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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria


Universidad Bolivariana de Venezuela
Eje Municipal India Guanipa
PFG Estudios Jurídicos Estado Anzoátegui
Unidad Curricular: Sociedad, Estado y Constitución

EL DERECHO INDIGENA EN VENEZUELA

Facilitadora: Estudiante:
Prof. Andry Castillo Nexys Medina C.I. 8.265.838

Barcelona, 26 de abril de 2021


DERECHOS INDIGENAS EN VENEZUELA

A diferencia de otros países de Latinoamérica, hasta 1999 en Venezuela los


pueblos indígenas no contaban con un reconocimiento constitucional explícito de
derechos que respaldaran y protegieran su cultura, sus formas de vida, espacios
vitales, y propiciara la atención a los indígenas ante problemas derivados de las
contingencias sociales, económicas y de las políticas del desarrollo nacional, lo cual
colocaba a Venezuela en un desfase constitucional y jurídico en esa materia. Esta
es la apreciación de algunos analistas y actores políticos vinculados con los
intereses indígenas del país, quienes sostienen que con la Constitución de 1961 los
indígenas estaban excluidos, invisibilizados y sometidos a una tendencia
asimiladora. Esta situación cambia con la Constitución de la República Bolivariana
de Venezuela de 1999 - CRBV, en la cual están reconocidos los derechos
diferenciados para los pueblos indígenas y su aporte a la construcción de la nación,
lo cual se considera una reivindicación inédita en la historia y política nacional
(Clarac, 2003; Leal, 2006).
En efecto, desde la década de 1990 acontece una importante
constitucionalización de los derechos indígenas en toda América Latina,
contextualizados en procesos de institucionalización democráticas; es decir, se dan
importantes procesos de cambios políticos tendientes a una mayor democratización
y cambios o reformas constitucionales que hacen explícitos en los textos
constitucionales los derechos de los pueblos indígenas que venían tratándose con
abstracción jurídica en épocas previas en varios países de América Latina, lo que
de por sí implica una redefinición del espacio público y de mayor presencia y
participación de estos pueblos (Assies, Van der Haar & Hoekema, 2002; Carbonell,
2003).
Esa constitucionalización no ha estado exenta de problemas: los estudios
sobre la materia abordan muchas veces complicaciones políticas, jurídicas, sociales
y culturales comunes a todos los países, relacionadas con el pluralismo jurídico a
propósito del reconocimiento de la justicia tradicional de los pueblos indígenas; la
tensión entre bienestar y asistencialismo y el impacto sobre las formas de vida de
los indígenas; la relación entre Estado, pueblos indígenas y ambiente cuando se
trazan estrategias de desarrollo; las políticas preventivas sanitarias y la práctica de
la medicina tradicional; la relación con los derechos humanos como restricción a los
derechos diferenciados, participación política, autonomías administrativas y
construcción del marco democrático; los condicionamientos jurídicos del derecho
internacional; los problemas de género y la equidad; territorios y hábitats para los
pueblos y comunidades indígenas; la educación intercultural y el respeto a la
diferencia, etc.
Para Venezuela, con su CRBV, el reconocimiento de los derechos
diferenciados para los indígenas representa un avance político y jurídico
significativo en su historia que da la impresión de colocar al país a la vanguardia en
esta materia.
La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, reconoce en el
Preámbulo el aporte de los indígenas en la construcción de la nación venezolana y
dedica su Capítulo VIII a exponer los derechos que son reconocidos por el Estado
venezolano a los pueblos y comunidades indígenas, entre los cuales están el
reconocimiento de su organización económica, social y cultural; la titularidad sobre
las tierras que han ocupado desde tiempos ancestrales; el hecho de que las lenguas
indígenas pasen a ser idiomas oficiales para los pueblos indígenas; la promoción
de los derechos culturales, tradiciones, cosmovisión e identidad étnica; el derecho
a gozar del bienestar nacional, entiéndase salud, educación, trabajo, entre otros; el
derecho a la participación política y a la gestión de proyectos que de alguna manera
los afecten, además de ser reconocidos como parte integrante y patrimonio de la
nación venezolana con su correspondiente obligación política (CRBV, 2000, pp. 43-
45).
Por su parte, el desarrollo legislativo posterior aprueba una serie de
instrumentos legales mediante los cuales hacer operativo los contenidos
constitucionales relativos a derechos indígenas, entre los que destacan: Ley de
Demarcación y Garantía del Hábitat y Tierras de los Pueblos Indígenas (2001); Ley
de Idiomas Indígenas - LII (2008); Ley de Educación Indígena (2013); ratificación en
2001 del Convenio nº 169 sobre Pueblos Indígenas y Tribales de la Organización
Internacional del Trabajo - OIT, como lo más relevante; mediante el cual el Estado
Venezolano se obliga a respetar las normas del derecho consuetudinario,
instituciones y métodos de control social de los pueblos indígenas. Asimismo,
impulsó la aprobación del Proyecto de Ley Orgánica de Pueblos y Comunidades
Indígenas (LOPCI–2005), que regulará todo lo concerniente a la aplicación del
derecho indígena y su incidencia con la jurisdicción ordinaria, y que en su artículo
124 reconoce el “… Derecho Propio de los pueblos indígenas”
Igualmente, en 2007, por decreto presidencial se crea el Ministerio del Poder
Popular para los Pueblos Indígenas, desde el cual se centralizan las políticas
públicas dirigidas a los indígenas, sin menospreciar lo que se hace en esta materia
en otras dependencias administrativas, además de contar con ciertas previsiones
en los distintos programas sociales de carácter asistencial, entre ellos la Misión
Guaicaipuro (2004 y 2007)

FUENTES DEL DERECHO INDÍGENA


El derecho indígena, difícilmente será compatible a la legislación ordinaria,
por cuanto son dos sistemas diferentes, producto de procesos históricos distintos y
dos concepciones del mundo diferentes.
La sola llegada de Cristóbal Colon a nuestras tierras, genero un derecho
internacional de los pueblos indígenas. Sin embargo, existe una cantidad de
material escrito y otras leyes y tradiciones propias de nuestro pueblo que bien
podrían ser los orígenes reales del Derecho Indiano. He aquí algunas de estas
fuentes:
La doctrina eurocentrista del descubrimiento de América; Durante 400
años los indígenas fueron tratados como objetos en el derecho internacional. Tal
vez sea necesario examinar mucho más la historia de las relaciones jurídico-
sociales entre los pueblos indígenas y los Estados que invadieron y colonizaron los
territorios indígenas. Vale el caso de la llamada "pacificación de la Araucania "en
Chile entre 1860 y 1883. La "Conquista del Oeste en los EEUU" o la "Conquista del
Desierto en la República Argentina". Hoy día se puede afirmar que las leyes del
sistema europeo que regulaban las interacciones "civilizados-barbaros" o
civilizados- indígenas" no eran más que instrumentos de discriminación racial contra
los derechos de los pueblos indígenas de América.
Las bulas Papales del siglo XV: El Papa Alejandro VI dictamino dos leyes o
bulas durante los días 3 y 4 de mayo de 1493, suponemos que la Reina Isabel y el Rey
Fernando V de España a través de sus abogados escribieron este decreto que fue
firmado por el Papa Alejandro VI, llamada Bula Papal Inter Caetera Divinai. La
misma bula papal resuelve algunos problemas que España tenía con Portugal en
esa lucha por los descubrimientos de la época. Lo interesante es que ni los Reyes
de España ni su santidad el Papa consultaron a los indígenas acerca de las leyes
que estaban promulgando y que en la práctica se impusieron en América por los
próximos 500 años. Los colonizadores europeos invadieron América indígena y más
tarde los Estados nacionales hicieron lo mismo. En el siglo XV la Iglesia Católica y
el Vaticano no hacían más que sancionar y legalizar la negación de los derechos de
los pueblos indígenas en América.
Los escritos de Francisco de Vitoria y Bartolome de las Casas: Fray
Francisco de Vitoria fue uno de los primeros pensadores europeos en concebir la
idea de una sociedad de naciones. Vale decir la idea que se hizo realidad 400 años
más tarde con la creación de la organización de las Naciones Unidas. Los escritos
de Vitoria circulan en las Universidades de Norteamérica y Europa pues ponen de
manifiesto la modernidad de su pensamiento jurídico a pesar de haber vivido
durante los años 1483 y 1546. Vitoria no solamente concibió la idea de un sistema
de Estados soberanos sometidos a las normas de un Derecho Internacional de
coordinación, sino que planteo la instauración de un orden mundial al que deben
subordinarse las soberanías nacionales, y cuyo objetivo internacional fundamental
sería un ius inter gentes amparador de los derechos humanos.

El Consejo de Indias de España siglos XV al XVII: El Consejo de Indias de


España es también una fuente del Derecho Internacional Indiano, toda vez que aquí
existieron un conjunto de normas jurídicas que fueron aplicadas o no durante la
dominación española en América. El estudio de la documentación sobre las leyes
de India revela una actitud protectora por parte de los reyes de España hacia los
indígenas de la época.
En los Parlamentos y Tratados indígenas con otros Estados: La
Convención de Viena sobre el derecho de los Tratados aprobada por las Naciones
Unidas en mayo de 1969 y que entro en vigor el 27 de enero de 1980, dice que los
tratados son una función fundamental en la historia de las relaciones
internacionales. El mismo documento internacional define lo que entendemos por
Tratado: Letra a) "Se entiende por "Tratado" un acuerdo internacional celebrado por
escrito entre Estados y regidos por el derecho Internacional, ya conste en un
instrumento único o en dos o más instrumentos conexos y cualquiera que sea su
denominación particular.
En las costumbres, leyes y tradiciones colectivas de los Indígenas: Otra
fuente del derecho internacional es sin lugar a dudas, las costumbres, leyes y
tradiciones de los pueblos indígenas. Nuestro pueblo mapuche como muchos otros
pueblos indígenas del continente se ligan estrechamente a la tierra, a la naturaleza,
y al como en su concepción del mundo, la identidad cultural como pueblo y el
conjunto de todas las otras identidades contenidas en el Ad-mapa.
EL DERECHO CONSUETUDINARIO INDÍGENA EN VENEZUELA
A muchos resulta exagerada y riesgosa la posibilidad de darle la potestad de
administrar justicia a los dirigentes naturales sobre los miembros de una comunidad
indígena. Sin embargo, ya la Recopilación de Indias, como cuerpo legislativo que
pretendía atenuar los efectos de la conquista, permitió que los indios mantuvieran
sus usos y costumbres para resolver sus problemas, siempre que no fueran injustas
en el trato con el blanco. En 1542, esta legislación ordenó al Tribunal o Audiencia
de Indias lo siguiente: “... no den lugar a que, en los pleitos entre indios, o con ellos,
se hagan procesos ordinarios, ni haya largas, como suele acontecer por la malicia
de algunos abogados y procuradores, sino que sumariamente sean determinados,
guardando sus usos y costumbres no siendo claramente injustos ...”.
Esta autonomía jurisdiccional distinta a la jurisdicción ordinaria, había sido
reconocida con anterioridad con la creación de la Ley de Misiones en 1915, seguida
por su Reglamento de 121, mediante el fuero eclesiástico otorgado a los misioneros
religiosos sobre los indígenas. Así tenemos que la Consultoría Jurídica del
Ministerio de Justicia, según Dictamen Nº 167–1, de fecha 14 de diciembre de 1962,
dejó por sentado que las Misiones son “... organismos de carácter público que se
presentan con autonomía funcional, realizando labores de civilización de indígenas”,
a quienes además se les dio poder de policía especial “... bajo las condiciones que
juzguen convenientes”.
De igual modo, este mismo Organismo estableció que “… los indígenas no
están sometidos a otra jurisdicción distinta de la del respectivo Superior o Vicario”,
afirmando que la “Misión está separada de toda otra jurisdicción distinta de la del
Ejecutivo Nacional y, en consecuencia, sobre el indígena no tienen competencia, ni
por la materia, ni por razón de la persona, los jueces ordinarios ni los especiales”.
En igual sentido se pronunció la Dirección de Justicia del Ministerio de Relaciones
Interiores, cuando sostuvo lo siguiente: “Corresponde exclusivamente a la misión
juzgar, con el altísimo sentido moral que el caso requiere, el grado de
responsabilidad que pudiera presumirse en el indígena delincuente no civilizado y
aplicarle las sanciones que estime adecuadas, ya que sería inadmisible que un ser
en estado primitivo fuese sometido a la jurisdicción penal ordinaria”.
No obstante, queremos significar que se ha venido reconociendo
implícitamente el derecho consuetudinario de los pueblos indígenas, a través de los
múltiples arreglos levantados mediante actas por funcionarios de las Oficinas
Regionales de Asuntos Indígenas del país, la Guardia Nacional y la Confederación
de Indígenas de Venezuela, en los cuales por medio del diálogo de las partes
involucradas en el conflicto, se ha puesto fin a innumerables casos por vía pacífica,
sin mediar autoridad judicial alguna.
LA JURISDICCIÓN ESPECIAL INDÍGENA EN VENEZUELA
Aparte del capítulo de los derechos indígenas, existen otras disposiciones
constitucionales que se vinculan estrechamente con tales derechos colectivos,
como es el caso del artículo 260 de la Constitución Nacional, en el cual se reconoce
por primera vez la jurisdicción especial indígena como mecanismo alterno de
justicia, en los siguientes términos: “Las autoridades legítimas de los pueblos
indígenas podrán aplicar en su hábitat instancias de justicia con base en sus
tradiciones ancestrales y que sólo afecten a sus integrantes, según sus propias
normas y procedimientos, siempre que no sean contrarios a esta Constitución, a la
ley y al orden público. La ley determinará la forma de coordinación de esta
jurisdicción especial con el sistema judicial nacional”.
El establecimiento de este importante derecho colectivo posibilita a su vez un
doble reconocimiento. En primer lugar, reconoce la jurisdicción indígena especial,
es decir, la potestad pública ejercida por las autoridades indígenas legítimas de los
distintos pueblos y comunidades indias, para ejercer funciones de justicia, de
acuerdo con sus tradiciones, usos y costumbres, con capacidad incluso de crear y
modificar normas. La competencia que se les asigna a estas autoridades se
extiende no sólo a la resolución de conflictos de orden criminal, sino también que
puede ser aplicable a los asuntos laborales, mercantiles y civiles existentes entre
los indígenas. En segundo lugar, reconoce además el uso del derecho
consuetudinario indígena y sus propios procedimientos para resolver conflictos.
Sobre pueblos indígenas en la Constitución de 1999 no se pretende la
creación de un Estado paralelo al actual Estado Federal Venezolano, ni mucho
menos la separación de los demás pueblos. Por el contrario, se plantea la "unidad
en la diversidad", exigiendo que se les reconozcan sus derechos específicos como
naciones distintas y que han sido "olvidados" deliberadamente por quienes han
detentado el poder económico y político de éste país. El nuevo indigenismo lucha
por la supervivencia de las culturas indias, sobre la base de un interculturalismo que
incluye a los grupos aborígenes dentro del proceso histórico de la humanidad e
intenta un cambio para que las mayorías nacionales asuman la problemática
indígena como algo íntimamente suyo, de su propia realidad e identidad, pues para
la concepción clásica del Estado-Nación, la diversidad étnica o cultural se considera
un peligro o amenaza.
BIBLIOGRAFIA
http://www.scielo.org.pe/scielo.php. Derechos de los pueblos indígenas en
venezuela y el problema del reconocimiento.
http://www monografías.com/Fuentes del derecho indígena
http://www. Corteidh.org.cr

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