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El acto Legislativo 3 de 2002, al reformar el artículo 250 de la Constitución marca una nueva
disciplina de la investigación penal en Colombia, pues se opto por un modelo que, a grandes
rasgos, presenta las siguientes características:
sin que medie orden judicial previa, pero quedan sujetos a un control judicial automático
dentro de las 36 horas siguientes, para efectos de determinar su validez en tanto pruebas.
Además de la consideración anterior cabe predicar, de acuerdo con la sentencia C-1092 de
2003, que dicho control se extiende en sus sentidos formal y material en aras de salvaguardar
el debido proceso.
c) La investigación penal tendrá una división entre actos que requieren autorización judicial y
actos que no la requieren. La clasificación resulta importante para efectos probatorios las
consideraciones de prueba ilícitamente obtenida o con violación del debido proceso en
concordancia con el Artículo 29 de la Constitución Nacional.
La regulación constitucional resulta importante por los que se conoce en otras legislaciones
como “prueba sobre prueba”. Así las cosas, constitucionalmente hablando y reflejado en la
sentencia C-873 de 2003, ha entendido la corporación, que tanto la investigación, como el
ejercicio de la acción penal están sujetos al umbral señalado en la Carta:
En este sentido, no deja de ser problemática la investigación de ciertos delitos que justamente
se basan en un modelo de indagación “exploratorio” sin que exista referencia de su comisión,
De igual manera, la redacción constitucional constituye una talanquera frente a ciertas figuras
que se utilizan para las indagaciones “exploratorias”, como por ejemplo, los agentes
encubiertos y los informantes:
En segundo lugar, se admite que la Fiscalía puede desechar todas las informaciones
constitutivas de notitiacriminis que no se compadezcan con el umbral exigido, en el sentido de
carecer de fundamento factico indiciario (circunstancias o motivos que indiquen la existencia
de un delito). En otras palabras, el constituyente derivado de alguna manera atempera la
exigencia de obligación para el inicio de cualquier investigación; en tercer lugar, no se puede
omitir que este principio de investigación oficial como se le conoce en otras legislaciones, debe
complementarse con los siguientes presupuestos:
B) POR REGLA GENERAL LAS MEDIDAS DE INVESTIGACION QUE SE PUEDEN TOMAR PARA
AFECTAR DERECHOS FUNDAMENTALES ESTAN SUJETAS AL PRINCIPIO DE RESERVA
JURISDICCIONAL Cuando nos referimos a la reserva judicial lo entendemos en el sentido de
autorización previa de un juez de garantías para que la Fiscalía proceda a tomar la medida.
1. El respeto a la esencia de los derechos fundamentales impone que estos no puedan ser
limitados más allá de lo estrictamente necesario para la protección de intereses generales.
2. El beneficio que obtenga el interés general o la colectividad debe ser equiparable con el
perjuicio ocasionado al individuo.
Además de lo anterior se puede decir que la etapa de investigación previa o indagación
preliminar está sujeta no sólo a lo ya expresado, sino a la intervención activa de la defensa e
indiciado, para la recolección de evidencias que más adelante sustentaran su postura
defensiva y que sin duda garantizan la igualdad de armas.
Por las razones anteriores, la etapa de investigación previa reviste especial importancia tanto
para el sistema punitivo como para el imputado, razón por la cual durante esta etapa debe
protegerse y garantizarse plenamente el derecho de defensa y sus principios, entre ellos la
igualdad de armas.
En armonía con lo expuesto, es dable afirmar que la Corte ha entendido que el debido proceso
y el derecho de defensa, deben garantizarse plenamente en la fase de investigación previa al
imputado y su defensa, frente al gran poder que en este sentido tiene el ente acusador, ya que
si esta etapa se desarrolla sin la participación activa del imputado y su defensa en relación con
las facultades que le son atribuidas respecto del recaudo de material probatorio, el derecho de
defensa y la igualdad de armas que no se garantizaron durante esta etapa decisiva, terminará
afectando también y de manera directa el resto de etapas dentro del proceso penal.