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CONTENIDO
Para poderbrindarle un sentido completo al perfil del docente, se
debe tomar en consideración que la docencia es una práctica
entendida como una labor educativa integral.
Los docentes, ante las demandas del mundo actual y del futuro
deben desarrollar un conjunto de habilidades y actitudes para
conseguir el aprendizaje significativo.
De éste conjunto de habilidades caben destacar varias, tales como:
pensar, crear, diseñar, resolver, interactuar, manejar, usar, producir
y comunicar. Todo esto con el fin de trabajar, estudiar y construir
visiones en equipo, auto evaluaciones, compromisos y el compartir.
El docente debe ser un líderque posea la capacidad de modelaje de
sus estudiantes, ser creativo e intelectual y, además, inspirar a los
alumnos para la búsqueda de la verdad.
De manera general, se puede decir que el docente debe demostrar
características de liderazgo, en las cuales deberá tener una visión de
futuro y saber comunicarla, una visión de la educación innovadora y
avanzada, es decir, asumiendo los nuevos paradigmas y sus
implicaciones.
ENFOQUES DEL PERFIL DOCENTE A TRAVÉS DEL
TIEMPO:
Enfoque Conductista (antes de los 70): Se toma al
docente como un técnico, su fundamento es la concepción
tecnocrática del currículo, basado en la disciplina, y sus
organizadores son objetivos mensurables, habilidades de trabajo,
control conductual y de los medios para la efectiva producción de
los aprendizajes en los alumnos. La formación del docente se
entiende en términos de competenciay actuación.
AUTORA:
Mtra. Miledys Tavárez Marzán
Profesora y Coordinadora Cátedra
Teorías Pedagógicas, Escuela de Pedagogía
UASD
Técnica Docente Nacional
del Departamento de Televisión Educativa
de la Secretaria de Educación
miledyst@hotmail.com
http.//usuarios.lycos.es/miledyst
Republica Dominicana
RESUMEN
En esta ocasión quiero compartir una preocupación que tengo en relación a los bellos ideales y
su diferencia con la realidad. Es precisamente en el caso de la Formación de docentes, donde
me desenvuelvo y donde oriente una investigación para ver que tan cierta era mi hipótesis
inicial, en relación al poco avance en la mentalidad del docente debido a la gran influencia de
los mas de 500 años de historia, conquista y penetración ideológica, tanto en docentes como
en formadores.
Es así como usando la vía directa entre mis alumnos y alumnas y de otros colegas del país y de
6 países hermanos de América Latina, decidimos saber cuál era la verdad de la historia entre
los mismos docentes tanto en formación como maestros activos, pero que acuden a ser
formados en la actualidad. Esto porque suponemos que están recibiendo una formación con
las ideas de la actualidad, donde se habla mucho del uso de la ciencia y la tecnología para
resolver los problemas sociales.
Sabiendo que la educación no se escapa a esas innovaciones, procedimos a ver que tanto
llegaba a los docentes esos nuevos paradigmas y pudimos observar que con tres preguntas,
acerca de sus creencias tanto en su rol docente como lo que debe saber y lo que debe enseñar,
se notó lo lejos que están de la formación que se pretende curricularmente enseñarles, así
como el divorcio de su perfil profesional, según sus autoridades.
Hacemos una reflexión final donde proponemos la necesidad de salvar la figura del docente
involucrándolo mas hacia la búsquela y comprensión del conocimiento y de su concientización
real de su rol ante los avances en ciencia y tecnología para aplicarlos en bienestar de la
sociedad de forma critica y contundente ante los abusadores, siempre a favor de la verdad. Ese
es el reto de todos y todas los que estamos inmersos en este mar de confusiones y que de
hecho hemos confundido nuestro papel de formadores en muchas instituciones que no
reflexionan sobre los cambios y las necesidades sociales y se quedan obsoletas sin aportar,
pero si con palabritas de moda.
Haremos una presentación de los diferentes perfiles docentes a disposición en la OEI, luego
analizaremos el papel de la formación del docente y los paradigmas mas comunes,
presentaremos el estudio empírico y luego haremos una propuesta a partir de las respuestas
de nuestros docentes planteando una conclusiones necesarias a la luz del divorcio entre lo que
se publica y la verdadera historia vivida por los dolientes, los docentes de aula en formación,
que serán los docentes de las aulas en la “sociedad del conocimiento”.
INDICE GENERAL
3. Creencias de Docentes
4. Reflexiones finales
A modo de introducción
Los docentes son muy importantes a la hora de hacer los cambios por ello vale destacar la cita
de Tegiri y Diker, cuando se hace varias preguntas entre ellas: ¿Cómo transformar la escuela
moderna concebida hace trescientos años, en una institución que responda a las
necesidades de un mundo globalizado, de una cultura massmediática, de unos niños que
sobre muchas cosas saben más que nosotros, de un mercado de trabajo flexibilizado cuyas
demandas formativas mutan constantemente? , ¿Cómo confiar en el sentido de lo que
enseñamos si las certezas científicas y la confianza ilustrada en el progreso indefinido del
conocimiento están profundamente cuestionadas?. 3
Son muchas las inquietudes en torno al quehacer social y especialmente educativo, por ello el
docente y su formación cobra muchísima importancia en este mundo tan convulso pero que
aun se vale de una persona moral y científicamente preparada para orientar en torno al
conocimiento y la cultura.
El quehacer educativo, como todo trabajo, se inscribe en un marco legitimador que le confiere
una determinada legalidad. Por ello, todo paradigma pedagógico define su sujeto y es a partir
de la misma en cómo se concibe el rol del educador. (Puigros,1990). Osea que la sociedad
legitima su rol a partir de la ideología imperante y acorde con las necesidades de la misma, no
necesariamente a favor de las necesidades reales de la humanidad.
De aquí puede derivarse que el docente debe conocer muy de cerca los avances tecnológicos y
científicos que deberá manejar pero que debiera manejar desde su formación misma. Son muy
ambiciosos los perfiles que han elaborado nuestros países, para poder estar a tono con los
tiempos y con la competitividad, sin embargo no pueden apoyar la docencia como lo hacen los
que si pueden competir.
De ahí que en la OEI , los diferentes países de América latina, han enviado sus lineamientos de
formación docente y con ello su perfil de docente. En esta ocasión facilitaré los elementos mas
importantes de los mismos, entre ellos destacando algunos de los países en los cuales hice un
sondeo cuantitativo con el objeto de que podamos comparar los perfiles con las creencias
reales de los docentes en formación en los mismos.4
En Colombia los docentes serán capaces de: resolver los problemas de la educación y de la
enseñanza que van a ser objeto de su intervención, las teorías que los explican y ayudan a
comprender críticamente, lo mismo que de aquellas que le permitan entenderse a sí mismo y a
sus alumnos, los saberes con los cuales va a formar a otros y de las competencias didácticas
propias del ejercicio de su actividad formativa, las fuentes de la realidad y del criterio que
contextualizan la profesión en los ámbitos local, nacional e internacional, y un dominio de la
historia y de la lógica vinculado con la comprensión y la construcción de teorías pedagógicas,
en tanto conocimientos que fundamentan su profesión y le otorgan identidad intelectual, los
criterios y las normas que regulan la profesión y su ejercicio ético y responsable.
En México deben tener: Un dominio cabal de su materia de su trabajo, por haber logrado una
autonomía profesional que le permita tomar decisiones informadas, por comprometerse con
los resultados de su acción docente, por evaluarla críticamente, por trabajar en conjunto con
sus colegas, y por manejar su propia formación permanente. El maestro de educación básica
dispondrá de las capacidades que le permitan organizar el trabajo educativo, de diseñar y
poner en práctica estrategias y actividades didácticas con el fin de que todos sus educandos
alcancen los propósitos de la educación; de reconocer la diversidad de los niños que forman el
grupo a su cargo. Atender a su enseñanza por medio de una variedad de estrategias didácticas
que desarrollará de manera creativa. Reconocerá la importancia de tratar con dignidad y
afecto a sus alumnos; Aprovechará los contenidos curriculares y las experiencias y conductas
cotidianas en el aula y en la escuela para promover la reflexión y el diálogo sobre asuntos
éticos y sobre problemas ambientales que disminuyen la calidad de vida de la población;
Propiciará el desarrollo moral autónomo de sus alumnos, y favorecerá la reflexión y el análisis
del grupo.
En República Dominicana:
Que sea graduado universitario con el nivel de formación inicial requerido por el sistema, y con
la capacidad de desempeñarse en el trabajo con dominio de sus funciones, tanto pedagógicas
como administrativas.
· Que tenga capacidad de aprendizaje y un espíritu crítico e innovador que le permita valorar
las nuevas corrientes e incorporarlas a su práctica, con el objetivo de hacer el mejor aporte
posible a la comunidad educativa a la que pertenece.
· Que sea íntegro, capaz de servir de modelo y de ejemplo a sus alumnos y a los que trabajan
en su entorno. Que tenga capacidad de actuar con ecuanimidad y equilibrio, que exprese su
identidad con la cultura nacional, y sensibilidad social en sus prácticas y actividades y con los
seres que le rodean.
· Que sea respetuoso de su entorno y siempre comprometido con la excelencia. Que sea un
individuo capaz de integrarse a una comunidad y de comprometerse con una visión de
excelencia.
Como vemos son muchas las acciones tanto morales, científicas, de gestión y competencias
personales que debe exhibir un docente cuando se gradúa y es colocado en su aula, pero que
pasa luego con ese docente?, quien lo apoya’, quien le ayuda?, quien lo supervisa o
acompaña?, que investigaciones se hacen para verificar dicho perfil?.
Por su parte Tatto (1998) sostiene que los propósitos de la formación de maestros pueden
moldear tanto las creencias de los docentes acerca de lo que resulta apropiado en la
enseñanza, como las concepciones acerca de su rol profesional. Y Retomando a
Buchman (1986), dice que las concepciones acerca del propio papel como docente, a su vez
moldean la práctica educativa. Por ello creo de lugar que tiremos un ojo crítico a las diversas
posiciones o modelos de formación que nos han circundado en la historia.
MODELO NORMALIZADOR
El papel del profesor consiste en explicar los temas y mantener el orden en la clase.
EL PARADIGMA TECNOLOGICO
EL PARADIGMA ACADEMICISTA
PARADIGMA ALTERNATIVO
como líder social y afectivo. Evaluación: Centrada en las destrezas y, en parte, en las actitudes.
Atiende al proceso, aunque no de forma sistemática. Realizada mediante la observación
directa y el análisis de trabajos de alumnos (sobre todo de grupos).
En la actualidad los docentes se debaten entre cual es su rol, el de sacerdote como fue al
principio, el de un obrero o el de un profesional?. Es un problema sin solución aun, ya que hay
un problema de identidad social y laboral, como nos dice Tudesco, (2001)., sin embargo
llueven las exigencias al maestro de este tiempo, pero sin reconocérsele, ya que se le atribuye
una labor vocacional y sacrificada.
2.2 ¿Y LAS UNIVERSIDADES, QUÉ HACEN, CÓMO FORMAN Y CÓMO DEBERAN FORMAR?
Los aportes de las ciencias de la educación, en especial los conceptos que proveen los marcos y
tendencias pedagógicas y la instrumentalidad de la tecnología didáctica son considerados
como poco importantes, dada la evaluación que se hace de ellas como poco serias, escasas del
verdadero rigor científico del que gozan las ciencias experimentales. Asimismo comparte
similitudes con el paradigma tecnológico, en el sentido de la rigurosa eficiencia que se persigue
en tanto reducen al aprendizaje como un producto a obtener, mediante la aplicación
sistemática de una metodología didáctica sustentada en criterios científicos.
Es así como este paradigma concibe al alumno como un eminente procesador de información,
por lo cual el docente considera que su objetivo es brindarle toda la información contenida en
la currícula. Este paradigma impide el desarrollo real del docente para la comprensión de los
fenómenos por el mismo y así pueda ser capaz de fomentar lo mismo en sus alumnos.
Siendo las Universidades las que tienen el encargo social de la formación de profesionales
científicos, críticos, constructivos , transformadores y verdaderos profesionales de la época, sin
embargo son muchas las que aun no conocen el enfoque CTS para integrarlo a la formación de
esos profesionales. Dicho enfoque surge como un gran movimiento, para que reflexionemos
sobre el papel que jugamos y el para qué lo debemos hacer y cómo debemos actuar en un
mundo ligado cada día a la ciencia y a la tecnología, pero que cada día posee mas hambre,
pobreza, sinrazón, alianzas malévolas, guerras, ataques, en fin un mundo sin equidad.
Los contenidos de ciencia, tecnología y sociedad (CTS) se consideran, cada vez más, un
indicador de calidad en la innovación de una enseñanza de las ciencias que pretenda la
alfabetización científica y tecnológica de todas las personas (Acevedo, 1997; Vázquez, 1999).
Evitando así la marginación científica y tecnológica de las mayorías.
Como se sabe, el enfoque CTS en la enseñanza de las ciencias pretende hacer explícitas las
relaciones entre ciencia, tecnología y sociedad (Vilches y Furió, 1999)
Cuando algo no se comprende bien o no se valora demasiado suele excluirse, por lo que cabe
esperar que el profesorado tienda a ignorar la presencia de la tecnología en la enseñanza de
las ciencias, o no la contemple como se merece ni, por supuesto, de forma adecuada.
Sin duda esto resulta muy negativo a la hora de favorecer un aprendizaje significativo,
eliminando un referente tan importante para su logro como es la transferencia de los
aprendizajes escolares a la vida cotidiana (Acevedo, Manassero y Vázquez, 2002; Vázquez,
Acevedo, Manassero y Acevedo, 2001).
Por todos los motivos señalados, los programas de formación del profesorado tienen que
prepararse apoyándose expresamente en una cultura científica contextualizada; esto es,
abierta a otros saberes como la historia, filosofía y sociología de la ciencia, que conforman
buena parte de los fundamentos CTS.
Se trata más bien de mostrarles diversas perspectivas, animándoles a interesarse por las
distintas formas que hay de concebir la ciencia y la tecnología para llegar a comprenderlas
mejor, valorarlas críticamente y, sobre todo, adquirir la idea clave de que aquí los conceptos
también cambian, tal y como ocurre con las de la propia ciencia (Acevedo, 2000; Acevedo y
Acevedo; 2002; Vázquez y Manassero 1995).
Todo esto implica descartar enfoques formativos reduccionistas, sesgados prácticamente hacia
el estudio de una única corriente de pensamiento como sumo paradigma capaz de explicar los
planteamientos sociales o filosóficos de la ciencia y la tecnología; por el contrario, se debe
tratar siempre de presentar al profesorado una pluralidad de autores, pensamientos,
opiniones o enfoques para que puedan someterlos a un análisis crítico y reflexivo (Vázquez,
Acevedo, Manassero y Acevedo, 2001).
¿Para que los docente universitarios puedan innovar que habrá que hacer?
Es necesario apoyar institucionalmente a los innovadores y, para ello, propone trabajar en
torno a tres dimensiones:
2.4 ¿las creencias y sus implicaciones?, algunos resultados de estudios sobre creencias.1
Como hablaremos de las creencias en cuanto a lo que los docentes plantean de sus
percepciones de su rol, haremos un breve análisis de trabajos anteriores sobre el caso, para
que apreciemos su importancia en toda práctica humana y mas en educación.
Se han realizado muchos estudios sobre las creencias de los maestros (en algunos estudios
denominadas como “teorías implícitas”) en los cuales han intentado entender de mejor
manera la práctica educativa. Puesto que el docente es en definitiva el que desarrolla el
currículo que cree y puede realizar con las condiciones que se les brinde para ello y las
competencias para las que fue formado.
El hilo conductor de todos éstos trabajos ha sido conocer y comprender para propiciar el
cambio. Esto es, explicitar lo que tradicionalmente se ha mantenido implícito con una primera
intención de desarrollar estrategias conducentes a cambiar creencias y una segunda y final
intención de lograr cambios duraderos y de fondo en la educación (Maxson & Sindelar, 1998).
Knowles (1994) y Pajeras (1992) han reiterado que las creencias acerca de la escuela y de la
enseñanza se establecen muy temprano en la vida de los individuos por medio de la
experiencia misma de la escolarización. Por lo tanto, son resistentes al cambio aún cuando los
maestros hayan estudiado en escuelas formadoras de docentes.
Por su parte, Hollingsworth en 1989 y Lortie en 1975 habían señalado que las creencias, por
desconocidas, pueden ser uno de los principales factores para perpetuar prácticas educativas
arcaicas y poco efectivas.
Similarmente reiteran la necesidad de conocer las creencias de los maestros de manera que se
puedan promover cambios en las mismas que faciliten el éxito de las reformas educativas.
Las conclusiones generales de las investigaciones indican que para que el cambio sea
efectivo y repercuta en las prácticas de enseñanza tienen que:
3. METODOLOGIA DEL ESTUDIO
Se realizo un estudio exploratorio, aplicando una encuesta con tres preguntas y algunos datos
generales del entrevistado. El mismo se realizó durante el periodo de abril/junio del 2004. La
muestra de docentes se tomó al azar intencionado, ya que debían ser alumnos en formación,
de diferentes áreas dentro de la educación y podían ser maestros en servicio o no. Se les aplicó
el cuestionario de tres preguntas a 497 docentes de 7 Países, tanto de forma presencial como
por email y cada país me envió sus resultados para realizar el análisis total de los datos. Los
países participantes fueron ( Panamá, México, Uruguay, Zaragoza, Colombia, Argentina y
República Dominicana). Se procesó la información y se analizó las tendencias para inferir una
aproximación al cambio necesario.
El objetivo del estudio tiene como estrategia la exploración de las opiniones de los profesores
en formación, tanto en servicio como nuevos para saber sus posiciones acerca de su
percepción como docente de su trabajo con los valores, la ciencia y la tecnología y su deber
profesional, para poder identificar el peso de las tradiciones y el empuje de las innovaciones en
los mismos.
¿Qué debe poseer un maestro para ser bueno? Escoja una de las dos alternativas.
Vocación
¿Qué debe trabajar más el maestro con sus alumnos? Seleccione una de las dos alternativas.
Valores morales.
¿Cómo se concibe la labor del docente? Marque una de las tres alternativas.
Un sacerdocio.
Un oficio.
Una profesión.
3.3 PRESENTACION DE LOS DATOS
CUADRO 1
Preparac
Preg. 3
En Cy t
Preg 1 Preg. 2 Sacer
Y Ciencia y
País Vocación didáctica Valores TEC. docio Oficio Profesión Totales
Panamá 31 20 39 12 3 3 45 51
Zaragoza 4 3 4 3 2 0 5 7
México 6 4 3 7 0 0 10 10
Colombia 9 3 8 4 1 0 11 12
Argentina 23 11 22 12 5 1 28 34
República
36%
64%
Vocacion preparac
26%
74%
valores ciencia
25%
5%
70%
400
350
300
250
200
150
100
50
0
ASPECTOS QUE DEBE POSEER UN DOCENTE
PARA SER BUENO SEGUN DATOS DE
FORMADORES
25% 25%
25% 25%
Los datos nos arrojan la siguiente verdad, en América Latina los docentes con EDADES: 20 Y 60
años
Con prevalencia aun del Sexo femenino y con Años en servicio: De 1 a 60 años, asi como en
formación aun:
Por un lado los docentes están muy apegados a los valores, ya que según dicen eso es
primordial para las buenas relaciones humanas y profesionales. Pero en ese sentido se nota
una desatención de los valores científicos y tecnológicos que también son importantes para la
sobrevivencia y la equidad así como el desarrollo real de los seres humanos. Pareciera también
que hay falta de conocimientos de cuales valores son los que debemos privilegiar o será que
hay alguna intencionalidad?. Hay , pues una supuesta moral implícita que hay que defender,
pero cual?. Se nota claro que el modelo que gana la batalla acá es el Normalizador.
Además no podemos dejar de mencionar las respuestas de algunos formadores, los cuales no
le dieron ningún privilegio a las áreas de formación, sin embargo, ¿no son ellos son los que
forman estas percepciones?.
En otro sentido resulta muy importante la noción de profesionales que se privilegio frente a la
de oficio y sacerdocio, esto implica que se esta ganando terreno en materia de identidad
laboral y esto se asocia a la necesidad de preparación que deben tener los docentes en la
actualidad para poder ejercer en las aulas, cosa que antes no era necesario, solo que para
incentivar económicamente, donde se suele hacer, a los docentes deben seguir enseñando
títulos de cursos y otras yerbas, cosas que a otros profesionales no les exigen tanto.
Los perfiles están divorciados de la realidad de cada país, son un mito lograrlo.
Las creencias de los docentes se divorcia de lo actual, pero está acorde con los exigencias del
pasado.
La labor docente es un sacerdocio aun para muchos, diciendo que hay crisis de identidad en la
labor docente. La ciencia esta muy mal tratada en los niveles de formación de docentes y esto
se traduce en sus respuestas, hay un rechazo, tanto en su preparación con ella como en la de
enseñarla.
Como el aspecto de la profesión fue privilegiado veamos que se entiende por la misma , es una
actividad en la que existe un énfasis sobre el servicio rendido a la comunidad, por encima del
interés propio del profesional ; servicio al cual se prepara de un modo especializado,
adquiriéndose conocimientos y destrezas , asentados sobre una base teórica ; todo lo cual
confiere el derecho a ofrecer a la comunidad este servicio con exclusividad y autonomía ; los
que así están preparados adquieren una identidad profesional y se ciñen a reglas morales ,
cuyo cumplimento es controlado por los pares ; de este modo se configura un estilo de vida y
de trabajo que goza de prestigio social y de status.
De hecho, toda profesión, reconociendo esa realidad, da forma a un Código de ética, que no es
otra cosa que la declaración de una deontología profesional. (Deontología significa: discurso de
los deberes). Entonces como vemos la profesión del docente posee su propio código y como
tal esta ligada al servicio social pero no es la única, por eso es que además de cumplir con las
acciones educativas y sus deberes también debemos recibir el pago equitativo de cualquier
profesión por el servicio que también hacemos a la comunidad.
hasta la primera mitad del siglo XX los docentes gozaban de un considerable status social como
parte de la “clase pensante”. Si bien se aceptaba que no eran sabios al estilo de un científico, la
maestra y el maestro sabían ser reconocidos como la voz de la autoridad en cuestiones tan
vitales como el desarrollo madurativo, mental y afectivo de los niños y jóvenes, y su
ascendiente social en estos asuntos se percibía como decisivo.
Bertrand Russell decia :“¡Una generación de maestros valientes y osados bastaría para cambiar
al mundo erradicando la injusticia y el sufrimiento para siempre!” (On Education, 1926) y
John Dewey afirmaba: “Educar es enseñar a pensar, no qué pensar", una misión indiscutible
del intelecto, para el intelecto.
Hoy, en cambio, con el núcleo familiar inmerso en una crisis disolutoria, el maestro se ha
convertido en casi la única alternativa de formación racional, ordenada y moral frente al otro
gran actor educativo: los medios, y a pesar de la gravedad del problema se insiste en
considerar a los educadores intelectuales de tercera clase, obreros de la mente sin capacidad
ni derecho para pensar sobre su propio trabajo o, en el mejor de los casos, sin autoridad para
expresar su sentir.
En 1994, Peter Drucker advirtió sobre el nacimiento de una nueva clase: los trabajadores del
conocimiento (“knowledge workers”). Este grupo debe su rol social, su empleo y su modus
vivendi a la educación formal; puede poseer habilidades manuales o efectuar labores
musculares, pero éstas son totalmente dependientes del saber específico. En primer lugar, “la
educación escolarizada se convertirá en el centro de la sociedad del conocimiento, y la escuela
será su institución clave” (Knowledge Work and Knowledge Society, The Social
Transformations of this Century, Peter F. Drucker, Mayo 4, 1994),
El tipo de conocimiento útil en este orden social será altamente especializado, y por esa razón
nuestra idea de la educación y el hombre educado cambiará por completo; la nueva sociedad
se volverá mucho más competitiva que todas las que hemos conocido y, por último, el
trabajador del conocimiento será fundamentalmente un empleado al servicio de las
organizaciones, porque su extrema especialización hará imposible para él trabajar de otro
modo que no sea en sintonía con otros trabajadores con saberes complementarios. ¿Entonces
esos no serán maestros?.
¿Y que debemos hacer para que los docentes estén en mejores condiciones y no sean
desplazados por estos empleados desligados de la formación? 5.
Según Stiggins y Duke (1988), la evaluación de profesorado puede servir a dos propósitos
básicos:
El interés de la evaluación para el propósito del desarrollo profesional, sin embargo, ha ido
aumentando en años recientes. Dicha evaluación tiene, como foco central de atención, la
reunión de datos para ayudar a crecer a aquellos profesores que son, por lo menos,
mínimamente competentes en su trabajo
Una forma de evaluar el desempeño docente es el Modelo centrado en el perfil del maestro.
Estas características se pueden establecer elaborando un perfil de las percepciones que tienen
diferentes grupos ( alumnos, padres, directivos, profesores) sobre lo que es un buen profesor o
a partir de observaciones directas e indirectas, que permitan destacar rasgos importantes de
los profesores que están relacionados con los logros de sus alumnos. Este modelo permite que
todos se integren, no para molestar sino para colaborar con el desarrollo profesional de las
acciones del docente y su centro. Esto es lo que en nuestros países son se toma en cuenta y
por ello el fracaso y el divorcio con los perfiles.
4.3 Si debemos trabajar valores morales, como dicen las respuestas en relación a la ciencia y
la tecnología, veamos lo que implica esto en pedagogía, 6:
Desde el momento en que un maestro asume el papel de tal, respecto de un discípulo, existe
una red de obligaciones mutuas. Algo similar, sucede en la situación colegio-familia, o colegio-
estudiante. Existe un compromiso de dar y recibir por ambas partes. No se trata , solamente de
ser justo al colocar calificaciones, sino de serlo, proponiendo temas de estudio valiosos y
significativos, atendiendo las características individuales de cada alumno, dando ejemplos
vividos, ayudando a cada alumno a formular un proyecto de vida con sentido y valor,
cumpliendo las expectativas de la familia y de la sociedad.
Los valores tienen el poder de apelar al hombre a nuevos modos de realidad. Crean espacios
lúdicos en los que se incrementa la realidad del ser humano y la de las entidades de su
entorno. Si la pedagogía es acto de amor, su dimensión moral, le es intrínseca. (Ver Henz,
Nohl y otros autores).
Por lo tanto, también es necesario cultivar aquello que nos distingue de los intelectuales de la
avaricia y el egoísmo: el corazón generoso de los que hacen de su vida un servicio. La razón es
poderosa, pero si la impulsan el amor y los ideales nobles se torna invencible. (Contexto
educativo, nota editorial, año V, número 30, revista digital de educación. 2004).
4.5 Veamos algunas características que debemos formar en los docentes de hoy para
mañana:
Fuertes expectativas profesionales.Una orientación positiva hacia los riesgos. Actitud abierta
hacia los cambios.Deseo de experimentar en clases.Actitud abierta ante la crítica.
Los mismos autores plantearon que las características clave de los evaluadores, para
asegurar el crecimiento profesional de los docentes son:
Credibilidad como fuente de información. Tener una relación de cooperación con el profesor.
Familiaridad con los alumnos del profesor. Experiencia pedagógica. Sugerencias útiles.
Urge que formemos al docente con el enfoque CTS, y así podremos decir que nuestros alumnos
serán los intelectuales responsables que impulsarían el desarrollo desde todos los puntos
posibles para el bien de la humanidad, pues “Es responsabilidad de los intelectuales decir la
verdad y exponer las mentiras”
(Noam Chomsky, 1967)2 y el mito de haga una realidad!
!MUCHAS GRACIAS!
miledyst@yahoo.com.mx
miledyst@hotmail.com
http.//usuarios.lycos.es/miledyst
BIBLIOGRAFIA CONSULTADA:
3 Hernández, Carlos Augusto (sf), Aproximaciones a la Discusión sobre el Perfil del
Docente
Sumario
I.- El contexto de las transformaciones
II.- Desafíos para la profesionalización
Profesionalizar el sistema educativo
Profesionalizar las instituciones educativas
Profesionalizar la función docente
Juan Carlos Tedesco (1998) afirma que "La autonomía institucional exige como
condición necesaria para su realización un nivel de profesionalismo
significativamente más alto y distinto que el actual, por parte del personal
docente en todas sus categorías ". Si las instituciones no establecen los grados
reales de autonomía, ésta termina siendo un instrumento que genera
desintegración y fragmentación en la competencia por subsistir. La autonomía
no es algo que nos es otorgado, sino lo que vamos construyendo en lo
cotidiano.
Para profesionalizar la acción de la escuela y aprovechar mejor su nueva
autonomía hay que crear las condiciones institucionales, materiales y los
incentivos necesarios para:
Existe consenso entre los expertos respecto al perfil profesional que deben
tener los docentes en la sociedad de las próximas décadas:
formación inicial
perfeccionamiento docente en actividad
capacitación de graduados docentes para nuevos roles profesionales.
capacitación pedagógica de graduados no docentes.
Para poner en práctica estas instancias de formación continua, se han
reformulado las funciones de los institutos responsables de la formación
docente, determinando tres fundamentales: la formación inicial, la capacitación,
perfeccionamiento y actualización docente y la promoción e investigación y
desarrollo; lo que implica diseñar una nueva organización institucional para
viabilizar su concreción.
Por formación inicial se entiende la primera instancia de preparación para la
tarea en la cual se trabajan los contenidos básicos que otorgan la acreditación
para la práctica profesional docente, posibilita el desarrollo de competencias
propias del ejercicio profesional en los diferentes niveles del sistema educativo.
Por perfeccionamiento docente en actividad, la actualización y profundización
de contenidos curriculares, metodológicos e institucionales. Comprende una
revisión crítica de los problemas que presentan las prácticas pedagógicas y
apunta, a través de su análisis, al fortalecimiento de la tarea. Permite construir
herramientas para generar procesos de transformación.
La capacitación de graduados docentes para nuevos roles profesionales es la
instancia de capacitación para aquellos roles y funciones diferentes de los de la
graduación inicial, para atender las nuevas demandas del sistema y
lacapacitación pedagógica de graduados no docenteses la
formaciónpedagógicadirigida a profesionales no docentes y técnicos superiores
que están en actividad o se incorporen a la docencia.
La investigación, aborda la producción de conocimientos y el relevamiento de
información cuanti - cualitativa que permite direccionar las acciones de
formación y capacitación. Posibilita además, recoger, sistematizar, evaluar y
difundir prácticas innovadoras de docentes y la circulación de conocimientos
significativos.
Un elemento fundamental es el reclutamiento para las carreras Se evidencia en
los últimos años que el perfil de los ingresantes, sobre todo en los profesorados
para la enseñanza básica es más desfavorable que en décadas anteriores.
Algunas investigaciones revelan que los alumnos provienen de sectores de
menores recursos y si bien la mayoría es del género femenino se ha
acrecentado la presencia de varones, tal vez en busca de una rápida salida
laboral.
El sistema de formación docente que se encuentran actualmente en marcha, se
organiza con una estructura flexible que permite optar por distintos trayectos
curriculares y componer distintos circuitos a partir de intereses profesionales y
demandas regionales dentro de un mismo instituto.
Los Contenidos Básicos Comunes comprenden saberes relevantes que
determinan la matriz básica para un proyecto cultural nacional y, a partir de
éstos, cada Provincia adecua y elabora sus Lineamientos Curriculares y los
Institutos formulan sus Proyectos Curriculares Institucionales.
Los CBC prescriben los campos de: Formación General Pedagógica, común
para todas las carreras; Formación Especializada por niveles y Regímenes
especiales, común para todas las carreras y el de Formación Orientada con
una organización multidisciplinar en el profesorado para la educación Inicial y
para la EGB 1 y 2 y disciplinar para la EGB 3 y la Educación Polimodal.
La práctica docente y el sistema educativo son los ejes de las propuestas
curriculares. Esta selección permite partir desde la mirada micro, teniendo en
cuenta lo que ocurre en las aulas, con la participación de los sujetos que en ella
interactúan. Esto contribuye a integrar las teorías y los conocimientos
disciplinarios con las reflexiones sobre la práctica.
Se reconoce el valor de reflexionar sobre la práctica mediante diferentes
estrategias, pero debiera considerarse que cuando no se trabaja en equipos
articulados y en instituciones que valorizan estas prácticas, las mismas se
vacían de contenido.
Otra estrategia para la formación del perfil es la formación continua. En
Argentina, para la institucionalización de la formación docente continua, y en el
marco de la Ley Federal de Educación se organizó en todo el país, una Red
Federal de Formación Docente Continua con la finalidad de ofrecer un marco
organizativo que facilitara las articulaciones de las instituciones de gestión
pública o privada intra e interprovinciales para el desarrollo de un plan federal.
Está conformada por veinticuatro “cabeceras provinciales" y una “cabecera
nacional” en el Ministerio de Cultura y Educación con responsabilidades de
“coordinación” y “asistencia técnica y financiera” y tiene como funciones, entre
otras:
Bibliografía consultada
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institución escolar y la profesionalización de los docentes” Revista
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grado. Ministerio de Cultura y Educación. Argentina. 1994 y 1997
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sobre Formación y Condición Docente e Inserción Profesional. OEI. Santiago
de Chile. 1998
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Foro Educativo Federal: Estrategias para la Igualdad de Oportunidades de la
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GVIRTZ, María Silvina “Los estatutos y la configuración del docente como
profesional” Doc. OEA / M.C.y E. Buenos Aires - 1999
DOCENCIA UNIVERSITARIA
Reflexiones
Alvaro Monterrosa Castro
CAPITULO Nº3 PEDAGOGÍA
ANOTACIONES ACERCA DEL PERFIL PROFESIONAL DEL DOCENTE
Alvaro Monterrosa Castro
Escilda Benavides Benitez
Ana Susana Cantillo Orozco
En la novela didáctica “Emilio” (1762) de Jean Jacques Rousseau (1712 – 1778), dedicada a la
educación y a como conseguir la regeneración mediante la educación, el autor aconseja que
los maestros deben ser celosos, sencillos, discretos, comedidos y recomienda que: “No os
apresuréis nunca a actuar para impedir que los demás actúen”. Rousseau desarrolla la idea de
la necesidad de la auto preparación del maestro, y sienta preceptos elementales que pueden
ser considerados esbozos de un perfil profesional. Contemporáneo con el autor, en el Siglo
XVIII, aparece una corriente filosófica y pedagógica, que le da gran importancia a la educación,
es la Ilustración Francesa, que promulgaba la educación como fuerza importante para el
progreso de la humanidad. Esta corriente define más claramente el perfil profesional y asevera
que el maestro debe poseer determinadas características personales: elevada educación,
amplia cultura general, sabiduría, tacto y amor, desarrollándose un modelo de organización que
funcionaría con éxito por muchos años y que trascendería a muchos países.
Es función social del docente, ser el formador de las nuevas generaciones, teniendo sabiduría,
habilidades, actuaciones que lo conviertan en modelo para sus discípulos, poseedor de un
pensamiento innovador, contemporáneo y rico en ideas, que permita una ruptura con las
concepciones tradicionales. Debe pensar, desear e intentar crear ideas y propuestas lo
suficientemente profundas y vigorosas, sobre las cuales debe descansar el nuevo enfoque de
la educación, para que realmente sea democrática, polivalente y permanente, capacitación que
influya en la adecuada preparación de los alumnos para la realidad personal y social. El buen
maestro debe ser un hombre integro.
El surgimiento de una concepción académica, fundamentada en principios estrictamente
científicos, plantea nuevas exigencias a la hora de conformar el recurso humano que va a
liderar esas actividades de enseñanza – aprendizaje. Estos maestros deben desarrollar en toda
su plenitud las capacidades propias del ser humano, como las intelectuales, las físicas y las
espirituales, fomentando en él, como persona y por ende en sus estudiantes, sentimientos
elevados de humanismo, apreciación y buen gusto por los aspectos estéticos; dentro de
lineamentos políticos, ideológicos y morales, al amparo de fuertes convicciones personales
generadas por sanos hábitos de conducta.
En los esquemas de educación tradicionalista, ésta se realiza en una sola dirección, donde el
docente aporta mucha información puramente profesionalizante, y no brinda espacio a la
confrontación. Hoy día existen nuevas propuestas donde el rol del docente debe cambiar: pasar
a ser un activo dirigente, un orientador pluralista, un consejero desinteresado, ya que su
función como formador no se limita solo al ámbito que permiten las cuatro paredes de un aula
de clase, sino que trascienden fuera de ella, con notables implicaciones en el accionar social
del ser humano. El maestro es el encargado de crear y recrear condiciones afectivas y
efectivas para un trabajo de gran calidad, donde el estudiante aprenda los conceptos
específicos del saber, la ciencia o la tecnología, en un marco de aspectos que repercutan
favorablemente en su vida futura, ya sea individual o social, bajo condiciones de
independencia, creatividad y valores.
Educar es sembrar en cada hombre la obra que ya ha sucedido, es hacer a cada individuo la
síntesis del mundo viviente hasta el día de su existencia. Educar es ponerlo a tono con el
transcurrir del tiempo. Educar es darle al hombre herramientas para que pueda vivir y convivir
su presente, disfrutándolo. Educar es proporcionarle al alumno la materia prima, para que
ayudado con el arte de pensar, pueda estructurar, generar y vivir un mejor mañana. Se
necesita y se desea una escuela mucho más abierta a la vida, al conocimiento y domino del
medio social y económico, por tanto la Universidad no debe temerle a la tecnología, ya que
esta es resultado de la ciencia, además la ciencia debe ser el objeto de estudio de la
Universidad. Educar no es dar carrera para vivir, sino preparar el alma para adelantar una vida
gratificante. La educación es una actividad muy delicada. El docente según sus características
y responsabilidades, o sea lo que llene del perfil profesional, puede llegar a ser un gran
bienhechor de la humanidad o un golpe para ella.
El cambio, mas que una simple palabra es una necesidad social, económica, política y
educativa, producto de la validez de los adelantos y conquistas científicas que imponen una
actualización continua, que evite el riesgo de la obsolescencia profesional, que es una
amenaza diaria. El docente debe cambiar para obtener una alta competitividad, para estar al
tanto del desarrollo de nuevas tecnologías, para satisfacer las necesidades de un alumno
actual y futuro profesional, de poseer un mayor nivel de cultura, un más elevado nivel de
preparación que le permita ser capaz de entrar a engranar correctamente en un mundo de
comienzos de siglo XXI inmerso en la evolución constante en el campo técnico y científico,
mundo convulso en sus aspectos sociales y en definitiva también en constante cambio. El
maestro debe formar un alumno metido dentro del proceso irreversible del cambio continuo. El
profesional de la educación llamado a realizar esta tarea, debe tener como característica, la
capacidad de inducir la integración del conocimiento, y es su responsabilidad asumir una
postura critica ante su génesis, indagar académicamente sobre la naturaleza del saber,
preocuparse por las formas de transmitirlo y su eficacia, y sobre la utilización del mismo, así
como de las repercusiones en el aspecto humano y social. No obstante, la principal exigencia
no es que el docente sea el dueño absoluto de un conocimiento enciclopédico, ni siquiera un
diestro manejador y dominador de los mecanismos de transmisión de ello, tal vez lo principal es
que pueda situarse críticamente ante ese saber universal y generar controversia e
incertidumbres entre sus alumnos, sobre aquellas verdades discutibles. Debe ser un interés
permanente de las instituciones educativas universitarias, a la sazón cambiantes y girando
desde estructuras académicas rígidas a los nuevos modelos, perfilar a su recurso humano
docente, amén de sus egresados, y debiesen tratar que ambos se acercasen los más posible a
los lineamientos ideales.
El docente debe amar su profesión. Sólo así permanecerá contento con ella y se consagrara al
bien de sus semejantes. El docente debe ser instruido, capacitado y actualizado
permanentemente para que pueda desarrollar paulatinamente, en lo cotidiano, en su aula de
clases y a diario, su arte. De esto deben hacer consciencia los docentes en su trabajo
pedagógico.
Con el perfil profesional del docente, se habla implícitamente de sus habilidades personales,
tanto adquiridas como innatas (vocación), actitudes y otros atributos que deben ser
considerados imprescindibles en su accionar cotidiano, para que su labor sea exitosa tanto en
el área docente pura, investigativa y de extensión universitaria. El perfil del docente incluye el
conocimiento de la estructuración formativa, que permita revisar al docente su actuación y
colocarse a tono con las exigencias de sus alumnos, a la par que utiliza formulas y estrategias
para ejecutar con decisión e imaginación actividades curriculares, investigación participativa y
todas aquellas labores que contribuyan directa e indirectamente a formar el modelo profesional
que demanda la comunidad. Este docente debe tener conciencia para adquirir conocimientos
que le permitan observar y evaluar el equilibrio psicológico de sus alumnos. El docente debe
estar motivado y presto a cambiar para progresar, desarrollando continuamente su sentido
critico, así como el deseo de explicitar las múltiples expectativas que genera y exige nuestra
sociedad de hoy. Dentro del perfil profesional se debe definir si el docente, confronta al
estudiante con la realidad palpable y si lo estimula a analizar, a pensar, a discernir, a
comprender, a desglosar, para que sea cada vez más analítico y reflexivo, y pueda ser activo
participante en la discusión.
El maestro debe poseer un conjunto de destrezas docentes que le permitan alcanzar y ejercer
un rol de liderazgo pedagógico en la practica educativa, por ejemplo: manejar acordemente los
contenidos e interrrelacionarlos con los objetivos y prioridades curriculares, debe crear un
entorno de aprendizaje con sentido de igualdad y justicia, promover entusiasmo hacia la
asignatura especifica e implementar un adecuado manejo del tiempo. El docente debe ejercer
su liderazgo pedagógico amparado en unas excelentes relaciones humanas, que finalizaran
enriqueciendo la convivencia y fortaleciendo el prestigio y la buena imagen del docente.
El maestro debe poseer una serie de características, debe tener una actitud positiva hacia la
enseñanza, debe tener pautas de comportamiento en el aula, desarrollo profesional y humano
que le permita manejar sus actuaciones profesionales. Debe ser responsable del proceso
enseñanza – aprendizaje y todo lo que se deriva de dicho proceso. Aquel docente que llene
más parámetros del perfil profesional establecido, según el área de la ciencia o la tecnología,
será más rico en su acerbo pedagógico, tendrá una más gratificante vida docente, será más
provechoso su acto de enseñanza en las universidades, y éstas lo debiesen preferir y estimular
por preparar y capacitar unos egresados de mayor calidad profesional e investigativa, cohorte
que se encargará de generar progreso y desarrollo, porque la educación es motor y
combustible al tiempo para salir del subdesarrollo.
Perfil del docente de iep
Aspecto personal
· Se valora como persona, aceptando sus fortalezas y debilidades.
· Poseer buena salud física, mental y demuestre equilibrio y
madurez emocional.
· Infunda respeto a la vida como don de Dios.
· Tener un espíritu de superación, abierto a los cambios, actitud
democrática y disposición para el trabajo en equipo.
· Poseer capacidad de liderazgo y autodesarrollo personal y
profesional permanente.
· Ser solidario con los problemas de los demás.
· Demostrar identificación con la cultura y valores nacionales.
· Tener alta sensibilidad y compromiso con las actividades
culturales de recreación y deporte.
· Favorecer en el colegio un clima de fraternidad democrática,
dialogo, integración y servicio, identificándose con él.
· Ejercitar con conocimiento sus deberes y derecho.
Se identifique con los principios, valores y objetivos del colegio, su
proyecto educativo y sea coherente en lo que piensa, dice y obra.
En lo Profesional
· Estar convencido que su función es la de un docente integral.
· Estar capacitado y actualizado para el ejercicio de su función
docente, conocedor de los enfoques pedagógicos y capaces de
aplicar e innovar tecnologías modernas en las áreas específicas
de su competencia.
· Debe ser un investigador permanente.
· Tener un pensamiento crítico, reflexivo y creativo.
· Ser un facilitador del aprendizaje
· Respetuoso de los estilos y ritmos de aprendizaje de cada
alumno y capaz de aplicar una metodología activa y vivencial.
· Establecer relaciones positivas con los padres de familia y
demás miembros de la comunidad educativa.
Ámbito cognitivo
Ámbito afectivo
Ámbito de interacción
El perfil universitario
I. MARCO TEÓRICO.
Como ya se dijo, según el Diccionario de la Lengua Española,
editado por la Real Academia Española, "Perfil", entre los
diferentes conceptos que da a este término, podemos mencionar que
significa: " Conjunto de rasgos peculiares que caracterizan a
alguien o algo ".
"Docente", según la misma fuente bibliográfica, significa: " Que
enseña; perteneciente o relativo a la enseñanza". "Enseñanza",
está referido a: "Sistema y método de dar instrucción. Conjunto de
conocimiento, principios, ideas, etc., que se enseñan a alguien".
Según Manuel Ossorio, "Docente", es: "El que enseña; como el
maestro, el profesor, el catedrático". "Enseñar", según la primera
fuente bibliográfica citada, significa: "Instruir, adoctrinar,
amaestrar con reglas o preceptos".
Con los conceptos antes citados, podemos esbozar sobre el perfil
profesional adecuado del Docente Universitario", exponiendo lo
siguiente: El perfil profesional adecuado del Docente Universitario,
está dado por un conjunto determinado de cualidades que todo
docente debe adquirir, a fin de transmitir conocimientos, principios,
ideas, preceptos, etc.
El Profesor MSc. Fabián Benzo, de la Facultad de Químicaen la
Universidad de Rusia, sobre el tema hace algunas propuestas sobre
el "perfil" de la carrera docente, trazándose objetivos, que
enunciaremos los que nos resulta importante para nuestro trabajo,
siendo estos: "a) Actualizar los criterios de evaluaciónde méritos
para que se reconozca la opinión de un docente a seguir una
carrera con un perfil determinado ( enseñanza, investigación,
extensión, asistencia técnica. b) Mejorar el aprovechamiento de las
capacidades de los docentes, contando con docentes más motivados
y mejor formados en actividades específicas de relevancia... "
El autor aludido, en la obra citada, fundamenta su propuesta en los
siguientes fundamentos, que a continuación citamos los más
relevantes: "3.1.) Lo que distingue a un docente universitario es la
capacidad para generar conocimientos. Por esta razón, se
considera que en algún momento de su carrera docente debe
demostrar objetivamente que tiene esta capacidad. 3.2.) Dada la
realidad actual, (...) no se puede dar el lujo de tener un docente que
no dicte clases. Por lo tanto, la enseñanza es la única función que
necesariamente debe todo docente. 3.3.) La propuesta contempla
tanto al docente que le interesa desarrollarse en todas las áreas
(enseñanza, investigación, extensión, asistencia técnica), como
especializarse en alguna de ellas. (...)".
"El perfil del profesorado universitario ha estado muy relacionado,
a través de la historia, con el modelo de universidad imperante del
momento, (medioeval, napoleónico, investigador-alemán). El
docente su magisterio en función a modelossubyacentes de
profesor-alumno: el modelo docente, tiene como característica
principal, la transmisión del saber como algo dado y cerrado
(memorismo, apuntes en clase, examen como único método de
evaluación en clases, etc.). (...). Por otro lado el modelo
investigador, ha puesto de relevancia que la gran importancia del
proceso, estaría en la creación de conocimiento innovador,
productivo, donde transmitir lo último sería lo verdaderamente lo
importante y significativo en el rol del profesorado; la
investigación sería la ‘niña bonita’ y la docencia ‘carga’, que de
alguna manera hay que evitar, olvidando de paso tal vez, que la
universidad no existiría sin el alumno. (...). ...Detrás de todo esto se
propone un nuevo modelo en educación, el de las universidades
anglosajonas. El alumno es el centro de la accióndocente: la
evaluación de su trabajo, sus horas de estudio, de prácticas,
trabajos en grupotutorías, serán el eje de actuación con el alumno,
quedando así relegado a un segundo plano la figura del profesor,
pasando a ser un guía, orientador en la información relevante...
(..)..
El Docente Universitario, es aquel profesional que ha de provocar
procesos de aprendizaje en el aula, conocer la dinámicade la misma,
seleccionar y organizar contenidos, facilitar el surgimiento y la
formulación de interrogantes, alimentar la discusión y el debate,
mesurado, por supuesto.
Sierra Bravo, en su trabajo de investigación científica, para optar el
grado de doctoral, quien expresamente manifiesta en el sub tema de
su obra, sobre "rasgos del método científico" que expresamente
señala: " En esta descripción del método de investigación científico
no sólo se comprenden sus distintas fases, sino de ellas se deriva su
carácter complejo, especificado por los siguientes rasgos. (...) . e) a
la vez es, inductivo y deductivo. Es inductivo en cuanto
procede mediante la clasificación sistemática de los datos
obtenidos durante la observación, con el fin de determinar las
regularidades que presenta.".
En nuestra Constitución Políticadel Estado, en su artículo 18°,
cuerpo normativo recogido por la Ley Universitaria (Ley Nº 23733),
en sus primeros preceptos de ésta, donde se precisa que: "La
educación universitaria tiene como finalidad la formación
profesional, la difusión cultural, la creación intelectual y artística y
la investigación científica y tecnológica. (…)".
Sobre el tema, el constitucionalista, Enrique Bernales, al comentar el
artículo 18° de la Carta Magna, manifiesta que: "Con el artículo
transcrito la Constitución de 1993 mantiene, como en su caso lo
hizo la Cartade 1979, el tratamiento a nivel constitucional de los
asuntos relativos a la Universidad. (…) En su afán de reducir el
número de artículos de la nueva Carta, el constituyente ha
agrupado a punto seguido un conjunto de materias que debieron
merecer un tratamiento por separado, para una mejor
comprensión de los asuntos pertinentes a la identidad
universitaria. (…)". Agrega el autor citado, "La universidad es un
centro de creación y difusión de conocimiento y cultura. (…) Por
ello, los fines que le reconoce la primera parte del artículo 18° de la
Carta, son los que efectivamente le corresponden. (…)".
El mismo autor citado, en otra de sus obras nos menciona: "el
espíritu creativo de la libertad académica, la investigación y el
trabajo científico, no dependen de ningún señalamiento jurídico,
aunque sea de nivel constitucional, antes bien, ese tipo de mención
puede en la práctica generar situaciones de restricción e
intolerancia".
En la Universidad de Xalapa de México, el Área de Investigación en
Educación Superior de la Facultad de Educación y Ciencias
Humanísticas, han desarrollado un tema sobre el perfil profesional
docente adecuado, materia de investigación, del cual podemos
resumir algunos contenidos de dicho trabajo: "Teniendo en como
certeza que la participación de los profesores es sustancial para el
logro de calidad en la educación superior, en esta investigación se
profundiza en la búsqueda de evidenciasque permitan contestar
¿Cuál es el perfil del profesorado de la Universidad de Xalapa;
¿Cómo responde a los requerimientos actual es de la enseñanza
superior?; ¿Cómo encuadra ante las necesidades de la Universidad
de Xalapa?; ¿Hasta que punto podemos hablar de la necesidad de
la formación continua del profesorado?; ¿Cuáles son las ventajas y
desventajas a las que se enfrentaría un programa de formación
continua?;¿Es viable la aplicación de programasde formación
continua?; ¿Qué líneas de formación se tendrían que contemplar?;
y, ¿Cómo se formaría el programa de formación continua para los
docentes?. ".
Para aprender a mejorar su práctica profesional, el docente ha de
constar sus teoríasprevias con las evidencias de una reflexión
rigurosa sobre su quehacer.
La actividad del Docente Universitario no puede regirse por la rutina
o por la aplicación mimética o imitación de teorías que otros han
elaborado para situaciones concretas. De ser así, el docente se
convertiría en un simple ejecutor.
Es la investigación de los Docentes sobre su propia práctica lo que se
convierte en eficaz impulsora de la mejora profesional. Ha de
comprender cómo se utiliza y elabora o reconstruye el conocimiento
científico, cómo se resuelven situaciones inciertas y desconocidas,
cómo se toman decisiones, cómo se experimentan hipótesis de
trabajo, cómo se utilizan técnicas, instrumentos, procedimientos,
recursos.
El Docente Universitario ha de favorecer y potenciar en el alumno la
creación de destrezas cognitivas de alto nivel: crítica, especulación y
dialéctica.
El perfil profesional adecuadodel Docente Universitario, viene
condicionado por un devenir histórico, marcado por el modelo
educativo, institucional, legislativo y social del proceso docente. Su
rol vendrá enmarcado en un modelo sistemático e interdisciplinar,
donde la docencia, la investigación, su saber, saber hacer y querer
hacer conformarán su acción educativa.
Citando a Fernando Cortés, en su Ensayo intitulado: "Profiss± o:
Professor: ¿Sábio, anjo ou demónio". Traducido al español,
"Profesión: Profesor: ¿Sabio, ángel o demonio", nos manifiesta, que
para el presente trabajo resulta de vital importancia su punto de
vista sobre la formación profesional y su "perfil", expresando lo
siguiente: "Quiero con ello insinuar –al preguntarse inicialmente, si
¿El profesor es un generalista o un especialista? – que de sabios, de
locos y de aprendices todos los profesores deben tener un poco y
que la disponibilidad para el hetero-aprendizaje es hoy una
contingencia necesaria para la supervivencia de la especie social
en que se construyó el profesorado. En otras palabras: sólo está en
condiciones de enseñar quien está disponible para aprender
permanentemente. (...) Ahora, preguntémonos: ¿qué sabe el
profesor? Sabe, con seguridad, de su especialidad (por lo menos
académica y científicamente a ella está vinculado); como persona
(única e intransmisible) sabe de si mismo y como ciudadano sabe
también de los demás. (...)".
V. MARCO CONCEPTUAL.
Según el marco teórico descrito en punto precedente, podemos
afirmar que gran mayoría de las investigaciones desarrolladas sobre
la enseñanza superior se han realizado dentro del paradigma
proceso-producto, analizando la conducta, aptitudes y actitudes; un
perfil profesional adecuado y campos profesionales –en particular
del Docente Universitario–, se manifiestan en función del tipo de
conocimiento, destrezas, y actitudes; y que han de poseer ciertas
cualidades, que las consideramos válidas, por citar:
1) Cognitivas; información básica, habilidad de razonamiento;
capacidad de conocimiento.
2) Técnicas; destrezas físicas, manipulativas, esenciales para
desarrollar la profesión.
3) Actitudinales; intereses, valores, ética, argumentos,
racionalización, acción y resolución de problemas morales.
4) Psicosociales; interacciones humanas e interpersonales;
comunicación entre colegas.
5) Socialización ; internalización gradual de los valores de la
profesión.
6) Destreza de aprendizaje; destrezas para decidir qué se
necesita aprender, cómo aprenderlo y cuándo se ha aprendido.
La cognoscitiva, está dada básicamente en la capacidad de
conocimiento que debe tener el docente, a efectos que el nivel de
pensamientohan de ser promovidos en los alumnos, en la
información básica, la habilidad de razonamiento, a efectos que
aquél promueva en sus alumnos un nivel de pensamiento, crítico,
analítico y dialéctico.
Las técnicas, son las características que debe poseer el docente,
como son: destrezas físicas, manipulativas, esenciales para
desarrollar la profesión de docente, estar capacitado y dominar la
didáctica, como elemento esencial para formar adecuadamente a los
nuevos profesionales que han de egresar de las instituciones de
educación superior.
Las actitudinales; está constituido por intereses, valores, ética,
argumentos, racionalización, acción y resolución de problemas
morales. De allí que el docente no solamente debe serlo, sino
también parecerlo.
Los psicosociales; están dados por las interacciones humanas e
interpersonales, para con los demás que lo rodean y forman parte de
su universo, esto es, su centro de labor académica, por citar, la
comunicación entre sus colegas, el personal administrativo de quien
depende.
La socialización; es la internalización gradual de los valores de la
profesión, como docente.
La destreza de aprendizaje; constituye propiamente dicho en la
habilidad para decidir qué se necesita aprender, cómo aprenderlo y
cuándo se ha aprendido.
El perfil profesional adecuado de un docente, sea universitario o no,
viene constituido por una confluencia entre "patrones internos",
personales, formas de ser y concebir su profesión; y "patrones
externos", sociales, académico que expresan el sentir de la sociedad,
respecto qué se espera de él.
Los "patrones internos" de un docente, están dados por las
cualidades personales, formas de ser y concebir su profesión como
parte de su vocación, distinta pero a la vez complementaria a la
vocación de la profesión que ejercen y se ha preparado.
Los "patrones externos" de un docente, están dados por factores
sociales, académicos, que expresan el sentir de la sociedad, respecto
qué se espera de él.
No resulta fácil afirmar que, la formación del Docente Universitario
en nuestro país, ¡ NO RESULTA SER EL MÁS ADECUADO !,
por lo que resulta necesario tomar como referencia lo que sucede en
otros países más desarrollados, así por ejemplo:
1) Académica; asume que lo importante en la enseñanza es la
transmisión de información; debiendo agregar además que el
docente es conciente que su rol es más de facilitador, pero
asumiendo que este nuevo rol es de mayor responsabilidad, que el
ser mero transmisor de conocimientos.
2) Práctica; destaca el componente práctico de la enseñanza,
artístico, de oficio y del docente como práctico.
3) Tecnológica; esta concepción se centra en que el docente ha de
conocer y dominar la destreza de la enseñanza.
4) Personal; deriva de la psicología personalista, asume que
prender a enseñar es un proceso construido para comprender,
desarrollar y usar eficazmente en sí mismo.
5) Crítica-Social; asume una concepción del como un sujeto
crítico con respecto al conocimiento.
VI. BIBLIOGRAFÍA:
1. Cortés Leal, Fernando: "Profiss± o: Professor: ¿Sábio, anjo ou
demónio" (Profesión: Profesor: ¿Sabio, ángel o demonio?)
Traducido del Portugués al Español por el Dr. Carlos Xavier
Obando Peralta; Diplomático y Secretario General de la
Embajada en New York (EE.UU.); Consultor Permanente del
Embajador por el Perú ante la "Comisión de la Paz de la
ONU".Instituto de AdministraciónEscolar. Portugal.
Disponible en http://www.educa.ue.es.
2. Fabián Benzo: "Propuestas sobre perfil de la carrera docente".
Profesor MSc de la Facultad de Química de la Universidad de
Rusia. pp. 01. 2003. Disponible en: http://www.educa.ue.es.
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Docente Universitario". Cajamarca-Perú. 2005. Ensayo.
Disponible en: http://www.rie@oei.uh.cu/; y,
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4. Navarrete Obando, Luis Alberto: "Apuntes de Legislación
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Investigación Universitaria de la Universidad Nacional de
Cajamarca.
5. Osorio, Manuel: "Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y
Sociales". Bs.As. 1986. Ed. HELIASTA S.R.L.
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Estados Iberoamericanos Para la Ciencia y la Cultura (OEI):
"Hacia un nuevo perfil del docente universitario". Disponible
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Doctoral).(no se consignan más datos).
9. Universidad de Xalapa-México. Facultad de Educación y
Ciencias Humanísticas. Área de Investigación en Educación
Superior. Organización de Estados Iberoamericanos para la
Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI). Revista
Iberoamericana de Educación.: Disponible en
http://www.campus-oei.org/oeivirt/profdocente.htm.
ANEXO
ESCUELA
A mis maestros de toda la vida…
Es tarde. Ya se han ido todos y he quedado sola. Me espera un largo
fin de semana. Hace frío, llueve y es posible que me ponga
melancólica. Pero esta noche, cuando las sombras han invadido cada
sector de mi estructura, cuando ha quedado flotando en el aire el eco
de las conversaciones y los gritos de una semana intensa... quiero
bajar al corazón de mi misma, para recorrerme y revisar mi pasado y
mi presente.
Pienso en mis orígenes, en la construcciónque me permitió
convertirme en una entidad real, en una presencia familiar en la
comunidad. No voy a entrar en los detalles de los planos, los
movimientos de tierra, la acumulación de materiales, el laborioso
trabajo de los constructores y los obreros. Fue un estreno glorioso
encontrarme con las paredes nuevas, los pisos brillosos, los techos
seguros, los fundamentos sólidos, las aberturas aceitadas, el
mobiliario reluciente...
Me resulta difícil ver en las paredes de hoy los muros de entonces:
estas paredes descascaradas, manchadas, escritas, mil veces
pintadas –son todavía sólidas pero necesitan cada vez más de
cimientos confiables. Es cierto que en algunos sectores–
comprobados ciertos riesgos hubo que rellenar grietas, agregar
columnas, construir encadenados... pero en el corazón de la tierra,
en un fondo oscuro y húmedo, resiste el corazón del hierro y el
cemento. Las paredes protectoras no pueden arreglarse por sí
mismas; no lo pudieron nunca... y menos en estos tiempos de
movimientos frecuentes.
Levanto la vista. Allá está el techo: nadie discute su necesidad,
porque es realmente lo que protege y cubre... Pero nada es para
siempre... y es el que más ha sufrido cambios y transformaciones: no
pudo aguantar tantas modificaciones producidas. ¿A cuántos
especialistas tuvieron que llamar a lo largo de todos estos años para
resolver su estado crítico?
Cuando aparecí en el horizonte de la ciudad era una de las
construcciones más sólidas y mi fortaleza se imponía en un paisaje
de casas bajas y de construcciones sencillas. A mi alrededor el
escenario fue cambiando y las casitas de entonces se transformaron
en las suntuosas casas de hoy, los terrenos baldíos se convirtieron en
imponentes edificios de departamentos y la tranquilidad de las
calles, en el infierno de la gran ciudad.
Ustedes pensarán que estoy hablando de las cosas materiales. En
parte sí, en parte no. Una escuelaes mucho más que una
construcción. Es una de esos significantes que remiten a un
significado material y a "otra cosa"... La casa es la casa, el estadio es
el estadio, el bancoes el banco, la cárcel es la cárcel, pero la Escuela,
es algo más: "la escuela festeja años", "la escuela está en crisis", "la
escuela se está renovando"…
Todas estas frases reflejan mucho más que lo material. Cuando me
observo a mi misma y miro los pisos, los techos,… ¿Sucede lo mismo
con las Iglesias, los Tribunales, las Empresas? ¿Los lugares remiten
a realidades que los contienen y los desbordan? ¿Sus usuarios
utilizan la denominación para designar de manera indistinta a lo
material y a lo institucional?
Los cimientos, las paredes y los techos... estoy pensando además en
otras cosas; en quienes diariamente me habitan, en los que
comprometen por años su existencia y su labor profesional, en los
educandos a quienes acompaño en sus crecimientos. Y pienso
también en los quehaceres, que imaginariamente ubico en mi
estructura: allá en el techo, los conocimientos; aquí, en mis paredes,
los contenidos procedimentales; y abajo, en los cimientos, las
actitudes y los valores.
Soy la escuela. La escuela de hoy y de siempre. La escuela material
que refleja la otra escuela. Una estructura exterior que permite
reconocer los secretos de mi cara oculta. La noche se ha tornado más
fría. Tengo ganas de volver al interior de mí misma. Recorro los
rincones de este cuerpo... y veo en las aulas, en los patios, en las
amplias galerías, en los huecos de las ventanas, las historias más
dispares. Las de ayer, las de hoy, las de siempre... ¡Cuántos esfuerzos
para llevar adelante lo imposible! ¡Qué mezquinas y lejanas las
recompensas! Casi no duermo, pero ciertas noches me sobresaltan
algunos sueños. Hoy es una de esas noches.
Mis pesadillas son terribles y curiosas. Me veo a mi misma como una
construcción y tengo miedo de proyectar allí lo que me sucede como
institución de la sociedad. Contemplo una película de escenas
fugaces y sucesivas, con implacables saltos en el tiempo... y observo
un proceso paulatino y devastador sobre la escuela: un deterioro
progresivo, implacable, inhumano. De pronto veo que se caen los
techos a pedazos, un viento huracanado arrebata las chapas, se
agrietan las lozas, una lluvia intensa perfora los cielorrasos. En
medio del sueño, levanto mi mirada temerosa y veo un cielo
impecable, lejano, perfecto y una escuela totalmente desprotegida.
El sueño va y viene: primero aparecen, silenciosas, algunas grietas,
pequeñas fisuras... y luego van cayendo los históricos ladrillos en un
caos destructivo...
Sobreviene una furiosa implosión o el juegode topadoras alocadas
destruyendo todos los muros... Al final algo –terremoto
seguramente– remueve, con sonido de película, los cimientos y deja
al desnudo los grandes abismos... Parece curioso, pero nada hace
prever el desenlace: los controles en orden, las planillas correctas,
los registros perfectos... y hasta las previsiones de los constructores
que en sus diseños me habían…
Los conocimientos (como el techo) son el paraguas protector y la
razón de ser de la escuela... pero tienen una difícil tarea: proteger
(hacia abajo) y afrontar (hacia arriba) todas las inclemencias del
tiempo; no le podemos pedir una fortaleza y una eternidad para la
que no fueron preparados; Los contenidos procedimentales exhiben
una consistencia que se afianza con los años y sobre su estructura –
sólida o endeble – descansa el techo. A veces se desdibujan y
parecen ocultarse, como si no existieran... pero las paredes que
cumplen la función de delimitar y contener, también deben brindar
protección, sino, ¿qué sería de la escuela? En los cimientos moran
los contenidos actitudinales: es lo que originalmente me dio origen
deberían seguir allí –en la oscuridad y el silencio– dando
consistencia al resto.
¿Cómo comprobarlo en el fragor de la lucha diaria y del bombardeo
de problemas? Sin su acerada presencia es fácil que la pared se
agriete y que los techos se desplomen. Sobran experiencias al
respecto. Los hábitos y las actitudes están allí abriendo las puertas,
marcando el camino, tramando las condiciones de posibilidad de
todo... porque sin ellas no hay forma de construir. Esa ha sido la
razón de ser de mi histórica presencia. Los hierros firmes y eternos
que encadenan mi estructura en las bases, se proyectan en forma de
columnas en las paredes y terminan en las vigas del techo. Hay una
red (oculta) que me recorre y enlaza todo... pero yo no podría
sostenerme sin los cimientos. Las actitudes claramente definidas y
consolidadas se proyectan en contenidos procedimentales y se
cierran en la apertura hacia los siempre dinámicos contenidos
conceptuales.
El universo de los valores recorre y sostiene desde la base; los muros
del saber hacer (y transferir) otorgan las estructuras, y la vastedad
del conocimiento (cambiante pero sistemático, variado pero
organizado, expansivo pero nucleado en torno a grandes ejes,
alternante pero capaz de soportar cualquier crítica) permite
constituirme definitivamente en escuela.
Entonces, despierto enloquecida, me levanto de mi letargo y voy
apresurada a mirarme: toco las paredes, observo la quietud y la
firmeza del piso, la aparente seguridad del techo... y respiro
tranquila. Todo ha sido un sueño. Pero el sobresalto llega siempre a
la mañana siguiente. Recorro la estructura material, acerco mis
oídos al imperceptible murmullo de los rincones, y observo que hay
otra escuela, un espejo en el que necesariamente me reflejo, otra
realidad en la que yo misma estoy padeciendo mi demolición.
El proceso destructivo sigue los mismos pasos: primero me roban los
conocimientos: los cambios tormentosos van desnaturalizando su
presencia y terminan por hacerlos volar; las sustituciones son
pasajeras e inservibles: un techo lejano e infinito se alza sobre la
escuela, definitivamente desprotegida.
Luego van perdiendo valorlos contenidos procedimentales, los van
carcomiendo la repetición y el aburrimiento y los desploman la
inutilidad y la falta de imaginación. Finalmente se produce el
perjuicio mayor: se deshacen las actitudes y los valores. Un estadillo
y miles de acciones me van quitando lo poco que me queda, la única,
definitiva posibilidad de reiniciar el proceso de re-construcción... Y
como escuela, siento que quedo vacía.
Y una escuela vacía, hueca, vieja, fría no tiene ningún atractivo. A
menos que me vuelvan obligatoria, me disfracen de superficiales
intereses o me sostengan con otras intenciones, manifiestas u
ocultas Tal vez solamente se trate de un sueño, de una pesadilla de
fin de semana o de noche de lluvia.
¡Ayúdenme a despertar por favor, ayúdenme a conocer la realidad o
regálenme otro sueño: la posibilidad de llegar a ser la que era... y
para siempre!
No. No estoy soñando. Una escuela nunca duerme. Hay sobresaltos y
sufrimientos que uno quisiera que no fueran reales, pero a Ustedes
no puedo engañarlos. Creo que mis estructuras se han ido
debilitando y que muchos se han aprovechado de mi fragilidad.
Pero soplan vientos de concienciacrítica y de entusiasmos
renovados, se deja oír el murmullo de un mundo que se va y de una
civilización que nace, florecen caminos abiertos y nuevos heroísmos
urdidos en la trama de esfuerzos cotidianos. Siento que la presencia
de tantos educadores preocupados por mis padecimientos es mi
mejor remedio. Y que la esperanza se instala en cada uno de ustedes
para recrearme para siempre.
Luis Ernesto*
Cajamarca, Ciudad del Cumbe, Cajamarca la Hermosa,
julio, mes de calor y frio; y de mucha alegría y jolgorio matinal;
2006.