Está en la página 1de 1

Bitácora del Brayan

Lo que Dios nos dice:


“Todo va a estar bien, pero que todo salga bien, no
significa que vaya a salir como tu quieres".
Parábola del dueño los perritos:
El amor de Dios es como el de un dueño con perritos que
crecen y tienen diferente naturaleza, él a todos les ama de
igual manera pero hay unos que entienden y logran
adoptar ciertas características para convivir en la casa del
dueño, sin embargo hay otros que muerden duro, rasguñan
y dañan todo a su paso, hacen sus necesidades dónde
quieren y le ladran a su dueño como desafiándolo, sin
embargo el dueño los quiere y en lugar de tirarlos a la
calle o matarlos, los encierra y los mantiene con vida e
intenta que cambien al sacarlos y darles nuevas
oportunidades. Sin embargo hay perros que no cambian y
crecen en una naturaleza malvada e intentan dañar todo lo
que pueden y al dueño no le queda de otra que hacerles un
lugar en el que se queden solos y sufriendo por siempre,
porque han desarrollado una naturaleza inmutable e
irremisible a pesar de todo lo que intento su dueño.

También podría gustarte