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C.I: 52254916.
Curso: Derechos humanos y el rol de la Institución Nacional de Derechos Humanos
y Defensoría del pueblo.
Introducción:
Enmarcando este trabajo final sobre DDHH en el mes de mayo, mes de la memoria
de las personas desaparecidos en manos del terrorismo de Estado; voy a trabajar el
rol de la organización “Madres y familiares de uruguayos detenidos desaparecidos”
y qué relación guarda con la INDDHH o con la defensa de los derechos humanos en
general.
La organización antes nombrada fue creada en 1983, y tiene como propósito
encontrar respuesta ante el desaparecimiento y el paradero de los restos de las
víctimas del terrorismo de Estado. Ante las violaciones de los DDHH y el
desconocimiento de dónde están los 1997 desaparecidos en dictadura, reivindican
el lema “memoria, verdad y justicia” así como “nunca más terrorismo de Estado”.
El terrorismo de Estado en sí mismo es una violación de los DDHH, porque es una
forma ilegítima de los gobiernos de ejercer miedo y/o violencia a la población, que
tiene como medio la persecución, los secuestros, las desapariciones, la tortua o el
asesinato que ejercen los funcionarios del Estado, ej: el ejército militar.
El tema principal del trabajo sería, entonces, los derechos humanos vulnerados de
las víctimas de desapariciones forzadas.
Desarrollo:
Generalmente, los derechos que se violan en esta situación de desaparición forzada
son:
En primer lugar, el derecho al reconocimiento de la personalidad jurídica: porque al
momento de ser secuestrados o detenidos en circunstancias dudosas que han
derivado en desapariciones está lejos de reconocer los derechos que tiene esa
persona, sólo por el hecho de ser humano.
Luego tenemos el derecho a la libertad y seguridad de las personas: son personas
que han sido detenidas ilegalmente o con argumentos sumamente arbitrarios y que
eso ha condicionado fuertemente la libertad de cientos de uruguayos durante la
dictadura cívico-militar, siendo presos políticos.
Agregándole a esto, que la impunidad del contexto histórico hacía que se utilizara
frecuentemente el recurso de las torturas como parte del procedimiento interrogativo
de las fuerzas armadas. Esto varias veces terminó convirtiéndose en homicidios,
siendo justificado por las autoridades de que la persona “no aguantó la tortura”.
En este sentido, también se viola el derecho a no ser sometido a torturas ni a otros
tratos o penas crueles y el derecho a la vida. Claramente, poco podemos hablar de
la seguridad de los ciudadanos.
Si bien la dictadura cívico-militar ha cesado en el año 1985, y con ella el terrorismo
de Estado; hay un derecho humano en torno a este hecho histórico que se sigue
violando hasta la fecha.
Este derecho es el de conocer la verdad sobre las circunstancias de la desaparición.
Y este es un gran propósito de la organización “madres y familiares de uruguayos
detenidos desaparecidos”. Reclamar por “verdad” significa reclamar por respuestas
sobre ¿qué les pasó?, ¿dónde están sus restos?, ¿en qué circunstancia se
produjeron los hechos?. Porque un ser humano no puede simplemente desaparecer
en manos del Estado sin que se sepa siquiera si está vivo o no. Y es sorprendente,
así como doloroso, que aún en democracia no se ha trabajado lo suficiente para
encontrar respuestas o hacer justicia frente a los responsables de estas
desapariciones.
Para vincular todo lo expuesto anteriormente con el rol de la Institución Nacional de
Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo, me adentrare en las competencias de
dicha institución.
Para este caso puntual, voy a hacer énfasis en dos de las competencias de la
INDDHH (que no son las únicas que posee):
Así como también se han ampliado sus competencias a partir de, entre otras leyes,
la Ley N° 19.822 de Búsqueda de Detenidos Desaparecidos.
Creo que estas tres competencias se relacionan con la militancia social que
desarrolla la organización de madres y familiares de detenidos desaparecidos
porque:
Conclusiones: