Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La Familia
La violencia en la familia
Introducción
Para analizar las medidas de protección en el ámbito de la violencia intrafamiliar, resulta
necesario determinar en donde se da esa violencia, es decir, cual es el entorno o entidad
que la hace distinta y con una regulación especial en relación a la violencia común, que
como se verá, es en el seno de la “familia”, por lo cual se debe abordar este último
concepto. La familia, de una manera global, puede definirse como un grupo social
primario unido por vínculos de parentesco, estos pueden ser: consanguíneos, de filiación
(biológica o adoptiva) o de matrimonio, incluyendo las alianzas y relaciones de hecho
cuando son estables. Se es parte de una familia en la medida en que se es padre o madre,
marido o mujer, hijo o hija, abuela o abuelo, tía o tío, pareja, conviviente, etc.
La concepción de la familia va más allá de la definición tradicional y fenomenológica en la
que sólo se le considera como una agrupación de individuos con lazos consanguíneos,
conyugales o de adopción, con vínculos e intereses en común, debe trasladársele a un
plano social, entonces veremos que la familia en realidad es un sistema, formado por un
conjunto de unidades interrelacionadas con características especiales
La violencia familiar es una acción de poder u omisión intencional, dirigido a dominar,
someter, controlar o agredir física, verbal, psicoemocional o sexualmente a cualquier
integrante de la familia, dentro o fuera del domicilio familiar, por quien tenga o haya
tenido algún parentesco por afinidad, civil, matrimonio, concubinato o a partir de una
relación de hecho y que tenga por efecto causar un daño.
Las personas que son parte de la familia son distintas entre sí, pueden ser de diferente
género y edad (mujeres, hombres, niñas, niños, adolescentes, jóvenes, personas adultas
mayores), tener mayor o menor fuerza física, diferir en opiniones o desempeñar trabajos y
actividades diversas. Sin embargo, estas diferencias no implican que algunas sean
superiores o inferiores, pues todas las personas son iguales en dignidad y tienen los
mismos derechos humanos. Vivir con respeto a la dignidad humana en la familia permite
convivir pacíficamente, en un ambiente libre de violencia, con confianza para expresar las
ideas y sentimientos. Nadie tiene derecho a maltratar o atentar contra la dignidad de las y
los demás.
Desarrollo
Es cierto que la violencia familiar ha ido cambiando a lo largo de los años y que ha pasado
por bastantes cambios en cuanto a la manera en que se desarrolla, como se ejerce y
demás. El cambio social es algo que también se ha visto reflejado en la violencia familiar,
pues conforme van cambiando su forma de actuar las generaciones pasadas, va a haber
un cambio en el futuro. Este cambio implica que una persona actué de diferente manera
a la que lo hacían sus padres, abuelos, etc… y esto va a reflejarse en la sociedad y
específicamente en la familia, en la forma en que actúan y se desarrollan con las personas
que son parte de su familia, en este caso se habla de la violencia y se verá como la
violencia en la familia ha ido cambiando con respecto al comportamiento de superioridad
de los hombres, ya sean como Esposos, hijos o hermanos.
Según una gráfica que realizamos, con base a respuestas de una encuesta realizada a
personas de diferentes edades entre hombres y mujeres, la violencia que se sufre en la
familia se ve rotundamente reflejada en las mujeres y se ve que las generaciones más
antiguas son las que han sufrido más de este tipo de violencia y se ve reflejado un claro
cambio a través de las generaciones.
Conclusión
La violencia familiar es un problema grave que siempre ha existido, es muy común y
frecuente en nuestro país, que afecta a muchas familias y que ocasiona muchas
consecuencias en la sociedad ya que la mayoría de las veces repercute en el
comportamiento de las personas que sufren de violencia familiar, e igualmente reaccionan
de manera agresiva con otras personas o por otro lado se vuelven temerosas, callados,
solitarios o solitarias, y esto en los dos casos les genera traumas a lo largo de su vida que
tal vez nunca superen.
Uno de los problemas más grandes de esta situación es que se sigue como patrones
ejemplo: el papá de Sutanito golpea y/o insulta o ejercer cualquier tipo de violencia a su
mamá y cuando Sutanito crece y se casa golpea y/o insulta o ejerce cualquier tipo de
violencia a su esposa porque esto fue lo que vio a lo largo de su vida en su seno familiar, o
por lo contrario Menganita ve como su padre golpea y/o insulta o ejerce cualquier tipo de
violencia a su mamá y que su mamá no hace nada, y cuando Menganita se casa su esposo
la golpea y/o la insulta o ejerce cualquier tipo de violencia contra ella, y ella se lo permite
porque cree que es correcto, ya que eso es lo que ella vio en su casa durante su vida con
su padre y con su madre y así sucesivamente.
¿Y acaso este problema no tiene solución?
Por supuesto que la tiene, y debemos empezar desde nuestros hogares, comenzando por
nosotros mismos a hacer el cambio, ya que muchas veces nos rolamos el papel de
agresores y de víctimas de violencia, y esto, efectivamente no da solución, si no que
coadyuva a la intensificación de esta problemática, por lo cual hay que considerar que
nunca hay que perder la comunicación sana con la familia, nunca perder la veracidad y la
credibilidad que se debe tener con cada uno de los integrantes de la familia, y siempre,
tener en mente que la violencia genera más violencia y no nos lleva más que a la
destrucción de nosotros mismos y los que nos rodean.
Referencias:
“Hacia la Sociología”
Cuarta edición
http://repositorio.uchile.cl/tesis/uchile/2008/de-seura_c/pdfAmont/de-seura_c.pdf
https://blogs.iadb.org/desarrollo-infantil/es/violencia-intrafamiliar-se-repite-generaciones/