Jesús, el hijo de Dios, muchas de sus enseñanzas las dio por medio de parábolas, en tres de los
cuatro evangelios puede apreciarse este tipo de narraciones hechas por Jesús, una de las más
conocidas y más utilizadas por los predicadores es la Parábola del Sembrador (Mt 13:3-9, Mr 4:
3-9 y Lc 8:5-8).
Se conocen también muchas predicaciones de la Palabra basadas en las parábolas dadas por el
Señor, sin embargo, no es acerca de una parábola específica que se hablará en este caso, sino de
unos detalles dados por el Señor antes de explicar la Parábola del Sembrador a sus discípulos.
En el evangelio de Lucas, capítulo 8, verso 10 el Señor dice: “A vosotros os es dado conocer los
misterios del reino de Dios; pero a los otros por parábolas, para que viendo no vean, y oyendo
no entiendan”. Cuando es leído este texto sin ponerlo en el contexto Cristo céntrico de la Biblia,
pudiera parecer que el Señor dice a sus discípulos que es para que nadie entienda lo que habla.
¿Cree usted realmente que Jesús hablara a una multitud (Lc 8:4) para que sólo 12 varones y unas
cuantas mujeres entendieran lo que decía?
Si se lee este pasaje en el evangelio de Marcos sin tener en cuenta lo anterior, pudiera parecer
aún más contraproducente, pues argumenta además “…para que no se conviertan y le sean
perdonados los pecados” (Mr 4:12c). ¿Pero de qué me hablas y qué hay del mensaje de
salvación, no que Jesús vino a buscar a los pecadores?, pudiera preguntarse el lector.
Vea lo que ilustra el evangelio de Mateo al respecto, “a vosotros os es dado saber …”(Mt
13:11a), “a cualquiera que tiene se le dará, y tendrá más…”(Mt 13:12a), y además hace alusión
a la profecía de Isaías 6:9-10 en la que Dios dijo a Isaías que el pueblo rechazaría su mensaje y
que permanecería indiferente al llamamiento profético al arrepentimiento.
Para comprender esos detalles mencionados y recibir la bendición que ello conlleva hay que
entender que cuando Jesús dice “a vosotros os es dado” se está dirigiendo a aquellas personas
que habían respondido a su llamado y a sus enseñanzas, a sus discípulos, que según el
diccionario expositivo VINE, en el nuevo testamento tiene varias acepciones, entre ellas “todos
los que manifiestan ser discípulos de Jesús permaneciendo en su Palabra” y “de los que creían en
Él y confesaban su nombre”. Por tanto:
1. A los que creen en Él, confiesan su nombre y permanecen en su Palabra les es dado conocer
los misterios del reino de Dios (Lc 8:10a).
2. Mientras más fe y más conocimiento del reino de Dios procure el creyente más recibirá (Mt
13:12a).
3. La clave de la vida cristiana está en el arrepentimiento genuino y la fe en Jesús (Mt 13:16).
4. Sólo los que oyen la Palabra, la reciben por fe y finalmente la ponen por obra en sus vidas
(Mr 4:20) podrán entender las enseñanzas contenidas en ella (Mr 4:13).
Jesús Brito Bartumeu