igualmente odiosas y odiadas, su Vida es una queja, que el eco desmesurado, con- vierte en una requisitoria ; . . . contra los dioses y contra los hombres...
y, esa requisitoria, partida del corazón
de las tinieblas, hace temblar el Mundo ; _^1 grito salvaje de la Soledad, tiene el poder de espantar o de encolerizar los ^ hombres \ ^ ¡^-a- -yru^- -ñ .'^m^-^^^-'^'í^^?^'^
no tiene el poder de encantarlos ni de
salvarlos ;
es el rayo del Sinaí ;
no es la flauta de Orfeo, ni la voz del
Tiberiades ; SOMBRAS DE ÁGUILAS 21
en el Gólgota, al decir de la Leyenda,
los hombres, crucificaron a un Dios ;
en el Cáucaso, los dioses, crucificaron a
un Hombre ;
pero, ese hombre era el Genio ;
esta Leyenda, vale más que la otra ;
el Cáucaso, está más alto que el Gól-
gota;
.porque el sacrificio de un Genio, vale
más que el Sacrificio de un dios ; ^ _4 porque el Genio existe ; ^ -~> y, la voz del Genio, es : la Verdad ;^"
violenta y desesperada, ella se clava en
el corazón del Hombre, como el pico de un cóndor en el corazón de una oveja... --^no hay un hálito de caricia, en aquel viento inmisericorde, que baja de la cima aislada, donde el Genio, tiene en sus ma- nos el cuadrante de las tempestades ;
leed a Carlyle ;
sentiréis la impresión de una mano que
22 VARGAS VILA
OS estrangula para convenceros, después
de haberos abofeteado ;
de Esquilo hasta hoy, ninguna voz ha
sonado más alta que la suya ; ni la de los héroes y semidioses que Homero hace dialogar sobre las murallas de Troya ;
voz acre y sin dulzuras ;
toda música está ausente de ella ;
es el antilírico, por excelencia ;
es más que rebelde, áfono para toda cla-
se de armonía ;
es rumoroso, pero, como los volcanes y,
como el mar ; como los ríos muy profun- dos ;
— ^s desconcertante, en su enormidad y, en su obscuridad,«^cual si se viese en un sueño, una danza de montañas ;
es, uno como pastor de elefantes amaes-
trados, y de hipopótamos clowns ;
sus sarcasmos hacen pensar en los Cir-
cos foráneos, y, en las interjecciones y, los puños de los domadores de ferias ;