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DESASTRE AMBIENTAL EN EL POZO 158-LIZAMA-SANTANDER

Lo que comenzó hace poco más de un año como una pequeña filtración de crudo
mezclado con lodo cerca del pozo Lisama 158 de Ecopetrol terminó con el derrame de
550 barriles de petróleo que llegaron a los afluentes de caño Muerto, la quebrada
La Lizama e incluso al río Sogamoso, en Santander.

Ya ha pasado un mes desde que el pozo Lizama 158 de Ecopetrol, que se ubica
en el corregimiento La Fortuna (Santander), empezó a emanar chorros de crudo
que arrasaron con todo a su paso. Eso fue el pasado 2 de marzo. Pero a la fecha,
todavía se pueden observar claramente los destrozos en las orillas de las
quebradas La Lizama, Caño Muerto y el Río Sogamoso, afluentes que fueron
afectados en 24 kilómetros de tramo.
En las aguas de la quebrada La Lizama aún se divisa el brillo de los aceites que
anteriormente la inundaron y la hicieron impotable. Sin embargo, solo basta
prestar atención para poder ver los pequeños animales que ya van regresando a
tomar posesión del lugar que se les arrebató y que el espeso petróleo convirtió en
un valle de muerte.
La vegetación que logró quedar en pie muestra los despojos que dejó la mancha
de crudo, así solo basta imaginar el punto criticó que alcanzó a tener  la corriente
casi incontrolable que quemó todo lo vivo.
Sin embargo, la cara más amarga se la llevan los habitantes y la flora y fauna del
lugar, pues para ellos la tragedia todavía no finaliza; deberán esperar algunos
meses más. De acuerdo con expertos, los daños causados al ambiente son
irremediables.
Claudia Gonzales, directora de la ANLA, aseguró que la entidad esta trabajando
para aclarar la situación: "Continuaremos con el monitoreo y la valoración de la
situación de bienes y servicios ambientales que se vieron afectados por la
contingencia, y en paralelo seguiremos con toda la investigación en el tema de
responsabilidades y en encontrar el origen de la emergencia. Tambien en
aprender la lección que nos dejó la magnitud de este evento",
 Lo primordial es trabajar en la recuperación social y ambiental de esta tragedia,
aparentemente, anunciada.
No podemos seguir en la misma línea de explotación a toda costa de los recursos naturales para
poner comodities [materias primas] en el exterior”, sostiene el profesor Jhon Mario Flórez.
“Estamos trabajando para encontrar desarrollos alternativos sostenibles en esta región del
Magdalena Medio que toda está ligada al petróleo, aquí cayó el precio del petróleo y en la
economía hubo una deflación tremenda, hubo desempleo, problemas sociales, y la inflación
que estaba en torno a la burbuja del petróleo. Ahora sumado a esto hay dos eventos ambientales
que demuestran que, o nos ponemos a generar alternativas .
-Las rasones o circustancias que nos preguntamos que fallo
-Quien tiene la culpa de dicho accident

-Se venía haciendo monitoreo a estos pozos


-quedarían mal sellados
-fue provocado
Lo cierto es que todo esto que sucedió en el corregimiento de Lizama fue un catastro ambiental que afecto a flora, a la
fauna las fuentes hídricas y a la población dejándolas en un estado muy vulnerables ya que ellos dependían de los
productos que ellos mismo producían, como la agricultura, la ganadería, la pesca, el desplazamiento máximo debido a
los fuertes olores producidos por el derrame del petróleo es decir la contaminación que este impacto creo.

Es importante que el estado tome cartas en el asunto para que paguen los responsables y estos hechos no se vuelvan a
repetir

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