Universidad Del Azuay Facultad de Ciencias Jurídicas

John Bravo
Lectura y Escritura II
Leopoldo Rodas
Mayo 8, 2021

DEFICIENCIA NUTRICIONAL EN ADULTOS MAYORES

Los adultos mayores por diferentes factores no tienen una adecuada ingesta de
alimentos, esto se puede considerar como un factor deteriorante de su estado de salud.
Según “El colectivo de adultos mayores, es considerado por los expertos como uno de los
grupos más vulnerables de sufrir problemas nutricionales” (Raimunda et al, 2014). Estos
incluyen desde el sobrepeso y la obesidad potenciados, en parte, por la falta de actividad, y
con sus conocidas y temibles consecuencias en la presentación de enfermedades
cardiovasculares, diabetes y cáncer, a los déficits de micronutrientes, como la gran
prevalencia de déficit de vitamina B12 y anemia subsiguiente o la disminución de la
síntesis de vitamina D y sus consecuencias sobre las enfermedades óseas, o al desarrollo de
desnutrición calórico proteica y sarcopenia.

Existen factores que influyen en el estado nutricional del adulto mayor como son los
cambios en el modo de vida. A una edad ya avanzada presentan normalmente pérdida de la
dentición, lentitud de la digestión y pérdida de apetito, dificultad de manejar los utensilios
de comida, la falta de apetito es más un problema social, provocada por la depresión
causada por la soledad, no apoyo ni atención de la familia, depresión, falta de motivaciones
en su vida, falta de atención médica y de los familiares para detectar padecimientos que
requieren atención especial, además de la disminución de las sensaciones de olor, sabor,
vista y oído. Se presentan los principales cambios en la composición corporal y en el
funcionamiento, de los sistemas del cuerpo humano como la estatura que, a partir de los 50
años de edad disminuye entre uno y dos centímetros por década, debido principalmente por

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comprensión de las vértebras, modificaciones en el tamaño y la forma de los discos

vertebrales. Como consecuencia de las variaciones en el patrón de actividad física que
acompaña el envejecimiento de las personas se obtiene una reducción en la masa muscular
(sarcopenia), que da pie a la disminución del líquido vital en nuestro organismo a medida
que la edad avanza y puede afectar algunas funciones corporales. Los huesos también
disminuyen su densidad y la grasa por el contrario aumenta su redistribución de la masa
grasa que consiste en un desvío de la grasa subcutánea de las extremidades hacia el tronco.

La ingesta inadecuada de alimentos lo que provoca la desnutrición en los adultos

mayores generalmente se presenta por: depresión, aislamiento social, ignorancia nutricional
y pobreza, que tienen una influencia determinante en el estado nutricional. Para tener una
buena alimentación y nutrición porque es muy importante en esta etapa de la vida, cuando
el adulto mayor incorpora una alimentación saludable pueden retrasarse muchos de los
cambios asociados al proceso del envejecimiento contribuyendo de esta manera a mejorar
su proceso de envejecimiento, disfrutando de una buena calidad de vida que les permita
compartir más tiempo con su familia. Según Zambrano “La desnutrición es el estado
patológico que resulta del consumo inadecuado de uno a más nutrientes esenciales” (Falque
et al, 2004). Las grasas, azúcares y sal no forman parte de una buena alimentación,
aprovechar de alimentos naturales. Es recomendable incluir alimentos ricos en calcio para
fortalecer los huesos; hierro y ácido fólico para prevenir anemia y vitamina E para mejorar
las defensas y la absorción de hierro, nutrientes al cerebro y además acompañar de
actividad física moderada, combinar actividades de trabajo o labores domésticas con
ejercicio, jardinería, andar en bicicleta, caminar, tomar el sol producirá bienestar, energía,
alegría, sonrisas y obtendrá un cuerpo sano.

Cabe recalcar que por una mala nutrición llegan las personas de avanzada edad a
manifestar enfermedades. “La desnutrición es el estado patológico que resulta del consumo
inadecuado de uno o más nutrientes esenciales.” (Pallás, sf.). Una mala alimentación
durante la tercera edad puede dar lugar a enfermedades como: osteoporosis, anemia,
deficiencias de hierro, infecciosas, los problemas en la circulación y con el sistema
digestivo, enfermedades crónicas oncológicas y no oncológicas. La malnutrición se asocia

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con las enfermedades degenerativas, infecciosas, problemas en la circulación,

cardiovasculares, diabetes y en el peor de los casos muerte por cáncer. Cuando la
desnutrición es grave se debe llevar a cabo tratamientos que puedan mejorar al anciano.
“Algunas intervenciones apropiadas en pacientes con desnutrición pueden ser: asesoría
dietética, suplementos por vía oral, estimulación del apetito, alimentación a través de una
sonda enteral, o nutrición parenteral” (Falque et al, 2004), de esta manera pueda ir
recuperándose, obteniendo una buena salud. Para finalizar este trabajo, es importante
mencionar que hay que involucrarnos e informarnos más sobre esta etapa de la vida, para
así tener los respectivos conocimientos y en un futuro lleguemos a utilizar en nuestra vida o
en la de los demás.

CONCLUSIÓN

Lo primordial es mejorar los hábitos alimenticios en adultos mayores, tener una

dieta equilibrada y saber los valores adecuados para su alimentación eso hará que en el
futuro eviten enfermedades. Es muy importante recalcar que deben realizar actividad física
y no tener una vida sedentaria, nunca deben faltar los nutrientes y sobre todo beber mucha
agua. Será de beneficio si las familias adquieren más conocimientos sobre estos temas y así
ayudar al anciano a sentirse mejor y obtener una calidad de vida nutritiva.

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1Raimunda, A., Lozoya, M., Ferrer Diego, R., Marín, G., Martínez-Alzamora, N., Quiles,

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