La reforma de las marcas de hacienda en la Provincia

Los proyectos del gobier- correspondíentg en el boleto

no de la Provincia sobro re- del propietario, el cuatrero
forma de las marcas- de lia- no podría eludir la acción
eicnda han tenido estos úl- do la policía. En caso do
timos meses bastante pre- a b i g e a t o , transmitiendo el
ocupados á los estancieros, número por telégrafo, las
pues introducían una confu- autoridades . que 'i-eeibiesen
sión en las marcas añadién- i comunicación c o n s u l t a -
doles caprichosos arabescos, rían con menos de un minu-
cosa que y a era un trastor- to de trabajo las copias de
no considerable, y además, los registros, mostrarían la
alteraban esas h i s t ó r i c a s marea á los agentes ó les
señales, trasmitidas de pa- harían un sencillo dibujo en
dres á hijos como parte del un papel, y entonces el cua-
legado d.e los primeros. trero no tendría como ocul-
t a r su delito.
Los e s t a n c i e r o s , gente
conservadora y de espíritu El proyecto del señor Fe-
práctico, ingeniosa en sus rrari ha recibido una enor-
arbitrios para alcanzar un me cantidad de adhesiones,
objeto cualquiera, y sobre entre ellas las muy impor-
todo conocedores como po- t a n t e s de los estancieros cu-
El señor Zenóii Ferrari

1, Clara Anchorena de Uriljelarrea; 2, José María Migiiens; 3, Enrique Maderos; 4, Félix S. de Alaaga; 5, Satur-
nino J. Uiszué; G, Francisco A. Hernández; 7, Luciano Miguens; 8, Martín Miguens; 9, Ángel A, Vela; 10, Enr •
riciue L. Keeu; 11, Zenón Calderón de la Barca y Pinero; 12, Rufino F. Luro; 13, Félix U. Casalins; 14, Eaúl
Videla Dorna; 15, Pelayo Ledesma; 16, Man-ael J. Ezeiza; 17, mca.nor Zapiola; 18, Pablo Acosta; 19, F. Mar-
tínez de Hoz; 20, Ángel G. Toscano; 21, Juan Cañas; 22, Gregorio V. Earaírez; 23, Alfredo Peña; 24, Mariano
C. Unzué; 25, Pastor .SenjUosa; 2S. .Santos Unzu*; 27, Julián Althalie; 28, Botto é hijos y Altliabe; 29, Caries
C, Olivera é hijos; 30, Dámasa Zelaya de Saavedra; 31, Vicente L. Casares; 32, Elvira O. de Mármol; 33,
Pedro Chapar; 34, Chapar Hnos.; 35, doctor Manuel B. Anchorena; 36, Manuel A. Ocampo; 37, Juan G. Peña; 38,
Enrique Eorh; 39, Juan Acebal; 40, Cefcrino M. Araujo; 41, Felisa O. de Carabassa; 42, Marcó del Pont y
Pando.

eos de lo que atañe á sus asuntos, no podían ad-
mitir esos proyectos,, en los cuales se revelaba
también una cabeza maturranga en los negocios
del campo.
Uno de ellos, el señor Zenón Ferrari, tuvo la
feliz idea de buscar un medio que, consiguiendo
el mismo fin que se proponían los .proyectos de
reforma, á la vez no incurriese en los defectos
de que adolecían. Consiste todo, primeramente, en
dejar como está lo que está bien, es decir, en no
tocar para nada las marcas, y luego en registrar-
las bajo un número.de orden. Tan sencilla y clara
solución, que puede explicarse en menos de las
pocas palabras.con que la hemos explicado nos-
otros, conviene perfectamente á lo que se desea.
Enviando copiss de los registros á las autori-
dades de cada partido é inscribiendo el número.
Fot. de CARAS Y CARIÍTAS.
vos nombres y marcas publicamos, y además el
gremio se dirigió al gobierno de la provincia so-
licitando la adopción de la idea y el rechazo de
los proyectos distintos que se presenten.
La comisión do la Liga Agraria se ha manifes-
tado unánimemente de acuerdo con el pensamien-
to del señor Ferrari, considerando que es de fácil
y eficaz aplicación, que ayuda notablemente la
acción de la policía y la justicia contra los cua-
treros y que da á la propiedad ganadera mayores
garantías de las que actualmente tiene. L a Liga
decidió también gestionar de los gobiernos de las
provincias ganaderas la implantación del sistema
propuesto por el señor Ferrari. Este posee el do-
cumento que así lo atestigua, firmado por los se-
ñores Diego Baudrix y Ricardo Hogg, presidente
y secretario, respectivamente, de aquella sociedad.