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C.E.P.A.

LA MANCHUELA
PRUEBA DE ACCESO A LA UNIVERSIDAD PARA MAYORES DE 25 AÑOS
FASE GENERAL - LENGUA CASTELLANA Y COMENTARIO DE TEXTO Y
DESARROLLO DE UN TEMA

TEMA 9. Tipos de texto según la intención comunicativa. Los modos de


organización del discurso: narración, descripción, argumentación, exposición y
diálogo.

1. LOS MODOS DE ORGANIZACIÓN DEL DISCURSO

Los modos o formas del discurso son los distintos modos de expresión


que puede adoptar el mensaje en un texto.

Tradicionalmente se distinguen cinco formas del discurso: narración,


descripción, exposición, argumentación y diálogo.

2. EL TEXTO NARRATIVO O LA NARRACIÓN

Es el tipo textual que aparece con mayor frecuencia en nuestros


intercambios comunicativos. Cuando le contamos a nuestra compañera de
clase las aventuras del fin de semana estamos “narrando algo” (aunque no se
trate de una narración literaria), no pensemos sólo en novelas, cuentos o
relatos literarios, (o en películas) que, evidentemente, también son narrativos.

Para que exista una narración se han de contar con los siguientes
elementos:

 Una acción o historia que contar.


 Un narrador.
 Unos personajes.
 Un espacio donde ocurre la acción.
 Un tiempo en el que transcurre la acción.

Un texto es narrativo cuando relata acciones protagonizadas por


personajes que se suceden en el tiempo y en un espacio concreto. En las
narraciones predomina la acción. Esta acción se divide en partes. Las partes
de la narración son normalmente:

 Una situación inicial o planteamiento inicial de la acción en la que se


empiezan a pergeñar los conflictos que más tarde se desarrollarán;
se presenta a los personajes y los ámbitos donde va a transcurrir la
trama. A menudo se utiliza una técnica que consiste en contar una
pequeña historia impactante que atraiga la atención del lector, oyente
o espectador.
 Un nudo o trama donde se van desarrollando las diferentes partes de
la trama: los conflictos, las acciones más diversas… Es, con
demasía, la parte más larga de cualquier historia.
 Se termina la narración con la resolución de estos conflictos o
desenlace: en una tragedia, acabaría normalmente con la muerte de
los protagonistas; en una novela policiaca, con el descubrimiento de
quién es el asesino; en una novela amorosa, con el final de los
conflictos que llevan a que la pareja selle su amor para siempre.

Los hechos contados pueden ser verídicos o no. En una novela histórica
predominará este tipo de hechos aunque el autor se puede permitir licencias e
intercalar en la acción hechos no verificables (Un ejemplo: las novelas del ciclo
de Alatriste de Pérez-Reverte). La falta de verosimilitud la encontraríamos en
relatos fantásticos como el ciclo de novelas de El Señor de los Anillos de
Tolkien. Aunque en un tipo de relato u otro predomine un tipo de hechos u
otros, lo cierto es que se pueden introducir elementos fantásticos en relatos
realistas (Cien años de soledad de Gabriel García Márquez, hito fundamental
del realismo mágico latinoamericano) o elementos realistas dentro de un texto
fantástico (Crónicas de Narnia de C. S. Lewis, es un ejemplo: no es lo mismo
cuando los niños entran a Narnia por el armario que cuando vuelven a su
casa).

Un factor importante que define el hecho narrativo es la presencia de un


narrador. En toda historia alguien cuenta algo, describe algo, apoya los
diálogos… El narrador (o los narradores, porque pueden ser varios,
alternándose) se puede clasificar de diversos modos. El narrador puede estar
dentro de la misma historia, ser un personaje de la misma. La narración partirá
de su propio punto de vista. Nosotros seguimos la historia tal y como él nos la
cuenta. Es lo que llamamos un narrador en primera persona o también
llamado narrador interno. Por el contrario, el narrador puede ser una voz
situada fuera de la trama. En este caso, tendríamos lo que llamamos un
narrador en tercera persona o también llamado narrador externo. El
narrador también puede ser omnisciente o no serlo (en este caso hablamos de
un narrador observador). Un narrador es omnisciente cuando sabe todo de
todo y de todos; cuando no se le escapa nada; cuando es capaz hasta de
conocer lo que hay en la mente de los personajes. La novela realista y
naturalista de la segunda mitad del siglo XIX es muy proclive a este tipo de
narradores (recordemos La Regenta de Leopoldo Alas, Clarín). Un narrador es
observador cuando lo que describe son hechos externos pero no entra en
todos los ámbitos posibles y menos aún en la mente de los personajes. Narra
desde fuera, tratando los hechos con objetividad. A este segundo tipo de
narrador se le ha llamado “narrador ausente”.

EXTERNO omnisciente / observador


(en tercera persona)
NARRADOR
INTERNO (en primera persona)
Los hechos en la historia se suceden en orden cronológico, sin embargo
en la narración su ordenación puede contarse según lo desee el narrador. Al
mismo tiempo, esos hechos pueden ser narrados por personajes diferentes,
desde distintos puntos de vista.

Teniendo esto en cuenta, hay determinados elementos que debemos tener


muy presentes al analizar un texto narrativo:

 Los personajes que protagonizan la historia. Estos pueden ser


principales/secundarios; aliados/oponentes. Su caracterización puede
ser directa (si se describen abiertamente en el texto) o indirecta (si es el
lector el que infiere sus rasgos a partir de sus acciones; no existe una
descripción explícita).
 El orden en el que se narran los hechos de la historia (es decir, cómo se
suceden los hechos en la narración). Los hechos pueden narrarse en
orden cronológica, puede comenzar la narración por la mitad de la
acción (in media re), podemos hacer vueltas atrás en el tiempo (flash-
back) o hacia delante (anticipaciones), o comenzar la narración por el
final; puede haber también elipsis temporales o periodos prolongados de
la acción en los que no se cuenta nada. En definitiva, infinidad de
posibilidades.
 Los lugares. La acción siempre transcurre en un espacio determinado.
Este puede ser único o, por el contrario tener infinidad de espacio.
Puede ser real o también imaginado (novelas como El Quijote transcurre
en lugares reales: La Mancha, Sierra Morena, Barcelona, etc.; pero
también Sancho Panza gobierna un lugar imaginario que solo existe en
su mente: la Ínsula Barataria).

La narración tiene una serie de características lingüísticas que la hacen


diferentes a otro tipo de modalidad textual:

- Uso de los tiempos verbales en pasado (pret. perfecto simple y


pretérito imperfecto). Cuando se utiliza el presente, se trata del
denominado “presente histórico”.
- Se suele emplear una sintaxis compleja. Las oraciones suelen ser
enunciativas. Se introducen adverbiales de causa, finalidad y
consecutivas.
- Se recurre indistintamente al estilo directo y al estilo indirecto para las
voces de los personajes. El estilo directo es el que usamos cuando
reproducimos exactamente las palabras de un interlocutor (Juan dijo:
“ven pronto”) y el indirecto es cuando no se citan exactamente (Juan
dijo que vinieras pronto).
- Empleo de recursos deícticos (adverbio de lugar y tiempo;
pronombres), que sitúan la acción en un lugar y tiempos
determinados.
- Recurso a verbos de acción y de movimiento (Se puso a caminar;
empezamos a dar vueltas; el niño se marchó rápidamente).
- Utilización de recursos cohesivos de todo tipo que ayudan a lograr un
texto coherente. Predominan los conectores temporales (ahora,
después, a continuación, dos meses más tarde, a la mañana
siguiente, etc.).
- Coexistencia frecuente del texto narrativo encontraremos con otros
tipos de texto: especialmente la descripción y el diálogo aunque
también es posible encontrar argumentación y exposición. Así,
encontramos autores de novela profundamente descriptiva como
puede ser la novelística de Marcel Proust y novelas como La
Celestina que están muy cerca del teatro, llegando a afirmarse de
ellas que son o “teatro novelizado” o “novela teatralizada”. Aun
teniendo en cuenta estos extremos, es rara la narración donde no
encontramos otras modalidades textuales aunque predominan
claramente los aspectos que la diferencian de las mismas como tal.

3. EL TEXTO DESCRIPTIVO O LA DESCRIPCIÓN

En el texto descriptivo se caracterizan seres animados e inanimados,


paisajes o procesos. Habitualmente, el texto descriptivo aparece enmarcado en
cualquier otro tipo de texto. Describir es explicar, de forma detallada y
ordenada, cómo son las personas, los animales, los lugares o los objetos. La
descripción sirve para ambientar sobre todo la acción y crear una atmósfera
más creíble a los hechos que se narran. Muchas veces la abundancia de
descripciones crea el efecto de detener la acción y preparar el escenario de los
hechos que se siguen.

Recordemos que tanto la narración como la descripción y las demás


modalidades textuales, son de uso común en la conversación diaria. No
tengamos la falsa idea de que pertenecen al ámbito del texto escrito o de textos
formales. Así, en una simple conversación con un amigo podemos contar lo
que hemos hecho durante el día (narración); evidentemente constituirá un
diálogo entre dos personas; en ese diálogo podemos describir cómo es cierta
persona (descripción) o tratar de persuadir de algo a nuestro amigo (texto
argumentativo).

Los tipos de descripción los podemos enfocar de dos modos diferentes:


según lo que se describa y según la perspectiva utilizada.

Según lo que se describa nos encontramos en primer lugar con la


descripción de personas. Si la descripción de personas se centra en sus
aspectos físicos hablamos de una prosopografía; si se centra en aspectos
psicológicos, hablamos de una etopeya y, si constituye una mezcla de las dos,
hablamos de un retrato. Cuando la descripción de personas tiene una finalidad
burlesca, se habla de una caricatura.

También se describen animales, paisajes, seres vivos del reino vegetal,


y todo tipo de objetos inanimados. La descripción aquí suele ser de tipologías
externas, aunque en los animales pueda ser común la descripción de ciertos
caracteres psicológicos. Es menos común en otro tipo de objetos. Pero ello no
es óbice, para encontrar, sobre todo, en el campo de la Literatura o el cine el
recurso a la personificación o atribución de características humanas (como el
uso de la lengua) a animales o, incluso, a seres inanimados. Recordemos por
ejemplo el cine de animación o la literatura fantástica (La historia interminable).

Según la perspectiva utilizada la descripción puede ser objetiva o


subjetiva. Es objetiva cuando el descriptor trata de no involucrarse
emocionalmente o de transmitir opiniones sobre el objeto descrito. Es subjetiva
cuando ocurre todo lo contrario. Como ejemplo, diremos que una tesis doctora
sobre arquitectura describirá una casa determinada con apuntes objetivos,
mientras que la familia que ocupa esa casa desde su matrimonio la describirá
con tintes mucho más personales.

Por último, señalar que se pueden describir no sólo personas, animales


u objetos, sino también procesos. Se acercaría más a las descripción e incluso
a la exposición cuanto más objetiva fuera la exposición y se alejaría de la
exposición acercándose a la narración, cuanto más subjetiva fuera.

En cuanto a las marcas lingüísticas de la descripción nos encontramos


con:
- Tiempos verbales: predomina el pretérito imperfecto y el presente de
indicativo en tercera persona.
- Se usan con frecuencia verbos copulativos, especialmente el verbo
“ser”: “la copa es transparente”. También se usan mucho los verbos
de acción: “tener”, “haber”, “llamarse”: Tenía la piel rosada; mi padre
se llamaba Gabriel; Hay un gato grande ahí.
- Presencia abundante de sustantivos y de adjetivos calificativos (que
describen características proporcionando a los sustantivos una serie
de aspectos distintivos.
- Presencia abundante de complementos del nombre (adjetivos,
complementos del nombre, aposiciones u oraciones adjetivas: El
perro gris; el perro de color gris; el perro, el gris,; el perro que tenía
color gris…).
- Puede hacer acto de presencia la sufijación apreciativa, sobre todo
en las descripciones subjetivas: “tenía unos ojazos impresionantes”.
- Sintaxis: predominan las oraciones enunciativas y atributivas (con los
verbos ser y estar). Las palabras más frecuentes son los adjetivos
(explicativos y especificativos) en sintagmas adjetivos.
- Mayor frecuencia de oraciones simples yuxtapuestas (unidas por un
punto) y de oraciones compuestas coordinadas.
- Presencia de enumeraciones, que pueden ser bastante largas: El
niño era grande, con ojos azules, de pelo rubio; vestía zapatos rojos,
camiseta deportiva y pantalón corto azul.

La descripción es una pintura hecha con palabras (una buena descripción


provoca una impresión semejante a la sensible, se ve mentalmente lo descrito).
El tiempo queda detenido, es un paréntesis estático en el proceso narrativo
utilizado para informar, presentar, ambientar.
Hay que distinguir entre descripción técnica (objetiva) y literaria (tiende a ser
más subjetiva y estéticamente más cuidada). Esta última es importante en los
textos narrativos.
TIPOS:
a) según el objeto:
 RETRATO (descripción de una persona).
 PROSOPOGRAFÍA: si se retratan aspectos físicos.
 ETOPEYA: si se presentan aspectos de carácter, costumbres,
cualidades morales.
 CARICATURA: se exagera, deforma, ridiculiza.
 DESCRIPCIÓN de objetos, animales, realidades abstractas
(sensaciones, sentimientos), del espacio, del tiempo, etc.

b) según la forma: estática-dinámica; objetiva-subjetiva; impresionista


(pinceladas breves), expresionista (selección de las realidades más crudas);
cinematográfica (captar un ambiente variopinto y en movimiento, imágenes
simultáneas)...

PROCEDIMIENTOS LINGÜÍSTICOS:
- Verbos: las formas más usuales son los tiempos imperfectivos, ya
que interesa no mencionar el principio y final de la acción:
o Presente (comunica el carácter intemporal de lo descrito);
o Imperfecto (duración en el pasado), especialmente si la
descripción se instala dentro del marco narrativo.
- Más que los verbos, predominan los sustantivos y los adjetivos
(especificativos y explicativos), pues se busca el detalle.
- Son frecuentes las estructuras atributivas para expresar cualidades,
la complementación de sustantivos por medio de varios adjetivos u
otros sintagmas, se suelen realzar componentes sensoriales...
- Sobre todo en la descripción literaria, la búsqueda del esteticismo
hace que los procedimientos literarios sean muy frecuentes
(comparaciones, metáforas, sinestesias, prosopopeyas,
aliteraciones, etc.)

TEXTOS DESCRIPTIVOS:

1) Había bellotas y hojas y una gran mancha de tinta en el medio. La tapaba un


jarrón de latón lleno de señoras haciendo guirnalda, vestidas sólo con velos y
con el pelo suelto y revoloteando, y ese jarrón estaba lleno de rosas rojas y de
margaritas artificiales, que se sostenían en una capa de musgo falso. El tapete
con las bellotas y la mancha de tinta en el medio, tenía un fleco con tres filas
de nudos. El aparador era de madera rojiza, con mármol rosa y, encima del
mármol, un armario y, dentro del armario, el cristal guardado.
(Mercé Redoreda, La Plaza del Diamante)

2) Lucas era de pequeña estatura, un poco cargado de espaldas, muy moreno,


barbilampiño, narigón, orejudo y picado de viruelas. En cambio, su boca era
regular y su dentadura inmejorable. Dijérase que sólo la corteza de aquel
hombre era fea; que tan pronto como empezaba a penetrarse dentro de él
aparecían sus perfecciones y que estas perfecciones principiaban en los
dientes. Luego venía la voz, vibrante, elástica, atractiva, varonil y grave
algunas veces, dulce y melosa cuando pedía algo, y siempre difícil de resistir.
Llegaba después lo que aquella voz decía: todo oportuno, discreto, ingenioso,
persuasivo... Y, por último, en el alma del tío Lucas había valor, lealtad,
honradez, sentido común, deseo de saber y conocimientos empíricos o
instintivos de muchas cosas...
(Pedro A. de Alarcón, El sombrero de tres picos)

3) Los gladiolos son flores muy apreciadas para jarrón en verano y pueden ser
obligados a brotar también fuera de temporada. Son fundamentales una tierra
rica, con buen drenaje y mucho sol. No resisten el hielo, así que no pueden ser
plantados hasta la primavera. Deben estar entonces a 8 cm. de profundidad y
separados entre sí por 15 ó 20 cm. Los grupos principales son las híbridas
Grandiflorus, de grandes flores, otras que tienen los pétalos de arriba
encapuchados, llamadas Primulinus, y las familias de Butterfly y Miniatura, que
son de menor tamaño.

4. LA EXPOSICIÓN

Es la forma del discurso que tiene como función presentar una información
rigurosa y objetiva de manera clara y ordenada sobre cualquier tema técnico,
científico o humanístico. Puede ser divulgativa o especializada.

Hay tres momentos fundamentales en la elaboración de una buena exposición:

 DOCUMENTACIÓN (invención). Recogida de datos (información


completa, constratada, puesta al día).

 ESTRUCTURACIÓN (disposición). Se deben ordenar las ideas de


forma clara y coherente:
- Idea inicial, desarrollada a continuación para demostrar su validez.
- Exposición de ideas para llegar a una conclusión.
- Idea inicial > explicación > conclusión.
- Suma de ideas de igual importancia.

 ELOCUCIÓN. Construcción del texto (las ideas tienen que estar


trabadas), adecuación a la naturaleza del texto (idioma ajustado, sin
perder la uniformidad del registro adoptado).

La descripción técnica (frente a la literaria) es un apoyo insustituible en la


exposición. Esta descripción tiene que ser objetiva, precisa, enumerativa
(detalles), en presente (atemporal) y explicativa. Ejemplos de ella son las
enumeraciones, la explicación de experimentos, el funcionamiento y aplicación
de aparatos, etc.

La finalidad de este tipo de texto es explicar o exponer un tema de manera


objetiva para lograr que el auditorio lo comprenda. Su meta, en resumen, es la
transmisión de información.
Para lograr esta finalidad, la lengua que se utiliza debe ser lo más clara y
ordenada posible. Por lo tanto, resultan de especial importancia en este tipo de
texto el empleo de conectores discursos adecuados que muestren la sucesión
de los contenidos del texto.
Se trata del tipo de texto presente en los discursos científico-ténicos, tanto
orales como escritos.
3.1. Estructura
(a) Introducción en la que se determina el tema.
(b) Desarrollo de la exposición (para ello puede recurrirse a múltiples
mecanismos como ejemplos, descripciones, narración, descripción, imágenes,
esquemas, clasificaciones, etc.).
(c) Conclusión: recoge las ideas más importantes de lo expuesto con
anterioridad.
3.2. Organización de la información
La información en un texto expositivo puede presentarse de diferente
forma:
(a) Podemos partir de una idea general, para explicarla mediante hechos
particulares  texto deductivo  el hombre es un ser racional porque……..
(casos que lo demuestran).
(b) Podemos partir de ejemplos o hechos particulares para llegar a una
explicación general  texto inductivo  presentación de ejemplos en los que
puede observar cómo actúa el hombre ante determinadas situaciones y a
continuación se llega a la afirmación general de que “el hombre es un ser
racional”.
3.3. Estructuras expositivas
La información que queremos transmitir en un texto expositivo puede
organizarse de muy diferentes formas. Surgen así las diferentes estructuras
expositivas, que deben tenerse muy presentes cuando analicemos un texto de
este tipo.
3.3.1. Se parte de diferentes ideas generales que conducen a una
misma conclusión  estructura diseminativo - recolectiva.
3.3.2. Se formula una única afirmación inicial que se desarrolla en la
explicación.
3.3.3. Se ponen en contraste diferentes ideas que tienen una misma
importancia.
3.3.4. Se demuestra una afirmación por medio de la comparación.
3.3.5. Se lanza una pregunta inicial a la que se responde en el texto.
3.3.6. Una misma idea se desgrana en sus componentes y es así cómo
se explica.

3.4. Características lingüísticas


- Acostumbran a ser texto objetivos que emplean la tercera persona de
singular. También se puede utilizar una primera persona de plural para
introducir al receptor o bien como “plural de modestia”.
- El tiempo verbal estrella es el presente de indicativo.
- Sintaxis: oraciones enunciativas. Predominio de subordinadas
explicativas.
- Empleo de un léxico específico determinado por el tema que se explica.
- Ausencia de recursos literarios. Empleo de un lenguaje claro y neutro.
- Atención a los mecanismos de cohesión: explicativos, temporales, de
ordenación interna del discurso…
4. EL TEXTO ARGUMENTATIVO

En el texto argumentativo se alegan razones para justificar o probar una


afirmación determinada. En ella, el emisor opina, expresa sus creencias y sus
valoraciones. Se trata, a diferencia del texto expositivo, de un texto fuertemente
subjetivo.
La finalidad de este tipo de texto es convencer o persuadir al receptor para
convencerle de una determinada idea por lo que predomina la función apelativa
del lenguaje. Por este motivo, el texto argumentativo está siempre presente en
los discursos políticos, en la publicidad o en el debate.
4.1. Estructura habitual
1. Presentación del tema sobre el que se argumenta.
2. Tesis o afirmación de la que se parte.
3. Desarrollo y explicación de los argumentos que sirven para mantener la tesis
inicial.
4. Conclusión
4.2. Tipos de argumentos
Causa, comparación, contraste, consecuencia, criterio de autoridad (vid.
pág. 131).
4.3. Características textuales
- Empleo de la primera persona o de la tercera.
- Sintaxis muy compleja (oraciones subordinadas explicativas, causales,
consecutivas, condicionales, etc.).
- Presencia de diferentes modalidades oracionales: enunciativa,
interrogativa, exhortativa, dubitativa, etc.
- Predominio de los verbos de pensamiento: creo, opino, considero.
- Presencia de adjetivos valorativos.
- Fuerte presencia de marcadores discursivos que ponen en evidencia el
punto de vista del emisor: ciertamente, por supuesto, desde mi punto de vista,
en mi opinión, de todas formas, sin duda alguna, etc.

CLASES DE ESCRITOS

Cuando una persona se expresa, puede hacerlo en prosa o en verso, con un


estilo fácil, vivo y directo o, por el contrario, elaborado, complicado y solemne.
Entre ambos extremos puede haber muchos matices y diferentes grados de
complejidad. Pero su discurso adoptará básicamente una de estas formas:

1.- Si dibuja o define con palabras : Naturalmente, estas formas del discurso no
DESCRIPCIÓN son independientes; por el contrario, se
2.- Si cuenta hechos: NARRACIÓN apoyan y refuerzan entre sí: la descripción
3.- Si da cuenta de ideas: EXPOSICIÓN enmarca y completa la narración; el diálogo
4.- Si defiende una idea con razones: ilustra muchos relatos, permitiendo la
ARGUMENTACIÓN intervención directa de los personajes, o
5.- Si conversa o discute: DIÁLOGO protagoniza la obra literaria completa en el
caso de la obra dramática, cuyos
personajes narrarán o describirán; la
narración se convierte en exposición
cuando cambia la materia (se da cuenta de
ideas); y la exposición no podría progresar
sin la argumentación.

4.- ARGUMENTACIÓN

Forma del discurso oral o escrito que tiene como función presentar argumentos
para persuadir al lector de la verdad de un razonamiento o para refutar una
teoría que se juzga errónea. Es, por tanto, más subjetiva que la exposición.
En las disciplinas humanísticas, esencialmente especulativas, la argumentación
no suele apoyarse en datos experimentales, sino en premisas lógicamente
aceptables.
El esquema de un texto argumentativo dispone los elementos de distintas
formas para conseguir una mayor convicción:

 ESTRUCTURA ANALIZANTE (análisis deductivo). De lo general a lo


particular. Partiendo de unas premisas lógicamente validas, aceptadas,
se van analizando distintas ideas.
 ESTRUCTURA SINTETIZANTE (análisis inductivo). De lo particular a lo
general. Parte de la explicación y demostración de unos hechos
concretos para llegar a una tesis final (conclusión) que los explica.
 ESTRUCTURA PARALELA. Se reitera una misma idea o se desarrollan
varias ideas sucesivas que tienen una relación analógica.
 ESTRUCTURA ENCUADRADA. La tesis se expone al principio del texto,
se argumenta favorablemente y se confirma de nuevo al final.

Estas estructuras formales y lógicas generales suelen presentar las siguientes


partes:

 TESIS. Idea principal (al principio o al final).


 CUERPO DE LA ARGUMENTACIÓN. Parte formada por el proceso
reflexivo que se desarrolla para reafirmar o refutar la idea principal la
idea principal (el razonamiento). Para intensificar el poder persuasivo de
su razonamiento, el autor se puede servir de: datos, experiencias,
argumentos de autoridad (testimonios fidedignos de expertos, citas)
contrarios o favorables, argumentos analógicos (paralelismo con otros
hechos), argumentos del sentir general, de sentido común (proverbios y
refranes).
 CONCLUSIÓN. Tesis final (al principio o al final).

No es raro que tanto la exposición como la argumentación aparezcan juntas en


un escrito.
(Subjetividad y apelación en la argumentación: Las cualidades de la
argumentación, como las del estudio científico, son la objetividad y la
neutralidad (función dominante: referencial). Sin embargo, la presencia de
contenidos ideológicos propicia la entrada de elementos subjetivos.
El apasionamiento puede transformar la función referencial en apelativa. Esta
subjetividad se puede presentar de forma solapada o más apasionada por
medio de varios procedimientos: tensión de los argumentos, léxico, articulación
de las frases, ironía, humor, sarcasmo, apelaciones a personas...)

5. EL DIÁLOGO

Un texto dialogado es una conversación oral o escrita entre dos o más


personas. Por lo general consta de un hablante y un oyente que van alternando
estos papeles. Se distribuye en "parlamentos" encabezados por un guion, o por
el nombre de quien habla en versalitas (esto es, letras mayúsculas o capitales)
si se trata de teatro, seguido por dos puntos. Y existen dos modalidades: el
diálogo en estilo directo y el diálogo en estilo indirecto.
El género literario en que más se utiliza es en el teatro o género
dramático (comedia, tragedia, tragicomedia, ópera, farsa...), en que se suele
acompañar de acotaciones y apartes y se divide en escenas, cuadros y actos;
pero también se emplea en la entrevista periodística, en el debate... También
se suele insertar dentro del texto narrativo, en novelas, seriales radiofónicos,
cinematografía... Los registros idiomáticos indican el nivel de instrucción de las
personas que intervienen en el diálogo: niveles culto, coloquial o vulgar.
Las características lingüísticas de los textos dialogados son las siguientes:

 1. Referencias deícticas al tiempo y lugar donde ocurre la acción:


adverbios de lugar y de tiempo y demostrativos (allí, hoy, mañana; éste,
aquél, etc.)
 2. Frecuentes pronombres en primera persona (el que habla, yo, me, mí,
nosotros, nos) y en segunda persona (el que escucha: tú, te, ti, vosotros,
os) y abandancia de anáfora y catáfora.
 3. Frecuentes conectores (adición, explicación), es decir, aparecen
muchas oraciones coordinadas copulativas, explicativas, además de
causales, consecutivas...
 4. Redundancias (repeticiones) frecuentes, por pleonasmo o
intensificación de lo que se quiere decir: "Yo mismo lo vi", "entra adentro",
"sube arriba", "ven aquí"). También se utilizan las muletillas ("o sea",
"bueno") y giros coloquiales. Inversamente, se excluyen algunas palabras
que solo se usan en la expresión escrita ("mas" = pero, por ejemplo)
 5. Frecuentes elipsis, reflejada con puntos suspensivos o simplemente
indicando que un interlocutor interrumpe a otro. Son frecuentes las frases
sin terminar y los anacolutos (cambios de construcción en la frase que
dejan la primera sin terminar).
 6. La elipsis provoca frecuentes frases sin verbo y meros enunciados o
frases nominales. Abundan las proformas y las exclamaciones. Las
oraciones más frecuentes son simples, coordinadas, yuxtapuestas.
 7. En el estilo indirecto abundan los verba dicendi o verbos de lengua
que introducen el parlamento o el diálogo: "Dijo, expuso, protestó, comentó,
preguntó, refirió..."
 8. El tiempo verbal predominante es el presente ("hablan" de lo que está
ocurriendo) y el pretérito perfecto compuesto ("he dicho": la acción ha
terminado pero en un tiempo o espacio que no ha acabado para los que
dialogan).
 9. En el nivel fónico son muy frecuentes las oraciones exclamativas,
interrogativas y todas las que expresan estados de ánimo (exclamativas) o
necesidad de que el interlocutor aclare lo que está diciendo (interrogativas)
 10. A veces se utilizan onomatopeyas ("¡ssshh!") o interjecciones (oh,
eh, ah, psé, bah) o fórmulas de expresividad fonética para referirse a
situaciones de silencio, sonidos de ambientes...

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