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Taller Colaborativo – 28/07/2020

Tema: Violencia

Tesis: Toda manifestación de violencia, indica ausencia de sentido humano.

Autoridad, perjudicial, crueldad, sociedad (I.P), exceso

A las patadas…

La crueldad es una característica que lamentablemente ha acompañado al


hombre en toda su historia. En este sentido se puede precisar: “La violencia
implica siempre el uso de la fuerza para producir daño, puede hablarse de
violencia política, económica, social o meteorológica, en sentido amplio” (Whaley,
2001, p.21). La sociedad humana ha permitido el uso de la fuerza a través de la
formación de ejércitos o fuerzas armadas para legitimar sus leyes. Sin embargo,
toda manifestación de violencia, indica ausencia de sentido humano. No muy
pocas veces las entidades “legales”, han hecho uso en exceso de su facultad para
recurrir a la fuerza denominada legal o constitucional. Todo este sistema ha sido
perjudicial cuando las armas de un estado se emplean para destruir y acallar las
voces de los ciudadanos que piensan o actúan de manera diferente a la totalidad
del resto de la población. Ciertamente, la discusión se ha centrado en dos
premisas o principios hasta cuándo la autoridad que da el uso de la fuerza es
legal o es legítima.

Conflicto, responsabilidad (I.P), cambio, conocimiento, moral

Acercarse a la complejidad que implica el “humanismo” como dimensión


fundamental de la persona señalada que la responsabilidad para que el “sentido
humano” no se pierda es de todos, no se puede transferir a entidades o individuos:
Por lo tanto, se observa que “El hombre está adquiriendo conciencia de que la
violencia deshumaniza, destruye la sociedad, no la defiende” (López, 1996, p.33-
34). Es decir, se está produciendo un cambio de mentalidad no tan rápido como
se requiere pero sí muy positivo y creciente en procura de evitar que las
sociedades se vean devastadas por las diferentes formas de violencia: El
conocimiento está dando frutos para la formación de una conciencia comunitaria
en la defensa de los derechos de todos, en especial de los más vulnerables y
desprotegidos. Además, la moral ha dejado de ser un valor puramente religioso,
para convertirse en un principio humanizador. Evitar los conflictos es una
consigna permanente en los programas y proyectos tanto de los entes
gubernamentales, como de agrupaciones no gubernamentales, más conocidas
como ONG(s).

Escenarios nuevos (I.P) – Comentarios – Intolerancia – Entornos – Trasciende

Se observa con gran preocupación como surgen en esta contemporaneidad


escenarios nuevos para la confrontación que alimenta los espíritus violentos,
estos son las redes sociales, especialmente twitter, Instagram y Facebook. Es así,
entonces que “No solo los hechos son violentos, el lenguaje revela la violencia
oculta o evidente de una sociedad” (López, 1996, p.35). Se parte de situaciones
aparentemente cotidianas como comentarios que se lanzan “inocentemente”,
pero que pueden dañar profundamente a quien es el destinatario de los mismos,
dado que se parte de supuestos o pruebas que muy pocos se cercioran de
confirmar su autenticidad y veracidad. El gran telón detrás de esta escena es la
intolerancia que parece facultar a muchos a destruir con su lenguaje la vida y la
honra de los demás. Por otro lado, en nuestros entornos más íntimos, entre ellos
la familia, no es desconocido como se ejerce a través de la palabra y del “silencio”
formas de violencia que victimizan a todos y a cada de los miembros, los espacios
laborales tampoco se ven eximidos de este terrible fenómeno. Es por eso que, lo
que está oculto, impreciso en lo más intrínseco trasciende a toda la sociedad,
pues en ella donde se replican estos aprendizajes no apropiados.

Discurso – Organismos – Campañas – Compromiso – Paradigma (I.P)

Más allá de los discursos se precisa que los hechos marquen la pauta para un
verdadero cambio frente a la violencia que nos deshumaniza. También, los
organismos de índoles nacionales y multilaterales deben procurar integrarse en
un verdadero compromiso de lucha contra todas y cada una de las formas de
violencia. Las campañas deben ser difundidas por todos los medios posibles de la
mano con recursos económicos que le ayuden a las entidades judiciales y
administrativas atender de manera inmediata a las víctimas. Además, el
compromiso de no violencia debe partir desde la familia y la persona como un
objetivo imperioso. El paradigma está cambiando frente a no consentir
manifestaciones violentas, pese a que muchas de nuestras naciones están
inmersas en conflictos internos externos.

Bibliografía

López J.G (1996) Fuertes contra la violencia. Salamanca. Ediciones Universidad


Salamanca

Whaley J.A (2001) Violencia intrafamiliar: Causas biológicas, psicológicas,


comunicaciones e interraciónales. México D.F. Editorial Plaza y Valdés S.A de C.V

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