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Hoy en día parece indiscutible el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación en
cualquier sector del mundo empresarial, ya que aportan un conjunto de recursos que son
necesarios para manipular y gestionar la información, que es el activo por excelencia más
importante en cualquier tipo de Organización, ya que con él tenemos las nóminas de nuestros
trabajadores, el contacto de nuestros clientes, la satisfacción de los usuarios, todos los datos
relativos a proyectos que ejecuta la empresa a lo largo del tiempo, etc.
En el sector de las Tecnologías de la Información, los técnicos siempre han tenido fama de no
documentar las actividades que realizan, o los cientos de procesos que pueden llegar a tener a lo
largo de su vida en la cabeza, aunque los beneficios para el negocio son claros: productividad,
eficiencia, base de conocimiento y básicamente la palabra clave que todos buscamos de una forma
u otra: “calidad” en la gestión de los servicios en general, y en particular en el caso que nos ocupa,
en las Tecnologías de la Información y la Comunicación.
Con la aparición de los Sistemas de Gestión de la Calidad tipo ISO 9001, se hizo un primer intento
por establecer procesos y de esta manera Gestionar la Calidad en el uso de las Tecnologías de la
Información, con el claro objetivo siempre de obtener la satisfacción de un cliente medio para el
que hace unos años las Tecnologías de la Información eran sinónimo de películas de ciencia
ficción.
Dado que los Sistemas de Gestión de la Calidad eran demasiado genéricos y las Tecnologías de la
Información cada vez eran más complejas y aparecían y requerían más procesos, se empezaron a
desarrollar nuevos Sistemas de Gestión orientados a tratar cuestiones concretas como la Calidad
en el ciclo de vida del Desarrollo del Software, la Calidad en la Gestión de Servicios de
Tecnologías de la Información, la Calidad en la Gestión de la Seguridad de la Información, la
Calidad en la Gestión de Activos Software, etc. de esta manera empezaron a aparecer a principios
del nuevo siglo, es decir a principios del año 2000.
La evolución en estos años con respecto la Calidad en las Tecnologías y los Sistemas de
Información, ha sido no solamente escribir, procedimental, planificar, ejecutar, revisar, y mejorar
procesos tecnológicos, sino orientar las Tecnologías, los Sistemas de Información y en definitiva
estos Sistemas de Gestión de la Calidad, al negocio, proporcionando además una serie de
principios para que la Dirección de la Organización pueda implicarse y pueda gestionar también
desde su perspectiva la Calidad en estos entornos tecnológicos [ CITATION Pab02 \l 12298 ].
1. Enfoque al cliente
Las adquisiciones de TI deben basarse en las necesidades detectadas
tras un análisis adecuado. Debe haber un equilibrio entre los
beneficios, oportunidades, costes y riesgos.
La incorporación de la tecnología es la mejor aliada para las
empresas, en el intento por mejorar la competitividad, posibilitando
la apertura a nuevos mercados.
2. Liderazgo
El liderazgo también esta prensente en las TI, ya que cada sistema,
debe contener permisos y las personas encargadas gerentes o
gobierno corporativo puede revisar esa informacióny a la vez
comunicarse mediante las TI. Integrar los esfuerzos en TI con el
propósito del negocio y las actividades. Desarrollar mecanismos de
organización, las estructuras, procesos y personal, para manejar con
éxito las interdependencias, y asegurarse de que las Tecnologías de
la información generen valor.
6. La mejora continua
Las TI deben apoyar a la organización y a la prestación de los
servicios para cumplir con los objetivos empresariales actuales y
futuros
El vínculo entre la industria y la tecnología se ha ido conformando
durante las últimas décadas mejorando la productividad y
haciendo más eficientes todos los procesos. Pero también nos
permite el desarrollo de nuevos productos que incorporen la
tecnología como fuente de ventaja competitiva y que se
identifiquen con las necesidades de los clientes. No obstante, la
tecnología debe estar integrada entre las prioridades estratégicas
de la empresa, para ganar eficacia en la obtención de resultados.