UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL

DE LOS LLANOS OCCIDENTALES “EZEQUIEL ZAMORA”

PROGRAMA DE POSTGRADO
CS. DE LA EDUCACION UNIVERSITARIA

Ensayo Sobre la planificación

de la educación superior o universitaria
y los conceptos de política, estrategia y plan

Maestrante
Licdo. Gilberth José Pérez
C.I. Nº V – 13.196.610

Sanare, junio de 2019.

En la actualidad las universidades venezolanas han tomado conciencia de la
importancia de proyectarse a su entorno, formando profesionales cada día más
comprometidos con la sociedad, por esta razón se hace necesario impulsar y apoyar el
cumplimiento de la Responsabilidad Social Universitaria, para que a través del ejercicio
de sus funciones forme estudiantes para el compromiso y la solidaridad, aportando a
la sociedad conocimientos y acciones que contribuyan a gestar una comunidad más
justa, que promueva los derechos y respete la dignidad de todos. Como lo señala el
contexto a investigar no se trata de hacer un análisis. Sin embargo, se podría señalar
que en los países industrializados el desarrollo descansa, cada vez más, en el
descubrimiento y la invención, así como en la innovación tecnológica de su industria, lo
cual exige una fuerza de trabajo cada vez más calificada y con mayor capacidad
creadora que solo puede ser formada en la educación universitaria y superior. En
buena medida, la toma de conciencia de que los fenómenos educativos forman parte
de la estructura global de la cultura de un pueblo puso fin a los trabajos que discutían
la escolarización sin referencia a un contexto nacional más amplio. Los estudios
principales intentaron interpretar los fenómenos educativos dentro de un contexto
histórico, describiendo la génesis de las distintas formas de enseñanza y considerando
las ideas y estructuras educativas como parte de acontecimientos sociales y políticos.
Esta posición se expresa de manera máxima el Estudiante de Educación Universitario
debería tener como mandato legal, la formación como personas reflexivas, solidarias,
capaces de ver las consecuencias de su pensar, sentir y hacer en el medio donde
conviven, así como el aporte reflexivo, propositivo y práctico de las universidades. No
basta entonces que la comunidad realice múltiples actividades, de lo que se trata es
que éstas se ordenen para así cumplir el objetivo en forma más eficiente, en mucho
menos tiempo y con mucho menos desgaste. La Política de Responsabilidad Social
enfoca su gestión a través del componente ético como parte su cultura organizacional.
Así mismo, se valora y se promulga una política de cultura, respeto y tolerancia a la
diversidad e interculturalidad, por lo tanto, se manifiesta contraria a todo tipo de
discriminación con base en la nacionalidad, edad, cultura, raza, religión, orientación
sexual, discapacidad o afiliación política. A lo anterior se asocia la circunstancia de que
los países latinoamericanos tienen una enorme proporción de población joven; en su
mayoría, una tasa de crecimiento demográfico superior a la de los países
industrializados, y sus economías exhiben estructuras y dinámicas que no logran
competir con los sistemas educacionales por la absorción de la juventud. Tal situación
condiciona, en su momento, cambios en las orientaciones valorativas de la población
que refuerzan la presión sobre las instituciones de educación superior en un proceso
de causación circular que contribuye a que la educación compita fuertemente con
otros sectores de la actividad económica social por la asignación de recursos. El
aprendizaje representa tanto una oportunidad como una amenaza para las
universidades en un entorno competitivo globalizado. Las universidades se ven
presionadas a utilizar prácticas empresariales para sobrevivir. Una de estas prácticas es
la planificación estratégica. Las universidades deben evolucionar y adaptarse a las
cambiantes condiciones del contexto para mantener su posición. La planificación
estratégica puede facilitar esta transformación. Su resultado es una visión estratégica y
unas líneas estratégicas para alcanzar esta visión, que son establecidas a partir de un
análisis DAFO, en el que se analizan, desde el exterior, las amenazas y las
oportunidades y, desde el interior, las fortalezas y debilidades de la institución. Un plan
estratégico bien elaborado pone de manifiesto las aspiraciones de la universidad en un
grado de detalle suficiente para elaborar unas claras líneas de actuación y un
presupuesto económico adecuado a las mismas. No planificar o hacerlo de modo
incorrecto puede conducir a programas que gasten tiempo y dinero, sean ineficaces e
irrealizables, carezcan de una robusta financiación sostenida y, en último extremo,
conduzca al fracaso. Una de las primeras decisiones económicas que debe tomar una
institución de educación superior, es determinar si su campus educativo será una
organización separada o integrada dentro de la estructura existente de la universidad.
Otra cuestión financiera relevante tiene que ver con el presupuesto dedicado al
marketing y captación de estudiantes. Muchas universidades utilizan para la formación
a profesorado a tiempo parcial debido a su menor coste económico y a su forma de
contratación más flexible. En un plano más general, la política educativa se articula con
una filosofía que debe exponer los valores y fines últimos de la educación (problema
axioteleológico) y que debe poder derivarse de una concepción de la sociedad y del
hombre aquí y ahora (problema socioantropológico). Tales fundamentos de la política
educativa no siempre se hacen explícitos, siendo lo usual, por el contrario, que
permanezcan implícitos y que su identificación solo sea posible a través de lo que se ha
dado en llamar el análisis de los contenidos ideológicos de las políticas educativas. En
conclusión La planificación curricular, al igual que la planificación a otros niveles, no es
un proceso lineal unidireccional, sino que está compuesto por una serie de procesos
circulares que implican ajustes entre una etapa y otra. Este proceso es relativamente
fácil de visualizar y realizar cuando se trata de poner en marcha una nueva institución.
En el caso de instituciones ya establecidas, la formulación y adopción de nuevas
políticas y estrategias curriculares generalmente se enfrenta con las restricciones que
impone la estructura preexistente. Esto último presupone la adopción de una
estrategia de cambio, la cual tendría por objeto remover, progresiva y
sistemáticamente, los obstáculos que impiden alcanzar el perfil deseado o necesario.