Está en la página 1de 17

ESCUELA SUPERIOR EN ADMINISTRACION DE NEGOCIOS

ESAN

Programa Magíster en Administración

MATP 46

Mención.

DIRECCIÓN GENERAL

Curso:

Innovación Gerencial: Creando Valor

Caso:

Desarrollo Sostenible en Venezuela

Profesor:

Lidia Arbaiza

El presente trabajo ha sido realizado de acuerdo con los


Reglamentos de la Universidad ESAN por:

Luis Salas Biondi


Víctor Salas Torreblanca
Luciano Brumel Zegarra
José Chumpitáz
Pepe Pari

Lima, 24 de noviembre del 2010

DESARROLLO SOSTENIBLE EN VENEZUELA


Introducción

Como lo indica la imagen que coloco en mi bitácora, el desarrollo


sostenible no solo tiene que ver con lo ecológico-natural, con los
árboles y la energía, sino con lo social y económico. Cuando hablo de
lo económico me refiero no solo a industrias y servicios dedicados a
reducir nuestro impacto sobre la naturaleza, sobre el biotopo, sino
también a aquellos que contribuyan al desarrollo general del país a
largo plazo. En este caso, aunque se trata de una actividad que
respeta el medio ambiente y es socialmente responsable, su
componente principal podría ser económico.

Por ejemplo: la producción de un sistema de automatización


novedoso de servicios básicos para personas mayores, un sistema
que verifique que la persona está bien de salud, que pueda llamar
con facilidad, etc. Esto puede estar en el contexto de desarrollo
sostenible. Si la empresa genera nueva tecnología, si puede respetar
el medio ambiente, si paga bien y presenta productos accesibles a
todo el mundo, si tiene un plan a largo plazo y estructuras flexibles
para adecuarse al futuro, también está contribuyendo al desarrollo
sostenible. Una empresa que produzca de manera eficiente cualquier
producto que hasta ahora se tenía que importar y que use materias
primas de una manera ecológicamente sana, ya está contribuyendo al
desarrollo sostenible del país.

La energía y el ambiente son piezas fundamentales para la


construcción de patrones de desarrollo sustentable de una región. Los
más pobres se ven particularmente afectados por la degradación
ambiental y por la falta de acceso a los servicios de agua potable,
saneamiento y energía.

En su Constitución de 1999, La República Bolivariana de Venezuela se


compromete a propiciar un desarrollo sustentable (Art. 128, 310 y
326) y en la Ley Orgánica del Ambiente (Gaceta Oficial Nº 5.833, 22-
12- 2006) se define el desarrollo sustentable como un “proceso de
cambio continuo y equitativo para lograr el máximo bienestar social,
mediante el cual se procura el desarrollo integral, con fundamento en
medidas apropiadas para la conservación de los recursos naturales y
el equilibrio ecológico, satisfaciendo las necesidades de las
generaciones presentes sin comprometer las generaciones futuras”.

Han existido algunas iniciativas que en la búsqueda por promover un


desarrollo más sostenible han logrado buenos e interesantes
resultados, tanto a nivel de políticas públicas como de proyectos,
participando en el diseño y ejecución de dichas acciones instituciones
de gobierno (regional, nacional y local) organizaciones no
gubernamentales, universidades y empresas privadas de varios
sectores de la economía. Sin embargo, esto no ha sido suficiente
para avanzar de manera decisiva hacia el desarrollo sostenible en
Venezuela. Por tanto, hoy sigue siendo necesario impulsar la
discusión y un rico intercambio que ayude a promover el mejor y más
armónico desarrollo para el país en todas las dimensiones, social,
ambiental y económico.

La Problemática Ambiental en Venezuela

1. Problemas Relacionados con el Agua

El deterioro del medio ambiente ha sido, durante los últimos años, un


tema de importancia primordial para los países del primer mundo.
Irónicamente, en Venezuela; país que ha sido clasificado como uno de
seis países "mega diversos" de Latinoamérica, considerado entre los
diez lugares más importantes del mundo para la conservación de la
biodiversidad, debate sobre la problemática ambiental que no ha
cobrado el mismo vigor.

La mejora y la conservación del medio ambiente, al contrario de lo


que se pensaba hace varias décadas, no estorba el proceso de
desarrollo económico. Por el contrario, ambiente y desarrollo van de
la mano. A medida que los países se desarrollan, las posibilidades de
mejorar el medio ambiente van creciendo. Por otra parte, dado que
las clases sociales mas necesitadas usualmente se encuentran cerca
de regiones con problemas ambientales, políticas ambientales
efectivas ayudan a aliviar la pobreza mediante la generación de
empleo y el mejoramiento de la productividad de los trabajadores y
de las condiciones de los suelos y aguas cercanas.

Para ejemplificar, la contaminación puede causar problemas de salud


debido a factores tan diversos como la continua exposición a la
radiación solar, la mala nutrición o las enfermedades. Asimismo, la
contaminación del agua perjudica a las actividades pesqueras y
turísticas, y la salinización de los suelos disminuye sustantivamente la
productividad de los mismos. Al atacar los problemas ambientales, se
atacan las causas de problemas socioeconómicos como estos y se
sientan las bases para un desarrollo sostenido y armónico.

Las políticas ambientales también son importantes por razones


estratégicas. La degradación ambiental acarrea externalidades
negativas para otros países. Actualmente existe un gran número de
organizaciones dispuestas a financiar proyectos de saneamiento
ambiental; igualmente, existen iniciativas que conducirán a que los
países del primer mundo concedan beneficios económicos a cambio
del cuidado ambiental. La protección de la biodiversidad de nuestros
bosques tropicales (por el valor que tienen los mismos para la
investigación medica y la producción de medicinas) así como el
saneamiento de otros problemas ambientales podrían significar que
Venezuela pueda 'vender' ecología y actividades relacionadas, como
por ejemplo, ecoturismo.

Los problemas del manejo de aguas dulces en Venezuela se debe a


que la mayor parte de la población y gran parte de la actividad
industrial se encuentra ubicada en regiones con pocas fuentes
naturales de agua (dos tercios del agua de nuestro país, sin incluir el
Edo. Amazonas que se encuentra en los Edos. Bolívar y Táchira). La
conservación de los recursos existentes es de vital importancia para
su efectiva gerencia; sin embargo, la falta de políticas de
conservación y uso eficiente son tan culpables de la escasez de agua
como lo es la concentración poblacional. Es en esta área donde la
mayor parte de los esfuerzos del gobierno se deben concentrar.

Uno de los principales problemas en el servicio del agua radica en las


deficiencias del proceso de cobro. En 1988, el INOS facturaba el 37%
del agua consumida y cobraba el 71% de esa fracción. Las
distorsiones que estos procesos generan se traducen en un
agotamiento de los recursos. No ha de sorprendernos que el consumo
de agua potable en Venezuela, de 440 litros Per capita por día, sea
dos veces mayor que la norma general aceptada. Igualmente, la falta
de cobro se traduce en interrupciones en el servicio y, en los casos de
algunas poblaciones, la ausencia absoluta del mismo.

Esta situación ha evolucionado en los últimos años con la


regionalización y/o privatización del servicio de agua en muchas
localidades. En 1990, fue creada Hidroven (agencia federal
reguladora) y el servicio en si fue dividido en compañías
independientes que procuran elevar las tarifas para reflejar los
costos. En estos momentos no poseemos información acerca de como
ha continuado este proceso, aunque sospechamos que si bien la
sinceración de tarifas fue efectiva en un comienzo, en los últimos
años ha sido abandonada y se ha perdido el terreno ganado. Hace
falta una sinceración de tarifas considerando que el servicio de agua
es esencial para la salud. Una solución podría ser la creación de un
sistema de tarifas mediante el cual todos los usuarios tendrían acceso
a un servicio mínimo básico a partir del cual se implemente una tarifa
creciente por intervalos de consumo.

Además de exceso de consumo, la región Norte de Venezuela


presenta graves problemas de contaminación de fuentes de agua. La
extracción de petróleo, el procesamiento de alimentos, las industrias
textiles y las industrias pesadas de hierro y aluminio, son y han sido
actividades productivas altamente contaminantes en el país. Los
sistemas de tratamiento de desechos tóxicos han sido implantados
solo de manera parcial. Sin embargo, aun cuando se instalasen los
debidos sistemas de tratamiento de agua, hay contaminación
acumulada de muchos años que debe ser tratada con tecnología que
resulta altamente costosa. La asistencia de organizaciones
internacionales y de los multilaterales es vital en este aspecto, y debe
ser perseguida.

Dado que los principales problemas de contaminación se encuentran


en los Lagos de Valencia y Maracaibo, a continuación señalamos
algunos datos interesantes acerca de la problemática de cada
cuenca.

Lago de Valencia:

• La concentración de industrias en un reservorio de agua sin


salidas ni capacidad natural de drenaje constituye el problema
mas grave que afronta el Lago.
• A pesar que más del 70% de las industrias aledañas al Lago han
instalado plantas de tratamiento, muchas no funcionan
adecuadamente. Igualmente, el Lago continua contaminado por
los años de maltrato ecológico que han precedido estas
medidas, por lo que sin un proceso de "resucitación" del Lago,
este podría estar efectivamente muerto antes que termine el
siglo.
• La contaminación, la falta de drenaje y el exceso de afluencia
(en 1978, el río Cabriales fue desviado hacia el Lago) han hecho
subir el nivel del Lago, lo cual amenaza a poblaciones,
industrias y cultivos cercanos a su orilla.

Lago de Maracaibo:

• Principal contaminación proviene de la extracción y transporte


del petróleo.
• Desagües municipales e industrias (en especial las
petroquímicas) contribuyen a la contaminación del lago.
• Solo un tercio de las industrias contaminantes poseen equipos
de tratamiento de desechos.
• El dragado del Canal para permitir el acceso de buques de gran
calado desde el Golfo de Venezuela ha contribuido con la
salinización del Lago, dañando seriamente las actividades
pesqueras en la zona.

Cabe destacar que en las labores que se han acometido hasta ahora

Para sanear estas dos cuencas, el Ministerio del Ambiente (MARNR)


ha recibido significativa asistencia de parte de entes internacionales
(la Comunidad Europea) y de organizaciones no gubernamentales
(ONG) regionales.

Claramente, la contaminación de las fuentes de agua es un problema


típico de exceso en el uso de contaminantes. Los incentivos
económicos deben contribuir para bajar los niveles de contaminación
a un punto óptimo. En este sentido, una sugerencia seria implantar
un sistema de impuestos ambientales de acuerdo a la cuantía de
contaminación. Asimismo, deben imponerse multas y/o impuestos
que desincentiven las actividades altamente contaminantes y
estimulen la sustitución por técnicas más ecológicas.

2. Problemas Relacionados con la Minería

Las actividades de extracción de oro en la zona de Guayana han


generado una significativa contaminación de las aguas con mercurio.
El uso del mercurio en una forma apropiada no debería causar
problemas ambientales y es una manera segura y efectiva de extraer
oro. Sin embargo, el uso indiscriminado del mismo afecta las fuentes
de agua de las cuales se nutren actividades agrícolas, ganaderas y de
pesca. Como ejemplo, un estudio de peces extraídos de la región de
Guayana encontró que los niveles de mercurio en los hígados de los
mismos eran siete veces mayor que el nivel aceptable. Para los
humanos, el exceso de mercurio es un problema grave que genera
numerosas enfermedades cerebrales, motoras y de la piel.

Son dos las causas principales de este fenómeno. La primera es la


venta indiscriminada de mercurio, tanto en Venezuela como en Brasil.
La segunda proviene de la poca vigilancia fronteriza que contribuye a
la presencia de centenares de mineros ilegales que operan en nuestro
país sin reparo alguno por el daño ambiental que originan.

La prohibición de la venta del mercurio solo incrementaría el


contrabando del mismo y no solucionaría el problema. De nuevo,
harían falta mecanismos de mercado (impuestos o tasas) coordinados
entre Venezuela, Brasil y Colombia, que eleven el precio del mercurio
y desestimulen su consumo hasta niveles racionales. Los ingresos que
origine este impuesto podrían utilizarse para la dotación de la
frontera en las zonas mineras y así impedir actividades económicas
ilegales en nuestro territorio que dañen el ambiente. Quizás hasta se
podría lograr un proceso de saneamiento ambiental atacando las dos
causas del mismo y financiándose de modo propio.

3. Problema de la Gerencia de Tierras

Las riquezas naturales de Venezuela se ponen de manifiesto en sus


bosques. El 58% del territorio nacional es boscoso. Nuestro país tiene
un gran potencial forestal, ya que más de la mitad de nuestros
bosques están conformados por especies comerciables. Sin embargo,
la actividad forestal ha sido poco planificada hasta ahora. El 0.7% de
nuestros bosques se pierde anualmente y, aunque esta cifra esta por
debajo del promedio regional, podría ser aun mejor.

La causa primordial de la reforestación en Venezuela es la búsqueda


de terrenos para la cría de ganado, actividad que degrada a capa
vegetal de los suelos rápidamente. La región donde esto es mas
frecuente es en el piedemonte andino. La actitud permisiva del
gobierno contribuye a estimular esta actividad: muchos campesinos
han ocupado tierras propiedad del Instituto Agrario Nacional (IAN)
para deforestar y establecer actividades de ganadería. El IAN permite
adquirir derechos de propiedad sobre terrenos ocupados luego de
realizar ciertos trámites. Al obtener sus derechos sobre los terrenos
ya degradados por la actividad ganadera, los campesinos proceden a
traspasarlos para ocupar nuevas tierras y comenzar el ciclo de nuevo.
Este proceso es un ejemplo de como el estimulo del gobierno en un
obstáculo para el desarrollo sostenible.

Por otro lado, la explotación de los bosques con fines madereros ha


carecido de visión de futuro. Las políticas de declaración de zonas
boscosas como 'áreas de explotación controladas' han sido invectivas
debido a decisiones contradictorias de otros entes del Estado (como,
por ejemplo, del IAN y de la CVG). El MARNR se ha visto en la
necesidad de rescatar ciertas reservas forestales para otorgarlas a
compañías privadas. Sin embargo, esta política no ha sido perseguida
con agresividad suficiente.

Igualmente, permisos de explotación a corto plazo (a veces hasta de


un ajo) han prevalecido en los últimos veinte años, originando una
explotación irracional de los bosques. A pesar de que el MARNR ha
empezado a otorgar concesiones a treinta años (con excelentes
resultados), la derogación total de los permisos a corto plazo no es un
hecho todavía.

La disposición de desechos tóxicos y sólidos constituye asimismo un


problema grave en Venezuela. El déficit de rellenos para desechos se
ha venido atacando en los últimos años a nivel municipal y
permitiendo la participación de ONG, lo cual ha dado excelentes
resultados. Esta es una señal de que, en el caso específico de
recursos terrestres, hace falta la colaboración de organizaciones
locales que vigilen en cumplimiento de ordenanzas y velen por el
cumplimiento de metas ambientales específicas. En este sentido, el
conocimiento de los 'locales' acerca de las peculiaridades de cada
región y los actores que influyen sobre el ambiente hace que la
actividad privada tenga mucho que aportar.

4. Problemática Institucional

La Sección anterior se ocupo de señalar problemas específicos


relacionados con ciertos recursos y/o actividades económicas. Sin
embargo, las deficiencias institucionales impiden la efectividad de la
política ambiental a todo nivel y constituyen una problemática que
decidimos considerar aparte de las demás.

No es un secreto que las políticas ambientales deben ir a la par de las


económicas para que el desarrollo sea sostenible y duradero. El papel
del gobierno en orientar las políticas hacia el cuidado del ambiente es
primordial. Anteriormente, la preocupación ambiental no había estado
del todo ausente de las acciones del gobierno. El MARNR fue el primer
organismo en su tipo en América Latina. Parte del dinero del boom
petrolero de los años setenta se utilizo en la creación del sistema
nacional de parques que hoy tenemos.

Organizaciones no gubernamentales también surgieron en esa época


y, contrariamente a lo que se piensa, Venezuela posee uno de los
mejores 'stocks' de capital humano preparado para las tareas
ambientales de toda América Latina.

A pesar del consenso que pareciera existir en las altas esferas acerca
de la importancia de la problemática ambiental, la labor del gobierno
se ha caracterizado por la ineficiencia y por intrincados procesos
burocráticos que constituyen incentivos para la corrupción
(especialmente las cláusulas de arresto contempladas en la Ley Penal
del Ambiente). Dos problemas saltan a la vista. Primero, el MARNR
tiene una organización interna deficiente, reflejada en retrasos y falta
de coordinación entre unidades del mismo. Por ejemplo, la división
del MARNR había sido ineficiente hasta hace algunos años porque no
se había hecho en función de recursos específicos sino de áreas:
administrativa, investigación, infraestructura, etc. Actualmente, se ha
dado un proceso de reestructuración donde las divisiones se
concentran por áreas de experticia (Cuencas, Aire, Educación
Ambiental, etc.) en la que se pueden aprovechar el conocimiento
técnico de problemas específicos. Este programa ha dado resultados
mixtos, ya que en la práctica ha habido problemas de presupuesto y
de burocracia solapada. En principio, esta reformulación del MARNR
esta encaminada de forma correcta; sin embargo, hace falta evaluarla
constantemente y corregir las áreas donde se este fallando.

Otro factor que hace inefectiva la labor del MARNR lo constituye el


solapamiento de su autoridad con la de otras entidades
gubernamentales. Por ejemplo, el MARNR comparte labores
ambientales con el MAC (fertilizantes, reforestación), MSAS (labores
de limpieza), el Ministerio de Fomento (localización de industrias,
control de contaminación). La cooperación con las empresas del
Estado (en especial la CVG, que hasta hace poco no contaba siquiera
con una unidad de cuidado ambiental) ha sido escasa, originando
numerosos roces entre los organismos.

La falta de legislación sobre el ambiente no es un problema grave en


Venezuela. De acuerdo con el Banco Mundial, el cuerpo de leyes
existente hace que labores legislativas adicionales sean innecesarias.
Un defecto que se les atribuye a estas leyes es la falta de multas
significativas y/o invectivas (como es el caso de las provisiones de
arresto contempladas en la Ley Penal del Ambiente). Asimismo, las
leyes tienden a ser punitivas con pocas provisiones preventivas. Es en
esta área donde hace falta trabajar.

Los problemas que presenta la aplicación de la legislación existente


se evidencian cuando se observan los mecanismos de vigilancia que
poseen nuestros parques. Solo cuatro de los parques nacionales —
Henri Pittier, Guatopo, el Avila y Sierra Nevada — están siendo bien
Gerenciados. El Parque Nacional Canaima, por ejemplo, posee tres
guardias y unos pocos vehículos encargados de vigilar un área del
tamaño de Bélgica. En Los Roques hay cientos de pescadores que
realizan actividades de pesca ilícitas. La paga a los guardaparques es
poca y la corrupción es rampante.

Vale la pena destacar, no obstante, el acercamiento del MARNR hacia


ONGs tales como BIOMA y FUDENA. La cooperación con estos
organismos (y otros) es de especial importancia por la experticia
internacional que estos últimos poseen, así como sus convenios con
importantes organismos ambientales extranjeros y locales que han
sido sumamente efectivas.

5. Problemática con la Energía

Venezuela tiene el consumo de energía por persona más alto de toda


América Latina. Cada venezolano consume 4 mil kilovatios/hora, cifra
que duplica a Colombia y está mil vatios por encima del segundo país
de mayor consumo en la región, que es Chile.

La información la dio a conocer el ministro de Energía y Petróleo,


Rafael Ramírez, en una rueda de prensa conjunta con el ministro de
Energía Eléctrica, Ángel Rodríguez y el vicepresidente de la
República, Ramón Carrizalez, para anunciar una serie de medidas
destinadas al ahorro de electricidad.

Las medidas fueron publicadas en la Gaceta Oficial del 3 de


noviembre. En el decreto 6992 se conforma la Comisión
Interministerial Estratégica para el sector eléctrico. Con el decreto
6994 se establecen las exoneraciones del impuesto al valor agregado,
IVA, a las importaciones de los insumos necesarios para desarrollar el
sector eléctrico.

El Vicepresidente explicó que en la Gaceta Oficial se publicaron


también tres resoluciones que incluyen un mayor control en la
importación de electrodomésticos que no garanticen una eficiencia en
el consumo y medidas técnicas y administrativas para reducir el
consumo en entes públicos.
Por otro lado, El ministro de Energía Eléctrica, Ángel Rodríguez,
explicó que la tercera resolución tiene que ver con incrementar la
autogeneración de energía.

“Aquí el sector privado tiene capacidad de autogeneración, es decir,


que tienen plantas instaladas y podrían inyectar al sistema nacional
su consumo normal”, dijo, al tiempo que ofreció incentivos como la
exoneración del combustible para esta función.

Los altos funcionarios advirtieron que si algún actor del sector privado
se negaba a ceder su capacidad de generación eléctrica al Estado, el
Gobierno podría decretar la intervención “porque el interés público
está por encima del privado”, precisó Carrizalez.

En cuanto a las medidas de ahorro de energía para el sector público,


Rodríguez señaló que los termostatos del aire acondicionado en las
oficinas no estarán por debajo de 24 C° y habrá que prenderlos una
hora después de comenzar las actividades y apagarlos una hora antes
de finalizar la jornada.

El despilfarro y el fenómeno de El Niño fueron señalados como los


factores responsables de la crisis actual.

El ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, dijo que “todos los


venezolanos nos vamos a ver afectados” por esta crisis y por las
medidas que se están tomando para el ahorro. Indicó que aspiran a
un ahorro de 10 mil kilovatios / hora de electricidad, “lo que es
bastante, es mucho más que una planta generadora de 400
megavatios”.

Ramírez hizo un repaso por la historia de los cambios en el sector, en


el que mencionó la unificación de las empresas eléctricas y las
inversiones en proyectos de generación y transmisión de energía.
Hizo hincapié en la importancia de evitar el despilfarro y anunció que
próximamente se darán detalles sobre el nuevo plan tarifario que
pechará a los derrochadores.

Venezuela, un emblemático exportador de petróleo, enfrenta una


severa crisis eléctrica debido a años de desinversión en el sector y a
una prolongada sequía que derrumbó su capacidad de generación
hidroeléctrica.

El Gobierno está racionando la luz y el agua, aplicando sanciones al


alto consumo e importando plantas de generación eléctrica que serán
alimentadas con derivados petroleros. La situación está impactando
en la popularidad del presidente Hugo Chávez y podría ralentizar la
salida de Venezuela de la recesión, ya que industria y comercio están
obligados a reducir su consumo eléctrico en un 20 por ciento.
A continuación, algunos datos sobre la generación y el consumo en el
país latinoamericano:
• El sistema eléctrico en Venezuela está conformado por cinco
centrales hidroeléctricas, que en su conjunto generan el 70 por
ciento de la electricidad del país, y unas 30 grandes y medianas
plantas termoeléctricas, que generan el resto.
La mayor hidroeléctrica del país es la central Guri, que tiene una
capacidad instalada de 10.000 megavatios. La cota del embalse ha
bajado gradualmente por la sequía, acercándose al nivel crítico de
240 metros sobre el nivel del mar (msnm).
• Al 24 de febrero la cota del embalse estaba en 255,29 msnm.
El consumo eléctrico de Venezuela en el 2009 fue de 121.633 Giga
vatios hora (Gwh). El mayor aporte provino de la generación
hidroeléctrica y el resto de la termoeléctrica.
• El consumo de energía ha estado creciendo un promedio de 7
por ciento al año desde 2005, según cálculos preliminares del
Ministerio de Energía Eléctrica. En 2009 creció un 4,5 por ciento
con respecto al año previo y se proyectó un aumento del 3,5 por
ciento en 2010, sin considerar las medidas de ahorro y
racionamiento que arrancaron en enero.
• La capacidad instalada suma 23.600 mw, lo cual supera con
creces la demanda, pero la capacidad efectiva (la que está
disponible de manera recurrente) se calcula en unos 17.500 mw.
• A partir de enero de 2010 se reporta un déficit eléctrico
-desbalance entre la oferta y la demanda- de unos 1.670 mw,
consecuencia de la disminución del aporte tradicional de las
hidroeléctricas.
• El Gobierno anunció en enero un plan de racionamientos para
lograr una reducción de entre 1.800 y 2.700 mw (unos 40 GWh/día,
o un poco más del 10 por ciento del consumo) que abarca a las
industrias básicas (estas recortan 560 mw), comercios y
residencias. Tras un día de aplicación, el racionamiento en Caracas
se suspendió, pero se mantiene en el interior del país.
• La administración de Hugo Chávez también anunció la
incorporación de 4.007 mw este año mediante una inversión de
unos 4.000 millones de dólares, y la rehabilitación de las plantas
fuera de servicio, principalmente Planta Centro, la mayor
termoeléctrica del país con una capacidad instalada de 2.000 mw,
pero que apenas está aportando un 15 por ciento al sistema
interconectado.
La demanda de combustibles líquidos (fuel oil y diesel) para uso
eléctrico se incrementó en alrededor del 35 por ciento en 2009
respecto al 2008 para llegar a un promedio de 108.705 bpd, según
cifras oficiales. Por su parte, el uso de gas por parte de las plantas
eléctricas subió un 15 por ciento en ese período a 615,7 mmpcd
(millones de pies cúbicos diarios).

6. Problemática con el manejo de Desechos tóxicos y


peligrosos
La marca comercial ONYX, es el único operador que dispone de una
red mundial de recogida y gestión de residuos industriales especiales.
Es responsable de recoger los residuos tóxicos, transportarlos en
contenedores especiales, petroleros o semirremolques y eliminarlos.
Se procesan 2 millones de toneladas de residuos industriales
especiales cada año.
Empresas del grupo como SARP INDUSTRIES, tienen más de 25 años
de experiencia en el tratamiento de desechos tóxicos y peligrosos,
con más de 51 plantas repartidas en 18 países.
Para lograr los objetivos, se integran las especificidades técnicas,
económicas y ambientales de los clientes industriales para desarrollar
las soluciones más adecuadas.
En Venezuela no existe hoy un centro de recepción y tratamiento de
este tipo de desechos para su disposición final. Inversiones Cotecnica
ha presentado un proyecto ante las autoridades ambientales y está a
la espera de la autorización respectiva para comenzar a ofrecer este
tipo de servicios por primera vez en Venezuela.

7. La RSE hoy en Venezuela

Joseph Saade, presidente de la encuestadora Datos, ofreció los


resultados de su más reciente investigación en torno a la percepción
de la RSE en Venezuela.

En un año creció 14% el Índice de Responsabilidad Social que mide el


conocimiento de las empresas y de los programas de la población
consultada. Se realizaron 2.100 entrevistas en todas las poblaciones
con más de 50.000 habitantes.

De acuerdo al estudio, el sector privado en el país representa el


principal empleador del país con 53%, seguido el público con 30% y
por cuenta propia con 14%.

La encuesta reveló que 46% considera que la empresa pública


contribuye más al desarrollo del país; mientras que 42% opina que es
la empresa privada. “Es clave ver que las opiniones están divididas.
Es interesante que la gente diga que reconoce que el sector privado
tiene rol, pero el público también, por lo que no se trata de que es
blanco o negro, sino los dos”, interpretó el presidente de Datos.

En cuanto a la percepción de los encuestados sobre las empresas en


materia de RSE, los resultados favorecieron a Empresas Polar con
42%, seguido de Pdvsa y Cantv con 28% cada una.

José Henrique Sánchez, de la firma Espiñeira, Sheldon y Asociados,


dio a conocer los resultados de la II Encuesta sobre Prácticas y
Tendencias de Responsabilidad Social Empresarial y Gestión
Ambiental en Venezuela, mostrando los avances que han logrado las
empresas en materia social y ambiental y la relación con sus
negocios.
Sánchez destacó que 70% de las empresas participantes incluyen en
su misión compromisos con la sociedad y el ambiente, mientras que
un porcentaje similar lo hace en su visión (65%). Sánchez comentó
que estos números a pesar de lucir altos no lo son, en comparación
con la tendencia mundial que alcanza casi la totalidad.

El estudio de la firma también señala que las empresas ponen


especial énfasis en la responsabilidad hacia sus empleados. La
principal actividad de RSE que las empresas realizan para sus
trabajadores es referente a su salud y bienestar (69%), siguiéndole
educación (64%), seguridad y salud laboral (61%).

8. Inclusión: una oportunidad para la empresa

Un invitado internacional abrió la sesión sobre Discapacidad, Empleo


y Educación. Se trató del español Luis Calvo Pérez Bueno, presidente
del comité español de representantes de personas con discapacidad,
quien ahondó en la importancia de la profundización de las políticas
de accesibilidad universal, que actualmente se consideran RSE, pero
que la tendencia es que se conviertan en legislaciones.

Calvo informó que en Europa hay alrededor de 60 millones de


personas que tienen alguna discapacidad, por lo que recalcó que
tener en cuenta una infraestructura adecuada para garantizar la
accesibilidad a personas con estas condiciones se convierte en una
oportunidad para las empresas de llevar sus productos y servicios a
un público más amplio, a la vez se le ofrece al discapacitado
diferentes opciones que le permiten desarrollar su vida.

Por su parte, algunas empresas mostraron sus iniciativas relacionadas


a este tópico. Cargill, de la voz de Ramón Sosa, presentó su programa
"Engranados", que busca formar a personas con discapacidad en
labores de la empresa, con la intención de que formen parte del staff
de empleados de la compañía. La formación se realiza con el apoyo
de la Asociación para el Desarrollo de Educación Especial
Complementaria (Asodeco).

Leticia Torres, gerente de asuntos comunitarios y ciudadanía de


Microsoft Venezuela, dio a conocer el Programa de Oportunidades y
Empleo a través de la Tecnología en las Américas (Poeta) que desde
2006 ha formado a 2000 personas con alguna discapacidad, con el
apoyo de diferentes organizaciones de desarrollo social. Torres
informó que en Venezuela, según estadísticas del Instituto Nacional
de Estadísticas, hay alrededor de 90 mil personas con discapacidad,
por lo que es necesario ampliar este tipo de iniciativas.

9. Desarrollo Sostenible en el Sector Privado

Una respuesta válida parece ser la empresa de origen chileno Masisa,


que produce y comercializa tableros de madera para muebles, y
arquitectura de interiores, partiendo de importantes activos forestales
que le garantizan la materia prima necesaria.

"Nacimos como una empresa distinta, creyendo que es posible


amalgamar en un solo bloque lo social, lo ambiental y lo económico.
Para nosotros la responsabilidad social no es una moda, es nuestra
esencia como compañía, y eso marca la diferencia", afirma Miguel
Oneto, gerente general de Masisa Venezuela.

"Si hablamos del concepto de desarrollo sustentable, ese es un sueño


que parte por la casa: por los empleados, quienes reciben ingresos
por el trabajo que les permite vivir tranquilos. En segundo lugar hay
un estilo interno de participación que se traduce en mesas de trabajo
sobre temas de interés para todos".

Esa es una manera de practicar uno de los principios de gobierno


corporativo, que establece que la empresa "respeta los derechos
humanos de los colaboradores" (empleados) y que las políticas
laborales deben estar basadas en la igualdad de oportunidades.

Explica Oneto que por estar en el negocio forestal los proyectos


requieren mucha inversión y un largo plazo, pues dependen del ciclo
de vida de las especies madereras. "Un proyecto comienza a
explotarse 25 años después, y se piensa para que sea rentable luego
de 75 años. La filosofía que nos mueve es el largo plazo, por eso
adoptamos fácilmente el concepto de desarrollo sustentable".

Para la producción de tableros en Venezuela la empresa cuenta con


un complejo industrial ubicado en el estado Anzoátegui, además de
las plantaciones de pino Caribe en Uverito, estado Monagas, donde se
lleva adelante un programa de conservación de especies que
reforesta entre 4.500 y 5.000 hectáreas al año.

Las instalaciones industriales venezolanas, en las cuales se ha


invertido cerca de 400 millones de dólares, se suman a otras 13 que
funcionan en Chile, Argentina, Brasil y México.

Su red de distribución al detal, Placacentro, lleva productos propios y


de terceros al pequeño y mediano profesional de la carpintería y la
construcción. Actualmente, Masisa cuenta con 30 de estos
establecimientos en varias ciudades bajo la modalidad de franquicia.

El 99,2 por ciento de los trabajadores de Masisa Venezuela son


venezolanos. En el caso de la fábrica de tableros, solamente el
gerente de operaciones es extranjero. La razón: esta es la primera
fábrica de ese tipo en el país, y se requirió traer a alguien con
experiencia para asegurar la transferencia de conocimientos.

Lo que comenzó en 2006 como una charla a carpinteros de la


población de Magdaleno, en el estado Aragua, se convirtió en un
programa social, pero también en una línea de productos, un nuevo
canal de mercadeo y por supuesto beneficios económicos, sociales y
ambientales.

Cuenta Cielo Velandia, coordinadora de responsabilidad social, que el


programa comenzó con una charla para crear conciencia entre los
carpinteros de Magdaleno de los daños ambientales que estaba
ocasionando la obtención de madera de los bosques cercanos a la
población. Tradicionalmente, el oficio en esta población aragüeña se
ha mantenido en torno a la transformación de maderas duras en
muebles rústicos. "Eso estaba ocasionando problemas ambientales y
atentando contra la continuidad de la actividad de los mismos
artesanos", recuerda.

Masisa Venezuela conocía la existencia del concepto Armefácil, que


fue desarrollado en Masisa, Argentina. Se trata de muebles
multifuncionales elaborados con láminas decorativas que se fabrican
a partir de tableros de partículas de madera que se recubren por
termofundición con resinas melamínicas. Para el ensamblaje de los
muebles no se necesitan herramientas, pero tampoco mucho dinero
para adquirirlos, ya que se venden a precios solidarios.

Así fue como se dictó un primer curso para que los carpinteros de esa
zona se capacitaran en la elaboración de muebles Armefácil. "Además
de la formación técnica se les orientó en aspectos relacionados con
liderazgo empresarial y capacidad de gestión", cuenta Velandia.

De este primer grupo, ocho carpinteros se unieron para conformar la


Cooperativa Alba (Alternativa Bolivariana Artesanal). Vino después la
red de mujeres emprendedoras, que desde Catia (Caracas) y en
Aragua se encargan de la comercialización de los productos Armefácil
fabricados por la Cooperativa Alba. Actualmente más de 50 mujeres
tienen su propio emprendimiento comercial.

Ellas han recibido capacitación en técnicas de mercadeo y ventas,


pero también en temas relacionados con crecimiento personal. Cielo
Velandia menciona a varias de las emprendedoras, quienes en poco
tiempo han crecido en autoestima y seguridad en ellas mismas. "Al
principio algunas de ellas se mostraban tímidas. Ahora hasta nos han
propuesto nuevos modelos de Armefácil diseñados por ellas mismas.
Inclusive, hay quienes han ampliado su actividad hacia el diseño de
interiores, pues no sólo venden el mueble, sino que ayudan en la
decoración de la casa del cliente", cuenta regocijada Velandia.

Miguel Oneto explica cómo esta iniciativa se enmarca en la estrategia


que la compañía ha denominado de “triple resultado”, y que consiste
en un sistema que busca obtener los más altos índices de calidad en
su desempeño en las áreas social, ambiental y financiera de manera
simultánea. "No se puede ganar a cualquier costo", asegura. Su
gestión como gerente general en el país es medida por los resultados
en las tres áreas.

"Para el año 2010 tenemos la obligación de que 12 por ciento de las


ventas deben estar en la base de la pirámide, –siguiendo la premisa
de C.K. Prahalad–, eso significará que cerca de 20 millones de dólares
en productos deberán estar en manos de clientes de las clases D y E".

Explica el gerente general de Masisa Venezuela que los muebles


Armefácil cumplen con esa visión de mercadeo social. En ellos se
genera una cadena de valor que comienza en los bosques de Uverito,
en el estado Monagas. De allí sale la madera que alimenta la planta
de tableros en Anzoátegui, con los que se fabrican los muebles en la
cooperativa de Aragua, para luego ser vendidos en Caracas a través
de las redes de mujeres emprendedoras.

Masisa, a través de su accionista principal, el Grupo Nueva, ha


suscrito el Pacto Global de las Naciones Unidas, que establece el
compromiso de la empresa privada con el desarrollo sostenible.
También se ha comprometido a abordar la problemática del cambio
climático, incorporándose al Chicago Climate Exchange (CCX), que es
una de las iniciativas concretas que ayudan a mitigar el efecto de los
gases invernadero. Al formar parte de esta iniciativa, Masisa se
compromete a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero
en 6 por ciento para el año 2010, respecto de una línea de base que
toma en consideración los años de 1998 a 2001. Esta reducción
significa aproximadamente 400.000 toneladas de dióxido de carbono
al finalizar la primera década de este siglo, lo que es equivalente a
eliminar de circulación cerca de 140.000 autos en un año. Cada
instrumento financiero se negocia por una equivalencia de 100
toneladas métricas de dióxido de carbono equivalente.

Conclusiones

La efectividad de la política ambiental depende en gran parte del


funcionamiento y organización del Estado. En este sentido,
consideramos que la política ambiental debe orientarse, por una
parte, hacia la vigilancia y el control ambiental, y por otra hacia la
creación de incentivos de mercado que eliminen el excesivo
aprovechamiento de recursos y el uso de técnicas de producción poco
ecológicas por la otra. La creación de dichos incentivos puede servir
de apoyo para la incorporación del sector privado a las tareas
ambientales y para financiar las mismas tareas del Estado.

Hasta hace poco, las labores del MARNR habían estado concentradas
en el servicio de agua. El proceso de regionalización debería permitir
al MARNR concentrarse en políticas preventivas y punitivas y
transformarse en una agencia reguladora más que proveedora de
servicios públicos.
Igualmente, debería encontrarse una manera de disminuir el número
de funciones del MARNR para hacerlo más Gerenciable.

El Estado debe igualmente, reconocer la labor que pueden jugar


organizaciones privadas y/o extranjeras, así como también ONGs
locales. Estas poseen mucha experiencia, personal capacitado y
conocimiento técnico; asimismo, conocen los problemas ambientales
específicos de cada región de manera más directa. Se deben estudiar
mecanismos de concesión de ciertas actividades a estas
organizaciones a fin de aliviar la carga a la burocracia estatal,
eliminar discrecionalidades y hacer mas efectiva la lucha por la
calidad ambiental.

Si bien es cierto que la descentralización administrativa de las labores


ambientales ha dado buenos resultados en algunos casos (como el
manejo de desechos tóxicos), se evidencian problemas en otras
áreas. La descentralización de las labores debe hacerse solo en
tareas en las cuales la experiencia y el conocimiento de las
autoridades locales permitan hacer más efectivas las labores, y en las
cuales los beneficios del cuidado del ambiente no se disipen a otras
regiones. Es por ello que fijamos una posición cautelosa ante las
propuestas de descentralización ambiental.

Por ultimo, debemos reconocer la posición estratégica en la que


Venezuela se encuentra. El Pais debe invertir tiempo, dinero y
recursos en la protección del medio ambiente. Sin embargo, nuestra
diplomacia debe ejercer presión para que los países que reciban
externalidades positivas de la protección de nuestro ambiente
compensen nuestros esfuerzos. Acciones como la de dar acceso a
determinados fondos a aquellos países que cumplan determinadas
metas ambientales, así como la promoción de Venezuela como centro
de ecoturismo e investigación ecológica, generaran recursos y darán
mayor relevancia al tema ambiental y la idea del desarrollo sostenible
a largo plazo.

También podría gustarte