“Vanguardia y Kitsch: una aproximación al cine de Leonardo Favio”.

Magíster: Yamila Volnovich,

Fernández Toledo, Graciela (directora de tesis)
Maestría en Sociología de la Cultura y Análisis Cultural. Instituto de Altos
Estudios Sociales (IAES) Universidad Nacional de General San Martín.

La hipótesis que guía el desarrollo de esta investigación es que el sistema discursivo

del cine moderno constituye una nueva estrategia enunciativa que rompe con la
antigua distinción entre arte culto y Kitsch y permite establecer yuxtaposiciones de
materiales provenientes de universos simbólicos antes incompatibles.
Las década del sesenta y el setenta en la Argentina brindaron un marco adecuado
debido a la existencia de un campo intelectual suficientemente delimitado, aunque a la
vez permeable a las transformaciones culturales y políticas de los centros
metropolitanos.
Fue una época en la que la difícil relación entre arte y política configuró el escenario
para la creación de un ámbito cinematográfico de notable injerencia en la cultura
Argentina.
En este escenario cultural dividido entre cine de vanguardia y cine comercial, las
películas seleccionadas de Favio resultan pertinentes para investigar los cruces entre
espacios culturales antagónicos.
1. El Dependiente, corresponde al momento de emergencia del modernismo y crea
nuevas figuras que problematizan la imagen del pueblo en el discurso de la vanguardia
política y artística.
2. Nazareno Cruz y el Lobo, se caracteriza por la incorporación de íconos estilísticos y
tópicos narrativos provenientes de la cultura de masas.
A partir del análisis de los films se sistematizaron los procesos de apropiación de los
productos de la cultura de masas. Si en este gesto persiste algo de las vanguardias es
quizás el impulso, siempre renovado, de transgredir las reglas del arte. Suponer que el
efecto producido por la masificación de la cultura es solamente un proceso mimético
implica replegar la exploración teórica hacia posiciones decimonónicas. Por el
contrario, pensar que el impacto producido por las nuevas tecnologías provoca nuevas
formas de intervención estética en la política, la economía y las prácticas sociales
permite analizar cómo el arte presiona sobre la frontera de lo posible.