En la jornada vespertina de básica primaria, haciendo mención a los grados 2do,
3ro, 4to, 5to, niños en edades que oscilan de 7 a 15 años la mayoría. Su disciplina es de actitud obediente y respetuosa en los grados de 2do y 3ro, donde se presentan brotes de indisciplina es en los grados 4to y 5to, sobre todo en los grados que concentran los niños más grandes. Estos niños presentan conductas inapropiadas dentro y fuera del aula de clase: Se presentan tarde a clase, algunos se quedan a fuera y no entran debido a que juegan un juego llamado “la monedita”. No quieren hacer las actividades en la clase, no presentan tareas, no desarrollan talleres. Algunos grupos de niños han formado peleas donde se agreden verbalmente (vocabulario agresivo y obsceno) y en otras ocasiones transcienden agresiones físicas. Son desobedientes, no respetan al docente de turno en clase. Niños que se montan en las barandas y se cuelgan buscando un accidente. Su comportamiento es destructible dentro de las aulas, dañan las sillas y los abanicos, siendo estos materiales de la institución para su beneficio. El grado de abuso es tan amplio que llegan a tocar el timbre para sabotear los horarios establecidos de cambio de hora en la jornada. Durante la semana llegan a presentarse a la institución sin su uniforme, en chanclas y suéter de otros colores. En razón de lo anterior mencionado los docentes y la coordinadora han hecho llamados de atención a los estudiantes, se han citado a sus padres de familias para hablar con ellos y comentarles la situación. Dentro de las medidas de control se le ha establecido que firmen actas de compromisos de convivencia para mejorar estas irregularidades en el clima institucional, con el objetivo de aplicar correctivos para que el padre de familia se comprometa y ayude a su hijo a corregir su comportamiento y cambie su actitud durante su permanencia en la institución.