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MISION SUCRE
ALDEA BOLIVARIANA DE TACARIGUA
TACARIGUA- EDO. MIRANDA
ESTUDIOS JURIDICOS
CONTRATOS
PROFESORA: TRIUNFADOR:
ACUERDO
- Es un negocio jurídico bilateral que consiste en la manifestación de voluntad de dos
o más personas que coinciden en la determinación o solución de un asunto de
interés común.
- En el acuerdo deben coincidir dos o más personas en las voluntades y no por todas
las personas
- En cambio la convención y el contrato si requieren de la voluntad unánime de todos
los intervinientes.
CONVENCIÓN
- Es un concierto entre dos o más personas para realizar un determinado fin.
- Es un negocio jurídico bilateral integrado por varias voluntades identificadas en la
consecución de un fin u objeto jurídico.
El Código Civil soviético solo expresaba que "Los actos jurídicos, esto es, los actos que
tienden a establecer, modificar o extinguir relaciones de Derecho Civil, pueden ser
unilaterales o bilaterales (contratos)".-
En cada país puede existir un concepto de contrato diferente, y esa divergencia tiene
que ver con la realidad socio-cultural y jurídica de cada país (existen ordenamientos en
que el contrato no se limita al campo de los derechos patrimoniales únicamente, sino
que abarca también derechos de familia como, por ejemplo, los países en los que el
matrimonio es considerado un contrato).
Las partes en un contrato son personas físicas o jurídicas. En un contrato hay dos polos
o extremos de la relación jurídica obligacional, cada polo puede estar constituido por
más de una persona revistiendo la calidad de parte.
Aunque ningún artículo del Código Civil disponga expresamente que los contratantes
son iguales para contratar y tienen la misma capacidad económica para llevar a cabo la
negociación patrimonial ínsita en todo contrato, es evidente que tales ideas
constituyen la nervadura de la regulación del Código.
La formación del contrato es para el CC un asunto entre particulares que son iguales
ante la ley y que, por consiguiente, deben procurar la satisfacción de sus intereses de
forma personal e individual, sin reclamar la intervención arbitral de ente alguno.
La oferta contractual
Para el Código el paradigma formativo del contrato viene dado por el contrato
personalizado, en el que ambas partes, tras las correspondientes negociaciones
iniciales o tratos preliminares, en su caso, llegan a concordar sobre la celebración del
contrato.
En definitiva, la oferta contractual, para ser realmente tal, requiere que se mantenga
en sus condiciones iniciales en espera de la aceptación de la contraparte. Si se
modifican las condiciones de la oferta por el eventual aceptante, se está realizando
una nueva oferta (contraoferta), que habrá de ser aceptada por quien inicialmente
asumía la posición de oferente.
La aceptación es una declaración de voluntad por naturaleza recepticia, esto es, que
debe ser dirigida precisamente al oferente y ser plenamente concordante con la oferta
(o, en su caso, contraoferta), con independencia de que pueda realizarse tanto de
forma expresa, tácita, o a través de hechos concluyentes que no dejen lugar a dudas
sobre la admisión de las condiciones contractuales ofrecidas.
La perfección del contrato entre ausentes: la redacción originaria de los Códigos Civil
y de Comercio
3.- El contrato produce efectos obligatorios entre las partes (Es de obligatorio
cumplimiento).
Elementos Esenciales
Elementos Accidentales
Son aquellos que las partes establecen por cláusulas especiales, que no sean contrarias
a la ley, la moral, las buenas costumbres o el orden público.
En primer orden, debe apuntarse que por terminación de los contratos se entiende la
extinción de los mismos, en el sentido de que el contrato como tal deja de producir sus
efectos jurídicos normales y cesa de cumplir los fines para los cuales había sido
celebrado.
1°. La disolución de los contratos, denominada también revocación, aun cuando esta
última denominación es motivo de serias discusiones.
2°. La nulidad de los contratos, que supone la extinción de los mismos, por cuanto el
contrato adolece de vicios o anormalidades que impiden considerar configurados
elementos esenciales a su existencia o a su validez.
A continuación, se describe con más detalle cada uno de los modos de extinción de los
contratos ya señalados.
1° El contrato nulo es un contrato que nace viciado, por lo cual no puede producir sus
efectos normales; mientras que el contrato bilateral objeto de resolución es un
contrato que ha nacido perfecto, sólo que en el curso de su desarrollo una de las
partes incumple culposamente su obligación.
2° La nulidad (al igual que la disolución) es susceptible de aplicarse a todo tipo de
contrato, independientemente de su naturaleza. La resolución es un medio específico
de los contratos bilaterales.
Para que un contrato se configure de una manera efectiva no bastan los elementos
esenciales y la capacidad, también es necesario que el consentimiento otorgado por
las partes sea valido, es decir, que no existan ningún tipo de anormalidades que
invaliden el consentimiento otorgado por las mismas. En el articulo 1142 CCV se
consagra que el contrato puede ser anulado por vicios del consentimiento, a esto se le
agrega en el articulo 1146 CCV que el consentimiento otorgado bajo error excusable,
arrancado por violencia ó sorprendido por dolo, podrá pedir la nulidad del contrato.
Para la validez del contrato se requiere que la voluntad no esté presionada por
factores externos que modifiquen o que pretendan una intención diferente a la real. Se
trata de expresar erróneamente la relación entre lo querido y lo manifestado.
Estos vicios pueden ser substanciales o formales. Se tratará de un vicio substancial
cuando los autores del acto no los hubieren celebrado con intención; en cambio
existirá un vicio formal cuando los celebrantes del acto no hubieren observado las
formalidades establecidas por la ley para realizarlo.
Entre los vicios del consentimiento se encuentran el error, la violencia y el dolo, los
cuales producirán una nulidad relativa, pues primero deberá probarse cada vicio ante
un Tribunal de Justicia, una vez demostrado, es que se producirá la nulidad del acto a
través de una sentencia.
EL ERROR
El que haya incurrido en error y solicite por si solo la anulación del contrato, sin que la
otra parte conozca de esto, deberá pagar los daños y prejuicios que le sean
ocasionados a ella, por la anulación del contrato. Podrá subsanarse el error y omitir la
anulación sí antes de deducirse la acción o hasta el acto de la contestación de la
demanda, la parte que incurrió decide subsanar sin que existan perjuicios para el otro
contratante (art.1149 ccv). Hay que reiterar que solo el que erró podrá declarar nulo el
contrato.
Será error de derecho cuando la causa de la nulidad del contrato solo sea única o
principal. (Art 1147)
Será error de hecho cuando la anulabilidad sea producida porque recaiga en alguna
circunstancia que sea esencial porque así lo consideran las partes o porque
simplemente recaiga sobre una cualidad de la cosa, esto según lo estipulado en el art.
1148; en su último aparte menciona que es también causa de anulabilidad el error
sobre la identidad o las cualidades de la persona con quien se ha contratado, cuando
esa identidad o esas cualidades han sido la causa única o principal del contrato.
Error Obstáculo: aquel que logra impedir por su gravedad la concepción del
consentimiento, dado a su equivoca realidad. Constituye la diferencia entre la
voluntad interna y la voluntad que es oferta de contrato, por ende no hay acuerdo
de voluntades entre las partes.
Error Vicio: este vicio logra deformar el consentimiento en una circunstancia
que las partes han considerado como motivo esencial en el contrato.
Error Irrelevante: aquel que por no ser esencial, no logra afectar directamente
la validez del contrato. También llamado error en los motivos.
LA VIOLENCIA
Surge cuando se ejerce una fuerza irresistible que causa un grave temor a una de las
partes del contrato, o que una de las partes haya abusado de la debilidad de la otra. Sí
la persona obligada es violentada por una persona distinta a la que persona en cuyo
provecho se ha celebrado el contrato o la convención, aún se considerara, como
motivo de nulidad esta violencia (art. 1150).
Art.1151 ccv. El consentimiento se reputa arrancado por violencia, cuando ésta es tal
que haga impresión sobre una persona sensata y que pueda inspirarle justo temor de
exponer su persona o sus bienes a un mal notable. Debe atenderse en esta materia a la
edad, sexo y condición de las personas.
Si la violencia llega a ser propiciada contra la persona del cónyuge o sus bienes, un
ascendiente o descendiente del contratante, será también causa de anulabilidad. En
caso de otras personas, será el Juez quien pronuncie acerca de la anulabilidad o no de
la misma, según sean dadas las circunstancias (art.1152 ccv)
Acudir ante una autoridad judicial, en motivo de amenaza y para reclamar un derecho
no se entenderá como coacción, a no ser que se amenace abusivamente de este
derecho.
Requisitos de la Violencia
Debe ser determinante, causar una impresión suficiente como para temer a
exponerse a si mismo o a sus bienes a un mal notable.
Debe ser injusta la violencia
EL DOLO
La víctima del dolo puede mantener el contrato y reclamar daños y perjuicios, sin
embargo, este es causa de anulabilidad si así se desea, planteándolo así el articulo
1154.ccv en donde se establece que es causa de anulabilidad del contrato, cuando las
maquinaciones practicadas por uno de los contratantes o por un tercero, con su
conocimiento, han sido tales que sin ellas el otro no hubiera contratado.
La victima podría intentar también una acción por hecho ilícito.
Una conducta intencional o las maquinaciones dadas por el autor del dolo
Debe ser la causa de la aceptación del contrato; de haberse conocido el dolo,
no se hubiese celebrado el contrato
Debe ser emanado de alguna de las partes contratantes o de un tercero con el
conocimiento de esta parte. Si el tercero practica el acto sin darle a conocer a la
parte autora, la victima no podrá solicitar la nulidad
La nulidad viene a ser una sanción jurídica, la cual le va a restar la eficiencia a un acto
jurídico, que nació con algún vicio o que simplemente no se ha formalizado del todo en
lo que a derecho se refiere.
Tipos de nulidad:
Absoluta:
Aquella que debe ser declarada de oficio por el Juez, cuando el mismo se percate de la
existencia de la misma, esta no podrá ser saneada por la voluntad de las partes. Esta se
va a producir cuando el objeto o la causa sean ilícitas o por la falta de alguno de los
requisitos mencionados anteriormente. No hay nulidad absoluta explicita.
En este sentido el Dr. José Melich Orsini en su obra “Doctrina General del Contrato”,
sostiene lo siguiente: “...A. Según esto, LOS CARACTERES QUE DISTINGUEN A LA
NULIDAD ABSOLUTA SON LOS SIGUIENTES: La legitimación activa para hacer valer la
nulidad absoluta corresponde a cualquiera que tenga interés en hacerla valer. De la
misma manera, la nulidad del acto podrá ser invocada contra cualquier persona.
Siendo inexistente el acto, esta inexistencia se impone a todos, por lo que bastará que
la nulidad haya quedado comprobada ante el Juez para que éste deba declararla en
cualquier estado y grado de la causa, aun de oficio...”. (José Melich Orsini. “Doctrina
General del Contrato”, Tercera Edición. 1997, Página 335.)
Siendo la nulidad contractual un medio de terminación de los contratos según la
teoría de las nulidades; pues bien Nuestro Código Civil establece: “LAS ACCIONES DE
NULIDAD” como Causas de Extinción de las Obligaciones. Así, el Art.1.157 CC., regula
que la “obligación sin causa”, o con “causa ilícita o falsa” no produce efectos jurídicos
válidos, carece de eficacia jurídica.
Relativa:
Cuando puede ser saneada por la voluntad de las partes. Se producirá por cualquier
vicio que da derecho a la rescisión del acto o contrato. Es necesario que sea alegada y
probada en juicio para que sea declarada.
Acción de anulación:
Un contrato anulable será aquel declarado nulo, o bien aquel en el cual la anulación no
tenga lugar y por lo tanto siga produciendo sus efectos.
Causas:
Vicios en el consentimiento
Incapacidad de obrar de alguno de los contratantes
Duración:
Esta acción dura cinco (5) años. Por lo tanto la ley expresa un tiempo de caducidad
esto quiere decir que vencido el mismo, no podrá invocarse su nulidad.
Efectos:
Bien siendo un contrato celebrado por dos personas con mutuo consentimiento, los
mismos tendrán la opción de disolverlo; es decir; asi como decidieron celebrarlo,
podrán decir ya no hacerlo.
Tal y como lo establece el Art. 1159: “Los contratos tienen fuerza de ley entre las
partes. No pueden revocarse sino por mutuo consentimiento o por “los casos
autorizados por la ley”.
La rescisión:
Es el medio por el cual se protege a una de las partes, cuando estas pueden verse
perjudicadas.
Causas:
El contrato cumple con todos los requisitos para su existencia y no posee vicio alguno
que pueda conducir a su anulación, pero si produce un daño a alguno de los
contratantes. Es decir, se esta en presencia de un contrato que bien pudiendo ser
celebrado con validez, aun así produciendo un perjuicio a una de las partes, el mismo
puede ser declarado ineficaz a petición de la parte afectada.
Error de Derecho:
“El error de derecho es aquel que recae sobre la existencia, la circunstancia, los efectos
y consecuencias de una norma jurídica.
La eficacia del contrato se despliega entre las partes que lo celebran y sus herederos.
Los contratos solo producen efectos entre las partes que los otorgan y sus herederos;
salvo, en cuanto a estos, el caso en que los derechos y obligaciones que procedan del
contrato no sean transmisibles o por su naturaleza o por pacto, o por disposiciones de
la ley". No hay por tanto eficacia para terceros ni para los causahabientes a título
particular.
LA AUTONOMÍA DE LA VOLUNTAD
1.133 define al contrato como aquella convención entre dos o más personas para
constituir, reglar, transmitir, modificar o extinguir entre ellas un vínculo jurídico. La
voluntad se encuentra entonces en la base del mecanismo contractual de donde
derivan múltiples consecuencias.
Dentro del sistema venezolano, el aparte único del artículo 12 del Código de
Procedimiento Civil es la norma encargada de establecer los criterios a ser
considerados en la interpretación del contrato. De acuerdo con la norma citada, “En la
interpretación de contratos o actos que presenten oscuridad, ambigüedad o
deficiencia, los Jueces se atendrán al propósito y a la intención de las partes o de los
otorgantes, teniendo en mira las exigencias de la ley, de la verdad y de la buena fe”. En
torno a esta norma conviene aclarar, en primer lugar, que la misma no constituye una
consagración del principio in claris non fit interpretatio, pues justamente, el admitir
que un contrato es claro en su formulación requiere un proceso previo de
interpretación.
Ahora bien, la norma citada consagra como principal criterio de interpretación del
contrato a la voluntad real de las partes, dándole preferencia por encima de la
voluntad declarada. Sin embargo, el legislador no consagró las pautas que el juez habrá
de seguir para aplicar este postulado99, más bien estableció tres criterios que vendrían
a poner límites objetivos a la búsqueda de la intención de las partes: la Ley, la verdad y
la buena fe.
En relación con la buena fe, el propio autor afirma que el intérprete, en su búsqueda
de la común intención de las partes, debe partir del presupuesto de que cada una de
ellas ha actuado con recíproco espíritu de lealtad, al elegir los signos sensibles dirigidos
a expresar el intento común.
El juez –afirma Mélich Orsini– no puede limitarse simplemente a esclarecer lo que las
partes han querido, sino que cuando éstas no hayan previsto la situación sobre la cual
exista controversia, deberá acudir a la norma citada, para completar ese cuerpo
normativo encarnado en las declaraciones contractuales con preceptos que no podría
decirse seriamente que provienen de la voluntad de las partes102. En efecto, las
normas supletorias, cuya aplicación está supeditada al silencio de las partes, los usos
normativos y la equidad, serán consideradas para integrar las lagunas dejadas por las
partes en el contrato.
No existe en nuestro sistema civil una norma que establezca los criterios a ser
considerados para la interpretación de los contratos de adhesión y los contratos
electrónicos. A salvo, la ya anotada opinión de Mélich Orsini en favor de la
consideración de la regla contra proferentem para llegar, con miras a las exigencias
impuestas por la verdad, a la común intención de las partes104.
Definiciones
El autor civilista, Maduro Luyando (ob. cit.), parte de la noción de que la acción
resolutoria “es la facultad que tiene una de las partes en un contrato bilateral, de pedir
la terminación del mismo y en consecuencia ser liberada de su obligación, si la otra
parte no cumple a su vez con la suya”.
Ossorio (2006), indica que esta acción en estudio, “es la ejercida para que se proceda a
la resolución forzosa de un contrato u obligación al que no se accede
extrajudicialmente”. (p. 40)
Esta acción, encuentra su base legal en el artículo 1167 del Código Civil venezolano
vigente, el cual dispone: “En el contrato bilateral, si una de las partes no ejecuta su
obligación, la otra puede a su elección reclamar judicialmente la ejecución del contrato
o la resolución del mismo, con los daños y perjuicios en ambos casos, si hubiere lugar a
ello”.
1° La nulidad es un modo de terminación de los contratos que han nacido con un vicio
que afecta su eficacia. La resolución es un modo de terminación de contratos que han
nacido legalmente perfectos y que producen los efectos normales propios de todo
contrato válido.
2° Las causas de nulidad surgen con el contrato mismo. Las mismas causas de
resolución (incumplimiento culposo) surgen después que el contrato se ha
perfeccionado.
La rescisión es un medio especial para atacar ciertos contratos bilaterales, que si bien
no violan ninguna cláusula de orden público, establecen una desproporción excesiva
entre las prestaciones de las partes en perjuicio o detrimento de una de ellas.
La doctrina expone que en general la rescisión tiene carácter subsidiario y sólo opera
en falta de otro recurso capaz de colocar a las partes en situación de equilibrio. La
resolución no tiene carácter subsidiario, ni tampoco opera a falta de otro recurso.
Efectos de la Resolución
3° La acción resolutoria es una acción. Es un medio o poder jurídico de acudir ante los
órganos jurisdiccionales a fin de impugnar un contrato solicitando su terminación, es
un medio de ataque para tener la terminación de un contrato. La excepción non
adimpleti contractus es un medio de defensa que opone la parte de un contrato
bilateral, para ser liberada del cumplimiento de sus obligaciones, cuando es
demandada para tal cumplimiento por la otra parte que a su vez no ha cumplido con
sus propias obligaciones.
Definiciones
Para Ossorio (2006), esta excepción “es aplicable al caso de que, en los contratos
bilaterales, una de las partes no cumpla con su prestación, o no se allane a cumplirla
simultáneamente; entonces, por esta exceptio, la otra parte puede abstenerse de
cumplir la suya”. (p. 390).
4° Es necesario que las obligaciones surgidas del contrato bilateral sean de ejecución
o cumplimiento simultáneo, que el orden de cumplimiento sea el ordinario, el dando y
dando. Si las obligaciones de una de las partes están sometidas a algún término o
condición, de modo que su ejecución sólo fuese exigible después de cumplirse esas
modalidades, y las obligaciones de la otra parte fueren de ejecución inmediata, la
parte a quien se le exigiere el cumplimiento no podría oponer la excepción, pues ésta
supone el incumplimiento de la otra parte y tal incumplimiento no ha podido suceder
mientras no se cumplan las modalidades que hacen exigible la obligación. Por ejemplo.
La excepción non adimpleti contractus suspende los efectos del contrato y no lo
extingue, lo que la diferencia de la acción resolutoria, que está dirigida a obtener la
terminación del contrato. El contrato objeto de la excepción queda suspendido hasta
que la parte que ha motivado su oposición cumpla su obligación, con lo que se vuelve a
imprimir vida al contrato.
Sólo por excepción, existe un tipo de contratos en los cuales la excepción non
adimpleti no tiene los efectos suspensivos descritos, sino que los extingue; ello ocurre
en los contratos de tracto sucesivo, en los cuales la excepción non adimpleti contractus
deja insubsistente el contrato durante el lapso en el cual la parte que provoca su
oposición deja de cumplir con su obligación. Por ejemplo, en un contrato de
arrendamiento fijado pan comenzar el 1° de julio, si el arrendador no cumple su
obligación de poner al arrendatario en el goce y disfrute de la cosa arrendada sino
hasta el día 1° de septiembre, y el día 31 de julio exige el pago del canon, la excepción
non adimpleti deja insubsistente el contrato por todo el lapso durante el cual el
arrendador no cumple, de modo que sólo a partir del 1 ° de septiembre es cuando el
arrendador puede exigir dicho pago.
La Teoría de los Riesgos
En primer orden, resulta pertinente aclarar lo que debe entenderse por riesgo, así se
puede decir que riesgo o peligro es la situación jurídica que se presenta cuando las
partes de un contrato, o una de ellas, se encuentran en la imposibilidad de cumplir sus
obligaciones o sus prestaciones debido a una causa extraña que no les es imputable.
De allí pues, que la teoría del riesgo analiza la noción de riesgo en los diversos tipos de
contratos conocidos. El problema a determinar radica en fijar los efectos de la
imposibilidad de la ejecución de la prestación por el deudor y los recursos que el
acreedor puede o no tener para pedir el cumplimiento.
Efectos
En opinión del autor Maduro Luyando, ello sería la solución correcta, porque de lo
contrario se consagraría un enriquecimiento sin causa en favor de la parte que cumplió
prestaciones por un menor valor.
Principios
La Teoría del Riesgo, plantea soluciones que oscilan alrededor de dos grandes
principios: el “res perit domino”, que hace recaer los riesgos de la cosa sobre la
persona que es titular del derecho de propiedad sobre la misma, y el principio “res
perit creditori”, que ordena que los riesgos recaigan sobre el acreedor o sujeto activo
de la obligación.
Igualmente cabe observar que la expresión “res perit creditori” y su noción antagónica
“res perit debitori” se aplican con preferencia en materia de riesgos del contrato, más
específicamente en materia de riesgos de la relación obligatoria nacida de un contrato;
mientras que la expresión “res perit domino” se emplea con más frecuencia en materia
de riesgos de la cosa. Los principios expuestos varían según las situaciones a las que se
apliquen y presentan variedad de excepciones.
En criterio del autor Maduro (1987), toda solución en materia de riesgos es susceptible
de resolverse mediante la aplicación de la noción “res perit domino”, tanto en los
casos de que se trate de riesgos del contrato como cuando se trate de riesgos de la
cosa. Para ello se podría partir de una reestructuración del concepto del dominus.
Tradicionalmente se ha considerado el dominus como al propietario de la cosa, es
decir, el dominus supone una persona que está caracterizada por una relación jurídica
que necesariamente recae sobre una cosa, relación jurídica que está integrada por el
derecho de propiedad sobre la cosa.
Es en este sentido que se emplea la expresión “res perit domino”, cuando se quiere
significar que en los casos en que la cosa se pierde debida a una causa extraña no
imputable, la cosa perece para su dueño, o sea, para la persona que era propietario de
la cosa en el momento en que fue destruida por dicha causa extraña.
Mediante la tesis expuesta se unificarían en una sola noción todos los principios
aplicables en materia de riesgos, se aclararía el análisis y desarrollo de la teoría,
porque se eliminaría el antagonismo entre los principios “res perit creditori” y “res
perit domino”, y también se dispondría de una sola noción para comprender los
alcances de los riesgos de la cosa y de los riesgos del contrato.
EFECTOS DE LAS OBLIGACIONES
Art 1271 cc. El será condenado al pago de los años y perjuicios, tanto por inejecución
de la obligación como por retardo en la ejecución, si no prueba que la inejecución o
el retardo proviene de una causa extraña que no le sea imputable, aunque de su
parte no haya habido mala fe. responsabilidad civil como se genera los
incumplimiento para poder quedar liberado con la obligación
Art. 1264, las obligaciones deben cumplirse exactamente como han sido contraídas.
El deudor es responsable de daños y perjuicios, en caso de contravención. El efecto
primordial en la generación de las obligaciones es el cumplimiento de estas
obligaciones exactamente como han sido contraídas, este artículo nos establece el
principio general en materia de cumplimiento las obligaciones, el llamado principio de
prioridad del cumplimiento de la obligación en especie, ahora si la persona no cumple
la obligación tal y como fue contraída, pueden suceder que incumpla absolutamente la
obligación y que se va a exigir como acreedor, el cumplimiento forzoso, este
cumplimiento es exactamente como fue contraído, pero no siempre se puede probar
que ante el incumplimiento de una de las partes la otra parte sufre un daño, porque la
indemnización sería automática por el simple hecho de no cumplir con obligación, para
que surja la acción de indemnización por daños y perjuicios se debe probar, esta es
una acción accesoria a una acción principal, ahora si la persona no cumple
exactamente como ha sido contraída la obligación se pierde la posibilidad de exigir el
cumplimiento en especie de la obligación?. Si exige el cumplimiento forzoso de la
obligación, esa es la conducta debida?. si la misma conducta, pero se pide el
cumplimiento forzoso
La diligencia del deudor es lo que se conoce como responsabilidad subjetiva art 1270
CC
El art. 129, 1270 y 1271, establece la llamada diligencia del deudor en el cumplimiento
de las obligaciones.
Las obligaciones que son en pago de sumas de dinero, no se debe probar nada,
comienzan a correr los intereses moratorios.
Tipos de incumplimientos
Definiciones
Opina Maduro (ob. cit.) que existe simulación “cuando las partes realizan un acto o
contrato aparentemente válido pero total o parcialmente ficticio, pues es destruido o
modificado por otro de naturaleza secreta o confidencial que es el que realmente
responde a la verdadera voluntad de las partes”. (p. 580).
Por su parte, Ossorio (ob. cit.), expone que la simulación es la “alteración aparente de
la causa, la índole o el objeto verdaderos de un acto o contrato”. (p. 889).
Artículo 1.281.- Los acreedores pueden pedir la declaratoria de simulación de los actos
ejecutados por el deudor.
Esta acción dura cinco años a contar desde el día en que los acreedores tuvieron
noticia del acto simulado.
La simulación, una vez declarada, no produce efecto en perjuicio de los terceros que,
no teniendo conocimiento de ella, han adquirido derechos sobre los inmuebles con
anterioridad al requisito de la demanda por simulación.
Clases de Simulación
La simulación relativa puede ocurrir en varias hipótesis, siendo las más comunes las
siguientes:
2. Cuando se simulan algunas de las cláusulas del acto ostensible (por ejemplo, un
precio mayor que el real).
En la simulación lícita para que el acto verdadero produzca sus efectos entre las partes
debe reunir dos condiciones concurrentes:
2° Que el acto verdadero reúna los requisitos de validez fijados por el legislador.
Efectos de la Simulación
La doctrina estudia los efectos de la simulación desde dos puntos de vista: 1. Efectos
de la simulación entre las partes, y 2. Efectos de la simulación respecto de los terceros.
Sin embargo, antes de hacer referencia a dichos efectos, se debe aclarar que debe
entenderse por simulación la simulación lícita, que es la única viable y capaz de
producir efectos jurídicos, y no la simulación ilícita, que por su propia naturaleza no
puede producir efecto alguno. Igualmente se debe señalar que al hablar de efectos de
la simulación se está haciendo referencia a la simulación declarada por un tribunal
conforme a las normas legales en vigencia.
l.- Efectos de la simulación entre las partes
A.-La nulidad del acto ostensible o ficticio para prevalecer el acto real o verdadero.
C.-La acción por simulación ejercida entre las partes del acto simulado es
imprescriptible. Entre las partes, la acción por simulación es imprescriptible, ya que
tratándose de una acción mero declarativa, destinada a constatar una real situación
jurídica, se consideraría absurdo que el simple transcurso del tiempo fuese suficiente
para extinguirla. Por partes debe entenderse, no sólo las que han intervenido en el
acto simulado, sino también sus causahabientes universales o a título universal.
ACCIÓN PAULIANA:
La acción pauliana o revocatoria, es un mecanismo de defensa de los acreedores,
dentro del derecho de obligaciones, mediante el cual éstos pueden solicitar la
revocación de actos realizados por el deudor en su perjuicio.
Para poder ejercer la acción pauliana, el deudor tiene que estar en estado
de insolvencia, pues de lo contrario, este puede disponer de sus bienes a su antojo,
siempre que conserve la capacidad de honrar las obligaciones que ha contraído.
Por ejemplo, en caso que un deudor insolvente, con el objetivo de no perder sus
bienes, los vende a una tercera persona por una suma muy inferior al valor real de
ellos. Debido a esta venta, el patrimonio del deudor insolvente se reduce
considerablemente, perjudicando a los acreedores. Bajo esta situación, los acreedores
pueden ejercer la acción pauliana y pedir que el bien vendido regrese al patrimonio del
deudor.
El fundamento legal está consagrado en el artículo 1279 del código civil:
Artículo 1.279.- Los acreedores pueden atacar en su propio nombre los actos que el
deudor haya ejecutado en fraude de sus derechos.
Se consideran ejecutados en fraude de los derechos de los acreedores los actos a título
gratuito del deudor insolvente al tiempo de dichos actos, o que ha llegado a serlo por
consecuencia de ellos.
El acreedor quirografario que recibiere del deudor insolvente el pago de una deuda
aún no vencida, quedará obligado a restituir a la masa lo que recibió.
La acción de que trata este artículo dura cinco años a contar desde el día en que los
acreedores tuvieron noticia del acto que da origen a la acción, y la revocatoria no
aprovecha sino a los acreedores anteriores a dicho acto, que la hayan demandado
De modo que la finalidad de la acción se consagra para que los acreedores protejan el
patrimonio de su deudor solicitando la revocación de actos dolosos o fraudulentos que
tiendan a desintegrar dicho patrimonio.
Actos que pueden ser atacados por la Acción Pauliana por parte de un Deudor
Insolvente:
En este caso, la renuncia se anula, no en favor del heredero que la ha renunciado, sino
sólo en provecho de sus acreedores, y hasta concurrencia de sus créditos.
Se consideran ejecutados en fraude de los derechos de los acreedores los actos a título
gratuito del deudor insolvente al tiempo de dichos actos, o que ha llegado a serlo por
consecuencia de ellos.
El acreedor quirografario que recibiere del deudor insolvente el pago de una deuda
aún no vencida, quedará obligado a restituir a la masa lo que recibió.
La acción de que trata este artículo dura cinco años a contar desde el día en que los
acreedores tuvieron noticia del acto que da origen a la acción, y la revocatoria no
aprovecha sino a los acreedores anteriores a dicho acto, que la hayan demandado.
La acción Oblicua
Desde la perspectiva de Silva, J (2011) la acción oblicua conocida por la doctrina como
subrogatoria o acción indirecta, es aquella donde el acreedor ejercita las acciones de
su deudor en las cuales se subroga, para ejercerlas contra el tercero, deudor de su
deudor. En otras palabras, el acreedor asume el rol de su deudor para ejercer sus
acciones contra el tercero, actuando en nombre y lugar de su deudor. Agrega además
que, ésta acción es indirecta, porque el acreedor no ejerce sus propios derechos y
acciones, sino los derechos y acciones de su deudor, diferenciándose de las acciones
directas propias que un acreedor tiene y ejerce en su propio nombre contra el deudor
de su deudor, como sucede en el caso de la acción que puede intentar el arrendador
contra el subarrendatario deudor a su vez del arrendador (Art. 1584 CCV), o el
trabajador contra el dueño de la obra (Art. 1643 CCV), el mandante contra el
mandatario sustituyente (Art. 1695 CCV). Por ejemplo, un supuesto de acción oblicua
es un acreedor que ejerce los derechos y acciones de su deudor contra un tercero que
es deudor de su deudor. Ejemplo, un acreedor A que lo es de B, éste último acreedor
de C; A ejerce la acción de B contra C para conservar así el patrimonio de B y poder
luego proceder contra este patrimonio, en cobro de lo que se le adeuda.
Fundamento legal.
La acción oblicua esta prevista en el Artículo 1278 del Código Civil Venezolano(CCV) el
cual señala lo siguiente: “Los acreedores pueden ejercer para el cobro de lo que se les
deba, los derechos y acciones del deudor, excepto los derechos que son
exclusivamente inherentes a la persona del deudor”
A) Condiciones de fondo
Se subdivide a su vez en tres categorías:
a) Interés por parte del acreedor, condición que excluye el ejercicio de la acción
oblicua cuando el deudor es solvente, ya que en tal situación el acreedor no tendrá
interés en acrecentar el patrimonio de su deudor, puesto que tiene la seguridad de
ser pagado. La doctrina exige que ese estado de insolvencia del deudor sea notorio.
Tampoco tendrá interés el acreedor cuando el crédito del deudor que aquel
pretende ejercer sea inembargable, o en los caos de quiebra, pues en tales
situaciones lo hará el síndico designado.
b) Debe tratarse de un acreedor quirografario o de un acreedor privilegiado cuya
garantía resulte insuficiente para respaldar el crédito, pues si se trata de un
acreedor privilegiado o hipotecario con garantía suficiente, carecería de interés para
intentar la acción.
3) Condiciones relativas al crédito
a) El crédito debe ser cierto, líquido y exigible. El crédito es cierto cuando existe
con toda seguridad, lo que excluye a los créditos condicionales y a los eventuales.
Líquido cuando se sabe exactamente la cuantía y extensión de lo debido, y exigible
cuando el acreedor tiene derecho a exigir el pago. La liquidez y exigibilidad del
crédito no es, para buena parte de la doctrina, necesaria. En efecto, es una acción
conservatoria.
Algunos autores como Maduro, Pittier y Calvo, citados en Silva, J (2011) sostienen que
basta con que el crédito sea cierto, por lo que no son imprescindibles las condiciones
de líquido y de exigible, ya que la acción oblicua es de naturaleza conservatoria y no
ejecutoria. En Francia, hoy en día es requerido que el crédito sea cierto, exigible y
líquido.
El crédito puede ser superior, igual e inferior al derecho ejercido. Se discute si, cuando
el crédito del acreedor que intenta la acción oblicua es menor que el derecho del
deudor que se pretende ejercer con dicha acción, el acreedor tiene un interés en
ejercer tal derecho. Por ejemplo, un acreedor A, tiene un crédito por Bs. F. 60.000,00,
podría ejercer la acción por Bs. F. 100.000,00. Admiten la doctrina y la jurisprudencia
que el acreedor puede ejercer en toda su extensión la acción de su deudor, pues como
los beneficios que se persiguen con la acción oblicua aprovechan a todos los
acreedores que concurren con el acreedor que la intenta, éste último tiene un
marcado interés en que dentro del patrimonio del deudor ingrese el mayor número de
bienes posible.
A. El acreedor, actuando con derecho propio que le consagra la ley, ejerce las
acciones de un deudor y no las suyas propias. De este efecto surgen las siguientes
consecuencias:
1) El tercero demandado por el acreedor puede alegar contra éste todas las
excepciones que tenga contra su acreedor. El deudor puede oponer al acreedor de
su acreedor todas las excepciones que lo liberen frente a su acreedor: nulidad de la
obligación, pago, novación, compensación; puede oponerle los documentos
privados, porque el acreedor de su acreedor no es un tercero, sino que actúa en
nombre de su acreedor. Puede oponerle también las excepciones relacionadas con
el crédito en que fundamente su acción en nombre de su deudor; puede incluso
desinteresar al acreedor de su acreedor pagándole la deuda.
2) El acreedor que intenta la acción oblicua actúa en nombre del deudor. La ley lo
legítima para actuar en nombre del deudor; para algunos la ley le concede una
representación del deudor cuando se dan los supuestos de la acción oblicua, como
lo ha establecido nuestra jurisprudencia, Sentencia 14/10/1968, DFM1C1.
Jurisprudencia Tribunales de la República:
Los derechos y acciones del deudor contra el tercero se hacen efectivos e ingresan en
su patrimonio, y como el patrimonio del deudor es prenda común de sus acreedores,
el aumento del patrimonio del deudor obtenido mediante la acción oblicua beneficia
no sólo al acreedor demandante sino a todos los demás acreedores que tenga el
deudor. Dichos acreedores concurren en igualdad de condiciones con el acreedor que
intentó la acción oblicua, si son quirografarios, y en condiciones superiores al referido
acreedor, si son privilegiados. Esto explica porque en la vida real se utiliza poco la
acción oblicua y se prefiere, en sus casos, el embargo de créditos. Nada impide que en
un mismo juicio se intenten conjuntamente la acción oblicua contra el deudor del
deudor y la acción ejecutoria contra el deudor, siempre que se ventilen por el
procedimiento o juicio ordinario, pues no son pretensiones que se excluyan entre sí.
1. PRELIMINARES.
a) Promesa.
2. TRANSLATIVOS DE DOMINIO.
a) Compra - venta
b) Permuta
c) Donación
d) Mutuo.
3. TRANSLATIVOS DE USO Y GOCE.
a) Arrendamiento.
b) Subarrendamiento.
c) Comodato.
d) Depósito
e) Mandato
4. PERSIGUEN UN FIN COMÚN.
a) Asociación civil.
b) Sociedad civil
c) Aparcería de ganado.
d) Aparcería agrícola o rural.
5. DE GARANTIA O ACCESORIO.
a) Fianza.
b) Prenda.
c) Hipoteca.
6. ALEATORIO.
a) Renta vitalicia
b) Juego y apuesta
c) La compra de la esperanza
Garantias
La garantía es un medio para dar mayor seguridad en los casos en los que exista un
riesgo importante de que alguna condición no se cumpla o aparezca un problema. Sin
las garantías, muchas transacciones no se llevarían a cabo o serían muy costosas ya
que alguna de las partes tendría que asumir un riesgo importante de sufrir una pérdida
económica.
Las garantías tienen un rol muy importante en la economía puesto que facilitan las
transacciones. Esto, dando mayor seguridad a las personas de que lo pactado se
cumplirá.
Permiten tener la certeza de que, en caso de vicios o defectos que afecten el correcto
funcionamiento del producto, los responsables se harán cargo de su reparación para
que el producto vuelva a reunir las condiciones óptimas de uso
También está previsto en la Ley de Defensa del Consumidor que todos los servicios de
reparaciones en general, mantenimiento, acondicionamiento, limpieza o similares
gozan de garantía legal, cuando dentro de los treinta días siguientes a la conclusión del
servicio se evidencien deficiencias o defectos en el trabajo realizado.
Tipos de garantías
Existen diversos tipos de garantía de acuerdo con el derecho que se esté protegiendo.
A continuación, describimos algunas de las garantías más conocidas:
De compra: Asegura al comprador que, si el producto que compró sufre algún
desperfecto, el fabricante se hará responsable de repararlo o cambiarlo por uno
nuevo. Las características más comunes de este tipo de garantía son:
Real: Se refiere a los casos en donde se deja un activo como garantía de pago.
Así, por ejemplo, en el caso de una hipoteca el deudor deja su casa a modo de garantía
del cumplimiento de lo pactado. como la prenda o la . El deudor garantiza con un bien
el pago de una deuda. En el caso de incumplir, el podrá vender el bien y saldar la
deuda con el dinero obtenido, devolviendo al deudor el excedente (si lo hubiese).
Financiera: Se trata de los casos en donde se utiliza un instrumento financiero
o dinero en efectivo a modo de garantía.
Constitucional: Cuando lo que se garantiza son los derechos constitucionales
de una persona. Así, por ejemplo, si un individuo es investigado por un supuesto robo
o crimen, el Estado debe garantizar que se llevará a cabo un debido proceso judicial y
que se respetarán los derechos del investigado. Derecho reconocido a todos los
ciudadanos por la Constitución política de un Estado Derechos, Deberes Y Garantías En
Venezuela
Legal: Cuando la garantía se encuentra establecida por ley.
Convencional: en los casos en los que la garantía es pactada libremente por las
partes de una relación.
En ese sentido, a la luz de lo estipulado por esa Constitución, se entiende por órganos
del Poder Público": "El Poder Municipal, el Poder Estatal y el Poder Nacional. Este
último se divide en Legislativo, Ejecutivo, Judicial, Ciudadano y Electoral".Art. 136.-...
GARANTÍAS REALES
En base a esto entendemos como garantías reales aquellas con las cuales se asegura el
pago de la obligación principal con uno o varios bienes, que pueden ser del deudor o
de un tercero.
Las garantías reales aumentan el poder de agresión del acreedor insatisfecho: por una
parte, el acreedor garantizado, gracias a su derecho de preferencia, escapa a la ley de
concurso con todos los acreedores, y por otra parte, en virtud de su derecho de
persecución, puede ejecutar el bien aunque no se encuentre en el patrimonio del
deudor.
Por otra parte de esta forma evitarían ser sorprendidos y engañados, al oponerse en
contra de su derecho a ser pagado con cualquier bien de su deudor, una garantía
simulada, o que un acreedor fraudulento garantizado pretendiera obtener una
cantidad mayor de la cantidad por la que originalmente se constituyo la garantía.
LA PRENDA
Se define en el Código Civil Venezolano como “Un contrato por el cual el deudor o un
tercero, da al acreedor una cosa mueble en seguridad del crédito, la cual deberá
restituirse al quedar extinguida la obligación”
Evolución.
Los derechos primitivos, en especifico el Derecho Romano antiguo, al no tener
claramente definido el derecho de propiedad y la cosa sobre la que recae ese derecho,
era incapaces de efectuar una distinción cierta entre los diferentes derechos reales.
Por eso, para organizar una garantía real, tuvieron que acudir en primer lugar a la
transmisión de la propiedad, el deudor realizaba una datio de la cosa al acreedor, que
se comprometía a una transmisión inversa si se le pagaba al vencimiento. Este contrato
era la Fiducia cum crédito te.
Mas adelante, Constantino prohibió la lex commissoria para proteger a los humildes de
los usureros; pero el pactum vendendi se convirtió en la esencia de la prenda;
cualquier cláusula que limitara al acreedor el derecho de vender, estaba viciada de
nulidad.
La prenda recaía indistintamente sobre los muebles y los inmuebles. Iba acompañada
con frecuencia de una cláusula (la anticresis) que le atribuía alzadamente al acreedor
los ingresos de la cosa para cobrar así los intereses del préstamo.
El Derecho Romano terminó por contentarse con una tradición fingida; llegando así
prácticamente, a concretar las prendas sin desplazamiento, origen de las hipotecas.
Naturaleza Jurídica
En tal efecto se alega que el acreedor prendario no puede ser considerado como
verdadero poseedor civil dentro de ninguno de los sistemas que existen en materia de
posesión, porque dentro de la teoría subjetiva el acreedor prendario carecería del
animo de tener la cosa como suya propia, y dentro de la teoría objetiva se opondría a
su posesión el titulo por el cual tiene la cosa, ya que este es un contrato que
presupone el reconocimiento por parte del acreedor prendario del derecho que
constituye sobre la prenda.
Aun así esta en pleno derecho de hacer vender la prenda judicialmente si la obligación
garantizada no fuese satisfecha, ejerciendo así su derecho principal de hacer ejecutar
la prenda; nada prohíbe que el acreedor sea admitido a la licitación en el remate.
Derecho de preferencia
El acreedor prendario tiene frente a los demas acreedores preferencia sobre el precio
de la prenda en orden al cobro de la deuda garantizada siempre que el contrato de
prenda llene las formalidades exigidas en los Arts 1.839 y 1.840 C.C.
Se trata pues de un derecho frente a terceros (los demás acreedores) pero que no
impide a estos ejecutar la prenda para satisfacción de sus créditos sino que los
pospone al momento de distribuirse el precio del remate.
La obligación de restituir:
En el caso concreto de prenda sobre crédito que produce intereses la ley ordena una
compensación; el acreedor deberá imputar dichos intereses a los que se le deban por
razón de la obligación principal, si esta no produce intereses, al capital de la deuda.
El acreedor prendario debe percibir los frutos que produzca la cosa dada en prenda,
aunque no tiene el derecho de expropiárselos.
AMPARO JUDICIAL:
Cualquier ciudadano podrá recabar la tutela de las libertades y derechos reconocidos
en el articulo 14 y la sección primera del capitulo 2 ante los tribunales ordinarios por
un procedimiento basado en los principios de preferencia y sumariedad.
-Preferencia: Han de tramitarse con independencia del orden de entrada dando
prioridad a estos.
Cada una de las jurisdicciones tiene un procedimiento diferente para cada uno de los
derechos fundamentales.
AMPARO CONSTITUCIONAL:
LA JURISDICCION INTERNACIONAL:
El consejo europeo de 1950 creó el tribunal europeo de los derechos del hombre
en Estrasburgo, con competencias para conocer y declarar el contenido y extensión de
los derechos reconocidos en el convenio y constatar si ha habido alguna violación de
los mismos. Pueden acudir los estados contratantes y los particulares a través de la
comisión
LAS PERSONAS
Por una figura del lenguaje se paso a llamar persona a los actores que usaban esas
mascaras y luego el Derecho tomo la palabra para designar a quienes actúan como
actores en el mundo jurídico.
2. Sujeto de Derecho
Se entiende por sujeto de derecho “la persona natural o jurídica que participa en una
relación jurídica, ya sea como pretensor u obligado. Se diferencia de la noción
de persona, en que esta es apta para ser titular de derechos o deberes en una relación
jurídica, en tanto que el sujeto de derecho está participando actualmente dentro una
relación jurídica dada.
Toda persona es sujeto de derecho en potencia, de modo que todo sujeto de derecho
es necesariamente persona, pero no toda persona es sujeto de derecho, en tanto no
participe en una relación jurídica actual que le confiera tal condición.
El derecho surge para regular la vida del hombre en sociedad, es decir sus relaciones
sociales. Esas relaciones sociales, el ser reguladas y enmarcadas dentro de una norma
determinada, se convierten en relaciones jurídicas. Toda relación jurídica concede
facultades e impone deberes, y genera consecuencias jurídicas a las personas que en
ella intervienen.
Según el artículo 15 del CC, las personas se clasifican en naturales y jurídicas, son
personas naturales todos los individuos de la especie humana (CC, Art. 16). Son
personas jurídicas todos aquellos entes que sin tener existencia física, les es concedida
personalidad jurídica, es decir aptitud o cualidad para ser sujetos de derechos.
El Congreso de Colombia de 1825 decreto que las leyes españolas seguirían vigentes
en el país, en todo en cuanto no se opusieran al nuevo Estado.
En 1935, el Congreso nombro comisiones para redactar varios Codigos entre ellos el
Codigo Civil,con sus respectivos procedimientos; y el único que presento una
propuesta fue el Licenciado Francisco Aranda que presento un proyecto de Codigo de
procedimiento Civil.
En 1940 se nombro otra comisión que tampoco entrego ningún proyecto de Codigo
Civil.
En 1953 el doctor Julian Viso solicito ayuda al congreso para redactar los Codigos Civil
Penal y respectivos procedimientos ,la cual se le otorgo. Al año siguiente Viso presento
un proyecto de Codigo Civikl que no llego a ser considerado por el Congreso.
El primer Código civil se pone en vigencia cuando la presidencia del General Páez en el
año de 1861, este Código tiene una inspiración en el Código de Andrés Bello.
El segundo Código Civil es el de 1867, este fue una copia del Código Civil del célebre
Español García Gayena.
El tercer Código Civil fue el de 1896, este trae una serie de nuevas disposiciones sobre
el Derecho de Familia, facilitando la celebración del matrimonio.
Sigue el Código Civil de 1904 a principios de este siglo, también tienen algunas
reformas y modificaciones que fueron consideradas retrasadas, pero que
representaron algunos avances como por ejemplo: se consagra por primera vez la
institución del Divorcio en materia de Derecho de Familia en Venezuela.
El quinto Código Civil fue en 1916, tiene una serie de modificaciones de carácter
inconveniente en cuanto a la inquisición de paternidad ilegitima.
El código Civil de 1942 que es el que nos rige parcialmente en la actualidad, introdujo
una serie de reformas convenientes, se estableció la comunidad concubinaria que es
una regla de Derecho que permite a la mujer que había vivido en concubinato
prolongado, solicitar derechos patrimoniales de su concubino. Se hicieron algunas
reformas en materia de obligaciones, se destacó la llamada tutela del Estado para los
menores abandonados. El Código Civil de 1942 duró 40 años en vigencia y fue
derogado parcialmente por el Código Civil que nos rige actualmente que es el de 1982,
este es el Octavo Código Civil Venezolano. En este código se establecieron distintas
modificaciones en materia del Nombre, Tutela, Patrimonio, Patria Potestad, es decir,
que la reforma del Código Civil de 1942 operada en el 1982 tiene una serie de aspectos
positivos y que se refieren particularmente a la materia de familia.
Del análisisdel contenido material del Derecho Civil, se pueden extraer las siguientes
ramas:
4) Derecho de familia.
5) Derecho de sucesiones.
El término "positivo" puede haber sido utilizado para describir las leyes positivas, ya
que suelen ser "impuestas" a los ciudadanos de un área en particular. Algunos
ejemplos de leyes positivas pueden incluir leyes, sentencias judiciales, y las
ordenanzas. Las leyes positivas pueden ser por escrito y aprobadas por los legisladores
del gobierno, los tribunales y organismos administrativos. Aquellos que están
físicamente presentes en las leyes positivas tienen un poder de gobierno que es
generalmente requerido para obedecer esas leyes.
El derecho positivo puede haberse originado hace miles de años. Los diez
mandamientos del cristianismo se pueden utilizar como un ejemplo de derecho
positivo. Los cristianos pueden considerar válidos los Diez Mandamientos, no sólo
porque tienen sus raíces en los principios morales, sino también porque pudo haber
sido grabado en piedra por Dios y entregada al profeta Moisés bíblico. Los positivistas
comúnmente compartimos la opinión de que para ser obedecido, las leyes deben ser
promulgadas por figuras de autoridad.
Las leyes positivas aprobadas por funcionarios del gobierno no son las mismas que las
políticas de las empresas y organismos no gubernamentales. La política de una
sociedad no se considera como derecho positivo, porque una empresa no es un órgano
de gobierno. Sin embargo, son los empleados comunes quienes tienen que seguir las
reglas de la empresa para la que trabajan.
Artículo 4°: "A la Ley debe atribuírsele el sentido que aparece evidente del significado
propio de las palabras, según la conexión de ellas entre sí y la intención del legislador.
Cuando no hubiere disposición precisa de la Ley, se tendrán en consideración las
disposiciones que regulan casos semejantes o materias análogas; y, si hubiere todavía
dudas, se aplicarán los principios generales del derecho".
Los Principios Generales del Derecho, la costumbre, la equidad, sólo cuando la misma
ley remita a ellas, como por ejemplo el artículo 1.612 del Código Civil, como es el caso
de la costumbre, cuando se dispone que se estará a la costumbre del lugar respecto de
las reparaciones menores o locativas que hayan de ser cargo del inquilino de una casa;
y el artículo 1187 eiusdem, como ejemplo para la equidad, donde se dispone que si
una persona privada de discernimiento causa daño a otra y la víctima no ha podido
obtener reparación de quien tiene aquella a su cuidado, los jueces pueden, en
consideración a la situación de las partes, condenar al autor del daño a pagar una
indemnización equitativa.
El Derecho Civil visto desde los distintos modelos sociales, positivos y económicos
mundiales
El Código Civil actual Venezolano es el código civil del 42 con reforma del 82, es un
todo orgánico, es decir que las disposiciones contenidas en este código son de sentido
orgánico coherentes y correlativos como todo documento codificado está dividido en
secciones y libros.
La estructura material del Código Civil: Un titulo preliminar que contiene disposiciones
básicas y fundamentales lo que se inicia como es natural con el artículo 4 y concluye
con el artículo 14.
Desde el artículo 15 se inicia el titulo I del Libro Primero del código Civil. Se refiere a la
jurisdicción especial, ese primer libro es fundamental dentro de la organización de la
sociedad Venezolana en materia de personas.
A partir del artículo 525 se inicia el libro segundo que se denomina de los bienes de la
propiedad y sus modificaciones, la doctrina lo llama de los bienes y de las cosas, inicia
en el artículo 525 y concluye en el 795.
Luego en el artículo 796 se inicia el tercer libro, el titular se denomina de las materias
de adquirir y trasmitir la propiedad y demás derechos, allí están constituidas las
disposiciones relativas a los principales Derecho Reales fundamentalmente el Derecho
de Propiedad. Este es el libro final y concluye en el artículo 1.987.
A partir del artículo 1988 hasta el artículo 1993 encontramos las disposiciones
transitorias que fueron previstas por el legislador Venezolano en el orden del modos
operandi.
Luego encontramos dos disposiciones finales en los artículos 1994 y 1945; las
disposiciones finales se refiere a la oportunidad que empieza a seguir el código actual.
Este todo orgánico que nos rige y que es de capital importancia para vigencia del
Derecho Venezolano, promulgado por el Congreso de la República en la oportunidad
correspondiente que es indicada, se inicia con el titulo preliminar y siguen
sucesivamente tres libros con el orden de materia que se ha señalado libro primero,
libro segundo y libro tercero.
Para citar únicamente dos ejemplos, cabe destacar que para FEDERICO CARLOS VON
SAVIGNY -creador de la Escuela Histórica del Derecho-, en la determinación de las
fuentes debe atenderse a los orígenes histórico-sociales del Derecho y en tal sentido,
fuentes son las formas de expresión o de concreción del Derecho. Para GIORGIO DEL
VECCHIO, el Derecho se debe a la existencia de una «fuerza histórica suficiente» o
«una voluntad social predominante», por lo cual fuentes del Derecho vendrían a ser
los modos de satisfacción de esa voluntad social predominante.
Otros autores (KELSEN y RECASÉNS SICHES), afirman que con la expresión fuentes del
Derecho no se pretende precisar la génesis socio-histórica de la norma; ni tampoco su
forma de concreción o expresión; sino su fuente de validez. Así, se sitúa ésta en la
voluntad del Estado; ya que a través de tal voluntad la norma es considerada como
derecho vigente e incardinada dentro del sistema unitario del orden jurídico. Desde un
punto de vista más general, EDUARDO GARCÍA MÁYNEZ distingue varios tipos de
fuentes: a) históricas, b) reales o materiales, y, c) formales. Entiende dicho autor por
fuentes históricas aquellas conformadas por los documentos que contienen leyes o
conjuntos de leyes que estuvieron vigentes en un momento y lugar determinado. En
este sentido, podríamos denominar fuente histórica al Código Civil italiano de 1865.
Conforme al autor mencionado, fuentes reales o materiales serían aquellos factores de
orden económico, sociales, políticos, culturales o religiosos —entre otros—, que dan
origen o determinan (por su fuerza intrínseca e influencia en el grupo), el contenido de
las fuentes formales. Dicho de otro modo, aquellos factores de diverso orden que al
ser compartidos por una determinada comunidad en un momento dado, originan la
puesta en vigencia de una norma o de un conjunto de normas jurídicas. Finalmente,
GARCÍA MÁYNEZ señala que la expresión «fuentes formales» puede entenderse en
tres sentidos; a saber:
Otro autor completa la clasificación de las fuentes del derecho en fuentes directas y
fuentes indirectas; entendiendo que las directas son aquellas que contienen en sí
mismas la conducta ordenada, prohibida o permitida; mientras que las indirectas son
aquellas que coadyuvan a producir la norma, a aplicarla o a interpretarla., En el sentido
que nos interesa para su estudio en este momento, focalizaremos nuestra atención en
las fuentes formales del Derecho objetivo positivo venezolano; entendido éste como
conjunto de normas jurídicas de carácter general dictadas por los Poderes Públicos.
Entre dichas fuentes nos limitaremos a las llamadas fuentes próximas, concretándonos
a las fuentes formales.
En Venezuela, las fuentes formales directas del Derecho se reducen a la Ley o derecho
escrito. La Ley se caracteriza por ser producida por órganos especializados del Estado
(Poderes Públicos). El Derecho consuetudinario no es producido por los Poderes
Públicos, sino que se origina directamente de la voluntad colectiva de los individuos
que integran la comunidad en la cual se produce. En otros sistemas jurídicos (sistema
angloamericano), a las dos fuentes formales directas antes señaladas (la ley y la
costumbre), debe agregarse la jurisprudencia en su sentido de precedente judicial; es
decir, en ese sistema las decisiones de los Tribunales se convierten en fuentes formales
directas de Derecho. Por vía excepcional, la jurisprudencia dictada por la Sala
Constitucional del TSJ sobre interpretación y aplicación de las normas constitucionales,
son vinculantes para las otras Salas del TSJ y demás Tribunales de la República (art. 335
CRBV).
La misma solución es aplicable con relación a la equidad (artículo 1.187 CC). En los dos
casos señalados, se evidencia que ni la costumbre ni la equidad crean la norma; sino
que la única función -tanto de la costumbre como la equidad—, es ayudar a precisar lo
que ordena o prescribe la norma. La costumbre y la equidad, así como la
jurisprudencia y la doctrina, deben ser consideradas en el Derecho Civil venezolano
como fuentes formales indirectas. Finalmente, no parece superfluo destacar en este
lugar que aun cuando el artículo 1.159 del Código Civil señala que «Los contratos
tienen fuerza de ley entre las partes», no se debe inferir de dicha norma que el
contrato sea fuente formal directa del Derecho; debido a que los contratos no crea una
norma de contenido general, sino únicamente un vínculo obligatorio entre las partes
que intervinieron en su celebración o que ven reflejados los efectos del contrato en su
esfera jurídica.