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Corposalud cuenta con programas ligados al desarrollo de la salud sexual.

 Redacción @Rafucho33  5 septiembre, 2016  Salud  No hay comentarios

(Táchira/Venezuela).-Con motivo del día mundial de la salud sexual, la Corporación de Salud


del estado Tàchira dio a conocer que tiene varios programas ligados al desarrollo de la salud
sexual como: salud sexual y reproductiva, salud de familia, el programa de niño, niña y
adolescente y el programa de ITS Sida, cada uno de ellos tiene el deber de formar a todo el
personal de salud en todos los niveles para que a su vez sepan como abordar los problemas de
salud sexual en las comunidades.

La información la dio a conocer Alfonso Amaya, psicólogo y sexólogo adscrito al servicio de


psicología y sexología del programa de salud a familia, quien expresó que el personal de todos
los centros médicos tienen la formación suficiente para brindar conocimientos sobre
fenómenos de sexualidad a los habitantes de las comunidades.

Manifestó además, que “la salud sexual es el bienestar de una persona con respecto a todos
los fenómenos de la sexualidad y que tiene que ver con el desarrollo del sexo, es decir si eres
mujer, hombre o hermafrodita, lo importante es que todos sepan que es un tema prioritario y
estratégico para la nación”.

Aseguró que “la Corporación de Salud viene abordando el tema de la salud de manera
interesante involucrando áreas de actualización y transformación con respecto a salud sexual y
reproductiva, y bajo esta iniciativa la celebración del día mundial es un momento propicio para
evaluar lo que ha sido débil y fuerte a lo largo de los años en Venezuela con respecto a salud
sexual y los nuevos retos y desafíos que tenemos que enfrentar en el futuro”, dijo Amaya.

La intención es que el personal de salud incluidos médicos, enfermeras, trabajadores sociales y


demás profesionales mantengan actualizados los protocolos de atención que se necesitan
cuando se le va a brindar asesoría a la comunidad.

Según lo expresado por Amaya, las persona pueden dirigirse a cualquier centro de salud y decir
su inquietud ya que todos los servicios están en capacidad de brindar esa asesoría porque es
obligatorio según la ley y por eso es importante que toda la comunidad sepa esa información y
la busque, ya que la salud sexual abarca una serie de temas, que en este momento son vitales.

Manifestó además, “casi todas las enfermedades que causan muerte en Venezuela están
ligadas a la salud sexual y eso no se ha tomado con absoluta seriedad por todos los colectivos
de nuestro país”.
Existen temas importantes de la salud sexual, temas básicos como las ITS y dentro de ellas uno
de los temas más importantes es el Zika porque es una enfermedad de transmisión sexual que
tiene implicaciones en la salud reproductiva, mas allá de la microcefalia el Zika produce una
serie de anormalidades fetales que afectan toda la vida sexual de las personas, su vida mental
y emocional.

Finalmente informó, que en este momento es prioritario que todo el sistema de salud, la
colectividad y las instituciones, reflexionen sobre los problemas y tomen decisiones sobre el
futuro.

Prensa/Corposalud.

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https://www.siicsalud.com/acise_viaje/ensiicas-profundo.php?id=158982

Red Científica Iberoamericana

EDUCACIÓN SEXUAL Y EMBARAZO ADOLESCENTE EN EL ESTADO TÁCHIRA, VENEZUELA

Marisela Vivas-García1,Rina Mazuera-Arias2,María Antonia Cuberos3 y Neida Albornoz-Arias4

1Docente, Investigadora, Departamento de Ciencias Sociales y Humanas, Universidad Simón


Bolívar, Cúcuta, Colombia

2, Decana de Investigación y Posgrado, Universidad Católica del Táchira, San Cristóbal,


Venezuela

3, Investigadora, Facultad de Administración y Negocios, Universidad Simón Bolívar, Cúcuta,


Colombia

4Docente, Investigadora, Facultad de Administración y Negocios, Universidad Simón Bolívar,


Cúcuta, Colombia

Cúcuta, Colombia (SIIC)

La educación sexual se relaciona directamente con la prevención del embarazo adolescente,


aunque su implementación no ha demostrado ser efectiva en la disminución del mismo, las
cifras así lo confirman. Debe ser visualizada y trabajada en el aula y en todos los escenarios
educativos, como un eje transversal, con contenidos adecuados y métodos actualizados que
provea de información relevante para la actuación positiva, autónoma y responsable de los
adolescentes.
Ante los elevados porcentajes de embarazo adolescente en América Latina en general y en
Venezuela en particular, la mirada está puesta en la educación sexual como centro neurálgico
de la problemática en cuestión. La incidencia diferencial de la edad del inicio de las relaciones
sexuales y del primer embarazo son revelaciones complejas que van más allá de lo
estrictamente demográfico y que se relacionan con las condiciones de ejercicio de la libertad
de la mujer, por ende, con la educación sexual recibida en la escuela y en la familia.1

La educación sexual es un tema controversial a nivel mundial por su propia

naturaleza, representa un gran desafío para las instituciones educativas, pues

debe implementarse de manera integral, como un eje transversal, mediante el desarrollo de


contenidos vinculados con el ejercicio responsable de la sexualidad, los derechos y la salud
reproductiva, la equidad de género, la prevención de la violencia y la infecciones de
transmisión sexual, con base en un marco de derechos humanos.2

El estado Táchira, contexto de este estudio, tiene una tasa promedio de fecundidad
adolescente de 96.8, una edad promedio de inicio de actividad sexual de entre 14 y 15 años
(15.32%), y un primer embarazo entre los 15 y 16 años de edad (5.11%), lo cual indica que los
niños deben adquirir las competencias relacionadas con la educación sexual, antes de cumplir
los 13 años de edad. El 21.28%, manifiesta no haber recibido educación sexual en la escuela o
que la recibió de manera inadecuada el 22.98%.

Estos porcentajes se reflejan en las tasas de embarazo adolescente, lo cual revela la necesidad
de que las instituciones educativas se ocupen de la educación sexual de manera integral,
incorporando a los contenidos programáticos las diversas dimensiones implícitas en la
sexualidad, la subjetividad (valores, emociones, actitudes, sentimientos, habilidades y
destrezas), el cuidado de la salud y de los derechos (a la vida, libertad de elección, morales y
culturales y a la información).3

En Venezuela, el Currículo Nacional Bolivariano (CNB) (currículo en proceso desde 2007),4


determina que es responsabilidad del Estado y de sus entes activos (maestros y docentes), la
formación de un ser humano integral, social, solidario y con una sexualidad responsable. Y el
artículo 50 de la ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente5 establece la
obligatoriedad de la educación sexual al enfatizar que los niños y adolescentes deben ser
informados de acuerdo con su desarrollo sobre salud sexual y reproductiva para una conducta
sexual, sana, voluntaria y sin riesgos.

No obstante, la educación sexual está incluida sólo en los programas de educación media
general, con contenidos relacionados con los órganos reproductores, caracteres sexuales
primarios, secundarios, métodos anticonceptivos y fecundación.4,6 Los docentes ven una gran
responsabilidad en la orientación sexual y consideran que la obligación es de los padres.7 En el
CNB no se proponen estrategias pedagógicas/metodológicas a los docentes para el desarrollo
de los contenidos, razón por la cual algunos docentes terminan enseñando la educación sexual
desde sus propios paradigmas o esquemas mentales, corriendo el riesgo de que identifiquen la
sexualidad como sinónimo de sexo y de genitalidad; adolescencia-sexualidad-riesgos-peligros y
de que la educación sexual incita a las relaciones sexuales tempranas.3,8,9

La tasa de embarazo adolescente en Venezuela durante el período 2006 a 2015 fue, por cada
1000 niñas entre 15 a 19 años, de 95.34 sobre el promedio de la tasa en América Latina y el
Caribe, que es de 64.10 En madres menores de 15 años, el número de nacimientos vivos
registrados fue 7452, y entre las de 15 a 19 años es 136 039;11 para 2013 se reportó un
22.84% de embarazos adolescentes, lo que indica que se incrementaron.12

Mediante un enfoque cuantitativo y un diseño de campo transversal, se aplicó una encuesta


estructurada a 235 adolescentes, residentes en el estado Táchira, Venezuela, con edades entre
17 y 20 años, con una desviación estándar de 1.56 (coeficiente de variación [CV] = 9.05%),
mínimo de 11 y máximo de 19 años. Respecto de la edad del primer embarazo, los valores
oscilaron desde 12 hasta 19, con 16.16 años de media y variabilidad de 1.61 (CV = 9.93%). Las
jóvenes analizadas han tenido en promedio 1.14 partos, con una desviación típica de 0.44 (CV
= 38.51%) y cifras mínimas y máximas de 1 y 4, respectivamente.

Se comprueba una alta relación positiva entre la edad de la primera relación sexual y el nivel
educativo de las adolescentes, el valor del estadístico de contraste chi cuadrado (4) = 14.632; p
= 0.006) y la medida de asociación gamma = 0.525; p = 0.003 así lo determinan. El 86.81%
alcanzó el nivel de secundaria (n = 204) y de primaria el 5.11% (n = 12), se enfatiza que un
62.55% no usó preservativo en la primera relación sexual, probablemente por el
desconocimiento de su uso, lo que conlleva a embarazos no deseados.

El nivel educativo de las adolescentes1 reduce el inicio de la actividad sexual y el primer


embarazo; así, antes de los 20 años, 6/10 adolescentes que no asistieron a la escuela han
tenido ya su primer hijo, mientras que las que alcanzaron por lo menos el nivel de primaria la
proporción se reduce a 1/10.

La educación sexual en la escuela no es considerada de calidad cuando la información que


reciben los niños y adolescentes está fundamentada en enfoques reduccionistas acerca de la
sexualidad humana como: el moralista que transmite formas de comportamiento, costumbres
sociales, reglas y juicios de valor, el obstáculo está en el irrespeto a los derechos individuales
de los adolescentes;6 el biológico o funcional fundamentado en la anatomía y fisiología del
cuerpo, proceso de fecundación, embarazo y parto,13,14 y el preventivo o patologista, que
alerta sobre los riesgos y consecuencias negativas del ejercicio de la sexualidad, pero el énfasis
está solo en las consecuencias de la conducta y no en el desarrollo de competencias para la
autonomía.15,16

El desarrollo de los programas de educación sexual que utilizan como método exclusivo de
enseñanza la abstinencia, niega el derecho de los adolescentes a disponer de información
precisa para poder tomar decisiones informadas y responsables;15,17 este tipo de programas
limitativos promueven formas discriminatorias, pues se basan en la heteronormatividad,15
negando intencionalmente a una gran población con diversidad sexual. En este sentido, los
programas de educación sexual son incipientes.

Las causas que conducen al embarazo adolescente en Venezuela, en términos generales, están
relacionadas con una deficiente educación sexual, con los contenidos de los programas
(obsoletos) a desarrollar a nivel de educación media general, que no cubren las expectativas ni
las necesidades de información que requieren los adolescentes de la sociedad globalizada en la
que viven. En el Subsistema de Educación Primaria Bolivariana no se contempla la educación
sexual en ninguna de sus áreas. Se necesita la actualización del personal docente,
implementación de buenas estrategias metodológicas y la adecuación de los programas que
provean a los adolescentes de herramientas para actuar positiva y autónomamente frente a
los derechos sobre sexualidad y reproducción, así como en el uso efectivo de métodos
anticonceptivos para prevenir, tanto el embarazo como las infecciones de transmisión sexual.

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https://www.laopinion.com.co/frontera/hospital-central-de-san-cristobal-se-queda-sin-
enfermeros-187016#OP

El impacto de la crisis migratoria y laboral se hace sentir en los pasillos del Hospital Central de
San Cristóbal, donde cada vez es más reducida la cantidad de personal de salud calificado para
atender las más de 560 camas con que cuenta esta instalación hospitalaria, que recibe
pacientes no sólo del estado Táchira, sino también derivados de otros estados cercanos como
Apure y Barinas.

Angelly García, directiva del Colegio de Enfermeras del Táchira, manifestó que la situación del
país ha repercutido en una desmejora considerable de las condiciones laborales, por lo que el
poco personal de enfermería que aún permanece en sus puestos de trabajo, requiere una
atención integral por parte del Estado, que incluya desde mejoras salariales y seguridad social,
hasta dotación de materiales médico quirúrgicos, medicamentos e insumos que les permitan
ofrecer una atención de calidad a los pacientes.

De acuerdo con lo señalado por algunos pacientes, en ocasiones el piso 8 destinado al área de
maternidad, donde llegan las madres, solo cuenta con dos estudiantes de enfermería, por
cuanto las únicas tres graduadas están destinadas a las salas de parto, que son áreas más
críticas.

“En emergencia de adultos solo hay dos enfermeros y no tenemos personal en las áreas de
hospitalización para que cumplan tratamiento”, dijo García al tiempo de acotar que los centros
de salud pública están sin personal de enfermería “porque sencillamente abandonan el país
buscando mejores condiciones de vida”, y las renuncias no paran de llegar.
Damar Franco es enfermera del área de traumatología y relata que no es inusual tener a su
cargo hasta 60 personas, cuando según las normas debe corresponder una enfermera por cada
cuatro pacientes.

“Venimos día a día porque tenemos vocación y fe de que la situación va a cambiar... La


mayoría sobrevivimos porque nos dedicamos a otras cosas por fuera, cuidar pacientes, el
comercio”. Relató que vende maquillaje para complementar sus ingresos.

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https://efectococuyo.com/salud/la-vida-de-los-pacientes-en-hospitales-del-tachira-queda-a-
merced-de-los-apagones-

En los hospitales y ambulatorios del Táchira no solo deben lidiar con el déficit de personal
especializado -en todas sus áreas- además de la escasez de alimentos y medicinas. Ahora
suman, como dificultades para brindar atención de calidad, la paralización técnica gracias a los
equipos dañados por causa de los largas y continuas fallas de electricidad, haciendo realidad la
peor pesadilla de los médicos: que salvar la vida de los pacientes ya no dependa
principalmente de sus habilidades profesionales.

La directora del distrito sanitario nro. 2, Katiuska Medina, explicó que una batería de 1100
amperios que alimenta la planta eléctrica del Hospital Padre Justo de Rubio -municipio Junín-
explotó tras permanecer encendida más del tiempo que soportaba; una segunda batería de
700 amperios tampoco superó mantenerse operativa durante 18 horas continuas e hizo que la
planta eléctrica dejara de funcionar.

Por esta situación ya se han registrado consecuencias fatales, como el fallecimiento de un


bebé de cuatro meses de edad, quien llegó al nosocomio con problemas respiratorios y los
médicos no pudieron realizarle los procedimientos indicados en este tipo de afecciones por
falta de electricidad.

Los galenos del hospital de Rubio tampoco pudieron brindar atención adecuada a un paciente
que presentaba un paro cardíaco. Narraron que las fallas de suministro de energía son
consecutivas y muy perjudiciales, pues hasta han tenido que “alumbrarse” con los celulares
durante la atención de partos, un episodio que que se repite en otros ambulatorios de la
región.

La planta eléctrica del hospital de Rubio está fuera de servicio


El Hospital Central de San Cristóbal se ha visto afectado de manera directa ante los apagones
repentinos, declaró Renny Cárdenas, director del referido centro asistencial, en virtud que los
aparatos electrónicos no tienen protectores de voltaje. El pasado 22 de febrero, el principal
centro de salud de la capital tachirense pasó 17 horas sin energía eléctrica, lo que agravó la
preocupación de las autoridades regionales por lo que implicaría que podría dejar un nuevo
apagón de tan extendida duración.

“Tenemos el Atlascopco, el equipo que nos surte de aire comprimido en todo el Hospital, pero
llega un momento en que la batería no logra cargarse. El equipo de Radiología se ha visto
afectado porque no llega el amperaje ideal para prender los equipos. Los ascensores se paran”,
comunicó, además de señalar que obtener el gasoil para mantener encendida por muchas
horas la planta es un trámite “complicado“.

Las plantas eléctricas de los hospitales están diseñadas para arrancar automáticamente, pero
con cada apagón se altera el interruptor de encendido y hay que mantener un trabajador del
limitado recurso humano disponible dedicado a manipular la planta, justo en momentos que
se registra un déficit del personal, expuso el director del Hospital Central.

“Todos los días tenemos un problema diferente, no puede ser que solvente en uno o dos
meses cuando tenemos que atender al paciente hoy. El personal que viene aquí, no lo
hacemos por necesidad sino por vocación, el solo hecho de llegar a trabajar es muy difícil”,
comentó el galeno.

“Hace 15 días funcionaba el sistema de rayos X, pero se dañó por los constantes apagones”,
comentó a Efecto Cocuyo Belén Contreras, de 53 años de edad, quien tiene a su hijo
hospitalizado en el piso 10 del principal centro de salud del Táchira.

Los pasantes de medicina que cumplen con su preparación profesional en el nosocomio


sancristobalense dijeron que pese a que existe la planta que puede suplir algunas de las
necesidades de la demanda eléctrica, hay áreas que no alcanza a cubrir.

“Los que trabajamos aquí nos vemos afectados con los racionamientos eléctricos, pero no solo
es el hospital. Muchos de nosotros salimos de nuestras casas sin electricidad y cuando
llegamos, aún no hay luz. Nos tenemos que enfrentar a preparar la comida, estudiar y separar
los tiempos (según el suministro eléctrico), lo que dificulta todas las tareas diarias”, expresó el
pasante de medicina Gabriel Duarte, de 24 años de edad, durante una protesta efectuada este
jueves 22 de marzo en la avenida Lucio Oquendo de San Cristóbal, frente al Hospital Central,
donde el personal obrero, médicos y enfermeros del centro de salud expusieron la crisis que
afrontan ante un “plan de administración de cargas” que no perdona a los enfermos

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