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En Europa
Artículo principal: Hechos anteriores a la Segunda Guerra Mundial en Europa
Mapa político de Europa en 1923, tras el final de la Primera Guerra Mundial y la firma de los tratados
de paz.
El caldo de cultivo existente a nivel social, combinado con la Gran Depresión de inicios de
los 30, hizo que la débil República de Weimar no fuera capaz de mantener el orden
interno; los continuos disturbios y conflictos en las calles incrementaron la exigencia de
orden y seguridad por parte de sectores de la población cada vez más amplios. Sobre esa
ola de descontento y rencor, el Partido Nazi, liderado por Adolf Hitler se presentó como el
elemento necesario para devolver la paz, la fuerza y el progreso a la nación. Los ideólogos
del partido establecieron las controvertidas teorías que encauzarían el descontento y
justificarán su ideario: la remilitarización era imprescindible para librarse del yugo opresor
de las antiguas potencias aliadas; la inestabilidad del país era ocasionada por movimientos
sociales de obediencia extranjera (comunistas) o grupos de presión no alemanes (judíos),
culpables además de haber apuñalado por la espalda a la Gran Alemania en 1918;
además, Alemania tiene derecho a recuperar los territorios que fueron suyos, así como
asegurarse el necesario espacio vital (Lebensraum) para asegurar su crecimiento y
prosperidad. Todas estas ideas quedaron plasmadas en el Mein Kampf.
Partiendo de la sensación de afrenta originada por el Pacto de Versalles, los nazis
potenciaron, alimentaron y extendieron la necesidad de reparación en la sociedad
alemana, mezclando los problemas reales con las necesidades de su propio programa
político, presentando el militarismo y la adherencia a la disciplina fascista como las únicas
vías capaces de reconducir la situación. Así se justificó la represión brutal de cualquiera
que no pensara del mismo modo o fuera percibido como un enemigo del Estado. Y el clima
existente a causa del Pacto hizo que a parte de la sociedad no le preocupase lo más
mínimo el incumplimiento de cualquier tipo de tratado internacional. Hasta 1932,
el NSDAP fue incrementando su cuota electoral en las elecciones federales, manteniendo
un estilo político igual de bronco y agresivo que el que practicaba en la calle.
Bombardeo de Guernica en 1937 por la aviación de la Alemania nazi, durante la Guerra Civil
Española (1936-1939).
Hitler restauró en Alemania el servicio militar generalizado que había sido prohibido por el
Tratado de Versalles, remilitarizó la Renania en 1936 y puso en práctica una política
extranjera agresiva, el pangermanismo, inspirada en la búsqueda del Lebensraum,
destinada a reagrupar en el seno de un mismo estado a la población germana de Europa
central, comenzando por Austria (Anschluss) en marzo de 1938.
El principal objetivo declarado de la política exterior alemana de la época inmediatamente
anterior a la guerra era, por una parte, la recuperación de esos territorios, así como
del Corredor polaco y la Ciudad libre de Dánzig, en los antiguos territorios
de Prusia perdidos por Alemania después de 1918. Esas reclamaciones territoriales
constantes constituían elementos importantes de inestabilidad internacional, pues Berlín
reivindicaba abiertamente su restitución, de forma cada vez más agresiva, con la intención
de reconstruir la Gran Alemania Großdeutschland.
El apoyo al levantamiento militar del general Francisco Franco en España por parte
de Italia y Alemania con tropas y armamento desafió abiertamente al acuerdo de no-
intervención en el conflicto civil (Guerra Civil Española) de las naciones extranjeras. Hitler
había firmado ya el Pacto de Acero con Mussolini, el único de los dirigentes europeos con
un ideario similar. El apoyo a las fuerzas franquistas fue un intento de establecer un
Estado fascista controlando el acceso al Mediterráneo con vistas a una futura guerra
europea, algo que solo funcionó a medias.