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MITOCONDRIA Y RESPIRACION CELULAR

Las mitocondrias se reconocieron como una parte elemental de las células


eucariotas a finales del siglo XIX. Altmann (1890) descubrió unas estructuras
celulares que denominó bioblastos, que se podían teñir con fucsina, y que se
observaban en todas las células eucariotas. En 1914 ya se sabía que las
mitocondrias podían adoptar diferentes formas, como bastones, hilos o
entramados. Con la llegada del microscopio electrónico se comprobó que estaban
formadas por una doble membrana. En 1962 se propuso que las mitocondrias
crecían en tamaño y posteriormente se dividían por fisión, con lo cual su
morfología era cambiante. Actualmente hay sustancias fluorescentes que permiten
estudiar la dinámica de las mitocondrias in vivo.
Las mitocondrias son orgánulos descendientes de bacterias que se asociaron con
derivados de arqueas, ambos procariotas, para formar a las células eucariotas.
Asi, se propone que las mitocondrias surgieron hace unos 2000 millones de años
por endosimbiosis.

CONCEPTO Y PARTES DE LA MITOCONDRIA


Las mitocondrias son los orgánulos celulares que generan la mayor parte de la
energía química necesaria para activar las reacciones bioquímicas de la célula. La
energía química producida por las mitocondrias se almacena en una molécula
energizada llamada trifosfato de adenosina (ATP). Las mitocondrias contienen su
propio cromosoma (ADN). En general, las mitocondrias, y por lo tanto el ADN
mitocondrial, sólo se heredan de la madre.
Las mitocodrias son orgánulos unidos a la membrana, y lo hacen con dos
membranas diferentes. Eso es muy inusual para un orgánulo intracelular. Estas
membranas cumplen el objetivo de la mitocondria, que es esencialmente producir
energía. Esa energía es producida por sustancias químicas que siguen distintas
vías dentro de la célula, en otras palabras, son convertidas. Y ese proceso de
conversión produce energía en forma de ATP, ya que el fosfato es un enlace de
alta energía y proporciona energía para otras reacciones dentro de la célula. Así
que el propósito de la mitocondria es producir esa energía. Algunos tipos de
células tienen diferentes cantidades de mitocondrias porque necesitan más
energía.

La membrana mitocondrial externa es altamente permeable y contiene muchas


copias de una proteína denominada porina, la cual forma canales acuosos a
través de la bicapa lipídica. Así, esta membrana se convierte en una especie de
tamiz que es permeable a todas las moléculas menores de 5000 daltons,
incluyendo proteínas pequeñas.
Por el contrario la membrana mitocondrial interna es muy impermeable al paso de
iones y pequeñas moléculas. Las mitocondrias deben hacer de su membrana
interna una barrera suficientemente impermeable como para permitir un gradiente
de protones estable. Esto se podría conseguir con un incremento de colesterol,
que aumenta la hidrofobicidad de la membrana, pero, sin embargo, disminuiría la
fluidez. La membrana interna necesita fluidez e hidrofobicidad al mismo tiempo, lo
que parece ser necesario para la función de esta membrana. Para ello las
mitocondrias, carecen de colesterol, pero cuentan con la cardiolipina, que es un
fosfolípido muy insaturado, con lo que aumenta la hidrofobicidad evitando una
excesiva fluidez.
Por tanto, la matriz mitocondrial sólo contiene aquellas moléculas que puedan ser
transportadas selectivamente por estas dos membranas, siendo su contenido
altamente diferenciado del citosol. La membrana mitocondrial interna posee
numerosos pliegues hacia el interior mitocondrial
denominados crestas mitocondriales. Hay tres tipos morfológicos: discoidales,
tubulares y aplanadas.
Las crestas forman un compartimento distinto del resto de la membrana interna
puesto que su contenido en proteínas es muy diferente. El número y forma de las
crestas mitocondriales se cree que es un reflejo de la actividad celular. Las
regiones de la membrana interna que están próximas a la membrana externa,
denominadas regiones limitantes, son centros para el intercambio de lípidos,
importación de proteínas y ensamblaje de los complejos de la cadena respiratoria.
En las crestas se encuentran los complejos respiratorios funcionales y la ATP
sintasa. La conexión entre las crestas y la región limitante está mediada por una
región que forma un tubo muy delgado que limita el movimiento de las proteínas
solubles intermembranosas. Las crestas son una manera de incrementar
enormemente la superficie para el acomodo de las proteínas de la cadena
respiratoria y de las ATPasas.
En la matriz mitocondrial se encuentra el ADN, los ribosomas y los enzimas para
llevar a cabo procesos metabólicos. El ADN mitocondrial se encuentra en lugares
denominados nucleoides y cada nucleoide puede tener más de una molécula de
ADN. El ADN se encuentra comprimido por una proteína denominada TFAM.
También en el nucleoide hay proteínas para la replicación y reparación del ADN
mitocondrial. Éste suele tener unos 16500 pares de bases con unos 37 genes que
en humanos codifican para 13 proteínas, que son componentes de la cadena
respiratoria, 2 ARN ribosómicos y 22 ARN de transferencia, suficientes para la
síntesis de proteínas. La replicación del ADN mitocondrial no está acoplada al
ciclo celular y en cualquier momento de la vida de la célula puede haber
replicación de este ADN. Los nucleoides están asociados a la membrana
mitocondrial interna, mediada por el complejo proteico denominado MitOS.
Las mitocondrias, o porciones de la red mitocondrial, son desplazadas desde unas
partes de la célula a otras, tienen una extraordinaria movilidad y suelen localizarse
donde existe más demanda de energía o de calcio.
Las mitocondrias se comunican entre sí por varios mecanismos como liberación
de moléculas, contactos membrana membrana o por fusión/fisión total. También
parece haber nanotúbulos que conectan temporalmente mitocondrias cercanas.
Estos nanotúbulos conectan las matrices mitocondriales, por lo que están
formados por una doble membrana, tienen entre 40 y 200 nm y entre 1 y 30 µm de
largo. Los nanatubos entre mitocondrias necesitan kinesina y microtúbulos para su
formación. El estrés provocado por una mala regulación del calcio podría disparar
la formación de nanotúbulos y sólo se han observado en mitocondrias inmóviles.

RESPIRACION CELULAR AEROBIA


Respiración celular

La respiración celular puede ocurrir tanto aeróbicamente (utilizando oxígeno) como


aneróbicamente (sin oxígeno).

Durante la respiración celular aeróbica, la glucosa reacciona con el oxígeno,


formando ATP que puede ser utilizado por la célula. Se crea dióxido de carbono y
agua como subproductos.

La ecuación general para la respiración celular aeróbica es:

Durante la respiración celular, una molécula de glucosa se degrada poco a poco


en dióxido de carbono y agua. Al mismo tiempo, se produce directamente un poco
de ATP en las reacciones que transforman a la glucosa. No obstante, más tarde
se produce mucho más ATP en un proceso llamado fosforilación oxidativa. La
fosforilación oxidativa es impulsada por el movimiento de electrones a través de la
cadena de transporte de electrones, una serie de proteínas incrustadas en la
membrana interna de la mitocondria.

Estos electrones provienen originalmente de la glucosa y se trasladan a la cadena


de transporte de electrones con ayuda de los acarreadores de electrones NAD+ y
FAD, que se convierten en NADH y FADH2 cuando adquieren esos electrones.

GLUCOLISIS
La glucólisis es una serie de reacciones que extraen energía de la glucosa al
romperla en dos moléculas de tres carbonos llamadas piruvato. La glucólisis es
una vía metabólica ancestral —o sea, que su evolución ocurrió hace mucho
tiempo— y se encuentra en la gran mayoría de los organismos vivos hoy en día.
En los organismos que realizan respiración celular, la glucólisis es la primera
etapa de este proceso. Sin embargo, la glucólisis no requiere de oxígeno, por lo
que muchos organismos anaerobios —organismos que no utilizan oxígeno—
también tienen esta vía.

Paso 1. Un grupo fosfato se transfiere del ATP a la glucosa y la transforma en


glucosa-6-fosfato. La glucosa-6-fosfato es más reactiva que la glucosa y la adición
del fosfato retiene la glucosa dentro de la célula, porque la glucosa con un fosfato
es incapaz de atravesar por sí sola la membrana.

Paso 2. La glucosa-6-fosfato se convierte en su isómero, la fructosa-6-fosfato.

Paso 3. Un grupo fosfato se transfiere del ATP a la fructosa-6-fosfato y se produce


fructosa-1,6-bifosfato. Este paso lo cataliza la enzima fosfofructocinasa, que puede
ser regulada para acelerar o frenar la vía de la glucólisis.

Paso 4. La fructosa-1,6-bifosfato se rompe para generar dos azúcares de tres


carbonos: la dihidroxiacetona fosfato DHAP y el gliceraldehído-3-fosfato. Estas
moléculas son isómeros el uno del otro, pero solo el gliceraldehído-3-fosfato
puede continuar directamente con los siguientes pasos de la glucólisis.

Paso 5. La DHAP se convierte en gliceraldehído-3-fosfato. Ambas moléculas


existen en equilibrio, pero dicho equilibrio "empuja" fuertemente hacia abajo,
considerando el orden del diagrama anterior, conforme se va utilizando el
gliceraldehído-3-fosfato. Es así que al final toda la DHAP se convierte en
gliceraldehído-3-fosfato.

Paso 6. Dos semirreaciones ocurren simultáneamente:


1) la oxidación del gliceraldehido-3-fosfato (uno de los azúcares de tres carbonos
que se forma en la fase inicial),

2) la reducción del  NAD+ en NADH y H+. La reacción general es exergónica y


libera la energía que luego se usa para fosforilar la molécula, lo que forma 1,3-
bifosfoglicerato.

Paso 7. El 1,3-bifosfoglicerato dona uno de sus grupos fosfato al ADP, lo


transforma en una molécula de ATP y en el proceso se convierte en 3-
fosfoglicerato.

Paso 8. El 3-fosfoglicerato se convierte en su isómero, el 2-fosfoglicerato.

Paso 9. El 2-fosfoglicerato pierde una molécula de agua y se transforma en


fosfoenolpiruvato PEP.

El PEP es una molécula inestable, lista para perder su grupo fosfato en el paso
final de la glucólisis.

Paso 10.  PEP de inmediato dona su grupo fosfato al  ADP, y se forma la segunda
molécula de  ATP. Al perder su fosfato,  PEP text se convierte en piruvato, el
producto final de la glucólisis.
FORMACION DE ACETIL CO- ENZIMA A
El piruvato se produce durante la glucólisis en el citoplasma, pero la oxidación del
piruvato ocurre en la matriz mitocondrial (en eucariontes). Por lo tanto, antes de
que comiencen las reacciones químicas, el piruvato debe entrar a la mitocondria
atravesando su membrana para llegar a la matriz.

En la matriz, el piruvato se modifica en una serie de pasos:

Paso 1. Se corta el grupo carboxilo del piruvato y se libera como molécula de
dióxido de carbono: el resultado es una molécula de dos carbonos.

Paso 2. La molécula de dos carbonos del paso 1 se oxida, los electrones que se
pierden en la oxidación son captados por  NAD+ y se forma  NADH.

Paso 3. La molécula de dos carbonos oxidada —un grupo acetilo, resaltado en
verde— se une a la coenzima A (CoA) una molécula orgánica derivada de la
vitamina B5, y se forma acetil-CoA. El acetil- CoA a veces se clasifica como una
molécula acarreadora, cuya función aquí es transportar el grupo acetilo hacia el
ciclo del ácido cítrico.
CICLO DE KREBS
el ciclo del ácido cítrico es una pieza central de la respiración celular. Toma
acetil CoA - producida por la oxidación del piruvato y derivada originalmente de la
glucosa - como su materia prima y, en una serie de reacciones redox, recolecta
gran parte de la energía de sus enlaces en forma de moléculas de  NADH FADH2
ATP. Los acarreadores de electrones reducidos – NADH y FADH2 - generados en
el ciclo de los ácidos tricarboxílicos pasarán sus electrones a la cadena de
transporte de electrones y, mediante fosforilación oxidativa, generarán la mayor
parte del ATP producido en la respiración celular.
el ciclo del ácido cítrico tiene lugar en la matriz de la mitocondria al igual que la
conversión del piruvato en acetil-\text{CoA}CoAstart text, C, o, A, end text
Paso 1. En el primer paso del ciclo del ácido cítrico, el acetil-CoA se une con una
molécula de cuatro carbonos, oxalacetato, y libera el grupo CoA a la vez que
forma una molécula de seis carbonos llamada citrato.

Paso 2. En el segundo paso, el citrato se convierte en su isómero isocitrato. En


realidad, este es un proceso de dos pasos en el que primero se retira una
molécula de agua que luego se vuelve a añadir; por eso, a veces describen al ciclo
del ácido cítrico como una vía de nueve pasos en lugar de los ocho que aquí
enlistamos.

Paso 3. En el tercer paso, el isocitrato se oxida y libera una molécula de dióxido
de carbono, con lo que queda una molécula de cinco carbonos (el α-
cetoglutarato). Durante este paso NAD+se reduce a  NADH. La enzima que
cataliza este paso, la isocitrato deshidrogenasa, es un importante regulador de
la velocidad del ciclo del ácido cítrico.

Paso 4. El cuarto paso es similar al tercero. En este caso, es el α-cetoglutarato


que se oxida, lo que reduce un NAD+ en NADH  y en el proceso libera una
molécula de dióxido de carbono. La molécula de cuatro carbonos resultante se
une a la coenzima A y forma el inestable compuesto succinil-CoA. La enzima que
cataliza este paso, α-cetoglutarato deshidrogenasa, también es importante en la
regulación del ciclo del ácido cítrico.

Paso 5. En el quinto paso, la CoA de la succinil – CoA se sustituye con un grupo
fosfato que luego es transferido a ADP para obtener. En algunas células se
utiliza GDP (guanosín difosfato) en lugar de ADP con lo que se obtiene GTP
(guanosín trifosfato) como producto. La molécula de cuatro carbonos producida en
este paso se llama succinato.
Paso 6. En el sexto paso se oxida el succinato y se forma otra molécula de cuatro
carbonos llamada fumarato. En esta reacción se transfieren dos átomos de
hidrógeno (junto con sus electrones) a FAD para formar FADH2 La enzima que
realiza este paso se encuentra incrustada en la membrana interna de la
mitocondria, por lo que el FADH2  puede transferir sus electrones directamente a
la cadena de transporte de electrones. 
Paso 7. En el séptimo paso se le añade agua a la molécula de cuatro carbonos
fumarato, con lo que se convierte en otra molécula de cuatro carbonos llamada
malato.

Paso 8. En el último paso del ciclo del ácido cítrico, se regenera el oxalacetato (el
compuesto inicial de cuatro carbonos) mediante la oxidación del malato. En el
proceso, otra molécula de NAD+ se reduce a NADH.

TRANSPORTE DE ELECTRONES Y QUIOSMOSIS


La cadena de transporte de electrones es una serie de proteínas y moléculas
orgánicas que se encuentran en la membrana interior de la mitocondria. Los
electrones pasan de un miembro de la cadena de transporte al siguiente en una
serie de reacciones redox. La energía liberada en estas reacciones se captura
como un gradiente de protones, el cual se utiliza a su vez para para formar ATP en
un proceso llamado quimiosmosis. En conjunto, la cadena de transporte de
electrones y la quimiosmosis constituyen la fosforilación oxidativa.
 Entrega de electrones por NADH y FADH2. Los acarreadores de
electrones (NADH y FADH2 reducidos en otros pasos de la respiración celular
transfieren sus electrones a las moléculas cercanas al inicio de la cadena de
transporte. En el proceso se convierten en NAD+ y FAD, que pueden ser
reutilizados en otros pasos de la respiración celular.

 Transferencia de electrones y bombeo de protones. Conforme se


mueven los electrones en la cadena, se desplazan de un nivel de energía más alto
a uno más bajo, lo que libera energía. Parte de esta energía se utiliza para
bombear iones de H+ lo que los desplaza fuera desde la matriz hacia el espacio
intermembranal. Este bombeo establece un gradiente electroquímico.

 Separación de oxígeno molecular para formar agua. Al final de la


cadena de transporte de electrones, los electrones se transfieren a una molécula
de oxígeno, la cual se rompe a la mitad y recolecta H+ para formar agua.

 Síntesis de ATP impulsada por un gradiente. Cuando fluyen por el


gradiente de regreso hacia la matriz, los iones de H+ pasan a través de una
enzima llamada ATP sintasa, la cual aprovecha el flujo de protones para sintetizar
ATP.

La cadena de transporte de electrones es un conjunto de proteínas y moléculas


orgánicas incrustadas en la membrana, la mayoría de las cuales se organizan en
cuatro grandes complejos nombrados del I al IV. En eucariontes, muchas copias
de estas moléculas se encuentran en la membrana mitocondrial interna. En
procariontes, los componentes de la cadena de transporte de electrones están en
la membrana plasmática.
Conforme los electrones viajan a través de la cadena, se desplazan de un mayor
nivel de energía a uno inferior y se mueven de moléculas menos ávidas de
electrones o otras más ávidas. En estas transferencias de electrones "cuesta
abajo" se libera energía y varios de los complejos de proteína utilizan la energía
liberada para bombear protones desde la matriz mitocondrial al espacio de
intermembranal para formar un gradiente de protones.

La cadena de transporte de electrones es un conjunto de proteínas y moléculas


orgánicas incrustadas en la membrana, la mayoría de las cuales se organizan en
cuatro grandes complejos nombrados del I al IV. En eucariontes, muchas copias
de estas moléculas se encuentran en la membrana mitocondrial interna. En
procariontes, los componentes de la cadena de transporte de electrones están en
la membrana plasmática.

Conforme los electrones viajan a través de la cadena, se desplazan de un mayor


nivel de energía a uno inferior y se mueven de moléculas menos ávidas de
electrones o otras más ávidas. En estas transferencias de electrones "cuesta
abajo" se libera energía y varios de los complejos de proteína utilizan la energía
liberada para bombear protones desde la matriz mitocondrial al espacio de
intermembranal para formar un gradiente de protones.

iclo del ácido cítrico.

 El NADH es muy bueno donando electrones en reacciones redox (o sea


que sus electrones están en un nivel de energía alto), por lo que puede transferir
sus electrones directamente al complejo I y se transforma otra vez en NAD + El
movimiento de los electrones a través del complejo I en una serie de reacciones
redox libera energía, la cual el complejo usa para bombear protones desde la
matriz hacia el espacio intermembranal.

 El FADH_22start subscript, 2, end subscript no es tan bueno para donar


electrones como el NADH (o sea que sus electrones se encuentran en un nivel de
energía más bajo), por lo que no puede transferir sus electrones hacia el complejo
I. En su lugar, introduce los electrones a la cadena de transporte a través del
complejo II, el cual no bombea protones a través de la membrana.

Después de los dos primeros complejos, los electrones del NADH y del FAD2
recorren exactamente la misma ruta. El complejo I y el II transfieren sus electrones
a un acarreador pequeño y móvil de electrones llamado ubiquinona (Q) que se
reduce y transforma en QH2, se transporta por la membrana y entrega sus
electrones al complejo III. El movimiento de los electrones por el complejo III
bombea más protones a través de la membrana y luego los electrones se
transfieren a otro acarreador móvil llamado citocromo C (cit C). El cit C transporta
los electrones hacia el complejo IV, donde se bombea el último lote de iones de
H+ a través de la membrana. El complejo IV transfiere los electrones a O2, que se
parte en dos átomos de oxígeno y acepta protones de la matriz para formar agua.
Se necesitan 4 electrones para reducir cada molécula de O2, mientras que en el
proceso se forman dos moléculas de agua.

El proceso en el que la energía del gradiente de protones se utiliza para generar


ATP se llama quimiosmosis. De manera más general, la quimiosmosis se puede
referir a cualquier proceso en el que la energía almacenada en un gradiente de
protones se utiliza para hacer un trabajo. La quimiosmosis es notable por
contribuir con más del 80% del ATP obtenido de la degradación de la glucosa en
la respiración celular, pero no es exclusiva de esta última. Por ejemplo, la
quimiosmosis también es importante en las reacciones dependientes de la luz en
la fotosíntesis.

 Regenera los acarreadores de electrones. El NADH y el FADH2 donan


sus electrones a la cadena de transporte de electrones y se convierten otra
vez en NAD+ y FAD. Esto es importante porque las formas oxidadas de los
acarreadores de electrones se utilizan en la glucólisis y en el ciclo del ácido
cítrico, así que deben estar disponibles para mantener estos procesos en
funcionamiento.

 Forma un gradiente de protones. La cadena de transporte genera un


gradiente de protones a través de la membrana interna de la mitocondria:
en el espacio intermembranal hay una concentración más alta de H+ y en la
matriz hay una concentración más baja. Este gradiente es una forma de
energía almacenada que, como veremos, se puede utilizar para generar
ATP.

RESPIRACION ANAEROBIA
La respiración celular anaerobia es similar a la respiración celular aerobia en
que los electrones extraídos de una molécula de combustible pasan a través de
una cadena de transporte de electrones para impulsar la síntesis de ATP Algunos
organismos utilizan sulfato (SO42) como aceptor final de electrones al final de la
cadena de transporte, mientras que otros utilizan nitrato (NO3−) azufre o una de
otras varias moléculas.

La fermentación es otra vía anaeróbica (no que requiere oxígeno) para degradar la
glucosa, esta se realiza en muchos tipos de células y organismos. En
la fermentación, la única vía de extracción de energía es la glucólisis, con uno o
dos reacciones extras al final.

La fermentación y la respiración celular comienzan del mismo modo, con la


glucólisis. Sin embargo, en la fermentación, el piruvato producido en la glucólisis
no continúa su oxidación ni hacia el ciclo del ácido cítrico, y no funciona la cadena
de transporte de electrones. Dado que la cadena de transporte de electrones no
es funcional, el NADH que se produce en la glucólisis no puede entregar allí sus
electrones para regresar a NAD+
Entonces, el propósito de las reacciones extras en la fermentación es regenerar el
acarreador de electrones NAD+, a partir del NADH producido en la glucólisis. Las
reacciones adicionales logran esto dejando que el NADH entregue sus electrones
a una molécula orgánica (como el piruvato, producto final de la glucólisis). Esta
entrega permite que continúe la glucólisis al asegurar un suministro constante de
NAD+

FERMENTACION LACTICA

En la fermentación láctica, el NADH transfiere sus electrones directamente al


piruvato y se obtiene lactato como producto de degradación. El lactato, que es la
forma desprotonada del ácido láctico, le da al proceso su nombre. Las bacterias
que forman el yogur realizan la fermentación del ácido láctico al igual que los
eritrocitos de tu cuerpo, los cuales no tienen mitocondrias y por lo tanto, no
pueden llevar a cabo la respiración celular.

Las células musculares llevan a cabo la fermentación láctica, pero solo cuando
tienen muy poco oxígeno como para continuar la respiración aeróbica, como
cuando haces ejercicio muy intenso. Alguna vez se pensó que la acumulación de
lactato en los músculos era responsable del dolor causado por el ejercicio, pero
investigaciones recientes sugieren que tal vez esa no sea la razón.

El ácido láctico producido en las células musculares se transporta a través del


torrente sanguíneo hacia el hígado, donde se vuelve a convertir en piruvato y se
continúa de manera normal con las reacciones restantes de la respiración celular.
FERMENTACION ALCOHOLICA

Otro proceso fermentativo muy conocido es la fermentación alcohólica, en la


cual el NADH dona sus electrones a un derivado del piruvato y produce etanol
como producto final.

Para obtener etanol a partir de piruvato, se usan dos pasos. En el primer paso, al
piruvato se le retira un grupo carboxilo y se libera como dióxido de carbono, con lo
que se produce una molécula de dos carbonos llamada acetaldehído. En el
segundo paso, el NADH dona sus electrones al acetaldehído y regenera el NAD+
a la vez que genera etanol.

La fermentación alcohólica de las levaduras produce el etanol de bebidas


alcohólicas como la cerveza y el vino. Sin embargo, el alcohol en grandes
cantidades es tóxico para las levaduras (al igual que para los seres humanos), lo
que establece un límite superior en el porcentaje de alcohol en estas bebidas. La
tolerancia de las levaduras al etanol abarca desde el 5 por ciento hasta el 21 por
ciento según la cepa de levadura y las condiciones ambientales.

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