, de material con techo de chapas. En su mayoría el grupo familiar conviviente es
mayor a la capacidad óptima de la misma, por lo que el hacinamiento es una de las
problemáticas.
Nivel de escolaridad:
Organigrama
Secretaría de Salud,
Medio Ambiente y
Desarrollo Humano
Dirección de
Dirección de Políticas
Medicina Preventiva Dirección de Dirección de Medio
Sociales y Atención Hospital
y Atención Primaria Discapacidad Ambiente
Directa
de Salud
Servicios
CAPS
Hospitalarios
EQUIPOS DE
PROFESIONALES
El trabajo en red con las instituciones del barrio y el municipio son de suma importancia
para fomentar la participación social para la ejecución del proyecto. La viabilidad del
mismo dependerá del trabajo para y con la población, con motivo de generar recursos
para la detección de las causas que se anteponen al problema de salud referido.
Para la elaboración del siguiente proyecto se construyó viabilidad social a través de:
Por último, para la construcción de la viabilidad técnica fue necesario el consenso del
equipo de salud en cuanto a la planificación, participación y colaboración en el
cumplimiento de los objetivos propuestos.
Resultados
Actividades Indicadores
(Objetivos específicos)
Cronograma de Meses
actividades
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24
1.1 – Contacto e x x x x x x x x x x
integración de instituciones
y actores sociales a
reuniones de abordaje.
1.2 - Presentación de x x x x x x x X
recursos intersectoriales a
las instituciones y actores
sociales.
1.3 -– Implementación de x x x x x x x
acciones territoriales con
el Caps.
2.1 - Talleres de x x x x
actualización profesional
con personal del CAP.
2.2 - Charlas informativos x x x x
con referentes de
organizaciones barriales y
con instituciones
educativas sobre leyes y
normativas vigentes sobre
el CPS.
2.3 -Producción de x x x x x x x x x x x x x x x x x x x X x x
actividades en el territorio
en base lo producido en
las reuniones de red.
3.1 - Organización de x x x x x x x x x x x x x x x x x x x X x x
equipo en el CAPS para
implementación de
actividades promocionales
de CPS.
3.2 - Elaboración de x x
protocolos institucionales,
guías de acciones, lugares
de derivación, seguimiento
de casos.
3.3 - Instrumentar los x x x x x x x x x x x x x x x x x x X x x
canales de comunicación
entre el primer y segundo
nivel de atención a través
de encuentros para
reforzar la referencia y
contra referencia.
4.1 - Revisión de x x x x x x x x x x x X
procesos tras
implementación,
rectificaciones necesarias.
Bibliografía:
• Aberastury, M.; (1971)“El síndrome de la adolescencia normal. Un enfoque
psicoanalítico.” Editorial Paidós
• Camarotti, A; Kornblit, A (2015) “Abordaje integral comunitario de los consumos
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• Epele, M.; Pecheny, M (2007) “Crisis económica, uso de drogas y vulnerabilidad: Hacia
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• Kornblit, A. (2004) “Nuevos estudios sobre drogadicción.” Buenos Aires. Biblos.
• Lourau, René (1970). “El análisis institucional”, Amorrortu Editores, Buenos Aires, 1975.
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• Menéndez, E (1990) “Morir de alcohol. Saber y hegemonía medica”.Mexico: Alianza
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• Menéndez, E (2009) “De sujetos, saberes y estructuras: introducción al enfoque
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• Menéndez, E (2012) “Sustancias consideradas adictivas: prohibición, reducción de
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• Montero M. (2005) “Introducción a la Psicología Comunitaria”. Buenos Aires: Paidós.
• Murcia, M. & Orejuela, J. (2014). Las comunidades teoterapéuticas y psicoterapéuticas
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Revista CES Psicología.
• Nieva P. (1995) “Centros de encuentro y acogida”. Madrid. PNSD.
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• Rantala y Sulkunen (2003) “The communitarian preventive paradox: preventing
substance misuse without the substance”.University of Helsinki. Finland.
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• Romaní, O. (2008) “Políticas de drogas: prevención, participación y reducción de daño”;
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• Souza, M. (2004). “Adicciones, psicopatología y psicoterapia”. Mexicana de
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• Souza, M. (2005). “Una mirada reflexiva a la terapéutica de las adicciones”. Mexicana de
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• Tognoni, G.(1997) “Manual de epidemiologia comunitaria”. Edición Cecomet.
• Tognoni, G.; Sampaoli, A.; Barri, H.; Butinof, M. (2011) “Manual de epidemiologia
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• Touzé, G. Rossi, D (1998) “La construcción del “problema droga” y “reducción de daños”.
En Drogadependencia, abordajes múltiples. Buenos Aires. Biblioteca medica digital.
• Touzé, G. (2010) “Prevención del consumo problemático de drogas. Un enfoque
educativo”. Buenos Aires, Ministerio de Educación, Troquel.
Anexo
Universidad Nacional de Lujan
Objetivos Generales:
Objetivos específicos:
Estrategia Metodológica:
Dentro de este tipo de vínculos que un sujeto puede hacer con una sustancia
podemos discriminar: un uso, el consumo es aleatorio sin un encuadre especifico en
donde no se han dañado las capacidades de la persona; un abuso, el consumo tiene
una frecuencia sistemática y posee un encuadre especifico en donde las capacidades
de la persona se ven comprometidas y/o dañadas; una dependencia, el consumo es
irrefrenable donde las capacidades de la persona están seriamente dañadas. A su vez
se puede interpretar el nivel de compromiso que posee con la sustancia donde las
variables son: el tipo de sustancia, la frecuencia de consumo, las características de la
persona que consume y el contexto del consumo.
Souza (2004) refiere que no solo se trata de lograr una correcta identificación
del reconocimiento de las personas transferencialmente distorsionadas, sino que se
permite un espacio de expresión sin miedo, angustia, vergüenza o culpa para lograr
aprendizajes, nuevas actividades y tipos de relaciones vinculares.
Entre las semejanzas que podemos encontrar en ambos abordajes son: cuentan
con un equipo profesional (al menos médicos y enfermeros); se basan en la vida
comunitaria, la autoayuda y el trabajo grupal; el tratamiento tiene componentes
terapéuticos educativos; el fin es la abstinencia total aunque algunas a lo largo del
tratamiento pueden incluir reducción de daños; son normativas estrictas con un sistema
de valores explícitos; trabajan con la familia como red de contención principal; tienen
etapas claras definidas, discretas y consecuentes; a medida que superan etapas ganan
jerarquía, responsabilidades para dentro de la comunidad y mayor autonomía, pueden
retroceder si se da una recaída, volver a consumir o realizar alguna acción sancionable
(Murcia y Orejuela; 2014).
Según Nieva (1995) las políticas de reducción de daños son tanto individuales
como colectivas que se desarrollan en el ámbito social, sanitario y terapéutico
encaminadas a minimizar los efectos negativos relacionados con el consumo de
sustancias; donde los objetivos generales pueden identificarse como: fomentar una
política en salud con una red de asistencia social para los usuarios de sustancias,
adaptada a sus necesidades y demandas, que permita accesibilidad al sistema de salud;
la creación de recursos de ayuda a los usuarios de sustancias que no necesariamente
implique un ingreso a un tratamiento para su consumo; dar cuenta de una realidad social
que no dejara de existir e impulsar un conjunto de ayudas sociales que vayan contra la
marginalidad, criminalización, exclusión de los usuarios.
Capriati y Cols. (2015) identifica seis dimensiones que sobre las estrategias de
abordaje que posee el método Sociocomunitario:
Conclusiones:
El método Sociocomunitario por articular dimensiones como la integralidad, enfoque de
vulnerabilidades sociales y determinantes sociales, cuidados ampliados, participación y
trabajo en red, es un modelo de abordaje subjetivante. Posee un enfoque de derechos,
es decir que la salud es un derecho fundamental y vital para la vida humana, teniendo
a la comunidad como elemento clave de acción, implicándola y acompañando la
construcción de su historia. Como respuesta a las problemáticas el modelo
Sociocomunitario corresponde a un abordaje situacional, no hay recetas a priori ni
protocolos, se trata de estrategias de abordajes que construyan un sistema de toma de
decisiones, prácticas y respuestas críticas, reflexivas, inclusivas y equitativas según
evaluación de una situación problema dentro de una comunidad mediante su
participación dentro de un plan programático. El desarrollo de estas prácticas es
superadoras de las viejas políticas y modelos, ofrece una nueva perspectiva de trabajo
con el consumo problemático de sustancias, no se trata de un modelo perfecto ni
acabado sino de un modelo que brinda respuestas eficaces a un viejo problema,
poniendo en evidencia la estructura de dicho problema. Por su parte este modelo
presentara nuevos obstáculos y dificultades, pero es a través del trabajo en territorio
que ellos serán yendo desarticulados. En un contrapunto a la critica que hace Rantala y
Sulkunen(4), en su texto de “La Paradoja Preventiva”, que no haya metas definidas a
priori no significa que no se tenga eficacia por la inespecificidad, no se trata de concebir
a la comunidad románticamente, se trata de un campo donde se da una lucha de
poderes, se trata de articular la demanda, esa demanda “indecible” donde este tipo de
problemáticas es el efecto, de deconstruir un sentido alienante para los sujetos y la
comunidad sobre malestares que sufren, para lograr una nueva discursividad donde
ellos sean autores donde la vida sea más vivible, más digna.
Referencias Bibliográficas:
1- Romaní; (2008) “Políticas de drogas: prevención, participación y
reducción de daño”; Salud Colectiva; Bs.As; Septiembre-Diciembre; pág.
304.
2- Foucault M. (1976) “Las redes de poder”, Edit. Almagesto; Paris; pág. 22.
3- Murcia, M. & Orejuela, J. (2014). Las comunidades teoterapéuticas y
psicoterapéuticas como tratamiento contra la adicción a SPA: una
aproximación a su estado del arte. Revista CES Psicología, 7(2), 153-172.
4- Rantala y Sulkunen (2003) “The communitarian preventive paradox:
preventing substance misuse without the substance”. University of
Helsinki. Finland. Sage Publication.
Bibliografía:
Camarotti, A; Kornblit, A (2015) “Abordaje integral comunitario de los consumos
problemáticos de drogas: construyendo un modelo”. Salud Colectiva, abril-junio, 2015.
Buenos Aires.
Capriari y Cols (2015) “La prevención de los consumos problemáticos de drogas desde
una perspectiva comunitaria: un modelo para armar”. Rev Salud publica, 2015. Buenos
Aires.
Epele, M.; Pecheny, M (2007) “Crisis económica, uso de drogas y vulnerabilidad: Hacia
una mirada crítica sobre las políticas de reducción de daños”.
Mendoza, M; Saldivar, G.; Loyola, L.; Rodriguez, E.; Galvan, J. (2010) “Inequidades de
género, abuso de sustanciasy barreras al tratamiento en mujeres en prisión”. Salud
Mental Vol. 33, No. 6, noviembre-diciembre 2010
Tognoni, G.; Sampaoli, A.; Barri, H.; Butinof, M. (2011) “Manual de epidemiologia
comunitaria: el camino de las comunidades”. Córdoba. Universidad nacional de
Córdoba.
Touzé, G. Rossi, D (1998) “La construcción del “problema droga” y “reducción de daños”.
En Drogadependencia, abordajes múltiples. Buenos Aires. Biblioteca medica digital.