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CAPÍTULO 14 INCENDIOS Y EXPLOSIONES

Los incendios y explosiones en minas subterráneas son eventos que, dependiendo de su


magnitud, pueden ser catastróficos resultando en pérdida de vidas humanas y daños materiales
considerables. En los Estados Unidos se aplica el término “desastre” cuando cualquier
accidente resulta en la pérdida de cinco o más vidas.

En el caso de incendios, por lo general, los humos tóxicos producidos son el mayor peligro y
son la causa más común de las muertes, sobre todo por envenenamiento por monóxido de
carbono. El peligro de los humos se complica cuando las corrientes de ventilación los esparcen
a través de la mina. De ahí la importancia de conocer las rutas que sigue el aire en la mina y lo
útil que es conducir simulacros de incendio controlados, para conocer el comportamiento del
sistema de ventilación bajo condiciones reales. También se puede predecir el comportamiento
utilizando alguno de los varios programas disponibles de computadora para simular un incendio
en la mina. Por supuesto, es más conveniente conducir un simulacro en condiciones reales.

 En las minas, ya sea metálicas o de carbón, pero sobre todo en las de carbón si hay
acumulación de gas inflamable o de polvo explosivo hasta alcanzar su rango explosivo,
puede presentarse una explosión si el gas o el polvo son encendidos por una chispa o
una flama descubierta. Después de la explosión inicial pueden presentarse explosiones
secundarias al entrar en suspensión polvo de carbón, o que resulten gases inflamables
de la explosión inicial.

14.1 Triángulo de fuego

Tres elementos indispensables tienen que concurrir para que haya un fuego o incendio. Estos
elementos forman el llamado “triángulo de fuego” y son:

 Combustible

 Oxígeno

 Fuente de calor

Si falta cualquiera de estos elementos no se enciende un fuego, o también, si a un fuego se le


retira el oxígeno o el combustible se extingue el fuego.

14.2 Combustible

En las minas subterráneas metálicas, no metálicas y de carbón encontramos productos y


materiales que son combustibles como: diesel, aceites, grasas, madera, llantas, bandas
transportadoras, aislamiento de cables eléctricos y de motores, tuberías de plástico, mexamón
(ANFO), basura, etc.; además el carbón mineral en las minas de carbón y minerales sulfuros en
las minas metálicas.

En los asientos de algunos equipos se usan plásticos que al quemarse pueden generar fosgeno.
No obstante, en un incendio la causa más común de muerte es envenenamiento con monóxido
de carbono. En Chile en 1945, en el invierno del hemisferio sur, en la mina de la compañía
Braden Copper se encendió un recipiente de 5 galones que estaban calentando en la orilla de
una fragua de un taller de reparación de carros situado en la entrada de un túnel de la mina. Al
fondo del taller había un tapón de madera con puerta de acceso a la mina, el incendio se
extendió y quemó el tapón y puerta, los humos y grandes cantidades de monóxido de carbono,
mataron 354 hombres. Este incendio es probablemente el peor desastre en el mundo por
incendio en una mina metálica.

Los materiales utilizados en el hule de las bandas modernas se someten a pruebas de


propagación de fuego. En el caso de que la banda se agarre fuego y que remueva la fuente de la
ignición, el fuego no debe propagarse y si lo llega a hacer es lentamente. Sin embargo debe
señalarse que el material de la banda si es calentado puede producir humos peligrosos. Una
velocidad relativa de 1.5 m/s (300 pies/min) entre la banda y la corriente de aire puede tener
consecuencias muy serias.

14.3 Fuentes de calor

El otro elemento indispensable para que ocurra un incendio es una fuente de calor que pueda
encender el combustible en presencia de oxígeno. La energía eléctrica es la causa de buena
parte de los incendios. Las operaciones de corte y soldadura son otra fuente. En las minas
metálicas los fumadores son otra fuente. En las minas de carbón y minas metálicas con
minerales de sulfuros la combustión espontánea es otra fuente de calor.

En los siguientes lugares hay más probabilidades de que se presente un incendio:

 Gas metano de los estratos

 Equipo diesel

 Talleres de mantenimiento diesel, mecánico y áreas de corte y soldadura

 Estaciones de cargado de diesel

 Sistemas de bandas transportadoras

 Subestaciones eléctricas, equipo y cables eléctricos

 Polvorines de mexamón

 Rezaga de carbón o de minerales de sulfuros apilada

Las estadísticas indican que el 35 % de todos los incendios en las minas se deben a fuentes
eléctricas, el 18 % a actividades de corte y soldadura, el 12 % a combustión espontánea y el
16 % se enlista como debido a causas desconocidas; sin embargo se especula que buena parte
de éstas últimas se deben a combustión espontánea. Si tal especulación resultara ser cierta se
cree que los incendios debidos a combustión espontánea sería alrededor de un 25 % de todos
los incendios.

En las minas de carbón la causa principal de la ignición del metano en las frentes de trabajo son
las chispas debido a la fricción de las picas de corte de los mineros continuos o de las cortadoras
en las frentes largas.

14.3.1 Combustión espontánea

En términos generales la posibilidad de que ocurra un episodio de combustión espontánea en


primer término es mayor en minas de carbón, y en segundo término en minas metálicas que
tengan minerales de sulfuros, y de éstas, aquellas que contengan: pirrotita, pirita, marcasita,
arsenopirita, esfalerita, galena y calcosita enlistadas en orden decreciente de reactividad.

La combustión espontánea de un mineral es un proceso de auto-oxidación que resulta en un


aumento de temperatura, sin que medie una adición externa de calor. Cuando el material se
autocalienta hasta llegar a su temperatura de ignición resulta en una combustión espontánea.
Para que se dé la combustión se necesita que haya combustible, suficiente oxígeno y humedad y
que la ventilación existente no disipe lo suficientemente el calor que se está produciendo.

En las áreas de la mina de mayor viabilidad para que haya una combustión espontánea, hay
combustibles con baja temperatura de ignición como lo son productos de madera, diesel,
mexamón y azufre elemental; estos materiales bien pueden ser el eslabón entre el proceso de
oxidación y la combustión.

La ventilación y los cambios de ventilación son factores en la combustión espontánea. Por


ejemplo, si hay suficiente aire de ventilación, el calor generado en el proceso de auto-oxidación
va a ser disipado por los flujos de aire y no llega a producirse la combustión espontánea; por
otra parte, si es muy poco el aire disponible no habrá suficiente oxígeno y se interrumpirá el
proceso de oxidación.

En las minas de carbón las caras libres de carbón expuestas en su explotación quedan sujetas a
la oxidación por el oxígeno del aire. El proceso de oxidación es exotérmico, el calor generado
se puede acumular en el carbón resultando en un auto-calentamiento y combustión espontánea.

El carbón es intrínsecamente reactivo lo cual es un factor de mucho peso en la combustión


espontánea. Por su importancia y peligrosidad se han desarrollado relaciones, por medio de
experimentos de laboratorio, entre la combustión espontánea del carbón, la razón de generación
de monóxido de carbono, la razón de absorción del oxígeno, el contenido de pirita y la
termodinámica del equilibrio de la absorción-desorción de la humedad. Estas relaciones se
determinan directamente midiendo el calor exotérmico y el aumento de temperatura en un
calorímetro adiabático.

Cuando se inicia el proceso de combustión espontánea del carbón se puede detectar por medio
de un distintivo olor a quemado, sin embargo para cuando se detectó por medio del olor, es muy
posible que la situación ya no se pueda controlar. Por consiguiente es importante poder hacer la
detección de una manera confiable antes de llegar a oler a quemado. El método más usado para
la detección temprana de la combustión espontánea es la razón monóxido de
carbono/deficiencia de oxígeno, más conocida como la razón de Graham.

Para calcular la razón de Graham se debe medir la concentración de monóxido de carbono en el


aire en ppm, y la concentración de oxígeno y nitrógeno con una exactitud de ± 0.01 %. El
cálculo se basa en que en el proceso de oxidación no se añade ni se quita nitrógeno del aire y en
que la razón calculada es casi independiente de la dilución subsecuente por aire fresco.

La razón de Graham se calcula considerando que:

El nitrógeno, N2 , es el porcentaje del nitrógeno en el área de calentamiento. Por lo tanto el


oxígeno, O2 , en el aire fresco que originalmente contenía el nitrógeno era:

20.93
O2 = x N2
79.04

El consumo de oxígeno es:


20.93
 O2 = x N2 - O 2
79.04

donde O 2 = % de oxígeno en el área de calentamiento.

100 xCO
La razón de monóxido de carbono al oxígeno consumido es:
O2

o sea, que es la razón de monóxido de carbono a la deficiencia de oxígeno.

La razón de Graham normal en una mina con producción estable generalmente varía de 0.1 a
0.5.

14.4 Efectos de los fuegos sobre la ventilación.

El fuego de un incendio origina un aumento notable en la temperatura del aire que resulta en
una expansión del aire. Esta expansión se da en todas direcciones. En una galería la expansión
en contra de la dirección del aire resulta en una reducción del flujo de aire, al producirse un
“estrangulamiento” de la corriente de aire que es equivalente a que hubiera habido un aumento
en la resistencia de la vía de aire. Por otra parte el calentamiento del aire disminuye su densidad
y hace que el aire “flote” hacia el techo de la obra y que preferentemente fluya pegado al
techo. Si el efecto de flotación es prolongado hace que el humo y los gases calientes formen
una capa pegada al cielo, y, en un nivel o en una obra descendente se regrese en contra de la
dirección del flujo de aire. Esta disminución de la densidad del aire tiene efectos locales y
cambia las magnitudes de la energía de ventilación natural.

14.5 Criterios de diseño de circuitos de ventilación relativos a incendios y


explosiones.

14.5.1 Minas metálicas

Entre algunos de los requerimientos contenidos en la NOM-023-STPS-2000 y otros derivados


de la experiencia se recomienda que:

 Los tiros de servicio y las rampas por ser rutas naturales de evacuación deben ser
entradas de aire fresco.

 Los cables que conducen electricidad deben estar alejados de madera o deben estar bien
aislados.

 Las tuberías de diesel deben ir por barrenos especialmente perforados para ese fin.

 El circuito de ventilación de los talleres diesel debe ser tal que el aire viciado sea
descargado a la extracción o salida última de aire viciado de la mina.

 La extracción o salida última de aire viciado de la mina debe estar aislada, con tapones
construidos de material incombustible, de las corrientes de aire que alimentan aire
fresco a la mina; de manera que no haya posibilidad de que el aire viciado se pueda
filtrar hacia corrientes de aire fresco y contaminarlas.
 Se recomienda la ubicación de los extractores principales en superficie, pues en el
interior de la mina, en caso de un incendio, pudieran quedar inaccesibles y se cancelaría
la posibilidad de detener o invertir el flujo de aire.

 Los ventiladores primarios en el interior de las minas deben estar eléctricamente


independientes de otro equipo crítico y deben poderse controlar desde superficie y
desde el interior de la mina.

 Los circuitos de las áreas o secciones de la mina deben ser independientes entre si, o al
menos deben poderse aislar fácilmente.

 Uno de los resultados del desastre en la mina Sunshine en 1972 y del desastre en la
mina de oro Kinross en el distrito Evander del Transvaal en Sudáfrica en 1986, es que
no se debe usar espuma de poliuretano en la mina. En un artículo que apareció en 1968
en la revista Colliery Guardian dice: “La resistencia al fuego de la espuma de
poliuretano depende, hasta cierto punto, de las proporciones de los constituyentes en el
compuesto final y de la densidad de la espuma. La resistencia al fuego disminuye al
disminuir la densidad, de modo que espumas de baja densidad, como las que se usan en
las minas, tienden a tener una baja resistencia al fuego. La resistencia al fuego se puede
mejorar usando un agente que retrase la flama, pero la proporción del agente debe
limitarse si es que la espuma sea mecánicamente aceptable de modo que, a pesar del
agente, la espuma de poliuretano sigue siendo un material inflamable y con muy baja
resistencia al fuego”.

14.5.2 Minas de carbón

En la Norma Oficial Mexicana NOM-032-STPS-2008 se enlistan los requerimientos relativos a


la ventilación, entre ellos destacan:

 El motor eléctrico del abanico principal se debe ubicar fuera del circuito de ventilación.

 Los ventiladores deben contar con instrumentos de monitoreo continuo del gas metano
en el área de descarga.

 Debe haber un sistema automático para el corte de energía eléctrica al interior de la


mina, cuando los porcentajes de gas metano sean iguales o mayores a 1.5 % en la
descarga del abanico principal.

 Se deben aplicar medidas de seguridad cuando se alcance el 1.0 % de concentración de


gas metano en los desarrollo.

 Se deben aplicar medidas de seguridad cuando se alcance el 1.0 % de concentración de


gas metano en la terminal de frentes largas.

 Se deben aplicar medidas de seguridad cuando se alcance el 1.5 % de concentración de


gas metano en regresos secundarios y generales.

 Se debe aplicar polvo inerte en tablas, techo y piso de las obras para mantener al menos
una incombustibilidad del 85 %.
14.6 Control y combate de siniestros

Todas las minas son diferentes, cada una tiene sus particularidades, por lo mismo las
condiciones en que se presenta un siniestro son distintas. Por eso hay recomendaciones de tipo
general, cada siniestro debe ser atendido de acuerdo a sus particularidades.

En el evento de un siniestro sea este un incendio o una explosión, las empresas deben estar
preparadas para atender el aspecto exterior, es decir hacia la comunidad, y el interno que es
propiamente el manejo y combate del siniestro.

En lo externo, la empresa debe tener un portavoz responsable y autorizado que permita o


niegue la entrada a personas a un área resguardada designada para proporcionar información
autorizada sobre el siniestro. Dicha área debe estar separada de las instalaciones de producción.
Esta persona, u otra, debe emitir los boletines informativos a familiares, autoridades y medios
de comunicación. El objetivo es evitar distracciones al personal dedicado al control y combate
del siniestro.

En lo interno, la organización seleccionada para el control y combate del siniestro debe tener
una persona o personas designadas para encabezar, decidir, dirigir y coordinar a los miembros
de ese equipo. Cada miembro debe conocer a fondo su autoridad y responsabilidad sin
ambigüedades. Deben formar parte del equipo el superintendente de la mina, el (los) jefe(s) de
área, los superintendentes de seguridad y de mantenimiento, el encargado o jefe de las cuadrillas
de rescate y el encargado o jefe de ventilación. Este equipo debe tener a su disposición y sin
restricción todo el apoyo material y humano que necesiten en la emergencia.

El encargado de la ventilación debe mantener actualizado un mapa de la mina con los flujos de
aire, sus direcciones, magnitudes, puertas, tapones, ventiladores primarios y secundarios y rutas
de evacuación.

En el combate de incendios una opción que se puede presentar y que hay que evaluar es invertir
la ventilación. Sin embargo, hay que tener siempre en mente una regla básica del combate de
incendios en minas de que no se cambia la ventilación a menos de que haya certeza de cual
será el resultado y también de que haya certeza de que el cambio no afectará adversamente al
personal en la mina.

La empresa debe contar con un sistema de alerta que al activarse haga saber a todo el personal
que deben evacuar la mina. Si existe una red de aire comprimido que cubra toda la mina
entonces la alarma se puede dar a conocer inyectando gas fétido en la red de aire comprimido.
Al detectarlo el personal debe evacuar la mina.

Se debe contar con un plan de evacuación conocido por todo el personal, en el que se indiquen
las rutas de escape. Las rutas de escape deben estar señalizadas. Debe haber mapas en lugares
estratégicos de la mina mostrando las rutas de escape.

Debido al mayor uso y aceptación de los jumbos electrohidráulicos en desarrollos y producción,


algunas minas sólo tienen redes parciales de aire comprimido. En estas minas la alarma con gas
fétido tiene una cobertura parcial. Hay sistemas de alarma con chips en cada lámpara minera
que sirven para alertar al personal de que debe evacuar la mina.

Se deben mantener limpias de derrames las áreas debajo de las bandas transportadoras y las
poleas.

En las minas debe haber una red de agua contra incendios con tomas espaciadas a intervalos
regulares en las minas de carbón y en donde haya lugares susceptibles de un incendio en las
minas metálicas.
Todo el personal debe estar dotado de autorescatadores y entrenado en su uso.

En lugares estratégicos de la mina debe haber refugios herméticos, resistentes al fuego para todo
el personal en el área. Los refugios deben estar provistos de alimentos, agua potable, aire
comprimido, medio de comunicación, herramientas y botiquín de primeros auxilios.

El personal que detecte olor a quemado, humo o un fuego si lo puede localizar sin tardanza debe
hacerlo y si puede controlarlo también debe hacerlo, pero si ve que va a demorarse en ubicarlo o
controlarlo, debe dar aviso inmediatamente. La persona responsable al enterarse de este hecho
debe decidir que curso de acción se debe tomar, incluyendo la evacuación del personal no
destinado a controlar el fuego si tal es el caso.

En un incendio el tiempo no es nuestro aliado, todo lo contrario.

En caso de que la evacuación sea necesaria se debe verificar que todo el personal haya sido
evacuado. Una vez que se evacuó todo el personal y se sabe el lugar o área general del fuego,
las cuadrillas de rescate proceden a cortar la entrada de aire a ese lugar por medio de tapones
temporales sellados con espuma de alta expansión y a establecer estaciones seguras de aire
limpio, desde donde las cuadrillas de rescate pueden continuar sellando el área del incendio. En
los tapones permanentes que se instalen se deben dejar tubos para muestrear los gases de la
atmósfera atrás del tapón y para monitorear esa atmósfera y ver si el fuego se está extinguiendo,
o si es necesario mejorar el sellado del área. La razón de Graham es una herramienta que
permite ver si el fuego se está extinguiendo.

Sobre el tema de combate de incendios, sobre todo en minas de carbón, es un tema amplio y se
recomienda leer en la bibliografía a los autores MacPherson y Mitchell.
BIBLIOGRAFÍA

Anon., 1954, “Fires, Gases, and Ventilation in Metal and Nonmetallic Mines,” USBM, M.C.,
No. 55.

Bossard, F.C., y Asociados, 1983, “A Manual of Mine Ventilation Design Practices”, Butte,
Montana, E.U.A.

Hartman, H.L., editor, 1982, “Mine Ventilation and Air Conditioning”, 2a edición, John Wiley
& Sons.

Launhardt, R., Gazewood, P., Goldstrike, B., “The Sunshine Mine Fire Disaster A View From
the Inside”.

McPherson, M.J., Subsurface Ventilation and Environmental Engineering.

Mitchell, D.W., and Burns, F.A., 1979, “Interpreting the State of a Mine Fire,” USBM, I.R. No.
1103.

Mitchell, D.W., 1990. Mine fires, McLean Hunter, Chicago, Illinois, 167 pp.

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