El pueblo de Dios hizo dos males, esta palabra males no es una palabra liviana.

El versículo
principal de este mensaje es Jer. 2:13 que dice “Dos males ha cometido Mi pueblo: ⁄ me han
abandonado a Mí, ⁄ fuente de aguas vivas, ⁄ a fin de cavar para sí cisternas, ⁄ cisternas
rotas, ⁄ que no retienen agua””

Jeremías, un libro que habla abundantemente sobre el pecado de Israel así como sobre la ira
de Dios, Su disciplina y Su castigo, revela que la intención de Dios en Su economía es ser la
fuente, el origen, de aguas vivas a fin de impartirse en Su pueblo escogido para satisfacción y
gozo de ellos, con la meta de producir la iglesia, el complemento de Dios, en calidad de
aumento, agrandamiento, de Dios para que ella llegue a ser la plenitud de Dios a fin de ser
Su expresión; el núcleo de la revelación divina consiste en que Dios nos creó y nos redimió
con el propósito de forjarse en nosotros para ser nuestra vida y nuestro todo.

Esta es una afirmación clave de este entrenamiento. Este punto es un cuadro completo en
cuanto al propósito eterno de Dios para el Hombre comenzando con Israel y llegando hasta la
iglesia los creyentes neo testamentarios, esto le aplicaba a Israel y nos aplica a nosotros hoy
en día. Israel es el tipo completo de la iglesia, lo que le sucede a ellos nos sucede a nosotros
la iglesia y todo este hablar en Jeremías se aplica no solo a la nación de Israel sino también a
nosotros.

Israel debería haber bebido de Dios como fuente de aguas vivas a fin de convertirse en su
aumento que es su expresión, pero en lugar de ello, ellos cometieron dos males,
abandonaron a Dios como su fuente, le dieron la espalda y se volvieron a otra fuente que no
era Dios mismo. Cavar cisternas retrata el esfuerzo de Israel en su labor humana para hacer
algo, ese algo son los ídolos que reemplazan a Dios, que las cisternas entre rotas y no
puedan retener aguas, indica que aparte Dios como nuestra fuente de aguas vivas, nada
puede aplacar nuestra sed.

En Jn. 4:14 – “más el que beba del agua que Yo le daré, no tendrá sed jamás; sino
que el agua que Yo le daré será en él una fuente de aguas que brote para vida
eterna.”

En éxodo 17:6 a Moisés se le mando golpear esta gran roca de donde saldría agua. Esto es
un cuadro de lo que sucedió en la cruz, cuando Cristo murió en la cruz, su costado fue abierto
y de ahí fluyo sangre y agua. Cuando moisés hirió la roca, esto representa la ley como
requisito de Dios sobre todos los creyentes y sobre todos los pecadores, quienes no podemos
cumplir con este justo requisito. Así que, Cristo murió por nosotros en la cruz y recibió el
pleno impacto, el pleno alcance de la ley al ser crucificado, logrando así nuestra redención y
liberar el fluir del agua viva de su ser para que le bebiéramos.

1 Co. Dice: que todos bebían de la roca espiritual que los seguía, ¿Cómo puede una roca
moverse? Tenemos que creer que lo hizo. También dice que la roca era Cristo. Hoy estamos
aquí para beber de esta roca, las aguas vivas que es el Dios triuno mismo.

¿Por qué necesitamos beber? Por un lado solo esta agua saciara nuestra sed, nos dará
satisfacción, el agua es más importante que el alimento, podemos pasar un tiempo sin comer
pero no podemos pasar mucho tiempo sin beber. Finalmente este Cristo en resurrección llego
a ser el espíritu vivificante, así que de este espíritu todos bebemos, solamente al beber todos
de este espíritu podemos ser edificados como el único cuerpo, no hay ninguna otra manera
de ser edificados. Esta es nuestra necesidad, beber de esta agua viva, que nos renueva, nos
santificada, nos transformara, y nos edificara para que seamos su cuerpo y aun nos
preparara para ser la novia de Cristo. Día y noche deberíamos ser un pueblo que bebe.

En Ap. 22:17 vemos al Espíritu y la novia haciendo el llamado para beber, así que
este beber se relaciona con este matrimonio, con la consumación máxima de la
economía de Dios.
En el punto romano II vemos los dos males que cometió el pueblo de Dios. Que el pueblo
abandonara a Dios significa que lo dejaron ir, le dieron la espalda de manera intencionada.
Ellos sabían que Jehová era su Dios pero deliberadamente lo abandonaron a Él como su
fuente de aguas vivas. Vemos que los hijos de Israel además de abandonaran a Dios, se
volvieron a otra fuente, una fuente que era remplazo de Dios mismo. ¿Qué es esa fuente?
Son los ídolos, ellos cometieron idolatría, fueron infieles.

La relación entre Dios e Israel desde el corazón de Dios se presenta como una relación
matrimonial, entre esposo y esposa, en donde el considera a Israel como su esposa una y
otra vez. Así que cuando Israel abandono a Dios y se apartó de Dios no solo fue en pos de
ídolos, si no que esto fue infidelidad matrimonial, es una mujer que busco otros hombres,
cayó en fornicación.

En las diez palabras de jehová a Israel, en estos 10 mandamientos, los primeros 3

mandamientos se relacionan con ídolos, de alejarse de los ídolos. Dios no tolera los ídolos.

Ex. 20:2-5 – “yo soy Jehová tu Dios, que te saque de la tierra de Egipto, de la casa
de esclavitud.”

“no tendrás otros dioses delante de Mí”

“no te harás ídolo, ni forma alguna de lo que este arriba en el cielo, ni abajo en la
tierra, ni en las aguas debajo de la tierra”

“no te postraras ante ellos, ni les servirás; porque Yo, Jehová tu Dios, Soy Dios
celoso, que visito la iniquidad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta
generación de lo que me odian.”

Estos diez mandamientos nos rebelan quien es Dios, y uno de los atributos que podemos ver
aquí es que su primer atributo es el celo de Dios, la intolerancia que tiene Dios en cuanto a
que su esposa vaya en pos de ídolos, Dios es un Dios celoso. Al hablar de la idolatría no se
puede abarcar a la ligera porque esto toca el celo de Dios.

todos necesitamos adorar a alguien, amar a alguien, servir a alguien, fuimos hechos así pero
tomar a cualquier otra cosa que no sea Dios como el objeto de nuestro amor de nuestro
servicio de nuestra dedicación es tener remplazos y eso es cavar cisternas, esto puede ser
cualquier cosa, nuestro negocio, nuestra carrera, aquello que buscamos, estamos cavando
para obtener agua para beber para saciar nuestra sed pero no sabes que estas cisternas
están rotas no pueden retener agua, esto indica que aparte de Dios, nada puede saciar
nuestra sed. Al final del día puede ser que veamos nuestra cuenta de banco y veamos
algunos dólares y sintamos cierta satisfacción pero al final quedares secos, insatisfechos,
infelices. Así que hermanos que maravilloso seria que podamos recibir la impartición de Dios
en nosotros como el agua viva que sacia nuestra sed, que nos satisface, esto incluso nos hará
el aumento de Dios. Eso es realidad, no vayamos en pos del viento de la vanidad.
Aferrémonos a Cristo como nuestra realidad, abandonemos los ídolos, volvamos al Dios vivo y
verdadero.

Tenemos que ver que a los ojos de Dios el malvado es aquel que no bebe, no tenemos que
cometer asesinato, con simplemente no beber de El somos malvados. A los ojos de Dios nada
es más malvado que no beberle. Fuimos hechos como vasos para contenerle como aguas
vivas y cuando no lo bebemos somos inútiles, estamos vacíos, no tenemos propósito, a los
ojos de Dios esto es el mayor mal.

Es tan serio hermanos y hermanas tener ídolos en nuestros corazones, tal vez no son ídolos
físicos, de piedra, madera o de oro pero cualquier otro reemplazo de Dios que exige, nuestro
amor, nuestra adoración y nuestro servicio, eso es un ídolo, no tiene que ser físico puede ser
cualquier cosa, cualquier asunto o cualquier persona, cualquier cosa aparte de Dios tiene el
potencial de ser un ídolo para nosotros.

Ez. 14:3 – “Hijo de hombre, estos hombres han erigido sus ídolos en su corazón y han puesto
delante de su rostro el tropiezo de su iniquidad. ¿Acaso eh de ser Yo en modo alguno
consultado por ellos?”

La idolatría poco a poco nos aparta del Señor. Podemos ser así con ídolos en nuestro corazón
externamente decimos que buscamos a Dios, quizás vayamos a la reunión, quizás oremos un
poco pero en nuestro corazón hay ídolos y cuando buscamos a Dios de esta manera no
podremos hallarlo porque Dios exige un corazón completo.

El pueblo de Israel no solo fue tomado cautivo a babilonia si no que ellos se llevaron sus
ídolos, aunque estaban prisioneros, montaron en sus animales los ídolos, no los podían dejar.
Así que los ídolos se convierten en una carga. Hacen que usted se canse. Creo que todos
nosotros en alguna manera podemos testificar esto. Esto hace que lleguemos a estar muertos
al igual que los ídolos están muertos, nos enmudecemos pero cuando nos volvemos al Señor
la boca se nos abre, creímos por lo tanto hablamos.

Hermanos nosotros ya no somos adoradores de ídolos mudos que no dicen nada, nuestra
boca ha sido liberada, por eso alabamos, adoramos, hablamos y podemos decir: “Jesús es El
Señor”

Hermanos no pensemos que nosotros somos mejor que Israel. Si acaso somos iguales a ellos.
En la carne somos propensos a buscar ídolos. Por tan razón debemos recibir esta palabra y
ser redargüidos de manera que podamos ser aquellos que bendicen Señor desde ahora y por
la eternidad.