PLANIFICACIÓN ESTRATEGICA- Carmen Lucía Guerra Rosas C.I.

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Entendiéndose la planificación estratégica como el proceso gerencial de desarrollar y mantener una dirección realista,
viable que pueda alinear las metas y recursos de la organización con las oportunidades cambiantes del mercado.

La planificación estratégica se cimienta en dos aspectos vitales: 1.- Misión entendida como una declaración duradera del
objeto, propósito o razón de ser de una empresa. Le da identidad a la empresa, mostrando a agentes externos tales como
clientes o proveedores, el ámbito en el cuál se desarrolla, y permitiendo distinguirla de otras empresas similares. ¿A qué
nos dedicamos y dedicaremos nuestras fuerzas (enfocado al servicio que ofrecemos), ¿Quiénes somos?, ¿Por qué y con
qué motivo existe nuestra organización?, ¿Qué necesidad fundamental satisfacemos?. 2.- Visión: comprendida como una
declaración que indica hacia dónde se dirige la empresa en el largo plazo, o qué es aquello en lo que pretende convertirse.
Sirve como fuente de inspiración, logrando que todos los miembros de la empresa se sientan identificados,
comprometidos y motivados en poder alcanzarla. ¿Cuál es la imagen futura que queremos proyectar de nuestra empresa?,
¿Cuáles son nuestros deseos o aspiraciones?, ¿Hacia dónde queremos llegar?

El análisis FODA es una de las herramientas esenciales que provee de los insumos necesarios al proceso de planificación
estratégica proporcionando la información necesaria para la implementación de acciones y medidas correctivas, así como
la generación de nuevos o mejores proyectos de mejora.

Para la aplicación del análisis FODA (también conocido como DAFO o FLOA) es necesario tener en consideración los
siguientes aspectos: 1. Conocer la realidad de la situación. 2. Visualizar panoramas de cualquier ámbito aplicable a la
organización 3. Explorar políticas para atacar debilidades y convertirlas en oportunidades. 4. Definir una unidad de
pensamiento como una unidad de acción. 5. Diseñar y definir una visión estratégica para el desarrollo de la organización.
6. Formular propuestas estratégicas que contribuyan a crear las condiciones necesarias para un desarrollo sostenible.

Determinar las posibilidades reales que tiene la organización nos permitirá explotar más eficazmente los factores positivos
y neutralizar o eliminar el efecto de los factores negativos promoviendo el pensamiento basado en riesgos.

Al realizar un análisis FODA nos centraremos en el análisis interno (fortalezas y debilidades) y el nivel externo
(oportunidades y amenazas). En este orden de ideas esbozaremos los siguientes conceptos:

Fortalezas: Son todas aquellas potencialidades materiales o humanas, recursos que se controlan, capacidades y
habilidades que se poseen, actividades que se desarrollan positivamente, entre otras, que le dan a la organización una
posición privilegiada frente a la competencia. Son de vital importancia para funcionar y desarrollarse. Algunas de las
preguntas que se pueden realizar y que contribuyen en el desarrollo son: ¿Qué ventajas tiene la organización?, ¿Qué hace
la organización mejor que cualquier otra?.

Debilidades: Son todas aquellas deficiencias materiales o humanas, recursos de los que se carece, habilidades que no se
poseen, actividades que no se desarrollan positivamente, que provocan una posición desfavorable de la organización
frente a la competencia. Son las principales responsables del funcionamiento interno. Algunas de las preguntas que se
pueden realizar: ¿Qué se puede mejorar? ¿Que se debería evitar?

Oportunidades: Son aquellos factores que resultan positivos, favorables o explotables que se deben descubrir en el
entorno en el que actúa la organización y que permiten obtener ventajas competitivas. Esos factores se encuentran en el
medio natural, geográfico, cultural, social, político y económico en el que se mueve la organización. Se debe estar en la
capacidad de observar: ¿A qué buenas oportunidades se enfrenta la organización? y ¿De qué tendencias del mercado se
tiene información?

Amenazas: Son aquellas situaciones que provienen del entorno y que pueden llegar a atentar incluso contra la
permanencia de la organización. Significa desarrollar la capacidad necesaria de enfrentarlas y trabajar en ellas para
convertirlas en oportunidades o simplemente detectarlas para que no se conviertan en una real amenaza para sus objetivos.