Está en la página 1de 3

La Gran comisión y el hacer discípulos

Texto base: Mateo 28:16-20 (Ref.: Mr. 16.14–18; Lc. 24.36–49; Jn. 20.19–23)
16Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había ordenado. 17Y cuando le
vieron, le adoraron; pero algunos dudaban. 18Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es
dada en el cielo y en la tierra. 19Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 20enseñándoles que guarden todas las cosas que os he
mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.

Para el propósito de este tema, dividiremos el pasaje de siguiente forma:


I. Contexto de la reunión (V16-17)
II. La autoridad para la comisión (V18)
III. La comisión (V19-20)
IV. La promesa de acompañamiento (V20)

I. Contexto de la reunión
● Los discípulos, en obediencia a Jesús, fueron a un monte al norte de Galilea a encontrarse con Él
(V16).
● Jesús había resucitado y había realizado otras apariciones, pero esta era la primera vez que
aparecía a todos sus discípulos, los once.
● La reacción de los once fue dispar, ya mientras algunos le adoraron, otros aun dudaban (V17). Es
la segunda vez que Mateo menciona que los discípulos le adoraron (Mateo 14:13).
● Jesús se acercó y disipó sus dudas y les reprendió la incredulidad. (Ref.: Mr. 16.14–18; Lc. 24.36–49; Jn. 20.19–
23)

II. La autoridad para la comisión (v.18)


● Con la resurrección, Jesucristo se apareció como el “Señor Jesús”, habiendo terminado el proceso
de humillación en la tierra, vuelve como el “Señor Jesús”, Kyrios, dueño absoluto, tal y como Pablo
describe el proceso de humillación y exaltación (Filipenses 2:5-11).

©2019 Especialidades625 | www.e625.com 1


Bosquejo para sermón: Más que Fans 01

o La autoridad le fue dada por el Padre (Mateo 11:27).


o El Señor Jesús posee toda potestad, toda autoridad sobre los cielos y en la tierra.
(Filipenses 2:9-11)
● Es importante comprender la autoridad que Jesús tenía al momento de comisionar a los
discípulos, ya que esta petición, está lejos de ser una recomendación a tener presente, ni mucho
menos un favor que un amigo le pide a otro, esta es una misión, un mandato encomendado por el
Rey soberano absoluto, el mismo creador, dueño de los cielos y la tierra.
● La importancia de esta comisión no está en la función que debemos realizar, sino más bien radica
en la persona que nos comisiona.

III. La comisión
● “Por tanto”, esta conjunción hace un llamado a la acción y que precede a la autoridad que da el
peso a este mandato.
● Comisión: “Id y haced discípulos”
o Bautizándolos
o Ensañándoles a guardar la Palabra
● “Id, y haced discípulos a todas las naciones”. Aquí la idea central y el verbo principal es “Haced
discípulos”. El verbo utilizado es “Mathēteuō”. Este verbo está en tiempo Aoristo, lo que significa
que es una acción que Jesús espera que realicemos. El significado de esta palabra, que
comúnmente es traducida como “haced discípulos” en realidad tiene la intención de
“Causar/instar/provocar/hacer que otros se transformen o conviertan en seguidores de”. Es
importante tener presente que nosotros no tenemos ningún poder ni facultad para transformar a
nadie, y es Dios quién genera la transformación en cada persona, sin embargo, hay una tarea que
debemos cumplir, y esta tarea es descrita por Jesús.
● “bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo”. El bautismo no es
una linda tradición simbólica, es la puerta de entrada al Reino del Señor Jesús. Es la declaración y
reconocimiento público del cambio de gobierno en la vida de una persona, movido por un
arrepentimiento genuino de vivir lejos e independiente de Dios, en donde le entregamos la corona
de nuestra vida al Señor de este Reino, a Jesucristo (Hechos 2:38; Hechos 2:41; Marcos 16:16). El
bautismo nos liga a Cristo y a su cuerpo, y luego en el cuerpo, cada miembro es edificado
mutuamente por el propio cuerpo (Efesios 4:1-16).
● “enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado”.
o Un discípulo es un aprendiz de un maestro, el maestro es Jesús, los discípulos son de Él.
o Un discípulo es un alumno que se acerca al maestro con el fin de aprender y obedecer, de
lo contrario no hay discípulo.
o Hacemos discípulos cuando enseñamos la doctrina de Cristo, pero el crecimiento no se da
por la simple transmisión de conocimiento intelectual ni doctrinal.

©2019 Especialidades625 | www.e625.com 2


Bosquejo para sermón: Más que Fans 01

o Un discípulo no es aquel que simplemente conoce la doctrina o que tiene estudios


formales de teología, un verdadero discípulo es aquel que conoce la “Palabra y la vive”,
¡¡porque conocimiento intelectual sin vida, sin frutos es religiosidad pura!! (Juan 15:8;
Mateo 7:24-28).
o Entonces el desafío planteado por Jesús es mucho mayor que sólo enseñar doctrina, es
enseñar a “guardar” la doctrina, enseñar a vivir los mandatos de Jesús, acompañar en este
largo camino de transformación hacia la imagen de Cristo, enseñar sobre el perdón y
acompañar en el proceso de perdonar, enseñar sobre que hay que poner la otra mejilla y
acompañar en los momentos en que los discípulos sufren injusticias para ayudarlos a
guardar esa instrucción del maestro… “Enseñar a guardar” es un gran desafío. Una cosa es
dar una receta de cocina, otra muy distinta, enseñar a cocinar.
o El gran problema de hacer discípulos es que nosotros somos inútiles y estamos también
en proceso de construcción continua. Pero bueno, aquí es donde Jesús nos hace una
promesa que hace toda la diferencia...

IV. La promesa del acompañamiento


● Lo primero que debemos entender, es que, si vamos a hacer discípulos, no podemos hacer nada si
Jesús no está en nosotros. El pámpano no puede dar fruto si no vive apegado a la Vid (Juan 15:1-
17).
● Si lo anterior de “hacer discípulos” nos hizo sentir algún peso sobre nosotros, la promesa de
acompañamiento de Jesús nos hace descansar y nos da seguridad de que Él es el Rey de este
Reino y las cosas suceden por causa de Él… “y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta
el fin del mundo. Amén.”

V. Reflexión
● Jesús es el Señor y tiene toda potestad en los cielos y en la tierra.
● Con esa autoridad, Él nos entregó un mandato, una orden.
● Esa orden fue dada a sus discípulos, por tanto, antes de “hacer” discípulos, debo “Ser” discípulo.
● La comisión es “Hacer discípulos” à Bautizándolos à Enseñándoles a que guarden la Palabra.
● Enseñar a guardar, implica un acompañamiento espiritual cercano, el mejor ejemplo lo vemos en
el propio Jesús y su relacionamiento con sus discípulos. Había momentos de oración, momentos
de comunión, momentos de doctrina, pero la mayor parte del tiempo eran momentos del día a día
donde Jesús les enseñaba a vivir para agradar a Dios (Hechos 1:1 “Hacer” à “Enseñar”).
● El propio Jesús nos prometió su acompañamiento hasta el fin del mundo, en esta desafiante
comisión que nos dio.

©2019 Especialidades625 | www.e625.com 3

También podría gustarte