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UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN CRISTÓBAL DE

HUAMANGA
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

ASPECTOS GENERALES DE LA PRUEBA E HISTORIA DE


LA PRUEBA

CURSO : DERECHO PROCESAL PENAL I / DE-44


DOCENTE : Prof. WILKER RUIZ VELA
GRUPO : I
ALUMNOS : CONDE NÚÑEZ, Cindya Yakelyn (Delegada)
AVENDAÑO LLANCCE, Jorge Luis
BERROCAL CONDE, Yuliana Kaloray
CARHUAPOMA GUTIÉRREZ, José Luis
DIAZ SULCA, Gisela
GUERRERO HINOSTROZA, Joel Alexis

AYACUCHO
2021
ÍNDICE

INTRODUCCIÓN.............................................................................................................1
LA PRUEBA EN EL NUEVO PROCESO PENAL.....................................................2
ASPECTOS GENERALES DE LA PRUEBA.........................................................2
1. PRELIMINAR...................................................................................................2
2. LA PRUEBA...................................................................................................10
3. LA NOCIÓN DE LA PRUEBA......................................................................16
4. PRUEBA ES VERIFICACIÓN Y NO AVERIGUACIÓN............................19
5. ELEMENTO DE PRUEBA............................................................................21
6. ÓRGANO DE PRUEBA................................................................................25
7. MEDIO DE PRUEBA.....................................................................................27
8. FUENTE DE PRUEBA..................................................................................30
9. NECESIDAD DE LA PRUEBA.....................................................................32
HISTORIA DE LA PRUEBA....................................................................................36
1. PRELIMINAR.................................................................................................36
2. EVOLUCIÓN..................................................................................................37
CONCLUSIÓN...............................................................................................................40
BIBLIOGRAFÍA.............................................................................................................41
INTRODUCCIÓN

1
LA PRUEBA EN EL NUEVO PROCESO PENAL

ASPECTOS GENERALES DE LA PRUEBA

1. PRELIMINAR

Antes de abarcar el tema de la prueba, es necesario delimitar el contexto


en el que se presenta, así que es necesario hurgar un poco sobre ciertos
conceptos que nos ayudaran a entender mejor lo que significa la prueba
para el derecho procesal penal. Como ya sabemos, el derecho penal es el
compilado de normas que tiene por fin el controlar ciertos conflictos y
vulneración de derechos- actos que cataloga como delitos- para una
convivencia, en lo posible, pacifica.

Hurtado Pozo señala que: “El derecho penal es uno de los medios de
control social mediante el cual el Estado busca desmontar los elementos
conflictivos potenciales y de aceitar la maquinaria de la circulación social;
superar las tensiones sociales”1. De esta forma se garantiza el ejercicio de
los derechos y libertades, condición indispensable para que las personas
puedan realizar sus programas individuales de vida.

Es así que la ley penal necesariamente tiene que ser aplicada, pero,
¿cuál es la forma adecuada de aplicar estas normas? Al respecto Rosas
Yataco nos indica que: “El derecho penal solo puede ser aplicado a través
del proceso penal y del derecho que lo regula” 2.

Cuando el autor nos señala, y del derecho que lo regula, hace referencia
al derecho procesal penal. San Martín Castro nos señala que: “El derecho
procesal es instrumental. El proceso es un medio para conseguir un fin
1
Hurtado Pozo, José. “Manual de Derecho Penal”. Lima. Editorial Moreno S.A. Cuarta
Edición; 2011. Pág. 09
2
Rosas Yataco, J. “La Prueba en el Nuevo Proceso Penal”. Lima: Editorial Ediciones
Legales E.I.R.L. Primera Edición; 2016. Pág. 06

2
especifico, la protección jurisdiccional de los derechos a través de la
actuación o aplicación de la ley en el caso concreto” 3. Es así que el
derecho procesal se constituye, pues, en un instrumento que permite al
Estado la resolución de controversias, y cuya finalidad, como resulta de lo
expuesto, es hacer eficaz el derecho material.

El derecho procesal penal, en un sentido estricto, abarca la decisión de


los conflictos sociales que pretenden la aplicación de la ley penal, es
decir, todo el proceso penal, de inicio a fin; y en un sentido amplio, no solo
contempla la decisión, sino también la aplicación y ejecución de la pena o
medida de seguridad. Es así que podemos afirmar que, la jurisdicción
penal no solo consiste en invocar el derecho, sino también su aplicación y
ejecución.

Pero, ¿cuál es el fin del proceso penal? Al respecto San Martín Castro
señala que:

La meta del proceso penal en un Estado Constitucional no puede


ser otra que la búsqueda de la verdad material -o, mejor dicho, de
la verdad judicial-: acercarse a la verdad respecto del hecho
punible y, en su caso, castigar al autor o participe de su comisión;
por consiguiente, el fin del proceso es solucionar un conflicto, pero
con una aplicación correcta de la regla de juicio y, luego de una
regla de derecho cuya estructura es condicional -una
reconstrucción posiblemente verdadera de hechos es una premisa
necesaria para demostrar que la decisión es correcta, pero no es
suficiente-.4

3
San Martín Castro Cesar. “Derecho Procesal Penal - Lecciones”. Lima. Corporación
Gráfica JMD. Segunda Edición; 2020. Pág. 05
4
ÍDEM

3
Debe quedar claro que lo que se prueba o se demuestra en el proceso
jurisdiccional es la verdad o falsedad de los enunciados facticos en litigio,
tomando como base los medios de prueba relevantes y admisibles. En el
caso del fiscal, la actividad probatoria está dirigida a acreditar la verdad
respecto de una proposición que afirma la existencia de un hecho
delictivo.

La verdad judicial, se obtiene a partir de las fuentes y medios de prueba,


información a partir de la cual se puede derivar la verdad de los hechos
en litigio, y su selección se hace desde dos criterios básicos: relevancia
de los medios de prueba y admisibilidad (jurídica) de los medios de
prueba. Es así que, en búsqueda de la verdad, y como elemento
primordial para el proceso penal, encontramos a la prueba.

“El ejercicio del poder punitivo conlleva una grave afectación de los
derechos fundamentales de la persona. Las sanciones comportan la
privación o la restricción de la libertad, de ciertos derechos o del
patrimonio”5. Es debido a esto que se necesita al debido proceso, como
una forma de respetar la dignidad humana, implicando derechos
fundamentales y garantías constitucionales.

Un primer esbozo de la prueba, tema que desarrollaremos a mayor


profundidad en las siguientes hojas, seria lo indicado por San Martín
Castro:

“La prueba es la actividad de las partes procesales dirigida a


ocasionar la acreditación necesaria -actividad de demostración-
para obtener la convicción del juez decisor sobre los hechos por
ellas afirmados -actividad de verificación-, intervenida por el órgano
jurisdiccional bajo la vigencia de los principios de contradicción,

5
Hurtado Pozo, José. “Manual de Derecho Penal”. Lima. Editorial Moreno S.A. Cuarta
Edición; 2011. Pág. 10

4
igualdad y de las garantías tendentes a asegurar la espontaneidad
e introducida, fundamentalmente, en el juicio oral a través de los
medios lícitos de prueba”6.

Es decir que, no basta con lo afirmado por las partes, sino que es
necesario demostrar lo que se alega, precisar si esto se ajusta a la
realidad. Así como también estas pruebas tienen que referirse a los
hechos objeto de imputación y a la vinculación del imputado a los mismos.
En general, se busca que las pruebas valoradas tengan un carácter
incriminatorio, es decir, que puedan sostener el fallo condenatorio; y su
contraparte, las pruebas también pueden ser de un carácter absolutorio,
pues pueden llevar a sostener un fallo absolutorio.

El derecho a la prueba integra la garantía de defensa procesal. Se define


este derecho como el poder jurídico que se reconoce a toda persona que
interviene en un proceso jurisdiccional de provocar la actividad procesal
necesaria, es decir, utilizar los medios de prueba necesarios, para lograr
la convicción del órgano jurisdiccional acerca de la existencia o
inexistencia de los hechos relevantes para la decisión del conflicto que es
objeto del proceso.

El Nuevo Código Procesal Penal de 2004, ha logrado incorporar una


sección completa que regula lo concerniente a la prueba (Sección II: La
Prueba), y que va desde el Art. 155 al 252. Esto marca una gran
diferencia con respecto al anterior Código Procesal Penal de 1940, que no
reguló absolutamente nada sobre la prueba, pero esto no quiere decir que
no podamos encontrar doctrina y jurisprudencia respecto a la prueba.
Este es uno de los motivos por el cual este tema aun es muy complicado,
y que su aplicación, como ya sabemos ha venido a darse gradualmente, y
por distritos.

6
San Martín Castro Cesar. “Derecho Procesal Penal - Lecciones”. Lima. Corporación
Gráfica JMD. Segunda Edición; 2020. Pág. 751

5
Rosas Yataco (2016) al respecto, nos expresa que:

“Es interesante lo que comenta Juan Luís Gómez Colomer en el


prólogo a la obra sobre Prueba y Proceso Penal, cuando señala
que el derecho probatorio es un tema crucial toda vez que sus
reglas y práctica en el proceso penal, en los últimos tiempos está
viendo cómo sus tradicionales dogmas y postulados, que
prácticamente nadie discutía en lo doctrinal, están cambiando
profundamente, en algunos casos se están incluso desmoronando,
debido sobre todo a la aparición de nuevas formas de delincuencia
muy graves, complejas y organizadas que el Estado ve impotente
multiplicarse día a día, alas que no se puede enfrentar con
procesos penales de corte clásico, ni, por tanto, con normas
procesales tradicionales. Agregando que los principales problemas
que se están planteando en la prueba en el proceso penal, Porque
se está en un momento muy complejo y conflictivo en nuestro
proceso, debido sin duda alguna a estos tres factores” 7:

a) El gran aumento de la delincuencia

Ya no es extraño el ver por la televisión noticias sobre delitos que


revistan gran crueldad o gravedad (como lo son el feminicidio,
violación, etc.), tampoco nos sorprende el escuchar sobre
organizaciones criminales enquistadas hasta en el mismo órgano
judicial (caso Cuellos Blancos).

Con esto en mente podemos ver que, con el transcurso del tiempo,
las acciones de estos agentes criminales cada vez se vuelven, o
más complejos, o más graves, y es necesario que la política

7
Rosas Yataco, J. “La Prueba en el Nuevo Proceso Penal”. Lima: Editorial Ediciones
Legales E.I.R.L. Primera Edición; 2016. Pág. 10

6
criminal- y el derecho penal- tenga que constantemente observar el
panorama general. Es así que muchos de estos casos pueden
llegar a su absolución o a una mínima condena, precisamente por
los defectos relacionados a los temas probatorios.

Ejemplos que podemos encontrar, como los son los delitos de


extorsión, que son cometidos hasta de los mismos
establecimientos penales; los delitos de trata de personas, donde
bajo la apariencia de un negocio lícita se capta a las personas para
otros fines; y por último, el reciente delito incorporado al Código
Penal el 2019, financiamiento prohibido de partidos políticos, que
otra vez, muestra como la delincuencia junto a la corrupción se han
visto arraigados hasta dentro de partidos políticos.

La Ley Nº27697, Ley que otorga facultad al fiscal para la


intervención y control de comunicaciones y documentos privados
en caso excepcional, donde se facultad para que el fiscal pueda
recabar información -medios probatorios- mediante la intercepción
de las comunicaciones de las personas que son materia de
investigación preliminar o jurisdiccional, ha tenido modificatorias
desde su entrada en vigencia; la primera en el año 2007, donde se
suman nuevos delitos a los delitos a los que pueden ser aplicados
esta Ley, como lo son los casos de pornografía infantil y el tráfico
ilícito de migrantes; lo mismo paso en el año 2013, donde a estos
se suman los delitos informáticos, como lo son: proposiciones a
niños, niñas y adolescentes con fines sexuales por medios
tecnológicos, el tráfico ilegal de datos, la suplantación de identidad
entre otros.

b) La aplicación metódica de normas y reglas probatorias sin


la necesaria meditación y reflexión

7
Rosas Yataco (2016) indica que:

“Esta situación, indudablemente hace impredecible una decisión


judicial en casos similares, lo que genera que no haya un
criterio común en el manejo de la actividad probatoria. Por lo
general se produce en la admisión de los medios de prueba,
cuyos criterios aplicados por el Juez de la Investigación
Preparatoria son disímiles en casos similares. Del mismo modo,
en cuanto a su valoración”8.

Para el caso de la obtención de pruebas con violación de derechos


fundamentales, la doctrina y la jurisprudencia la han denominado
indistintamente como prueba ilícita, prueba prohibida, prueba
ilegítimamente obtenida, ilegalmente obtenida. y para el caso de
las pruebas irregularmente incorporadas, también se le ha llamado
prueba ilícita, pero entendida como prueba ineficaz.

Según el Acta de la Sesión del Pleno Jurisdiccional Superior


Nacional Penal “Problemática en la Aplicación de la Normal Penal,
Procesal y Penitenciaria” Tema Nº03 “La prueba ilícita y la prueba
prohibida”: “Generalmente, los derechos constitucionales que se
suelen afectar en la obtención de fuentes de prueba son: el
derecho a la integridad física, la libertad personal, el derecho de
intimidad, a la propia imagen, la inviolabilidad del domicilio, el
secreto de las comunicaciones, entre otros derechos
fundamentales.”

El problema, de manera general, con respecto a la prueba


prohibida, que, al ser un arma de doble filo, es si el juez debe
admitirla o no como elemento de convicción. Es así que en

8
Rosas Yataco, J. “La Prueba en el Nuevo Proceso Penal”. Lima: Editorial Ediciones
Legales E.I.R.L. Primera Edición; 2016. Pág. 11

8
necesario que el Corte Suprema o que el Tribunal Constitucional
marque un camino de decisiones firmes respecto a este tema.

c) La influencia de cambios estructurales en el proceso penal

Rosas Yataco (2016) indica que:

“En el caso peruano, felizmente contamos con un nuevo


proceso penal de corte acusatorio y garantista, donde se ha
diseñado un proceso tipo que es el común y que sirve de base a
los demás procesos especiales, estableciéndose las reglas
claras para cada una de ellas”9.

Que si bien con el Nuevo Código Procesal Penal del año 2004,
el proceso penal en general ha sido totalmente reformado, este
nuevo proceso es: acusatorio; en tanto las actividades o
funciones que cumplen el fiscal y el juez están delimitadas; y
garantista con razón a la prueba, pues se garantiza el debido
proceso, desde el inicio hasta el final. La prueba es un elemento
fundamental para esto, y es por esto mismo que se regula de
manera extensa dentro de este Nuevo Código.

El proceso tipo que es el proceso común o también llamado


proceso penal ordinario, que sirve de base para los demás
procesos especiales establecidos, como lo son: el proceso
inmediato, el proceso de seguridad, el proceso por faltas, etc.

Estas modificaciones, con respecto al anterior Código Procesal


Penal, ha estado en un proceso de consolidación a nivel
nacional, es decir, que se va asentando cada vez mas con la
9
Rosas Yataco, J. “La Prueba en el Nuevo Proceso Penal”. Lima: Editorial Ediciones
Legales E.I.R.L. Primera Edición; 2016. Pág. 12

9
practica diaria, y que enriquece a la doctrina y a la
jurisprudencia.

Conclusión

Es así que llegamos a la conclusión de que, para el Derecho Penal, la


prueba no es más que el factor básico sobre el cual gravita todo el
procedimiento, pues sin esta, no pasaría de ser un conocimiento teórico
sin mayor relevancia práctica. Es así que, de le prueba dependerá el
nacimiento del proceso, de su desarrollo y su realización.

Es necesario que se de una correcta actividad probatorio, ya que de esto


depende su utilización al momento de sentenciar, pues se toma en cuenta
las pruebas actuadas por ambas partes y el juez, con arreglo a las
normas, tomara su decisión y lo plasmara en la sentencia.

El error dentro de la actividad probatoria no es un tema de poca


importancia, pues es algo recurrente -no tanto, pero lo es- y que ninguna
persona es ajena a esta amenaza, es por eso que, es el deber de toda
persona que se encuentra inmersa en un proceso (civil, penal, laboral,
etc.) el de reducir al mínimo este margen de error, y esto obviamente es
mediante la aportación de medios probatorios.

2. LA PRUEBA

La idea de prueba está presente, en todas las manifestaciones de la vida


humana. De ahí que exista una noción ordina o vulgar de la prueba, al
lado de una noción técnica, y que esta varíe según la clase de actividad o
de ciencia que se aplique. La prueba no es exclusiva del campo jurídico,
las personas utilizan la prueba en su vida diaria. Al respecto Rosas
Yataco, J. señala que: “La prueba no es de exclusividad del derecho

10
procesal, y menos del derecho procesal penal, si no que en nuestra vida
diaria siempre estamos probando –aunque no nos damos cuenta.” 10

De igual forma Devis Echandía precisa que:

"A diferencia de lo que ocurre con ciertas instituciones y conceptos


jurídicos, que atañen solo a determinada rama del derecho, como la
procesal, la civil o la penal, la noción de prueba no solo dice relación
con todos los sectores del derecho, sino que trasciende el campo
general de este, para extenderse a todas las ciencias que integran el
saber humano, e incluso, a la vida práctica cotidiana” 11.

En ese sentido las personas utilizan la prueba en la vida diaria como algo
habitual ya que se tiene la necesidad de comprobar si ciertos hechos o
manifestaciones son reales o verídicos. Por ello, desde un estudiante, un
profesor, una madre de familia, el médico, el arqueólogo deben probar los
hechos, los resultados y las cusas de estos, para ello será necesario pues
reconstruir el pasado, analizar el presente y por último deducir el futuro
que es lo que pueda pasar mañana.

Miranda Estrampes expone que:

“Uno de los primeros errores que se cometen al abordar el estudio


de la prueba en el proceso es tratar de analizar el fenómeno
probatorio como si fuera exclusivo del Derecho Procesal. La prueba
como comprobación o verificación de la exactitud de una afirmación
no es una actividad que se realice exclusivamente en el campo del
Derecho, sino que es, ante todo, una actividad del ser humano que
tiene aplicación en otras ciencias extrajurídicas, e incluso en la vida
10
Rosas Yataco, J. “La Prueba en el Nuevo Proceso Penal”. Lima: Editorial Ediciones
Legales E.I.R.L. Primera Edición; 2016. Pág. 19
11
Devis Echandía. “Teoría General de la Prueba Judicial”. Editorial Temis. Bogotá 2002.
Pág. 01.

11
cotidiana. Es una actividad que se produce en todas las facetas o
áreas en donde se desenvuelve Ia personalidad humana. Tiene,
por consiguiente, un carácter metajurídico o extrajurídico” 12.

Por lo tanto, se puede prescindir que la prueba trasciende el campo del


Derecho.

Rosas Yataco, J.13 en su libro La prueba en el proceso penal señala que


hay dos tipos de pruebas; la prueba documental y una prueba testimonial,
lo primero manifiesta que es una prueba escrita ya sea sobre un papel o
algún material. La segunda señala que es una prueba hablada de forma
verbal, en este caso se requiere a otra persona más que manifieste
verbalmente que lo dicho por la persona es verídico o haga mención de lo
que vio. Ejemplificando con respecto a la prueba documental señala que
para hacer creer a un incrédulo sobre los estudios universitarios se le
muestra una constancia o certificado de estudios y para validar esto se
adicionara el testimonio de su compañero que certificara el estudio de
este en la universidad viniendo a ser esta una prueba testimonial.

Villavicencio M. Victor, manifiesta que: “La arquitectura del proceso penal


es la prueba”.14 Por ello, se dice que la prueba tiene que estar presente en
todo momento y más si es en un proceso, sin la prueba sería difícil casi
imposible condenar o absolver a una determinada persona. En los
procesos civiles el aporte de las pruebas corresponde a las partes,
mientras que en un proceso penal depende de la iniciativa del juez quién
es encargado de escoger la prueba que pueda ayudar con el
esclarecimiento de un caso o la demostración de un hecho.

12
Miranda Estrampes. “Lo mínima actividad probatoria en el proceso penal”, José María
Bosch Editof Barcelona. 1997. Pág.16,
13
Rosas Yataco, J. “La Prueba en el Nuevo Proceso Penal”. Lima: Editorial Ediciones
Legales E.I.R.L. Primera Edición; 2016. Pág. 20
14
Villavicencio M. Victor. “Derecho procesal penal”. Imprenta Rozas. Lima 1965. Pág
151.

12
Gómez de Liaño señala que:

“La prueba en el proceso penal está constituida por aquella


actividad que han de desarrollar las partes acusadoras en
colaboración con el Tribunal al objeto de desvirtuar la presunción
de inocencia, derecho constitucional que en el momento presente
es punto obligado de partida de toda consideración probatoria en el
proceso penal que se inicia con la verdad provisional o interina de
que el denunciado o inculpado es inocente. Si la clave de todo
proceso se encuentra en la prueba, en el penal adquiere
dimensiones trascendentes porque la dificultad reside en probar
unos hechos que, en la generalidad de los casos, surgen
espontáneamente, sin pruebas documentales, de forma que ese
medio tan falible y vulnerable que es la prueba testifical, viene a
constituir la prueba reina, y en muchos casos es a la vez la
declaración de la propia víctima con los problemas generales de
parcialidad, vacilaciones y contradicciones que le son propios y que
se presentan en el fondo de una condena penal” 15.

Mixán Máss, un maestro peruano considera a la prueba como:

“Una actividad finalista, con resultado y consecuencia jurídicas, que


le son inherentes; y que procesalmente, “la prueba consiste en una
actividad cognoscitiva metódica, selectiva, jurídicamente regulada,
legítima y conducida por el funcionario con potestad para descubrir
la verdad concreta sobre la imputación o, en su caso, descubrir la
falsedad o el error al respecto, que permita un ejercicio correcto y
legítimo de la potestad jurisdiccional penal”16.

Gómez de Liaño. “La prueba en el proceso penal”. Pág. 13


15

Mixán Máss, F. “Categoríasy actividad probatoria en el procedimiento penal”. Ediciones


16

BLG. Trujillo. 1996. Pág. 303

13
La prueba en materia judicial constituye una actividad pre ordenada por la
ley, que se encuentra sometida al criterio de la autoridad judicial y
mediante la cual se espera descubrir u obtener la verdad de un hecho
controvertido. La actividad probatoria compete a los sujetos procesales.

Ortells Ramos señala que:

“La prueba es una actividad procesal de las partes, dirigida por el


Juzgador con fin de la formación de su convicción psicológica
sobre los datos (fundamentales) de hecho probados, la misma que
debe estar sometida a una ordenación, que supone establecer
limitaciones y condicionamientos, y también la posibilidad de
valoraciones positivas o negativas sobre la eficacia jurídica de la
actividad realizada, sin que importen solamente unos efectos de
mero hecho de haber contribuido a la formación de la convicción” 17.

Fenochietto nos da a conocer cinco criterios para tener una noción de lo


que es la prueba en el campo procesal y específicamente en el proceso
penal.

a) En el ámbito legal, la prueba se estructura sobre un complejo


normativo integrado por un plexo de preceptos que ordenan desde
los medios probatorios hasta su eficacia y valoración ante una
eventual colisión entre ellos;

b) Desde otro punto de vista, la teoría jurídica de la prueba se vincula


inexorablemente al "conocimiento jurídico': un hombre de Derecho,
el jurista sea el legislador en la prueba legal o bien el juez en el
sistema de las libres convicciones, no recibe la prueba y como tal la
tiene por buena. Todo lo contrario, en particular el magistrado tiene
el deber de apreciarla y valorarla conforme a la "sana crítica';
17
Ortells Ramos. M. “Derecho Jurisdiccional”. Tomo III con Montero Aroca. Pág. 322.

14
c) Tal valoración previa se sustenta en una convicción
exclusivamente jurídica y basada en Ia experiencia judicial, pues
de lo contrario corre el riesgo de empequeñecerse frente a los
expertos de las ciencias naturales que tratan de imponerle, en
definitiva, hasta su lenguaje técnico;

d) En efecto, las diferencias focales respecto del proceso judicial


permiten señalar en los autores distintas concepciones del vocablo
"prueba', nos referimos a un sentido teleológico en virtud del cual
se subraya el resultado de la actividad probatoria, y un sentido
instrumental de modo que la prueba es el medio o instrumento con
el cual se verifica la existencia de un hecho; y

e) La proposición precedente ayuda a comprender continuando con la


tesis de Denti, que la “cientificidad de la prueba” no importa tanto al
medio de comprobación, ni al procedimiento de producción, cuanto
al conocimiento de la prueba científica al momento de su
valoración por el juez y arribar así, al clásico dilema entre "verdad"
y "certeza jurídica": en busca de la primera el sentenciador corre el
riesgo de “cientificarse”, olvidando su tarea de fijar los hechos a fin
de aplicar la ley al caso juzgado.

Debemos tener en cuenta también que la actividad probatoria se


encuentra regulada por la Constitución Política del Estado y también por
las leyes internacionales que garantizan los derechos fundamentales de la
persona. Conforme a la presunción de inocencia, se debe respetar la
consideración de no autor o no partícipe de un delito mientras no se halla
declarado judicialmente su responsabilidad (Art. 2° inc. 24, ap. e).
También se prohíbe la violencia moral o de tratos inhumanos o
humillantes; y la afirmación de la carencia de valor de las declaraciones

15
obtenidas por la violencia. El Art. 2° inc. 24 ap. h) de nuestro texto
constitucional es muy claro.18

3. LA NOCIÓN DE LA PRUEBA

La palabra prueba proviene del latín; en el cual, probatio, probationis, lo


mismo que el verbo correspondiente (probo, probas, probare) viene de
probus, que quiere decir bueno, recto, honrado.

En el Diccionario de la Real Academia Española se dice que prueba es


“Razón, argumento, instrumento u otro medio con que se pretende
mostrar y hacer patente la verdad o falsedad de algo” 19. Es decir, se
pretende demostrar algo, la RAE define a la demostración como: “Prueba
de algo, partiendo de verdades universales y evidentes” o “comprobación,
por hechos ciertos o experimentos repetidos, de un principio o de una
teoría”.20
La palabra “prueba”, es usada en diversas ramas del conocimiento, así
como también en la práctica. Este concepto se aplica con una
connotación similar. Inicialmente se construyó como forma de argumentar
acerca de una idea o una propuesta explicativa, por ejemplo, un teorema;
después con la aparición del método inductivo se aplicó a los hechos,
esto modificó el significado del término “prueba”. Probar se vinculó
entonces a la demostración de un hecho o fenómeno, a sus relaciones, a
sus causas y efectos; y también a la manipulación del mismo.

De esta manera todos los operadores de las diversas disciplinas


científicas tienen que probar sus tesis o hipótesis. Probar en este sentido
es convencerse y convencer a otros de la existencia o de la verdad de
18
Sanchez Velarde, Pablo. “El nuevo Proceso Penal”. Primera Edición. Editorial Moreno
S.A. Lima. 2009. Pág. 226
19
REAL ACADEMIA ESPAÑOLA: Diccionario de la lengua española, 23.ª ed., [versión 23.4 en
línea]. <https://dle.rae.es/prueba?m=30_2#otras> [Fecha de la consulta 18-05-21].
20
REAL ACADEMIA ESPAÑOLA: Diccionario de la lengua española, 23.ª ed., [versión 23.4 en
línea]. <https://dle.rae.es/demostraci%C3%B3n?m=30_2> [Fecha de la consulta 18-05-21].

16
algo. Probar es, pues, producir un estado de certidumbre en la mente de
una o varias personas sobre la existencia o inexistencia de un hecho, o de
la verdad o falsedad de una proposición. Puede decirse, también, que
probar es evidenciar algo, o sea, lograr que nuestra mente lo perciba con
la misma claridad con que los ojos ven las cosas materiales.

Entonces, etimológicamente y gramaticalmente, la voz “prueba” es el


sustantivo del verbo “probar”, que representa su acción, su elemento, su
procedimiento y su resultado, previo un averiguamiento, con el fin de
verificar o comprobar la verdad, veracidad o la certeza de una
proposición, de un juicio. “Prueba” es, entonces el sustantivo, en cuanto
representa al elemento, la actividad, el procedimiento y el resultado, todos
a una, del atributo que conlleva el verbo “probar”; y particularmente,
también es el sustantivo de los verbos “verificar” y “comprobar”, en cuanto
encarna la propiedad del procedimiento, para el primero en las ciencias
reales, y para el segundo en las ciencias formales. 21

La noción de prueba está presente en todas las manifestaciones de la


vida humana. De ahí que exista una noción ordinaria o vulgar de la
prueba, al lado de una noción técnica y que esta varíe según la clase de
actividad o de ciencia que se aplique.

“Pero es en las ciencias y actividades reconstructivas donde la noción de


prueba adquiere un sentido preciso y especial que en sustancia es el
mismo que tiene en derecho. Al respecto dice Carnelutti: “el concepto de
prueba se encuentra fuera del derecho y es instrumento indispensable
para cualquiera que haga, ya no derecho, sino historia” 22.

21
CUELLO IRIARTE; Gustavo. “Derecho probatorio y pruebas penales”. Legis. Colombia 2008. P.
17-18.
22
CARNELUTTI. “La prueba civil”. Buenos Aires, Edición Arayú, 1955. Pág.4.

17
En efecto, muchos de estos profesionales que estudian los hechos
acontecidos, tales como historiadores, arqueólogos, paleontólogos,
cronistas, periodistas y otros, recurren a la prueba para convencer a sus
lectores o informantes de esa verdad; en derecho la prueba se utiliza
principalmente para convencer a jueces, pero también para tener
convencimiento personal o seguridad subjetiva sobre los propios
derechos, lo cual equivale a convencerse a sí mismo de la verdad o
legalidad de ciertos hechos o actos jurídicos.

Las pruebas judiciales recaen sobre hechos ordinarios, sobre fenómenos


que ocurren en la vida, sobre las mismas cosas, sobre los mismos
hombres y las acciones realizadas por éstos. Su distinta calidad depende
del empleo que se haga de ellas: adquieren categoría de judiciales,
porque ingresan al proceso, o son simplemente históricas o arqueológicas
o geológicas, etc., si permanecen en el respectivo campo de
investigaciones extraprocesales.

La importancia que la prueba tiene en la vida jurídica es que sin ella los
derechos subjetivos serían simples apariencias, sin eficacia alguna,
diferente a la que podría obtener por propia mano (autodefensa), frente a
las demás personas, el Estado o entidades públicas.

“La administración de justicia sería imposible sin la prueba, así como


también la prevención de los litigios y la seguridad en los propios
derechos y en el comercio jurídico en general. No existiría orden jurídico
alguno”23.

Jeremías Bentham nos dice que “el arte del proceso no es esencialmente
otra cosa que el arte de administrar las pruebas” 24. Siguiendo esta misma
23
DEVIS ECHANDIA, Hernando. Teoría de la prueba judicial. Editor Víctor P. de Zavalía. Buenos
Aires, 1970. Pág. 13.
24
BENTHAM, Jeremías. Tratado de las pruebas judiciales. Buenos Aires. Edit. Ejea, 1959. Tomo I.
Pág. 10.

18
línea, Santiago Sentís Melendo añade que “la prueba constituye la zona,
no solo de mayor interés, sino también neurálgica del proceso; la prueba
da carácter al proceso […]”25.

Tanto el proceso como la decisión final por parte del juez, están
encaminados a resolver la incertidumbre y calificarlos como verdad o
falsedad de los enunciados, los cuales están relacionados con los hechos
relevantes en la investigación. Para demostrar la veracidad o falsedad de
las afirmaciones el juez se vale de la prueba, el cual es el instrumento que
proporciona información útil para resolver dicha incertidumbre.

Jorge Rojas Yataco26 considera que a partir de estos aspectos se puede


elaborar un concepto de prueba procesal:

a) Criterio objetivo

Desde esta perspectiva se considera prueba todo medio que sirve


para llevar al juzgador el conocimiento de los hechos. Vale decir,
que se conceptúa la prueba como todo instrumento o medio que se
utiliza para lograr la certeza judicial. Como se aprecia, este
posicionamiento doctrinario confunde a la prueba con los medios
de prueba.

b) Criterio subjetivo

Aquí el concepto de prueba se considera al convencimiento o al


grado de convicción que va a tener el juez, vale decir, el resultado
de la actividad probatoria, luego de una valoración.

c) Criterio mixto
25
SENTÍS MELENDO, Santiago. El proceso civil. Buenos Aires. Edit. Ejea, 1957. Tomo I. Pág. 182.
26
ROJAS YATACO, Jorge. La prueba en el nuevo proceso penal. Ediciones Legales. Lima, 2016. Pág.
26 -27.

19
En este último criterio resulta de la combinación de las dos
anteriores posturas, definiéndose a la prueba como el conjunto de
razones que suministran el conocimiento de los hechos, para los
fines del proceso, que se deducen de los medios aportados.

4. PRUEBA ES VERIFICACIÓN Y NO AVERIGUACIÓN

Tomando en consideración lo acotado por Sebastián Midón:

“El juez, que ignora los hechos del litigio, que apenas conoce los
relatos efectuados por las partes, se ve regularmente impedido de
saber cuál de las versiones que ofrecen los litigantes es verdadera.
Para ello se sirve de la prueba, que en cierto modo implica una
confrontación o cotejo: la comparación de las afirmaciones
formuladas por las partes con los elementos de juicio de que sirven
para acreditar o invalidar dichas articulaciones.” 27

“Ahora bien, para despejar su incertidumbre, el juez no averigua; no


puede salir a buscar los hechos que ignora, a ver cómo fueron; sino que
se trata de “verificar”, valiéndose de los elementos probatorios que le
suministraron las partes.”28

La comprobación (sustantivo que implica el resultado de comprobar) o


verificación es lo que se hace para revisar o confirmar un hecho o dato o
una teoría aplicándola en experimentos o casos concretos. En este
sentido, toda comprobación implica experimentación, ensayo o
verificación para lograr la obtención de un resultado que, cuando es de

27
SEBASTÍAN MIDÓN, Marcelo. Derecho probatorio. Ediciones jurídicas Cuyo. Argentina 2007.
Pág. 29.
28
Ibidem

20
carácter científico y el estado actual de la respectiva ciencia lo permite,
debe ser idéntico para toda persona, en todo tiempo y en todo lugar.

Se averigua lo desconocido, se verifica lo conocido y previamente


afirmado; y la prueba versa sobre afirmaciones de las partes, es decir,
sobre datos que estas poseen, que previamente fueron investigados. La
prueba entonces no consiste en investigar o buscar un dato ignorado;
consiste en acreditar que aquello que se conoce y, en consecuencia, se
afirma, corresponde a la realidad o a la verdad.

Es imprescindible señalar que el papel del juez no consiste en averiguar


la verdad de los hechos, que previamente fueron dadas por las partes,
sino en verificar la verdad de los hechos.

5. ELEMENTO DE PRUEBA

El elemento de prueba es aquel dato objetivo que se incorpora legalmente


al proceso, capaz de producir un conocimiento cierto y probable de
extremos de imputación. Ejemplo. Una versión de los hechos. Se puede
denominar bajo estos términos al dato o circunstancia debidamente
comprobada mediante la producción de un medio de prueba que lo
introduce objetiva y regularmente al proceso, siéndole útil al juzgador para
rechazar o admitir en todo o en parte las cuestiones sobre las que debe
decidir. De manera que es menester que el dato sea “objetivo” en cuanto
ajeno al conocimiento privado del juez, y que sea incorporado al proceso
en forma legal, esto es, respetándose las garantías constitucionales y las
reglas procesales de incorporación de pruebas. Pero su utilidad,
entendida como idoneidad probatoria, será meritada por el juzgador en el
momento de dictar sentencia.

21
Se entiende que la palabra “dato” hace referencia a los indicios que el
delito ha dejado en los bienes (roturas en las puertas o paredes, manchas
de sangre u otros fluidos diseminados en el piso o en las paredes) o en el
cuerpo (equimosis, excoriaciones, entre otras que establezcan el grado de
las lesiones mortales o no inferidas a la víctima) o en la psiquis
(percepción de los hechos por el agraviado o testigos), así como el
resultado de experimentos u operaciones técnicas que se practican sobre
los índicos (peritajes). También se puede considerar dato, la información
que se encuentra dentro de un documento. Es necesario, sin embargo,
que el dato posea fuerza conviccional y que se incorpore al proceso a
través de los medios previstos en la ley.

Para comprender de manera más amplia qué se entiende como elemento


de prueba, citaremos a diversos autores:

Cafferata Nores señala que: “El elemento de prueba, o prueba


propiamente dicha, es todo dato objetivo que se incorpora legalmente al
proceso, capaz de producir un conocimiento cierto o probable acerca de
los extremos de la imputación delictiva.” 29

Cubas Villanueva señala que:

“La prueba se nos presenta como la necesidad de comprobar, de


verificar todo objeto de conocimiento, por tanto, es también una
actividad de verificación de exactitud de las afirmaciones realizadas
por las distintas partes procesales, es decir, de que dichas
afirmaciones coinciden con la realidad. La prueba se traduce en la
necesidad ineludible de la demostración, de verificación o
investigación de la verdad de aquello que se ha afirmado al
proceso”30.

29
Cafferata Nores JI. “La Prueba en el Proceso Penal”. Buenos Aires: Depalma; 2003. Pág. 16.
30
Cuba Villanueva, V. “El Nuevo Proceso Penal”. Lima: Palestra Editores; 2009. pág. 264.

22
Rubén A. Chala, señala que:

“Se llama a los elementos de prueba a los hechos y circunstancias


que funda la convicción del juez y que pueden ser examinados por
todos los sujetos de la relación procesal, cuestión que hace a la
comunidad de la prueba. Estos elementos se comprueban
mediante la utilización de un medio de prueba que lo introduce
objetiva y regularmente al proceso, siéndole útil al juzgador para
rechazar o admitir en todo o en parte las cuestiones sobre las que
debe decidir. Incorporados al proceso, significa que deben existir
objetivamente y en conformidad con las garantías dispuestas en la
ley. No han de resultar de simples conjeturas, impresiones,
imaginaciones y opiniones carentes de base externa al juez” 31. Si
esta regla es infringida por el juzgador, la fuente de la prueba seria
incontrolable e ilegítima.

De la noción expuesta se advierte que el elemento de prueba contiene las


siguientes características:

Objetividad Legalidad

Elemento de
Prueba

Relevancia Pertinencia

31
Chala, Rubén, “La prueba en el proceso penal”. Buenos Aires: Editorial Hamurabí, 2010. pág.
88.

23
a) Objetividad, según el cual el dato debe provenir del mundo
externo al proceso, es decir, algo real y físico que existe; que no
sea fruto del mero conocimiento privado del juez carente de
acreditación objetiva.

Su trayectoria (desde fuera hacia dentro del proceso) debe


cumplirse de modo tal que pueda ser controlada por las partes, lo
que implica que las partes puedan controlar todo el proceso de
“construcción” de la prueba, su “encadenamiento causal”; o sea,
desde la aparición del simple dato originario, su forma de
obtención, y sus procedimientos de corroboración, hasta su
incorporación formal al proceso, no pudiendo reducirse el ámbito
de control solo a este último momento, su limitación afectaría al
derecho de defensa.

b) Legalidad, es presupuesto indispensable de la prueba. La prueba


obtenida debe ser legal en todos sus extremos para su utilización
en abono de un convencimiento judicial valido, sin posibilidad
alguna que sea cuestionado y se proponga nulidad. Su posible
ilegalidad estaría determinada por una irregular obtención de la
prueba o una irregular incorporación al proceso.

c) Relevancia, el elemento de la prueba será tal, no solo cuando


produzca certeza sobre la existencia o inexistencia del hecho que
con él se pretende acreditar, sino que permita fundar sobre este un
juicio de probabilidad, es decir que guarde estrecha relación con el
objeto de la investigación.

d) Pertinencia, la relación entre el hecho o circunstancia que se


quiere acreditar y el elemento de prueba que se pretende utilizar.
La prueba tendrá pertinencia toda vez que el dato probatorio

24
deberá relacionarse con los extremos, objetivo (existencia del
hecho) y subjetivo (participación del imputado) de la imputación
delictiva, o con cualquier hecho o circunstancia jurídicamente
relevante del proceso, de modo que la relación entre el hecho o
circunstancia que se requiere acreditar y el elemento de prueba
que se pretende utilizar para ella es conocida como “pertinencia”
de la prueba, es decir, que guarde estrecha relación con el objeto
de la investigación y no puede ser soslayado.

6. ÓRGANO DE PRUEBA

El órgano de prueba es aquella persona física que suministra al órgano


jurisdiccional en su calidad de tal, el conocimiento del objeto de prueba.
Esta persona lo transmite o incorpora al proceso penal, con la finalidad de
que el juez tome conocimiento y lo valore para resolver la cuestión,
conforme a su libre criterio.

En definición, se denomina órgano de prueba a la persona mediante cuya


información se pretende incorporar al procedimiento un conocimiento
cierto sobre un objeto de prueba determinado. Se trata del testigo, del
propio imputado, cuando hace uso de la palabra e informa sobre aquello
que le es preguntado y que interesa al conocimiento sobre el objeto del
procedimiento (testigo en causa propia, según lo denomina el derecho
anglosajón), del perito y del interprete, todos. Según se observa, referidos
a medios de conocimiento de los llamados personales. Las leyes
procesales penales se refieren a estas personas para fijar ciertas reglas y
exigencias que determinan la valoración del conocimiento que transmiten,
ya sea por su validez o rango.

De ahí que se diga que su función es la de “intermediario” entre la prueba


y el juez (por eso, a este último no se le considerara objeto de prueba). El
dato conviccional que transmite puede haberle conocido accidentalmente

25
(como ocurre con el testigo) o por encargo judicial (como el caso del
perito).

Un sector de la doctrina distingue a la persona, que tiene interés en el


proceso y aquella que es extraña. Entre los primeros están el procesado y
el agraviado (o actor civil). En los segundos se encuentran el testigo y el
perito. Con el testigo se practica el testimonio, mientras que el perito rinde
el dictamen o informe pericial.

Para tener un mayor alcance acerca de la definición y de lo que se


entiende como “órgano de prueba”, citaremos a diversos autores:

Rubén Chala expone que: “(…) se conoce como órgano de prueba al


sujeto que porta un elemento de prueba y lo transmite al proceso
permitiendo la incorporación de ese dato a la causa.” 32

De acuerdo a lo señalado por Chala. Es posible distinguir dos formas en


que el dato aportado por un sujeto puede ingresar al proceso:

a) Por la propia voluntad del órgano de prueba, tal el caso de un


testigo que declara que ha visto, o del propio sospechado que
decide confesar el hecho.

b) Por orden del juez, al disponer que un perito, interprete, traductor


u otro auxiliar, realice una determinada labor que será incorporado
al plexo probatorio.

Ore Guardia lo conceptúa como: “La persona por medio de la cual se


adquiere en el proceso, el objeto de la prueba, es decir, por medio de la

32
Chala, Rubén, “La prueba en el proceso penal”. Buenos Aires: Editorial Hamurabí, 2010. pág.
101.

26
cual dicho objeto llega a conocimiento del juez y, eventualmente, de los
demás sujetos procesales.”33

Martínez Ravé explica que: “Los órganos de prueba están constituidos por
las diferentes personas que, mediante sus actuaciones y su intervención
en el proceso, permiten al funcionario tomar conocimiento del objeto.” 34

Eugenio Florián establecía que: “El órgano de la prueba es la persona


física que suministra en el proceso el conocimiento del objeto de prueba:
en el homicidio, por ejemplo, el testigo que declare haber presenciado el
hecho de la muerte.”35

7. MEDIO DE PRUEBA

Taruffo citado por Rosas Yataco, Jorge manifiesta que el medio de prueba
es: “Cualquier elemento que pueda ser usado para establecer la verdad
acerca de los hechos de la causa. La idea básica es que un litigio surge
de ciertos hechos y se basa en ellos, que tales hechos so disputados por
las partes, que esa disputa tiene que ser resuelta por el tribunal y que la
solución de la “controversia sobre los hechos” se alza cuando el tribunal
establece la verdad sobre los hechos motivo de la disputa. Así que el
contexto del proceso bien puede ser concebido como un lugar privilegiado
para la “exigencia de verosimilitud”, la “devoción a la verosimilitud” y el
“deseo de verosimilitud” que un prominente filósofo indica como rasgos
esenciales del pensamiento y la cultura modernos. Además, en los
sistemas procesales modernos no se espera encontrar la “verdad”
recurriendo a la adivinación, echándolo a suertes, “leyendo” las hojas de
té, mediante un duelo judicial o por algún otro medio irracional e
33
Oré Guardia, Arsenio. “Manual de Derecho Procesal Penal”. Lima: Editorial Alternativas, 1996.
pág. 283.
34
Martínez Ravé, Gilberto. “Procedimiento Penal Colombiano”. Bogotá: Editorial Themis, 1994.
pág. 376.
35
Florián, Eugenio. “Elementos de derecho procesal penal”. Barcelona: Casa editorial, 1991. pág.
306.

27
incontrolable (como los juicios de Dios o algún otro tipo de ordalías
medievales), sino sobre la base de los medios de prueba, que han de ser
apropiadamente ofrecidos, admitidos y presentados”.

La verdad es lo que tratamos de encontrar en el proceso, y para eso


necesitamos de las pruebas, cada parte expresa su verdad, pero no la
verdad en sí, y es tarea del juez valorar las pruebas ofrecidas, y para esto
debe valerse de elementos que demuestren los hechos.

Sánchez Velarde define a los medios de prueba como “Aquellas


actividades judiciales complejas de las cuales se vale la autoridad judicial
para conocer de la realidad de los hechos que investiga, las existencias
de los medios probatorios se encuentran condicionadas a la del proceso.
Por su lado, las fuentes de prueba están fuera del proceso, son
extraprocesales. Por ejemplo, tenemos como medios de prueba: la
declaración de parte, la declaración de testigos, las inspecciones
judiciales; como fuentes de prueba, está el testimonio en sí mismo, el
documento (audio, video, fotografía, etc.)”.

Jauchen Eduardo citado por Rosas Yataco, Jorge expresa que:


“Entonces, medio de prueba es el método por el cual el juez obtiene el
conocimiento del objeto de prueba. Su enumeración no es taxativa sino
meramente enunciativa: el testimonio, la documental, la pericial, la
inspección judicial, etcétera. Cada medio tiene una regulación específica
en la ley procesal que establece el procedimiento a emplearse en cada
uno de ellos, procurando de esta forma otorgarle mayor eficacia
probatoria y garantía para las partes. El considerar abierta a la
enumeración que la ley hace de ellos implica que la presencia de algún
medio probatorio que no tenga regulación específica no obsta a su
admisión si resulta pertinente para comprobar el objeto de la prueba, en
cuyo caso deberán aplicársele analógicamente las normas del medio que
más se adecuen a su naturaleza y características. La omisión de respetar

28
las formas que la ley procesal establece para cada medio de prueba
importará su producción en forma irregular y por ende su exclusión
probatoria, siendo invalorable como elemento de conocimiento”.

“Ahondando en la explicación sobre el tema Maier Julio citado por Rosas


Yataco, Jorge manifiesta que: “Son medios de prueba las inspecciones de
lugares, cosas o personas, el testimonio o la declaración de testigos u
otras personas (imputado o coimputados), la peritación o el dictamen o
testimonio de peritos, y la documental, instrumental o, más ampliamente
denominada, prueba de registros. La ley procesal penal regula estos
actos y la forma de llevarlos a cabo. Empero, como muchos de estos
actos no constituyen unidades temporales, ni territoriales, esto es, pueden
prolongarse en el tiempo y un único acto aun cumplirse en lugares
diferentes, o constar de un sinnúmero de acciones determinadas por otros
cánones, a las que, quizás, podamos denominar complejas, en ocasiones
la ley procesal penal contiene el procedimiento interno del acto. Las
exigencias que contiene la regulación de estos actos constituyen
regularmente la base de las prohibiciones probatorias o de valoración
probatorias, pues representan condiciones para el valor de estos actos
como trasmisores de conocimientos”.

“Los medios de prueba responden a la interrogante ¿cómo se prueba? Es


decir, cómo los órganos hacen llegar su conocimiento al proceso penal.
Es en la etapa intermedia donde se ofrecen y admiten los medios de
prueba”.

Eugenio Florián citado por Rosas Yataco, Jorge explica que:


“Ordinariamente se considera medio de prueba todo lo que sirve para
establecer la verdad de un hecho que tiene importancia para la sentencia,
es decir, todo lo que se presenta a la razonable convicción del juez; en
suma, el medio de prueba es un medio de conocimiento”.

29
Los medios probatorios no se encuentran de manera literal o taxativa en
nuestro ordenamiento jurídico sino más bien de manera enunciativa en los
diferentes artículos, entre ellos tenemos:

Artículo 217 del Código Procesal Penal de 1991: "El establecimiento de la


verdad mediante el procedimiento se realizará empleándose todos los
medios de prueba permitidos salvo que la ley prescriba medio especial.
Sólo se admitirán los medios de prueba que sean pertinentes,
conducentes, legítimos y útiles. Podrán limitarse cuando resulten
manifiestamente excesivos".

Artículo 221 del Código Procesal Penal de 1991: “Todo medio de prueba,
para ser valorado, debe haber sido obtenido por un procedimiento
legítimo e incorporado al proceso conforme a ley".

Artículo 349 del Nuevo Código Procesal Penal señala que: “La acusación
fiscal, entre otros, debe contener los medios de prueba que ofrezca para
su actuación en la audiencia, del mismo modo lo pueden hacer los demás
sujetos procesales.

Pero será el juez de la Investigación Preparatoria aquel que admita o no


la prueba, en caso de que sí sea admitida esta deberá cumplir con los
requisitos de ser pertinente, conducente y útil. Al cumplirse la regulación
específica de la ley procesal penal en cada procedimiento se otorgará
mayor eficacia probatoria y garantía a las partes, todo esto dentro del
marco del debido proceso.

8. FUENTE DE PRUEBA

San Martín, manifiesta que: “Las fuentes de prueba son elementos


extraños y ajenos al proceso, que existen en la realidad con

30
independencia del mismo y que, por consiguiente, carecen de repercusión
jurídica procesal en tanto no se haya abierto un proceso” 36.

La fuente de prueba permite al juez dilucidar le verdad propia de los


hechos, y no la verdad de las partes. Las partes ofrecen su propia verdad
que esta puede coincidir o no con la verdad de los acontecimientos, el
hecho se da fuera de la esfera judicial, y si tiene relevancia jurídica penal
permite el inicio de un proceso.

(Ejecutoria Suprema n.° 19.2001.09. AV, de 30-12-09) “Surgen con


anterioridad al proceso por el curso natural de los acontecimientos.
Consisten en objetos o personas que, en cuanto pueden proporcionar
conocimientos para apreciar o para acreditar los hechos afirmados por
una parte procesal, pueden tener trascendencia en el proceso y constituir
el material de referencia para la decisión del juez. Cuando se trata de
personas, se le denomina órgano de prueba, que es el sujeto que porta
un elemento de prueba y lo transmite al proceso permitiendo la
incorporación de ese dato a la causa”37.

“La localización u obtención de las fuentes de prueba no es actividad


probatoria, es una tarea propiamente extraprocesal. Esa labor
corresponde a la investigación, es una tarea propiamente extraprocesal y,
por lo general, previa al proceso, pero regulada por la Ley procesal, como
garantía de su correcta y legal obtención, en tanto que la instrucción se
concibe como una actividad de recopilación de materiales a partir de los
cuales las partes formulan en el juicio oral sus pretensiones y
conclusiones acusadoras y defensivas, y las demostrarán ante el juez, de
modo que en la instrucción se produce una recogida de los diferentes
elementos que están llamados a ser fuentes de prueba”. 38

36
San Martín Castro, César. “Derecho Procesal Penal Lecciones”. Perú: Editorial INPECCP y
CENALES, 2020. Pág. 772.
37
Ejecutoria Suprema n.° 19.2001.09. AV, de 30-12-09
38
Ibidem

31
La fuente de prueba, definida por Rosas Yataco, Jorge es: “El hecho que,
conocido en el proceso penal a través de los medios de prueba, nos
conduce al hecho imputado que se quiere probar y que, en suma,
constituye el objeto de prueba. Así los medios probatorios como la
testimonial, pericial o documental, hacen conocer al juzgador los hechos
fuente, de manera que se va a lograr una convicción jurisdiccional sobre
dichos hechos, lo que le permitirá al juzgador decidir el caso y emitir el
fallo correspondiente”39.

“Por ejemplo, un testigo que también es órgano de prueba, puede ser una
buena fuente de prueba. Del mismo modo, la prueba documental es
fuente de prueba porque la información que contiene es idónea y
pertinente para el caso que se investiga”40.

Mixán Máss citado por Rosas Yataco, Jorge explica que: “La fuente de
prueba es el conocimiento, el significado originario, que se obtiene sobre
el objeto de prueba, a través del respectivo medio de prueba" y durante el
debate contradictorio, oral, público y continuado” 41.

“La actividad procesal probatoria se realizará siempre con sujeción a los


principios de constitucionalidad y de legalidad estricta, de respeto a los
derechos fundamentales y demás bienes jurídicos tutelados también
constitucionalmente y mediante cumplimiento de los correlativos deberes.
La fuente de prueba obtenida incurriendo en la denominada prueba
prohibida carece de validez, es excluida. La parte (o sujeto procesal) que

39
Rosas Yataco, Jorge “La Prueba En El Nuevo Proceso Penal”. Perú: Editorial Ediciones Legales
E.I.R.L, 2016. pág.44.
40
Ibidem
41
Mixán Máss citado por Rosas Yataco, Jorge. “La Prueba En El Nuevo Proceso Penal”. Perú:
Editorial Ediciones Legales E.I.R.L, 2016. pág.43.

32
ofrezca prueba para el juicio o presente prueba en juicio o pida oralización
de un medio de prueba, tiene el deber de destacar la fuente de prueba” 42.

9. NECESIDAD DE LA PRUEBA

En el Estado de Derecho Constitucional solo pueden ser objeto del


derecho penal conductas humanas. No pueden serlo pensamientos ni
sucesos de la naturaleza. Y esto parte según Villavicencio Terreros (2017)
de que “(…) el derecho penal de hecho o de acto sanciona conductas
humanas y no determinadas cualidades de las personas (derecho pena
del autor), pues la conducta humana es el punto de partida de toda
reacción penal y es el objeto al que se agregan características como
tipicidad, antijuridicidad y culpabilidad, que convierten la conducta
humana en delito.”43

Por tal razón Rosas Yataco (2016) señala que: “(…) toda sentencia penal
debe fundarse en prueba legal, regular y oportunamente allegada a la
actuación procesal que acredite la existencia veraz del acaecimiento
fáctico (la existencia) de la conducta punible en torno al cual se configura
la pretensión como objeto del proceso.” 44 Frente a una imputación de
hecho de la comisión de un delito a una persona, debe de investigarse,
bien para reafirmar lo dicho o bien para descartar dicha afirmación. Y para
concluir en cualquiera de estas aseveraciones, debemos fundar nuestra
decisión en el material probatorio que hayamos recopilado. Entonces, es
necesario haber indagado e incorporado los medios de prueba para
demostrar la inocencia o la culpabilidad del denunciado.

42
Mixán Máss citado por Rosas Yataco, Jorge. “La Prueba En El Nuevo Proceso Penal”. Perú:
Editorial Ediciones Legales E.I.R.L, 2016. pág.43-44.
43
VILLAVICENCIO TERREROS, Felipe. “Derecho Penal Básico”. Pontificia Universidad del Perú
Editorial. Lima-Perú. 2017. Pág. 55.
44
Uribe Álvarez, citado por ROSAS YATACO, Jorge. “La prueba en el nuevo proceso penal”.
Primera edición. Editorial legales. Lima-Perú, 2016. Pág.44.

33
“Esta dimensión de “necesidad de la prueba” requiere una regulación
específica tratándose del proceso penal. Esta especificidad del régimen
de la prueba penal obedece a la vigencia de una serie de principios,
relacionado con el carácter personalista del sistema penal en un Estado
de Derecho Constitucional; los principios de la presunción de la inocencia,
el indubio pro reo, la prohibición de tortura como medio de obtención de la
prueba, el derecho de no declarar en contra de uno mismo, a la
inviolabilidad del domicilio y la prohibición de registros privados. Estos
principios funcionan como criterios de legitimidad de la construcción de la
verdad en el proceso penal.” 45 Solo con fines didácticos explicaremos de
manera sucinta algunos de estos principios que el magistrado San Martín
Castro (2020) desarrolla, siendo estas:
a) Presunción de inocencia: Se trata de un derecho de garantía
procesal o jurisdiccional, de jerarquía constitucional, que asiste al
aunque se extiende a todas aquellos supuestos en que la decisión
judicial deba asentarse en la condición o conducta de las personas
y de cuya apreciación se derive un resultado sancionatorio para las
mismas o limitativo de sus derechos, en cuya virtud solo puede
declararse culpable a una persona si existe una actividad
probatoria o material probatorio suficiente, válido o legítimo y de
cargo, actuado conforme a las reglas y exigencias trazadas por la
Constitución y la Ley.

b) Indubio pro reo: este principio determina que si una vez realizadas
las pruebas y finalizado el juicio, el juez tuviese dudas sobre la
culpabilidad del acusado por no quedar demostrada la misma, este
al dictar sentencia deberá decidir a favor del acusado, siendo así
absolutoria la sentencia que dicte.”46

45
Ibidem
46
SAN MARTIN CASTRO, César. “Derecho Procesal Penal, Lecciones”. 2º ed. Instituto peruano de
Criminología y Ciencias penales Fondo Editorial. Lima-Perú. Pág. 155.

34
Así también el principio de necesidad de la prueba, conocido como el de
la prohibición para el juez de aplicar su conocimiento privado, para la
fijación del conocimiento factico de su decisión, constituye sin duda desde
el punto de vista ético, una incuestionable garantía para la imparcialidad
del juez pero, en el orden epistemológico, representa un primer gran
obstáculo para el óptimo y adecuado conocimiento de los hechos, ya que
obliga a los jueces a desechar su propia percepción directa, inmediata y
personal de los sucesos relevantes, o a separarse del juzgamiento de un
asunto que hayan conocido por sí mismo, para optar por un conocimiento
indirecto, mediato, a través de terceros, sobre una realidad de suyo
extremadamente compleja, cual es la conducta humana social,
intersubjetiva y, sobre todo, conflictiva, lo que impone efectuar algunas
precisiones, en el orden de la teoría del conocimiento, que subyace al
trabajo probatorio judicial y que no puede ser soslayado, ni abordado de
manera ingenuamente dogmática.

Ya Muñoz Sabaté (1997), también exponía que “generalmente suelen


haber dos tipos de impedimentos que dificultan el acceso de los
justiciables a la justicia, y que dejan sin resolver innumerables exigencias
de derecho. Un impedimento es de carácter económico y viene provocado
por el coste económico elevado y la prolongada duración de un proceso.
El otro, plenamente jurídico, es el problema de la prueba. Las partes se
encuentran a veces impotentes para demostrar el hecho concreto
determinante de la pretensión, y prefieren desistir antes de incurrir en
infructuoso gastos y pérdida de tiempo.” 47 Cuando en realidad los
procesos deben de ser céleres y efectivos, los cuales son características
propias de una justicia., como señala el Profesor San Martin Castro
(2020): “desde una óptica utilitaria es conveniente recordar que el modelo
legal de un buen régimen procesal estriba en que la justicia debe ser
rápida, económica y segura. La celeridad o rapidez, supone simplicidad
en los tramites, concentración de los actos procesales, limitación
47
MUÑOZ SABATÈ, Luis. Técnica Probatoria, Editorial Temis. Santa Fe de Bogotá-Colombia. 1997.
Pág. 15.

35
razonable de los recursos, la economía exige que ciertos actos produzcan
el máximo d resultado el máximo de resultado con el mínimo de
esfuerzo.”48

El Poder Judicial o sistema de administración de justicia es parte muy


importante de la institucionalidad política y jurídica del Estado, siendo su
nivel de autonomía, eficiencia y prestigio social un importante (y objetivo)
“termómetro” para medir el grado de desarrollo y solidez de las
instituciones democráticas alcanzadas en una sociedad. De allí que no
deba llamar a demasiada sorpresa que, en el Perú, el descrédito del
sistema judicial, por el anacronismo de su accionar operativo, la poca
confiabilidad de sus sentencias y su acusada falta de independencia, sea
el correlato histórico de procesos políticos caracterizados por el
autoritarismo o la injerencia de los gobiernos de turno, así como por la
incapacidad del órgano jurisdiccional para hacer prevalecer la supremacía
constitucional, su autonomía funcional y la vigencia del Estado de
Derecho.

HISTORIA DE LA PRUEBA

1. PRELIMINAR

Sembrado de espinas, empapado de sangre, y regado de lágrimas se nos


presenta el largo camino que las pruebas penales tuvieron que recorrer
en los diversos pueblos, siempre, como es bien sabido, en medio del
constante vaivén de las condiciones sociales, políticas y sobre todo

48
SAN MARTIN CASTRO, César. “Derecho Procesal Penal, Lecciones”. 2º ed. Instituto peruano de
Criminología y Ciencias penales Fondo Editorial. Lima-Perú. Pág.51.

36
psicológicas de las naciones. Considerada en su más íntimo significado,
la evolución externa de los hechos sigue y refleja la evolución interna de
los sentimientos y las concepciones ideológicas que sucesivamente van
prevaleciendo.”49

Reuniendo idealmente los momentos generales sintomáticos que nos


pueden suministrar los testimonios históricos, las formas arcaicas de las
pruebas se nos presentan impregnadas de superstición mística o
religiosa. Los pueblos primitivos, rudos e inexpertos, desconocedores de
las causas de los fenómenos naturales y de los hechos humanos, no
podían explicarse el terrible problema del delito, ni vencer las dificultades
de comprobar las causas y de descubrir el significado de la delincuencia
ni a los reos, problemas y dificultades que, si son grandes en nuestros
días, en esos tiempos remotísimos debían aparecer como insuperables.
“(…) Por lo tanto, se inclinaban o, mejor, se veían llevados a buscar fuera
del hombre, en una potencia suprema, alguna solución, en medio de
extraordinario estupor. De ahí que solo en la divinidad nuestros lejanos
progenitores, impulsados por su fe, podían encontrar socorro y ayuda.
Ciertamente no se dirigían a la divinidad porque consideraban el delito
como una ofensa contra ella, sino porque el candor de su fresca
imaginación los llevaba a pensar que las potestades divinas podían
descubrirlo todo e intervenir en la contienda para revelar la verdad y
proteger al inocente. Así surgieron los juicios de dios, las ordalías y el
juramento del acusado, expedientes empleados con suma frecuencia y
con gran crédito entre los pueblos jóvenes.” 50

2. EVOLUCIÓN

49
FREDAS Pietro, citado por ROSAS YATACO, Jorge. “La prueba en el nuevo proceso penal”.
Primera edición. Editorial legales. Lima-Perú, 2016. Pág.47.
50
ROSAS YATACO, Jorge. “La prueba en el nuevo proceso penal”. Primera edición. Editorial
legales. Lima-Perú, 2016. Pág.47.

37
A decir de Cafferata Mores (2008), “es posible establecer dos momentos
netamente definidos. En el primero se ponía a cargo de la divinidad el
señalamiento del culpable, y los tribunales se limitaban a practicar los
actos necesarios para que aquella se manifestara. En el segundo se
impuso a los jueces el deber de formarse por sí mismos el
convencimiento sobre la culpabilidad del acusado, mediante la utilización
de su capacidad intelectual: en este momento en que apareció la idea a
de la prueba.”51

“Todo el tema de la prueba se halla íntimamente vinculado con el modelo


de proceso penal que se acepte. Si está influido por el paradigma
inquisitivo, la prueba tiene una importancia relativa, pues como el modelo
político autoritario que los sustenta presupone la culpabilidad del
imputado por la apariencia de culpabilidad que funda la imputación o que
esta ocasiona; el proceso se legitima como un castigo en sí mismo
(especialmente por medio de la estigmatización que genera o de la
imposición desnaturalizadoramente punitiva de la prisión preventiva),
mientras procura, sin verdadero interés, reconfirmar una culpabilidad que
por ser presupuesta va siendo así precastigada. Si el modelo en cambio,
es como el que estatuye nuestro sistema constitucional, dado que es
parte de un estado e inocencia, la prueba cobra relevancia, porque es la
única forma legalmente autorizada para destruirlo. No se admite otro
modo de acreditar la culpabilidad.”52

Culmina, que quizás por las influencias de ambos paradigmas, la prueba


penal en estos días puede caracterizarse por el uso generalizado del
testimonio (que sigue casi huérfano de criterios técnicos para apreciar su
sinceridad) y de la prueba indiciaria (y su abuso, en especial en procesos
de gran repercusión pública), la utilización de novedades técnicas y

51
CAFFERETA NORES, José. “La prueba en el proceso penal con especial referencia a los Códigos
Procesales Penales de la Nación y de la provincia de Córdoba. Editorial Lexis Nexis. Buenos Aires-
Argentina. 2008. Pág. 4.
52
CAFFERETA NORES, José.op. cit. Pág.5

38
científicas, generalmente captadas por la prueba pericial, al auge de los
llamados “medios extraordinarios de prueba”, sobre todo (pero no solo)
para casos de criminalidad organizada y muchas veces a costa de reglas
del Estado de Derecho, y la consolidación del uso de la sana critica
racional para la valoración de sus resultados.

“Cada vez que se plantea una cuestión histórica, la respuesta es casi la


misma, y tiene el mismo sentido, tanto sea parte la historia en general, la
del derecho, la del derecho procesal en particular, o en nuestro caso la
historia de las pruebas. La utilidad más allá de contribuir a formar el
acervo cultural de la humanidad, de predecir o propiciar políticas de los
estados, sirve para que las personas se conozcan mejor mediante sus
respectivos pasados históricos. Como el objetivo de la humanidad es
conocerse mejor para llegar a formar una familia, no podemos pretender
conocer a un ser humano solo por lo que vemos de el en un momento
determinado; lo importante es saber cómo ha llegado a ser lo que es. Y lo
que sucede con los individuos ocurre también con las naciones,
civilizaciones y religiones y, para comprenderla en su más íntimo
significado, debemos de compenetrarnos de su pasado histórico, al igual
que de su presente.”53

La prueba penal ha evolucionado con la civilización de los países,


acomodándose a los cambios políticos vigentes de los estados. Podemos
citar dos momentos claramente definidos en su evolución: el primero
cuando se ponía a cargo de la divinidad el señalamiento de culpabilidad
de una persona, en este caso los tribunales de justicia se limitaban a
practicar actos para que la divinidad se manifestara. El segundo cuando
se les impuso a los jueces el deber de formarse por sí mismos el
convencimiento sobre la culpabilidad del acusado, mediante la utilización
de su capacidad intelectual, aquí fue cuando apareció la prueba penal. En
53
Falcon, Enrique, citado por citado por ROSAS YATACO, Jorge. “La prueba en el nuevo proceso
penal”. Primera edición. Editorial legales. Lima-Perú, 2016. Pág.49.

39
la época actual se debe de tener presente que estamos utilizando
novedades técnicas y científicas especialmente aplicadas en la prueba
pericial para efecto de descubrir y valorar datos que servirán de prueba,
tomando en cuenta también las reglas de la sana critica en la apreciación
de los resultados por parte del juzgador, todo esto dentro de un marco de
respeto por la persona de imputado o acusado y del reconocimiento de
los derechos constitucionales de todas las partes procesales.

“En el antiguo sistema inquisitivo, la prueba tenía una importancia relativa,


pues el modelo autoritario presuponía la culpabilidad del imputado,
sistema mediante el cual se trataba de reconfirmar una culpabilidad que
por ser presupuesta iba siendo precastigada. En el sistema acusatorio
oral que se caracteriza por ser eminentemente constitucional, se parte del
estado de inocencia del imputado, es aquí donde la prueba ha adquirido
relevancia grande, ya que es la única forma legalmente autorizada para
acreditar la culpabilidad o demostrar inocencia de una persona. La prueba
es el medio más confiable para descubrir la verdad real y la mayor
garantía contra la arbitrariedad de las decisiones judiciales, es el medio
más seguro de lograr la reconstrucción de los hechos de modo
comparable y demostrable en conformidad con el sistema jurídico vigente;
en las resoluciones judiciales solo se podrá admitir como ocurridos los
hechos o circunstancias que hayan sido acreditados mediante pruebas
objetivas, lo cual impide que dichas pruebas se funden en elementos
puramente subjetivos, en definitiva son las pruebas las que condenan
mas no los jueces, esta es la garantía frente a la arbitrariedad punitiva, la
prueba va impactando en la conciencia del juez hasta llevarle a una
convicción que será la base de su dictamen.” 54

54
ROSAS YATACO, Jorge. “La prueba en el nuevo proceso penal”. Primera edición. Editorial
legales. Lima-Perú, 2016. Pág.50.

40
CONCLUSIÓN

Preliminar: Es así que llegamos a la conclusión de que, para el Derecho


Penal, la prueba no es más que el factor básico sobre el cual gravita todo
el procedimiento, pues sin esta, no pasaría de ser un conocimiento teórico
sin mayor relevancia práctica. Es así que, de le prueba dependerá el
nacimiento del proceso, de su desarrollo y su realización.

41
Es necesario que se dé una correcta actividad probatorio, ya que de esto
depende su utilización al momento de sentenciar, pues se toma en cuenta
las pruebas actuadas por ambas partes y el juez, con arreglo a las
normas, tomara su decisión y lo plasmara en la sentencia.

El error dentro de la actividad probatoria no es un tema de poca


importancia, pues es algo recurrente y que ninguna persona es ajena a
esta amenaza, es por eso que, es el deber de toda persona que se
encuentra inmersa en un proceso (civil, penal, laboral, etc.) el de reducir
al mínimo este margen de error, y esto obviamente es mediante la
aportación de medios probatorios.
La prueba: parafraseando lo que señala Gómez de Liaño, la prueba es
La prueba en el proceso penal está constituida por aquella actividad que
han de desarrollar las partes acusadoras en colaboración con el Tribunal
al objeto de desvirtuar la presunción de inocencia, derecho constitucional
que en el momento presente es punto obligado de partida de toda
consideración probatoria en el proceso penal que se inicia con la verdad
provisional o interina de que el denunciado o inculpado es inocente.
La noción de la prueba: los operadores de las diversas disciplinas
científicas tienen que probar sus tesis o hipótesis. Probar en este sentido
es convencerse y convencer a otros de la existencia o de la verdad de
algo. Probar es, pues, producir un estado de certidumbre en la mente de
una o varias personas sobre la existencia o inexistencia de un hecho, o de
la verdad o falsedad de una proposición. Puede decirse, también, que
probar es evidenciar algo, o sea, lograr que nuestra mente lo perciba con
la misma claridad con que los ojos ven las cosas materiales.
Elemento de la prueba: El elemento de prueba en síntesis es aquel dato
objetivo que se incorpora legalmente al proceso, capaz de producir un
conocimiento cierto y probable de extremos de imputación y contiene las
siguientes características: objetividad, legalidad, relevancia, pertinencia.
Medio de prueba: según Michelle Taruffo, el medio de prueba es
Cualquier elemento que pueda ser usado para establecer la verdad

42
acerca de los hechos de la causa. La idea básica es que un litigio surge
de ciertos hechos y se basa en ellos, que tales hechos so disputados por
las partes, que esa disputa tiene que ser resuelta por el tribunal y que la
solución de la “controversia sobre los hechos” se alza cuando el tribunal
establece la verdad sobre los hechos motivo de la disputa.
Necesidad de la prueba: Esta dimensión de “necesidad de la prueba”
requiere una regulación específica tratándose del proceso penal. Esta
especificidad del régimen de la prueba penal obedece a la vigencia de
una serie de principios, relacionado con el carácter personalista del
sistema penal en un Estado de Derecho Constitucional; los principios de
la presunción de la inocencia, el indubio pro reo, la prohibición de tortura
como medio de obtención de la prueba, el derecho de no declarar en
contra de uno mismo, a la inviolabilidad del domicilio y la prohibición de
registros privados. Estos principios funcionan como criterios de legitimidad
de la construcción de la verdad en el proceso penal.”

BIBLIOGRAFÍA

 CAFFERETA NORES, José. “La prueba en el proceso penal con


especial referencia a los Códigos Procesales Penales de la Nación
y de la provincia de Córdoba. Editorial Lexis Nexis. Buenos Aires-
Argentina. 2008.

43
 ROSAS YATACO, Jorge. “La prueba en el nuevo proceso penal”. Primera edición.
Editorial legales. Lima-Perú, 2016

 MUÑOZ SABATÈ, Luis. Técnica Probatoria, Editorial Temis. Santa Fe de Bogotá-


Colombia. 1997

 SAN MARTIN CASTRO, César. “Derecho Procesal Penal, Lecciones”. 2º ed.


Instituto peruano de Criminología y Ciencias penales Fondo Editorial. Lima-Perú.

 VILLAVICENCIO TERREROS, Felipe. “Derecho Penal Básico”. Pontificia


Universidad del Perú Editorial. Lima-Perú. 2017

44

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