Durante los años 1950, fenómenos tan heterogéneos como la Action Painting,
Gutai o las Antropometrías de Klein, comienzan a conferir al hecho corporal
cierta autonomía respecto a la actividad evidente. En 1958 empezó sus «antropometrías», donde una modelo desnuda —que él llamaba sus «pinceles vivientes»—, embadurnada de pintura, se acostaba sobre un lienzo, dejando la huella de su cuerpo pintada en la tela, en diversas improntas que variaban según la posición del cuerpo, o según el movimiento, ya que a veces hacía girar a las modelos sobre la tela. En ocasiones, también realizaba «antropometrías en negativo», es decir, situando la modelo delante de la tela y pulverizando pintura, con lo que quedaba marcada su silueta. Uno de los pioneros de esta tendencia fue nuevamente Yves Klein, que en 1958 empezó sus «antropometrías», donde una modelo desnuda —que él llamaba sus «pinceles vivientes»—, embadurnada de pintura, se acostaba sobre un lienzo, dejando la huella de su cuerpo pintada en la tela, en diversas improntas que variaban según la posición del cuerpo, o según el movimiento, ya que a veces hacía girar a las modelos sobre la tela. Klein y Manzoni fueron antecedentes del arte conceptual: Klein con sus antropometrías y sus cosmogonías (pinturas expuestas a los elementos: fuego, lluvia) o con su exposición Vacío (1958, Galería Iris Clert), donde vendió el espacio vacío de una galería; y Manzoni envasando sus excrementos en lata (Merda d'artista, 1961). Definido por Costanzo Costantini el “Yves Klein” italiano, Bongiorno es conocido por sus antropometrías parecidas a aquellas realizadas por el pintor francés. Katsuō Shiraga hace La pintura con los pies, danza sobre un soporte de papel, con los pies pintados, influencia de las antropometrías de Yves Klein. Uno de los ejemplos más conocidos son las antropometrías («antropometrías» o «mujeres pincel») de Yves Klein, en las que el pintor cubría de azul ultramar a una serie de mujeres jóvenes desnudas que ruedan sobre una tela blanca, dejando el rastro visual de sus movimientos. El fondo de mediados de siglo incluye trabajos de Diego Rivera (Vendedora de flores, 1949), Wilfredo Lam, Roberto Matta, Henry Moore, Roy Lichtenstein, Robert Rauschenberg, Francis Bacon (Lying figure, 1966), Yves Klein (esculturas y pinturas, incluyendo una de sus famosas Antropometrías), Nancy Spero, Jean Tinguely, Asger Jorn, Pierre Alechinsky, Pol Bury, Constant (los cuatro últimos, miembros del grupo CoBrA), Lucio Fontana (Concetto spaziale. Uno de sus principales representantes fue Yves Klein, artista revolucionario que fue precursor del arte conceptual y de acción, autor de las «antropometrías», donde una modelo desnuda, embadurnada de pintura, se acostaba sobre un lienzo dejando la huella de su cuerpo pintada en la tela, marcando el punto de origen del body-art y el happening.;Arte de acción (desde 1960) Son diversas tendencias basadas en el acto de la creación artística, donde lo importante no es la obra en sí, sino el proceso creador, en el que además del artista interviene a menudo el público, con un gran componente de improvisación.