Está en la página 1de 189
Magali Martija-Ochoa El gran libro de las RQUIDEAS Especies y variedades, cultivo y multiplicacién, prevencion y tratamiento de las enfermedades... De,Vecchi ae EL GRAN LIBRO DE LAS ORQUIDEAS A pesar de haber puesto el maximo cuidado en la redaccién de esta obra, cl autoro el editor no pueden en modo alguno res- ponsabilizarse por ls informaciones (formulas, re cnicas, ec.) vertidas en el texto. § aconseja en cl caso de proble us espectficos —a menudo tinicos— de cada lector en particular, que se consulte con una persona evalificada para obtener as informaciones mas completas, mas exacts y lo més actualizadas posible, EDITORIAL BE VECCHIL S.A, Diseto grifico dela cubierta: © YES. Fotografias de la eubterta: © Mike Hill/Getty Images. © Editorial De Vecchi, $. A. U. 2007 Balmes, 114 - 08008 Barcelona Depésito Legal: B, 27.793-2007 ISBN: 978-84-315-2968.0 Editorial De Vecchi, S. A. de. V. Nogal, 16 Col. Sta. Maria Ribera 06400 Delegacion Cuauhtémoc México Reservados todos Jos derechos. Nila totalidad ni parte de este libro puede reproducirse o trasmitirse por ningin procedi mento electrénico 0 mecinico, incluyendo fotocopia, grabacién magnétice o cualquier almacenamiento de informacion yale tema de recuperacin, sin pesmiso escrito de EDITORIAL DE VECCH INDICE PROLOGO PEQUENA Y GRAN HISTORIA DE LAS ORQUIDEAS . . La herencia del pasado: las virtudes de este curioso tubérculo Elsalep, la nueva panacea La epopeya de los naturalistas viajeros: descubriendo a las «hijas del aire» . Cazadores de orquideas ... . Orquideas venenosas... la flor de la neurosis de «fin de siglo» LA BOTANICA DE LA ORQUIDEA. . . La clasificacién otiginaria de la flor... . pets Elinsecto, la orquidea y el hongo: una historia... de amor . . La orquidea, una planta en todo el mundo . EL CULTIVO DE LA ORQUIDEA. . . . Composiciones florales de Ryu Kubota La correcta adquisicion de una orquidea Una orquidea en casa: un suefio al alcance de todo cl mundo. | | | EL CUIDADO DE LA ORQUIDEA Pardsitos. ... . : Enfermedades criptégamas . 3 Enfermedades bacterianas y virales. . FICHAS DE LAS VARIEDADES LA HERBORIZACION EN EL SIGLO XX1, EN BUSCA DE LAS ORQUIDEAS SILVESTRES . ANEXOS, La PROTECCION DE LAS ORQUIDEAS . Lista de orquideas terrestres DIRECCIONES UTILES Asociaciones ..... Enlaces en Internet . GLOSARIO BIBLIOGRAFIA. .... INDICE DE ESPECIES . 181 181 183 183 183 185 187 189 PROLOGO Cuando, al caer la tarde en el mes de junio, la mirada de mi abuela se iluminaba con un brillo especial al contemplar la Ilanura, yo entendia que habia llegado el momento. Ella empufiaba el bastén con decidido semblante y, ascendiendo con menor dificultad de lo habitual la cuesta del Pico, reiteraba al que querfa escucharla que quizas ese afio se veria alguna abejera (Ophrys apifera). Tampoco existia mejor momento para ella, cuando, encorvada sobre el erial del campo de cultivo, apenas a algunos metros de los ultimos trigales, descubria a pocos centimetros del suelo una orquidea silvestre... Pensativa, contemplaba la flor con emoci6n: «Mira lo misteriosa que es la naturaleza...». Entonces, teniamos que descender deprisa y regresar con la camara de fotos para inmortalizar el milagro de la naturaleza. Algunos veranos, la maleza permanecia desesperadamente despoblada de esta flor tan incierta... Entonces regresabamos pensado ya en junio del afto si- guicnte, Cuando sus ojos perdieron la nitidez de las cosas, me converti en testi- go ocular de la llegada de las orquideas: mi abucla me esperaba en la entrada del campo y yo me sumergia en el erial lleno de maleza pata ver si ese afo una or- quidea silvestre o dos nos honraban con su presencia. Ese campo, que solamente le interesaba a ella, se convittié pot su propio de- creto en una «reserva de orquideas silvestres» y tuve que prometerle a mi abue- la que, tras su muerte, preservaria esa herencia vegetal... Esta frescura espiritual me convencié de la sabiduria de la que hacia gala y, unos afios mas tarde, por la casualidad del destino o del lugar de veraneo, me sorprendié el extrafio placer, aunque compartido, no obstante, con muchos afi- cionados, de la espera de ver florecer las orquideas silvestres. Desde aqui se lo agradezco. =o PEQUENA Y GRAN HISTORIA DE LAS ORQUIDEAS Hojas lanceoladas, fruto encapsulado, un eapallo ya flor 2Una flor? No, tuna maravlla! Una maravilla dorada, sedosa, y que embriaga hasta dejamnos sin respiracién. Ene ciliz amarillo de oro, una estrella prestigiosa de scis pétalos ondulados; elcorazén engalanado con suave pelusa, cuyas cabezas brillan como rayos de sol Emst Lahndorff, Cazador de orquideas, Editorial Hoébeke, 1995 La familia de las orquideas comprende més de 30.000 especies, 800 géneros te- estres 0 epifitos, miles de hibridos, una variedad casi infinita de colores, perfu- mes que «cortan el aliento», formas eter- namente claboradas y misteriosas... Qué otra familia de flores, sino la de las orquideas, ha tenido tantos argumen- tos para sedueir al ser humano? Tantas razones... y una mas que esca- paa la raz6n: la orquidea es una flor ab- soluta que hace brillar los ojos de todos los que han aprendido a conocerla. Su complejidad incongruente encanta a la imaginacion. Colma todo lo que se espe- rade ella. Se encuentra en todos los tincones del planeta; la orquidea se ha convertido, a su pesar, en compafiera vegetal del ser humano: flor de culto, mitolégica, medi- cinal, hechicera y de coleccion. Desvelo sus secretos con gran lenti- tud, dejando alos seres humanos el tiem- po suficiente para perderse y construir tun universo en una constelacién de mi- tos y creencias donde la exactitud cienti- fica se fue abriendo camino con mucha dificultad... La herencia del pasad las virtudes de este curioso tubérculo En Grecia Las orquideas terrestres pronto forma- ron parte de la farmacopea popular. En la Antigiiedad clisica, se prestaba mayor interés al tubérculo de esta planta que a la flor, debido a su gran parecido con los testiculos. Asi pues, por analogia se de- dujo que posefa virtudes afrodisiacas, a orguédea (del griego orchis, «testicu- los») llevaré en su nombre incluso la for- ma de su tubérculo; debemos a Teofras- to! los primeros escritos que revelan la utilizacién medicinal de las orquideas te- rrestres y el intrigante dimorfismo de sus bulbos: «(...) Existen plantas que esti- mulan los érganos de la reproduccién, otras que los impiden actuar; también existen otras que poseen las dos propie- dades a la vez. Asi es la que se ha Ilama- do orchis. En efecto, tiene dos testiculos, 1, Alumno de Platon y de Aristoteles, nacido hacia 372.a.deC. [~ GRAN LIBRO DE LAS ORQUIDEAS uno grande y otro pequefio. El mayor, to- mado con leche de cabra, favorece el coi- to, yel menor lo impide (...)». Sus «virtudes» terapéuticas seran su- cesivamente confirmadas por numerosos autores y médicos. Asi, Dioscérides? describié minuc samente en su tratado De materia medica cinco géneros de orquideas terrestres: Opbrys (por analogfa con la forma de pes- tafia de la flor), Orchis, ya descrito ante- riormente por ‘Teofrasto, Serapias, Helle- borine y Satyrum? «El Testiculus, que los griegos aman Cynos orchis “testiculo de perro”, tiene 2. Didseorides, médico ariego del siglo t de muestra era 3. De materia mediea, libro 3, capitulo 124 Epipacis hellehorin, ya derrte por Diowérider on De materia medica en el siglo te nucsins ens (© A, Mauffret- Bernard) las hojas en torno a su tallo, partiendo desde debajo, recostadas en el suelo, pa- recidas a las del olivo, mas largas, estre- chas, lisas. »Su tallo es alto como la mano, sus flores son de color parpura; su raiz es bulbosa, bien nutrida; el bajo més blan- do y arrugado... Crece en lugares pedre- gosos y arenosos (...)». Dioscérides indica sobre Ia orquidea Orehis lo siguiente: «Las raices se comen cocidas, como los demas bulbos. Se dice que si el hombre se come la mayor, en- gendrard a hombres; si la mujer se come la menor, a mujeres dice que las mujeres en ‘Tesalia beben la blanca con leche de cabra pata incitar a la lujuria; la seca sirve para en- »s PEQUENA Y GRAN HISTORIA DE LAS oxauivens @ z friarse, y una impide la virtud de la otra» Respecto a la orquidea Serapéas, Dios- cérides indica lo siguiente: «Su raiz aplicada en cataplasma hace desaparecer las inflamaciones, las hin- chazones, reduce las uilceras, cura los herpes y las fistulas En cuanto a la Satyriuz: «Los bulbos del satirién consumidos con vino son en general afrodisiacos; son titiles también en los espasmos». Los escritos romanos En su famosisimo tratado de Historia na- tural, inmensa recopilaci6n de miiltiples conocimientos sobre las orquideas de esa época, Plinio el Viejo (escritor y erudito latino 23-79 d. de C.) recupera a su vez las observaciones de otros muchos autores griegos: «(...) Existen pocas plantas tan maravillosas como la Orchis, 0 la Serapias, hierba de hojas de porro, de tallo alto de un palmo, flor purpura, raiz formada por dos tubérculos que se asemejan a los tes- ticulos. >El tubérculo mas grande, o que algu- nos llaman el mas duro, tomado con. agua, incita al amor; el més pequeiio o el mas blando, tomado con leche de cabra, reprime los deseos amorosos (...)». Claudio Galeno, médico inventor de la conocida medicina galénica, insistira en su famosa obra El Ithro de los simples sobre las cualidades de esta planta, debi. das, sobre todo, a los indices de hume- dad que tienen los bulbos: «Su rafz bul- bosa y doble tiene una virtud himeda y caliente, y es dulce al paladar. La raiz ma- yor posee, por tanto, una gran humedad excrementosa y ventosa: tomada en bre- baje, incita a ia lujuria. La menor tiene una humedad mas digesta por la fuerza y operacién de la naturaleza; como su tem- peratura es mds alta y seca, esta rafz no incita a la lujuria, sino que la impide y la amortiza». Un perfume embriagador... El camino labrado asi por nuestros ante- pasados determinara literalmente las vir- tudes de la orquidea en sus bulbos: esta herencia servira de base —equivocada- mente— en todas las investigaciones lle- vadas a cabo para entender esta flor tan cnigmatica Los primeros viajeros descubrieron que, al otro lado del Mediterraneo, en Tiinez, por ejemplo, las orquideas, agru- padas bajo el nombre genético de El mita-El haya («la muerta y la viva»), alu- sién directa a la presencia de los dos tu- bérculos, son también explotados para la preparacién de recetas de brujeria que favorecen, entre otras cosas, el poder de a reproduccién. P Besnehard* explica que «se desig- nan con este nombre todas las especies: locales. (...) Parece ser que la Himanto- glossum hircinun es, con diferencia, la mds apreciada por su almizclado perfu- me y sus tubérculos particularmente vo- luminosos». Esta es, pues, una receta que se repro- duce en los siguientes términos: «Consiga la planta El mita-EI haya: tie- ne dos huevos en forma de testiculos: uno grande, el otro arrugado y seco. Sile dade comer a un hombre el bulbo seco (El mita) sin que se dé cuenta y esconde el ‘otro, este hombre no podra volver a tener relaciones sexuales con su mujer hasta que no le dé el bulbo que ha escondido». En el centro de las creencias popula- res, la orquidea se revela emisaria de Dios o del diablo. Dactyloriza recibe asi el nombre de Pal- ata christi pot alusi6n a las manos cortadas de Cristo; se le atribuyen virtudes protecto- tas y se usa como amuleto de la buena suerte. No era rato que el tubérculo se lle- vara colgado como un talisman o que se conservara en un frasco. 4, B Besnehard, El bomebre y la ongutdea: historia de una mirada, tesisinédita, 1990. Suenta una antigua leyenda cémo un fraile le corto la mano a una estatua mila grosa para llevarsela a sus hermanos de convento, En el camino de rege scapé a la sentencia divina; imploré el , el fraile no perdén de Dios, pero tuvo el tiempo jus- to para esconder la mano debajo de la tierra de los helechos, En el mes de junio siguiente, florecié en ese mismo lugar una orquidea cuya raiz tenia la forma de una mano de ni 6 la Nigri- para untar cer que se agotara la leche. PEQUENA Y GRAN HISTORIA DE LAS onavivess W Enigmatica... al parecer fue la flor del eosmosandalon...? ‘Magica, podia ayudar a que naciera el amor en la joven deseada por un hom- bre, si escondia sin ella saberlo la mitad del bulbo del Orchis y guardaba la otra mitad para si... Cultural, en Sudamérica, se utiliza en todas las ceremonias que armonizan la vida religiosa de los seres humanos (bau- tizo, boda y muerte), y tiene nombres que marcan la presencia de la religién ca- tdlica: flor de Jestis, flor del Espiritu San- to, flor de los muertos. En Africa, en la cultura zulé, las raices de la Ansellia gigantea constituyen un contraceptivo para la mujer no casada y, en cambio, las hojas de la Ansellia humi- is son llevadas en el pecho por los jéve- nes que quieren cortejar a una chica. Finalmente, en la India o en China, al igual que en gran parte del continente americano, las orquideas sirven de ingre- diente en la preparacién de medicamen- tos con virtudes vulnerarias. La enigmatica orquidea manifiesta, a través de la diversidad de nombres que sc le atribuyen, la estrecha relacién que esta planta mantiene con el mundo de los dioses, funcién de intercesor 0 tes- timonio del paso de los dioses por la Tierra. Su utilizacion esta mas cerca de la ma- gia y la brujerfa, aunque la medicina le haya atribuido durante vatios siglos ca- pacidades de tratamiento médico y de. panacea.° Esta capacidad es la misma que se ha otorgado al almizcle, la miel, el mbar gtis, el lagarto, la cantaridina, los testicu- los de gallo, el cerebro de gorrién, el vi- telo de ciervo o de toro y otra mandrago- ra en los registros de los brujos... 5. El enigma del covrosardalon: en tiempos de la Grecia antigua, esta planta estaba dedicada al culto a Deméter, diosa de la fecundidad. Los cientificos han quetido ver, desde siempre, una orquides en esta flor enigmética, 6, Panacea, remedio universal. El salep, la nueva panacea ‘Aunque los que han hablado del salep estan divididos sobre el tipo al que pertenece esta fécula, todos estan perfectamente de acuerdo sobre sus virtudes terapéuticas y dietéticas. El padre Serici dice que el rico indio y el moro utilizan el salep también con eficacia y con el mismo objeto que el chino utiliza el ginseng: Ja masa que se forma con su polvo tiene una virtud eficaz para reponer las fuerzas perdidas debido a una larga enfermedad o la edad; esta raiz.es muy estomacal, nutritiva; purifica la sangre sin calentarla demasiado; la utilizan ‘mucho los turcos para reponer las fuerzas agotadas Journal de médecine, «Lettxe sur le salep», 1759 En el siglo Xvull, la medicina se interesa por todas las plantas que pueden servir en una farmacopea «razonable»: café, té, tabaco, ginseng, y durante la primera mi- tad del siglo xvuil, también por el salep, 0 salop, osalab de Persia, una «droga» muy en boga, vendida sélo en Paris, en la ca- lle de la Harpe por el St. Andry, tendero- droguero...; pasard atin un tiempo para que se identifique el origen de esta «goma de salem», que se parece, antes de limpiarla, a un higo seco. El salep es, de hecho, la harina que se obtiene des- pués de desecar los bulbos de las orqui deas, Turquia cra, y sigue siendo, el pri mer productor de salep. Este ingrediente se consideraba a la vez un medicamento (mezclado con otros ingredientes como la miel, el jengi- bre o el ginseng, el salep tenia entonces muchas virtudes terapéuticas: por ejem- plo para luchar contra la epilepsia, la di- senterfa, los célicos, la diarrea, el célera, etc.) y un producto que podia resolver los problemas de hambruna. Pero las or- quideas escapan a todo intento de culti- vo intensivo. Charles de Lécluse lo inten- tard en el mismo momento en que se introdujo la patata. iEn vano! ‘Transportada de Pert por los ingleses, y calificada de «salep de los pobres» por Littré, no fue hasta el siglo xvm cuando 5 PEQUERA Y GRAN HISTORIA DE LAS oxgutveas Parmentier redescubrié el tubérculo que serd la hortaliza del pobre. Sus virtudes son muy discutibles, pero el salep queda- rd inscrito en el cédex hasta principios del siglo xx. Hoy en dia, la recogida de bulbos esta absolutamente prohibida, pero esta prohibicion no cambia la reali- dad: la venta de salep se cuenta atin hoy en dia por decenas de toneladas, y se teme seriamente que las orquideas sil- vestres (especialmente en Turquia e Iran) vean, con esta prictica, llegar el momen- to de su desaparicién... La epopeya de los naturalistas viajeros: descubriendo alas «hijas del aire» La conquista del mundo esta en manos de los poderosos; como la Tierra no es esa vasta extensién Ilana donde un abis- mo espera al que quiere llegar a sus limi- tes, descubrir lo que se encuentra mas alla de los mares conocidos es su patri- monio: ies preciso verlo y conquistarlo todo! Las orquideas, oro vegetal si acaso existe, atrae la mirada de los conquista- dores. Aunque en un principio acudian en busca de oro, los manusctitos de los in- formadores son testigos del efecto que las orquideas epifitas provocaron en esos nuevos conquistadores. Asi, cuando Cristobal Colon desem- bareé en la isla de Guanahani, observo hojas de cinco o seis clases y todas dife- rentes», que eran en realidad orquideas. Siguiendo los pasos de Cortés, Francisco Hernandez, que habia sido enviado, cuando murié Carlos I de Espafia, a ca- talogar todas las riquezas naturales de esos nuevos imperios, ya describid dos variedades de orquideas, la Stanhopea ti- grina y la Laelia majalis; y se fij6 en la uti- lizacién de una planta singular, el dilxo- Dendrobium thwaitesti ‘Vietch’ (© Overseas /Farabola- fio) chitl, una orquidea —ique no es otra que la vainillal— utilizada en la preparacin de una bebida que sirve para poner re- medio al cansancio, las preocupaciones, combate el miedo y fortifica el alma: el chocolate... Al cabo de los afios, los ex- ploradores se animaron: el mundo ya no tenfa limites y la esfericidad de la Tierra movié a los occidentales a conocer todos los horizontes. Se establecieron entonces las compafifas y las colonias: se organiz6 el comercio, las misiones eran cada vez mas frecuentes. De todos los rincones del mundo, los boténicos aportaron her- barios, dibujos, especimenes de orqui- deas que enriquecieron las bases de lo que serian las grandes colecciones. El océano Indico, el archipiélago de las Molueas, Africa, el cabo de Buena Espe- ranza, China, la India... iSi las riquezas naturales constituian la fortuna de las co- lonias, los naturalistas no iban a la zage: habfa orquideas por toda la Tierra! A menudo con el encargo de sus sobe- ranos de verlo todo, describirlo todo y di- bujarlo todo, personajes como Jussieu, Condamine, Humboldt, Bonpland... compilan, exploran ¢ incluso llegan a per- der... el juicio. Es el preludio de una fiebre que pron- to se apoderara de Europa: la orquideo- mania. Asi, en 1731 Collinson regresa de la isla de la Providencia, en el mar Caribe, con una Bletia verecunda. Es la primera orquidea exética viva que se introduce en Europa. Qué es lo que se sabia en esa época de esas flores tan diferentes? Muy poco... Linneo clasificé las orquideas tropicales bajo el género Epidendrum (que significa «plantas que viven en los Arboles») y describié en su obra Species plantarum una escasa veintena de orqui- deas «tropicales», Cémo no pensar, en efecto, que se trataba de plantas parasi- tas, ya que viven en las mismas ramas de los arboles en lo mas profundo de los bosques tropicales? Durante un siglo, 17 t GRAN LIBRO DE LAS ORQUIDEAS 18 UNA ORQUIDEA DISTINTA A LAS OTRAS... LA VAINILLA, LA FLOR NEGRA | titxochitl La vainila fue descubierta en los primeras expediciones del historlador y comentarista Francisco Hemdndez a América, en el siglo xv. En México, Ia vainila se utlizaba junto con otros ingtedientes como el cacao ¥ [a pimienfa, pare preparar el chocolat (por el que | ‘emperador azteca Moctezums tenia verdadera pasion), Al parecer, los aztecas debian este descubrimiento a otro pueblo, es totonaes, que vivian donde actuaimente se extiende e| estado de Veracruz, Cortés llev6 la vainila a Esparia y a Europa; mezclada con chocolate, se convirtié en el adyuvante de una bebida «reab, Se atribuyen a esta planta muchas virtudes medicinales (digestivas, aftodisiacas...) y pronto llegora a la formacoped europea, adoptando el estatus de droga esencial, al mismo nivel que eljenglore, Ic pimienta y la canela. Verdadera panacea, entra en la composicion de numerosos remedios y elites. Su aroma y su perfume embrujaran Europa. Un edicts real impone en 1692 un monopolio sobre la venta de vainila que figuraré en el cddex hasta 1949. En 1658 Piso le dio el nombre que convertiia ia planta en especie, a parti de fa palabra vaina, ‘ya que esta planta aromética tiene una céscara 0 vaina. El término sera recogido por muchos botGnicos y misioneros (acre Piumier, Piton ce Toumefort y Linneo) y el género sera definitivamente aprobado por Schwartz en 1799. Sintesis calmante del més allé, el perfume de Ia vainilla ‘A partir del siglo xva la vainilla es transportada para ser cultivada en Europe, pero la sorpresa fue maytiscula cuando los cuitivaciores se dieton cuenta de que los esquejes de la vainilla json estétlies| En efecto, los europeos habion plantado esquejes de vainila en los primeros invetnacieros de Europa, y especialmente un esqueje made en el jardin de les plantos en Ia isla Borbén, Ia actual Reunién, pero no podian hacer que fructificase, Debemos a Edmond Albius, un joven esclavo en la plantacion, el secrefo de la fecundacién manus de Ia vainilla, ya que Gnicaments Ia abela melipona (sin aquilén), que solo vive en América, jouede fecundarla naturaimente! Las onguideas to Cypripedium, Cattleya, Dendrobium, Van- da, etc, fueron importadas a Europa. Es- tas flores tuvieron un éxito fulminante: etan tatas y, por tanto, muy apreciadas y su cultivo eta dificil, Mejor adn: eran enigmaticas. Europa no se pudo resistir a las «hijas del aire». Decenas de miles de libras esterlinas por una tinica flor... Este era el precio de esas «hijas del aire». Algunas zonas del planeta se convirtie- ron en «fabricas de orquideas», provo- cando la desaparicién definitiva de algu- nas especies. Las orquideas eran simbolo de lujoy se prendian en los vestidos de las mujeres durante los bailes y recepciones: facinaron a los exropeos que babian partido a la conguisa de nuevos numdos. La Epidendrum fue wna de ls primeras orqutdeas que flrecis en los tardines de Kew, en Inglaterra, a partr de finales del siglo Xt «Vimos en un baile a una dama que habia adornado sus cabellos con un re- millete de Phalaenopsis amabilis, y todo el mundo coineidié en admirar el extremo buen gusto de ese peinado. La fina cris- talizacion de las flores brillaba bajo la luz y parecia salpicada de diamantes; las flo- res se mantuivieron frescas durante toda la veladal»’ Cajas enteras de esas flores «poco co- munes» fueron llevadas a Europa y los horticultores s6lo pensaban en una cosa: 7. Lindenia, compilacion del siglo xx, de la tesis de . Besnchard, op. cit PEQUENA ¥ GRAN HIST enaclimatarlas. Se construyeron grandes jaulas de cristal, los invernaderos, pero las técnicas eran todavia vacilantes. No se entendia bien el cultivo de las orqui- deas; los invernaderos estaban sobreca- lentados y eran demasiado oscuros: las orquideas se ahogaban Sin embargo, la pasién que provoca- ban esas flores era més fuerte que todo «80, y asi comenz6 entonces un verdade- ro genocidio vegetal. Cazadores de orquideas Cortaremos, penetraremos de nuevo en el sertdo en busca de esas curiosas flores que sdlo se abren enlos encendidos aires vibrantes, esos setes hibridos,intermediarios entre las plantas y los animales, esas flores cuyas fantasticas formas siglo x0¢ (omerna golpean mis suefios febriles, que estrechan mi garganta con pérfidas hojas de serpiente, y envenenan con sus efluvies el aire que respiro, esas terribles flores de una tierra podrida... iAh, pero qué bellas son! Me posee de nuevo el ansia de encontrar més, mas horrorosas y més maravillosamente formadas Est Lohndorff, Cazador de orquideas, Editions Hoebeke, 1995 A pesar de los esfuerzos mantenidos en los viveros, el cultivo de orquideas pare: cia imposible: la multiplicacién por siem- bra era muy aleatoria y, para responder a la demanda creciente, era preciso impor: tar nuevas plantas sin cesar. La casa Witch fue la primera que re- cluts a cazadores de orquideas enviados a todos los rincones del mundo para re: coger flores, que se vendian a precio de GRAN LIBRO DE LAS ORQUIDEAS >t Alser parte integrante de mitos, usos y costumes, las orquideas levan en sus flores mitos universales. Blume, botanico, contard con estos palabras la leyenda de Ia orquidea Pefola (nombre latino: Macodes pefola) de la isla de Java: sn tiempos muy temotos, apareci6 en la costa de Java una divinidad cel Olimpo indio que se mostté alos hombres vestida con un chal de un telido admirable; desconocida y persequida por los habitantes de esos parajes la dlvinidad desapareci6, refugiéndose en jos bosques inaccesibies de las montanas, pero al alejarse dejé ver entre las rocas su chal celeste, que se convirié en el Daun petola. »Cuando Ic noticia de la aparicién de esta planta milagrosa empez6 a extenderse, los hobitantes de las mesetas se dirigieron en mosa hacia los montarias: en presencia de tal maravilia, fueron presa de la codicia y algunos. con mano saerilega, intentaron llevarsela a su EL CHAL DIVINO: DAUN PETOLA Pals, tras haber destruido hasta la tiltima planta que no habian podido ilevarse de las montanes. Este sactilegio fue castigado; en efecto, a pesar de todos los esfuerzos por Conservar el precioso botin: la diving planta se marchite y acabé por desaparecer. Pero la protecci6n de la diviniclad hizo revivirlos gérmenes que habian permanecido enire los montanesess. oro. Muchos de ellos lo pagaron con su vida. La aventura era peligrosa, sembra- da de trampas, y los comanditarios eran muy exigentes. iNo se podia regresar a Europa sin flores! (Una orquidea podia aleanzar perfectamente el valor actual ide 8.000 euros!) ‘Ademés, los cazadores de orquideas carecian a menudo de esertipulos y diez maron bosques enteros para complacer a los aristécratas. Con un gran espiritu competitivo, los cazadores destru‘an las orquideas que no podian recoger para perjudicar a sus competidores. Empez6 entonces un verdadero geno- cidio vegetal. Las flores se conservaban mal, se transportaban por miles en pésimas con- diciones y las pérdidas eran inmensas. En ese gran frenesi, se descubrieron, no obstante, mas de diez mil especies. Algu- nas desaparecieron definitivamente de nuestro patrimonio vegetal. Un afortunado amante de las plantas exéticas, William Cattley, recibié un dia un lote de Brasil, enviado por Swainson Intrigado por las hojas secas que servian de envoltorio a los cactus, supuso que eran esquejes de orquideas... uso la planta en una maceta y al cabo de algunos meses obtuvo una enorme flor de color lavanda moteada de pirpu- ra, Fabia nacido la Cattleya... y desenca- denaria una pasién sin igual entre los aristéctatas de todos los paises europeos En 1821, el botanico Lindley describié la orquidea de W Cattley: Cattleya labia- za, Por otra parte, fue él también quien intent clasificar las orquideas exéticas: se describieron asi cerca de dos mil espe- cies en el Genera and Species of Orchida- ceous. Su obra mas célebre sigue siendo el Sertum orchidacée, ilustrado por miss Drake, En cuanto a la Horticultural So- ciety, reuni6 en los invernaderos més de 180 especies exéticas. LA BOGA HORTICOLA En el siglo xa la horticuttura estaba de mada y los viveros tenian un gran éxito y crecian cerca de aristécratas y burgueses, Por fin, jas plantas exaticas salian de los jardiines exdticos pero a qué precio! En Fron; fue Joséphine de Beauhamais quien introdujo la moda de! cultive de las orquideas, Enllos jardines de la Malmaison, desoaba con fervor rectear los paraisos perdidos de sus Antillas natales. Bonpland se convertifia en uno de sus suministradores y jardineros. Le hasia llegar hasta su muerte Cajas de muestras de Arboles frutales, cactus, orquidecs. h ond GRAN LIBRO DE LAS ORQUIDEAS aaa venenosas. xr de la neurosis de «fin de siglo» ‘Aunque las orquideas se prenden en los ojales de los trajes masculinos, en los to- cados femeninos 0 en la solapa, exquisi- tas, perfumadas, deliciosas, multicolores, constituyen una encarnacién febril del sexo femenino, en lo mas vertiginoso y organico, dispensador de placeres casi maléficos. Mitad planta y mitad mujer, la orqui- dea se convierte en el imaginario colecti- vo ¢ incluso en el literario de finales del siglo XIX en una maravillosa «criatura» que inspira a escritores como Huysmans, Maupassant o Zola una embriaguez 0 una tentacién mérbida que nunca esta muy alejada del amor. «Me gustan las flores, no como flores, sino como seres materiales y deliciosos; me paso los dias y las noches en los in- vernaderos donde las escondo, al igual que a las mujeres de los harenes »Y me quedo alli, junto a ella, ardien- te, febril, atormentado, sabiendo de su proxima muerte, contemplando cémo se marchita mientras la poseo, aspiro y bebo su corta vida con una suprema ca- tricia». Maupassant, «Un caso de divorcio», en Contes et nouvelles fie LA BOTANICA DE LA ORQUIDEA La clasificacién originaria de la flor El final del bulbo afrodisiaco Paulatinamente, el ser humano fue en- tendiendo el funcionamiento de las or- quideas. Las antiguas creencias fueron dificiles de erradicar y, hasta el final de la Edad Media, las orquideas justificaban su existencia con mucho misticismo, bru- jeria y magia: en realidad, no se produce ruptura entre la Antigtiedad y la Edad Media en lo que respecta a la botanica de la orquidea. Paracelso (1493-1541), al inventar la medicina espagirica®, utiliza atin los prin- cipios definidos en la Antigtiedad: selec- ciona plantas gracias a las relaciones ana- logicas instauradas entre las partes del cuerpo y las del mundo vegetal. Tragus y mas tarde Kircher desarrollaron a su vez enel siglo xvit la no menos famosa teoria dela panspermia, en la que se afirma que la materia inerte (la tierra, por ejemplo) puede ser fecundada por la simiente ani- mal: asi pues, las orquideas serian puros productos panspérmicos. El botanico John Parkinson, inspirandose en los es- tudios de Tragus, confirmaré la tesis por Ja que la simiente de! macho cabrio (por 8, Medicina espagitica: medicina que utiliza la quin- taesencia de las plantas, el principio activo extraido por destilacidn de la materia inerte analogia con la forma de los bulbos) fe- cund6 la tierra y origin la Himantoglos- sum bircinum (Sprengel). El nacimiento de Ia botanica El reino vegetal, y antes de este las orqui- deas, se emancipara progresivamente de las creencias misticas y sobrenaturales gra- cias a los trabajos de algunos cientificos. Asi, Leonhart Fuchs de Tubingen, autor de una de las primeras historias na- turales (Historia stirpium, 1551), fue q 24s el primero en establecer una clasific cion de las plantas descubiertas por un species, es decir, un conjunto de rasgos ca- racteristicos, entre los que se describen: — la forma de la planta; — su habin — el periodo de floracién; — los diferentes nombres que la designan; — el temperamento de la planta (princi. pios galénicos del calor, frio, hume- dad y sequia); — sus propiedades. La preocupacién de esos nuevos «in- vestigadores» es, ante todo, identificar nuevas plantas apoyando sus descripcio- nes en un tnico motivo de observacié1 estd naciendo la botanica. Estos nuevos sabios también deseaban identificar las nuevas variedades de plantas: Jean Bauhin 30__ Phalaenopsis Mystik Goldon Leopard ‘Cheetah’ Floricone (© Bloe Zygopetalum Arthur elle” (vemaderos del Senado) distingui6 de ese modo 40 especies de Or- tis de las que utilizamos, todavia hoy, los nombres (Orchis militaris, Dactylorbiza vi- ridis, Himmantoglossum bircinum). Piton de ‘Tournefort describié la familia de las orquideas occidentales en 6 géneros: Or- cis, Helleborine, Calceolus, Limodorum, Ophrs, Nidus-Avis, Se pasa pagina sobre las cteencias medievales, Las aproximacio- nes boténicas se concentran en la repro- duccién sexual de las plantas, tema hasta entonces apartado por los taxonomists. Konrad Sprengel fue quien describié la es- tructura de dos orquideas europeas, una Epicpactis y una Listera, y demostr6 el pa- pelindispensable de los insectos para libe- rat las masas polinicas. G. E. Rumpf (1627-1702) describ les primeras orquideas del sudeste asi we. LA BOTANICA DE La onQUIDEA coy fue uno de los primeros en afirmar la presencia de un polen en las flores de las orquideas. Van Rheede (1636-1691) re- conocié, a su vez, una quincena de or- quideas indias... El insecto, la orquidea y el hongo: una historia... de amor A pesar de los esfuerzos de investigacion, las orquideas encerraban un enigma, y asi se mantuvieron los esfuerzos de los botanicos en efervescencia durante va- tios siglos. En efecto, écomo se reprodu- cen estas flores? En el siglo xvn, el aleman Camerarius, director del Jardin Botanico, descubrié el secreto de la reproduccién de estas flo- res: la flor es un érgano sexual en el que algunas partes son masculinas y otras fe- meninas. Y sin la intervenci6n de insec- tos, la polinizacién no es posible... Por fin: el secreto de las orquideas ya esta casi al descubierto, En 1862, tres afios después de la pu- blicacion de Del origen de las especies, Darwin publicé un optisculo extraordi- nario que tendrfa mucha resonancia: So- bre la fecundacién cruzada de las orqui- deas, extraido de sus observaciones en el campo de Kent y de las orquideas tropi- cales, Darwin establecié la interdepen- dencia de las especies vegetales y ani- males Sin embargo, fueron los trabajos de Noél Bernard los que pusieron fin a la opacidad que envolvia el misterio de la germinacion de las orquideas. MORFOLOGIA DE LA FLOR DE ORQUIDEA En las orquideas monopodials, fas flores nacen en la axila de las hojes. En las orquideas con rizoma, las inflorescencias nacen en la base de los pseudobulbos © alo largo de! tallo a la aura de los nucios, Sutalia puede ser muy variable: desde el tamano de una cabeza de aguja amas de 45 cm. La flor es Unica 0 en espiga: Ia espiga puede tener varias formas: clindrica, esférica, piramidal © spiral, Lo flor zigomorta (simétrica respecto a un plano), est compuesta por seis partes: + tres s6paios, que protegen los érganos reproductores del viento: + tres pétaios: dos laterales e idnticos: el tercero se distingue de los otos dos por au forma y su colot que confieren a la orquidea toda su originalidad. Se llama labelo y puede ser entero 0 estar dividido por escotaduras y moteado con manchas, jaspecds o atigrados muy ‘espectaculares. con formas que recuerdan a les insectos, COMO INTERVIENE EL INSECTO EN LA POLINIZACION Elinsecto lina la flor se sittic sobre el latbelo, que es unc auténticg pista de aterrizaje, Atraido por el olor del nectar situado en la trompa del espolon, se pega ala antera y los polinios se egan sobre su cabeza, Cuando el insecio levanta el vuelo de nuevo. se lleva los polinios, El Insecto ira @ continuaci6n a libar otra orquidea, y gracias ala albsaluta perfeccion de la naturaleza, los pedicelos de los polinios, todavia fjacios en su cabeza, se mueven: Ios polinios se situardn sobre 6! estigma, el recepptdculo femenino, Después, €! polen entra en ia cavidad estigmatica, el pedunculo se agranda. EI frute 2s una ‘capsule que tarda bastante en madurar (de 12.4 18 meses). Esta capsula, dahiscente por seis Rendidures. lilbera entonces en su madurez un numero extraordinario de semillas. Contrarlamente a las ideas recibidas y a los vanas intentos de los horticultores del siglo xx hoy en dio se sabe que ls semilas pueden germinar. 0s invernaderos Leconfle Los trabajos de Noél Bernard: simbiosis y virulencia Catedratico de Cienc 1898, alumno de la Escuela Normal Su: perior, Noel Bernard prepara, bajo la direccién del sis sobre las orquideas, que debe termi nar después del servicio militar, Una afortunada casualidad le permite, no obstante, realizar uno de los descub: mientos mas importantes para la orqui deologia: en el transcurso de un paseo no muy lejos de la caserna en la que esta destinado, descubre varios centenares de semillas de Neotia nidus avis en ger- minacién, Recogera varias muestras y asi descubrira el proceso de germina- cién y simbiosis de los que Link habia establecido Ia primera base (en efecto, descubrié la existencia de grupos en la corteza de tubérculos que no pertene- cian a la planta madre). Lo que difiere en las orquideas de las demas plantas es la constante presencia de hongos en sus raices. Las orquideas tienen semillas muy pequefias (scobifor- ‘mes, que cn griego significa «serrin>), y cada una contiene un germen. Noél Bernard examiné esas semillas en el microscopio y constaté que no ha- bia ningun hongo. No obstante, en el es- tadio de plantulas, ya estén invadidas por hongos. Asi pues, planteé la hipétesis de que las semillas de orquideas eran invadidas por el hongo cuando germinaban en el suelo. Concluyendo que ninguna orquidea escapa a este fenémeno, dedujo que el en- cuentro entre el hongo y la semilla era ne- cesatio para el desarrollo de las orquideas. La BOTANICA DE LA oROUID AW 2 Entonces aisl6 los grupos de hongos después de extraerlos de las células de orquideas y las cultive en medio estéril sobre una gelatina (nutriente) y paralela- mente llevé a cabo varios experimentos: — un cultivo de semillas sin hongos: cons- tat6 que las semillas no getminaban, los embriones verdecian y se estancaban durante varios meses sin evolucién; — un cultivo de semillas con un grupo de hongos: la semilla de orquidea se de- sarrollaba muy fécilmente y con regu- laridad. También observé que el hongo hacia germinar indiferentemente semillas de Cypripedium o de Cattleya. ‘Mostré sus descubrimientos a los hor- ticultores, pero no le prestaron atencién. Al menos pudo hacer germinar semi- llas de Odontoglossum, Phalaenopsis 0 Vanda, Estas orquideas son micorrizadas por un hongo especifico; procedis del mismo modo que en sus primeros expe- rimentos y el éxito fue total. CONJUNTOS DE HONGOS SEGUN N. BERNARD GRAN LIBRO DE LAS OROUIDEAS ™Y iF Més tarde surgirian las dudas, cuando FF algunos horticultores desesperados al no poder hacer germinar sus semillas recu- j trieron a él. Este les envid varias cepas de hongos que le habjan servido durante sus primeros experimentos de micorriza, Sin embargo... el fracaso fue sonora N. Benard concluyé que las cepas de hongos en cultivo estaban agotadas Hizo referencia a los estudios de Pas- teur sobre la virulencia de algunos micro- bios, emitié la hipétesis de que la germi- nacién de las semillas resultaba de una vinilencia del hongo en presencia de una se- milla de orquidea. Dos afios de investiga- cién y experiencia confirmaron su hipé- tesis. Asi es como procedié: 44, — realizé una primera siembra con pe- orones de hongos inactivos; las semi- Ilas no germinaron, pero los embrio- nes fueron micorrizados; — de ese tubo de ensayo recogié peloto: nes que, en contacto con la semilla, adquirfan una nueva virulencia, y constato que cuanto més largo habia Gracias alos trabajos de No#l Bernard y después alos descubrim: 2 de Georges Morel sobre el meristemo, abora ya es posible conseguir que as onde crezcan en masa... par placer de los amantes de todo el mundo (ncernaderas del Senado) sido el contacto entre el hongo y la planta, més fuerte era la virulencia; — concluyé también, para responder a las inquietudes de los horticultores, que si las semillas fracasaban en el in- vernadero no era por la ausencia de hongos, sino por la ausencia 0 ate- nuacién de su virulencia. Knudson, después de Noél Bernart, se interesé por esta via simbiética y logré sustituir la inoculacién del hongo por in- cubacién de semillas de orquideas en una solucion muy rica en azticares, gelatina, féculas y levaduras. No fue hasta esta eclosion cuando puso las plantulas en 38 contacto con Rhizoctonia, el hongo, luego Jos planté con un sustrato compuesto por una mezcla de polipodos y Sphagnum, lo que le permitié obtener muchas semillas. Cultivo por meristemo En los afios cincuenta, el descubrimiento, de Georges Morel provoce una revolu- cién en el mundo de la orquideofilia. En efecto, realiz6 una serie de experimentos a partir del meristemo de las orquideas, es decir, un montén de células indiferen- ciadas recogidas tanto a la altura del Api- ce como de las raices. Este meristemo puesto en una sustancia nutritiva se de- sartolla con la misma identidad que toda la planta: son los clones vegetales....; gra- cias a este procedimiento de multiplica cién por meristemo se pudo desarrollar considerablemente el cultivo en masa de orquideas destinadas a la venta. El microesqueje fue experimentado en las orquideas por Vacherot y Lecoutle en al- gunas variedades hibridas de Cattleya (Poti nara), absolutamente idénticas al original. Esta técnica ha permitido salvar espe- cies en vias de desaparicion (Epidendram ilense, Catasetum imperial), Lemboglossum cordatum (invernaderos del Senado) La orquidea, una planta en todo el mundo Las orquideas son monocotiledéneas, es decis, sus semillas sélo poseen una tinica oja en estado embrionario que se llama cotiledén, y se organizan segtin una es- tructura temaria, Vivaces, las orquideas son plantas con capacidad de adaptacién climatica, ya que se han desarrollado en toda la super: ficie del plancta, salvo en las zonas pola- Pychopsis papilio krameria res, aunque crecen sobre todo en las zona tropicales de América, Asia y Africa (un 90 % de las orquideas crece, en efec- to, en zonas tropicales o subtropicales) Sus semillas extremadamente finas y reunidas por cientos de miles en una sola acapsula» son levadas por el viento, a veces depositadas en las ramas de los ar- boles, y muestran una capacidad de adaptacion ejemplar. Asi pues, se puede esbozar un inicio de clasificacién segiin el lugar donde se desatrollan Las orquideas epifitas En las zonas tropicales y subtropicales, los bosques son, a menudo, muy densos mbrios para que las orquideas pue- dan desarrollarse en el mismo suelo, alli donde crecen habitualmente las plantas. Las epifitas eligieron asi su domicilio en los tboles (y por eso durante un tiempo se crey6 que eran plantas pardsitas) para estar mas cetca del cielo... y de la luz. Se alimentan tinicamente de lo que las ro- dea; detritus acumulados en las ramas, excrementos de pajaros, y son regadas por las aguas de Hluvia, ya que el arbol constituye s6lo un soporte. Las orqui- deas no son las tinicas que crecen de este modo (las bromeliceas y los muspos s guen la misma adaptacién). Por ello se abren particularmente bien en las pluri- silvas ylos bosques nubosos, donde la hi- grometria es elevada. En cambio, pue- den crecer a altitudes y a temperaturas muy variables. El aficionado deberd iempre informarse mucho sobre el bio- topo original de la orquidea que ha ad- quitido para recrear lo mejor posible las condiciones climaticas de la planta. LA ESTRUCTURA DE LAS ORQUIDEAS EPIETTAS Estas orquideas crecen en los troncos, las ramas 0 en la copa de los drboles que les bumedaa del sirven de apoyo, mas cerca de la luz y el aire. Las raices son aéreas y absorben la humedad del aire (solo grandes epifitas como la Granmatophyllum speciosum, pueden poner en peligro el arbol en el que crecen, ya que, al alcanzar los 5 m de largo, rodean literalmente con suis raices el tronco del arbol), Las flores de las or- quideas epifitas son muy diversificadas y sorprendentes, tanto por su aspecto como por sus colore Rigoma de onguideas de nacimiento simpodial Cada una de ellas, para asegurar su propia supervivencia, se ha adaptado para ser polinizada por un solo insecto Por regla general, estas flores crecen en las zonas suficientemente caidas y ht- medas para que su sistema radicular no se hicle Las orquideas tropicales cultivadas en invernadero o en nuestros climas son la mayoria de las veces orquideas epifitas. Su crecimiento esta organizado en dos principales sistemas # Orquideas de crecimiento simpodial — las flores se desarrollan a partir de un tallo horizontal y rastrero que s¢ lla- ma rizoma; la mayoria producen pseudobulbos En realidad, no son bulbos, sino tallos ‘CRECIMIENTO DE UNA ORQUIDEA SIMPODIAL hinchados cuy agua Un pseudobulbo vive 5 0 6 afios. Su tamafio y sus formas son muy vatiables segiin la especie de orqui- dea (cénica, alargada, redonda, aca nalada), Son unas auténticas reservas nutritivas para las hojas y las raices y sirven como punto de salida de las hojas. Cuando no tienen hojas, se con- vierten en un érgano de reserva y ali- mentan a los jévenes pseudobulbos funcién es almacenar diales: Paphtopedilum, Dendrobium, Stan hopea que toman el «relevo» de los viejos cuando estos mueren; — las hojas son muy variadas en sus for- mas (largas y estrechas, més 0 menos redondas) y mimero; las raices pueden ser fibrosas, finas 0 carnosas: se agrupan con el nombre de cabellera, conjunto de raices, y al- anzan hasta 1 m de largo. Algunos ejemplos de orquideas simpo- nilen SENTENCE CRSU ER # Orquideas de crecimiento monopodial MONOPODIAL — las hojas se desarrollan alternativa- mente en el tallo que crece vertical; — las flores proceden de las raices aéreas 7 Jas cuales crecen en la axila de las hojas. COMO VIVEN EN ESTADO NATURAL? Estas orquideas adoptan el modo de vida de los arboles en los que se instalan: al principio de la estacién seca sus raices dejan de crecer y se cubren con un velo blanco (el velamen) que las protegerd de la deshidratacién y de eventuales dafios. Resisten también en la estacion seca, gra- cias al agua contenida en los pseudobul- Se observa perfectamente el velamten, us velo blanco que cube las races aéreas para protegertas dela deshidratactén (inversade bos. Luego llega la estacién de las lluvias: nuevos brotes, nuevas raices que abso ben la humedad para llenar de nuevo los pseudobulbos. La vida de las orquideas puede prolongarse asi decenas y decenas de afios, mientras su anfitrién siga con vida, Las orquideas litofitas Son las orquideas que crecen y se desa- rrollan en suelos rocosos y en condiciones climaticas a menudo extremas (acantila- dos cretaceos al borde del mar); sus rai- ces se desarrollan a menudo bajo el mus- go que cubre las rocas que colonizan. ‘Su comportamiento es bastante pare- cido al de las orquideas epifitas; también necesitan tener una estaci6n de lluvias y una higrometria mas bien importantes. Presentan, no obstante, una maravillosa resistencia a la sequia desarrollando un follaje mas espeso. Algunas orquideas lit6fitas tienen pre- dileccién por las rocas calcareas (algunas Paphiopedilum, por ejemplo). Las orquideas terrestres Las orquideas terrestres también estan ampliamente repartidas por el planeta, desde el desierto australiano hasta casi el circulo polar; la mas boreal es la Calypso bulbosa (71° de latitud norte). En Espa- fia existen mds de un centenar, Se trata también de plantas vivaces. Su sistema radicular es subterraneo y se desarrolla en forma de tubéreulo, de ri- zoma 0 de pseudobulbo, o incluso en forma de raices mas finas. Conocen un ‘Thunia marshalliana (© Overseas / Farabulafoto) LA BOTANICA DE LA ORQUIDEA petiodo de latencia durante el que todos los drganos aéreos desaparecen, y con- servan slo bajo tierra los bulbos, autén- ticos érganos de reserva. En el caso de una orquidea con bulbos, uno de estos se «recarga> por completo durante el periodo de vegetacién. Asi, se puede obsetvar que, en los dos bulbos, uno ya estara marchito y seco, mientras que el otro, liso y relleno, est repleto de sustancias nutritivas. Segtin las especies, Ia forma de estos bulbos sera muy distin- ta: ovoide, globulosa, digital. . Un tallo, anual en las orquideas euro- peas, prolonga los tubérculos subterra- neos, en realidad el pediinculo que co- necta la espiga floral con la planta enramada, Puede ser simple, cilindrica 0 més angulosa, Las orquideas terrestres son imprevisi- bles en su floracién. Ausentes durante muchos afios, pueden cubrir campos en- teros sin aviso previo, y no volver a resur- gir hasta al cabo de unos afios. Crecen en la tierra (humus de los bos- ques, prados); algunas de ellas tienen in- cluso la osadia de crecer y florecer ibajo tierra, como las Rhizantella australianas! Las orquideas sapréfitas Contrariamente a sus hermanas més «aéreas», algunas orquideas se han adap- tado a la oscuridad de los bosques, ali- mentandose de materia orginica en d composicién, asimilando los nutrientes que necesitan gracias a la presencia de los multiples hongos con los que viven, Estos son algunos ejemplos de orqut- deas saprofitas: Neotia nidus-avi, Lino- dorum abortivum 7 EL CULTIVO DE LA ORQUIDEA Cuando dos estén unidos en la intimidad de su corazén, rompen incluso la dureza del hierra y del bronce; y cuando dos seres se centienden totalmente en la intimidad de su corazén, sus palabras son dulces y fuertes como el perfume d Extraido del I Ching el Libro de las mutaciones Phalaenopsis (imvemadercs Lecoufle) Dos mil afios antes de nuestra era, los chinos y los japoneses ya cultivaban las orquideas por la belleza de sus flores. Aunque todas las plantas tienen un sim- bolismo muy fuerte en el Extremo Oriente, las orquideas expresan el refina- miento, la amistad, la perfecci6n, la no- bleza, la feminidad y la elegancia, Enel primer manuscrito dedicado por completo a la boténica, escrito por Ki- Han durante la dinastia de los Chin (290-307 d. de C.), se describen dos or- quideas: la Cymbidium ensifolium y la Dendrobium monoliforme. El Cymbidium sera el centro de las re- presentaciones en las obras de arte del Extremo Oriente. Enel Extremo Oriente, la org ion, Abajo, Bletilla 'Yakobara’ (inermaderos de! Sen dea es venerada desde hace sigos. Lleva intrinsecos los simbo Relacionadas con los seres humanos por tin impulso espiritual, las orquideas se han llenado de un valor simbolico muy fuerte, Lo Chi, gobernador en la dinastia Song, escribio: «Trato los lan (orquidea en chino) como mis més virtuosos y dignos amigos. Por la mafiana, recibo el favor de sus per inamiento y de la perfec- EL ARTE FLORAL DEL RYU KUBOTA: UN ENCUENTRO ENTRE ASIA Y OCCIDENTE Ex cut Ryu Kubota abandoné Japén en 1991 para aprender el arte floral occidentol. Antes de instalarse y abrir su finda en Francia, viaié por Europe haciendo escala especialmente en ‘Alemania, Béigica y luego en los Paises Bajos. Al principio, este entusiasta de las orquideas no deseaba quedarse en Europa: Un poco por casualided, en diciembre de 1994 encontré un local en Francia, «por un precio diez veces inferior al que habria encontrado en Japon», asegura. Habic edauitido unc dilatada experiencia trabajando en muchas florsterias japonesas. «A diferencia de Europa, en Japon sélo se juzga a la gente por su experiencia praciica, En mi pais, los diplomas no siven para nadia». ‘Su deseo: fusionar las tradiciones artisticas japonesas con todo lo que ha aprendido en su etiplo occidental. Esteta, a Ryu Kubota le gusta cambiar constantemente de estilo, segtin las estaciones que ‘armonizan la vida de sus musos. las orquideds, ‘sAlgunos esillos siguen a pesar de todo. Pero, en general, cambio la cas totalidad de mis composiciones cuatro veces al afio», asegura, 5ise pudiera caracterzar el estilo de este arte orquideal, seria una mezcia entre las principales figuras japonesas y los toques mas occidentales y mas contemeorénecs. Premiado en muchos concursos arlisicos regionals en Japan, hay en dia participa como jurado en muchos actos. fumes. Por la noche, disfruto de la belle- za de sus flores. »Con mi libro y mi vino, leemos y be- bemos juntos». En Japon, la orquidea, 0 ran, era el sim- bolo de la virtud, de la simplicidad, del encanto, de la gracia femenina acabada. ‘También era costumbre que cada clase social estableciera una preferencia por un género: los comerciantes y las clases sociales acomodadas mostraban as{ una inclinacion particular por las Cymsbidizen, Ia aristocracia imperial se reconocia en la Dendrobium monoliforme (sekkoku en ja- ponés) que, traducido literalmente, sig- nifica «la orquidea que hace la vida de Jos hombres més larga»... Los samurdis, sefiores feudales, no du- daban en desplazarse con sus orquideas durante sus periplos.. >t: Os Composiciones florales de Ryu Kubota A continuacién, presentamos dos composiciones florales. En general, este tipo de com- posiciones aguanta en perfectas condiciones unas dos semanas. COMPOSICION 1 4, Se coloca tna grin baja de Philomonstera 5-6, El zoque final, una rama de Phalaenopsis 5 hat ae COMPOSICION 2 mbidium La correcta adquisicién de una orquidea Las orquideas ya no son plantas raras. Muchas floristerias 0 grandes superficies las ofrecen a todos los precios, y hoy en dia todo el mundo puede adquirir una Phalaenopsis, una Cymbidiuon 0 una Paphio, 0 incluso, por qué no, una orquidea més rara. Ademds de los modelos mas co rrientes propuestos en las floristerias, puede conseguir especimenes mucho més interesantes en tiendas especializa- das (véase el capitulo fon * Origen: América central, Brasil. * Deseripeién: este género cuenta con 65 orquideas epifitas que crecen en las montafias y bosques tropicales de Améri- ca, a.una altitud que varia entre los 600 y Jos 1.800 m. En su medio natural reciben una luz muy viva por la mafana, seguida de nubes durante el dia. Las hojas de los Arboles sobre las que crecen las prote- gen, con todo, de los rayos de sol. Son Se ban obtenido numerosos hibrides a partir plantas perennifolias que producen pseudobulbos (de 0 a 90 cm de altura) a To largo de un tizoma. Estas plantas conocen periodos de se- quia durante los que desarrollan drganos de reserva, llamados bulbos 0 pscudo- bulbos, y raices esponjosas que retienen el rocio. Sus flores, que nacen al nivel del pseudobulbo, son grandes, perfumad: con colores a menudo extraordinarios: su longevidad es de 2 semanas. 2, Agui, an Brasseolacliocattleya (dnveraderos det Senado) Cattleya gaskelliana > Alsace alba’ > C. lod La catleya posee miles de hibridos e hibridos intergenéricos (cruzados con las Laeliocattleya, Epidendrum, Sophroni tis...): Brasseocattleya, Sopbrolaeliocattle ya (0 Potinara), etc. Se distinguen dos grandes grupos de catleya: — las unifoliadas, en las que cada tallo lleva una sola hoja (Catéleya labiata) y que estén dotadas de 2 a 3 flores de pétalos muy anchos, La floracion tie~ ne lugar en otofio o en verano; — las bifoliadas, en las que cada tallo lleva dos hojas. Las flores surgen en racimo y son muy numerosas (una veintena en algunas esp ces son perfumadas es) ya ve- * Cultiv de catleya son blancas, espesas y rigidas. En verano, las flores pueden cultivarse en el exterior Cuando estan sanas, |: raices — Temperatura: en invierno, temperatura minima de 13 °C y maxima de 30°C Sil dfa est4 nublado, no es conve. niente que la temperatura supere los 20°C; aunque en algunos momentos puede llegar a los 25 °C si brilla el sol Cattleya Auvergne’ x Patterson” x bicolor [WEL onan Lipro pe Las oRQUIDEAS. Sila ventilacién y la humedad son muy fuertes, puede soportar perfec- tamente temperaturas elevadas: de 18 a 28 °C durante el dia, y de 13 a 16°C por la noche. — Lva: la luminosidad necesaria es de 20.000 a 30.000 lux, correspondiente ala luminosidad en un piso expuesto completamente al sur, Sil sol es demasiado fuerte, seria necesario sombrear con la ayuda de una tela o similar, En efecto, la luz tiene que ser importante, pero debe evitarse el sol directo, salvo por la Cattleya aurantiaca, una mugrifica calleva de flores navanjas mafiana, ¢ intentar respetar la insola- cin del biotopo de la catleya (como. e cerca del ecuador, 12 horas de dfay 12 horas de noche). Riego: debe regarse con agua no cal- crea. Las raices deben secarse y re garse en su justa medida, ya que la catleya es extremadamente sensible a que se pudran las raices entre cada riego; es preciso respetar el ciclo na- tural de la catleya, la cual, en su bio- topo natural, conoce fases casi de se- quia. Si se tiega demasiado, las raices se vuelven negras y se pudren. En 2 CUANDO DEBE TRASPLANTARSE? * Cuando las races se desarrolien en los bordes externos de la maceta. + Cuando el sustrato demasiado viejo se descompanga, ya que el enemigo numero uno de la planta es el exceso de humedad. Cuidado, no efectiie el trasplante a una maceta demasiado grande. Ademés, trabaje con herramientas esterlizadas: para ello, escoja macetas de pldstico en lugar de macetas de barro. principio, un riego semanal es sufi- ciente. — Higrometréa: el indice de humedad debe ser del 70 al 80% durante todo el afio. Cuando haga mucho calor, realice pulverizaciones diarias y matinales — Sustrato y trasplante: durante mucho tiempo se ha utilizado el esfagno y la raiz. de helecho como sustrato. Hoy en dia se da prioridad a la corteza de FICHAS DE Las variepaves Wl r coniferas (pino, abeto) mas poliesti- reno y espuma de poliuretano. No obstante, es preciso saber que una mezcla de cortezas de pino y arcilla expandida favorece perfectamente el drenaje del agua. Para dividir la plan- ta, se cogen tres pseudobulbos més un nuevo brote. — Abono: en su fase de crecimiento, es preciso regar mucho y abonar a me- nudo. Si no, abone dos veces al mes con un abono «30/10/10», que debe set previo y seguit a un buen lavado de las raices. Pardsitos: esta planta es sensible a la cochinilla (cochinilla algodonosa...). VARIEDADES RECOMENDADAS Cattleya aurantiaca (catleya de flores naranjas), Cattleya skinner, Cottieya labiata. 7 COELOGYNE Su nombre procede de las palabras grie- gas kilos, «vacion, y guné, «mujer. * Origen: Sudeste asidtico, Filipinas, Pa- cifico, Indonesia e Himalaya, * Descripcién: se cuentan aproximada- mente 200 especies, que crecen a altitu- des mas o menos elevadas. Los pseudo- bulbos poseen 1 0 2 hojas y un labelo formado por 3 lébulos. Sus flores apare- cen al final del invierno y en primavera * Cultivo: informese bien sobre el bioto: po originario de la Coelogyne que haya es- La Coelogyne cristata, la specie de Coclogyme mis dif cogido, tanto si se trata de tierras en me- seta o de poca altitud, 0 de regiox tafosas y frescas (en ese caso, se cultivar en invernadero frio; para esta especie, de mon: COELOGYNE CRISTATA Es la variedad més aconselable, ya que esta especie es a mds extendidia en nuestros climas, Su labelo est formaco or una cresta y florece en invierno y primavera: necesiia un clima fresco y mucha luz durante el crecimiento. El escapo floral, de 20a 30 cm, evade 3a 9 flares de color blanco nieve. nuestros clea, tiene que cule > £1 GRAN Limro DE Las ORQUIDEAS (COELOGYNE FIMBRIATA Especie originaria del sur de China, que lleva sobre un corto escapo (S cm) flores de labelo adomadi con franjas. Necesita un clima fresco y templade y no tiene periodo de Iatencia. Sus pseudobulbos son eliptices. bera evitarse el riego después del creci- miento de nuevos bulbos) Se cultivarén estas plantas principal- mente en cestas colgadas, pero también es posible hacerlo en macetas 0 corcho. — Temperatura: aunque existen en este género algunas especies de inverna- dero célido, templado y fifo, es nece- sario saber que la mayorfa proceden de las regiones del Himalaya. Asi pues, ctecen con temperaturas fres- cas y templadas. — Laz: en general, las Coelogyne no se expondrén al sol directo, sobre todo en verano, Se expondrén, no obstan- te, a la luz en invierno. Ex los pequerios espacios, la Coclogyne ovals, sa planta miniatura, ex muy adecuada Riego: las especies de invernadero c4- lido y templado deberan regarse con regularidad durante todo el afio. Las especies de invernadero frio no se regaran después del crecimien- to de los pseudobulbos; se proceder solo a la pulverizacién de las hojas para evitar que se sequen completa mente. — Higrometria: varia segin las especies, pero lo importante es vigilar que sea constant — Sustrato: para el cultivo en maceta, utilice una mezcla de corteza y de bo. las de arcilla. COELOGYNE SPECIOSA Su nombre viene de speciosus («bello importantes). Especie que posee pseudobulbos alargacos, larges holas y un corto escapo que lleva unas flores bastante grandes con motives marrén y rojo. Cymeipium La Cymbidium, y en especial la Cymbr- dium ensifolium, es una de las primeras orquideas que fue descrita en un trata- do de botanica chino (véase pag. 50) En ese momento eran objeto de predi- leccién por parte de pintores y poctas 4 Cymbidium, una flor muy apreciada en Exireno Orient | . ‘ FICHAS DE_LAS VARIEDADES Se utilizaban como ornamento. Esas plantas se convirtieron en instrumento de belleza para el tocado de las mujeres con los que expresaban elegancia y amor. En el hombre es simbolo de no ble: ‘imvernaderos Lecoufle) * Origen: es originaria del norte de la India, China, Japon, Malasia. * Deseripein: orquideas epifitas que crecen a gran altitud, con un sol y una lu- minosidad maxima durante el dia, y frio cuando el sol se pone (temperaturas cer- canas a los 0 °C). * Cultivo: esta orquidea florece en in- vierno; los escapos florales aparecen al principio del verano. Son plantas peren- nifolias de unos 60 cm de alto, que al- canzan los 90 cm cuando estan floridas. Tienen pseudobulbos muy duros en los que se desarrollan hojas bastante largas. La floracién dura unas 10 semanas aproximadamente. Los pétalos y-sépalos son del mismo tamano, los colores son miltiples (salvo el azul); las flores, bas- tante pequenas (de 5 a 10cm de ancho), son muy numerosas (de 6 a 12) en un lar- go escapo que sale del pseudobulbo; puede tener hasta 6 escapos en una sola floracién. Este género cuenta con nume- rosos hibtidos. — Temperatura: de 10 a 15 °C de dia, y5°C porla noche. Son orquideas que soportan grandes variaciones térmicas. — Riego: si la planta se encuentra en el exterior, deberé ser cuidadoso con el riego; asegirese siempre de que el sustrato esté un poco humedo — Sustrato y trasplanie: trasplante prefe- rentemente en primavera, con un sustrato bien drenado y blando para que las raices se desarrollen hasta el fondo de la maceta. El sustrato debe estar himedo. \VARIEDADES RECOMENDADAS (Cymbidium aiotfottum, » DENDROBIUM Este género comprende mas de 1.600 es pecies y numerosos hibridos * Origen: género repartido en toda Asia, el norte de China, Filipinas, Borneo, Nueva Guinea, Australia y Nueva Zelan- da, y en climas muy variados. * Descripcién: Estas orquideas cuentan con especies litéfitas y especies epifitas. Se caracterizan por la reunion de dos sé- palos latcrales al pie de la columna. Las flores forman tanto un ramo terminal como racimos de 2 0 3 flores repartic en toda la longitud del escapo. Estas orquideas florecen en prima- vera o en verano, Al igual que la multi- Dendrobium nobile, ta onquidea de imvemadero templado. Espacie los riegos cuando se acergue el in contar plicidad de las variedades ( los hibridos), las condiciones de culti- vo varfan enormemente de una flor a otra. Segiin su origen, se pueden agrupar en cinco 0 seis grupos diferentes, de acuer- do con determinadas exigencias de cul- tivo * Cultivo: a) Dendrobium de invernadero célido. Pertenecen a este grupo: D. phalaenop. sis, D. bigeibume, D. superbura. Se pueden cultivar en el exterior desde junio a julio, pero cuidado, el secreto del éxito de su cultivo radica en mantener un indice de humedad elevado. UCUANDO DEBE TRASPLANTARSE? Aproximadamente cada 2 anos, en et momento en que aparezcan los nuevos brotes. — Temperatura: de 18 a 35 °C de dia, y de 15 a 30 °C por la noche. — Réego: regular y abundante durante el crecimiento de los pscudobulbos. Cuando los brotes alcancen su ta- maiio maximo, frene cl riego hasta que aparezcan los tallos florales. Riego muy moderado cuando los pseudobuibos terminen su creci- miento. — Sustrato: wilice una mezcl zas y bolas de arcilla — Abono: no abone durante los perio- dos de reposo. En cambio, cuando aparezcan los nuevos brotes, es con- veniente que abone una vez cada 15 dias con un abono muy rico en fosto- 10 y potasio, la de corte- 4) Grupo de las D. anosmuna, D, findlaya- num, D. parisbit, D. pierardii. Ademas de una temperatura casi tem- plada (aproximadamente 20 °C), es con- veniente que respete el hecho de que ne- cesita un periodo de latencia durante el que los riegos serin muy reducidos. Se trata de especies caducifolias. c) Grupo de las D. denstflorum, D. fim- briatum, D. moschatum, D. thyrsiflorum. Orquideas particularmente recomen- dadas como plantas de balcén. Aprecian un ambiente més bien célido o templa- do (aproximadamente 20 °C) en verano yuna temperatura mds fresca en invier- no. Son perennifolias. Necesitan mucha luz. El cultivo al exterior es posible desde junio a finales de agosto. — Temperatura: de 18 a 35°C de dia, y de 15 a 30 °C por la noche. — Riego: abundante en primavera y en verano. Se deja de regar cuando los bulbos llegan a su madurez, Pero cui- dado, no deben marchitarse d) Grupo de las D. nobile, D. chrysantum, D. wardianum Durante todo el periodo de ctecimien- to, exigen calor durante el dia (de 12 a 25°C), luz, abono y tiego abundante. En cambio, cuando llega el otofio, es preciso reducir los riegos ¢ instalar la planta en una habitacién donde la temperatura se acerque a los 10 °C. Durante todo este periodo, deberd vigilar con regularidad los pseudobulbos, testigos de la latencia de la planta: apenas deben estar arruga- dos, y asf mantener un buen nivel de hu- medad. Los riegos deben reiniciarse cuando aparezcan los capullos florales, procurando que la maceta se seque entre cada riego. — Luz: abundante, pero sin sol directo. — Riego: agua no calcérea. — Higromeiria: indice de humedad del 75 al 80 %, que se mantiene con pul- verizaciones durante el periodo de la- tencia o reposo. — Sustrato y trasplante: mezcla de corte- zas y arcilla — Abono: sin abono durante los petio- dos de latencia, pero, cuando se rei- nicia la vegetacion, es preciso abonar las Dendrobium. RECUERDE Con las especies de hoja caduca, no olvide que debe retirar las hojas muertos para evitar Ia propagacin de eventuales enfermedades, \VARIEDADES RECOMENDADAS. Denaroblum nobile, Dendrobium harveganum, EPIDENDRUM El género Epidendrum fue creado por Linneo en 1753; reunio en él todas las orquideas epifitas. Fue preciso esperar a que se entendicra mejor el modo de vida de estas flores para obtener una clasifica- cién mas rigurosa. Sin embargo, con el término Eptdendrum a menudo se agru- 1. ENcycLia ENCYCLIA COCHLEATA Su labelo en forma de concha laha hecho muy popular. Su floracion, muy larga, puede durar varios meses. Sunombre viene del griego Ayblos, «circulo». * Origen: en la mayoria de los casos, las especies de este género proceden de Centroamérica, México y Florida, y cre- cen en los bosques de altitud. * Deseripeién: se cuentan aproximada- mente 150 especies que se caracterizan por un labelo erguido. Son plantas epifi- tas adaptadas al cultivo en una vivienda con la condicién de que las temperaturas nocturnas sean bastante bajas. Tienen pseudobulbos alargados y brillantes, y hojas que rodean la base del tallo floral. Estas orquideas conocen un periodo de latencia en invierno: la floracién se pro- duce de primavera a verano. ENCYCLIA FRAGANS Variedad muy perfumada, pseudobulbos elipticos o fusiformes, petalos y sépalcs muy delgado, paron las Encyelia y las Epidendrura. En efecto, su modo de crecimiento es lo tni- co que las distingue: las Encyelta crecen a partir de pseudobulbos, mientras que las Epidendrum se desarrollan a partir de los tallos 0 cafas, de tamano muy diverso (ide 15 cm a2 m!). es * Cultivo: — Temperatura: de 16 a 25°C durante el dfa pero debe descender de 13 a 16°C por la noche. — Luz: exposicién a la luz evitando el sol directo, — Higrometria: indice de humedad: del 75 al 80%, Se recomiendan las pulve- tizaciones. — Sustrato: mezela de corteza de pino y bolas de arcilla. — Abono: desaconsejado en periodo de latencia. Durante la formacién de los. pseudobulbos, utilice un abono rico en nitrogeno cada 15 dias, y luego 0 en fosforo para activar y facilitar la floracién. ENCYCLIA VITELLINA De un color amarillo naranja vivo, esta especie florece en verano y en otano. ENCYCLIA CITRINA Especie de flores amarlias limén muy porfumadas, Pe Fichas pe tas variepapes Eneyclia cochleata. Una especie notable por lac fF GRAN LipRo DE LAS ORQUIDEAS 2. EPIDENDRUM @ La Bpidendrum fue ciertamente la prim ra orquidea epifita que floreci6 en los cé- lebres jardines de Kew a partir de finales del siglo xvu. * Origen: se cuentan aproximadamente 700 especies en estado natural, implanta- das en Africa tropical, Norteamérica y Centroamérica. * Deseripeion: las Epidendrum crecen a partit de cafias o tallos cuyo tamajio es muy diverso (ide 15 cm a2 m!). También existen pequenas Epidendrum que cre- cen rampantes. * Cultivo: — Temperatura: este género se cultiva en inyernadero frio y templado. Epidendrum pseudo-epidendrum, una especie de invernadero fto a templado 4a phan ECUANDO DEBE TRASPLANTARSE? S6lo debe frasplaniarse cuando las raices saigan de Ia maceta. — Liz: por regla general, necesitan mu- cha luz, pero procurando siempre que no padezcan una exposicion a pleno sol en verano. Riego: abundante, pero en invierno se espaciaran los riegos. El agua no debe ser calcarea. — Higrometria: indice de humedad del 70 al 80% mantenido con las plantas en una cubeta con agua. — Sustrato y trasplante: las Epidendram tipo «rampantes» se cultivaran en honitas flores rojas de Epidendrum radicans cestas suspendidas 0 en corteza; el tipo «cafiam, en tiestos con una mez- cla de arena y corteza, El trasplante se aconseja solo en primavera, cada 2 afios. — Abono: es conveni vez cada 15 di te abonar una VARIEDADES RECOMENDADAS, Epidendrum raaicans: flores rojas sobre escapes florals. Raices aereas, Epidendrum pseudo-epidendrurn: sus allos son delgades y frondosos, sus pseudobulbos parecen resales: jos pétalos y sépalos son verdes, el labelo anaranjade. Especie originaria de Costa Rica GoncGora Antonio Cabrello y Géngora, virrey de Nueva Granada. Aunqu ‘0 extendi- da, mere nos interesemos en ell: por su perfume tan embriagador. * Origen: se reparten por Centroamé: ca (México, P * Deseripeién: estas orquideas de creci- miento simpodial poseen pseudobulbos bifoliados en cuya base nace una espiga floral, Sus flores, que se abren en verano, son muy pequefias y recuerdan a unos pajari- tos o insectos en movimiento. Se cuen- tan aproximadamente 25 espe a * Cultivo: estas orquideas se adecuan per- fectamente a un cultivo en cesta colgante. — Temperatura: las Gongora se cultivan vernadero de frio a templado. z: deben protegerse del sol estival poniéndolas a la sombra, pero ne tan una luz fuerte en invierno. — Riego: en invierno, riegue sélo para gue los pseudobulbos no se sequen. La Gongora es una orquidea que de 7 cestas suspendidas. Em la imager Sustrato: mezcla de bolas de arcilla y corteza de pino. — Abono: sera regular en verano (cada 15 dias). VARIEDADES RECOMENDADAS Gongora atropurpurea na Gongora quinquineris a” ae FIciAas DE LAS vaRIEpADEs @ LycasTE @ Una anécdota: la Lycaste virginalis es el discreto en nuestro pais, pero segura- simbolo de Guatemala. El éxito de estas __mente su encanto no encontraré gran te- orquideas tan perfumadas es todavia sistencia Las Lycaste son onguideas, la mayorta epifitas. Las flores nacen en pseudobul rsibles agut (Lycaste x Fabienne, imver nnaderos del Senada) * Origen: se cuentan unas cuarenta es- pecies de epifitas o litofitas que proce- den de Latinoamérica (Andes, México, Centroamérica). + Deseripeién: pseudobulbos. * Cultivo: en invernadero fri templado. — Temperatura: de 18 a 21 °C de dia, y de 10 a 16°C por la noche. — Luz: exposicién sombreada y bien ventilada. — Riego: abundante durante el periodo de vegetacion, los riegos cesan en in- las flores nacen en los o bien en un lugar bien aireado del invernadero Lycaste x Balle. Las Lycaste son orguiddeas de imvernadero fri (ternaderos det Senado) vierno después de la formacién de los pseudobulbos. — Higrometria: indice de humedad del 40 al 55 % durante el dia, el 100 % por la noche — Sustrato y trasplante: que drene mucho. strato ligero y VARIEDADES RECOMENDADAS Lycaste brevispativa. Lycaste canaida, Lycaste cruenta. Lycaste macrophylla. Lycaste skinner Lycaste viginalis, MASDEWALLIA Este género debe su nombre a José Mas- dewall, médico y botanico espaol. Se trata de orquideas terrestres que tuvie- ron su apogeo a finales del siglo x1%; sin embargo, desde hace algunos afios, esta renaciendo el interés por esta orquidea. De pequeno tamaiio, seducirin a los coleccionistas que dispongan de poco es- pacio para su cultivo. * Descripeién: su particularidad se debe a que los sépalos, de gran tamaio, estan soldados a la base. Asi, crean una desproporcién con el tamafio de los pé- talos y el labelo. * Cultivo: para cultivar estas orquideas, es necesario tenerlas sobre una copa 0 uuna maceta con agua, para que la higro- La originalidad de las Masdewallia radica en la dimensién desproporcionada de los sépalos respecto a los pétalos h t- GRAN LIBRO DE LAS ORQUIDEAS metria sea suficiente, y a una temperatu- — Sustrato, trasplante y multiplicacién: ra muy fresca en un lugar bien aireado. sustrato (corteza de pino, esfagno, Estas orquideas poseen ademés la ven- arcilla expandida) debe tener un gran taja de estar floridas durante todo el afio. poder filtrante y conservar correcta- mente la humedad. — Temperatura: de 15 a 18 °C de dia, y Para multiplicarse, basta con pro- de 10 a 15°C por la noche. Son plan- ceder a una division (véase pag, 92). tas de invernadero frio — Abono: se procederé a su abono dos — Luz: orquideas de sotobosque, nece- veces al mes. El abono, equilibrado sitan muy poca luz. Adems, cuando en NPK, debera administrase sin ex- el follaje se vuelve verde claro o de- esos. masiado rojo, es preciso protegerlas atin mds de la luz. No exponerlas nunca a los rayos directos del sol. VARIEDADES RECOMENDADAS — Riego: regular cada 3 0 4 dias. El sus- Masciewallia veitchiana; color rojo rosado trato debe estar siempre un poco hu- ‘anaranjado muy profundo. Masclewalia coccinea. amatllo y rojo medo. El agua de tiego debe ser eae blanda. 140 Mitton o MiLToniopsis Esta orquidea fue bautizada asi por Lindley en honor a Lord Milton, un apa- sionado amante de las orquideas. Fue muy popular durante el siglo xix, época en la que se favorecié la creacion de mu- chos hibridos de orquideas para respon- der ala moda de las flores en la solapa de los trajes. * Origen: cordillera de los Andes, Boli- via, Pera y Colombia Abajo y en la pagina siguiente, Miltonia clowesii( ros Lecoufle) FIcHAS DE LAS VARIEDADES @ i * Descripcién: orquidea simpodial de pscudobulbos aplanados y en cuya base nacen los escapos florales: Se cuentan unas veinte especies epifi- tas. Son plantas que viven a mediana al- titud (entre los 1.000 y 1.500 m). El cli- ma que les conviene es fresco, hamedo, ventilado y sombreado, Se compara ficilmente con el pen miento de nuestros jardines, por la mas- cara que enatbolan sus pétalos y su labelo. Se distinguen dos grupos de cultivo: — las Miltonia, originarias de las mese tas brasilefias, que exigen condi nes de invernadero templado; las Miltoniopsis, que crecen en los Andes colombianos, plantas de inver- nadero frio En ambos casos es preciso un petiodo de latencia * Cultivo: — Temperatura: variard segin las espe- cies, si son de invernadero templado o frio. De forma general, es preciso un minimo de 10 °C, aunque lo idéneo es de aproximadamente 15 °C. Pueden soportar un maximo de 20 a 22°C. — Lue: aprecian la luz, aunque no debe ser demasiado fuerte. La media sombra es lo mas adecuado para estas flores. Estas plantas soportan muy mal el sol (se observa cuando las hojas em- Miltoni piezan a ponerse rojas). En verano, no dude en ponerlas al norte o al este — Riego: es preciso mantener una cierta humedad, si no quiere ver que las ho jas crecen en forma de acordeén. Higrometria: indice de humedad del 70 al 80 %, que debe mantenerse colocando las plantas sobre cubetas llenas de grava y agua, y mediante pul- verizaciones del follaje y el sustrato. — Sustrato y trasplante: el sustrato debe set fino para que drene correctamen: te, pero conservando la humedad ne- cesaria para estas plantas en gran par- te originarias de regiones de altitud de Brasil y Colombia. Se multiplican por division (véase pag, 92). — Abono: no se precipite en el aporte de abono. VARIEDADES RECOMENDADAS: Mitoniopsis vexillaria spectabilis, Debe culioarse preferentemente sobre un trozo de corcho 4 > fon. OboNnTOGLossuM Su nombre procede del griego odous ssa, «lengua. «diente», y gf Cc procede de Is subtropicales de Sudameérica igen: la orquidea Odontoglossum montanas tropicales y Odontoglossum brew (inven * Descripcién: existen un centenar de es- pecies epifitas. Se han censado algunas que vivian a més de 4.000 m de alti pero la mayoria crece entre los 1.500 y los 3.000 m de altitud, de ahi su eventual difi- > adaptacién a nuestras latitudes cultad de Pham EL onan Lisno ve Las onouiDEAS Odontoglossum ‘Margaret Hola’ (imemaderas Lecoufle) ¢ tiene un éxito fulminan- te, yse han creado miles de hibridos. Sus pseudobulbos ticnen forma ovoi- de 0 redonda y en ocasiones estén apla- nados por los lados. Segiin sean las varie- dades, los colores y la mezcla de los motivos cambian mucho. La floracién tiene lugar en primavera o a principios de verano. Debe observarse que todas las Odon- toglossum que proceden de Centroaméri- a deben pasar por un petiodo de laten- cia (como por ejemplo la Odontoglossum bictoniense). Para las demés, las que pro- ceden de la cordillera de los Andes, es deseable que se disminuya el ritmo de Hegos. Esta especis tura: de 15 a 25 °C de dia, y de 5 a 15°C por la noche Soportan muy mal el calor y, cuan do la temperatura supera los 25 °C las plantas deben ponerse a la sombra para protegerias de las quemaduras solares, También se puede proceder a pulverizaciones pata refrescarlas ¢ instalarlas sobre cubetas llenas de agua. Se pueden desplazar al exterior du- rante el periodo estival — Riego: regular y abundante con agua no calcérea, cuidando que el sustrato no se seque nunca mie dobulbos se estén formando. Cuan- tras los pseu- FICHAS DE LAS VARIED arcilla expandida, y de poliestireno enel fondo de la maceta Coda 2 anos Es posible su division, pero las nuevas plantas deben poseer al me nos tres pseudobulbos Abono: basta una dosis al mes, UCUANDO DEBE TRASPLANTARSE? do ya estén formados, se podran es- paciar los riegos. VARIEDADES RECOMENDADAS — Sustrato, trasplante y multiplicacién: sustrato de fina granulometria com- Odontoglossum grande puesto por corteza de pino, esfagno y Odontoglossum (invermaderas Leconfle) EL GRAN LIBRO DE LAS ORQUIDEAS Oncipium Su nombre procede del griego onkas «ca- Ilo», debido a la excrecencia situada en la base del labelo. Se cuentan 750 especies. * Origen: América tropical, Florida y Ar- gentina ayos de oro, bailes deli- ; todo en la delicadeza * Descripei6: cados y dorado: Oncidium lanceanum forma parte de las Oncidium que conocen un periodo de latencta después de la loractén de una flor que se parece a pequefias ma- riposas atigtadas de tonos muy cdlidos (amarillo, anaranjado, pardo, rojo) y que invita ala admiracion. Con todo, las Ov ciditun no son en absoluto fragiles... Es una orquidea simpodial, epffita, con, se gin las variedades, pseudobulbos o rai- ces muy finas. El escapo floral nace en general en la base de un pseudobulbo. Al FICHAS DE LAS VARIEDAD! colores del Oncidium maravillan, Arriba, Oncidium boissiense igual que las Odontoglossum, se pueden clasificar en dos categorias: — las Onciditun de hoja marmérea (O. kra- merianum y O. papilio) que carecen de periodo de latencia, Al cabo de los meses, aparecen muchos tallos que llevan flores que se abriran sucesi- vamente. Nunca deben cortarse sus escapos florales; las Oncidium de hoja carnosa (O. lan ceanum, luridurn 0 splendidum), y que necesitan un periodo de latencia des- pués de la floracién, * Cultivo: Temperatura: de 14 a 16 °C de dia, y de 18 a 24 °C por la noche, En vera- no se pueden cultivar en el exterior sin ninguna dificultad, siempre que se eviten las quemaduras solares. Luz: estas orquideas exigen una lumi- nosidad muy fuerte; algunas variedaces soportan el sol directo, en especial las de hoja espesa, siempre que se tenga cuidado con los riesgos de quemadura Riego: frecuente y abundante durante el periodo de crecimiento de los pseudobulbos. Cuando estén forma- dos, se preferiran riegos mds suaves (como las pulverizaciones...) para fa- vorecer la floraci6n. Higrometria: indice de humedad del 50 al 60%. Sustrato y trasplante: requiere un sustra- to que drene bien, como una mezcla de corteza de pino y arcilla expandida, incluso carbén vegetal. Algunas espe- cies de hoja colgante también pueden cultivarse en trozos de corcho. Abono: aporte regular de abono du- tante el periodo vegetative. Recuerde que tiene que lavar bien el sustrato cada vez para eliminar las acumula- ciones de abono. {CUANDO DEBE TRASPLANTARSE? Cada 2 afos. VARIEDADES RECOMENDADAS Oncidium crisoum. Oncidium omithorynchum. Oncidium papiio, Oncidium sp. (© Overseas / Farabole foto) PAPHIOPEDILUM Ampliamente diseminada por todo el océano Indico, fue una de las primeras orquideas tropicales cultivadas. A partir Paphiopedilim x Va Jel Senado) de las 80 especies originales, se han crea~ do miles de hibridos. Hoy en dia esta muy de moda como flor cortada. ta orquidea se distribuye ampliamente desde la India hasta Birma nia, pasando por Borneo, Nueva Guinea y las Fil * Descripeién: se trata de una orquidea simpodial, sin pseudobulbos, terres litofita. iene la extrafia part re 0 ularidad de que algunas de ellas se desarrollan en mono litos calcareos Las Paphiopedilum so Su tallo es corto, el escapo varia de unos pocos centimetros a 50 cm; las he jas son rigidas y duras. Debido las hojas ti con las raic pel de reserva de nutrientes, Janta cuyo crecimiento es muy lento, ipuede que no florezca hasta pasados 10 0 15 afios! A menudo tiene un jobulbos, el pa- sla flor de co lores profundos (verde-pardo, rojo prir- cilidad en un es, por regla g |, una orquidea que crece en la pe- numbra comienda especialmente a aqui jonas cuya vivienda es bast oscura as especies de hojas verde liso (unos -12°C por la noche); CUANDO DEBE TRASPLANTARSE? — Laz: estas plantas necesitan muy poca luz (de 6.000 a 7.000 lux en primave- ray en verano. De 8.000 a 10.000 lux en invierno). — Riego: debe ser bastante regular (cada 3.05 dias); las raices deben estar cons tantemente en un medio hiimedo sin que se pudran. Si hace mucho calor, se puede pulverizar. — Higrometria: entre el 40 y 60 % de hu- medad. — Sustrato y trasplante: el sustrato debe ser ligero y drenar bien, y no debe re- tener el agua. Debe darse prioridad a la utilizacién de corteza de conifera. Poliestireno expandido, espuma de poliuretano y caledreo (conchas pe- quefias). Se cuentan de uno a tres brotes por division. — Abono: esta planta es muy sensible a los excesos, por lo que la proporcién NPK que debe respetarse siempre es: 30/10/10. Debe regarse justo después de abonar la planta para evitar que se quemen las raices. PARTICULARIDAD Las Fapphiopediiim son especies en vias de esaparici6n en la naturaleza, protegidas orl Conveneién de Washington. VARIEDADES RECOMENDADAS Paphiopediium chamberiainium var. fatifolium. Paphiopediium aelenati. Paphiopedilum collosum var subleave x Piere Bertaue (invernaderos det Senado) PHALAENOPSIS La Phalaenopsis fue una de las primeras orquideas que integr6 los cultivos «victo- rianos», Debe su nombre a la ligereza de sus flores: fueron bautizadas como moih orchis (moth significa «mariposa noctut nombre de las Phalaenopsis es la man = na» en inglés), y Phalaenopsis viene del nifica «que se parece a una riego y si mariposa» En su region de origen, las Phalac nopsis recuerdan el vuelo de estos gra ciosos lepiddpteros que recuerdan su gracta, Agus, Phalaenopsis ‘Coguinctt * Origen: Malasia, Borneo y Filipinas * Descripcién: son plantas epifitas plantas de sombra, que crecen en zonas de baja altitud (200-400 m), a menudo en el limite de los bosques. En sus bioto- cuentan mas de cincuenta espe- cies. Sus hojas estén, en un medio natu- ral, orientadas hacia el suelo (eso las protege de la humedad) Es una planta muy fécil de cultivar que vive bien en un piso. Su floracion es muy larga (de 2.a 3 meses para las hibridas, de 1a 2 meses para las especies). Algunas especies son perfumadas y tienen un fo- llaje jaspeado. Estas orquideas son monopodiales, de tallo corto y tamaio variable. No poséen pseudobulbos, sino un ri zoma central que produce las hojas. Se cuentan de 4 a 5 hojas por planta: hojas anchas, brillantes, espesas, de color ve de oscuro jaspeado con un verde grisé- ceo. Una hoja vieja se cae al cabo de un pos, fo, El escapo floral nace en la base de la nueva hoja anual Existen numerosos hibridos interg néricos, en especial los Doritis (Dorita ara los hibridos no existe un pe- riodo de floracién particular; existen pequeios hibridos para la floracién en un piso nops * Cultivo: Tepaperceuracentan boreaeeciet gen, crecen en un ambiente calido y himedo (nocturno 18 °C; diurno 24 °C). De dia: de 18 a 35 °C, y por la noche de 16 a 25 °C. La temperatura maxima no debe superar nunca los 40 °C; la variacion entre el diay la noche no debe ser su- perior alos 5 °C Luz: 10.000 lux. En otofio, de 15.000 a 20.000 lux para reforzar las plantas y favorecer la floracion: Rzego: agua no calcarea o ablandada (véase pag. 79) rometria: la humedad necesaria es del 70 %. El aire debe ser hiimedo, pero deben evitarse las corrientes de frias. Sustrato, trasplante y multiplicacion el sustrato se compondra de una mezcla de corteza de pino y bolas de ila. No debe trasplantarse con frecuencia. En otono y en primavera deje las raices antiguas y retire las dahadas Cuando el tiltimo capullo florezca, se puede cortar el tallo por encima Fiewas De LAS variepapes @ de un nudo, En algunas semanas na- cer un segundo tallo, lo que prolon- ga asila floracién LOS KEIKIS DE LAS PHALAENOPSIS Keikis signific rawalono «bebés», y , muchos b ue quizas: 0 |a suerte de ver crecer en st opsis. Las hojas del nuevo brote ente grandes ar — Abono: es preciso un abono rico en a) cl agua no debe estancarse; nitrégeno, del tipo 30/10/10, que 5) no pulverice en invierno; debe introducirse dos veces al mes, c) pase una esponja himeda por el sobre todo en el momento de los pe follaje. riodos de crecimiento — Sise pudre: se reconoce porque la hoja central se vuelve parda y luego se de sengancha. Una vez que ya ha presen- — Parasttos: pulgén y arafia roja. VARIEDADES RECOMENDADAS tado estos sintomas, eventualmente la Phalaenopss amabils : Phalaenopsis comucenis iciar planta puede reinciar un nuevo brote eee lateral. En todo caso, lo mejor sera Pracenccae veroer evitar la podredumbre, y para ello: Existen muchos hibrides de Phalaenopsis. Phalaenopsis violacea (onoernaderos PHRAGMIPEDIUM Phragmipediumn besseae, la especie més conocida, fue descubierta en Peri en 1881. Tavo un grandisimo éxito entre los aficionados a las orquideas. * Origen: Sudamérica y Centroamérica * Deseripcién: en las Phragmipedium, los dos sépalos laterales, soldados, se en- cuentran detras del labelo replegado en bolsillo, lo que les confiere una forma que recuerda a la orquidea zapatito de dama (Cypripedium calceolus). + Cultivo: — Temperatura: son orquideas de clima templado 0 ealido ~ a FICHAS DE LAS vaRIEDADES @ ® — Luz: no desea la exposicién directa al sol, aunque estas orquideas necesitan una fuerte luminosidad — Riego: a las Phragnipediam no les puede faltar nunca el agua; en efecto, son originarias de Sudameérica y Cen- troameérica, paises muy hiimedos, y es preciso saber que su biotopo se sittia en las proximidades de las fuentes. — Higrometria: debe ser bastante im- portante (de 60 a 80 %); se compen- sard una cierta sequia procediendo a pulverizaciones en las hojas y el sus- trato en los momentos mas frescos del dia — Sustrato; wtilice una mezcla de corte- za de pino y bolas de arcilla Phragmipedium (imemaderos del Senado). Exes orquédeas nevesitan mucha bumedad _ — Abono: 15 di VARIEDADES RECOMENDADAS N LIBRO DE LAS OROUIDEAS STANHOPEA : se cuenta una veintena de es- originarias de México, Brasil y Peri, con un perfume extraordinario y una floraci6n muy breve. * Cultivo: planta que debe cultivarse ex- clusivamente en cestas suspendidas, ya que los escapos florales se desarrollan con «la cabeza hacia abajon. Para favore- cer su floracién, se detendra el riego cuando aparezcan los nuevos brotes — Temperatura: wos 20°C. Stanhopea oculata = graveolens @ — Luz: necesita mucha luz, pero evitan- do el sol directo. — Riego: abundante. — Sustrato: wtilice un sustrato compues- to por corteza de pino. — Abono: cada 15 dias. ‘\VARIEDADES RECOMENDADAS Stanhopea tigrina, VAINILLA eo La mayor dificultad estriba en hacer que esta orquidea florezca :mporta como na liana y es comveniente, por tanto, que crexca con 1 tutor Que praspere no presenta mayares di cantbio, es dificil bacerla fle dude en «inuondarla de * Origen: planta originaria de Sudamé- ‘ica e implantada en Africa y Asia. * Descripciént la vainilla es una orquidea trepadora de zonas tropicales, vivaz, de grandes flores y cuyo fruto es una cépsula alargada y camnosa que, al secarse, se abre en dos valvas y muestra una gran cantidad de semillas: esta capsula es lo que se llama impropiamente la vaina de la vainilla. * Cultivo: es conyeniente cultivarla con tutores, a cuyo alrededor podra enrollar- se y desarrollarse, En su medio de vida Aatunal, crece enrollandose « largos tran- cos de arboles. ‘Aunque es una planta bastante facil de hacer que crezca, su floracién es bastan- te dificil de lograr en nuestra latitud. Se cuentan unas 110 especies de vainilla, pero solo seis se explotan por su perfu- me. No tiene periodo de latencia, FICHAS DE LAS varieoapes Cuando alcanza los 3 0 4 m de largo, la vainilla tiene suficiente madurez para florecer. — Temperatura: a la vainilla le gusta por encima de todo el calor (entre los 20 y 35°C), pero sin variaciones de tem- peratura entre el dia y la noche. — Luz: le gusta la luz; por tanto, se pue- de instalar al sur, pero como puede sufrir quemaduras, se pondré a la sombra en las horas del dia de mas calor. — Riego: con agua blanda una o dos ve- ces por semana. — Higrometria: debe mantenetse cons- tantemente a un nivel elevado (de 80 a 90%). — Sustrato y trasplante: el sustrato sera mas bien de granulometrfa fina. — Abono: aproximadamente cada 15 dias con un abono equilibrado. 169 phew. * Origen: esta orquidea es de origen asidtico: se cuentan 70 especies reparti- das entre China, la India, Sri Lanka, las Filipinas, Indonesia y Nueva Guinea, donde crece a altitudes variables * Descripcion: orquidea monopodial, en general epifita. Pose grandes y fuer tes escapos florales que, en primavera y a principios de verano, tienen grandes flo- res rosas, azules o purpuras. * Cultivo: las Vanda son orquideas de in- vernadero célido. Temperatura: estas orquideas sopor tan facilmente temperaturas diur nas muy cilidas y temperaturas noc turnas que oscilan entre los 13 y los 18°C. — Luz: debe ser intensa (exposici6n al sur recomendada); no exponerla a sol directo: es necesaria la sombra. Las Vanda aprecian ma = — Rrego: debe regarse y proceder a pul verizaciones durante los periodos de crecimiento. La humedad debe ser siempre muy alta, pero se reduciré el riego durante los periodos de la tencia Higrometria: debe ser bastante eleva da, cuando los dias son muy soleados (mas del 50 %). — Sustrato: se escogera un sustrato a base de corteza de pino y de bolas de arcilla, Las Varida se cultivarin preferentemente en cestas suspen- didas con el fin de facilitar un dre- naje eficaz, — Abono: aporte de abono regular (una vez cada 15 dias). sus ‘VARIEDADES RECOMENDADAS Vanda coerulea: sus flores azules siempre causan sensacion, to el calor'y a buoedad. Vanda azul (inversaderos Lecoufe) ZYGOPETALUM &@ El encanto de estas orquideas se debe, en parte, a su delicado perfume. Etimolégica- mente, su nombre proviene de zygos «yugo» y petalon «pétalosm, porque sus pétalos y sé- palos estén soldados por la base. Las Zygopetalum necestan grandes wariaciones térmicas para abrrse. Por tanto, a veces son delicades si se cultivan en um pio. Abajo Zygopetalum labiosum 2 t GRAN LIBRO DE LAS ORQUIDEAS * Origen: Sudaméric * Descripcién: son orquideas epifitas de crecimiento simpodial; presentan unos pseudobulbos muy redondos y grandes hojas que pueden aleanzar hasta los 40 cm de altura. En la base del labelo se distin- gue un callo, Florecen en invierno. + Cultivo: — Temperatura: las Zygopetalum sélo crecen con grandes variaciones tér- micas, son bastante dificiles de culti- vat en un piso. La mayoria de estas especies son orquideas de invernadero frio: hasta los 30 °C durante el dia y 15°C por la noche. — Luz: estas orquideas necesitan una luz abundante, aunque sin expos cién directa a los rayos del sol (som- bra obligatoria), — Riego: regular, de forma que el sustra- to se mantenga htimedo pero sin que el agua quede estancada. — Higrometria: debe set constante (un 65 % aproximadamente). No se ro- ciardn las hojas, ya que eso provoca- ria manchas. — Sustrato y trasplante: el sustrato idé- neo esta hecho a base de corteza de pino y bolas de arcilla — Abono: regular, con un aporte cada 15 dias. VARIEDADES RECOMENDADAS Zygopetalum « “Arthur Elle’. LA HERBORIZACION EN EL SIGLO XXI, EN BUSCA DE LAS ORQUIDEAS SILVESTRES Al no desear més trabajo y necesitar una obra divertida que me gustara y que no me produjera pena como la que le gusta a un perezoso, me puse a hacer la Flora petrinsularis ya describit todas las plantas de la isla sin omitir ni una sola, con suficiente detalle para ocupar el resto de mis dias. Jean-Jacques Rousseau, Ensofaciones de un paseante solitario, quinto paseo. Imprevisible, esporddica: sf, la flor que se divisa alli, al fondo del jardin, justo cuando tbamos a cortar el césped, miremos dos veces antes de cortarla. Es muy probable que se trate de una orquidea... que nace a principios de verano al fondo del jar- din. También es probable que no aparez- ca de nuevo el afio siguiente. Vaya un poco mas lejos y pronto observaré que ihay orquideas silvestres casi por todas partes! En el borde del camino, en los prados, en los campos de altitud, en los caminos litorales, ila orquidea se adapta a casi to- dos los biotopos! Se han creado muchas asociaciones para animar a todo el mundo a interesar- se, conocer y reconocer las especies au- tctonas que se pueden encontrar en la naturaleza en estado salvaje. Conocer este capital vegetal es conocer toda su fragilidad. En efecto, muchas orquideas silvestres estan en vias de desaparicién 0 muy amenazadas (agricultura intensiva, excesiva utilizacién de pesticidas, con- centracién parcelaria...). Todos debe- mos protegerlas por nuestro propio inte- rés. En Espaita existen asociaciones que proponen y organizan excursiones para ir a buscar orquideas silvestres, y lo mismo sucede en gran parte del mundo. iFeliz busqueda de orquideas! CLUB DE AMIGOS DE LAS ORQUIDEAS El Club de Amigos de las Orquideas fue fundado por un grupo de aficionados que decidieron crear una asociacién ‘que les petmitiera, cl mismo tiempo, ‘compartirsu aficion y dar a conocer el mundi de las orquideas. 175 LA PROTECCION DE LAS ORQUIDEAS En Espafia, existen un centenar de of- quideas silvestres que ya han sido cen- sadas Sobre conservacién de biodiversidad, R. D. 1997/1995 de 7 de diciembre. Espaiia ha firmado dos convenios europeos para la preservacién de la flora: el Convenio relativo a la Conservacién de la Vida Silvestre y del Medio Natural en Europa (Convenio de Berna) y el Convenio sobre el Comercio Internacio- nal de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Convenio CITES). La direccién de Internet es la siguiente: http://srww.rbgkew.org.uk/herbarium/ caps/cites/spanish/s.htm Lista de orquideas terrestres amenazadas en Europa Alemania Cypripedium calceolus L. Hammarbya paludosa L. Kuntze Liparis loeselit Austria Cypripedium calceolus L. Hammarbya paludosa L. Liparis loeselif L. Rich Bélgica Cypripedium calceolus L. Harmarbya paludosa V.. Kuntze Liparis loeselit L. Chipre Epipactis troodit Linde. £ Opbrys argolica Fleischm. spp. elegans (Renz) E. Nelson Ophry kotschyi Fleischm. & spp Dinamarca Cypripedium calceolus L. Hammarbya paludosa L. Liparis loeselit L. Espafa Cypripedium calceolus L. Habenaria tridactylites Lindl. (Canatias) Orchis canariensis Lindl. (Canarias) Finlandia Calypso bulbosa (L.) Oakes Chpripediun calceolus L, Hammarbya paludosa L. Kuntze Liparis loeselii (L.) Rich Francia Cypripediurn calceolus L. Hammarbya paludosa L. Liparis loeselié (L.) Rich Grecia Cephalantera cucullata Boiss. & Heldr. Cephalanter epicpactoides Fischer & C. A. Meyer Comperia comperiana (Steven) Aschers & Graebner Dactylorbiza kalopissii E, Nelson Ophrys aesculapii Renz 181 182 Ophrys argolica Fleisch. Ophrys cretica (vierh) E. Nelson Ophiys gottfriediana Renz Ophrys reinbolddii Ophros sphegodes Mill ssp. helenae (renz.) D. H. Moore Orebas boryt Reichb. F. Orebis spitzelli sauter ex Koch ssp. nditi- folia (teschnet) spp. Tanda Hammariya paludosa 1. Kuntze Spiranthes romanzoffiana Cham. ltalia Gipripedinm calceolus L. Liparis loeselii (L.) Rich Opbrys lanudata Parl Luxemburgo Cypripedium calceolus L. Malta Ophrys lunulata Parl Paises Bajos Hammarbya paludosa L. Kuntze Liparis loeselii (L.) Rich Platanthera obtusata (Pursh) Lindl. Portugal (Madeira) Dacthylorbiza foliosa (verm.) spp. Goodyera macrophylla Lowe Orchis scopulorwm summeth. Reino Unido Cypripedium calceolus L. Epicpactis dunensis (T. & T. A. Stephen- son) Godfery Liparis (L. L.) Rich, Spiranthes romanzoffiana Cham. Suecia Calypso butbosa Cypripedium calceolus L. Hammarbya paludosa L. Kuntze Liparts loeselii (L.) Rich Platanthera obtusata (Pursh) Lindl. Suiza Cypripedium calceolus L. Hammarbya paludosa L.. Kuntze Liparis loeselié (L.) Rich ores DIRECCIONES UTILES Asociaciones Grupo Orquidedfilo de Canarias http://www.lanzarote.net/ogro/gocin- tro.htm Club de Amigos de las Orquideas bp fowwterraevpersonal/club_orqu leas/ Associacié Catalana d’Amics de les Or- quidies http://www.fortunecity.com/boozers/ footman/457/ (Dwermaderos Lecoufle) Enlaces de Internet Orquideas ibéricas http:/Avww.orquideasibericas.info/main. htm Agroinformacion: el cultivo de las orqui- deas hitp://www.infoagro.com/flores/flores/ orquideas.htm Orquideas, boténica http://rondalibre.iespana.es/rondalibre/ orquideas.htm GLOSARIO Apice: en una planta, parte superior de un drgano (parte superior del tallo, por ejemplo). Biotopo: area gcografica, a menudo limitada, en la que una especie encuentra sus con- diciones dptimas de vida y desarrollo. Bulbo: organo subterraneo de reserva a partir del que erece la planta herbaicea. Capsula: fruto seco y dehiscente. La capsula contiene a menudo varias semillas Dehiscente: que se abre s6lo al llegar a la madurez. Digital: recortado en forma de dedo. Latencia: estado de reposo durante el que la planta cesa temporalmente de desarrollarse. Epifita: planta que se desarrolla sobre un arbol, pero sin ser su pardsito. séase Género / Especie. Srgano sexual masculino de la flor Género / Especie: subdivisiones utilizadas en la clasificaci6n de las plantas. La amplia familia de las Orquidéceas se divide en géneros, que agrupan las plantas con similitudes a nivel floral; los péneros, a su vez, se subdividen en especies. Las plantas, desde Linneo, se designan por su nombre en latin, que incluye el género y la especie. Asi Cattleya labiata es una orquidea del genero Cattleya, especie labiata, Véase tam- bien Hibrido y Variedad. Escapo: cje florifero desprovisto de hojas. Hibrido: planta nacida artificialmente del eruce de géneros o de especies diferentes, Las orquideas hibridas de especies se designan por su nombre de género, seguido en general de un nombre otorgado por el que ha obtenido el hibrido, Los hibridos intergenéricos se designan por un nombre formado por la asociacién de dos géneros. Por ejemplo, Cattleya por Laelia da Laeliocattleya 186 Higrometria: cantidad de vapor de agua contenido en el aire. Inflorescencis disposicién general de las flores en el escapo floral Labelo: pétalo superior de la corola de orquideas que presenta una gran variedad de for- mas y colores. Lit6fita: planta que se desarrolla sobre las rocas. Monocotiledéneas: importante clase de plantas con flores caracterizadas, en especial, por una semilla de un solo cotiledén (hoja primitiva de la pléntula). Micorriza: asociacion simbitica del micelio de un hongo y la raiz de una planta. Véase Simbiosis. Necrosis: muerte de un tefido, célula, etc. en el interior de un organismo que sigue vi- viendo. Perenne: que conserva las hojas todo el afio. Pistilo: parte femenina de la flor que comprende el ovario, el estigma y el estilo. Polen: granos microscépicos, que constituyen los elementos reproductores masculinos de la planta Polinizacién: paso del polen de los estambres al estigma. Rizoma: tallo carnoso subterraneo, a menudo horizontal, a partir del cual se desarrollan cada aio las partes aéreas de la planta Sapréfito: vegetal que crece en materias orgénicas en descomposici6n. Sp: subespecie (variacién natural). Simbiosis: asociacion entre varios organismos vivos, con la que todos reciben beneficios reciprocos. Taxonomistas: especialistas de las leyes de la clasificaci6n, Variedad: forma particular de la especie Vivaz: planta que vive mas de un afo y cuyas partes aéreas desaparecen en invierno. BIBLIOGRAFIA BEHAR, Moisés, Las Orgutdeas en Guatemala, Editorial Piedra Santa, 1993 BERLIOCCHT, Luigi, The Orchid in Lore and Legend, Timber Press, 2000. BERNARD, Noel, «La culture des orchidées dans ses rapports avec la symbiose», discurso de presentacidn. BESNEHARD, Pierre, Lhomme et l'orchidée: histoire d'un regard, tesis doctoral, universidad de Paris VI. Daxwin, Charles, De la fecundacién orucada de las orquideas, Sciences en situation, 1999. DELFORGUE, Pierre, Guta de las orquideas de Espatta y Europa, norte de Africa y Préximo Oriente, Lynx Editions, 2002. Diaz GONZALEZ, Tomas y José Antonio FERNANDEZ PRIETO, Paisaje vegetal del noroeste ibérico: el litoral y orquideas silvestres del territorio, Ediciones Trea, 2002. EBERHARD, Wolfram, Dictionnaire des symboles chinois, Seghers, 1984. GENERALITAT VALENCIANA, CONSELLERIA DE MEDIO AMBIENTE, Orgutédeas silvestres de la Comunidad Valenciana, 2001. GIL LLANO, José Ramén, Orguideas de Extremadura, Ediciones Fondo Natural, 1991. Guyor, Lucien y Pierre Gubassier, Le Now des fleurs, PUF, «Que sais-je?», 1968. Imes, Rick, Orgeddeas, Editorial Zendrera Zariquiey, 2000. Kura, Takashi, Orguédeas, Anaya, Grandes Obras, 1994. LEROY-TERQUEM, Gérald y si-ASHMED DJOHAR, Orchidées pasion, Bordas, 1991. — Les Songes et leur interprétation, sources orientales, Le Seuil, 1959. Limsour, Georges, Les Vanilliers, Gallimard, «Limaginaire», 1995. LIZaur, Xavier, Orguideas de euskal herria, Pais Vasco. Servicio Central de Publicacio- nes, 2001. LOuNvorer, Ernst, Chasseur d'orchidées, Editions Hoébeke, 1995. ‘MAETERLINCK, Maurice, L'Intelligence des fleurs, Editions transatlantiques, 2001. MaRiN PADELLANO, Luis y Pablo GaLAN CELA, Catdlogo de las orguédeas silvestres de la provincia de Burgos, Briza 1994. Maupassant, Guy de, «Un cas de divorce», Contes et nouvelles, Laffont, 1999. PERIS FIGUEROLA, Juan Ignacio, Jess MATAIX OLTRA, y Maria del Carmen Jorpa Bau, Orquideas y bulbos silvestres de la provincia de Alicante, Diputacién Provincial de Ali- cante, 2002. PEREZ MARQUEZ, Rolando y José Lazaro Bocourt VIGUL, Iconografia de orquideas cuba- nas, Universidad de Alcala de Henares, Servicio de Publicaciones, 1997. PREZ Rava, Francisco y Joaquin MOLERO MESA, Orguédeas silvestres de la provincia de Granada, Editorial Universidad de Granada, 1990. PALLaRés NAVARRO, Antonio, Orgutdeas de Almerta, Pallares Navarro, 1999. Ptrra OLvEs, Joan, Las orquideas de la provincia de Alicante, Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert, 2003 PrizTO FERNANDEZ, Amador, Orguideas de Bizkaia, Bilbao Bizkaia Kutxa, 2000. PuiG VERDURA, Josep Maria, Orguideas en la gran ciudad. Su cultivo en apartamentos, Puig Verdura, 1999, Stuys TisseRANT, Mariana van der, Orguideas de Navarra, Gobierno de Navarra. Fondo de Publicaciones, 1982. Rivera NUNEZ, Diego y Gemma LOPEZ VELEZ, Orquideas de la provincia de Albacete, Instituto de Estudios Albacetenses Don Juan Manuel, 1987. VEL sc, Luis, Guéa de orquideas del parque natural de la Sierra de Grazalema, Andalu- fa, Servicio de Publicaciones y BOJA, 1989. INDICE DE ESPECIES Angraecum, 107 — eburneum sus. superbum, 109 — sesquipedale, 107, 109 Brasscocattleya, 112, 114 Cattleya, 111 —aurantiaca, 116, 117 — labiata, 114, 117 — skinneri, 117 Coelogyne, 118, 120 — cristata, 118, 119 — fimbriata, 120 — speciosa, 120 Cymbidium, 121, 122 —aloifoilium, 123 — ensifolium, 121 Dendrobium, 124-126 —anosmum, 125 — biggibum, 124 — chrysanthum, 125 — densiflorum, 125 — fimbriatum, 125 — findlayanum, 125 — harveganum, 125, 126 —moschatum, 125 —nobile, 125 — parishii, 125 — phalaenopsis, 124 pierardii, 125 — superbum, 124 — thyrsiflorum, 125 —wardianum, 125 Eneyclia, 127 —citrina, 127 —cochleata, 127-129 — fragans, 127 —vitellina, 127 Epidendrum, 127, 130-132 — pseudo-epidendrum, 130, 132 —radicans, 131, 132 Gongora, 133, 134 — atropurpurea, 134 Laeliocattleya, 112, 114, 184 Lycaste, 135, 136 —brevispatha, 136 — candida, 136 —cruenta, 136 — macrophylla, 136 — skinneri, 136 virginalis, 135, 136 Masdewallia, 138 — coccinea, 140 — veitchiana, 140 Miltonia, 141, 143 — vexillaria, 143 Miltoniopsis, néase Miltonia Odontoglossum, 144-147, 150, 178 —bictoniense, 146 — grande, 147 Oncidium, 148-150 —crispum, 150 — kramerianum, 150 —lanceanum, 148, 150 —luridum, 150 — omithothynchum, 150 — papilio, 150 — splendidum, véase luridum, 150 Paphiopedilum, 151-153, 155 — chamberlainium, 156 var. latifolium, 156 — delenatii, 156 Phalaenopsis, 157, 159, 161 —amabilis, 161 189 Stanhopea, 166, 167 tigrina, 166 Vainilla, 168 Vane coerul eS CCM er eT od ei ee Cae ee eat) eee Meas eR eR) Come ee eR a eae) Pee eee neat erected NACo Rea ence ceeed Flor de culto, mitolégica, medicinal, hechi- CRA ae osu Rt eee eae) Puck ae cece orcas Cree Mo Cee ea) extendido por el mundo entero. Magali Martija-Ochoa esta diplomada en El gran libro de las ORQUIDEAS Especies y variedades, cultivo y multiplicacion, prevencién y tratamiento de las enfermedades... ewe eM ers We Te a atet ot eet CE et once jos para su mantenimionto (material, tipos Ree OTM stele RAL CRC oR sanitarias) y sugerencias para llevar a cabo fer Terese Rice Pee Reem teeta OM ety Cree eee at a ects cies, como la Phalaenopsis, la Cattleya, el Nee We Ie ee Mn ug secretos para usted. ee eee Rec) Ue om Mg ee tee eM eee end OTS eel ng ea tel eee telu nee edT Sar eee ee Ce ee Ne on Smee ke eerie ema eee ae Cee eee tat tr smen etary CSET es eet Cee ieee dod UCR Me tL ote ne elie tere Telia

También podría gustarte