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2Resumen Sociología de la experiencia escolar – Dubet y Martuccelli

En su trabajo llamado “La Sociología de la experiencia escolar” (en conjunto


con Danilo Martuccelli), Dubet plantea que en esta transformación la escuela
dejaría de cumplir sus principales funciones por tres motivos:
 las regulaciones de la escuela republicana no se adaptan al cambio de
público. Esto genera dificultades para socializar a los alumnos y para la
labor docente debido a la creciente violencia, falta de respeto e indisciplina
en las aulas.
 la escuela tiene cada vez más problemas para preparar a los jóvenes al
mundo laboral pues los altos niveles de desempleo, sub-empleo y empleos
precarios no garantizan la rentabilidad de los títulos académicos. El
esfuerzo ya no es suficiente para encontrar un empleo interesante y bien
pagado.
 al sistema educativo ya no se le exige que forme ciudadanos
autónomos, racionales y críticos, sino que forme adecuadamente a
trabajadores y técnicos especializados.
El hecho que la escuela no cumpla sus funciones genera tensiones en
estudiantes padres y profesores que amenaza la unidad de sus experiencias:

 Los profesores tienen cada vez más problemas para impartir clases
pues el alumnado es cada vez más numeroso y diverso, no está motivado y
no respeta las normas de trabajo escolar.
 Los profesores entonces deben además ejercer como psicólogos o
asistentes sociales, como si estuvieran capacitados para resolver todos los
problemas de la sociedad.
 Los alumnos soportan cada vez menos el escaso interés y motivación de
los docentes, la falta de sentido de los estudios, la creciente competencia y
la incertidumbre respecto al futuro.
 Los actores deben realizar un trabajo permanente de adaptación para
que su experiencia sea la mejor posible. Dice Dubet: “El actor social es un
gestionador de la incertidumbre”. La experiencia, pasa a ser un concepto
central en la sociología de Dubet.
En su libro la escuela de las oportunidades, Dubet plantea que con la
masificación de la educación el sistema educacional pasa a organizarse
alrededor del principio de igualdad de oportunidades por el cual todo niño tiene
igual derecho a acceder a una educación común.
A diferencia de Bourdieu, Dubet no plantea que la escuela necesariamente
reproduce las igualdades sociales. Sin embargo, plantea que el sistema
de igualdad de oportunidades genera un sistema injusto, pues está
basado en un sistema meritocrático que no “hace justicia” a los
vencidos. La escuela jerarquiza a los alumnos en función de sus
resultados lo que resulta en una escuela de vencedores y vencidos; los
vencedores obtendrán todas la ventajas económicas y sociales, mientras los
vencidos serán abandonados a la precariedad. Además, los vencidos, no
pueden más que culparse por su fracaso lo que daña su autoestima y, a veces,
se torna en violencia escolar. Esta no es una escuela justa.
El autor no cuestiona el principio de la igualdad de oportunidades, pero
dice que por sí solo no es suficiente, ya que este principio deja de lado el
hecho fundamental de que la escuela es parte de una sociedad que es
desigual.
Dubet propone una escuela justa debe combinar otros principios de justicia:
distributiva, social e individual. Al respecto nos dice:

 para todo individuo debe estar garantizada una cultura escolar


común. La institución escolar debe dotar de conocimientos básicos,
mínimos y elementales a todos los alumnos y asegurar un conjunto de
aprendizajes que le permita a los marginados estar relativamente en las
mismas condiciones para la carrera escolar.
 el proceso de educación debe dirigirse a reconocer y formar individuos
con independencia de sus desempeños y calificaciones escolares. El
sistema debe preocuparse no solo por la excelencia de los vencedores, sino
por el destino de los vencidos dando más a quienes menos tienen.
 En definitiva, Dubet plantea que no debemos olvidar los efectos sociales
de las desigualdades escolares. Por más que las desigualdades, medidas
en función del mérito, sean justas estas pueden tener consecuencias
sociales injustas. La complejidad del problema radica en que la escuela
debe evitar ser un espejo de las desigualdades sociales a la entrada y debe
a la vez evitar generar desigualdades sociales a la salida
Finalmente, ambos elementos: experiencia y justicia deben ser puestos en la
balanza. De este modo, Dubet se pregunta: ¿Queremos un sistema justo con
alumnos estresados, suicidas… alumnos poco felices?

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