El objeto de la sociolingüística es el estudio de la lengua hablada,
observada, descrita y analizada en su contexto social, o sea, en
situaciones reales de uso. Su punto de partida es la comunidad lingüística, un conjunto de personas que interactúan verbalmente y que comparten un conjunto de reglas con respecto a los usos lingüísticos.
Al estudiar cualquiera comunidad lingüística se verifica la existencia
de diversidades o de variaciones. Toda comunidad se caracteriza por el empleo de distintos modos de hablar, o sea, variedades lingüísticas. El conjunto de variedades lingüísticas utilizado por la comunidad es llamado repertorio verbal. Los habitantes de una ciudad hablan de modo diferente en función, por ejemplo, de su origen regional, de su clase social, de sus ocupaciones, de su escolaridad y también de la situación en que se encuentran.