Está en la página 1de 5

UNIVERSIDAD NACIONAL DE

CONCEPCIÓN
FACULTAD DE HUMANIDADES Y CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN
CARRERA LICENCIATURA EN CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN

ADMINISTRACIÓN Y GESTIÓN EDUCACIONAL I

Eje Temático V : Educación y Comunicación

Capacidad: Identifica los elementos de la comunicación y sus diversas


modalidades

INTEGRANTES DEL GRUPO 4:


● Maggy Analia Aguiar Tillería
● Rosa Liz Gómez Sosa
● Guadalupe Rotela
● Richard Benitez
● Milciades Cristaldo

ASISTENTE DE CÁTEDRA: Lic. Francisca Sara Suárez de Cordone

Carrera: Licenciatura en Ciencias de la Educación

Curso: Segundo

Semestre: Tercero

Año: 2021
ADMINISTRACIÓN Y GESTIÓN EDUCACIONAL I

Eje Temático V : Educación y Comunicación

Capacidad: Identifica los elementos de la comunicación y sus diversas modalidades

Tipos de Relación y sus peligros

Las relaciones sociales pueden clasificarse de distinta manera, dependiendo de si nuestro enfoque al
respecto es psicológico, sociológico o de otra naturaleza. Por ejemplo, podemos distinguir entre
relaciones sociales según el tipo de vínculo establecido, de la siguiente manera:

❖ Relaciones afectivas. Aquellas que tenemos con las personas escogidas para conformar nuestro
entorno íntimo: amigos, parejas y compañeros, gente con la que desarrollamos conexiones
emocionales profundas.
❖ Relaciones laborales. Aquellas que debemos emprender en nuestro entorno de trabajo, sea el
que sea, y que suelen regirse por normas jerárquicas, formales y diferentes a las íntimas. En
general son nexos menos profundos emocionalmente, pero muy importantes en la cotidianidad.
❖ Relaciones familiares. Otro tipo de relaciones íntimas y de mucha intensidad, pero que no
podemos realmente elegir, ya que vienen dadas de antemano, son las de nuestra familia, al
menos el núcleo cercano de padre-madre-hermanos. De hecho, estas relaciones son
psicológicamente vitales para los individuos, tanto en un sentido positivo como negativo.
❖ Relaciones circunstanciales. Aquellas relaciones superficiales, efímeras y locales que
tendremos con desconocidos a lo largo del día, muchas de las cuales podrían pasar a ser de otro
tipo, o no. Suelen tener poco vínculo emocional y ser olvidadas rápidamente.

Peligros a partir de las relaciones interpersonales


Cuando hablamos de riesgos derivados de las relaciones interpersonales dentro de cualquiera de los
grupos de relaciones ya sea afectiva, laboral, familiar o circunstancial, nos estamos refiriendo a
problemas como: hostigamiento psicológico, acoso sexual o violencia.

Siempre que se sospeche de una posible existencia de estos problemas debemos, en primer lugar,
contar con el apoyo del círculo social. Profundizar en estos temas se llevará a cabo utilizando
distintas metodologías:

● Discusiones en grupo
● Entrevistas
● Comités

Algo fundamental para detectar el problema será hacer un seguimiento de los registros de los
incidentes que han tenido lugar, tanto si han dado lugar a algún daño físico como si no.

Con toda la información se puede permitir establecer el verdadero nivel del problema, señalando los
tipos de trabajo que presentan un especial riesgo para analizar los datos; identificando una línea
base según un patrón de incidentes, severidad del problema e incluso documentación con acciones
correctivas de mejora.
SITUACIÓN: Se registrará la localización del incidente, el entorno en el que se produce, los
posibles motivos, causas, la hora.

VÍCTIMA: Trabajo que realiza , sexo, edad, experiencia, entrenamiento en el manejo de conflictos,
su proceder a lo largo del acontecimiento violento, etc.

PERPETRADOR: Sexo, edad, conducta desplegada, apariencia, existencia o no e incidentes


previos.

RESULTADO: Problemas emocionales, daño físico, muerte, otros impactos emocionales o de


discapacidades, absentismo, puesta en conocimiento de autoridades policiales etc.

Niveles de compromisos.

Frecuentemente se escuchan comentarios sobre el nivel de compromiso que tienen la gente en torno
a su trabajo, relaciones interpersonales e incluso objetivos personales.

Nivel 1. Me comprometo totalmente y haré lo necesario para que suceda.

Este es el nivel óptimo y que todos deseamos de compromiso, a veces en otros y también en
nosotros mismos. El detalle es que se requiere de bastante motivación, liderazgo y en el caso de
objetivos personales; debe haber una razón verdaderamente potente de fondo en la que la persona
encuentre un gran beneficio como resultado de su participación.

Nivel 2. Lo haré si las condiciones son correctas.

Éste es el nivel de compromiso en el que muchas personas funcionan, con lo cual son capaces de
mantener su motivación si las condiciones son las óptimas para lograrlo.

Nivel 3. Suena bien, es una buena idea.

Este también es otro de los niveles de compromiso más frecuentes entre las personas actualmente,
ya que es una manera de evitar decir no sin tomar una participación activa, y por supuesto el nivel
de compromiso es superficial o muy superficial.

Nivel 4. Suena bien, pero…

Al aparecer este nivel de compromiso de entrada la persona en cuestión está tomando una postura
externa a la situación en cuestión, es decir, que no se compromete a la puesta en marcha de lo que
se está planteando, sino viendo los obstáculos para ello, aunque al final se vea una posibilidad de
hacerlo factible.

Nivel 5. No lo creo. / No me comprometo.

Con frecuencia este nivel de compromiso ni siquiera se manifiesta con palabras sino con actitudes
de evasión de diversos tipos o manipulaciones variadas. Para llegar a este nivel de no-compromiso
normalmente deben haberse presentado ya factores previos que afecten el liderazgo de quien
expone la situación o de recepción para quienes reciben la propuesta en cuestión. Sin embargo
también puede tratarse de casos en que haya falta de claridad en la comunicación o los receptores
están poco disponibles a conocer la propuesta.
El diálogo.

Comúnmente, por diálogo entendemos al intercambio recíproco de información entre un emisor y


un receptor a través de un medio oral u escrito. Es decir, es una conversación entre dos
interlocutores que se turnan en sus respectivos roles de emisor y de receptor, de manera ordenada.
El diálogo, en sus distintas variantes (una conversación, un debate o una mesa redonda), es la
comunicación oral básica entre dos o más personas.

Barreras en la comunicación.

Las barreras de comunicación son interferencias. En otras palabras, obstáculos que dificultan la
transmisión del mensaje entre el emisor y el receptor. Estas pueden generar distorsiones y
malentendidos. Todas ellas perjudican a la correcta interpretación del mensaje.

Medios para superar las barreras de comunicación


● Hacer un seguimiento. Dar cosas por hecho es un error muy habitual.
● Controlar la calidad de la información. A veces, creemos que explicamos algo bien pero, en
realidad, no es así.
● Utilizar la retroalimentación.
● Desarrollar la empatía.
● Simplificar y adaptarse.
Retroalimentación.
En el contexto de la comunicación, el feedback o retroalimentación se entiende como la respuesta
que transmite un receptor al emisor, basándose en el mensaje recibido, siendo ésta una
comunicación bidireccional entre dos personas, donde definimos un emisor y un receptor.
Metacomunicación.
La metacomunicación es aquella comunicación que habla acerca de la comunicación misma. La
metacomunicación explícita se refiere a la necesidad de pedir explicaciones acerca de aquellos
mensajes confusos o contradictorios.
Comunicación grupal.
El concepto de comunicación grupal hace referencia al proceso interactivo que tiene lugar entre tres
o más personas. La comunicación grupal resulta básica e importante en el desarrollo de relaciones
entre personas, familias, grupos sociales, empresas e incluso gobiernos.

Modalidades Especiales de la Comunicación.


La entrevista.
Podemos definir la entrevista como la comunicación oral mediante la cual el entrevistador pregunta
al entrevistado con el fin de recabar su opinión sobre un tema de interés general o de obtener
información personal o privada.
La reunión.
La reunión es la agrupación de dos o más personas que puede responder a objetivos distintos, ya
sean laborales o sociales, o incluso ambos. Esto puede darse de forma planeada o espontánea. La
reunión es, por tanto, la congregación de varios individuos, tanto en el plano profesional como en el
personal.
Bibliografía
Amayuela, G. (2003). Comunicación educativa en el contexto universitario.
(Didac. México). 41, 2-5.

Amayuela, G. (2005). Docencia universitaria y comunicación educativa en Revista Digital de


Educación y Nuevas Tecnologías. Contexto Educativo. Número 36. Año V. 2005
Herrera, J. (2010). Relación entre comunicación y educación en El Mexicano / lunes 12 de abril de
2010 / TIJUANA, B.C., p. 18ª
Ojalvo, V. (1997). La educación como proceso de interacción y comunicación. Cap. III. En:
Comunicación Educativa. 1997. Universidad de La Habana.

Webgrafía.
Raffino, M E. (2020) "Relaciones Sociales". Argentina. Concepto.de. En:
https://concepto.de/relaciones-sociales/

También podría gustarte