Presentado a:
Adriana Julia Ester Ruales Arcos
Docente
Universidad CESMAG
Programa de Derecho
Grupo 1-B
2020
INTRODUCCIÓN
En teoría, si cae materia dentro de un agujero de gusano, esta materia seguirá hasta llegar
a un “agujero blanco” (lo contrario a un agujero negro) que se encontrará en el otro extremo;
existen diversos tipos y clasificaciones de los agujeros de gusano, así como múltiples estudios de
científicos que han dedicado su vida a estudiarlos y tratar de crear prototipos de estos con el fin
de comprobar sus teorías.
Actualmente, no existen pruebas que demuestren que los agujeros de gusano existen;
aunque matemáticamente su existencia es posible.
DESARROLLO
Para muchos un simple mito, para otros una realidad; el puente de Einstein-Rosen o
más conocido como “agujero de gusano” es una de las hipótesis más controversiales
en la ciencia.
Este fenómeno se explica de una manera sencilla, imaginemos una manzana con un
gusano adentro que quiere llegar lo más rápido posible al otro lado de esta. En vez de
recorrer todo el camino rodeando la manzana, cava un agujero lo más recto posible.
Actualmente se sabe que cuando una estrella supernova hace implosión se forman los
agujeros negros quienes absorben toda la materia y hasta la luz que entra en el para
nunca más salir, pero por los años 1915 los agujeros negros eran simples hipótesis y
muchos científicos negaban su existencia y mucho menos se hablaba de “agujeros
blancos” que es lo total mente opuesto a uno negro, en vez de absorber escupe todo,
con esa hipótesis el científico Nathan Rosen quería explicar su idea de que quizás todo
lo que caiga en un agujero negro era expulsado al otro extremo, que era un agujero
blanco.
Se ha hablado mucho de qué pasaría si algo o alguien entra en un agujero negro,
según la física lo más probable es que su fin seria inusual, muchos científicos han dado
hipótesis sobre lo mínimo que les pasaría, se cree que a medida que se fueran
acercando, diferentes partes de su cuerpo serian haladas por distintos grados de
fuerzas de gravedad, de manera que se estirarían y adelgazarían hasta quedar como
un espagueti, y luego se estrellarían contra el núcleo del agujero negro; es ahí donde el
puente Einstein-Rosen y los agujeros blancos entrarían en acción, no habría la
espaguetizacion sino más bien se saldría por el agujero blanco dando así por cumplida
la hipótesis del agujero de gusano.
De acuerdo con la teoría general de la relatividad de Einstein, los agujeros de gusano
no solo pueden usarse para viajar a través del espacio, sino también a través del
tiempo.
El cosmólogo Andrew Pontzen dio las “instrucciones” para convertir un agujero de
gusano en una máquina del tiempo:
“Si eres capaz de crear dos extremos de un agujero de gusano que enlazan dos
espacios, y tomas uno de esos extremos y lo mandas en un viaje a la velocidad de la
luz, lo que estarías haciendo es enviarlo al futuro. Así, tendrías un agujero de gusano
que no solo te lleva de un lugar a otro sino también de una época a otra”