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Unidad 2

Ciudadanía y Trabajo
CLASE N° 4
Creación de nuestros propios microcuentos
Para comenzar, ¿nos sentimos
realmente parte del Liceo Maipú?

https://www.youtube.com/watch?v=flEhJfa_2kU
Dialoguemos…

• ¿Qué es lo que más te gusta del Liceo Maipú?


• ¿Crees que el Liceo Maipú es más que un espacio de
aprendizaje?
• ¿Qué podrías hacer para colaborar en la mejora del ambiente
en el Liceo Maipú?
• ¿Te sientes parte del Liceo Maipú? ¿Eres un verdadero
ciudadano de esta comunidad?
Objetivo clase N° 4

Redactar un microcuento
sobre vivencias ocurridas al
interior del Liceo Maipú
para participar en el
Concurso “El Liceo Maipú
en 100 palabras”
PASO 1
Lo primero que debes preguntarte es ¿qué deseo narrar en mi
relato? El microcuento es un relato por sobre todo inteligente.
Debes pensar en una historia que sea lo bastante
interesante, llamativa y que permita una condensación
profunda de las ideas.
La recomendación es que pienses el argumento de tu
microcuento como una cebolla: podrías presentar una historia
que en apariencia tiene una sola forma, pero que al ser leído por
el lector, éste comprenda que tiene muchas más capas de las que
se están mostrando.
PASO 2
Para conseguir el efecto mencionado anteriormente, tendrás
que apoyarte en alguno de los recursos que son propios del
microcuento ¿qué recurso utilizaré para conseguir un
efecto que impacte al lector?
Podría tratarse de un juego de ingenio para producir
extrañamiento en el lector, recurrir al humor o bien, utilizar la
ironía, el cual es el recurso más típico del microcuento.
Diego Muñoz Valenzuela es un escritor de
microcuentos, que en su relato “Amor cibernético”
utiliza el recurso de la ironía para presentar a dos
personas deformes que se conocen a través de la red y
que se inventaban una realidad virtual, donde ninguno
de los dos tenía defectos.
¿IRONÍA?
Amor cibernauta
Diego Muñoz Valenzuela

Se conocieron por la red. Él era tartamudo y tenía un rostro brutal de


neanderthal: gran cabeza, frente abultada, ojos separados, redondos y
rojos, dientes de conejo que sobresalían de una boca enorme y
abierta, cuerpo endeble y barriga prominente. Ella estaba inválida del
cuello hasta los pies y dictaba los mensajes al computador con una
voz hermosa, pausada y clara que no parecía tener nada que ver con
ella; tenía el cuerpo de una muñeca maltratada. Fue un amor a primer
intercambio de mensajes: hablaron de la armonía del universo y de
los sufrimientos terrestres, de la necesidad del imperio de la belleza y
de los abyectos afanes de los mercaderes de la guerra, de la
abrumadora generosidad del espíritu humano que contradice la
miseria de unos pocos.
Leían incrédulos las réplicas donde encontraban una mirada
equivalente del mundo, no igual, similar aunque enriquecida por
historias y percepciones diferentes. Durante meses evitaron
hablar de sí mismos, menos aún de la posibilidad de encontrarse
en un sitio real y no virtual. Un día él le envió la foto digitalizada
de un galán. Ella le retribuyó con la imagen de una bailarina. Él
le escribió encendidos versos de amor que ella leyó embelesada.
Ella le envió canciones con su propia voz, él lloró de emoción al
escuchar esa música maravillosa. Él le narraba con gracia los
pormenores de su agitada vida social, burlándose agudamente de
los mediocres. Ella le enviaba descripciones de sus giras por el
mundo con compañías famosas. Ninguno de los dos jamás
propuso encontrarse en el mundo real. Fue un amor verdadero,
no virtual, como los que suelen acontecernos en ese lugar que
llamamos realidad.
PASO 3
Es fundamental que juegues con los tiempos de la narración
¿de qué forma el narrador manejará el tiempo de mi
relato?
Puede que tu microcuento se límite a reflejar un solo minuto
en la vida de alguien, el cual se extiende a lo largo de todo el
texto; o bien, puede que construyas un microcuento que
tenga múltiples saltos en el tiempo, consiguiendo que en un
solo microcuento se condense la vida completa de una
persona.
PASO 4
Por último, pregúntate ¿quién será el lector ideal de mi
microcuento? No subestimes a tu lector, sobre todo tratándose
de un microcuento.
Necesitarás a uno que sea lo bastante culto para comprender
que detrás de tu texto está presente una multiplicidad de otros
textos literarios (intertextualidad).
Un microcuento por el hecho de ser breve, no implica que sea
un texto menos rico en términos de contenido.
¡Hazlo en tu cuaderno!

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