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CIEN Años DE SOLEDAD

(Fragmento)
Este sublime segmento nos quiere dar a conocer a profundidad la vida de
Aureliano segundo, el cual recuerda con esperanza esa noche lluviosa en la que
entro a la habitación a conocer a su primer hijo, aunque este era extenuado y
llorón sin ninguna fisionomía de un Buendía , por ello no pensó mucho para
ponerle nombre. Se llamara José arcadio dijo…

Hace un año se había casado con una hermosa mujer que llevaba como nombre
Fernanda del Carpio la cual estaba de acuerdo con Aureliano, en cambio Úrsula
no pudo ocultar su sentimiento indeciso de zozobra, la larga y repetida historia de
la familia con los nombres ha llevado a ser terminantes.

Mientras los Aureliano eran alejados y admirables, los José arcadio eran
impulsivos y decididos y marcados por un signo doloroso. Los únicos fantásticos
eran José Arcadio segundo y Aureliano segundo, fueron tan traviesos y parecidos
que santa Sofía de la piedad no podía diferenciarlos, llego el día del bautizo y
amaranta les asigno una esclava a cada uno con el nombre grabado de ellos para
poder diferenciarlos, en la escuela uno usaba franela blanca y el otro una verde
para que el profesor lograra diferenciarlos, José arcadio se hacía pasar por
Aureliano pero se distinguía por la esclava que llevaba su verdadero nombre, llego
la adolescencia y sus rasgos empezaban a cambiar, la vida los hizo diferentes,
despertaban a la misma hora, iban al baño al mismo tiempo, sufrían las misas
anomalías en la salud y aunque suene increíble soñaban lo mismo.

En la casa donde se criaron coordinaban el itinerario del día con el fin de


confundir, hasta que un día santa Sofía de la piedad le dio un vaso de limonada a
uno de ellos y más tardo en probarla que el otro en decir que le faltaba azúcar, ella
en emanación había olvidado de ponerle azúcar a la limonada, se lo conto a
Úrsula y dijo así son todos locos de nacimiento con el fin de desordenar las cosas.

Franco Duque 4to ´´A´´

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