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LITERATURASM*COM ice septiembre ge 205 Teter ecru de 2016, Gere etoriat abil radars (rordinacsn eto Catan Pre Crdinacén en Laces, el tno: or ler Fabra, 2015 (© sustains Toms io, 2015 ediciones So, 20% Iimpresors, 2 Parque Empresarial Pago dl Expo 28660 Boal ce Mont (Masi) vwwguposm an ATENCION A cLENTE Tel: 902121323/ 972040403 nei clentseupesm.con 153 97884675-62660 Dept eal 22586 7015 Imprese ene UE / rim i EU Clg ma eps dei, asc ea la, ‘Sse seis pray Dee EDN (Cenotiat ae decrypts wma) ‘cst txopiee rena sin apace Som A mi mismo, tartamsudo rar, con mucho orgullo y honra. 1 EL TARTAMUDO Huco se sEntiA RARO. Siempre habia sido asi, desde muy pequefio. Para empezar, cuando balbucié sus primeras palabras, todo lo decia por triplicado: ~iPapa-pa! Ma-ma-mal jYo-yo-yo! Sus padres crefan que era para insistir, para de- jatlo claro,o tal vez porque para eso estaba apren- diendo a hablar. Pero no. Un dia,en lugar de decir «pa-pa-p&, dijo: ~P-p-p-p-pa-p-p-P ‘Y no lleg6 alla tiltima silaba, Peor atin: dejé de respirar, empezé a ponerse verde, azul, violeta, mas bloqueado que un came- lo en el Polo Norte. ~jHugo, respiral -se alarmé su padre. ~{Que te ahogas! ~se asusté su madre, ‘A Hugo le gustaban tres bebidas, el colmo de su mala suerte era que no podia pedirlas, porque una empezaba por ¢, otra por p y la otra por &: Cola-loca, Popsi-cola y Tri-limén. A los siete afios, Hugo ya no hablaba dema- siado, Para qué? A los ocho se limitaba a asentir con la cabeza. ‘Alls nueve empezé a pasarlo mal en el colegio. Siempre habia chicos mayores dispuestos a me- terse con los pequefios, pero mas atin con los que, segiin ellos, eran raros o tenfan defectos. Habia dos o tres energtimenos que en cuanto le veian gritaban: ~iEl tartaja! Y selliaba, Unas veces se burlaban de él, otras le imitaban, otras incluso le daban collejas, y lo peor era que el resto de la clase les reia las gracias. A Hugo, esto le dolia mucho. Asi que cuando empezé a estudiar de verdad, a partir de los diez afios, el colegio acabé convir- tiéndose en un infierno para él, Lo aborrecia. No queria ser pasto de las burlas de los demas, Tonto no era; al contrario, leia mucho y se sabia inteli- gente, pero como le daba vergiienza hablar, los pro- fesores no le apoyaban mucho. Bueno, habia una profesora que si. La profesora Amalia, la de Sociales. Gracias a ella, Hugo le sacé una ventaja a su edefecto», pues Amalia le ponia buena nota aun- que no hubiera estudiado. or ejemplo, se aprendfa las cinco primeras lineas del tema que les habia mandado estudiat, yy luego, en clase, Amalia le pedia que lo cantata li- teralmente,para quenosetropezara Hugo tecitaba: -El-im-pe-rio-ro-ma-no-se-for-mé-con-R¢ mur-lo-y-Re-mo-dos-her-ma-nos-que-un- per-die-ron-y-una-lo-ba-los-a-ma-man-t6 Peper Justo al llegar adonde no se sabia més, se po- nfa a tartamudear adrede, y Ia buena de Amalia ledecia Bien, bien, Hugo, ranquilo, ya vale, Veo que te sabes la leccién. Y le ponia un ocho. Asi que, por lo menos, le sacaba algo de prove- cho a lo suyo, Aunque era muy poco comparado con lo mal que se sentiay lo mal que le hacian sen- tir los demas. Su padre solia decile: Mira, Hugo, lo tuyo no es un defecto, es solo una circunstancia, Té.al menos sabes que eres tar- beweneesces —jAtrancal —le dio un golpecito en la espalda su abuela, que era mas prdctica, Y lo intent6, -P. No pudo. Fue la primera vez, pero no la tiltima. Desde ese ‘momento, todas las palabras que empezaban por ce,pe te, por ejemplo las alargaba hasta lo inde- cible, y muchas veces no conseguia completarlas. Lode ponerse verde,azul y violeta fue habitual..Lo dedejar de respirat, un tormento. En cuanto abria Ja boca, su familia lo miraba con cierta angustia. Estaba claro que no era un juego,ni na fase del aprendizaje infantil, A Hugo le pasaba algo, y ese algo tenfa un nombre. El nifio es tarramudo. Toma ya. Lo primero que aprendié Hugo es que la vida ¢s injusta, porque para definir lo que le sucedia se empleaba una palabra impronunciable para él. Una palabra con dos tes, una de las letras maldi- tas, porque vibraba en la boca. = Qué te pasa, nifio? ~Nada,es que soy tt-tar-tt-tamudo, ‘A Hugo le gustaban tres bebidas,y el colmo de su mala suerte era que no podia peditlas, porque tuna empezaba por ¢, otra por p y la otra pot Cola-loca, Popsi-cola y Tri-limén, A os siete afios, Hugo ya no hablaba dema- siado. Para qué? A los ocho se limitaba a asentir con la cabeza, ‘Alos nueve empez6 a pasarlo mal en el colegio. Siempre habia chicos mayores dispuestos a me- terse con los pequefios, pero més atin con los que, segiin cllos, eran raros otenian defectos. Habia dos o tres energiimenos que en cuanto le veian gritaban: ~El tartaja! Yselliaba. Unas veces se burlaban de él,otras le imitaban, otras incluso le daban collejas,y lo peor era que cl resto de la clase les reia las gracias. ‘A Hiugo, esto le dolia mucho. ‘Asi que cuando empez6 a estudiar de verdad, a partir de los diez afios,el colegio acabé convir- tiéndose en un infierno para él. Lo aborrecia. No queria ser pasto de las burlas de los demés, Tonto no era; al contrario, leia mucho y se sabia inteli- gente, pero como le daba vergiienza hablar, los pro- fesores no le apoyaban mucho, Bueno, habia una profesora que si La profesora Amalia, la de Sociales. Gracias a ella, Hugo le sacé una ventaja a su «defecto>, pues Amalia le ponia buena nota aun- que no hubiera estudiado. Por ejemplo, se aprendia las cinco primeras Iineas del tema que les habia mandado estudiar, yy luego,en clase, Amalia le peda que lo cantara li- teralmente, para que no se tropezara. Hugo recitaba: ~El-im-pe-rio-ro-ma-no-se-for-mé-con-R6- mu-lo-y-Re-mo-dos-her-ma-nos-que-un-dia-se- per-die-ron-y-una-lo-ba-los-a-ma-man-t6-y-p-p- PP Justo al llegar adonde no se sabia més, se po- nia a tartamudear adrede, y la buena de Amalia Te decia: Bien, bien, Hugo, tranquilo, ya vale. Veo quete sabes la leeci6n, Y le ponia un ocho. Asi que, por lo menos, le sacaba algo de prove- cho a lo suyo. Aunque era muy poco comparado con lo mal que se sentia y lo mal que le hacian sen- tir los demas, Su padre solia decirle Mira, Hugo, lo tuyo no es un defecto, es solo unacircunstancia. Ti al menos sabes que eres tar- pevewve tamudo, Es mucho peor ser idiota,como todos los quese rien de tiy no saberlo, Tranquilo, que a esos tarde o temprano la vida les pasara factura. ‘A Hugo, la factura que les pasase la vida a los energtimenos le daba igual. Su vida era ahora. El futuro, aunque Fuese el lugar en el que iba a vivir, quedaba muy lejos. ‘Alos once afios, su vida escolar era ya terrible. Por eso, al empezar aquel curso, se alegr6 de encontrar a alguien como él. {Tartamudo? No, no precisamente. 2 EL DISLEXICO Ese vfa,el primer dia del curso,en clase de Mate- ‘miticas, el nuevo, Bernardo, confundié un 3 con una Ey un 4 con una A. Cuando metié la pata por tercera vez, toda la clase (menos Hugo) estall6 en una carcajada. Bernardo se puso tan verde,azulo violetacomo se ponia Hugo. ={Y ati qué te pasa? ~se enfad6 Rodolfo,el pro- fesor, que era mas duro que una piedra. -Esque.. ~A ver. ~suspir6 el profesor, cansado de que los alumnos se inventaran algo para que no les preguntara los deberes. “Es que... soy disléxico -balbucié el nifio. Nadie sabia lo que era eso, pero daba lo mismo. La clase entera volvié a estallar en una carcajada. Silencio! -troné la voz del sefior Rodolfo mientras su bigote de puercoespin se ponia de punta. Nese cnet eM err ON ener fone) =Me-me-menfo dijeron hace unos meme-me- Renae Betray ~Bueno.. Pues ya lo hablaremos -a Pos eeerrertes ere oe tate neve Cuando acabs la clase, un par de chicas y chi- cosse acercaron a Bernardo para preguntarle myoles ney re mette yatta olernat evtenes a on te zee ene Pees Betas Breese nnd earpiece ten Arid revoerencetverenc ene es eayenste sees feereocan Terere tree maveen enn ny uneties iitieet Avegensyiim errr conv Be eoerrawtenayt ret Bere aes Hee) be eres eR Cas cet Peancinnetev a aaa free teats peretantsten comet Viecnteabrit anos ojos come platos ~Me estés Ilamando tonto? ~cerré su puio derecho, No, yo solo digo que sino sabes de lo que ha- blas, mejor no lo hagas. El pufio de Vicente impacté en el estémago de Bernardo. ~iNo le pegues! ~le defendié una de las chicas. ~iMe ha llamado tonto! ;Tiene una cosa rara y encima me llama tonto! Selolllevaron, Quedaron Hugo y él, solos: el primero, miran- do a Bernardo con curiosidad, y este, su vez, mi- rando a Hugo con tristeza. ~{Y ati qué te pasa? ~le pregunté Bernardo. -N-n-nada. ~ {Qué culpa tengo yo de ser disléxico? -N-n-ninguna, Bernardo fruncié el cefio, ~ (Por qué hablas asi? ~P-p-por nada ~se dispuso a irse Hugo, ~Oye, gme tomas el pelo? -N-n-no, Pasaron mas o menos tres segundos, Entonces, a punto de dar media vuelta para Por lo menos lo solté de una tirada, sin que- darse bloqueado como le sucedia casi siempre. ~/Ahi val ~exclamé Bernardo. =¢T-t-té t-t-también vasa reirte? ~jNo, espera! lo detuvo. Hugo hundié los ojos en el suelo. ~{¥ cémo lo Llevas? ~se solidariz6 Bernardo, ~Pues...mal -respondié Hugo. ~Yo, hasta que descubrieron lo que me suce- dia,lo pasé fatal en mi anterior colegio. Hasta me Hevaron al oculista y al psiquiatra. ~P-p-pues yo aqui lo p-p-paso p-p-peor —sus- piré Hugo, al que a veces le parecia que, para su fastidio, todas las palabras empezaban por pes, ces, tes, cus, kas, des y alguna que otra més que le costaba pronunciar. Bernardo ya se habia olvidado del pufietazo. Le pas6 un brazo por encima de los hombrosa su smuevo amigo. -Tiy yo vamos a ser compafieros -asintié. ~ (Solo por ser los t-t-tarados de la c-c-clase? No digas eso. ~T-t-tarados, d-d-defectuosos... Es como nos aman ~insisti6. ~Mira, si somos dos, ya no estaremos solos. Algo senos ocurrird, ya verds Bernardo sonrié-, Dicen que la unién hace la fuerza. Hugo se asomé a sus ojos, Y, por primera vez, vio un rayo de esperanza en su vida, 3 DESCUBRIENDO TARTAMUDOS CUANDO LEGO A CASA, Hugo le pregunté a su padre: ~P-p-pa-p-p-pa voy aser ott tettoda la vida? ~Pues...el hombre puso cara de apuro~ Mira, hijo, he leido que a estas alturas del siglo xx1,y a ppesar de todos los avances,aiin nadie sabe qué pro- ‘voca la tartamudez. Se supone que en el cerebro dos neuronas deben de estar desconectadas,o algo asi, Vaya, que la energia,o los estimulos,o lo que sea, no pasan de una a otra. Pero solo se supone. He leido que cada afio hay un congreso en alguna partedel mundo y los tartamudos se seinen para hablar de ello. ~Ab, zpero hay muchos? ~Més de los que imaginas. (Grandes hombres ‘y mujeres han sido tartamudos! ={¥ eso no les impidi6 nada? 1en0,¢80, =;Por qué habria de impedirlo? ,no «t-t-tendré Sus padres se miraron con una lucecita en los ojos. Laluzde la esperanza, Hugo prefirié seguir cenando, Pero reconocié que se sentia bien, muy bien. Animado. Feliz, No estaba solo. 9 | | CON OCHO NO BASTA | | | ALA HRA Dat parto, algunos empezaron a dar- | se cuenta de que habia una especie de conspira- | cin entre los alumnos de una de las clases. | Chicos y chicas hablando en voz baja, for- | mando corrillos, discutiendo, | Nisiquiera Vicente los molestaba, Lo veian | apartado, hurafio, lejos de todo. Elresultado de las conversaciones legé pronto a ofdos de Hugo, el presidente del club. Ricardo se apunta, ~Matia se apunta, Dice que ya era hora de que alguien hiciera algo. ~Patricia dice que contemos con ella. | ~Carlos que OK, por narices. Eso tenfa gracia, El narizotas se apuntaba «por narices», ~Al acabar el c-c-colegio, todos al p-p-parque ~tomé el mando de las operaciones Hugo. el natizotas Carlos y la orejuda Patricia estaban _ —Perdona,es que no sé cémo Ilamarte ~se ex- expectantes. cusé la chica, ~/Habéis decidido uniros al club? ~pregunté ~{Entrado en carnes,comil6n, generoso,abun- Hugo, muy consecuente con las circunstancias. dante... Si -dijeron los cuatro al unisono. Se echaron todos a reir. = {T-t-todos para uno y uno parat-t-todos? -in-_ —jAnda, cllate ya! -le dio Laura una palma- sistié Hugo. - dita en la espalda. Eso es de Los tres mosqueteros ~tercié Maria, ~Somos lo que somos, por eso estamos aqui que era muy puntillosa, | dijo Bernardo, ~Ya lo sé, p-p-pero sirve para la ocasién le res -Al pan, pan, y al vino, vino ~pontificé Patricia, pondié el lider del proyecto. ~(Qeg-queréis dejar de decir t-t-tonterias -puso -Eso si. orden Hugo, y dirigiéndose a Carlos, agregé- ~P-p-pues ya est ~pase6 una mirada orgullosa {C-c-crees q-q-que Te-Te-Teresa lo p-p-pasa mal por su eropa-. ,Alguna sugerencia? ‘pp-porestar tt-tan d-d-delgada? Yo tengo una —levanté la mano | Carlos. -Si -lo afirmé con rotundidad~. El otro dia, ~Avver -le invité a continuar Hugo. lacalle,tunos chicos se metieron con ella y la Yo propondiia como miembro del ch mn Ilorar. La llamaron transparente, poca “Yeresa. otras cosas, Por qué? Esta muy flaca, Mis bien esquelética -quiso Maria. -Si hay un gordo -dijo Matilde se =se lo repiti6 ella. {No sabes Ricardo-, eambién tendria que haber u é Has dicho de una forma. paso, estaba claro que no, pero elaludido. 3 eza y e30 fue todo, Se lo p-p-prop-p-pondremos a Teresa ~es- tuvo deacuerdo Hugo-.Alguna sugerencia mas? Yacran nueve. Quedaban doce «del otro lado» Los «perfectose. (Ono? “Tendriamos que hacer pablico que hemos formado un club, al menos en clase, por si hay al- guien més que quiera apuntarse ~dijo Patricia- Un dia,a Miguel lo llamaron pies planos. ~¥a Carolina, boca de hierro, porque lleva un corrector dental que parece una armadura. Pues a Esperanza, piernas torcidas. Siempre lepreguntan que dénde ha dejado el caballo,y por «so nunca se pone falda. La informacién empezabaa resultar incluso excesiva, (Miguel, Carolina y Esp-p-peranza también. ~Yo solo digo que podrian -matizé Patricia —Hablaremos c-c-con ellos mafiana ~se rindié Hugo, desbordado por el aspecto ingente que su club estaba tomando. ~A este paso, incluso se apuntaré algain pro fesor ~dijo alegremente Bernardo-. La profesor: ‘Amalia tiene ese tic en el ojo,y al de Mateméti- cas cuando le da hipo.. ~Profesores no ~se opuso Matilde. No seas racista ~hizo de abogada del diablo Laura, ~iEllos ya se las apatian solos! ;Ademés, Vicente no los atacal Eso era verdad. ~Bien —Hugo dio por terminada la reunién-. Mafiana en el c-c-colegio seguimos. ~Tendriamos que tener un lema ~propuso Carlos, {C-c-c6mo que un lema? Una contrasefia o algo asi. ~@-p-para qué? ~Imaginate que Vicente te acorrala en un rin- c6n y no tienes posibilidad de escape y nadie se da cuenta. ;Qué haces? ~{¥ de q-q-qué sirve un lema? ~Pues para gritarlo,y los dems, al oil, acuden. No era mala idea. Tavo que reconocerlo, ~ quedaron Sole- dad, Clara, Ignacio, Enrique, Lara, David... y Vi- cente. Claro que poner a Vicente en esta lista era un atentado contra el sentido comin porque, en el fondo, el mas raro era él. Siempre a contracorriente. (Qué hacia que uno se convirtiera en el maton | dela clase? (Qué clase de estupidez le Ilevaba a meterse con todo el mundo oa soltar mamportos? ;Por qué se comportaba asi? {No seria queen el fondo tenia miedo? Si no fuera porque era un bestia, } daa pra Pena Vicente? Pues si. En el fondo, si. Aunque ahora se las | hiciera pasar canutas, | Hugo se sinti6 orgulloso de tener esos pensa- | mientos,casi de adulto, Comprender la vida y com- | prenderse a si mismo era dar el gran salto hacia | lamaduree. Bueno. Por lo menos ahora, con el club en mar- cha, Vicente dejaba de ser una pesadilla. Ya eran muchos, Y fuertes. Hugo sonrié orgulloso. El éxito de su idea era abrumador. Nunca faltaria quien se riera de él, haciéndose el gracioso 0 comportandose como un idiota, cuando dijera , se dijo Hugo. «jHazlo!»,se grité a si mismo, «(TG puedes!», leordenéasumente,su garganta yu coraz6n, ~¢Cémo supers la tartamudez? —pregunté de un tirén, sin tartamudeat. 17 CLaves Mientras acta cova para que le firmara el libro, y era el tltimo por voluntad propia, Hugo no dejaba de escuchar la vordel escritor repique- teandoen sa cabeza La respuesta, SU respuesta. Algo ran simple... ~Empecé a superar la tartamude el dia en que dej6 de importarme. Toda la clase habia guardado silencio, ~Veréis ~continué él-. La gente te hace dao cuandosabe que puede hacerte dario.Si les quitas a oportunidad, los desarmas, En ocasiones, un tartamudo hace reirClaro que lo hace! Puesbien, éper qué avergonzarse por ello? A las personas les falta sentido del humor. Si nos riéramos més dle nosotros mismos,en lugar de darnos impor- tancia y creernos el centro del universo, nos iria mucho mejor. Cuando era nifio, no hablaba, me daba vergiienza,asi que les daba municiones los que se metian conmigo. Un dia pensé que siem- pre iba a ser tartamudo, y que, o cambiaba, 0 eso me haria mis dafio del necesario, Asi que empecé a reirme de mi mismo antes de que lo hicieran Jos demas. Tenia més o menos diecisiete 0 diecio- cho afios. Recuerdo que estaba con mis amigos yles dije que iba a contarles un chiste,Se quedaron todos tiesos. Me lance y lo conté, Consegui llegar hasta casi el final, y justo entonces, cuando iba a pronuneiar las palabras decisivas,las que termi- nan el chiste y hacen que la gente se ria,me trabé, ‘Apenas si pude farfullar ese final, asi que, por su- puesto, a todos se les congelé la sonrisa en la cara, Yodije entonces: , Nolo hicieron, Y Hugo les contd el chiste. Su chiste, Noera nada del otro mundo. Incluso era malo, Uno de esos chistes tontos que hacen reir mas ‘por ingenuos que por otra cosa, Pero lo que Hugo pretendia era probar y comprobar algo. Abrir una puerta. Loconté sin tropezarse apenas, entusiasmado, representndolo, gesticulando, poniéndole el alma. Sus padtes, sentados, lo contemplaban extasiados, lenos de amor: ¥, por supuesto,suftiendorun poco, deseosos de que su hijo lo terminara sin tartamu- dear. Cuando Hugo se acer al final,empezé a po- nerse nervioso. Inevitablemente. Yalira decir la frase decisiva,el final del chiste, Jas palabras que provocaban queel piblico se tron- chase, sucedié lo mas normal Se bloques. ‘Tartamude6 mas que nunca, Casi dej6 de respira. Sus padres lo miraron angustiados, Hugo hizo un esfuerzo. Y,aunquea duras penas,consiguié pronunciar aquella maldica frase final, Sus padres esbozaron dos timidas sontisas, Un Ja, ja ja> sin alegria, Entonces, él les dijo: —Esto,contado todo seguido, tiene mucha gracia, Y lo hizo sin tartamudear, En ese momento, sus padres estallaron en una carcajada estentérea. Una carcajada sincera, Su padre le palmeé el hombro. Su madre le abrazé. Fue en ese instante cuando Hugo supo que iba aconseguirlo, Que un dia seria como el escritor. Habia aprendido a reirse de si mismo. AGRADECIMIENTOS Gracias Ana Arenzana, que me pidié que escribiera «ste libro,y a Elisa Cano, que la apoyé con su irreducti- ble entusiasmo suméndose al proyecto. Las dos sabian que esta,en parte, es mi propia historia Naci y soy tartamudo, aunque hoy nadie lo ditia porque hablo como una ametralladora Un dia conté un chiste, como Hugo. Ese fue el comienzo, Qué importante es reirse de uno mismo y no to- arse en serial Pero hay que crecer, y leer mucho, para que uno se dé cucnta de ello. El tiempo es lo que nos hace sabios. Eltiempo ya culeura. Esta novela también esti dedicada a todos los chi- 0s y chicas con problemas que me he encontrado en. colegiosy en Ia vida alo largo de mi existencia. Lo que les dice el escritor en su charla es lo que suelo decirles yoacllos. En el fondo, todos somos raros. Ynicos. so es lo mas grande. Jonp: Sing 1 FaBra Barcelona, enero de 2014

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