1.
Niño: Cyril
Curioso
inquieto
2.
“Era una tarde calurosa y el vagón del tren también estaba caliente; la siguiente parada, Temple
combe, estaba casi a una hora de distancia. Los ocupantes del vagón eran una niña pequeña, otra
niña aún más pequeña y un niño también pequeño. Una tía, que pertenecía a los niños, ocupaba
un asiento de la esquina; el otro asiento de la esquina, del lado opuesto, estaba ocupado por un
hombre soltero que era un extraño ante aquella fiesta, pero las niñas pequeñas y el niño pequeño
ocupaban, enfáticamente, el compartimiento.”
3.-
1.-Espacio psicológico: Aburrimiento por el viaje largo. La mayoría de los comentarios de la tía
empezaban por «No», y casi todos los de los niños por «¿Por qué?». El hombre soltero no decía
nada en voz alta.
2.- Espacio físico: Un vagón tren. ” Era una tarde calurosa y el vagón del tren también estaba
caliente.”
3.- Espacio social: Los ocupantes del vagón eran una niña pequeña, otra niña aún más pequeña y
un niño también pequeño. Una tía, que pertenecía a los niños, ocupaba un asiento de la esquina;
el otro asiento de la esquina, del lado opuesto, estaba ocupado por un hombre soltero.
4.-
1.- El ceño fruncido del soltero se iba acentuando hasta estar ceñudo. La tía decidió, mentalmente,
que era un hombre duro y hostil. Ella era incapaz por completo de tomar una decisión satisfactoria
sobre la hierba del otro campo.
2.- La niña más pequeña creó una forma de distracción al empezar a recitar «De camino hacia
Mandalay». Solo sabía la primera línea, pero utilizó al máximo su limitado conocimiento. Repetía
la línea una y otra vez con una voz soñadora, pero decidida y muy audible; al soltero le pareció
como si alguien hubiera hecho una apuesta con ella a que no era capaz de repetir la línea en voz
alta dos mil veces seguidas y sin detenerse. Quienquiera que fuera que hubiera hecho la apuesta,
probablemente la perdería.
3.- Acérquense aquí y escuchen mi historia -dijo la tía cuando el soltero la había mirado dos veces a
ella y una al timbre de alarma.
4.- No parece que tenga éxito como contadora de historias -dijo de repente el soltero
desde su esquina.
La tía se ofendió como defensa instantánea ante aquel ataque inesperado.
-Es muy difícil contar historias que los niños puedan entender y apreciar -dijo fríamente.
-No estoy de acuerdo con usted -dijo el soltero.
-Quizá le gustaría a usted explicarles una historia -contestó la tía.
5.- Érase una vez -comenzó el soltero- una niña pequeña llamada Berta que era
extremadamente buena.
El interés suscitado en los niños momentáneamente comenzó a vacilar en seguida; todas
las historias se parecían terriblemente, no importaba quién las explicara.
Después de estas evidencias podemos concluir que el conflicto es poder hacer el viaje más
entretenido a los niños contando historias a la cual la tía no tenía esa habilidad y si el
hombre soltero.
5.-
1.- La tía cuenta una historia a los niños la cual no entretiene a los niños.
2.-El hombre soltero cuestiona a la tía y decide contar él una historia, la cual es del gusto de los
niños.
6.-
La idea principal del cuento es el suspenso de la historia relatada por el hombre soltero.
7.-
La historia que se desarrolla en el cuento de Saki es sobre tres niños y su tía que realizaron
un viaje en tren. Junto a ellos también viajaba un hombre soltero que se encontraba
sentado en el último asiento. La tía conversaba con los niños para entretenerlos y éstos
cuestionaban constantemente sus observaciones, preguntando ¿por qué? ¿Por qué?,
buscaban un trasfondo a todo lo que veían por más sencillo que sea, por ejemplo: “[…]
¿por qué están sacando a esas ovejas de ese campo? Preguntó…” esto demuestra la
curiosidad propia de la edad. Para calmarlos la tía intenta contarles un cuento, pero ellos
responden en forma abúlica. La apatía de los oyentes demuestra que la tía no era buena
narradora, ya que no lograba atraparlos con su relato. El que encerraba una historia por
demás sencilla de una niña muy buena que fue salvado de un toro, y presentaba un final
feliz. Esta historia es considerada de “estúpida” por sus receptores – los niños son los
mejores críticos-.
Entonces, luego de escuchar a los niños cuestionar a su tía, el hombre soltero hace un
comentario sobre el asunto y los niños insisten en que les cuente una historia.
El hombre comienza a narrar su propio relato, la historia se trata de una niña llamada
Bertha que era muy buena, “extraordinariamente buena”, era tan buena que había
recibido muchas medallas por sus cualidades, esto no les agradó a los niños que
escuchaban y su interés comenzó a decaer, “[…] todos los cuentos eran espantosamente
parecidos, los contara quien los contara…” La cita anterior está enfocada desde el punto
de vista de los niños, quienes están cansados de la narrativa convencional. A partir de esta
situación el narrador cambia el giro de su relato, una niña pregunta y él responde
inmediatamente lo que ella no esperaba escuchar, que Bertha era “horriblemente buena”,
entonces el uso de esta antítesis (recurso literario) provoca una reacción favorable en su
público, impacta a los niños, ya que difiere de los demás cuentos a los que estaban
acostumbrados.